Está en la página 1de 3

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DEL ESTADO DE MORELOS

FACULTAD DE MEDICINA

TUTORÍA

DR. OSCAR MORENO

EL VENDEDOR MÁS GRANDE DEL MUNDO

ALUMNO: DANIEL BENÍTEZ CARTEÑO

GRUPO: 2-D
Esta obra comienza narrando la historia de Hafid. Hafid era un joven que tras la
muerte de sus padres fue adoptado por el vendedor más grande de su época, cuyo
nombre era Pathros. Este, en vez de darle todas las riquezas a su nuevo hijo le puso
a trabajar de camellero en su tienda de Jerusalén.
Todo el mundo se preguntaba como le había otorgado ese trabajo tan irrelevante a
su nuevo hijo, pero Pathros tenía un plan maestro para este joven.
Una noche fría de invierno, el joven Hafid entró en la tienda de su nuevo padre para
pedirle que le enseñara a ser un gran vendedor como él. No le gustaba la vida de
camellero, quería convertirse en el vendedor más grande del mundo para poder
conquistar a una joven de Jerusalén.
Su padre era un importante comerciante y nunca permitiría que su preciada hija se
casase con un camellero. Pathros estaba esperando años este momento, siempre
creía que en algún momento le ardería en el corazón el verdadero fuego, la
verdadera pasión necesaria para abordar esta nueva tarea que le sería otorgada
días más tarde: Convertirse en el vendedor más grande del mundo.
Antes de enseñarle todo lo que había aprendido durante estos años, Pathros le
mandó ir a Belén a vender uno de sus famosos mantos. Todos los vendedores
expertos que trabajaban para Pathros habían fallado en esta tarea. Hacía años que
nadie vendía un manto en Belén.
Durante su travesía, Hafid fue rechazado en numerosas ocasiones. Llevaba cuatro
días en Bélen y aún no había vendido el manto. Cuando tenía ganas de rendirse
pensaba en aquella joven que jamás podría conquistar si no era capaz de vender
ese manto. Pathros le había dado un par de monedas de oro para que durante su
travesía pudiese alojarse en un buen sitio y tener comida decente. Hafid, no
obstante, prefirió dormir en una cueva con su camello para ahorrar algo de dinero.
Al llegar a la cueva durante su cuarta noche en Belén, escucho una serie de ruidos
dentro de ella. Durante unos instantes pensó que eran unos ladrones que le habían
seguido y que se llevarían todas sus pertenencias.
Sin embargo, lo que se encontró fue a una mujer y a un hombre intentando arropar
a su hijo recién nacido. En el desierto de noche hace mucho frio. Este bebe en esas
condiciones no duraría muchas horas más.
Hafid, observando dicha situación decidió regalar el manto que Pathros le había
otorgado para su venta y así mantener con vida al bebé. A la mañana siguiente,
Hafid decidió volver hacia Jerusalén. Durante toda su travesía pensó en que
mentiras le podría contar a Pathros para hacerle creer que le habían robado el
manto. Una vez en su tienda, llorando, le contó toda la verdad a su padre adoptivo.
Este, en vez de enfadarse, sonrió y le dijo que no se preocupase, que mañana
hablarían con más calma.
Durante las siguientes semanas, Hafid siguió trabajando de camellero, pero cada
día empeoraba la salud de su padre. Tan pronto como supo que había encontrado
a la persona que estaba buscando durante años para otorgarle todas sus
enseñanzas, sus fuerzas comenzaron a abandonarle lentamente.
Días antes de su muerte, le otorgo a Hafid un cofre que contenía 10 pergaminos.
Los cuales le servirían para conseguir lo que tanto deseaba: convertirse en el
vendedor más grande del mundo.
Antes de llevarse el cofre que le cambiaría por completo su vida, Pathros le puso 3
condiciones que debería cumplir:
Seguir las instrucciones que contiene el pergamino 1.
Repartir constantemente la mitad de sus ganancias a gente menos afortunada.
No compartir con nadie los pergaminos o la sabiduría que hay en ellos hasta que
aparezca una persona digna de ellos.
10 Pergaminos:
*Tu vida depende de los hábitos que tengas en ese momento. Si te encuentras en
una situación que no te gusta, observa detalladamente tus hábitos y verás que son
ellos los que te hacen seguir en esa situación. Cambia tus hábitos y cambiarás tu
vida.
*Saludaré este día con amor en mi corazón.
*Persistiré hasta alcanzar los éxitos.
*Soy el milagro más grande de tu naturaleza.
*Viviré este día como si fuese mi último día de vida.
*Hoy seré dueño de mis emociones.
*Me reiré del mundo.
*Hoy multiplicaré mi valor en un 100%.
*Todo sueño carece de valor a menos que sea seguido de la acción.
*Nunca oraré pidiendo las cosas materiales de este mundo.

También podría gustarte