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CONOZCAMOS LOS CULTIVOS DEL SIGLO XXI

Frijol, maíz, chile, culantro, aguacate, vainilla, piña,


jocote. Son cultivos comunes en nuestra región,
forman parte de la dieta tradicional de la población,
y pueden ser degustados en una amplia variedad de
platillos. Lo que muy pocos saben es que estas
especies forman parte de un amplio y diverso grupo
de cultivos, nativos de Mesoamérica, que frente a
las amenazas inminentes del cambio climático,
pueden jugar un papel clave en la agricultura del
David Williams, Gerente del Programa de Agricultura, futuro.
Recursos Naturales y Cambio Climático del IICA, durante
charla magistral
David Williams, Gerente del Programa de
Agricultura, Recursos Naturales y Cambio Climático del Instituto Interamericano de Cooperación para la
Agricultura (IICA), cataloga a estos cultivos como “olvidados” o “subutilizados”, debido a que, a pesar
de las grandes ventajas agronómicas que ofrecen, su potencial aún no ha sido totalmente
aprovechado, no sólo por los agricultores, sino por la comunidad científica en general.

Williams compartió estas reflexiones en el marco del IX Simposio de Recursos Genéticos de América
Latina y El Caribe, donde dictó la charla magistral “Aprovechando los cultivos subutilizados de
Mesoamérica para responder al cambio climático”.

Entre las ventajas que presentan estos cultivos destacan: la pre-adaptación a condiciones marginales
de suelo y humedad; su alto valor nutricional; la eficiente utilización del agua y su resistencia a plagas y
enfermedades, lo que hace que no requieran fertilizantes, riego, ni pesticidas para poder producir.
Además, muchos de estos cultivos –como el maíz, los frijoles, y el chile- cuentan con una amplia
diversidad de razas locales que les da mayor potencial para la obtención de variedades mejoradas o
adaptadas a diferentes condiciones ambientales.

Curcubitáceas, chan, nopales, tunas, agaves, amarantos y las especies sapotáceas, se suman a la amplia
lista de los cultivos nativos subutilizados.

“La diversidad genética de Mesoamérica, su uso inteligente para la diversificación de los sistemas
productivos puede ser la mejor respuesta para adaptar la agricultura al cambio climático. Por su
riqueza de agro biodiversidad nativa y su abundancia de otros recursos naturales, Mesoamérica seguirá
siendo un proveedor importante de cultivos y alimentos a nivel mundial”, afirmó el Gerente.

De acuerdo con Williams, para desarrollar todo el potencial de estos cultivos es necesaria la atención
de la comunidad científica y el apoyo de los países para el establecimiento de un nuevo paradigma de
agricultura diversificada, resiliente y climáticamente inteligente en el que estos cultivos dejen de ser
subutilizados y asuman su posición como los “Cultivos del Siglo XXI”.

En este contexto, sin embargo, surge la pregunta fundamental ¿Cómo lograrlo? ¿Cómo conservar y
potenciar la riqueza genética de Mesoamérica? El Plan de Acción Estratégico para Fortalecer la
Conservación y el Uso de los Recursos Fitogenéticos de Mesoamérica, como Alternativa de Adaptación
al Cambio Climático (PAEM), podría marcar el camino.

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