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Reporte un juguete una sonrisa

La organización empezó con un grupo de saloneo, uno de publicidad digital encargado de


hacer redes sociales, infografías y publicaciones aunado a otro de publicidad física.
Recolectamos juguetes de diferentes salones hasta llenar gran parte de un contenedor. El
viernes 29 de abril fuimos al órgano y a las pintas, cuando llegamos a la prepa varios
compañeros se organizaron para pasarse los juguetes uno por uno y así cargar todos los
vehículos poco a poco, cuando ya estábamos listos vinieron unos policías a decir que los
juguetes eran robados y empezaron a tomar fotos de la prepa y de las infografías que
teníamos colgadas, les explicamos que no era así y decidimos irnos a entregar los
juguetes. Primero llegamos a las pintas, específicamente en un Oxxo, entregamos
algunos juguetes y seguimos con nuestro camino, al principio había muy pocos niños,
pero conforme íbamos pasando por varias calles empezaban a aparecer. La maestra dejo
plantados a una familia en una esquina, pero nosotros si nos bajamos y les dimos pelotas
porque era lo único que teníamos al momento. Nos detuvimos en una iglesia donde nos
dijeron que posiblemente no encontraríamos gente cerca, no les hicimos mucho caso y
nos trasladamos hacia otro lugar en el cual duramos estacionados aproximadamente 20-
30 minutos esperando a que los niños se acercaran, los vecinos se percataron de lo que
estábamos haciendo y se corrió el chisme de que estábamos regalando juguetes, las
familias se dejaron venir y es ahí cuando comenzamos a dar muchos de los regalos a la
gente, algo que notamos fue que algunas personas se bajaban de carros y nos daba la
impresión de que esa gente si puede pagar mínimo un juguete y no les estaban dando
una oportunidad a los que de verdad no pueden comprarlos. Otra cosa por mencionar es
que algunas personas vinieron dos veces para ver si les dabamos más de un juguete
cosa que no accedimos, pusimos la regla de que solo se entregaría un juguete por
persona además de que debía estar presente el niño o la niña para recibirlo junto a una
marca de carita feliz en su mano con tinta de pluma. Los juguetes se empezaron a agotar
y nos vimos en la necesidad de ir al otro lugar llamado órgano. Al llegar niño que veíamos
niño al que le dábamos su juguete, nos paramos en una esquina donde nos tomamos una
foto grupal, muchas personas nos vieron y de nuevo los niños corrían hacia nosotros, una
mamá llego y nos explico que tenia a su hijo discapacitado, que, si podíamos ir a su casa
a entregarle su regalo porque no podía caminar cosa que aceptamos y entendimos.
Llegamos a una casa donde salieron más de 10 niños, es ahí cuando se nos acabaron los
juguetes que llevábamos en nuestro carro, finalmente entregamos los juguetes restantes
de otros vehículos y regresamos a la prepa.

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