BIENAVENTURADOS LOS ADVENTISTAS DEL SÉPTIMO DÍA

HIMNO: Bienvenida da Jesús (217)

TEXTO: “Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las
cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca” (Apoc. 1:3).

INTRODUCCIÓN: Apocalipsis fue escrito para los siervos de Dios (Apoc.1:1); para los que
guardan el sábado (fue sábado el día cuando se le comenzó a dar revelaciones al apóstol Juan,
Apoc. 1:10); para los que luego del gran chasco del capítulo 10 siguieron pregonando el
advenimiento de Cristo a esta tierra (Apoc. 10:11), para los que tienen la fe de Jesús y el
Espíritu de la profecía (Apoc. 12:17; 19:10),

Un elemento importante en el apocalipsis es el número siete. El número siete es importante

para nosotros, está en nuestro nombre, en nuestra identidad. Dios quiso tomar este número y
ponerlo en todo el apocalipsis: siete espíritus, siete estrellas, siete iglesias, siete ángeles, siete
ojos, siete sellos, siete trompetas, siete plagas, siete truenos; también hay siete
bienaventuranzas.

Bienaventurado significa “bendito”, “feliz”. Estas bienaventuranzas están primero que

cualquier grupo de siete y también son el último grupo de siete del apocalipsis.

Como Apocalipsis fue escrito para los siervos de Dios que guardan el sábado; y que tienen la
encomienda de predicar el evangelio basados en la fe de Jesús y el don profético, los invito a
estudiar cómo las bienaventuranzas reveladas al apóstol Juan son para nosotros los Adventistas
del Séptimo Día.

CUERPO

I. “BIENAVENTURADO EL QUE LEE, Y LOS QUE OYEN LAS PALABRAS DE

ESTA PROFECÍA, Y GUARDAN LAS COSAS EN ELLA ESCRITAS; PORQUE
EL TIEMPO ESTÁ CERCA” (APOC. 1:3).

A. Trasfondo histórico
B. Aplicaciones:
1. Leer la Biblia, escuchar su lectura y obedecerla debe estar por encima de
nuestra propia vida, “en ella encontramos vida eterna”.
2. Tenemos diferentes dones, uno lee y otro escucha. No me fijo en si el que
lee obedece o no, la bienaventuranza depende de mí obediencia, no de quien
lee. No soy menos porque escucho.
3. La permanente expectativa de la pronta venida de Cristo.
“Este libro revela la mente de Dios, el estado moral y espiritual
del hombre, el camino de salvación, el castigo del pecador no
redimido y la bienaventuranza del creyente. Sus doctrinas son
santas, sus preceptos obligatorios, sus historias verdaderas y
sus decisiones inmutables. Léelo para ser sabio, créelo para
estar seguro, practícalo para ser santo. Es luz que dirige, pan
que sostiene y consuelo que alegra. Es mapa del viajero, báculo
del peregrino, brújula del navegante, espada del soldado y la
carta magna del cristiano. En la Biblia está el paraíso
restaurado, el cielo abierto y las puertas del infierno
descubiertas. Cristo es su gran tema, nuestra salvación su buen
propósito y la gloria de Dios su meta. Debe ocupar la mente,
gobernar el corazón y guiar los pies. Léelo con lentitud, con
frecuencia y con oración. Es mina de prosperidad, un paraíso
de gloria y un río de placer. Nos es dado en esta vida, será
abierto en el juicio y será recordado eternamente. Trata del
deber más grande, recompensará la labor más excelente y
condenará a todo aquél que juega con su sagrado contenido”.
II. “OÍ UNA VOZ QUE DESDE EL CIELO ME DECÍA: ESCRIBE:
BIENAVENTURADOS DE AQUÍ EN ADELANTE LOS MUERTOS QUE
MUEREN EN EL SEÑOR. SÍ, DICE EL ESPÍRITU, DESCANSARÁN DE SUS
TRABAJOS, PORQUE SUS OBRAS CON ELLOS SIGUEN” (APOC. 14:13).

A. Contexto (El mensaje de los tres ángeles)

B. Aplicación:
1. Debemos permanecer en Cristo:

“Preguntaréis tal vez: ¿Cómo permaneceremos en Cristo? Pues, del mismo modo en que le
recibisteis al principio. De la manera, pues, que recibisteis a Cristo Jesús el Señor, así andad en
él. El justo... vivirá por la fe. Os entregasteis a Dios para ser completamente suyos, para servirle
y obedecerle, y aceptasteis a Cristo como vuestro Salvador. No podíais por vosotros mismos
expiar vuestros pecados o cambiar vuestro corazón; pero habiéndoos entregado a Dios, creísteis
que por causa de Cristo el Señor hizo todo aquello por vosotros. Por la fe llegasteis a ser de
Cristo, y por la fe tenéis que crecer en El, dando y recibiendo. Tenéis que darle todo: el
corazón, la voluntad, la vida, daros a Él para obedecerle en todo lo que os pida; y debéis
recibirlo todo: a Cristo, la plenitud de toda bendición, para que more en vuestro corazón, sea
vuestra fuerza, vuestra justicia, vuestro eterno Auxiliador, y os dé poder para obedecer” (CC,
69-70).
 2. Lo dice el Espíritu Santo
¿Por qué el Espíritu puede decir eso de una persona? Porque trató con ella y esta permitió que
él obrara en su vida; que cambie su corazón y su mente.

III. “HE AQUÍ, YO VENGO COMO LADRÓN. BIENAVENTURADO EL QUE

VELA, Y GUARDA SUS ROPAS, PARA QUE NO ANDE DESNUDO, Y VEAN
SU VERGÜENZA” (APOC. 16:15).

A. Contexto: la sexta plaga

B. Trasfondo: Adán y Eva
C. Aplicación: La justicia de Cristo (Apoc. 3:4).

IV. “Y EL ÁNGEL ME DIJO: ESCRIBE: BIENAVENTURADOS LOS QUE SON

LLAMADOS A LA CENA DE LAS BODAS DEL CORDERO. Y ME DIJO:
ESTAS SON PALABRAS VERDADERAS DE DIOS” (APOC. 19:9).

A. Contexto: Fin del juicio investigador

B. Descripción: Mt. 24:29-31

V. “BIENAVENTURADO Y SANTO EL QUE TIENE PARTE EN LA PRIMERA

RESURRECCIÓN; LA SEGUNDA MUERTE NO TIENE POTESTAD SOBRE
ÉSTOS, SINO QUE SERÁN SACERDOTES DE DIOS Y DE CRISTO, Y
REINARÁN CON ÉL MIL AÑOS” (APOC. 20:6).

A. “La segunda muerte”

B. Conexión con la cuarta bienaventuranza
“Todos los que murieron en la fe del mensaje del tercer
ángel, salen glorificados de la tumba, para oír el pacto de
paz que Dios hace con los que guardaron su ley. “Los
que le traspasaron” (Apocalipsis 1:7), los que se mofaron
y se rieron de la agonía de Cristo y los enemigos más
acérrimos de su verdad y de su pueblo, son resucitados
para mirarle en su gloria y para ver el honor con que
serán recompensados los fieles y obedientes” (CS, 621).
C. Hay vida para ti en Cristo Jesús

VI. “¡HE AQUÍ, VENGO PRONTO! BIENAVENTURADO EL QUE GUARDA LAS

PALABRAS DE LA PROFECÍA DE ESTE LIBRO” (APOC. 22:7).

A. Énfasis en guardar
B. Aplicación: Dejemos de ser tan teóricos de la verdad
VII. “BIENAVENTURADOS LOS QUE LAVAN SUS ROPAS, PARA TENER
DERECHO AL ÁRBOL DE LA VIDA, Y PARA ENTRAR POR LAS PUERTAS
EN LA CIUDAD” (APOC. 22:14).

A. Dos variantes textuales:

HOIPOIOUNTES TAS ENTOLAS AUTOU: "Que guardan sus mandamientos".

HOIPLUNONTES TAS STOLAS AUTON: "Que lavan sus vestiduras".

B. Trasfondo de “derecho al árbol de la vida” (Gn. 3:24).

C. Aplicación: Nuestro propio ángel nos acompañará y nos mostrará dónde está el
árbol de la vida y nos brindará de su fruto.

CONCLUSIÓN: La Iglesia Adventista Del Séptimo Día está destinada a vivir bendecida y feliz
esperando el regreso glorioso de Jesús por segunda vez.

LLAMADO: Deja que Cristo siga lavándote, permite que el Espíritu Santo reavive y reforme tu
carácter y estilo de vida, él te dará el poder de vivir una vida santa para que puedas entrar por
las puertas de la Nueva Jerusalén. Mientras esperamos a Cristo, comparte otros las bendiciones
que recibes porque si eres adventista del séptimo día, bienaventurado eres.