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El documento anima a los abuelos a no perder la esperanza a pesar de la difícil situación actual causada por la pandemia y la crisis. Aunque los tiempos son difíciles, Dios siempre ha demostrado su amor por nosotros y debemos mantener una comunicación constante e inquebrantable con Él. Esta tormenta pasará si esperamos con fe, ya que Jesús está con nosotros. El autor invita a soñar grandes sueños porque tenemos un Dios grande capaz de realizarlos, y ruega a la Virgen María que interceda para que bor
El documento anima a los abuelos a no perder la esperanza a pesar de la difícil situación actual causada por la pandemia y la crisis. Aunque los tiempos son difíciles, Dios siempre ha demostrado su amor por nosotros y debemos mantener una comunicación constante e inquebrantable con Él. Esta tormenta pasará si esperamos con fe, ya que Jesús está con nosotros. El autor invita a soñar grandes sueños porque tenemos un Dios grande capaz de realizarlos, y ruega a la Virgen María que interceda para que bor
El documento anima a los abuelos a no perder la esperanza a pesar de la difícil situación actual causada por la pandemia y la crisis. Aunque los tiempos son difíciles, Dios siempre ha demostrado su amor por nosotros y debemos mantener una comunicación constante e inquebrantable con Él. Esta tormenta pasará si esperamos con fe, ya que Jesús está con nosotros. El autor invita a soñar grandes sueños porque tenemos un Dios grande capaz de realizarlos, y ruega a la Virgen María que interceda para que bor
¡Queridos hermanos y hermanas! Un saludo para todos ustedes, que la Paz de
Dios sea con cada uno de vosotros. Sabemos que la situación que cada uno de ustedes viven en la actualidad, ha ocasionado que nuestros ánimos de seguir hacia adelante vayan en decadencia, la pandemia que atraviesa el mundo actual, la cantidad de muerte que está a causado, en especial de algunos de nuestros seres queridos, la crisis económica y social por la que atraviesa nuestro país, la emigración de nuestros seres queridos hacia otras naciones en busca de un mejor futuro, todo esto ha golpeado fuertemente nuestras ilusiones, nuestras esperanzas, nuestros anhelos de tantas cosas. Pero ante esos golpes es preciso no desfallecer, no ver las cosas como un todo está perdido, es difícil hacer todo esto, pero en esa dificultad es cuando debemos tomarnos de la mano de Dios para saber esperar en Él, pero al mismo tiempo implorarle que siga demostrando el amor que ha tenido siempre para con cada uno de nosotros. Sé que todo esto se nos puede hacer difícil porque nuestra confianza en Él quizás se ha perdido, pero ahora más que nunca nuestra comunicación con Él debe ser única, constante e inquebrantable. ¡Hermanos! Tengo la plena certeza de que esta situación, esta tormenta, esta tempestad por la que estamos atravesando, pasara no nos desesperancemos no olvidemos que Jesús está en la barca con nosotros acompañándonos, Él al igual como hizo con sus discípulos calmara la tormenta y volverá la calma, la paz, la tranquilidad, pero es necesario esperar, pero esperar con fe porque Dios en medio de su silencio realizara el milagro en nuestra nación, libreándola de la esclavitud como hizo con el pueblo de Israel, realizará un milagro en nuestras vidas, en nuestras familias pero es necesario aguardar con ansias la realización de esos prodigios. ¡Queridos Míos! El papa Francisco nos ha exhortado a soñar, es por ello que les digo es necesario volver a soñar como lo hacían cuando niños, soñar con la familia junta nuevamente, soñar con un país donde la justicia la paz y el amor reinan, soñar que esta pandemia cesara, les invito a que tengan sueños grandes porque tenemos un Dios grande capaz de realizar cada uno ellos, solo basta tener la certeza y sobre todo la fe de que el Señor realizara en sus vidas los deseos de su corazón. Ruego nuestra madre María Santísima que interceda por ustedes ante su hijo Jesús, para que borre de sus corazones toda angustia, preocupación, desesperanzas, y para que obre en ustedes un corazón contricto, noble, un corazón lleno de esperanza, de amor, y sobre todo de fe en Él.
Sin más que decir ánimo y esperanza, que Dios los bendiga, acompañe, guie y custodie para siempre.