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Hafid (es un anciano con grandes riquezas)

Lisha (esposa de Hafid – está muerta)

Erasmo su principal tenedor de libros

Sucede en Damasco.

En las mercancías había lana, lino fino, pergaminos, miel, alfombras y aceite del Asia Menos;
cristales, higos, nueces, y bálsamo de su propio país; textiles y drogas de Palmira; jengibre;
canela y piedras preciosas de Arabia; maíz, papel, granito, alabastro y basalto de Egipto;
tapizados de Babilonia; pinturas de Roma; y estatuas de Grecia. Flotaba en el ambiente un
intenso aroma a bálsamo y el fino olfato de Hafid percibía la presencia de dulces ciruelas,
manzanas, queso y jengibre.

Hafid le pregunta Erasmo cuanta riqueza tiene acumulada, Erasmo le dice que tiene
aproximada siete millones de talentos de oro, y si la mercancía la volviera oro tendría tres
millones de talentos (10 millones). Hafid daba la mitad de las ganancias de nuestro tesoro y las
distribuía entre los pobres. “Además de disponer de nuestro inventario, quiero que prepares
los documentos necesarios a fin de transferir el título de propiedad de cada uno de los
emporios al que actualmente lo administra por mí. Quiero también que distribuyas 5000
talentos de oro a estos gerentes como recompensa por sus años de lealtad, para que puedan
surtir de nuevo sus estantes y anaqueles como deseen.”

Hafid le deja 50 000 talentos de oro a nombre de Erasmo, le dejara el palacio y el almacén, eso
lo tendrá cuando Hafid muera. Partio Erasmo de Damasco, con certificados de propiedad y oro
para aquellos que administraban cada uno de los emporios comerciales de Hafid. Desde Obed
en Jope, hasta Reuel en Petra, cada uno de los diez gerentes. Última parada en el emporio de
Antipatris. En un jarrón múrrino en un alto pedestal de madera citrus. En la cúpula del palacio,
nadie había entrado a la habitación durante más de tres décadas, un cofre de cedro

LO QUE “HABIA” EN LA TORRE: había aquí barriles de diamantes, lingotes de oro, o animales
salvajes, o aves raras, un pequeño harén (un grupo de concubinas).

En el cofre había pergaminos de cuero,

Todo el éxito, toda la felicidad, el amor, la paz mental y la riqueza que yo he disfrutado, están
directamente relacionados con lo que contienen estos pergaminos. A fin de dominar el arte de
las ventas, uno debe aprender y practicar el secreto de cada pergamino.

La villa de Bethpagé descansaba la inmensa caravana comercial de Pathros, de Palmira.

Hafid (es un camellero) fue como un hijo para Pathros, Hafid quiere ser el hombre más rico y
el vendedor más grande del mundo,

Pathros le dice a Hafid, esfuérzate por alcanzar la felicidad, por ser amado y amar, y lo que es
de más importancia, procura con ahínco alcanzar la paz mental y la serenidad.

Hafid se impulsó por el amor de la hija de Calneh, debe demostrarse y demostrar a Pathros
que puedes soportar la vida de un vendedor, porque no es una carrera fácil la que has elegido.

Hafid debe vender un manto sin costura, de tejido con pelo de cabra y resistirá aún las más
intensas lluvias, y está teñido de rojo con las raíces de la planta llamada rubia, de manera que
no se desteñirá nunca. Debe venderlo en Belén, debe venderlo en un denario de plata,
El fracaso no te sobrecogerá nunca si tu determinación para alcanzar el éxito es lo
suficientemente poderosa. Frase que le dijo Pathros a Hafid. Paso 4 días que estaba en Belén
con el manto rojo. Le dio el manto a un joven mujer y a un hombre de barba que tenían un
bebe recién nacido en una piedra que contenía forraje para el ganado, aquellas personas
estaban en una cueva (mantón purpura). En su camino a Jerusalén un estrella seguía a Hafid,
Pathros le dio los pergaminos a Hafid al ver la señal esperada.

Pathros le regalaron el cofre que guardaba los diez pergaminos, una carta sellada, y una bolsa
que contenía 50 monedas de oro. Yo no debía abrir la carta sellada hasta que hubiese perdido
de vista a mi hogar adoptivo. Me despedí de la familia y esperé hasta llegar a la ruta comercial
hacia Palmira, La carta me ordenaba tomar las monedas de oro, aplicar lo que había aprendido
de los pergaminos y comenzar una nueva vida.

Pathros antes de su muerte le dejo a Hafid una bolsa que contiene 100 talentos de oro. Esta
suma te alcanzará para vivir y comprar un pequeño abastecimiento de alfombras con el cual
podrás iniciarte en el mundo de los negocios. Muchísimo mejor será que te conviertas en el
vendedor más grande y más rico del mundo por tus propios esfuerzos. Sal de esta ciudad de
inmediato y ve a Damasco.

Hafid espero 3 o 4 años por el siguiente que recibiría los pergaminos, el siguiente fue pablo
quien por 4 años hablo sobre la palabra de Dios, pablo tenía el manto, el manto era de Jesús

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