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Introducción

En esta historia podemos encontrar un relato sobre el tesoro de Rumiñahui o bien

conocido por otros como el “tesoro de los Llanganates”, nos adentraremos con las más

difíciles situaciones con las que nuestro personaje de leyenda apodado como “Jaguar

Negro” tuvo que atravesar, teniendo un crecimiento emocional y espiritual en todo

sentido. Aprenderemos sobre como este ser humano tuvo el coraje de atravesar todo un

mundo en contra aun sabiendo cuan imposible podría llegar a ser su cometido final; esta

historia tiene un camino un tanto diferente a lo contado tradicionalmente por otros

autores, dándonos un mundo fantástico e increíble a tal punto de casi no poder ser creíble.
Capítulo I

Presagio

Esta historia comienza en el año de 1494 en Suramérica, ya haciendo el medio día

en un poblado, donde un bebe nació sin saber que el destino tenía grandes planes para él,

era un hogar humilde donde se terminaba el labor de parto, la madre llamada Quasig

apenas escuchó y miró a su pequeño hijo dar sus primeros respiros y llantos, se alegró,

puesto que ella pudo darle un descendiente varón a su esposo, el cual era conocido por

no poder concebir un hijo varón y que a sus exparejas las terminaba desollando vivas. El

esposo de Quasig era el mejor amigo del padre de Atahualpa, es decir Huayna Cápac, este

al tener dicha cercanía con aquel soberano podía hacer y deshacer cuanto él quisiera en

el reino sin ningún tipo de repercusiones, esto debido que cuando ambos eran muy jóvenes

el salvó a su mejor amigo de un jaguar negro, que muy seguramente hubiera terminado

con la vida de aquel entonces príncipe Huayna Cápac. Quasig con un grito de que traspasó

las mismas montañas escuchándose por todo el valle dijo “es un varón”, por la puerta

ingresó con violencia aquel hombre corpulento, de tes canela, cabellera larga, con una

estatura de 1.84 metros de altura, era Gio Yayankuí aquel hombre al que Quasig temía

por su seguridad y la de su bebe en caso de no ser varón, Gio exclamó ¡por fin, un varón!

Aquel que tendrá el orgullo de ser mi descendencia, el padre eufórico por aquel

acontecimiento tomó en brazos a su pequeño retoño y se dirigió a la puerta para poder

contemplarlo con mayor detalle, pero notó algo diferente en aquel pequeño niño de

cabello oscuro, piel canela, cuerpo regordete, aquel retoño que solamente miraba con

asombro el nuevo mundo al cual por fin pudo llegar, eran sus ojos, dorados como el

mismo sol, pero lo más impresionante fueron sus pupilas que conforme se acercaba al sol

se ponían de forma vertical como si de un pequeño cachorro de jaguar negro se tratara,


Gio se lleno de ira, temor, tristeza e incluso pensó que era un castigo del mismo Dios Sol

por sus actos pasados con aquellas mujeres que no pudieron darle lo que el buscaba con

tanto anhelo, Gio preguntó a su mujer “¿porque me diste un niño deforme?” a lo que

Quasig con mucho nerviosismo respondió “este niño que te he dado, con ojos del mismo

Inti, es un regalo de nuestro Dios al ver que tú buscabas con tanta desesperación un hijo

varón que pudiera tener el privilegio de cargar tu sangre”, Gio se quedó en silencio,

miraba fijamente aquel pequeño con ojos color oro, este exclamó “mujer, espero que

tengas razón por tu bien y el de este niño, ahora mismo lo llevaré con Rogtily” , la madre

un poco alivianada pero muy asustada temiendo por dentro lo peor, solamente pudo

contestarle “ ve con él, el chaman te confirmará que es un regalo del mismo Inti”, entre

trapos arropó al pequeño y lo cubrió ya que sus ojos lo tenían muy nervioso, Gio

emprendió su viaje hacia la casa del chaman Rogtily, el cielo parecía torturar aquel

hombre de carácter temible ya que no existía nube alguna que pudiera oscurecer el cielo,

en eso Gio pensó que talvez Quasig tenía razón puesto que parecía que toda la Pacha

Mama estaba de júbilo por el nacimiento de aquel pequeño con los ojos de color fuego,

todo el camino hasta la casa del chaman se preguntó dentro de sí mismo, cual será un

nombre digno que pueda cargar su hijo en caso de ser una bendición, miró a su entorno

pero no se le ocurría nada, al estar pensando en dicho nombre aquel hombre de cicatrices

queloides sin darse cuenta cayó dentro de una trocha resobándose y tirando al pequeño

por los aires pudiendo observar como aquel recién nacido cayó de pie y luego al no

mantener el equilibrio cayó sentado, aumentando las similitudes con las de un felino, Gio

no podía creer lo que sus ojos le habían mostrado, se apresuró en reincorporarse y

recogerlo, observó todo su cuerpo para cerciorarse que fuera como la de un humano, al

ver que no tenía nada extraño lo volvió a lanzar por los cielos para ver que sucedía, para

sorpresa de este, aquel niño volvió a caer nuevamente de pie, con incredulidad Gio se
apresuró a llevarlo con Rogtily para que le pudiera dar explicación alguna de todo lo que

había pasado. Gio caminaba pensativo por el sendero divisando aquel cielo despejado,

dándose cuenta que el mismo sol estaba por las tres cuartas partes de su trayectoria,

apresurado llegó por fin a la vivienda de aquel chaman, desprendía un olor fuerte, saliendo

dentro de un humo por la puerta como si de un incendio se tratara, apareció un hombre

de edad avanzada , de dientes amarillentos, con algunos largos mechones plateados,

estómago voluptuoso, piel canela, de ropas de telas de jaguar, con un collar lleno de

dientes del mismo animal que adornaban su cuello, con una voz algo abrumadora se

escuchó “veo que por fin ha llegado la hora en la que el gran Dios Inti ha decidido darte

un descendiente con el que estuvieras conforme” Gio al escuchar estas palabras de

inmediato recordó lo que aquella mujer le había mencionado quedándose estupefacto, el

silencio se hizo propietario del lugar, aquel hombre vientre prominente al darse cuenta de

esto exclamó “ trae aquí a este pequeño para que el viejo Rogtily pueda darle su ceremonia

o sino el demonio de la montaña te lo robará ” con una pequeña carcajada al final y su

singular ceja levantada en signo de mofa, Gio descendió de las nubes al mundo con una

voz algo temerosa dijo “Rogtily tienes que ver esto, nunca antes había pasado y tengo que

contarte algo más”, Rogtily al ver que Gio estaba totalmente serio y la vez con una mirada

perdida hizo entrar a sus aposentos para que le cuente todo lo que tenía que decir, ahí Gio

le mostró aquellos ojos color dorado y de pupilas extravagantes que tanta curiosidad le

causó, incluso contándole el incidente del niño con el cielo y el suelo, Rogtily no lo podía

creer, se puso totalmente serio, su ceja de mofa se puso a la par de la otra dando a entender

que era algo muy serio lo que había pasado, Rogtily le manifestó con cierta incredulidad

que era el niño de la leyenda que su maestro le contaba con tanto ímpetu cuando el aún

era un pequeño aprendiz, la cual dice que un día aparecerá un niño con los ojos de color

amarillo intenso como si delas mismas llamas se trataran, este niño tendrá un cuerpo
bendecido por el mismo Inti, la fuerza y la inteligencia de más de 100 hombres, cuyo

poder podrá cambiar el mundo como se lo conoce, pero que si en algún momento o por

alguna razón decide aniquilar el reino fácilmente lo hará, no habrá nada en este mundo

que lo pueda detener, por eso debe ser criado junto con los hijos del emperador para que

sea su fiel lacayo. Gio al darse cuenta del potencial que su hijo poseía se sintió como el

hombre más dichoso de todo el imperio, ya que ningún otro niño era tan especial como el

suyo. El chaman le comentó que tenían que hacer la ceremonia de nombramiento, Gio le

dijo algo preocupado ¿Qué nombre podrá ser digno del niño de la profecía? Rogtily le

contestó “si tanto te preocupa el nombre porque no le ponemos Zekuíro, Zekuíro

Yayankuí” cuyo nombre significa “el enviado”, a Gio pereció gustarle aquel nombre así

que aceptó sin objeción alguna, el chaman empezó con la ceremonia, aquel niño

solamente sonreía como si todo fuera diversión para él y nunca mostrando algún tipo de

temor o signo de inseguridad, Rogtily al terminal el ritual miró fijamente a los ojos de

aquel niño y casi que por un instante su mente se trasladó a otro plano existencial, donde

todos los conocimientos eran tan claros, tan fáciles, tan obvios que parecía absurdas todas

aquellas preguntas que por tantos años que aquel chaman se las realizaba mientras

preparaba sus brebajes, al instante que Rogtily pestañeó nuevamente, su mente volvió a

este mundo, Gio no pudo percatarse de nada, solamente Rogtily fue testigo de aquellas

cosas fantásticas que vio más allá de este mundo, sin más Gio se despidió aquel hombre

de melena con mechones color plata, dándole las gracias por hacerle saber que su hijo era

el más importante de todo el reino, dirigiéndose a su casa para contarle a su mujer y a su

mejor amigo todo lo sucedido.


Capítulo II

Alma Carmesí

En un rio no muy alejado del pueblo, se encontraban 3 pequeños niños a la espera

de que algún pez pasara para darle cacería, se escuchó con fervor “ahí está, atrápalo” era

la voz de un pequeño Rumiñahui, aquel niño con ojos un tanto rasgados, de cuerpo fuerte

y cabellera larga, exclamó “tú puedes hacerlo hermano”, sus ojos se llenaron de alegría

al ver que dicho pez estaba fuera del agua en las manos de su hermano mayor, un chico

de un par de años mayor que él , se notaba que tenía más experiencia, mayor habilidad,

pues era el primogénito de Huayna Cápac, su nombre era Atahualpa, tenia una cabellera

larga, cuerpo fuerte, ojos un tanto menos rasgados que los de su hermano menor y más

alto que él, con una voz algo chillona dijo “es muy fácil hacerlo, el próximo pez que pase

lo atrapas tú, pequeño renacuajo” soltando un pequeño gallo en sus palabras, signo de la

transición de niño a hombre, este sonido hizo reír aquellos niños a carcajadas hasta

hacerles doler el estómago, por esa risa, de sus manos se escapo aquel pez que pudo

regresar a su hábitat, ellos al presenciar esto se empezaron a reír con mayor fuerza a tal

punto que empezaron a salir lagrimillas de sus ojos, pasó unos minutos y nuevamente los

tres chicos se quedaron viendo al rio en silencio, en el rostro de Atahualpa se pudo notar

como sus pómulos se tornaban de un color rojizo, un tanto apenado dijo “solo ellos tenían

el honor de escuchar aquel sonido y que deben estar orgullos de ser sus acólitos en sus

cacerías”, por fin existió la intervención del tercer integrante de aquel pequeño grupo, con

una voz un tanto mas grave que la de Atahualpa contestó “mi gran príncipe, tienes toda

la razón, es un honor para nosotros ver cómo van creciendo tus habilidades y con tu

transformación para ser el próximo gran monarca del reino” no era nada menos que

Zekuíro, el menor de los tres, su cuerpo era mas grande que el del principie Atahualpa,
una musculatura más marcada y mayor, de cabellera larga, piel canela y sus característicos

ojos color oro intenso y que incluso parecían incandescentes a pleno medio día, este se

adentró más profundo en el rio y como si de un simple juego se tratase saco un pez casi

cinco veces del tamaño del anterior, se acerco ante ellos y les dijo “vamos a llevarlo ante

padre como muestra de nuestro esfuerzo, lo comeremos entre todos y será un gran festín”,

Atahualpa y Rumiñahui algo celosos por aquellas habilidades sobrehumanas murmuraron

que ellos podrían haber cazado una presa mas impresionante si ellos se lo propusieran y

más aun si ellos tuvieran aquel cuerpo bendecido por el mismo Inti, los jóvenes incas

comenzaron su viaje de retorno hacia su hogar, en el camino aquellos niños como si de

viejos amigos se tratase comenzaron a recordar todas sus aventuras, las travesuras que

hacían a los habitantes del reino, en los problemas que se metían pero esto hacía que su

lazo de amistad se haga más fuerte. Llegando al palacio todos los habitantes saludaban

con reverencia a los pequeños, pero entre algunos habitantes se escuchaban susurros de

inconformidad, “como es posible que ese fenómeno pueda estar con ellos” “si llega a

desarrollarse por completo será un peligro para todos nosotros”, estos comentarios fueron

oídos por Quasig, ella acostumbrada a dichos comentarios no hizo nada mas que respirar

profundo diciéndose a sí misma “eso es hijo mío, crece, desarróllate y fórmate como aquel

hombre de la leyenda que por desconocimiento las demás personas tanto te temen, tú

tienes el poder para cambio a todo este mundo y a estas personas que han sido

corrompidas por la envidia de tus habilidades, por tu destino” , la madre con lágrimas

recorriendo sus mejillas siguió un camino opuesto al de su primogénito. Al ingresar a la

habitación del rey inca, los tres chicos empezaron a gritar “¡padre, padre donde te

encuentras padre!, te tenemos una sorpresa”, a lo lejos se pudo divisar una silueta de un

hombre fornido, con su clásica vestimenta real adornada por oro que reflejaban por toda

la habitación los mismos rayos del sol, su nombre Huayna Cápac, con una voz firme
exclamó “me alegra que pudieran cazar esta vez a un pez mas grande que el anterior, veo

con satisfacción que mientras ustedes permanezcan juntos no hay nada ni nadie quien les

pueda hacer frente” los niños salieron corriendo a abrazarlo, al instante en que aquellos

pequeños estuvieron en el regazo del monarca pudieron percatarse que tenía sangre fresca

en su espalda, muy preocupados preguntaron el motivo de sus heridas, el les dijo

“siéntense tengo que contarles algo muy triste”, ¿ustedes saben que yo tengo un hermano

aunque no de sangre verdad?, a los cuales los jóvenes asentaron con su cabeza aseverando

una respuesta positiva, el monarca con voz temblorosa y ojos vidriosos dijo que cuando

él estaba paseando por el palacio a solas, su hermano al cual no había visto en muchos

años había sido poseído por el demonio de la montaña, él estaba en un estado de transe

con los ojos totalmente en blancos, hablando en una lengua extraña y que intentó matarlo,

lucharon por un buen rato demostrando que eran excelentes guerreros dignos de llamarse

incas, pero que al final el monarca fue vencedor incrustándole una lanza en el corazón a

su más querido amigo, haciéndole recobrar la conciencia y escuchando sus ultimas

palabras “haz que mi hijo encuentre a su madre”, esto confundió a los jóvenes chicos, no

sabían a que se referían aquellas palabras, ¿cuál era el hijo del mejor amigo de su padre?

Huayna Cápac se levantó y pidió a los chicos que vayan hacer los preparativos para poder

comer aquel magnifico ejemplar de “cucha”, al levantarse lo chicos y salir corriendo a

traer todo lo necesario el monarca puso su mano en los hombros de Zekuíro, esto hizo

que aquel chico de ojos destellantes entendiera a que se refería su padre, el con una voz

melancólica dijo “tú no eres mi padre verdad” a lo que el monarca solamente lo abrazó y

le dijo “claro que soy tú padre, yo te crie, te he visto crecer” pero lamentablemente no

soy quien te engendró, aquel joven solamente abrazó a su padre y dijo que no importaba

quien lo haya engendrado, para el sigue siendo su padre y nada cambiará eso.
Al terminar de cenar, los chicos fueron a sus habitaciones para poder descansar,

pero Zekuíro intrigado por la noticia tan abrumadora que ese día le dio su padre, esperó

a que todos se quedaran dormidos para poder buscar respuestas, la única persona que

podría darle esas respuestas era aquel “loco chaman”, empezó a salir con una destreza

indescriptible por los aposentos de su padre tomando rumbo hacia la casa de Rogtily. La

noche estaba llena de penumbra, con apenas visibilidad para cualquier humano ordinario,

pero no para Zekuíro, que, como un felino tenia la habilidad de ver claramente en la

oscuridad, no paso mucho tiempo para que pudiera llegar a la vivienda de aquel hombre,

esta vez, ya no tenía aquel olor penetrante que antiguamente lo caracterizaba , pero de

igual manera estaba siendo ya esperado en el umbral de la puerta con los brazos abiertos,

“se que has venido joven príncipe, buscas respuestas, entra te contaré todo lo que desees”,

el joven ingresó, recibiendo un brebaje de sabor amargo causándole una mueca motivo

para que aquel chaman volviera a levantar la ceja como antiguamente lo hacía mientras

se reía, “veo que también eres susceptible a este amargo sabor ” dijo aquel hombre con

una sonrisa burlona, Zekuíro dijo “quiero saber que es el demonio de la montaña” “¿qué

pasó con mi madre?,¿dónde está?, ¿cómo la encuentro?”, Rogtily solamente respiró y dijo

el demonio de la montaña es un ente que va y viene entre este mundo y el otro, se alimenta

de aquellas almas que tienen sufrimiento, rencor, odio y que su gran fascinación es

corromper a personas de buen corazón que van a la montaña de cacería, pudriendo su

interior para volverlas su platillo favorito, nunca nadie ha sobrevivido ante un encuentro

con él, solamente los rezos y los hechizos que hago gracias a que los aprendí de ti pueden

mantener al resto de la gente a salvo, tú madre se llama Quasig , aún vive en el reino pero

desconozco su paradero exacto, será fácil que la reconozcas, pues tiene una singular

mancha roja en el tobillo, ella fue la única mujer que se salvó de tu padre, este comentario

extrañó al joven y exclamo “¡como que la única que se salvó, de que me estas hablando!”
a lo cual el chaman pensando muy bien sus palabras le respondió, su padre Gio era un

hombre de temer y que muy seguramente fue victima del demonio de la montaña antes

de concebirlo, pues realizó los actos mas atroces con aquellas mujeres que no pudieron

darle un hijo varón, Zekuíro al escuchar estas palabras abrió abruptamente los ojos, sintió

saña que empezó a carcomerle por dentro, de repente la penumbra de la noche se torno

de un color rojo intenso, asustando al mismo chaman y compañía, el chaman al ver que

esto podría ser un mal presagio trató de calmar aquel muchacho, pero al verlo a sus ojos

se cayó para atrás, esos ojos que eran amarillos como mismo el sol ahora tenían una

coloración totalmente distinta, eran como los de la niebla de un color rojo sangre

palpitante, a lo lejos se escuchó una voz demoniaca “eso es hijo mío, tu serás el recipiente

perfecto para que yo pueda reencarnar en este mundo y gobernarlo” Zekuíro gritó con

valentía “muéstrate cobarde, quien eres”, a lo que aquella voz espectral contestó ¿no

reconoces a tu verdadero padre? Pues yo poseí a tonto de Gio cada vez que trataba de

concebir un hijo, pero tu fuiste el único varón, algún día aquel cuerpo que yo te otorgué

volverá a mi y seremos uno solo. De repente toda la niebla que cubría el reino desapareció,

asombrando al chaman y al joven inca, entiendo ahora el porqué de las cosas, pero

solamente con una pregunta en mente, ¿cuál es el rol de Zekuíro en este mundo? ¿porque

Inti permitió que eso sucediera?


Capítulo III

Forasteros

Había pasado ya 10 años desde la revelación del verdadero padre de Zekuíro,

aquellos tres jóvenes incas ahora eran importantes guerreros del imperio de su padre, la

gente los llamaba “el trio de la muerte”. Era por la mañana cuando el trio de jóvenes

realizaban su entrenamiento diario, y escucharon la voz de Qahome, una mujer de unos

19 años, de caderas anchas y busto generoso, su cabellera le llegaba a la cintura y era tan

negra como la misma oscuridad, sus grandes ojos parecían reflejar un alma en

desesperación rogando de suma urgencia por la presencia de estos ante su padre, ya que

él mismo exigió verlos, puesto que sabía que su hora estaba por llegar , los jóvenes

guerreros acudieron a toda prisa hacia el lecho de su padre, encontrándolo como ellos

tanto temían, en sus últimos respiros, el rey inca dijo con una voz que parecía ya

desprenderse de su cuerpo “hijos míos, el momento ah llegado, mi reinado está a punto

de culminar pero el suyo recién está empezando” aquellos jóvenes sintieron un frio que

recorría toda su espina empezando desde su talón hasta su cien al escuchar dichas

palabras, se acercaron con cuidado abrazando a su padre y diciéndole que jamás van a

fallarle, harán y cumplirán con todas las obligaciones del reino. Huayna Cápac con una

sonrisa en el rostro y con toda la tranquilidad en el alma contestó “yo se sabía que dejo

en buenas manos al reino, cualquiera de ustedes es digno de ser el nuevo monarca, pero

por derecho de nacimiento Atahualpa debía ser su sucesor y tanto Rumiñahui y Zekuíro

serían sus más leales y cercanos consejeros, sus manos derecha e izquierda con la cual

podrían gobernar con justicia” siendo estas las ultimas palabras de aquel hombre delgado

de cabellera totalmente plateada, de manos temblorosas. Ante los ojos del pueblo se

presentó algo increíble, era un eclipse total, esto asustó a todos los habitantes del reino,
solamente Rogtily sabía que ese acontecimiento era fruto de la tristeza inconmensurable

que sentía el “Jaguar Negro” apodo que se ganó Zekuíro por ser sigiloso, ser el hombre

más fuerte que haya existido en el reino y se dice que sus enemigos al ver sus ojos

amarillos resplandecientes sabían que era su final. Qahome ingresó a la habitación donde

se encontraba ya el nuevo monarca junto a sus hermanos para avisarles que el dios Inti

estaba muriendo y era el fin del mundo, al saber esto tanto Atahualpa como Rumiñahui

trataron de hacer calmar aquel corazón destrozado de Zekuíro, sabiendo que su tristeza

causó que el mismo Inti se oscureciera, Zekuíro poco a poco fue tranquilizándose para no

causar ningún tipo de preocupación en los habitantes de su pueblo, y así como fue el

eclipse empezó a desaparecer haciendo salir nuevamente al sol.

Atahualpa caminaba junto con sus dos hermanos despacio por el pasillo principal

del palacio, dirigiéndose hacia la plazoleta donde previamente había ordenado a Qahome

que todos los habitantes de la capital debían estar presentes, para cuando el trio de la

muerte llegó a destino contemplaron a todos los ciudadanos que tenían caras largas como

si ya se esperaban de antemano la noticia que les iban a dar. Atahualpa habló con voz

firme y dijo “mi padre ya no está en este mundo, está con los antiguos gobernantes

disfrutando en otra vida”, “su último mandato fue que yo sea su sucesor y mis hermanos

sean tanto mi mano derecha como izquierda” ante esto, todo el pueblo incluyendo a

Rumiñahui y Zekuíro se puso de rodillas ante el nuevo rey jurando eterna lealtad. Pronto

la notica se extendería a todos los rincones del reino con el primer mandato de Atahualpa

“toda persona que se atreva a ofender a Zekuíro o emita comentarios falsos y negativos

sin algún tipo de pruebas, será castigada con la muerte, él no permitirá que ofendan a la

última familia que le queda en este mundo”.

Pasó el tiempo y reinado de Atahualpa fue el mejor que se había visto hasta la

historia, todo aquel que cometía algún error se le daba una segunda oportunidad para que
pudiera enmendar su equivocación ante el reino a excepción de los que iban en contra de

su primer mandado, era justo y trababa de resolver todos los problemas que se presentaran

siempre con el dialogo y como última opción hacer uso de la fuerza, era una época de paz

donde el progreso era sinónimo de Atahualpa, tanto Rumiñahui como Zekuíro ayudaban

a gobernar el imperio inca ya que el mismo monarca al crecer junto a ellos, sabia sus

virtudes y defectos por eso confiaba ciegamente en su palabra y los llamaba “ mi sangre

latente”, estos nunca decepcionaron a su hermano mayor quienes actuaron siempre con

los principios con los que su padre los había criado, incluso Zekuíro era condescendiente

con aquellos que cometían el error de hacer falsas acusaciones en contra suya, ganándose

poco a poco el respeto de su pueblo.

Un día Zekuíro estaba de camino para reportarse con su hermano Atahualpa y

decidió visitar al viejo chaman Rogtily y como de costumbre se tomaba los brebajes

amargos que este le daba, de repente se sintió un poco mareado, se quedo estático y tuvo

una epifanía en la que extraños hombres de piel color hielo, ojos como el cielo y de

cabellera dorada vendrían montados sobre bestias vistiendo trajes de metal blanco,

trayendo caos y destrucción a su reino, aquel chaman viendo que Zekuíro se quedó

inmóvil, burlándose le dijo “hay muchacho, eres la persona más fuerte del mundo, pero

basta con un simple trago para dejarte plantado” de inmediato Zekuíro recobro la cordura

y le contó al chaman lo que había visto, esto preocupó tanto a Rogtily como al jaguar

negro, tomó otro trago pensando que podría volver a conseguir otra visión pero fracasaron

en su intento, cuando incrédulos por aquel futuro apocalíptico escucharon una voz, esa

voz espectral de otro mundo “mira cuando has crecido, que fuerte te has puesto, lo que te

acabo de mostrar es un futuro no muy lejano, podemos evitarlo siempre y seas tú quien

venga por voluntad propia en busca de mi poder, piénsalo” y nuevamente la habitación

quedo en silencio, Rogtily miró fijamente al guerrero de ojos color fuego y sugirió que
deberían írselo a contar de inmediato al monarca, pero al igual que en aquella ocasión de

antaño tuvo nuevamente una visión, en ese mundo de todos aquellos conocimientos que

alguna vez vio, pero a diferencia de esta vez, una voz sabia, fuerte y calmada a la vez le

dijo “aquel demonio de la montaña ha influido en otros reinos muy lejos de este,

hablándole a los hombres, cambiando su corazón, llenándoles de avaricia, mostrándoles

visiones de este reino con sus riquezas, el busca con desesperación la forma de poder

tener el cuerpo de Zekuíro y así obtener la fuerza para hacerme frente, capturarme y

absorberme, haciendo de todo el mundo un total degollina, tratará de seducir a Rumiñahui

para que robe los ojos del jaguar negro, ya que son la llave para abrir el portal que separa

el mundo terrenal del espiritual, debes impedir que esto suceda” y sin ningún tipo de

oportunidad a realizar pregunta alguna por parte del chaman su visión culminó en un

pestañeo.

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