Está en la página 1de 7

Hijos del Padre

Isa 63:15 Mira desde el cielo, y contempla desde tu santa y gloriosa


morada. ¿Dónde está tu celo, y tu poder, la conmoción de tus
entrañas y tus piedades para conmigo? ¿Se han estrechado?
Isa 63:16 Pero tú eres nuestro padre, si bien Abraham nos ignora, e
Israel no nos conoce; tú, oh Jehová, eres nuestro padre; nuestro
Redentor perpetuo es tu nombre.

Isa 64:8 Ahora pues, Jehová, tú eres nuestro padre; nosotros barro, y
tú el que nos formaste; así que obra de tus manos somos todos
nosotros.
Isa 64:9 No te enojes sobremanera, Jehová, ni tengas perpetua
memoria de la iniquidad; he aquí, mira ahora, pueblo tuyo somos
todos nosotros.

Nuestro Padre

En primer lugar, el que llama padre a Dios se siente obligado a la obediencia,

Este deber de obediencia para con el Padre celestial llega hasta el martirio.

Solamente el que practica semejante obediencia puede estar seguro de que Dios es para él
un padre.

Dios es el Padre celestial de Israel y el individuo se siente miembro de ese pueblo


primogénito de. Dios
si la comunidad en sus oraciones llamaba a Dios «Padre nuestro, rey nuestro» y si a veces
un individuo habla de Dios como de su Padre celestial, no se ha encontrado hasta ahora en
la literatura del judaísmo palestiniano antiguo ningún testimonio de la invocación personal
«Padre mio».

La primera cita en Mateo:

Mat 5:16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que
vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está
en los cielos.(K)

«Padre mío [que estás] en los cielos», en hebreo: abf she-ba-shamayfm

ábínu she-ba- shámayím (Padre nuestro [que está] en el cielo);

La primera cita de Marcos:

Mar_8:38 Porque el que se avergonzare de mí y de mis palabras en


esta generación adúltera y pecadora, el Hijo del Hombre se
avergonzará también de él, cuando venga en la gloria de su Padre
con los santos ángeles.

Mar_11:25 Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra


alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os
perdone a vosotros vuestras ofensas.
Mar_11:26 Porque si vosotros no perdonáis, tampoco vuestro Padre
que está en los cielos os perdonará vuestras ofensas.(F)

Mar_14:36 Y decía: Abba, Padre, todas las cosas son posibles para ti;
aparta de mí esta copa; mas no lo que yo quiero, sino lo que tú.

Primera cita de Lucas:


Luc_2:49 Entonces él les dijo: ¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais
que en los negocios de mi Padre me es necesario estar?

Luc_10:21 En aquella misma hora Jesús se regocijó en el Espíritu, y


dijo: Yo te alabo, oh Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque
escondiste estas cosas de los sabios y entendidos, y las has revelado
a los niños. Sí, Padre, porque así te agradó.
Luc_10:22 Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre;(L) y
nadie conoce quién es el Hijo sino el Padre; ni quién es el Padre, sino
el Hijo,(M) y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar.

Luc_11:2 Y les dijo: Cuando oréis, decid: Padre nuestro que estás en
los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu
voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.
Luc_11:11 ¿Qué padre de vosotros, si su hijo le pide pan, le dará una
piedra? ¿o si pescado, en lugar de pescado, le dará una serpiente?
Luc_11:13 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas
a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu
Santo a los que se lo pidan?

Luc_12:30 Porque todas estas cosas buscan las gentes del mundo;
pero vuestro Padre sabe que tenéis necesidad de estas cosas.
Luc_12:32 No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le
ha placido daros el reino.

El Prodigo
Luc_15:17 Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi
padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre!
Luc_15:18 Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado
contra el cielo y contra ti.
Luc_15:20 Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba
lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó
sobre su cuello, y le besó.

Juan:

Jua_1:14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y


vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia
y de verdad.
Jua_1:18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el
seno del Padre, él le ha dado a conocer.

Jesus:

Jua_2:16 y dijo a los que vendían palomas: Quitad de aquí esto, y no


hagáis de la casa de mi Padre casa de mercado.

Mat 5:16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que
vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está
en los cielos.(K)

El propósito de la Revelación del Padre:

Jua 14:1 No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también


en mí.
Jua 14:2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no
fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para
vosotros.
Jua 14:3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os
tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también
estéis.
Jua 14:4 Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino.
Jua 14:5 Le dijo Tomás: Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo,
pues, podemos saber el camino?
Jua 14:6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie
viene al Padre, sino por mí.
Jua 14:7 Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde
ahora le conocéis, y le habéis visto.
Jua 14:8 Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta.
Jua 14:9 Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y
no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al
Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?
Jua 14:10 ¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las
palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que
el Padre que mora en mí, él hace las obras.
Jua 14:11 Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra
manera, creedme por las mismas obras.
Jua 14:12 De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras
que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy
al Padre.
Jua 14:13 Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré,
para que el Padre sea glorificado en el Hijo.
Jua 14:14 Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.
Jua 14:15 Si me amáis, guardad mis mandamientos.
Jua 14:16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que
esté con vosotros para siempre:
Jua 14:17 el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir,
porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora
con vosotros, y estará en vosotros.
Jua 14:18 No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.
Jua 14:19 Todavía un poco, y el mundo no me verá más; pero
vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis.
Jua 14:20 En aquel día vosotros conoceréis que yo estoy en mi Padre,
y vosotros en mí, y yo en vosotros.
Jua 14:21 El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que
me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y
me manifestaré a él.
Jua 14:22 Le dijo Judas (no el Iscariote): Señor, ¿cómo es que te
manifestarás a nosotros, y no al mundo?
Jua 14:23 Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra
guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada
con él.
Jua 14:24 El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra
que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.
Jua 14:25 Os he dicho estas cosas estando con vosotros.
Jua 14:26 Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre
enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará
todo lo que yo os he dicho.
Jua 14:27 La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el
mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
Jua 14:28 Habéis oído que yo os he dicho: Voy, y vengo a vosotros. Si
me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al
Padre; porque el Padre mayor es que yo.
Jua 14:29 Y ahora os lo he dicho antes que suceda, para que cuando
suceda, creáis.
Jua 14:30 No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el
príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí.
Jua 14:31 Mas para que el mundo conozca que amo al Padre, y como
el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vamos de aquí.
Rom 8:15 Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar
otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción,
por el cual clamamos: ¡Abba, Padre!

También podría gustarte