Está en la página 1de 1

Límites planetarios

1. Acidificación de los océanos: se refiere al descenso en el pH del agua marina por la absorción de
CO_2. La acidificación provoca la disolución de minerales necesarios para que, por ejemplo, las criaturas marítimas
puedan formar sus conchas. El incremento de acidez en el agua afecta el crecimiento de corales y plancton lo que
genera un cambio en la estructura del ecosistema marítimo disminuyendo la cantidad de peces.

2. Emisión de aerosoles: partículas microscópicas de aerosol son lanzadas a la atmósfera afectando el clima y
la vida de los organismos. Los aerosoles afectan la formación de las nubes y la circulación atmosférica causando
por ejemplo una disminución en la actividad monzónica. El comportamiento de los aerosoles en la atmósfera es
compleja y aún se necesitan estudiar sus efectos.

3. Agotamiento del ozono estratosférico: se refiere al adelgazamiento y debilitamiento de la capa


estratosférica de ozono. Si bien a escala global se mantiene dentro de los límites recomendables, durante la
primavera en la Antártica se aprecia una sensible disminución. Sin embargo, la concentración de ozono se ha
mantenido estable desde hace alrededor de 15 años y se espera que permanezca de esta forma como
consecuencia de la reparación del agujero en la capa de ozono gracias a la eliminación gradual del uso de
sustancias que la dañaban.

4. Introducción de nuevas entidades: con este nombre se designa a nuevas sustancias y a formas de vida
modificadas que tienen el potencial de causar efectos biológicos y geofísicos no deseados. Así por ejemplo,
sabemos de la contaminación química provocada por diseminación de sustancias orgánicas, materiales radioactivos,
nanomateriales, micro-plásticos y otros, así como de la contaminación biológica, aún no suficientemente
dimensionada, provocada por los organismos genéticamente modificados.
Estas entidades, creadas por el hombre recientemente, y vertidas al medio ambiente, pueden tener un efecto
irreversible en los sistemas biológicos. El impacto global aún no se ha cuantificado, sin embargo, se considera un
riesgo el sobrepasar el umbral para mantener la estabilidad del sistema Tierra.

5. Cambios en el uso de la tierra: la deforestación provocada por el ser humano para generar tierras de cultivo,
para la ganadería o para uso habitacional ha acabado con enormes extensiones de bosques. Este cambio de uso de
suelo tiene un impacto en la reducción drástica de biodiversidad, en el flujo del agua y en los ciclos biogeoquímicos.
Los expertos establecen que lo deseable sería mantener al menos el 72% de las áreas boscosas en el mundo, sin
embargo, actualmente se conserva solo el 62% y sigue disminuyendo.

6. Uso de agua dulce: a diferencia del agua salada, el agua dulce -es decir, aquella que pueden beber los seres
vivos- es muy escasa. Aproximadamente el 97% del agua en la Tierra, es salada y por tanto no es potable, entre el
2.5% y 2.75% es agua dulce, pero, entre el 1.75% y el 2% está en glaciares y entre el 0.7% y 0.8% en aguas
subterráneas. Menos de 0.01% del total es agua superficial de lagos y ríos.

Rockström J. et al (2009). A safe operating space for humanity. Nature, 461-7263, 472-475. doi.org/10.1038/461472a

También podría gustarte