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LICENCIATURA EN CRIMINOLOGÍA Y CRIMINALÍSTICA

ANTROPOLOGIA FORENSE

UNIDAD IV: CRANEOLOGIA Y OSTEOLOGIA


ASESOR:
CECILIA DEL C. TORT ESPINOSA

APRENDIENTE:
DORIAN VARGAS GÓMEZ

IV CUATRIMESTRE
4.1.- SUTURAS CRANEALES
Una sutura del cráneo es un tipo de articulación fibrosa que se da únicamente en los huesos
de la cabeza. Están unidas por medio de fibras de Sharpey. Las suturas permiten una ligera
cantidad de movimiento, que contribuye a la compliancia y elasticidad del cráneo.

Estas articulaciones son sinartrosis.


Lo habitual es que varios de los huesos del cráneo permanezcan sin soldar en el momento de
nacer. El término "fontanelas" se utiliza para denominar los "puntos blandos" resultantes. La
fusión de los huesos del cráneo en el nacimiento se llama craneosinostosis. Las posiciones
relativas de los huesos siguen cambiando durante la vida adulta (aunque muchísimo más
despacio), lo que puede proporcionar información útil a la medicina forense y la arqueología.
A una edad avanzada las suturas del cráneo pueden osificarse (convertirse en hueso)
completamente.
La articulación temporomandibular, -articulación entre la mandíbula y el cráneo- es la única
articulación de los huesos de la cabeza que no es una sutura.
Las fibras de Sharpey, fibras del hueso o fibras perforantes son una matriz de tejido conectivo
que consiste en haces de fibras de colágeno conectadas muy fuertemente al periostio del
hueso. Son parte de la capa fibrosa exterior del periostio, entrando en las laminillas
circunferenciales e intersticiales exteriores del tejido óseo. Las fibras de Sharpey también se
utilizan para unir el músculo al periostio del hueso mediante la fusión con el periostio fibroso
y el hueso subyacente.
Sinartrosis es un tipo de articulación que, en la última etapa de su desarrollo, no presenta
movimiento

Visibles principalmente desde los lados (norma lateralis)


Suturas craneales en el recién nacido
Sutura coronal - une los huesos frontal y parietal
Sutura lambdoidea - une los huesos parietal y occipital y continúa con la sutura
occipitomastoidea
Sutura occipitomastoidea - entre los huesos occipital y temporal, continúa con la sutura
lamboidea
Sutura parietomastoidea

Sutura esfenofrontal
Sutura esfenoparietal
Sutura esfeno-escamosa
Sutura esfenocigomática
Sutura escamosa - une los huesos parietal y temporal
Sutura temporocigomática
Sutura frontocigomática.

Visibles principalmente de frente (norma frontalis) o desde arriba (norma verticalis)


Sutura frontal / Sutura metópica - entre los dos huesos frontales, antes de constituir un único
hueso.
Sutura sagital - en la línea central que divide los dos huesos parietales

Visibles principalmente desde abajo (norma basalis) o desde dentro[editar]


Sutura fronto-etmoidal
Sutura petroescamosa
Sutura esfeno-etmoidal

Sutura esfenopetrosa
4.1.1.- FRONTAL

El hueso frontal ([TA]: os frontale) es un hueso del cráneo. En el ser humano es impar, central,
simétrico y plano, con dos caras (endocraneal y exocraneal) y un borde circunferencial. El
hueso frontal se encuentra en la parte anterosuperior del cráneo por delante de los huesos
parietales y un poco por arriba del esfenoides, y montado sobre el etmoides, y el macizo facial.
El hueso frontal ocupa la superficie de la cara que se corresponde con la frente y la
prominencia cubierta por las cejas.

4.1.2.- TEMPORAL
El hueso temporal (Os temporale), hueso del cráneo, es un hueso par, irregular, neumático,
situado en la parte lateral, media e inferior del cráneo. Contiene en su espesor el órgano
vestibulococlear o de la audición.1
De manera oficial el temporal solo tiene tres porciones: porción escamosa, porción mastoidea
y porción petrosa. Para poder dar una mejor descripción se le agregan dos más: porción
timpánica y la Apófisis estiloides (porción estiloidea) dando un total de cinco porciones. Su
forma varía según las edades, en el feto y recién nacido se pueden distinguir tres porciones
diferentes:
Porción Escamosa (Pars squamosa)

Porción Timpánica (Pars tympanica)


Porción Petrosa (Pars petrosa)
Se osifica a mediados del segundo mes de vida fetal aparecen dos centros de osificación, uno
origina la escama y el otro el hueso timpánico, junto a este se desarrollan otros centros de
osificación, tres para cada una de estas partes. En el tercer mes de vida fetal se delimitan ocho
centros que producen la petrosa. Otro centro origina la apófisis estiloide.4
En el recién nacido en el que las tres porciones no se han soldado todavía a dicha porción se
denomina Petromastoidea. En el primer año de vida estas tres porciones se unen mediante
una sinostosis para formar un hueso único. Estas tres piezas, al soldarse unas con otras en su
desarrollo, originan una serie de suturas más o menos visibles y permanentes.

4.1.3.- OCCIPITAL

El hueso occipital es un hueso no pareado que cubre la parte posterior de la cabeza. Forma
gran parte de la porción basilar del neurocráneo y se encarga de albergar por completo al
cerebelo.
El occipital es el único hueso del cráneo que se articula con la columna cervical, así como con
muchos otros huesos del cráneo. Por este motivo describimos al hueso occipital y sus partes
como: porción basilar, porción escamosa y porciones laterales o condíleas (ubicadas
lateralmente al foramen magno).
Superolateral: sutura lambdoidea, que lo separa de los huesos parietales
Inferolateral: sutura occipitomastoidea, que lo separa del proceso mastoides
Inferior: sutura petrooccipital, que lo separa de la porción petrosa del hueso temporal.

4.1.4.- ORIFICIOS PARIETALES


Los agujeros parietales son pequeñas formaciones ubicadas en la bóveda craneal sobre los
huesos parietales (en topografía parasagital). Estos orificios miden en promedio 1 mm, por lo
que, si superan los 5 mm, se denominan agujeros parietales gigantes . Se asocian a distintos
tipos de craneosinostosis, displasias corticales, microcefalia, defectos oculares o del oído,
sindactilia y polidactilia con hipoplasia distal de la clavícula y ausencia del acromion, retraso
mental, exostosis múltiples, disostosis craneofacial y alteraciones de los vasos intracraneales.
Muy rara vez se ha citado su vínculo con malformaciones cardíacas.

Los agujeros parietales agrandados suelen ser asintomáticos. En ocasiones, las


malformaciones meníngeas, corticales y vasculares de la fosa posterior acompañan los
defectos óseos y pueden predisponer a la epilepsia . En una minoría, los dolores de cabeza,
los vómitos o el dolor local intenso a veces se asocian con estos defectos, especialmente al
aplicar una presión leve sobre la corteza cerebral desprotegida

Los agujeros parietales son dos áreas simétricas, con bordes bien definidos, que se
encuentran a ambos lados de la sutura sagital, en la unión de los dos tercios posteriores del
hueso parietal. Es una variante del cráneo bífido.
4.1.5.- NASAL, MALAR Y BOVEDA PALATINA
Las cavidades nasales son dos corredores aplanados transversalmente que se ubican a cada
lado de la línea mediana, superiores a la cavidad oral, inferiores a la base del cráneo y entre
ambas órbitas. Presentan una abertura anterior y otra posterior así como cuatro paredes.
La abertura anterior, común a ambas cavidades está circunscrita por el borde anterior del
maxilar y su proceso frontal inferolateralmente, por superior se encuentra limitada por el
borde inferior de los huesos nasales. El orificio tiene forma de corazón de naipe francés, de
base inferior y vértice superior. En su base en relación a la línea mediana se observa la espina
nasal anterior. Por su forma, a esta abertura anterior se la ha denominado también abertura
piriforme.
La abertura posterior> conocida como coanas, ponen en amplia comunicación a las cavidades
nasales con la faringe. La pared lateral está conformada por seis huesos: Maxilar, lagrimal,
etmoides, concha nasal inferior, palatino y esfenoides.
El hueso cigomático, malar o pómulo es un hueso par, corto y compacto, situado en la parte
más externa de la cara, en forma cuadrilátera que forma el pómulo de la cara y parte de la
órbita y presentan un saliente o proceso cigomático que se une hacia atrás con el proceso
cigomático del hueso temporal. Solo se denomina así en los mamíferos y se corresponde con
el hueso yugal del resto de los vertebrados. Se articula con el temporal, el maxilar, esfenoides
y el frontal.

El paladar duro también conocido como bóveda palatina, es una lámina ósea horizontal que
forma una subsección del paladar de la boca. Forma los dos tercios anteriores del techo de la
cavidad oral.

Los huesos que forman el paladar duro son el proceso palatino del hueso maxilar y la lámina
horizontal del hueso palatino. En esta región podemos encontrar varios reparos anatómicos,
incluyendo el foramen incisivo y los forámenes palatinos mayor y menor. Todos estos sirven
como paso para las estructuras neurovasculares que suministran a la cavidad oral.
4.1.6.- MANDIBULA
El hueso más grande y fuerte de la cara. Forma la parte inferior de la quijada y una porción de
la boca, además en él se encuentran los dientes inferiores. La mandíbula es el único hueso de
la cabeza que se mueve, fija los músculos de la masticación y de otros movimientos de la boca.
También se llama hueso mandibular y maxilar inferior.
hueso impar, plano, central y simétrico, en forma de herradura, situado en la parte anterior
e inferior de la cara. Durante el desarrollo está compuesta por dos mitades, una de cada lado,
llamadas hemimandíbulas. En los seres humanos, las hemimandíbulas se encuentran
completamente fusionadas alrededor de los cinco años de edad, pero en muchos mamíferos
permanecen independientes toda la vida.

La cirugía oral y maxilo-facial, especialidad de medicina, es la encargada de estudiar su


anatomía, así como su estructura y los procesos patológicos que allí pueden asentar.
Presenta para su estudio una parte media o cuerpo y dos extremos laterales o ramas
ascendentes, situadas a ambos lados del cuerpo. Es el hueso más denso y prominente de la
cara.
4.1.7.- INDICES CRANEO-FASCIALES
Los índices craneales y faciales ofrecen importante información que puede ser
aplicada para la comprensión diagnóstica entre los pacientes de diferentes poblaciones y

etnias.
Mayoral, determina el tipo facial de los pacientes midiendo la distancia vertical
entre el punto Ofrion (intersección del plano medio sagital y el plano tangente al borde
superior de las cejas) al gnation (punto más inferior del contorno del mentón) dividido por

la anchura bicigomática multiplicada por 100. Clasificándolos en: euriprosopo


(braquifacial), mesoprosopo (mesofacial) y leptoprosopo (dólicofacial).
Williams y cols., de Sol, Martin & Saller*; determinan la morfología facial
midiendo la distancia vertical nasion ( intersección de la sutura nasal con el plano medio
sagital) y gnation (punto más anterior e inferior del borde de la mandíbula sobre la línea
media) y la anchura bicigomática(puntos más sobresalientes de los arcos zigomáticos) y
obtienen un índice facial que clasifica a los individuos en cinco grupos: hypereuriprosopos,
euriprosopos, mesoprosopos, leptoprosopos, hiperleptoprosopos.

Da Silva Filho estudió la configuración del esqueleto de la cara y resume el


concepto de patrón el cual consiste en la evaluación del comportamiento del esqueleto
facial mediante el análisis clínico de la cara. En este contexto, Capelozza Filho organizó un
sistema de diagnóstico, que se enfrenta a agruparse en cinco patrones distintos: Patrón I,
Patrón II, Patrón III, Cara Larga y Cara Corta, que se definen a continuación:
Los pacientes que tienen equilibrio facial se clasifican como Patrón I. En estos pacientes, las
mandíbulas están bien relacionadas y forman un rostro armonioso. Presenta como
características especiales: la simetría facial, proporción y equilibrio entre los tercios faciales,
buena proyección malar, ángulo nasolabial agradable, cierre labial pasivo, moderado espacio
interlabial, línea y ángulo del cuello bien definidos.
El Patrón II se caracteriza por intensificar un avance entre el maxilar y la mandíbula dando
como resultado protrusión maxilar y / o deficiencia mandibular, delineando un perfil facial
muy convexo.

Por el contrario, el Patrón III muestra un avance sagital negativo entre el maxilar y la
mandíbula, debido al prognatismo mandibular y / o deficiencia maxilar. El perfil facial se
vuelve cóncavo o recto.
Patrón de cara larga y cara corta son discrepancias evidentes en la dirección vertical, y
corresponden a la extrapolación de la variación normal de la cara en una vista frontal. El
Patrón de cara larga tiene una característica específica: los labios no contactan y el paciente
tiene la exposición de los dientes anteriores superiores y las encías cuando sonríe, causada
por el exceso del tercio inferior de la cara, incluyendo el maxilar. A

diferencia del Patrón de cara corta, en el que la altura facial total se reduce por la deficiencia
desproporcionada del tercio inferior.
El índice cefálico (en el ser humano vivo), al igual que el índice craneano (en el hueso seco)
presenta grandes variaciones. De esta manera se han realizado estudios que han clasificado
de forma arbitraria las diferentes formas de la cabeza y se han establecido índices basados en
la anchura y la longitud craneal.

4.1.8.- OSTEOMETRÍA DE HUESOS LARGOS

Un hueso largo tiene una diáfisis o cuerpo y dos extremos y es más largo que ancho. Los
huesos largos tienen una capa exterior gruesa de hueso compacto y una cavidad medular
interior que contiene la médula ósea. Los extremos de los huesos largos contienen hueso
esponjoso y una línea epifisaria. Dicha línea epifisaria es un remanente de un área que
contiene cartílago hialino que crece durante la infancia para alargar el hueso. Todos los
huesos en los brazos y piernas, excepto la rótula y los huesos de la muñeca y el tobillo, son
huesos largos.

ESTIMACIÓN DE LA ALTURA USANDO HUESOS LARGOS


Para estimar la altura de un individuo, los forenses y antropólogos suelen utilizar huesos
largos de la pierna. Los datos son fiables siempre que se utilicen huesos adultos, y primero
hay que determinar si el hueso utilizado es de un hombre o de una mujer.Las ecuaciones que
nos determinan la altura en función de las medidas del fémur o de la tibia son ecuaciones de
rectas, veamos las fórmulas de estas rectas y las estimaciones de la altura de un varón en
función del fémur y de la tibia.
Fórmulas para determinar estatura

Huesos, Varones, Mujeres


Fémur, 2.38 x long. máx + 61.41, 2.47 x long. máx + 54.10
Tibia, 2.52 x long. máx + 78.62, 2.90 x long. máx + 61.53

4..1.9.- DIFERENCIACION SEXUAL DEL ESQUELETO


Existen, sin embargo, multitud de métodos que han sido originados en los últimos años para
poder determinar el sexo del individuo, que a su vez pueden dividirse (de forma general) en
dos grandes grupos (morfológicos y métricos) y en otros grupos menores. También existe un
tercer gran grupo, la metodología molecular, pero esta práctica (aunque con un mayor grado
de confiabilidad) suelen ser complicados, invasivos y muy caros (tanto en tiempo como en
recursos).
La osteología, desde la antropología física analiza aspectos de la cultura a partir de los restos
óseos, pero además al estudiar los huesos se puede obtener información como la edad, el
sexo, el grupo de origen, patologías, y en algunos casos aproximarse a la causa de muerte, es
decir, “podemos hablar de una población a través de los huesos”, explicó la investigadora,
quien ha participado en algunos estudios con el doctor Carlos Serrano Sánchez, integrante de
la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).
En osteología la identificación está encaminada al estudio de las poblaciones pasadas; en
cambio, aunque la metodología es la misma, en el contexto legal el propósito es identificar
los restos óseos de personas desaparecidas.
Son cuatro las preguntas iniciales que los investigadores deben responder para identificar un
esqueleto: cuál es el origen, la edad, el sexo y la estatura.

EXTREMIDADES: El húmero, el cúbito el radio son los huesos principales que comprendenla
mayor parte del brazo, son más grueso, más largos en los hombres. Los falanges, los huesos
que componen los dedos, son más grandes en los hombres. Lo mismo ocurre con los
miembros inferiores, que son soportados por los huesos fémur, peroné y tibia, todo es más
generalmente más largos en hombres que en mujeres.

2.- CRÁNEO: La pequeña protuberancia en la parte posterior de la cabeza conocida como la


Protuberancia occipital externa es generalmente más pronunciada en los hombres. El maxilar
o la mandíbula masculina es típicamente angular y de forma cuadrada en la zona de la barbilla,
mientras que en la mandíbula femenina tiende a ser mas redondeadas y puntiagudas.
PELVIS: La pelvis femenina es mas pequeña, menos profunda y más ancha y la cavidad es en
forma más circular. El cóccix, que es el ultimo hueso de la columna vertebral, es mas movible
en esqueletos femeninos. El sacro, el cual es un hueso en forma de triangulo también al final
de la columna y conectado a la pelvis, es mas ancho y mas plano en las mujeres. Todas estas
distinciones contribuyen al proceso de parto, en particular para que la cabeza y los hombros
de los niños pasen a través de la cavidad.
Las diferencias en los esqueletos masculinos y femeninos se deben en parte a las hormonas
que afectan el desarrollo de los huesos. La testosterona es la principal influencia que moldea
los huesos de los hombres, mientras que el estrógeno tiene un efecto mayor sobre el
desarrollo óseo de las mujeres. Desde la infancia, tanto los hombres como las mujeres tienen
un cartílago óseo, llamado placas epifisarias, que crecen y se convierten en firmes y sólidos
cuando llegan a una cierta edad. Los altos niveles de estrógeno que hay durante la pubertad
femenina causan un cierre mas temprano de estos cartílagos particulares. En torno a la edad
de 18 años, los huesos de las mujeres ya están establecidos, mientras que el desarrollo óseo
masculino termina alrededor de los 21 años, dando a los hombres tiempo para ganar mayor
masa ósea.
4.2.1.- RECOLECCION, RESTAURACION Y CONSERVACION DEL ESQUELETO

Es preciso sistematizar todos los detalles, por mínimos que parezcan, ya que serán la base
para el conocimiento exacto de los hechos; al mismo tiempo deben recogerse las piezas óseas
con el menor deterioro posible. De lo contrario resulta difícil realizar un buen estudio osteo-
métrico con huesos rotos e incompletos. Y además se simplifica la laboriosísima, y no siempre
exacta, tarea de reconstrucción.
DESCUBRIMIENTO Cuando en una exploración aparece el primer hueso, se limpia su
superficie con una brocha, suave o áspera, según el caso, con objeto de determinar a qué
parte del esqueleto corresponde, así como su orientación anatómica; de este modo se fija su
emplazamiento dirección, y puede procederse a preparar el terreno para extraerlo; se
comienza por aislar el área del entierro en condiciones favorables para ir descubriéndolo sin
peligro de destrucción.
ANOTACIÓN DE DATOS. En la segunda etapa se anotan todos los datos del entierro.
I) número que corresponde al entierro; 2) lugar exacto del hallazgo; 3) profundidad respecto
a la superficie del terreno; 4) profundidad al o a los pisos de estuco o de piedra que se
encuentren por encima; 5) existencia o ausencia de fosa; 6) estado de conservación de los
huesos, indicando qué partes se conservan y cuáles no-, 7) edad fisiológica y, si es posible, el
sexo; 8) calidad del entierro, primario (completo o incompleto) con sus diversas partes
anatómicamente relacionadas; secundario si no existe tal relación, y si las piezas son de
distintas edades fisiológicas; 9) posición; 10) orientación; 11) descripción somera de los
objetos que puedan hallarse en relación con el entierro.
EXTRACCIÓN. Una vez anotados todos los datos, que en cualquier momento pueden mostrar
cómo se hizo el hallazgo y cuáles eran las condiciones que le rodeaban, puede ya procederse
a su extracción. Los esfuerzos deben encaminarse hacia el fin de obtener completa cada pieza
ósea; si éstas estuvieren ya rotas al descubrirlas, hay que tratar de librarlas de una destrucción
mayor en el momento de sacarlas. Para ello se inicia la extracción yendo desde el cráneo hacia
los pies, o en sentido inverso; es preferible la primera dirección por ser en la mayoría de los
casos la que más facilita el trabajo; pero es la posición $ del entierro la que marca en cada
caso el método a seguir: si aquélla es decúbita (dorsal, ventral, lateral izquierda o derecha) el
sistema indicado es factible; si el esqueleto guarda la posición de "feto en útero” (miembros
inferiores flexionados abrazados por los superiores y el tronco semi- oblicuo) o una variante
de ella, el proceso tiene que modificarse; la posición en decúbito ocupa un solo plano sobre
el cual puede trabajarse; en cambio la posición de "feto en útero" implica varios planos en los
que no es posible trabajar simultáneamente; entonces, cada uno de éstos se aborda por
separado, de arriba hacia abajo.
se anota con toda claridad el número del entierro, así como el sitio en que apareció. En caso
de que el cráneo presente particular interés y su estado de destrucción sea avanzado, es
mejor conservarlo en una pequeña caja de madera recubierta en su interior con una gruesa
capa de algodón. Si el cráneo ya liberado no ofrece peligro de desintegrarse, se limpia
superficial e internamente; pero si es deleznable y frágil se coloca dentro de la bolsa o caja
para llevarlo al laboratorio. El cráneo puede estar muy despedazado desde el principio; en tal
caso se recogen absolutamente todos los fragmentos, así como las piezas dentarias sueltas y
los restos del maxilar inferior, colocándolo con cuidado dentro de la caja. Si el ejemplar es de
particular importancia y está en esas mismas condiciones, se consolida rn sitii, antes de mover
cualquiera de sus partes, con objeto de extraerlo junto con el bloque de tierra y explorarlo en
el laboratorio en mejores condiciones de comodidad..
Se continúa después con la extracción del resto del esqueleto. Si éste está en un solo plano
se trabaja horizontalmente y cuidando siempre de aflojar primero y sacar después sólo
aquellas piezas cuyas articulaciones así lo permitan. Es decir, no debe insisarse, por ejemplo,
en retirar una vértebra dorsal si se conserva articulada con las cabezas costales, porque éstas
la retienen firmemente, y al hacer presión sólo se conseguiría romper los cuerpos de las dos
costillas y quizás también la propia vértebra. Una vez extraído el cráneo, es factible sacar las
vértebras adyacentes, una a una o en conjunto si así es conveniente para su integridad. Este
método permite avanzar poco a poco pero de modo seguro a medida que se libera cada
hueso, y con un punzón se va arrancando con sumo cuidado la capa de tierra que lo cubre,
hasta dejarlo totalmente descubierto. Entonces se procura hacer leve palanca tomando el
hueso por su parte media (nunca de la epífisis opuesta) hasta lograr con suavidad su
desarticulación inferior. Cuando la posición del esqueleto no es decúbito, se procede de arriba
hacia abajo-, se extrae todo el material óseo expuesto en un primer plano superior. Luego se
trazan los esquemas necesarios del segundo plano que ahora está al descubierto; se anotan
los datos respectivos y, si es necesario, se fotografía. Para conservar el resto del esqueleto se
emplean bolsas resistentes, en la cantidad necesaria para que las piezas no queden oprimidas.
Los huesos de manos y pies se guardan mejor en pequeñas cajas de cartón, cada una de las
cuales sirva para una extremidad por separado; con esto se facilita mucho la identificación
posterior. La caja o bolsa con el cráneo, y las que contienen el resto del esqueleto han de
tener la misma inscripción, sólo que agregando en las últimas el lado a que corresponden.

4.3.- RESTOS OSEOS DESCARNADOS


4,3.2.- RAZA

La raza es una construcción social que se utiliza para clasificar a las personas. La raza se
construyó como sistema jerárquico de agrupación de los seres humanos, y se generaron
clasificaciones raciales para identificar, diferenciar y marginalizar algunos grupos en las
diferentes naciones, regiones y en el mundo. Las razas dividen a las poblaciones humanas en
grupos, con frecuencia en función de su aspecto físico, factores sociales y antecedentes
culturales.
I. raza blanca o caucásica

II. raza amarilla o mongólica


III. raza negra o melaniana
Desde los años sesenta, algunos antropólogos y profesores de antropología han reconcebido
"raza" como una categoría cultural o construcción social, en otras palabras, como una manera
particular que la mayoría de la gente tiene al hablar de sí mismos y de los otros. Por eso se
afirma que el término "raza" por sí solo debe ser analizado y el cómo y el por qué la gente usa
la idea de raza, está más explicado por la historia y las relaciones sociales que por rasgos
físicos o biológicos.

4.3.2.- ESTATURA
La estatura, talla o altura humana es la distancia medida normalmente desde el talón de los
pies hasta la parte superior de la cabeza. Esto se calcula en centímetro y/o metros (pies y
pulgadas en el sistema anglosajón) estando la persona erguida, preferentemente descalza. La
estatura de cada persona adulta varía de acuerdo con la genética y la nutrición, aunque
también se debe a factores medioambientales del individuos antes de la adultez.1
La especie humana posee un notorio dimorfismo sexual en el nivel anatómico, siendo los
hombres adultos más altos y más pesados que las mujeres en promedio, aunque se ha notado
una «tendencia secular» al aumento de las tallas en ambos sexos (especialmente durante el
siglo XX).
El ser humano adulto contemporáneo promedio mide entre 1,50 m (4′ 11″) a 1,70 m (5′ 7″)
(mujeres), y entre 1,60 m (5′ 3″) a 1,82 m (6′ 0″) (hombres). Normalmente, en los países del
norte de Europa, como los Países Bajos o Letonia, se observa a los adultos con la mayor
estatura en el mundo, con un promedio mayor a 1,80 m (5′ 11″) en el hombre, y cerca de 1,70
m (5′ 7″) en la mujer.
4.3.3.- SEXO
el sexo es el conjunto de las peculiaridades que caracterizan los individuos de una especie
dividiéndolos en masculinos y femeninos, y hacen posible una reproducción que se
caracteriza por una diversificación genética.
El sexo se refiere a las características físicas, orgánicas y biológicas que diferencian a los seres
vivos. En principio, los seres humanos nacemos como XX o XY, es decir, nuestro sexo es mujer
u hombre.

4.3.4.- OCUPACION
Se define la ocupación como la clase o tipo de trabajo desarrollado, con especificación del
puesto de trabajo desempeñado. al empleo, es decir, al trabajo asalariado, al servicio de un
empleador; a la profesión, la acción o función que se desempeña para ganar el sustento que
generalmente requiere conocimientos especializados; a la vocación profesional, el deseo de
emprender una profesión u otra actividad cuando todavía no se han adquirido todas las
aptitudes o conocimientos necesarios.
ocupación = cualquier actividad de producción de bienes o prestación de servicios a cambio
de una remuneración o un beneficio.
Trabajo = cualquier actividad realizada por personas de cualquier sexo y edad para producir
bienes o prestar servicios para uso de otros o para uso propio.

4.3,5.- RECONSTRUCCION FACIAL


La actividad de esta área es una parte esencial de la identificación de personas en cadáveres
especiales. Especialidad pericial forense que se utiliza como último recurso en la identificación
de personas fallecidas, la cual consiste en rehabilitar y reconstruir el tejido blando del rostro
humano, teniendo como base o matiz el cráneo real en cadáveres denominados como sin/
foto N.N., encontrándose con frecuencia en un estado de deterioro corporal, como:
(putrefacto macerado, calcinado, restos óseos u áridos, etc.), siempre y cuando no haya otra
posibilidad convencional para lograr la identificación plena del sujeto o los sujetos.

Esta técnica especializada es la encargada de recrear bidimensional y tridimensionalmente la


apariencia de los rasgos particulares facial de la persona o sujeto en vida, basada en la
información de los dictámenes multidisciplinarios que emiten los especialistas que llevan
relación directa con el caso, como: Criminalística de campo, Identificación de personas,
Fotografía, Química, Odontología, Antropología, Medicina forense, ADN, etc., quienes
aportan una mayor y certera información científica del caso por reconstruir. Se realiza un
prototipo bidi/tridimensional con un software en computadora y se transfiere físicamente
sobre una réplica del cráneo original en material sintético, colocándose capas simuladoras de
su espesor y estructura (músculo, grasa y piel), de acuerdo a su osteometría estructural, con
la finalidad de obtener su fisonomía facial, en diferentes ángulos y normas tridimensionales
de los rasgos faciales de la persona a quien podría corresponder dichas características.
4.3.6.- SOBRE POSICION FOTO RADIOGRAFIA
Se presenta un nuevo método para la identificación humana por medio de análisis de
imágenes y superposición fotográfica. Se discuten las ventajas que aporta la incorporación de
imágenes tridimensionales del cráneo, ya que, por un lado, facilitan la superposición y por
otro, eliminan errores de escalado al estar el modelo 3D a tamaño real. Este trabajo se ha
desarrollado por un equipo interdisciplinar y su objetivo fundamental es proporcionar una
herramienta semiautomática de identificación humana, basada en el reconocimiento
craneofacial.
La superposición craneofacial es una técnica mediante la cual se compara directamente la
imagen del cráneo de un individuo desaparecido con la fotografía de una persona conocida,
para establecer la identidad del cráneo. Las comparaciones también pueden realizarse entre
una radiografía y una fotografía o entre un fotograma de video y una fotografía .
Sobre estas premisas se realizaron las primeras identificaciones superponiendo imágenes. El
procedimiento que se utilizaba era obtener un negativo de la fotografía original sobre el que
se marcaban distintos puntos craneoscópicos. Eso mismo se hacía sobre la fotografía
obtenida del cráneo. Posteriormente se hacía coincidir y se revelaba el positivo con los dos
negativos superpuestos. Hoy día se cuenta con paquetes informáticos de tratamiento de
imágenes como el Adobe Photoshop, que facilitan bastante el procesado de imágenes y la
comparación.

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