El enfoque del aprender va de la mano con la investigación, que trata de

dar respuesta a una serie de interrogantes o inquietudes el cual surgen de

ciertos acontecimientos donde el interés por saber el motivo de los hechos,
impulsa la búsqueda del conocimiento. En este sentido, los procesos de
investigación pueden ser variados y en este caso, podemos mencionar la
investigación científica, que según, Barrantes (2014), es “Un proceso
sistemático, formal, inteligente y controlado que busca la verdad por medio
del método científico y que nace de un sentimiento de insatisfacción, ya sea
vital o intelectual”. Dicho esto, resulta conveniente especificar que el método
científico abarca una serie de pautas para comprobar y solucionar algunas
problemáticas.

En consideración de ello, el método científico le permite al investigador

realizar su trabajo bajo un orden o control, el cual, está orientado a planificar
la indagación o búsqueda de contenido, para poder obtener reflexiones. De
igual manera, se centra en la crítica y el análisis para solventar cualquier tipo
de error, particularmente el método científico trata de definir con mayor
detalle todos los conceptos que utilice, con objetividad, mediante propuestas
que abarquen la realidad del fenómeno de estudio, con racionalidad, sin
dejar que se involucren sentimientos en el proceso, con sistematicidad para
darle coherencia a las ideas y no pasar por alto ninguna, en lugar de ello,
espera poder agruparlas todas en un mismo conjunto para darles la misma
relevancia.

En otro orden de ideas, el método científico también se caracteriza por

establecer una compresión de amplio alcance, que abarque información de
una forma más general que particular, así mismo, trabaja con falibilidad, para
que el científico que está realizando la investigación pueda reconocer cuando
existe alguna equivocación y así autocorregirse. En base a lo ya
mencionado, se puede decir, que el método científico es dinámico y pretende
asimilar y explicar hechos mediante la experimentación para comunicar y
deducir hallazgos, que incluso pueden ser debatidos entre investigadores,
para formular otras hipótesis o teorías.

Ahora bien, en este punto, resulta importante mencionar la función que

lleva a cabo el investigador, quien se enfrenta a ciertas dificultades durante el
desglose de los estudios que realiza. El investigador está orientado a cumplir
con su disciplina científica, este debe ser una persona con mucha intuición y
creatividad, alguien determinado que pueda seguir adelante a pesar de las
fallas, estando abierto a todas las posibilidades. El investigador se encarga
de precisar todo aquello que quiere conocer y respecto a que situaciones en
particular, así pues, el investigador debe guiarse por la metodología
científica, para formular sus operaciones de trabajo que lo ayuden a
acercarse con más rapidez al objetivo deseado.

Por otra parte, el objeto de la investigación en sí, es familiarizar todo

aquello que es de carácter novedoso, para profundizar los conocimientos,
ubicando la situación de estudio en un ámbito que sea conveniente para
comprender su origen y relaciones, evaluando, cuales son los elementos del
problema, los datos previos de investigación, los hechos actuales y la
relevancia del problema. El objeto de estudio, marca el camino hacia el éxito
de la investigación, porque allí el investigador define lo que quiere estudiar o
verificar, apoyándose en el diseño de indicadores de estudio para identificar
y procesar datos, que puedan ayudar a analizar críticamente la situación
para luego sistematizarla y resumirla.

Por consiguiente, es necesario evidenciar la necesidad de ejecutar el

proceso de investigación adecuadamente para que el investigador pueda
obtener resultados de calidad. En primera instancia, se tiene que seleccionar
el tema, plantear el problema y las interrogantes que se esperan responder,
este debe ser concreto y accesible, para así tener una noción básica de lo
que se espera investigar. Luego de esto, se debe establecer que
conocimientos se quieren obtener con la investigación, seleccionando el tipo
de investigación a usar, ya sea de tipo exploratoria, descriptiva o explicativa,
para poder indicar el objeto del problema que se estará empleando.

En segunda instancia, se tiene que delimitar la temática para darle más

significado a la investigación, creando dimensiones prácticas para proceder
con los estudios y que así estos tengan mayor alcance y oportunidad de
resolución. En otra instancia de las etapas del proceso de investigación, se
encuentra, el marco teórico o también llamado marco referencial, donde se
coloca el problema dentro de un conjunto de conocimientos firmes que
ofrezcan apoyo para la investigación, con la revisión de algunas bibliografías,
que básicamente son puntos de estudio para darle partida a la investigación
propia de otra persona. Se abarcan tesis, proyectos, artículos, libros, entre
otros textos que puedan funcionar de premisa para idear hipótesis.

Posteriormente en compañía de las hipótesis se adjuntan las variables y

dimensiones, las cuales pueden abarcar aspectos independientes o
dependientes, se destaca el diseño de la investigación, la población que es
objeto de estudio para seleccionar una muestra de análisis, las técnicas para
recolectar información, la recopilación de datos, el análisis de los mismos
para corroborar las interrogantes planteadas al principio y así poder generar
las conclusiones y recomendaciones de la investigación.

En resumen, el conocimiento involucra la curiosidad y el deseo de indagar

para proporcionar ideas que puedan servir en la creación de teorías, que
pueden ser usadas en procesos de investigación apoyadas en métodos
científicos que guíen las características del conocimiento en dirección de
novedosas soluciones para las variables presentadas y las hipótesis
planteadas, a fin de que, con la aplicación de ciertos paradigmas , se le
pueda dar forma a la reflexión implícita que generó la búsqueda de lógica,
reflexión y razón, para que sean usadas tanto en la vida cotidiana como para
la elaboración de proyectos.
 REFERENCIA: Barrantes, R. (2014). Investigación, Un camino al
conocimiento. Un Enfoque Cualitativo, Cuantitativo y Mixto. San José,
Costa Rica, Editorial EUNED.