LA INTROSPECCIÓN NEGATIVA DE LOS ADOLESCENTES TRAS LA

INFLUENCIA DE LAS REDES SOCIALES

Desde la llegada del internet y las redes sociales causó un gran impacto en nuestra
sociedad y en especial hacia las personas más jóvenes como niños o adolescentes. Las
redes sociales se han convertido en una herramienta fundamental de uso diario para la
comunicación y la realización de diversas actividades. En ese sentido, es necesario
detallar o hacer de nuestro conocimiento a que peligros se pueden exponer o puede
causar hacia la salud mental de los adolescentes su uso inadecuado. Al ser esta una
actividad de mayor práctica en la vida diaria de un adolescente postulamos, como
contribuye negativamente el uso de las redes sociales hacía la autoestima de los
adolescentes. A continuación se presentarán una serie de argumentos que sustentarán
nuestra tesis.
Uno de los problemas más comunes que se puede apreciar en algunos
adolescentes que utilizan las redes sociales es que no tienen un adecuado control en el
tiempo que pasan en estas, lo cual puede ocasionar algunos problemas en su conducta y
su autoestima. En consecuencia, algunos adolescentes pueden generar una perspectiva
negativa de ellos mismos al compararse con famosos o iconos de las redes, a quienes no
les hace falta nada o son físicamente más atractivos que ellos. Diana Pacheco Ponce,
psicóloga clínica en el Grupo de Autoayuda de Bulimia y Anorexia (2020) manifestó:
“el incremento del consumo de redes sociales en los adolescentes hace que se expongan
a imágenes que pueden influenciar en la concepción de su físico”. Por lo tanto, es
importante resaltar que la autopercepción de los adolescentes se relaciona a partir de lo
que el mundo exterior define como la forma en que debemos mirarnos, es decir, las
redes sociales son quienes determinan como deberíamos vernos.
En segundo lugar, las redes sociales nos han otorgado la oportunidad de
visualizarnos como la persona que nos gustaría ser a través de los filtros para fotos que
podemos encontrar en diversas redes, debido a que estas fueron creadas no solo con el
fin del entretenimiento sino además con la finalidad de mejorar nuestro aspecto físico.
Sin embargo, un porcentaje de adolescentes que crean personajes idealizados en Internet
pueden sentirse frustrados y deprimidos por la brecha entre quienes pretenden ser en
línea y quiénes son realmente. Willingham (2018) menciona, “Estas aplicaciones le
permiten a uno modificar su apariencia en un instante y ajustarse a un estándar de
belleza poco realista y, a menudo, inalcanzable”. Entonces, podemos afirmar que al
emplear este tipo de aplicaciones constantemente podemos desarrollar una
desconformidad con nuestro aspecto físico al vernos como realmente somos en
comparación como nos ven los demás a través de los filtros.
Asimismo, la baja autoestima a consecuencia de la utilización de las redes
sociales se puede presenciar en personas que poseen un número vasto de seguidores o
son famosos en estas, debido a que muchas veces estos iconos de las redes, quienes
mayormente suelen ser jóvenes y adolescentes, pueden cargar con mucha presión al ser
tomados como imágenes sobre valoradas, los cuales son conscientes que el precio de su
fama depende de la conformidad que las personas tengan con ellos, ya sea por lo que
realizan, publican o comparten en las redes, por tal motivo muchos famosos pueden
entrar en una inestabilidad emocional por los diversos comentarios o críticas a las que se
exponen por personas que no les gusta lo que hacen o cuando cometen errores como
realizar comentarios inapropiados o desubicados. Grace Chou y Edge (2012)
mencionan:
“A la hora de subir contenido a Facebook o una red social se busca el
reconocimiento y la aprobación de las personas con las que uno está conectado
y, por tanto, se utiliza para construir una imagen de uno mismo que reciba la
mirada favorable de los otros”. (p.)
Por consiguiente, podemos afirmar que al elaborar publicaciones o
comentarios lo realizamos con el fin de compartirlo, exhibirlo o exponerlo hacia las
personas o contactos que poseamos en nuestras redes, tomando conciencia que al
hacerlo público le damos la posibilidad de que diversas personas opinen acerca de ello
estando de acuerdo o no.
Algunos adolescentes pueden desarrollar trastornos alimenticios
condicionados por las redes. Hoy en día la mayoría de los jóvenes o adolescentes
utilizan las redes con la finalidad de seguir a personas famosas. Sin embargo, muchos de
estas poseen cuerpos considerados por ellos perfectos o es lo que suelen aparentar en las
redes. Esto puede desencadenar a que muchos adolescentes quieran verse de la misma
forma obsesionándose por conseguir un aspecto igual y derivando como consecuencia
en problemas relacionados con su alimentación. Lezama Reyes (2019) menciona,
“nuestra sociedad establece estándares irreales de perfección y desvaloriza a aquellos
que no se enmarcan en dichos parámetros”. Podemos aseverar que a raíz de esa visión
que posee la sociedad actual muchos adolescentes distorsionan la percepción que
poseen de su imagen corporal y arriesgan su salud con el objetivo de estar delgado o
verse iguales a las personas que siguen.
Si bien las redes sociales se han vuelto una herramienta indispensable para
la comunicación, debido a que nos facilita la interacción con nuestros amigos y
familiares. Además, a través de estas redes podemos socializar de manera óptima
encontrando a personas que poseen gustos similares o en común. Sin embargo, ello no
es exacto. El inadecuado uso de las redes sociales puede ocasionar problemas
psicológicos como una baja autoestima en los adolescentes. Ello ocurre debido a que a
pesar de que en internet podamos encontrarnos a una diversidad de personas con
diferentes o similares gustos , ello no nos exenta de los peligros que podemos acarrear.
La utilización de las redes sociales se ha convertido en una posibilidad para
que muchos adolescentes puedan crear relaciones que diversas personas, y expresarse de
manera más libre; pero ello no es siempre factible, debido a que muchos no son
conscientes de la situación que puede desatar si no llevamos un control adecuado en su
uso, ya que los adolescentes suelen pasar por muchas etapas emocionales donde
empiezan a darle mayor importancia a su aspecto físico y a lo que algunas personas
puedan pesan acerca de ellos.
 Para finalizar podemos colegir que el uso de las redes sociales puede
atribuir en los adolescentes baja autoestima, así como acarrear diversos problemas ante
su autopercepción y aceptación o aprobación de la sociedad. Por tal motivo, es
necesario llevar un control o una comunicación constante con la familia para generar un
auto concepto positivo en los adolescentes y medir el tiempo que puedan pasar en las
redes. Entonces, a raíz de lo mencionado anteriormente ¿se podrá cambiar la forma de
percibir la utilización de las redes sociales a una forma más productiva que valore o
tome en equidad las opiniones de los demás, a raíz de que los adolescentes son más
propensos de afligirse con mayor grado a ciertos tipos de comentarios?
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