RESEÑA DE UBALDINA ROCHA DE CUADRADO

Kevin Acosta Ortiz1

“El tiempo que se disfruta
es el verdadero tiempo vivido”
Jorge Bucay

M uchas veces creemos que el acto del nacimiento es el punto de partida de la vida o el
génesis de la misma. Valdría la pena recordar, el proceso de concepción de la misma
de características biológicas cuando el esperma que aporta el hombre (el cual está
conformado por millones de espermatozoides) logra fecundar el ovulo que deposita la mujer (los
cuales son contados). En pocas palabras, ese acto milagroso de la vida es posible gracias a que
todas las variables son asimiladas por los dos organismos a la perfección, resultando de ello un
producto de calidad que debería ser mejor que los dos sujetos relacionados en el acto sexual.

Ahora bien, el acto de vivir debe ser analizado desde un enfoque histórico indudablemente. Es
decir, se debe partir de la premisa “A priori”, identificando ese contexto general (económico,
político, social, cultural) en el cual se va a desarrollar la vida, del cual, las emociones producidas en
el embarazo, sentimientos y controles que logre experimentar la madre serán fundamentales para
el correcto proceso de formación del cigoto, embrión, feto y finalmente, el neonato. De esta
manera, conviene pensar “A posteriori” el desenlace del nacimiento o parto, y su respectiva
asistencia médica que permita garantizar la vida misma, que es bienvenida a los afanes y
convulsiones de un mundo en constante construcción y cambios.

Lo que concierne después, interpretar como fue el crecimiento y desarrollo en las distintas fases
de la vida: niñez, adolescencia, adultez joven y adultez superior. Además, de conocer e identificar
como fue su proceso de crecimiento y estimulación cognitiva, es decir, sus estudios o trabajos en
los cuales se desempeñó y las metas o logros que consiguió. Por último, en los últimos años de
vida, por lo general los análisis centran su interés en el desenlace y acompañamiento familiar del
personaje reseñado, desde luego rondan las preguntas de poder conocer con quien logró pasar
más tiempo o cuales fueron sus últimos contactos en vida.

A continuación, en relación a lo anterior realizamos un breve recorrido histórico a manera de

reseña de vida y obra de Ubaldina Rocha de Cuadrado, una mujer hija del Caribe colombiano y la
cual goza en la actualidad del anhelado número de 104 años de existencia, algo más de un siglo de
sobrevivencias y victorias de distintas denominaciones ya que vale la pena recordar que, el siglo XX
es conocido por los expertos en la metodología de enseñanza de la historia, como el siglo entre
guerras (Guerras civiles en Colombia liberales/conservadores); (Caída distintos imperios:
Austrohúngaro (1918), alemán (1917), (Otomano 1923); (1era Guerra Mundial 1914-1918- 2da
Guerra Mundial 1939-1945); (Pandemia por Gripe española, pandemia de VIH, epidemias y pestes
a nivel mundial) por albergar una serie de eventos que pusieron sin lugar a dudas el riesgo, ese
concepto de vida que hemos reseñado en los primeros párrafos, por ello nuestra gratificación y
admiración a esa vida de Ubaldina, es particular, poco común y sin lugar a dudas, única.

Génesis:
1
Historiador egresado Universidad del Atlántico (Colombia).
Ubaldina Rocha de Cuadrado, nació el 22 de enero de 1919, en Santa Marta, hija mayor y única de
la unión del Señor Rafael Rocha y María Magdalena Escorcia (la popular “mama Ena”). Siendo
muy jóvenes convivieron muy poco tiempo, y dadas las muchas dificultades que tuvieron deciden
separarse, en efecto la vida de Ubaldina quedó bajo la responsabilidad de su abuela paterna Sra.
María de Jesús Jiménez, sus tías, Cruz María Rocha y Esther Rocha (madre y hermanas de su
padre).

Niñez:
Ubaldina, tuvo por parte de su padre 10 hermanos, los cuales son Rubén, Emiro, Carlos, Bertilda,
Nidia, Alicia, Remy, Rafael, José de Jesús, y Alfonso. Todos bajo el apellido ROCHA, vale la pena
aclara que los hijos fueron fruto de la relación que sostuvo Rafael con diferentes mujeres (Sara
Hernández, Alicia Bolívar, Dolores Escorcia y María “la china”), Con todos sus hermanos,
Ubaldina compartió su niñez en la ciudad de Santa Marta, en al cual disfrutó de la vida familiar y
guardo grandes anécdotas que contaba muy frecuentemente. Admiraba a sus hermanos Rubén
Rocha, ya que fue un excelente jugador de futbol, del club “Los Millonarios”, en la época “del
Dorado”. Y a Remy Rocha, por ser un gran boxeador, deporte con el que disfruta y aún le apasiona
verlo para distraerse un poco.

Adolescencia:
Ya siendo una joven, llena de sueños, decide encontrarse con su madre María Magdalena
Escorcia, (La popular “Mamá Ena), quien estaba ya casada en la ciudad de Barranquilla, con el
Señor Eugenio Rodríguez Pacheco (el popular “papa mono”), con el cual tuvo 9 hijos, los cuales
son: Ismael, Gustavo, Luis, Rafael, Antonio, Beatriz, Alba, Carolina, Humberto. En esta familia,
Rodríguez Escorcia, la acogen y respetan, aceptándola como hermana mayor. En total, Ubaldina
tuvo 19 hermanos, de los cuales solo están vivos 3. De esta manera, conviviría, con sus abuelos
maternos, por un tiempo indeterminado en la ciudad de Barranquilla, Sra. María Mejía y el Sr.
Ismael Escorcia.

Adultez Joven:
Inicio su vida laboral desde los 19 hasta los 28 años, con el fin de ayudar a su familia. Trabajó por
primera vez en la empresa “Codacero”, como operaria de máquinas de botones. Siempre
comentaba acerca de sus hábitos de ahorros, orden y actitud responsable con su trabajo. En
aquella empresa, conoció al señor Eloy Cuadrado, con el cual tuvo un noviazgo, muy particular, ya
que la madre de Ubaldina y hermanos lo consideraban “riesgoso”, ya que Eloy Cuadrado tenía
varios hijos (2) con distintas mujeres, y no deseaban que dañara los sentimientos de Ubaldina,
razón por lo cual vigilaban mucho sus encuentros, y visitas en casa.

Una anécdota curiosa, que ella misma comentaba, sucedió en junio del 1947, (tiempos de paz y
reconstrucción del mundo, posteriori a la segunda guerra mundial). Al parecer en Barranquilla se
daba por esta época un evento local el cual todos querían ver, por ser Barranquilla la cuna de la
aviación en Colombia, se experimentaba el paso de un “dirigible”. Estando esta pareja en función
de visita (supervisada), en casa todos salieron a observar el magno evento, dejando solo a esta
parejita, aprovecharon el espacio y desfogaron su intimidad sexual, tiempo después la familia
descubre que Ubaldina estaba embarazada, por ello, urgía llamar a Eloy Cuadrado para que
respondiera. Meses después, el matrimonio se realizó el 12 de octubre de 1947. su primer hijo
TIRZO RAFAEL nació 3 meses después, siendo la fecha el 28 de enero del año 1948. La unión entre
Ubaldina Rocha y Eloy Cuadrado, tuvo grandes frutos de vida, ellos son Tirso Rafael, Ubaldo José,
Robinson, Marlene Josefa, Guillermo Eloy, y Sonia Esther, de esta manera, la familia Rocha
Cuadrado seguía la tradición familiar de constituir familias amplias en número de hijos e hijas.

Adultez Superior:
Siempre se ha caracterizado por ser una mujer servicial, dedicada a su hogar, extremadamente
ordenada, humilde, sencilla, abnegada, solidaria, alegre, de buenos hábitos alimenticios, lo cual le
ha permitido ser muy saludable, creativa en la cocina y de gusto por la lectura y las practicas
espirituales (Cuenta su hija Sonia, que los reunía de noche para rezar el rosario, antes de dormir).
Por estos atributos y en especial por el cultivo de rosas, se le otorgó, por parte de la acción
comunal del barrio Buenos Aires, el premio: a “el mejor jardín del barrio”. Luego de la muerte de
su esposo Eloy Cuadrado, evento que tuvo como fecha el 07 de octubre del año 1991, decide
seguir los caminos de Cristo en 1992, adquirió su membresía en la iglesia “Asambleas de Dios”, en
junio del 2001, fue acreditada por el Pastor Osvaldo Sierra.

Comentarios finales:
Ubaldina Rocha de Cuadrado, es una mujer de mentalidad fuerte, quizás sin miedo a equivocarme
logra poner en tela de juicio muchas premisas y justificaciones de las actuales generaciones en no
querer perseguir un fin, una lucha, un ideal por miedo al que dirán los demás. Ubaldina, es una
heroína de esas que no volveremos a ver, sus 104 años son resumidos en estas cortas pero
sustanciosas 1437 palabras, pero sin lugar a dudas hay un libro entero por escribir, de allí la
importancia de la Historia como ciencia social, pues sin ella la memoria y los recuerdos pasarían
desapercibidos, gracias al testimonio de la señora Ubaldina, podemos ampliar la definición
limitada de los diccionarios del concepto, Vida. Para finalizar, podemos leer algunas palabras de
sus hijos e hijas:

Tirso Rafael:

“…”

Ubaldo José:

“…”

Robinson:

“…”

Marlene Josefa:

“…”

Guillermo Eloy:

“…”

Sonia Esther:
Eres un verdadero tesoro, porque con tu sabiduría adquirida a lo largo de tu vida es un legado para
nosotros, Hijos, nietos, bisnietos, tataranietos y las generaciones venideras. Apreciamos tus
consejos y el tiempo que has dedicado para ayudarnos. Ahora que estamos conmemorando
juntos, tus 104 años, de vida entre nosotros, le damos gracias a Dios por ser el ICONO de unión
familiar, que este sea la continuidad de este vínculo. Felicidades UVA. Gracias madre.