comenzó el 27 de enero de 1990 hasta el 27 de enero de 1994.
El presidente electo, Rafael Leonardo Callejas Romero recibió de parte de los anteriores gobiernos liberales, a un país sumergido en una profunda crisis económica. Con este panorama desalentador, al nuevo mandatario le tocó hacerle frente a los retos de una Honduras con un déficit fiscal, déficit comercial, desempleo masivo, así como el hecho de que esta nación había sido declarada "no elegible" para préstamos y demás ayudas financieras por parte de organismos crediticios internacionales, esto, entre otros tantos problemas de orden económico.18 Fue por ello que en marzo de 1990, Callejas declaró que Honduras estaba en "bancarrota" con una economía "mentirosa". Para solucionar esta crisis, Callejas presentó al Congreso Nacional un paquete de leyes llamadas las Medidas del Ordenamiento Económico basadas en "el modelo económico neoliberal" el cual "no permite la regulación del Estado en el mercado o en los negocios o desarrollo económico del país".19 Las medidas económicas presentadas por Callejas fueron re-bautizadas por el Congreso Nacional de la República como Decreto Ley 18-90 del Ordenamiento Estructural de la Economía.20 Estas fueron "recomendadas" a manera de presión por los organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional y la Agencia Internacional para el Desarrollo (AID) para que Honduras fuese nuevamente elegible para nuevos préstamos, lo cual era uno de los objetivos del presidente Callejas.21 El historiador Longino Becerra, uno de los más severos críticos de Callejas y de la nueva ley asegura que "casi inmediatamente después de aprobado el "paquetazo"... comenzaron a dispararse los precios de numerosos artículos esenciales". Sin embargo, para algunos, esto se debió porque "los productores hondureños creyeron que la libertad de mercados implicaba el consentimiento de sus excesos como la variación hacia arriba de los precios de sus productos."18 Además del alza de los precios, la nueva Ley se tradujo en "sucesivas devaluaciones de la moneda nacional, el Lempira - que desde 1920 había mantenido un tipo de cambio fijo con el dólar".18 Hubo "despidos masivos en el sector público y la reducción del gasto social, castigó inevitablemente a extensas capas de la población ya de por sí golpeadas por las carencias propias de un país pobre y con un reparto de rentas muy desequilibrado" ... "provocando, ya en los primeros meses de la administración de Callejas, una fuerte contestación social que se expresó en agitaciones callejeras y huelgas sectoriales convocadas por unas organizaciones sindicales muy batalladoras".18 A pesar de que el presidente Callejas, comenzó su mandato con serios reveses luego de la implantación de su paquete económico, y de haber finalizado su mandato con un rendimiento bastante "discreto en la macro economía, con un crecimiento anual medio de sólo el 1,5% del PIB", 22 los esfuerzos realizados por el presidente Callejas en el plano económico, fueron reconocidos por algunos observadores. De acuerdo al escritor, Rodolfo Pastor Fasquelle, cuando Callejas llegó al poder en 1990, “las carencias eran inmensas y se había caído en la inercia". Según Fasquelle, Callejas "tuvo coraje para actuar en forma consecuente". Además, dice Fasquelle, Callejas “saneó en forma profesional las finanzas del Estado, lo cual era necesario; abrir el mercado, le quitó la modorra al aparato productivo, impidió que la especulación se le fuera de control; avanzó en el proceso de privatización; logró un crecimiento relativo... dejó un patrimonio material sustancial.”18 Además de lograr "la reanudación de la asistencia financiera internacional, lo cual, unido a las excelentes relaciones con la potencia norteamericana, facilitó la condonación por Washington en septiembre de 1991 de 430 millones de dólares de deuda bilateral". 23 Para Alexis Gonzáles de Oliva, Callejas es "Posiblemente ...el primer gobernante que cuando asume la Presidencia de la República, tiene mayor conciencia de los problemas nacionales, valoración de las dificultades que han frenado el crecimiento económico del país; y visiones claras de lo que se debe hacer para crear las bases para el despegar, los riesgos que se deben correr, los ajustes jurídico burocráticos que había que introducir y los resultados que se podían esperar". Logros Su gobierno tuvo importantes aciertos en los campos de la infraestructura (como por ejemplo la construcción y mejora de carreteras), educación, salud, Modernización del Estado y la creación del Fondo Hondureño de Inversión Social (FHIS).24 En 1991, asistió en la ciudad de Guadalajara, México para la celebración de la I Cumbre Iberoamericana; al año siguiente 1992, viajó a México nuevamente, donde fue uno de los testigos de la firma de los Acuerdos de Paz entre el gobierno de El Salvador y la guerrilla del FMLN; Después viajó a Washington, D.C. para entrevistarse con el presidente de Estados Unidos George Bush con el fin de negociar ayudas económicas a Honduras; Callejas también asistió a la II Cumbre Iberoamericana celebrada en la ciudad de Madrid y a la III Cumbre Iberoamericana llevada a cabo en la ciudad de Salvador de Bahía, en Brasil.25 Carlos Roberto Reina Fue el 4.º presidente constitucional de la República de Honduras entre los años 1994 y 1998. Carlos Roberto Reina alcanzó la presidencia de la república de Honduras, en los comicios del 28 de noviembre de 1993. Cuando derrotó en las urnas al candidato del Partido Nacional de Honduras: Abogado José Oswaldo Ramos Soto, junto a sus compañeros de fórmula el General retirado Walter López Reyes, el político Juan de la Cruz Avelar y la señora Guadalupe Jerezano Mejía. En su primer discurso presidencial lanzó su revolución moral: “Empeño mi palabra de honor dijo ante Dios, ante el pueblo y ante la historia, de que saldremos adelante en la empresa que nos hemos impuesto. Derrotaremos a la corrupción, pondremos en vigencia el liberalismo social. Llevaremos a cabo la revolución moral" dijo. Aunque en el campo de los hechos asentó las medidas de corte neoliberal realizada por sus antecesores y predecesores hasta la actualidad. En el mes de septiembre de 1993, se desarrolló un Foro Nacional que reunió por primera vez al Presidente de la República, los candidatos a la presidencia para el siguiente período, los Alcaldes y candidatos a las Alcaldías municipales. Se fijaron compromisos en torno al tema de la descentralización, entre los que se destacaron:
Fortalecimiento de la Autonomía Municipal;
Descentralización; Financiamiento Municipal; Capacitación y Asistencia; Participación Ciudadana; Ordenamiento Territorial; Liderazgo Local. En cuanto a la economía del país, el déficit fiscal, que a principios de 1994 era del 9,9% del Producto Interno Bruto (PIB), fue reducido por la administración Reina al 3,1%, lo que permitió una reactivación del sector privado. Se produjo también, en el periodo, un incremento de las exportaciones, que pasaron de US$ 911,5 millones de dólares en 1993, a US$ 1 418,3 millones en 1996, según cifras oficiales proporcionadas del gobierno.3 Al término de su periodo presidencial Reina entregó el país a su homólogo Carlos Flores Facussé. Pese a que las cifras macroeconómicas’ mejoraron[cita requerida], la pobreza en el país continuó en un ‘80% de los hondureños. La tasa de analfabetismo…en el 40%’ y ‘más de un millón de desempleados y una delincuencia desatada.4[cita requerida] Uno de los principales objetivos de Carlos Roberto Reina durante su gobierno, fueron las reformas a las Fuerzas Armadas de Honduras, las cuales en su mayoría; él llevó a cabo en durante su primer año en el poder. La primera fue el traspaso total de todo poder en manos de los militares, al poder civil. Seguido por la abolición del servicio militar obligatorio en el país. CARLOS ROBERTO FLORES FACUSSÉ fue el 5.º presidente constitucional de la República de Honduras en el periodo del 27 de enero de 1998 al 27 de enero de 2002 y es uno de los líderes más influyentes del Partido Liberal de Honduras. El 27 de enero de 1998, Carlos Roberto Flores Facussé tomó posesión para un período de cuatro años, en un acto al que asistieron ocho presidentes de la región. Su periodo finalizó el 27 de enero de 2002, entregando el poder al empresario Ricardo Maduro Joest, del Partido Nacional, tras ocho años de administraciones liberales. Crisis del Mitch e impacto económico[editar] Artículo principal: Huracán Mitch Flores anunció de inmediato la adopción de un programa de ajuste económico, acordado con el FMI, para reducir la inflación —que pese al buen comportamiento de los últimos años seguía por encima del 10%— y corregir los desequilibrios de las finanzas públicas. Sin embargo, en octubre de 1998 el país fue devastado por el Huracán Mitch, arruinando la cosecha del banano y destruyendo la tercera parte de las vías de comunicación. Se cobró además, según estimaciones del gobierno, 6,000 muertos, 8,000 desaparecidos, 12,000 heridos y millón y medio de damnificados; esto es, casi la cuarta parte de la población de Honduras en aquel momento. Flores visitó las zonas dañadas y declaró que el desastre iba a lastrar el crecimiento económico nacional durante años; multiplicó sus peticiones de ayuda internacional, con las cuales encabezó junto a su gabinete de gobierno el "Plan Maestro para la Reconstrucción y Transformación Nacional de Honduras", fijando como objetivos generales:
Rehabilitar y reanimar al sector productivo;
Reconstruir y mejorar la infraestructura del país; Rehabilitar y reformar el sector social; Fortalecer la estabilidad macroeconómica; Establecer un nuevo plan para la prevención y alivio de desastres; Adoptar un manejo transparente y eficiente de los recursos destinados a la reconstrucción. Las labores de reconstrucción agravaron el déficit de las finanzas públicas, pero 1999 se registró un crecimiento económico del 5% —exactamente el mismo que el registrado en 1998—, con una relativa estabilidad en los precios macroeconómicos claves y un índice inflacionario oficial oscilante entre 12% y 13%,3 mientras que las Reservas Internacionales Netas del Banco Central se incrementaron de 153.6 millones de dólares a 186.6 millones de diciembre de 1998 a septiembre de 1999.4 El siguiente año la tasa de crecimiento fue del 6,2%, entonces la más alta de Centroamérica. Todo esto gracias a la asistencia financiera y humanitaria del exterior. En febrero de 2000, el Grupo Consultivo para la Reconstrucción, integrado por delegados de varios organismos internacionales, aprobó el plan de recuperación propuesto por el gobierno de Flores y que cuantificaba las necesidades en 1,400 millones de dólares. La respuesta positiva de la comunidad internacional a los requerimientos hondureños tras el paso del huracán reforzó la convicción de Flores de someterse a las políticas fondomonetaristas de deflación, austeridad presupuestaria y privatizaciones; estas últimas afectaron, con fortuna dispar, a los aeropuertos y a la empresa nacional de comunicaciones Hondutel. No obstante, quedaron en suspenso otras reformas estructurales consideradas imprescindibles por los organismos donantes, pero con un coste social muy elevado, como las de la fiscalidad, el sector bancario y el servicio público. Gracias a la ayuda exterior la infraestructura básica del país pudo ser enderezada, pero la catástrofe del Mitch empeoró irremisiblemente, hasta extremos muy preocupantes, la situación de unas 83,000 familias. La destrucción de cosechas se tradujo en un descenso del 9% en la producción agrícola, con el consiguiente impacto sobre el índice de pobreza, del 63%, y los de desempleo y subempleo, que en 2001 sumaron el 33% de la población activa. Sumado a esto, en el último año de su mandato, nuevas inundaciones causadas por lluvias torrenciales y la contracción económica de Estados Unidos, primer socio comercial, expusieron las debilidades estructurales del entonces tercer país menos desarrollado de América, tras Haití y Nicaragua. Relaciones diplomáticas[editar] En 1999 tuvo que gestionar el grave deterioro de las relaciones diplomáticas con Nicaragua, a causa de la ratificación por Honduras en enero de 1998 del tratado de 1986 de delimitación de fronteras con Colombia, que supuso reconocer la soberanía de este país sobre las islas caribeñas de Providencia y San Andrés, reclamadas por Nicaragua. La ratificación se produjo días después de que se llegara a un acuerdo de principio con El Salvador para cerrar el contencioso sobre la frontera terrestre común. En febrero de 2000 unidades militares de Honduras y Nicaragua sostuvieron tiroteos con motivo de la delimitación de la frontera en el Golfo de Fonseca, que encajona la salida del primer país al Océano Pacífico, y los choques se reprodujeron justo un año después antes de que los dos gobiernos decidieran, en abril de 2001, someter la disputa al Tribunal Internacional de Justicia de La Haya. El 4 de febrero de 1999, Tegucigalpa fue sede de una reunión extraordinaria de presidentes centroamericanos y el 29 de junio de 2000 Honduras adoptó con México un tratado de libre comercio en el ámbito multilateral del denominado Triángulo Norte Centroamericano, junto con El Salvador y Guatemala, el cual debía entrar en vigor el 1 de enero de 2002. Tan solo unas horas antes de abandonar el poder, el gobierno de Flores anunció el restablecimiento de relaciones diplomáticas con Cuba, revirtiendo la decisión tomada en 1961 en el marco de las sanciones de la Organización de los Estados Americanos. El restablecimiento de relaciones plenas culminó un proceso de acercamiento mantenido entre Cuba y Honduras desde 1990. Orden político[editar] En el orden político, completó la labor realizada por Reina Idiáquez en la desmilitarización de los poderes públicos y la sumisión de los militares al presidente de la República, no sin la resistencia de los afectados. El 18 de septiembre de 1998 el Congreso aprobó las reformas constitucionales que convirtieron al Jefe del Estado en el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, con la facultad de nombrar a un civil para el Ministerio de Defensa, nombramiento que inmediatamente recayó en Edgardo Dumas Rodríguez. El 30 de julio de 1999 destituyó a la cúpula del ejército, tras un intento fallido el 16 de julio de capturar el Estado Mayor por un grupo de 29 coroneles y otros altos oficiales. El 26 de agosto de 1998 creó el Ministerio de Seguridad dentro de las previsiones del Plan Nacional, para combatir la delincuencia y la criminalidad, que crecía en los últimos años. Luego, el marco de la toma de posesión, el 27 de enero de 2002, fue aprovechada por Flores y los presidentes centroamericanos invitados para suscribir en Santa Rosa de Copán una declaración de lucha contra la pobreza, la inseguridad ciudadana, el narcotráfico y el terrorismo, así como de prevención de desastres naturales y de fortalecimiento de la integración subregional.