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Para este trabajo he escogido realizar el análisis sobre una situación de la vida cotidiana actual.

Coloco como marco teórico referencial al psicoanálisis, y específicamente al Narcisismo

desarrollado por Freud en su capítulo “Introducción al Narcisismo”, el cual me viene
facilitando la percepción, el análisis y la comprensión de la realidad desde una óptica que
anteriormente no la había considerado. Por lo tanto me viene abriendo puertas de entendimiento
gratamente sorprendentes.

Siento en este proceso de formación integral – como psicoanalista -, movilizaciones de las que
gradualmente me voy haciendo cargo y solo espero que no me falte tiempo y recursos para
poder aprovechar todos los descubrimientos que el psicoanálisis me facilita. Tengo comprobado
que existe un tiempo de construcción anterior y de reconstrucción posterior a la formación.

Este segundo tiempo se rige por otros principios, antes desconocidos - o bien poco utilizados -
que opera: deshaciendo, desechando y reconstruyendo una realidad intrapsiquica, pero esta vez
bajo el principio de realidad que es enemigo del placer inmediato y que a su vez promete la
máxima gratificación si uno le da el tiempo suficiente y necesario para que trabaje.

Ahora bien, recalculando hacia el punto de inicio…Invito a cada uno de los presentes – o
lectores – a seguir mi recorrido.

Me detengo a observar la realidad, elijo un punto para mi observación y escojola captación y

representación instantánea de la imagen en forma digital y envío masivo e instantáneo de la
información digital. Luego me centro en las redes sociales, puntualmente Facebook, e intento
analizar aquí el intercambio que emerge a partir de la tecnología.

Ahora traigo a la mente la mitología griega de Narciso y recuerdo que..Según cuenta la historia
se trataba de un bello personaje que despertaba el amor y la pasión de muchos hombres y
mujeres. Sin embargo él era indiferente a tales sentimientos. Un día… vio su imagen reflejada
en el agua y quedo enamorado de ella. Narciso se esforzó por atraparla y poseerla hasta que
absorto en la contemplación de la misma, murió consumido sin antes descubrir que la imagen
pertenecía al reflejo de sí mismo en el agua.

Con estas representaciones(la de Narciso, el Narcisismo de Freud) hago uso de la atención

libremente flotante para captar lo que en el Facebook se quiere contar y desde aquí propongo
que juntos intentemos una interpretación analítica del juego que se juega (despliega) en este
escenario “virtual” y “social”.

Es decir que con este trabajo quiero pensar analíticamente con ustedes, partiendo de mis
percepciones, las cuales me llevaron a pensar que hoy, ya lejos de los tiempos de la mitología
griega, nos seguimos encontrando todos los días con Narciso, peroen su versión siglo
XXI:personajes de nuestra cotidianeidad, de “apariencia normal”, que “funcionan” y “se
fusionan” aparentemente “con el otro”“en forma normal”.

Las comillas en estas palabras son para resaltar los cuestionamientos que me fueron sucediendo
al observar y analizar la dinámica e interacción entre los amigos del Facebook. Comparto con
ustedes mi recorrido, que quisiera enriquecerlo ahora que ustedes piensan conmigo.

Para muchos, hoy es una práctica necesaria, habitual ycotidianacompartir imágenes digitales
personales tomadas desde diferentes ángulos y posiciones, así como también facilitar
información sobre todas las acciones y pensamientosconsientes.
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“En casa antes de dormir”

“Con mi Totito”

“En el restó con mi amor”

Selfy (en el baño, en el auto, en la cama, etc.)

Si decidimos tomar como referencia al psicoanálisis no dudamos un instante de que existe un

mensaje consciente y otro latente. Entonces; ¿que nos quieren contar estos mensajes?.

Propongotratar de seguir los pasos de la observación y el análisis para construir una respuesta
que vaya más allá de lo que compulsivamente en una “selfy” se repite y se muestra.

Entonces sigamos observando… encuentro que después de una imagen se suceden infinidad de
mensajes entre varios personajes.

Solo para ejemplificar este escenario de la realidad tomo una parte de esta “interacción” (¿?)
que encuentro repetirse muy frecuentemente luego de que Narciso haya posteado su selfy:
“Hay que linda ami..”

“Gracias ami..”

“Estas cada vez más bonita”

“Fiu, Fiu... hace mucho no te veo… que linda estas, tenemos que encontrarnos!!

“Gracias, siempre vos tan atento. Igualmente”

Aquí creo que es muy probable que todos podamos ponernos de acuerdo al decir que en el plano
de lo conscientemente observable y superficial (lo agrego yo)la lectura de los comentarios
refleja una conversación de ida y de vuelta pero creen ustedes que… ¿es esta una interacción?
y/o… ¿qué clase de interacción?.

Al avanzar un poco más en el análisis para responder a estas interrogantes, voy en busca del
contenido a comunicar y me surgen nuevamente otras interrogantes: ¿Qué se comunica en esta
clase de mensajes?;¿Qué nos cuenta Narciso cuando postea su selfy?.

Y como en apariencia se trata de un intercambio, encuentro que hay otro que responde, pero…
¿Qué nos cuentan, estos hombres y mujeres, cuando responden a la imagen de Narciso?

Y cuando estos sujetos responden: ¿Serán todas estas expresiones y alabanzas al ego el
auténtico reflejo del pensamiento y del sentimiento?; ¿qué pasa con el tenemos que
encontrarnos?,¿se continuará la respuesta en la espera de lo privado ó quedará en el plano
histérico?, ¿serán cumplidos que obedecen a las reglas de la convivencia y el formalismo?.

Me viene a la mente Eco, la diosa griega, enamorada de Narciso. ¿De qué y de quien se
enamoró Eco?.

Sigo mirando las comunicaciones en las redes sociales…

Ahora me encuentrocon grandes profesionales de ámbito nacional, con grandes medallas de oro
y posgrados y especializaciones, y ere…erea...,pero que aquí…, en este espacio virtual y en las
redes sociales en particular, presentan problemas de comprensión y me surge la duda: ¿Quién
está conversando acá?;¿Qué clase de conversación es esta?.
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En ese momento caigo en cuentas de que en esta larga serie de mensajes existen infinitos
contenidos e ideas que se van en forma paralela y que en el devenir y en el contexto virtual
parecen un intercambioque tal vez correspondería más a varios monólogos.

Entonces me cuestiono: ¿Habrá existido un otro en esta conversación?;¿Dónde estaba el

otro?.

Si me quedo con la idea del monólogo creo distinguir que este supuesto intercambio de
comunicaciones correspondería mejor a un montón de descargassin un objeto real que las
reciba, contenga y devuelva. Siento que devuelta estoy con Narciso y su autoerotismo.

Otro hito altamente normalizado en el espectro de comunicaciones de las redes sociales es la

exposición de los hijos en sus diferentes facetas y actividades. Y pobre hijo si además ha nacido
con un rostro privilegiado, con ojos de colores llamativos o cabello rubio.

Me pregunto:¿Qué representa el hijo?; o tal vez ¿a quién se representa en el hijo?.

Estas preguntas van adquiriendo respuestas cuando observo el movimiento en el cual los hijos
son expuestos ante las masas como estatuillas galardonadas para recibir gratificaciones por los
logros personales obtenidos.
“Amor de mi vida, pedacito de mi corazón hoy que cumples un año de vida quiero decirte que te deseo todo lo más lindo del mundo
y que le pido a papacito Dios que colme tu vida de bendiciones y que seas muy feliz. Gracias mi vida por hacerme cada día más
feliz. Lo mejor que me paso es ser tu mamita”

“Mi bebe en su primer día de clases. Que grande que estas mi amor.”

El hijo de un año,¿sabrá leer?

Para mi estos posteos reflejan que estos padres han quedado fijados al hijo. Y ahora respondo a
lo que representa el hijo: al buen padre/madre que lo hizo y que se realiza en el hijo. El hijo no
deja de ser otra cosa que uno mismo en el hijo. Vuelvo a Narciso y porque no a Eco también.

Seguimos un poco más… y ahora creo distinguir que dentro de este espacio de las redes el
colectivo socialparece haber instaurado una modalidad de comunicación, en el cual luego de
recibir y ver un mensaje – posteo - se debe responder en forma inmediata y preferentemente con
una expresión de admiración y alabanza. Caso contrario el emisor se sentirá ofuscado, ofendido,
desilusionado y hasta no querido.

Me viene a la mente aquí “Su majestad el Rey” que sigue operando con fuerza como si fuera en
sus primeros días.
“¡Buen día gente linda!” (8:30 hs)

“¡Hola!!!!!!” (8:45 hs)

“Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa” (8:50 hs)

Y como si fuera poco… la agresión tampoco puede estar ausente en este espacio, como en
ningún otro espacio y mucho menos cuando de relación se trata. Aquí distingo algunas
manifestaciones en apariencia sutil, como por ejemplo, los comentarios sobre la receptividad del
emisor luego de varias horas de haber emitido el mensaje –posteado - y no haber obtenido
ninguna respuesta gratificante.
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“cri..cri..”

“ja..ja… nadie te respondió”

En este espacio de las redes sociales y del espacio virtual parece ser que la esfera de lo privado
se ha convertido en la esfera de lo público. Teniendo en cuenta la represión psíquica, pareciera
ser que cuando media lo virtual se carece de barreras o las mismas están muy difusas.

Décadas atrás para hablar con nuestros muertos, lo hacíamos en silencio y en el cementerio.
Hoy se le etiqueta un posteo. ¿Será que en el cielo también hay Facebook?;el Facebook, ¿la
muerte también es virtual?. El sujeto es su perfil. Tal vez, en este espacio virtual, todos
tenemos permitido desplegar algo más que nuestro infantilismo.

También observo como la gente es capaz de compartir acontecimientos y situaciones tan

vinculadas con la vida íntima y me pregunto ¿qué habrá pasado con la vergüenza, el asco y la
moral?; ¿Habrá un doble personaje que postea y chatea en las redes sociales?.

Hoy es frecuente y natural encontrarse frente a un despliegue de exhibicionismo - por supuesto

que de voyeurismo, de actividad y su contraparte pasividad también - manifestadas por
personajes que no lo harían si no estuvieran dentro del espacio virtual. Entonces me pregunto:
¿Dónde se coloca al objeto dentro de este espacio virtual?, ¿Dónde quedó la moral (dique)
y el Súper Yo dentro de este espacio?;¿Cómo es posible funcionar de maneras tan
diferentes según medie la realidad virtual o presencial?; ¿Qué es el espacio virtual?; ¿Qué
leyes operan en él?

Y por último… ¿Qué clase de YO es más susceptible de quedar fijado en este tipo relación
virtual?

Como reflexiones para continuar con el análisis y el debate del resto del grupo y en uso de mi
condición de exponente coloco las siguientes ideas iniciales:

A fines del siglo XX todo el avance de la tecnología ha instalado una nueva filosofía de vida
que se asemeja en muchos aspectos al proceso primario: no tiene espacio, no tiene tiempo, no
sigue una lógica aparente, lo posible y lo real no están enmarcado dentro del principio de
realidad si no que opera bajo el principio de placer. Este nuevo escenario tecnológico facilitado
a través de la internet sustituye una realidad concreta y objetiva por otra virtual. Diferente
también a la fantasía.

No podríamos negar tampoco que gracias a todos estos avances actualmente se vienen
instalando nuevas posibilidades de relacionamiento que anteriormente eran utopías.

Encontrar dentro de las redes sociales manifestaciones que fuera del espacio virtual no hubieran
sido realizadas, me lleva a pensar que este avance tecnológico también viene desplegando
novedosas formas de expresar “Eros” y “Thanatos”; la libido y la agresividad.

Creo también que todas esas observaciones que hemos seguido pueden ser muy bien vistas y
consideradas como expresiones narcisitas y el Facebook es un espacio privilegiado para
despertarlas, expresarlas, alimentarlas y contenerlas. Porque es un espacio en donde el otro es
borrado del plano real y colocado en un plano virtual, entonces es socialmente aceptado que el
otro no está pero está (está su perfil – aunque ya esté muerto). Para mí esto se confirma cuando
el otro responde, haciendo eco del autoerotismo.
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Parece ser que en las redes sociales, muchos se mueven entre el autoerotismo y la relación de
objeto.

También creo que este espacio virtual es el lugar privilegiado para albergar una débil
estructuración yoica de personajes que se esconden virtualmente tras permanentes
manifestaciones cargadas de grandiosidad, vanidad, soberbia, idealización y omnipotencia
queriendo de alguna forma controlar mágicamente el tiempo, el espacio y al otro, pero que en su
parte más desconocida, oculta e inconsciente se encuentra un gran vacío y una intensa necesidad
de reconocimiento.

En esta forma de relacionamiento virtual, donde el otro también es virtual (como la imagen de
narciso en el agua) lo podría asemejar con otras manifestaciones como ser: compulsiones,
adicciones, trastornos alimentarios, graves perturbaciones de la sexualidad, sentimientos de
vacío, falta de continuidad existencial, y una general falta de interés por el mundo circundante y
podríamos asociarlas a las nuevas formas en que se manifiestan y expresan las patologías
actuales.

Porque no pensar también que las selfys y posteos pueden estar siendo expresiones actuales de
una segunda piel.