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“Facultad de Humanidades”
“Escuela Profesional de Derecho”
Modalidad Virtual
ALUMNA:
DOCENTE:
CURSO:
2022
I. INTRODUCCIÒN
Los registros son importantes y al momento de sus diversas inscripciones
surgen inconvenientes, ya sea por parte del Registrador o de la persona que ha
redactado el documento principal.
Art. 75. “Se entiende por inexactitud registral al desacuerdo que existe
entre lo que se registra y la realidad extra registral”
Desde lo citado, se llega a vislumbrar, que una exactitud puede o proviene de
un error u omisión que se comete en un asiento o partida registral.
Del último párrafo, quiero dar a inferir, es que una realidad registral gira en
relación con todo aquello que, encontrándose en aptitud para poder inscribirse
de manera legal, no se ha podido inscribir, puesto que su inscripción no ha sido
previamente solicitada o en todo caso, si fue solicitada, pero recibió
observaciones por parte del registrador, acarreando como consecuencia la
acogida registral. Los alegados anteriormente, son los actos extra registrales
en forma extensa.
Siguiendo con las inexactitudes registrales, se puede apreciar que existen dos
tipos. La primera, que fluye en los propios títulos (documento fehaciente
presentado ante el Registro Público) y en los asientos registrales. Cuando, la
inexactitud derive de un error u omisión que se haya cometido, se deberá
rectificar. En diversas oportunidades, el Registrador también puede actuar
rectificando mediante oficio, a solicitud y otras que si necesitan un nuevo título.
Para que nos quede más claro esta figura de una rectificación, me gustaría
proponer un breve ejemplo:
III. CONCLUSIONES
Se entiende por inexactitud del Registro a todo desacuerdo existente entre lo
que se ha registrado y la realidad extra registral, en palabras sencillas, lo
Registrado no se apega a la realidad.
La inexactitud se da, mayormente, por el registrador que al momento de
introducir los datos al sistema lo introduce, de forma errada o incompleta.
Como hemos podido ver en las páginas, cuando la inexactitud de un registro
provenga de error u omisión que se haya cometido en un asiento o partida
registral, se rectificará en la guisa que el Reglamento ha establecido.
La inexactitud, como hemos visto, se desprende en dos supuestos, que
provenga de errores cometidos y que provenga de causas distintas a los
errores u omisiones.
Las rectificaciones son la consecuencia de la inexactitud, que parte de un error
material o de concepto en que ha incurrido el Registrador al momento de
extender el asiento registral.
No se puede denegar la posibilidad de poder rectificar un asiento registral, de
modo que contiene una exactitud.