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Unidad N°2 Rol Del Docente y El Estudiante en La Formación Virtual
Unidad N°2 Rol Del Docente y El Estudiante en La Formación Virtual
VIRTUAL
2. EL TUTOR VIRTUAL
2.1. Roles
2.2. Cualidades
2.3. Tareas
2.4. Formación
2.5. Evalúa lo aprendido
3. HERRAMIENTAS DE TUTORIZACIÓN
3.1. Síncronas
3.2. Asíncronas
3.3. La Motivación
3.4. La Comunicación escrita
3.5. Foro - Chat
3.6. Correo electrónico
3.7. Evalúa lo aprendido
4. EL ESTUDIANTE VIRTUAL
4.1. Conceptualización
4.2. Rol del estudiante virtual
4.3. Hábitos del estudiante virtual
4.4. El autoaprendizaje como estrategia formativa del estudiante virtual
4.5. Evalúa lo aprendido
El entorno virtual apoya al docente y mejora las opciones que pueden tener los alumnos en la búsqueda de
información y elimina la temporalidad que significa una clase presencial. Florez, H (2018). Significa
entonces que la responsabilidad, esta vez se vuelve más compartida entre docente y alumno en el proceso
de aprendizaje.
1.3.1 tutoría académica: En ella se tratan las circunstancias y dificultades que los
alumnos pueden encontrar en el estudio, es decir, aquellos aspectos del aprendizaje relacionados
con los contenidos o la metodología del curso. El tutor académico favorecerá la adquisición,
comprensión y construcción de conceptos, e individualizará el estudio, personalizándolo en la
medida de lo posible a las características y necesidades del alumno. (Gallego, 2019).
La orientación, como parte de la actividad docente del profesor-tutor, tiene unos objetivos muy
concretos:
- Desarrollar en el alumno las aptitudes adecuadas para su propia orientación.
- Adquirir madurez para la toma de decisiones académicas y profesionales.
- Alcanzar un nivel de aprendizaje óptimo a lo largo de sus estudios.
- Fomentar el desarrollo de capacidades para su adaptación a
- diferentes contextos.
1.3.5 Tutoría Profesional: En ella el tutor informa al alumno de las salidas profesionales
tras terminar el proceso formativo, ofertas de empleo, realización de becas, etc.
1.4 Tutoría Individual vs. Grupal: Atendiendo al número de asistentes a la tutoría podremos
distinguir entre:
- Tutoría Individual (tutor-alumno). Es aquélla realizada a un único alumno, conocida también
como tutoría privada. En este tipo de tutoría,
el formador pretenderá conocer la situación
propia de cada alumno y orientarle, de
manera exclusiva, en la planificación y
ejecución de sus tareas. Para ello, la acción
del tutor con el alumno debe realizarse
considerando sus cualidades, sus éxitos y
fracasos y su manera de ser y de actuar.
- Pasiva: es una tutoría en la que el tutor “espera” la demanda del alumno. Es una tutoría a
petición del alumno. Este tipo de tutorías solo serían recomendables con alumnos con una
gran voluntad y decisión sobre su proceso de aprendizaje y que no desean el seguimiento
continuo por parte de un tutor, o si el alumno cuenta con unos materiales didácticos de gran
calidad de tipo auto formativo. No sería recomendable en la mayoría de los casos puesto que
el alumno puede sentirse solo o desmotivado y además la reacción ante cualquier incidencia
siempre sería sobrevenida, el tutor no tendría capacidad de adelantarse a los posibles
problemas.
La combinación de estas dos “actitudes” por parte del tutor dependerá de muchos factores, siendo uno
de los más importantes el estilo de aprendizaje de cada alumno. Existen alumnos individualistas, sociales,
etc. La función del tutor será detectar estos tipos de alumnos y ejercer una tutorización flexible, adaptada a
las necesidades de cada alumno.
Estudiante si lograste llegar a este punto quiere decir que has avanzado
muy bien en todos los contenidos, ahora te invito a leer detenidamente el
capítulo N°2 el tutor virtual y el protagonismo de este en la formación a
distancia
Recuerda que al final del capítulo debes realizar las actividades para
evaluar el conocimiento.
Sigue adelante
¿Cuál es la
4
importancia?
Series 1
3
Series 2 La Educación Virtual, como
Series 3 método de estudio potencia el
2 aprendizaje independiente y
flexible en el estudiante,
capacitándolo, no sólo en adquirir
1
conocimiento, sino a aprender a
aprender, aprender haciendo.
0 Forjando autonomía en cuanto al
Category 1Category 2Category 3Category 4 tiempo, espacio, estilo, ritmo y
método de aprendizaje.
2.3. Cualidades
“Se necesitan unas habilidades especiales para preparar y presentar un programa de estudios
interactivo y participativo de verdad, así como para facilitar y gestionar la participación” (Moore, 2001).
Los roles que desempeña el tutor implican una serie de habilidades o destrezas de distinto orden (social,
personal, etc.) y no solo de experto o conocedor de la materia que tutoriza. Se pueden destacar las
siguientes cualidades y actitudes clave del tutor virtual:
• Habilidades de comunicación. Uno de los requisitos fundamentales del tutor virtual es poseer
grandes habilidades comunicacionales, tanto orales como escritas, para contribuir a una relación y
un feedback realmente efectivo. Dentro de esta importante cualidad hay que destacar la capacidad
de diálogo que debe poseer el tutor. (Moore,2001)
Debe atender todas las sugerencias, reclamaciones y decisiones adoptadas por los estudiantes.
Debe tener confianza en los alumnos y creer en la capacidad y responsabilidad de éstos, ya que, en
ocasiones, es necesario negociar con los estudiantes sobre las actividades propuestas, las fechas de
entrega, etc. Debe dialogar antes que imponer sus propios criterios y decisiones. También es
importante una adecuada expresión escrita, la más habitual entre el tutor y el alumno. En Internet a
diferencia de la comunicación “cara a cara” no existe la posibilidad de apoyar las comunicaciones
con el lenguaje no verbal, vital para interpretar la mayoría de los mensajes. Esto puede ocasionar
malos entendidos o interpretaciones erróneas del sentido del mensaje. (Moore, 2001)
Para evitar esto se recomienda una atención especial a qué y cómo se redacta, evitando frases
contundentes, con doble sentido o que en definitiva puedan ocasionar una interpretación distinta a
la pretendida por el tutor. Especialmente útil es el uso de emoticones (;-)) o de expresiones de
aliento o refuerzo. Capacidad de escucha. Es una cualidad imprescindible para ser un buen
comunicador. Para comprender el mensaje que otro nos transmite hay que realizar una escucha
activa e inteligente. Es decir, hacer saber a la otra persona que “se está escuchando” y que
entendemos lo que dice y lo que no se dice. (Moore,2001)
• Capacidad de empatía. La persona que actúa como tutor virtual debe tener una mentalidad abierta
y capacidad para colocarse al mismo nivel que los alumnos. De este modo, podrá ponerse en la
situación del alumno y comprenderlo mejor, aportándole la ayuda que necesite.
• Accesibilidad. El tutor debe ser accesible a sus alumnos, dando respuesta inmediata, si es posible,
a sus requerimientos. Eso no quiere decir que tenga que estar “a su servicio”, sino que los alumnos
deben saber cómo y cuándo pueden localizar a su tutor si lo necesitan. Esto implica que se
cumplan los horarios de tutorías o los compromisos de respuesta (contestar antes de 24 horas, por
ejemplo).
• Experto en la materia. Es evidente que el tutor debe dominar la materia que tutoriza o imparte. Si
falla este punto de poco sirven las otras habilidades. A veces los materiales de apoyo del curso
pueden facilitar al tutor la documentación necesaria que le permita prepararse adecuadamente.
A esto se une que la curva de motivación pasa por distintas fases. Al principio del curso la motivación
es muy alta pero va descendiendo conforme avanza el mismo, siendo función del tutor el mantenerla en
los niveles apropiados. La motivación del alumno puede estar influenciada por diferentes aspectos del
curso: calidad de los contenidos, relación con los profesores y compañeros, cumplimiento de expectativas,
aburrimiento, frustración, implicación en las actividades propuestas, interés personal por la titulación, etc.
A pesar de que el tutor no pueda controlar todas las variables que ocasionan la desmotivación, debe poner
todo de su parte para controlar la marcha del alumno y evitar que ésta se produzca. Es importante que el
tutor haga un seguimiento individualizado y frecuente de la asistencia de los alumnos, que fomente la
participación en las actividades propuestas, que realice comunicaciones frecuentes con los alumnos o que
refuerce y anime constantemente. (Moore, 2001)
Algunas de las tareas que el tutor puede llevar a cabo con el fin de motivar al alumno son las
siguientes:
➢ Una vez realizada la primera conexión, reforzar con un mensaje de bienvenida y presentación.
➢ Plantear a los participantes una primera pregunta o cuestión que ayude a crear un clima
propicio.
➢ Estimular la participación de los alumnos en los diferentes foros y actividades en el grupo,
pidiéndoles su participación regular y constante.
➢ Proponer actividades o asignar tareas para su realización individual o en grupo.
➢ Realizar preguntas que despierten el interés o inciten a la reflexión.
➢ Pedir un mínimo de conexiones semanales.
➢ Enviar mensajes frecuentes a los alumnos con comentarios, saludos, estímulos, etc.
➢ Llevar a cabo iniciativas que despierten el interés de los
➢ participantes respecto a los contenidos del curso, como por ejemplo proponer problemas para
la resolución o discusión, preparar actividades, etc.
➢ Actuar como animador o coordinador del debate del grupo y estimular la participación de los
usuarios invitándoles, mediante correo electrónico u otros medios, a expresar sus ideas,
retándoles con opiniones desafiantes, etc.
➢ Controlar que no participen o intervengan siempre los mismos, sino favorecer que todos los
alumnos puedan expresar sus opiniones o ideas.
➢ Asegurarse de que el ritmo y grado de dificultad sea el más adecuado en cada momento. Ni
tareas aburridas ni tareas excesivamente complejas que produzcan frustración.
El tutor normalmente es el encargado de elaborar las pruebas evaluación, para lo que suele contar con un
editor de autoevaluaciones. La función de evaluar y calificar las tareas realizadas por los alumnos puede
ser objetiva o cuantitativa, por ejemplo, en el caso de los test o cuestionarios de preguntas cerradas, y
cualitativa, en el caso de casos prácticos, trabajos propuestos, etc.
Una vez finalizadas las actividades o tareas, los tutores procederán a la corrección de las mismas, a partir
de un criterio previamente establecido por los diferentes tutores del curso. Los tutores deben explicar al
alumno tanto los aspectos positivos de sus trabajos como los negativos, plateándole posibles alternativas y
Sugerencias de mejora. Para llevar a cabo la evaluación el tutor deberá:
➢ Medir, a partir de las herramientas que ofrece la plataforma, los datos del proceso de aprendizaje
de los participantes (asistencia y aportaciones): Número y fecha de conexiones, tiempo de
conexión, mensajes enviados, ejercicios realizados, etc.
➢ Elaborar informes de evaluación de rendimiento tanto individuales como colectivos, comparando
el nivel inicial y el final para obtener una medición del progreso realizad, y una comparativa de los
resultados de cada participante respecto a la media de su grupo.
➢ Analizar las valoraciones y comentarios de los alumnos respecto al curso para medir su grado de
satisfacción con el mismo.
El tutor debe saber para qué se corrigen los trabajos, qué es lo que el alumno debe aprender de sus
comentarios, qué papel desempeñan las técnicas de evaluación en el proceso de enseñanza y qué posibles
Consecuencias pueden tener para el alumno las notas o calificaciones obtenidas.
El tutor deberá:
2.4.5 Informar al alumno: El tutor no debe esperar pasivamente a recibir consultas o dudas de los
alumnos sino que debe tener una actitud proactiva, informando a los alumnos de los diferentes aspectos
del curso:
- Objetivos y metodología.
- Vías y uso de los canales de comunicación.
- Normas de uso de los servicios de la plataforma.
- Contenidos o materiales con los que cuentan.
- Actividades a realizar
- Etc.
2.4.6 Planificación y programación de las actividades: En algunas ocasiones el tutor es el encargado de
realizar la planificación y temporalidad de las distintas actividades del curso. Esta tarea se ve reflejada en
el programa del curso y la agenda o calendario o el tablón de anuncios.
Estudiante si lograste llegar a este punto quiere decir que estas a punto
de finalizar este recorrido, ahora te invito a leer detenidamente el
capítulo N°3 herramientas de tutorización.
Recuerda que al final del capítulo debes realizar las actividades para
evaluar el conocimiento.
Sigue adelante
La utilización de una u otra dependerá de diversos factores, pero es función del tutor conocerlas y saber
cómo y con qué objetivos utilizarlas. Hablaremos de las herramientas que habitualmente incorporan las
plataformas, pero conviene recordar que no hay que desaprovechar otros medios de comunicación
convencionales como son el teléfono o los mensajes SMS.
3.2. Asíncronas:
3.2.1 Correo electrónico: es el medio más utilizado
para comunicarse por Internet y por ende para realizar
tutorías. A través del correo electrónico el tutor podrá
contestar a las dudas y cuestiones planteadas por los
alumnos mediante una comunicación escrita. Se
recomienda que el tutor conteste todos los mensajes y
en el menor tiempo posible (24/48 horas). Que redacte
los correos de forma personalizada y con un estilo
amable y respetuoso.
3.2.2 Foro: el foro es un sistema que permite que tanto el alumno como el profesor manden mensajes a
una lista, quedando los mensajes ordenados por “hilos” o temáticas de discusión. El foro se puede utilizar
con distintos propósitos: para contestar dudas o consultas, para realizar dinámicas de grupo, para debatir
casos prácticos, con una finalidad lúdica para hablar sobre temas de actualidad, etc.
Algunas de las ventajas del foro:
3.3. Síncronas
3.3.1 los Chats: las charlas sincrónicas mediante chat son el medio más eficaz y barato de realizar
tutorías a través de Internet. El chat consiste en el intercambio de mensajes (escritos o gráficos) en tiempo
real, con el objetivo de ayudar a la resolución de dudas, problemas, etc. El número de alumnos
participantes no debería ser excesivo para que el proceso de comunicación sea fluido. Es necesario que el
tutor elabore previamente un guion de los contenidos que quiere abordar en la conversación. El tutor debe
dirigir y moderar las intervenciones y los turnos de palabra para conseguir que la tutoría sea eficaz.
Otro problema que presentan las charlas en tiempo real es que en la mayoría de los chat, las
aportaciones desaparecen con la desconexión y no queda un registro de las preguntas y respuestas para su
posterior lectura. Las mayores dificultades para el tutor vienen dadas, en primer lugar, porque dispone de
poco tiempo de respuesta, las respuestas a las consultas o preguntas de los alumnos no puede demorarse y
en segundo lugar, por hacer uso casi exclusivo del lenguaje escrito, que puede ocasionar confusiones o
malos entendidos, si los alumnos lo malinterpretan.
Las razones que explican su uso minoritario en e-learning se deben al coste de los equipos de los
usuarios (multimedia, webcam), al tipo de conexión a la Red (banda ancha) y al propio coste del alquiler o
compra del propio sistema de videoconferencias, que suele ser bastante elevado.
Además, para motivar, es necesario estar motivado. Por lo tanto, aquellos tutores que se vayan a
involucrar en este tipo de formación deberán estar motivados para desempeñar su labor. Parece evidente
pero no siempre el tutor “trasmite” este interés por la materia que imparte o tutoriza. La motivación del
alumno, es por tanto, inherente al propio alumno (quién aprende), condicionada por factores como: la
necesidad personal de formación, interés por la materia, significación personal, expectativas laborales, etc.,
pero también está influida por otros factores del curso.
Principalmente:
El clima que se establece en un curso no depende únicamente del profesor, si no que todos los que forman
parte del curso son indispensables para que el proceso formativo llegue a buen término. No conviene
olvidarlo, especialmente si existe un coordinador académico u otras figuras que tenga interrelación con el
alumno. (Garcia, 2019).
En definitiva, para lograr los objetivos de aprendizaje en la formación online y evitar los problemas de
desmotivación y abandono hay que tener muy presente los aspectos relacionados con la motivación tanto
3.5.1 Foro / Chat: Existen algunas pautas que se deben seguir a la hora de elaborar mensajes, con el
objetivo de que éstos cumplan de la mejor forma su función comunicativa:
- Cuando el tutor envíe su primer mensaje al foro o al chat, deberá presentarse de una forma sencilla y
cercana. Con ello el tutor conseguirá que sus alumnos adquieran confianza desde un primer momento.
- Emplear un lenguaje correcto ortográfica y sintácticamente.
- Usar un lenguaje sencillo, claro y adaptado al que lo recibe.
- Adaptar el “nivel” del mensaje al “nivel” de conocimientos o entendimiento de quién lo recibe.
- Utilizar un tono amistoso, conciliador y flexible en los mensajes.
- Evitar el uso de expresiones coloquiales que pueden dar lugar a malentendidos.
- Siempre deberá enviar mensajes concretos, para profundizar en el tema que se está tratando sin que la
conversación se disperse.
- El tutor tendrá que actuar como mediador procurando evitar posibles enfrentamientos entre los
alumnos que intercambian sus mensajes.
- El tutor deberá incluir en sus mensajes aportaciones y reflexiones propias sobre el tema que se esté
tratando. Pero sus opiniones tendrán que ser flexibles; deben estimular al alumno para que participe,
pero no condicionarlo. No imponer, si en cambio, guiar, convencer.
- Hacer uso de emoticones y expresiones para transmitir la emoción o sentido de las frases.
- No contestar impulsivamente, especialmente en el caso del chat, en el que “no hay vuelta atrás”.
3.5.2 correo electrónico: Con el correo electrónico, a diferencia de las herramientas síncronas, el tutor
tiene tiempo para reflexionar y enviar al alumno respuestas más elaboradas. Las recomendaciones
generales son:
Felicitaciones!
Autorregulación
Responsabilidad. Motivación.
del aprendizaje.
Metas bien
Disposición. Autodisciplina.
definidas
Estrategias de
Estrategias administración de Confianza en sí
metacognitivas. recursos: tiempo y mismo.
espacio.
Creencias de
Autoevaluación. Autocontrol.
autoeficacia.
Son estudiantes
activos.
Son
independientes.
Están altamente
motivados.
Tiene habilidades
para administrar
su tiempo y
organizarse.
Tiene la disciplina
para estudiar sin
recordatorios
externos.
Puede adaptarse a
ambientes de
estudio nuevos.
Estas pueden sonar como las cualidades necesarias para tener éxito en cualquier ambiente de estudio, y, en
realidad, así es. Pero el contexto de la educación a distancia pone presiones especiales sobre los
estudiantes para ser independientes y auto-disciplinados. Si usted está considerando el estudio a distancia
como una opción, puede ser en parte porque usted tiene responsabilidades múltiples. Como probablemente
ya sobrelleva una vida ocupada, usted tiene que estar fuertemente motivado y ser capaz de estructurar su
A decir de García Aretio (2006), lo que conocemos de los alumnos que estudian en modalidades a
distancia es que:
• Suelen ser personas que trabajan y que destinan además un tiempo para estudiar.
• Las preocupaciones de los alumnos a distancia se centran en su trabajo, bienestar familiar,
2 ascenso social y laboral, autoestima, etc
• Parten de una motivación espontánea para el estudio, lo que genera mayores niveles de
atención y trabajo autorregulado.
3 • Expresan mayor preocupación por los resultados obtenidos en sus evaluaciones.
• También suelen presentarse más inseguros en cuanto a las observaciones y críticas de sus
docentes, así como ante los exámenes.
4
• Los alumnos a distancia presentan una mayor responsabilidad sobre sus actos; desarrollan un
sentimiento de culpa ante expectativas no logradas.
5
• Tienen que trabajar cuando los otros descansan; el estudio no es su única obligación.
6
Al alumno se le respeta
Toma decisiones con y se consideran sus
Decide cuándo requiere
respecto a opciones estilos y modos de
ayuda docente.
curriculares. aprendizaje y de
manifestar lo aprendido.
Se pretende que los alumnos sean capaces de planear, organizar, controlar y evaluar sus propios procesos
de formación y los trabajos que ello implica. Todo esto frente a la gran diversidad de situaciones donde es
posible aprender, las acotaciones y limitaciones institucionales sobre las situaciones y modos de aprender,
y las nuevas posibilidades que se abren según avanzan la ciencia y la tecnología (Moreno, 2007).
Algunas características del rol del estudiante virtual que le permiten la generación del conocimiento
están directamente relacionadas con la capacidad de autogestión, expresada en la autodisciplina, el
4.2.2 El rol del estudiante orientado al mejoramiento del auto aprendizaje. Definido según
Rugeles, Mora, Metaute (2013) como la capacidad que desarrolla el individuo para aprender de manera
autónoma, activa y participativa, adquiriendo conocimiento y habilidades y fomentando sus propios
valores, lo que da como resultado la autoformación del sujeto. Es así como el autoaprendizaje le facilita al
estudiante virtual el desarrollo de su capacidad de exigirse a sí mismo, lo que lo involucra en la toma de
decisiones como por ejemplo en la distribución de tiempos, la ubicación de espacios, las fuentes de
consulta entre las cuales se pueden mencionar bases de datos virtuales especializadas tanto libre como
licenciadas, blogs, redes académicas. De igual forma, el auto aprendizaje favorece los ritmos de estudio y
profundización en temas de interés, y lleva al actor a ser autodidacto y auto reflexivo. En el mismo sentido,
Gisbert (1999, 56) asegura que "el uso de la tecnología nos permite desarrollar nuevas formas de
enseñanza y aprendizaje más activas y participativas, a la vez que intuitivas y visuales que favorecen
claramente los procesos de auto aprendizaje".
4.2.3 El rol del estudiante orientado al fortalecimiento del análisis crítico y reflexivo. Definido
por Rugeles, Mora, Metaute, (2013) como la habilidad para razonar, analizar y argumentar hechos o
acciones que facilitan el desarrollo integral del estudiante y la generación de conocimiento. El análisis
crítico y reflexivo busca hacer de la educación un proceso más humanizante desde el punto de vista de la
reivindicación de los actores del proceso educativo (estudiante, facilitador) como sujetos pensantes,
actuantes, creadores y constructores de saberes individuales y sociales. Dicha educación humanizadora
comprende las dimensiones reflexiva y crítica y, a la vez, ética, donde el pensamiento reflexivo (Escobar,
Garcés, 2008) permite la comprensión de lo que aparece en el texto en relación con las experiencias y
vivencias del estudiante, en lo relacionado al pensamiento crítico; para Martínez, Pascual, (2013) es un
proceso cognoscitivo que toma la información, la analiza y está en capacidad de aplicarla en diversos
aspectos de la vida.
Por lo tanto, el análisis crítico y reflexivo, en el estudiante virtual, deberá ser asumido como una
dinámica constante, inmersa en los procesos de enseñanza y aprendizaje, que le permita generar
conocimiento aplicado, que en el marco de concepciones éticas de integralidad del ser, se convierta en
experiencias significativas.
4.2.4. El rol del estudiante orientado al mejoramiento del trabajo colaborativo. Pretende romper
el aislamiento entre los diferentes actores (Rugeles, Mora, Metaute, 2013), permitiendo ver las cualidades
individuales que son compartidas entre pares y facilitadores a través de herramientas como el foro, el
correo electrónico, las salas de conversación, los OVA (objetos virtuales de aprendizaje), el chat y el
almacenamiento en la nube. En este sentido, Castells (2001) afirma que las personas elaboran sus redes
(on line y off line) de acuerdo con sus intereses, valores, afinidades y proyectos, debido a la flexibilidad y
al poder de comunicación de Internet, lo cual es fundamental en los procesos de carácter colaborativo en
los ambientes educativos mediados por las TIC.
Para el estudiante virtual, el trabajo colaborativo es un factor potenciador del verdadero intercambio
de conocimiento, enriquecido con las experiencias del otro, para fortalecer los aprendizajes individuales y
el desarrollo de habilidades comunicativas, así como para el desarrollo de destrezas que le permiten ser
más recursivo, autónomo y proactivos para la toma de decisiones. El estudiante percibe el trabajo
colaborativo como aporte al desarrollo personal, respetando la diferencia y siendo tolerante, pero
estableciendo lineamientos definidos con metas comunes.
De igual forma, el trabajo colaborativo le permite exponer su punto de vista a través de posiciones
críticas que serán fortalecidas por sus pares y facilitadores, con el fin de buscar intercambio de
conocimiento que se pueda poner a disposición de sí mismo y de los demás.
De lo anterior se deduce que el rol del estudiante en los procesos de aprendizaje bajo modalidad
virtual con el apoyo de las TIC lo identifica como un sujeto activo, autogestor de sus procesos de
enseñanza y aprendizaje con alto compromiso de responsabilidad frente al desarrollo de actividades
relacionadas con su formación académica, personal y profesional, con capacidad de optimizar el tiempo y
los recursos a su alcance teniendo en cuenta que, en lo relacionado con las TIC, deberá actualizarse
permanentemente.
El autoaprendizaje es algo que el ser humano, los mamíferos y otros animales poseen en sí mismos y
se pone en evidencia cuando juegan. Jugar, aunque a veces no se tiene presente, tiene la función principal
de aprender nuevas habilidades o mejorar las que ya se poseen. Muchas veces, el autoaprendizaje
comienza jugando, y pasado un tiempo se descubre que se ha aprendido mucho de este modo y que no
sólo sirve para pasárselo bien.
Es el proceso al que se somete un individuo, con el interés de aprender alguna cuestión teórica o
técnica, con la conciencia de que deberá lograrlo poniendo su máximo empeño en ello y de que lo hará por
sus propios medios, en tiempos que él decida. Podemos asumir que el autoaprendizaje, es el alcance de los
conocimientos que adquiere el hombre de forma consciente e individual, utilizando los variados sistemas
alternativos de información para conocer sobre los problemas que rigen en la naturaleza, la sociedad y el
pensamiento.
4.4.2.1 Crítica al autoaprendizaje Hay quienes se oponen al autoaprendizaje porque afirman que no
todas las personas tienen las herramientas necesarias para juzgar si la información que están obteniendo es
fiable o si es objetiva. Por ello, defienden que el aprendizaje debe realizarse guiado a través de ciertos
niveles. El autoaprendizaje es, en sí, un concepto redundante puesto que todo aprendizaje por definición es
realizado por el mismo individuo. El aprendizaje, recordemos, es inherente al individuo que pretende
apropiarse de nuevos conocimientos. Ningún docente puede hacer que el aprendiente aprenda por él, sin
embargo, puede facilitarle la apropiación de conocimientos.
Siendo la autonomía una de las partes fundamentales del proceso de autoaprendizaje, se requiere la
formación de maestros que apoyen el desarrollo de capacidades de reflexión, interpretación,
argumentación y proposición, como competencias fundamentales en el proceso de resolución de
problemas, conflictos y toma de decisiones (Cardona Ossa, 2001). Hoy es imposible manejar innovaciones
pedagógicas que no contengan el concepto de flexibilización curricular, instrucción semiescolarizada,
abierta o a distancia, autoaprendizaje, formación continua y aprendizaje para toda la vida. Con la
educación a distancia se da la transferencia del control del proceso de enseñanza-aprendizaje al individuo;
éste decide qué necesita conocer y luego hace el mejor uso de los recursos de aprendizaje disponibles para
él. Así también, la educación continua cobra importancia y se adecua a los propios deseos y necesidades
del individuo, motivando así su autodesarrollo.(Vargas Hernández, 2000).
Estudiar es realizar actividades que permiten comprender y aprender algo. Como se puede observar,
se mencionan trabajo, esfuerzo y actividades; dicho de otro modo, para aprender hay que hacer un
esfuerzo y realizar ejercicios. El estudio independiente requiere de actividades a realizar de manera
individual con el objetivo de acreditar una asignatura.
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