Está en la página 1de 10

1.

Es importante proceder a diferenciar entre el denominado “format franchising” y


el denominado “business format franchising.

“Lo que distingue al ‘business format franchising’ de la franquicia normal es el hecho de


que en esta última especie la relación entre franquiciante y franquiciado se da
básicamente, en la siguiente manera: el fabricante o distribuidor, titular de la marca,
vende sus productos al comerciante (su revendedor autorizado), el cual simplemente
los revende por un precio más alto. En cambio en las operaciones denominadas de
business format franchising, como ya vimos, el franquiciante enseña al franquiciado las
técnicas o métodos que desenvuelve para comercializar sus productos y sus servicios y
según los cuales el franquiciado deberá desempeñar sus actividades, siempre de
acuerdo con las normas e instrucciones y sujeto a la supervisión y continua asistencia
del franquiciante.
pero con diferentes denominaciones. Es por eso, que se definen aquí solo las
siguientes:

La franquicia de producción es aquella en la cual el franquiciante autoriza al


franquiciado para que conforme a sus indicaciones, fabrique el correspondiente
producto, proporcionándole la asistencia técnica, la marca y en algunos casos los
materiales utilizados.

La franquicia de distribución es aquella en la cual el franquiciante, quien puede ser o


no, el productor de los bienes, los coloca en el mercado para ser distribuidos a través
de su franquiciado.

La franquicia industrial es aquella en la cual el franquiciante es titular de una marca,


procedimientos de fabricación o fórmulas secretas y cede al franquiciado dichos
elementos para el desarrollo del negocio en una zona determinada.

La franquicia de servicios es aquella en la cual el objeto de la franquicia no es un


producto, sino un servicio o conjunto de servicios, o métodos de ejecución de servicios.

La plurifranquicia es aquella en la cual el franquiciado adquiere varias franquicias de


distinta naturaleza y que no compiten entre sí.

La multifranquicia es aquella en la cual el franquiciado adquiere varias franquicias del


mismo franquiciador.
7. FUNCIÓN ECONÓMICA

Las redes franquiciadas adquieren gran relevancia en el ámbito económico de los


participantes y de los países en los cuales se ubican.

El franquiciante no se ve obligado a realizar una inversión para una filial, toda vez que
para su expansión aprovecha la actividad de los franquiciados.

Esta figura es una solución que permite mantener las pequeñas y medianas empresas,
evitando su sustitución por filiales o sucursales.

Este método permite la revalorización de la marca de distribución –u otros derechos de


propiedad intelectual al encontrarse presente en diversas zonas geográficas.

Se eleva la calidad de los bienes y los servicios, todo lo cual redunda en un beneficio
para los consumidores. 13

Constituye un mecanismo de creación de empleos, especialmente en países donde


escasea la inversión y las empresas no se expanden.

8. VENTAJAS PARA EL FRANQUICIANTE

Asegura la mayor expansión de su negocio en distintas zonas geográficas sin tener


que incurrir en gastos significativos de su parte.

. Controla la distribución de los bienes o servicios.


. Mantiene una Imagen comercial
homogénea.

5. No mantiene una relación laboral con el franquiciado y con los empleados del
franquiciado, pues franquiciante y franquiciado son personas independientes.

6. Se vale del esfuerzo de empresarios motivados que adquieren la franquicia.

9. DESVENTAJAS PARA EL FRANQUICIANTE

Si bien debe controlar las actividades del franquiciado, esta facultad puede ser
dificultada por las distancias geográficas.

Posibilidad de que un establecimiento perteneciente a un franquiciado no obtenga la


rentabilidad esperada.

Corre con el riesgo de que el franquiciado sea un futuro competidor.

La mala gestión por parte del franquiciado influye en el éxito o fracaso de la franquicia.
10. VENTAJAS PARA EL FRANQUICIADO

Se vale del uso de una marca conocida y exitosa en el mercado, lo que disminuye el
riesgo se iniciar un negocio.
No debe hacer inversión en investigación de mercados o técnicas.

Cuenta con la asistencia y el soporte técnico del franquiciante.

Se vale de la publicidad y el mercadeo que realice el franquiciante.

11. DESVENTAJAS PARA EL FRANQUICIADO

1. Pérdida de autonomía al deber someterse a las instrucciones y controles continuos


por parte del franquiciante.

2. Debe repartir sus beneficios con el franquiciante, pues debe cancelarle no solo un
monto por adquirir la franquicia, sino también un monto correspondiente a una porción
predeterminada de sus ingresos.

3. Debe asimismo, cancelar un monto por el uso de signos distintivos.

12. De manera que, los autores coinciden en que las características del contrato de
franquicia son las siguientes

Es consensual, autónomo, bilateral, oneroso y principal.


Es de cooperación: es decir, el franquiciado requiere de la colaboración constante del
franquiciante para funcionar. Esta característica lo distingue del contrato de
distribución.

Independencia de las partes: cada participante en la franquicia cuenta con


independencia jurídica y financiera.

Es uniforme: normalmente son contratos uniformes, cuyo contenido es constante.

6. Autonomía: no existe dependencia laboral entre franquiciante y franquiciado.

En conclusión, el contrato de franquicia constituye una estrategia de comercialización


de bienes y servicios, que otorga importantes oportunidades de crecimiento a las
empresas pequeñas y medianas, y, una opción interesante de expansión en el
mercado, incluso en el ámbito internacional..

1. DEPÓSITO MERCANTIL

Regulado por el Código de Comercio. Es aquel por medio del cual una persona llamada
depositante, entrega una cosa a otra llamada depositario, para su guarda y custodia, quien
adquiere la obligación de devolverla dentro del plazo establecido. Por regla general, el depósito
mercantil es oneroso.

2. REQUISITO PARA QUE SEA DEPÓSITO MERCANTIL:


1. Que al menos uno de los sujetos sea comerciante “hecho de dedicarse
profesionalmente a recibir depósitos”, el servicio de depósito es una actividad
mercantil. (Art. 5 del Código de Comercio)
2. Que las cosas depositadas sean objeto de comercio
3. Que el depósito constituya una operación mercantil.

3. ELEMENTOS:

1. Personales: Al menos uno de ellos debe ser comerciante.


a. Depositante: entrega el bien y debe retribuir al depositario.
b. Depositario: recibe el bien para su guarda y custodia y debe restituirlo en el plazo
determinado.
2. Reales:
a. Objeto: cosas que se encuentren dentro del comercio, fungibles o no fungibles.
b. Precio: retribución que debe pagar el depositante al depositario.

3. Formales:
Varía según la naturaleza y organización empresarial del sujeto depositario. Puede ser
que se formalice mediante simple acuerdo verbal, por un contrato de adhesión; y por
escrito, como en el caso del depósito bancario o el que se hace en los almacenes
generales de depósito.

4. CARACTERÍSTICAS:

1. Contrato de conservación y custodia – se asume la misma


2. Es un contrato real ya que se perfecciona con entrega
3. Bilateral, intervienen dos partes
4. Oneroso, el depositario es retribuido por la conservación de la cosa
5. Conmutativo
6. Principal o accesorio
7. Intuito personae (confianza en el depositario).
5. MODALIDADES:

Clases de depósito:

1- Por la retribución:
- Retribuido: casi en todos los casos
- Gratuito: en casos excepcionales (pacto entre las partes).

2- Por su objeto:
- De dinero
- De títulos valores
- De mercancías en general

3- Por la forma de constituirse los depósitos de numerario:


- Con o sin especificación de monedas
- Abiertos y cerrados o sellados

4- Por las obligaciones del depositario:


- Simple
- Administrado, cuando se trata de títulos valores o documentos que devenguen intereses.

5- Según su contenido:
- Regular: su contenido típico es conservar la cosa y devolverla con sus aumentos al depositante,
la restitución pone fin al contrato. La responsabilidad del depositario en cuanto a la
conservación de la cosa es amplia, ya que por la retribución que recibe debe tener especial
cuidado en asegurar la misma, será responsable por los daños causados por dolo, culpa o
negligencia, así como por los causados por la naturaleza o vicio de las cosas. En el caso de
depósito de dinero ya sea con especificación del numerario o se entreguen sellados.
- Irregular: Cuando el depositario hace suya la cosa recibida, limitándose su obligación a
devolver una cantidad igual. Esto surge en el depósito de cosas fungibles, el depositario
adquiere su propiedad y puede consumirlas, devolviendo al final otras de la misma especie y
calidad.

Un caso especial es aquél en que se entregan cosas consumibles que pueden identificarse o
individualizarse, como, por ejemplo, cuando se entrega dinero dentro de un sobre cerrado. En
este supuesto el depósito se considerará regular, debiendo el depositario devolver la misma cosa
que se le entregó. Los riesgos de dicho depósito corren a cargo del depositario, siendo de su
cuenta los daños que sufran, si no prueba que fueron por fuerza mayor o caso fortuito.

6. OBLIGACIONES DE LOS CONTRATANTES:

La responsabilidad del depositario. El derecho de retención del depositario.

La obligación fundamental del depositario es la de custodiar la cosa y devolverla en su momento.


Así, para el artículo 523 del Código de Comercio “El depositario está obligado a conservar la
cosa objeto del depósito en el estado en que la reciba, con los aumentos si los tuviere.” Ésta
obligación distingue al depósito de otros contratos donde puede existir el mismo deber pero
como accesorio de la obligación principal (p ej. comisión hospedaje,...)
Es un contrato por esencia remunerado, salvo pacto en contrario, así si no se pacta la
remuneración ésta se determinará conforme a los usos de la plaza en el que el depósito se hubiere
constituido, (art. 522 Código de Comercio)
Así para el depositante la obligación fundamental es la remuneración al depositario y también la
de reembolsar al depositario las gastos que éste hubiera realizado para la conservación de la cosa,
así como indemnizarle los perjuicios que el depósito la hubiere irrogado.
En cuanto a la responsabilidad del depositario el artículo 523 del Código de Comercio establece
que: “en la conservación del depósito responderá el depositario de los menoscabos, daños y
perjuicios que la cosa depositada sufrieren por culpa, dolo o negligencia suya o de sus empleados
o encargados.”
CONCLUSIÓN

Una vez analizada la figura del depósito, que corresponde al tema central de este trabajo, y
concebido éste como el contrato por medio del cual una persona entrega una cosa a otra, para que
ésta la conserve en su poder, y se la restituya cuando aquella así lo requiera. Esta es la idea
general de que es un depósito en materia de derecho.

Podemos reconocer que la causa especifica del contrato de depósito nos indica que la principal
obligación del depositario es la de guardar o custodiar la cosa que se le entregó. La obligación de
guarda y de custodia consiste en una obligación de hacer que el depositario asuma frente al
depositante, y se sustancia en la conservación de la cosa, en el mantenimiento de la misma en la
forma que tenga y en su preservación de los posibles daños. Dicha obligación de custodia entraña
un deber de diligencia y a la vez una responsabilidad por las perdidas y menoscabos. Quien
recibe un depósito está obligado a emplear en su guarda y conservación el cuidado y diligencia
que acostumbra respecto de sus propios bienes, la omisión de ese deber apareja condenación en
daños y perjuicios, ya que revela un descuido por parte del guardador.

Procuramos analizar de una manera adecuada cada uno de los diferentes contratos de depósito, y
si bien es cierto por definición mientras el contrato de depósito civil es naturalmente gratuito, el
depósito mercantil es remunerado, ya que el depositante debe pagar una suma al depositario
como contraprestación por el servicio prestado. En el caso del bancario, el depósito es para los
bancos la operación pasiva por excelencia, porque a la vez es su principal fuente de captación.

Siguiendo esta línea, y a diferencia de lo que sucede con los llamados depósitos irregulares, en el
depósito clásico el depositario es un mero tenedor por cuenta y en nombre del depositante. Como
consecuencia debe devolver los bienes recibidos en el mismo estado y aun con los frutos o
productos que los hayan enriquecido durante el lapso del depósito.
El préstamo mercantil

También podría gustarte