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Comer variado y tener una dieta lo más equilibrada posible hará que el sistema inmunitario
trabaje también mucho mejor, destaca Ylenia López Llata, nutricionista, dietista y coach
nutricional.
"Al final, llevar una mala alimentación ya no sólo provoca enfermedades a largo plazo como
cáncer, diabetes o infartos de miocardio, sino también a medio y corto plazo como
alteraciones de memoria, astenia e incluso insomnio"
"Tenemos la falsa creencia de que estar bien alimentado es estar bien nutrido", señala el
experto.
"Uno de los marcadores de estar bien alimentado es una analítica en la que los parámetros
pueden estar correctamente, pero haber carencias nutricionales de ciertos aminoácidos o
electrólitos que juegan un papel importante en el sistema inmune, que es la primera barrera
para evitar enfermedades como el cáncer. Hay que saber diferenciar entre estar bien
alimentado y correctamente nutrido"
"Lo más saludable es llevar una alimentación variada y equilibrada, con un consumo de
frutas, verduras y hortalizas diario. Unas 5 piezas o raciones todos los días, combinada con
legumbres, cereales, mejor integrales, pescado, carne, huevo, y acompañada de lácteos y
frutos secos", coincide Herrero.
Estas son 13 de las enfermedades que se relacionan con una mala alimentación.
Alzhéimer
De hecho, varias investigaciones han demostrado que comidas como los cereales
azucarados, la bollería industrial, los refrescos light y un exceso de carbohidratos pueden
potenciar el riesgo de que tengas alzhéimer.
"La mala alimentación repercute de forma directa en la salud mental y llega a influir en el
alzhéimer o la demencia", reconoce a elDiario.es la neurocientífica Raquel Marín, también
profesora de Fisiología en la Universidad de La Laguna.
Obesidad
Osteomalacia
Hipertensión
El exceso de grasas y sal podría llevarte a desarrollar problemas con la presión arterial.
La presión elevada impide la circulación de la sangre.
Las personas que tienen hipertensión tienen más probabilidades de sufrir infartos o
embolias cerebrales.
Diabetes
Tal y como se mencionaba con anterioridad, las personas que tienen sobrepeso tienen un
mayor riesgo de diabetes tipo 2 en comparación con las que tienen un peso normal. Esto
se debe a que sus cuerpos tienen más problemas para utilizar la insulina que producen.
Patologías cardiovasculares
Este tipo de patologías aumentan también los factores de riesgo de otras enfermedades,
como el COVID-19.
Enfermedades oculares
Según Herrero, la vitamina A puede mejorar la salud de los ojos y puede ayudar en la
degeneración macular y las cataratas.
Cáncer
"El sobrepeso y la obesidad están asociados con al menos 13 tipos de cáncer, incluido el
cáncer de endometrio (uterino), el cáncer de mama en mujeres posmenopáusicas y el
cáncer colorrectal. Estos cánceres constituyen el 40% de todos los cánceres
diagnosticados", explicitan también los expertos de los CDC.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca del 30% de los casos de cáncer
están relacionados con malos hábitos alimenticios.
Una revisión de 123 estudios, revisada por pares, encontró también que regímenes como
la dieta keto se asociaban al cáncer de colon, enfermedades cardíacas y el alzhéimer,
mencionado con anterioridad.
El Dr. Berenguer destaca que, además de las enfermedades que puedan aparecer en el
futuro, una alimentación desequilibrada también afecta a las funciones neurológicas
básicas del día a día, por lo que algunos pacientes pueden tener problemas para
memorizar o concentrarse.
Los Centros recomiendan a las mujeres embarazadas que cuiden también los niveles de
hierro y de yodo porque bajos niveles se asocian con retrasos mentales y conductuales en
los niños.
Anemia
Según Terapia CPAP (presión positiva continua en vías aéreas), el consumo excesivo de
alcohol, nicotina y comidas copiosas aumenta las probabilidades de sufrir apnea del sueño.
Este trastorno del sueño también suele estar más presente en pacientes con obesidad,
según la organización.
La alimentación deficiente, el exceso de peso y una vida sedentaria pueden ser factores de
riesgo del síndrome de ovarios poliquísticos.
Una dieta saludable (la dieta mediterránea, por ejemplo) se asocia con un riesgo
significativamente menor de desarrollar síntomas depresivos, según un estudio divulgado
por expertos de la Universidad de Harvard.
Bibliografía:
https://www.businessinsider.es/13-enfermedades-asociadas-mala-alimentacion-936681