Mostrando una fe sincera

Ilustración. – Muchas veces tomamos la fe como algo emocional, que no se relaciona con nuestras acciones, a
causa de eso descuidamos nuestras acciones cometiendo pecados sin que nos cause dolor, la fe va de la
mano de nuestras acciones, un cristiano que tiene fe, buscará mostrar con sus acciones esa fe. Pero para eso
tiene que tomar ciertas decisiones en su vida. Para usted hermano ¿Cómo está viviendo su fe en Cristo?
Pasaje: Hebreos 12:1-3
Contexto: Esta sección de este libro hace una conclusión a lo que se venían hablando acerca de la fe, y de
quienes son llamados comúnmente héroes de la fe, recordemos que Hebreos es una carta que hace mención
bastante sobre el Antiguo Testamento, en esta porción dedica tiempo para hablar acerca de la fe de quienes
decidieron servir a Dios y como la fe Dios hizo grandes cosas a través de ellos. Sabiendo la fe de muchos se
nos da una conclusión que ahora los cristianos teniendo tantos testigos de la fe no tenemos excusas para
aplicar la misma, sino que tenemos que tener ciertas características para aplicar la misma fe, que aplicaron
los que sirvieron a Dios en el pasado.

I. Despojándonos de lo que nos impide correr la carrera

a. Teniendo en derredor tan grande nueve de testigos. – a manera de conclusión, la escena es un
estadio donde hay competidores y testigos, los competidores son los que ahora siguen a Cristo, los
testigos o espectadores son quienes ya corrieron la carrera, ahora ellos son los que aliente por medio
de sus testimonio, por esto el autor llama a realizar actos de fe, los cuales tenían que realizar como lo
hicieron los testigos.
i. Despojémonos de todo peso. – La primera decisión que tiene que tomar una persona que quiere
imitar la fe de los mencionados en el capítulo 11, es que tiene que despojarse de todo peso.
¿Qué es despojarse de todo peso? También puede referirse a quitarse toda carga que no nos
permite seguir de manera firme al Señor. La idea es como aquel cargador que camina encorvado
por la carga que lleva encima que no lo deja mirar hacia adelante, lo tiene encorvado como si su
carga lo dominará.
Como creyentes ¿Qué carga no nos deja mirar al frente?
Cada uno tiene su propia carga que el impide poner en práctica su fe en el Señor e imitar a los
hombres de fe.
Lucas 21:34, no nos carguemos de glotonería, y embriaguez, afanes de esta vida.
Efesios 5:3-4, fornicación, inmundicia, avaricia, palabras deshonestas.
Efesios 4:22, Despojémonos del viejo hombre.
ii. Despojémonos del pecado que nos asedia. – Lo segundo que se tiene que despojar una persona
es del pecado que nos rodea por todos los lados, incluso podríamos decir el pecado que compite
por dominarnos.
¿Qué pecado nos tiene rodeado, que no nos deja demostrar nuestra fe?
1Pedro 5:8, El diablo está rondando con león esperando a quien devorar.
Santiago 4:7, Sometámonos a Dios para vencer al diablo.
Externamente podemos aparentar muy buenos cristianos, pero a la hora de demostrar nuestra fe,
caemos, porque fuimos dominados por el pecado.
Los pecados que nos deja mostrar nuestra fe pueden ser. El miedo al fracaso ministerial, al futuro,
temor a fallar, pecados del pasado, el orgullo.
b. Corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante. – El consejo que nos deja hebreos es
el de correr con paciencia la carrera que tenemos por delante. Para poder correr tranquilos es que
tenemos que despojarnos de todo lo anterior mencionado, así nuestra mente y corazón estarán
centrados en la carrera diaria que tenemos.
¿Hay algo que nos impide correr la carrera? Si hay algo que impide correr tranquilos, eso nos va
desviar o eliminará de la carrera, por eso es necesario despojarnos de todo peso, y de todo pecado.
¿Cómo estamos corriendo la carrera? Estamos corriendo según el plan de Dios o nos hemos
trazado nuestro propio plan.
1Corintios 9:25-26, corramos con un propósito.
La carrera tiene una recompensa al final, corramos por esa recompensa, ver a Cristo
II. Poniendo nuestros ojos en Jesús
a. Puesto los ojos en Jesús. – La carrera tiene una meta, y en esa meta Jesús nos espera, podríamos
decir, así como en la meta alguien da la bienvenida bajando la bandera a cuadros, en el cielo Cristo
nos dará la bienvenida.
Los testigos ya corrieron la carrera, ellos no vieron a Cristo, pero corrieron con la esperanza de su
venida, ahora corremos con sabiendo que vino y que volverá a recoger a su iglesia. Tenemos una
mejor prueba para correr la carrera, ellos vieron sin ver, nosotros corremos sabiendo que se cumplió
la promesa de su primera venida.
i. El autor y consumador de la fe. – el propósito por el cual tenemos que poner nuestra mirada en
Cristo, es porque Él es el autor de la fe, solo por medio de Él podemos tener fe, solo por Él
podemos correr la carrera.
b. El gozo puesto delante de Él Sufrió la cruz. – que podemos decir de esta frase, que Cristo prefirió
el sufrimiento antes que el gozo eterno, nos dejó ejemplo, que mejor es sufrir haciendo la voluntad de
Dios, que vivir y disfrutar de algo que ya tenemos seguro.
Filipenses 2:6-8, Cristo se despojó de toda su gloria.
i. Menospreciando el oprobio. – Cristo sabia del sufrimiento que iba a pasar, pero Él prefirió la
obediencia al Padre,
Hebreos 11:26, poniendo la mirada en el galardón.
ii. Se sentó a la diestra del trono de Dios. – el resultado de su obediencia fue su glorificación,
Cristo está sentado a la diestra del trono de Dios.
Filipenses 2:9-11, Dios exalta a Cristo.
como cristianos ¿Hay algo que nos impide poner los ojos en Jesús?
¿estamos dispuestos a sufrir como Cristo?
¿Estamos dispuestos a renunciar como renunció Moisés?
¿Estamos dispuestos a dejar la comodidad como la dejo Cristo?
Dios recompensa todo sacrificio, así como recompensas a los testigos, también recompensará a
los que estamos corriendo la carrera.
III. Considerando el sufrimiento de Cristo.
a. Considerar, La idea de considerar es de tomar en cuenta, o tener presente.
Los lectores tenían que tener presente lo siguiente:
i. A aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo. – Cristo sufrió mucha
oposición desde el inicio de su ministerio, tanto los fariseos, escribas, se oponían a su ministerio, así
que el escritor describe si ahora también sufrimos oposición tenemos que pensar que la oposición que
sufrimos no es tanto como la que sufrió Cristo al punto de llevarlo a la cruz
Juan 1.11, Los judíos no recibieron a Jesús.
Juan 15:20, Así como persiguieron a Cristo, también perseguirán a sus seguidores.
Juan 17:14, el mundo aborreció a los seguidores de Cristo.
ii. Para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar. – El propósito de recordar el
sufrimiento de Cristo es para no desmayar, sino más bien que sea un aliento a nuestras
vidas, sabiendo que Cristo sufrió para darnos vida eterna, ahora nos toca sufrir si fuera
necesario para anunciar su verdad, sabiendo que tenemos promesas de parte de Él.
Mateo 16:24, Cada uno tome su cruz y siga a Jesús
Como cristianos tendremos pruebas en el camino, sufrimientos, pero ninguno de esos
sufrimientos se compara con los sufrimientos de Cristo.
Nuestra mirada tiene que estar puesta en Cristo, correr cada día la carrera que tenemos por
delante, Dios nos dio capacidad, dones para correr, y una esperanza.
IV. Conclusión
Como cristianos tenemos que despojarnos de todo lo que nos impide correr la carrera cristiana, y no
dos deja poner la mirada en Jesús, así también poniendo la mirada en Cristo, recordando que el
sufrió primero por nosotros, ahora nos toca cargar nuestra cruz, y correr nuestra carrera, guiados por
Dios, con la esperanza puesta en el meta sabiendo que Cristo nos espera.