Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Es aquella persona que interpone y qué Es aquella persona contra quién se le propone
propone la demanda, es así que, con la e interpone la demanda, es así que, después
presentación de la demanda por parte del actor de ser presentada la demanda y de ser
se da inicio al desarrollo del proceso. calificada esta de ser notificada al demandado
para que pueda hacer ejercicio de su derecho
de defensa.
VI. CONCLUSION
Se concluye qué a ningún sujeto de derecho se le puede privar de ser parte
demandante o parte demandada de un proceso. Es así que se destaca que la
capacidad con la que deben contar las partes del proceso constituye un presupuesto
procesal más del proceso esto quiere decir que la capacidad con la que deben contar
las partes de un proceso se diferencia la capacidad para ser parte del proceso y la
capacidad procesal. Por lo tanto, refiriéndonos a la legitimidad para obrar está
constituye una condición de la acción sería más bien un requisito para un
pronunciamiento sobre el fondo.
ANALISIS DE LA LECTURA
Haciendo un análisis de la lectura podemos concluir que la autora Beatriz Franciskovic
realiza un análisis de manera detallada de los conceptos referentes entre los alcances
de la capacidad procesal o mala representación procesal y la legitimidad para obrar
todo con el fin de poder esclarecer sus principales diferencias que entorno o existen
entre estos, eso sí que nos vemos dar cuenta que dentro de la lectura destaca mucho
la posición tanto del demandante como del demandado. Ella refiere que la calidad de
parte demandante o parte demandada las pueden asumir las mismas personas que
intervienen en dicho conflicto o también pueden realizarlo a través de sus
representantes legales es decir sus abogados. También destaca la capacidad jurídica
de goce referente al derecho civil ya que cómo se conoce cada parte dentro de dicho
proceso tiene que contar con dicha capacidad. Por lo que podemos deducir que está
capacidad procesal es equivalente a la capacidad que conocemos como de ejercicio o
de obrar de nuestro derecho sustantivo entonces está capacidad procesal y a
corroborar dicha relación mediante la representación voluntaria del demandante o
demandado a favor de su abogado o abogada. Cabe destacar que ninguna persona
sujeto de derecho puede ser privada de ser parte del proceso sea siendo demandante
o demandado. Por ello tocando otro punto dentro de nuestro análisis que destaca
dicha autora se refiere a la legitimidad para obrar está como bien se sabe se subdivide
en la legitimidad para obrar ordinaria y legitimidad para obrar extraordinaria Claro que
se debe tener en cuenta que legitimidad para obrar en cierta manera no cuenta con
una relación referente a la figura de la representación y referente a la capacidad que
se ha mencionado anteriormente. Finalmente, para dar cierre a estos puntos
sustanciales dentro de la lectura podemos acotar que lo que se buscó desde un inicio
es dejar en claro todas aquellas diferencias que existen o han existido entre dichas
instituciones procesales para que de esta manera se puedan evitar interponer
aclaraciones o correcciones en unidades al desarrollo del proceso, así como para
evitar una mala defensa por parte de los abogados a sus clientes.