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Objetivos específicos
Propicia el buen funcionamiento de los riñones: una de las principales funciones de los
riñones es la filtración y la eliminación de los desechos producidos durante la
transformación de los alimentos, los medicamentos y sustancias perjudiciales.
A modo de ejemplo, dentro de las principales toxinas que produce el organismo está el
nitrógeno ureico en sangre, el cual pasa por los riñones, transformándose en orina. Es
así como el consumo adecuado de agua propicia que se realice este proceso de
manera correcta y eficiente.
Cuando se ingiere la suficiente agua, los riñones pueden realizar de forma eficiente su
labor de limpieza.
En la medida que se eliminen los productos de desecho del cuerpo, la piel se retrasará
significativamente su envejecimiento y mejorará su aspecto y brillo. 1
Regula el peso corporal: el aumento del consumo de agua alcaliniza el ambiente interno
de nuestro organismo, saciando nuestro apetito, estimulando la apetencia de alimentos
con menor contenido de azúcar y mayor aporte en minerales y vitaminas.
Muchos de los síntomas de apetito tienen su origen en una deshidratación crónica del
organismo, lo que crea una confusión entre el apetito y la sed, lo que sugiere en
momentos de hambre beber al menos medio litro de agua previo al consumo de
alimentos.2
Estimula la digestión: beber agua de forma regular durante el día da paso a proceso de
defecación, en el sistema digestivo.
De esta manera, existe un sinfín de beneficios del consumo de agua, que no fueron
enumerados, pero que están implicados en las funciones primordiales de sistemas tales
como: musculoesquelético, nervioso, endocrino, linfático, inmunológico, entre otros,
dando paso al equilibrio de agua dentro y fuera de las células del cuerpo humano.
1
Keneth Ellner, WebMD, Noticias sobre salud, p.2
2
Fereydoon Batmanghelidj, ¡Su cuerpo reclama agua a llanto limpio!, Irán, 2000, p.78
2.2 Enfermedades ocasionadas por deshidratación.
La ingesta nula o deficiente de agua, genera a nivel del organismo, una seguidilla
de enfermedades, algunas conocidas y otras poco usuales. A continuación, se
enumerarán las más conocidas y las razones por las cuales la carencia de agua las
desencadena.
Enfermedades del sistema articular: las patologías más conocidas por falta de agua son
la artritis reumatoide (RD) y los dolores lumbares. La causa principal, a nivel articular,
es la necesidad de agua para que las articulaciones lleven a cabo sus funciones con
normalidad. La carencia de agua implica que el almacenamiento de agua de las
estructuras que propician el funcionamiento óptimo de las articulaciones es absorbida y
reutilizada en el cerebro, uno de los órganos, junto con el corazón, que requiere
grandes dosis de agua.
Problemas a la tiroides: si bien existen estudios que abalan que los problemas a la
tiroides conocidos como hiper e hipotiroidismo son ocasionados por altos niveles de
estrés, por el bajo consumo de yodo en nuestra dieta, y consumo excesivo de
carbohidratos agresivos (TAM), una de las causas más estudiadas es la baja ingesta de
agua. La razón principal es porque el agua es una ayudante para la tiroides en el
transporte de oxígeno y la estimulación de las mitocondrias a nivel de la célula en la
producción de energía para la vida. Es por esta razón que uno de los principales
síntomas que origina algún problema a la tiroides es un aumento de los niveles de
colesterol en sangre, caída prominente de cabello y bajos niveles de energía para la
realización las actividades cotidianas.
3
Yvette Moya-Angeler, Entrevista a la doctora Françoise Wilhelmi de Toledo, p.1
El no consumo de agua en el mediano y corto plazo puede conllevar además problemas
a los huesos, cáncer, cefaleas frecuentes, trastornos alimenticios, entre otras
afecciones. Por lo anterior, se sugiere beber líquido en proporción al peso del cuerpo
dividido por 7, lo que dará como resultado la cantidad de vasos de agua que se
requieren diariamente.
3. Conclusión
A modo de conclusión, pude conocer los beneficios del consumo de agua y las
enfermedades que eventualmente se originan por prescindir de ella. Es así, que se
observó la importancia de su ingesta para la limpieza de desechos tóxicos que se
almacenan en nuestro organismo, así como la estimulación de la digestión de ellos a
través de la orina y las heces. Por otro lado, pude constatar la importancia del agua en
la salud de la piel, y la regulación del peso y el apetito. Luego, pude reconocer algunas
de las principales patologías mentales y físicas que ocurren si el cuerpo no se somete a
periodos prolongados y frecuentes de hidratación. Por un lado, corroboré que los
huesos y las articulaciones se ven afectados, ya que son sistemas de almacenaje de
agua que utilizan órganos fundamentales, lo que conlleva que toda el agua que
contienen va al cerebro y al corazón. Asimismo, las afecciones por deshidratación
desatan enfermedades psiquiátricas, entre las que se mencionó la depresión y los
trastornos de alimentación. Por consiguiente, se observa que las funciones a nivel del
sistema nervioso y de todos los sistemas en su conjunto requieren una homeostasis
(equilibrio de los niveles de agua) perfecta para brindarnos un balance que nos permita
vivir sanamente.