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Revista de investigación vestibular 30 (2020) 285–293 285

DOI: 10.3233/VES-200714
Prensa IOS

Criterios diagnósticos del síndrome de mal

de débarquement: Documento de consenso
del Comité de Clasificación de la Sociedad
Bárány

Yoon Hee Chaa,∗, Robert W. Balohb, Catalina ChoC, Mans Magnussond, Jae Jin Songmi, Michael
StruppF, Floris Wuytsgramoy Jeffrey P. Staabh,1
aDepartamento de Neurología, Universidad de Minnesota, Minneapolis, MN, EE. UU.
bDepartamento de Neurología, Universidad de California Los Ángeles, Los Ángeles, CA, EE. UU.
CDepartamento de Neurología y Otorrinolaringología-Cirugía de Cabeza y Cuello, Escuela de Medicina Grossman de NYU, NY, EE. UU.

dDepartamento de Otorrinolaringología, Universidad de Lund, Lund, Suecia

miDepartamento de Otorrinolaringología Cirugía de Cabeza y Cuello, Hospital Bundang de la Universidad
Nacional de Seúl, Seúl, Corea del Sur
FDepartamento de Neurología y Centro Alemán de Vértigo y Trastornos del Equilibrio, Universidad Ludwig
Maximilians, Munich, Alemania
gramoLaboratorio de Investigaciones Aeroespaciales y de Equilibrio (LEIA), Universidad de Amberes, Amberes, Bélgica
hDepartamentos de Psiquiatría y Psicología y Otorrinolaringología-Cirugía de Cabeza y Cuello, Mayo
Clinic, Rochester, MN, EE. UU.

Recibido el 22 de febrero de 2020

Aceptado el 1 de julio de 2020

Resumen. Presentamos los criterios diagnósticos desíndrome de mal de débarquement(MdDS) para su inclusión en la Clasificación Internacional de Trastornos Vestibulares. Los criterios incluyen lo siguiente: 1] Vértigo no giratorio caracterizado por una percepción

oscilatoria ("meciéndose", "moviéndose" o "bamboleándose") presente de forma continua o durante la mayor parte del día; 2] El inicio ocurre dentro de las 48 horas posteriores al final de la exposición al movimiento pasivo, 3] Los síntomas se reducen temporalmente

con la exposición al movimiento pasivo (p. ej., conducir) y 4] Los síntomas persisten durante >48 horas. MdDS puede designarse como "en evolución", si los síntomas continúan pero el período de observación ha sido inferior a 1 mes; “transitorio”, si los síntomas se

resuelven en o antes de 1 mes y el período de observación se extiende al menos hasta el punto de resolución; o “persistente” si los síntomas duran más de 1 mes. Las personas con MdDS pueden desarrollar síntomas coexistentes de desorientación espacial, intolerancia

al movimiento visual, fatiga y exacerbación de dolores de cabeza o ansiedad. Se revisan las características que distinguen MdDS de la migraña vestibular, el mareo por movimiento y el mareo perceptivo postural persistente (PPPD). El vértigo oscilatorio moderado por el

movimiento también puede ocurrir sin un desencadenante de movimiento, por lo general después de otro trastorno vestibular, una enfermedad médica, un estrés psicológico elevado o un trastorno metabólico. La terminología para esta presentación no activada por

movimiento ha variado ya que tiene características tanto de MdDS como de PPPD. Se necesita más investigación sobre su relación fenomenológica y biológica con MdDS, PPPD y otros trastornos vestibulares. y se revisan los mareos perceptivos posturales persistentes

(PPPD, por sus siglas en inglés). El vértigo oscilatorio moderado por el movimiento también puede ocurrir sin un desencadenante de movimiento, por lo general después de otro trastorno vestibular, una enfermedad médica, un estrés psicológico elevado o un trastorno

metabólico. La terminología para esta presentación no activada por movimiento ha variado ya que tiene características tanto de MdDS como de PPPD. Se necesita más investigación sobre su relación fenomenológica y biológica con MdDS, PPPD y otros trastornos

vestibulares. y se revisan los mareos perceptivos posturales persistentes (PPPD, por sus siglas en inglés). El vértigo oscilatorio moderado por el movimiento también puede ocurrir sin un desencadenante de movimiento, por lo general después de otro trastorno

vestibular, una enfermedad médica, un estrés psicológico elevado o un trastorno metabólico. La terminología para esta presentación no activada por movimiento ha variado ya que tiene características tanto de MdDS como de PPPD. Se necesita más investigación sobre

su relación fenomenológica y biológica con MdDS, PPPD y otros trastornos vestibulares.

1. Introducción
1Con excepción del primer y último autor, el orden de autoría se coloca
alfabéticamente.

∗Autor para correspondencia: Yoon-Hee Cha, Departamento de Neurología,

Como sociedad multidisciplinaria de profesionales
Universidad de Minnesota, Minneapolis, MN, EE. UU. Correo electrónico: dedicados al avance de la ciencia vestibular y la
ycha@umn.edu. traducción clínica, la Sociedad Bárány y

0957-4271/20/$35.00 © 2020 – IOS Press y los autores. Reservados todos los derechos
Este artículo se publica en línea con acceso abierto y se distribuye bajo los términos de la licencia no comercial Creative Commons Attribution (CC BY-NC 4.0).
286 Y.-H. Cha et al. / Síndrome de mal de débarquement
el Comité de Clasificación de la Sociedad Bárány (CCBS)
ha encargado criterios de diagnóstico parasíndrome de
mal de débarquement(MDDS). El objetivo de crear un
conjunto de criterios aprobado internacionalmente
para MdDS es promover una nomenclatura común para
el diagnóstico clínico y brindar uniformidad a los
estudios de investigación que investigan la
fisiopatología de MdDS. Estos criterios se incluirán en la
Clasificación Internacional de Trastornos Vestibulares
(ICVD) [1]. La conceptualización relativamente reciente
de que los trastornos vestibulares pueden deberse a
alteraciones funcionales dentro del sistema nervioso
central sin lesión estructural concurrente representa un
avance importante dentro del campo de la neurotología
[2]. Esto es particularmente importante para la
determinación futura de los límites entre MdDS y otros
trastornos vestibulares funcionales con los que
comparte características comunes.
1.1. Historia
Las descripciones de personas que experimentan
vértigo, mareos y desequilibrio después de los viajes por
mar han aparecido en la literatura médica durante más de
300 años [3]. Este fenómeno finalmente se denominó '
síndrome de mal de débarquement', es decir, la
enfermedad del desembarco. La descripción más antigua
conocida de MdDS en la literatura de Europa occidental
parece ser de 1689 en los diarios de Guillermo III de
Orange. El autor describe cómo, después de cruzar el Canal
de la Mancha de los Países Bajos a Inglaterra, los soldados
experimentaron un grave "malestar" descrito como "el
suelo mismo pareció remar hacia arriba y hacia abajo
durante algunos días, de acuerdo con la forma de las olas".
[3].
Erasmus Darwin (abuelo de Charles Darwin) incluyó una
descripción de MdDS en la sección 'Vértigo' de su tomo
médico Zoonomia en 1796 [4]. Describió las ilusiones de
movimiento que ocurren después de los viajes por mar o
los viajes en diligencia como "movimiento ondulante". El
mal de tierra, que puede ser unforma frustrada de MdDS,
fue descrito por John Irwin en un artículo de Lancet de
1881 como un contrapunto al mareo (también conocido
como mal de mar) [5].
1.2. Terminología
La descripción de MdDS en el trabajo clásico de
JT Reason y JJ Brand de 1975, "Motion Sickness",
fue un paso inicial para llamar la atención de los
médicos generales sobre este trastorno [6].
Más tarde, Brown y Baloh publicaron la primera serie
de casos de seis personas con MdDS en la que
proporcionaron descripciones detalladas de la historia
clínica y los hallazgos del examen en estos pacientes
[7]. Estas descripciones formaron la base de la era
moderna de mayor atención e interés en el espectro
clínico y la biología subyacente de MdDS.
2. Métodos
En marzo de 2017, CCBS se reunió en Berlín, Alemania,
para presentar un formato para desarrollar criterios para
MdDS. El presidente seleccionado (YHC) fue aprobado para
formar un subcomité de especialistas internacionales para
comenzar a desarrollar criterios. El comité se formó y los
criterios preliminares se discutieron en junio de 2018 en
Uppsala, Suecia. Se produjo más comunicación por correo
electrónico y llamadas telefónicas entre los miembros del
grupo e individualmente entre el presidente y los
miembros del subcomité. El borrador de la propuesta se
presentó a los miembros de CCBS en junio de 2019. Los
criterios completos se presentaron a los miembros de la
Sociedad Bárány en enero de 2020. Se consideraron más
comentarios y sugerencias antes de enviarlos para su
publicación.
3. Criterios de diagnóstico
Aunque el término 'mal de débarquement,' se ha
aplicado previamente al mal de tierra que dura menos
de 48 horas, existen diferencias demográficas y de
pronóstico entre la inestabilidad común a corto plazo
que ocurre inmediatamente después del aterrizaje y el
síndrome que puede durar mucho más de 48 horas
[8-11]. Los criterios establecidos aquí reconocen una
distinción entre los síntomas no patológicos que duran
menos de 48 horas y los que duran más, que
constituyen el trastorno de MdDS.
3.1. Criterios para el diagnóstico del síndrome
de mal de débarquement
A. Vértigo sin giro caracterizado por una percepción
oscilatoria ("meciéndose", "bamboleándose",
o 'balanceo') presente continuamente o durante la mayor
parte del día1
B. El inicio ocurre dentro de las 48 horas posteriores al final de la
exposición al movimiento pasivo.2
 Y.-H. Cha et al. / Síndrome de mal de débarquement
C. Los síntomas se reducen temporalmente con la exposición al
movimiento pasivo3
D. Los síntomas continúan por más de 48 horas4
D.0 MdDS en evolución: los síntomas continúan pero
el período de observación ha sido inferior a 1
mes
D.1 MdDS transitorio: los síntomas se resuelven en o
antes de 1 mes y el período de observación se
extiende al menos hasta el punto de resolución
D.2 MdDS persistente: los síntomas duran más
de 1 mes
E. Síntomas que no se explican mejor por otra
enfermedad o trastorno.
notas
1. Generalmente se describe como una sensación oscilatoria
como 'mecerse', 'balancearse' o 'balancearse'. El término
'oscilatorio' se usa aquí para describir la percepción
subjetiva del movimiento y no el significado temporal del
vértigo que va y viene. Además, definimos 'mecerse'
como una percepción de adelante hacia atrás,
'balancearse' como una percepción de arriba a abajo y
'balancearse' como una percepción de lado a lado. Las
percepciones se pueden mezclar y también pueden
cambiar de dirección con el tiempo. Puede haber
sensaciones superpuestas de fuerza gravitacional sobre
el cuerpo en cualquier dirección de traslación.
2. Los desencadenantes típicos incluyen
embarcaciones de transporte como botes,
aviones, automóviles y trenes, pero también
pueden incluir edificios que se balancean, camas
de agua, equipos de ejercicio y otras plataformas
que mueven pasivamente al individuo [7, 12, 13].
Puede haber una exposición secuencial a más de
un desencadenante, por ejemplo, viajes por agua
seguidos de viajes por aire. Las características
clave de los desencadenantes son un estímulo
oscilatorio o periódico junto con una duración
mínima de exposición, generalmente del orden
de horas. La experiencia de viaje que conduce a
un episodio de MdDS no parece tener ninguna
característica particular en términos de
enfermedad relacionada o mareo por
movimiento, pero es común que las personas con
MdDS hayan experimentado un factor estresante
físico o psicológico concurrente durante el viaje
que desencadenó sus síntomas. [13, 14].
Todavía tiene que haber un informe claro de vértigo
oscilatorio persistente desencadenado por la exposición
a la realidad virtual. Informes previos de MdDS causados
287
por estímulos de realidad virtual hizo referencia a un
estudio que informó menos de 25 minutos de
mareos (no vértigo) después de un juego de realidad
virtual [8, 16–18]. Esto no cumpliría con los criterios
para MdDS establecidos aquí, ni alcanzaría un
umbral de relevancia clínica.
Se han descrito inestabilidad e intolerancia
ortostática después de un viaje espacial, pero el
vértigo oscilatorio persistente no es un síntoma
típico posterior al viaje espacial [19-21].
3. Conducir un automóvil o volver al estímulo
desencadenante, como volver a subirse al bote,
aliviará temporalmente el vértigo de MdDS. Sin
embargo, los síntomas suelen rebotar cuando el
estímulo cesa, por ejemplo, un automóvil se
detiene en un semáforo. Caminar también puede
aliviar los síntomas temporalmente, pero el efecto
es variable según el ritmo y el ritmo subyacente
percibido. En algunos individuos, acostarse
aumenta la percepción del movimiento [13].
4. Los síntomas de corta duración que duran menos de
48 horas son extremadamente comunes incluso
entre individuos jóvenes sanos [8–11]. Los síntomas
persistentes que componen el síndrome clínicamente
relevante de MdDS son significativamente menos
comunes y pueden conducir a altos niveles de
morbilidad [13, 22]. Si un paciente presenta síntomas
de menos de un mes de duración y aún no ha pasado
un mes de tiempo de observación, debe
diagnosticarse como D0, MdDS 'en evolución'. El
“MDS transitorio” (D1) solo se puede diagnosticar
retrospectivamente si los síntomas remiten en
menos de un mes. MdDS persistente (D2) se
diagnostica una vez que los síntomas persisten más
de un mes.
Comentario
3.2. Armonización con la clasificación ICVD
De acuerdo con ICVD, que estableció una distinción no
jerárquica entre los términos "mareos" y "vértigo", y
además distinguió el vértigo "giratorio" del "no giratorio",
la percepción del movimiento descrita en MdDS se
clasificaría como "no giratoria". vértigo.' Según la
clasificación de ICVD, la percepción de movimiento
oscilante experimentado en MdDS generalmente se
consideraría una forma de "vértigo interno", definido como
la "sensación de movimiento propio cuando no ocurre
ningún movimiento propio o la sensación de movimiento
propio distorsionado durante un otro-
288 Y.-H. Cha et al. / Síndrome de mal de débarquement
sabio movimiento normal de la cabeza,” [1]. MdDS se codificaría
como 1.2.7 "Otro vértigo desencadenado", específicamente, vértigo
inducido "después de una exposición prolongada al movimiento
pasivo (como ocurre después de los viajes por mar)".
La contraparte del 'vértigo interno' es el 'vértigo externo',
actualmente definido como “la falsa sensación de que el
entorno visual está girando o fluyendo” [1]. Este no es un
síntoma central de MdDS. Aunque las percepciones visuales de
movimiento oscilatorio o vibración ocasionalmente se pueden
notar en MdDS, si las ilusiones de movimiento visual de
cualquier forma son los síntomas predominantes, se debe
buscar un diagnóstico alternativo a MdDS.
3.3. Características adicionales
Una dimensión de MdDS que no está capturada en la
terminología actual de ICVD se relaciona con la percepción
háptica o somática del entorno en movimiento, por ejemplo, 'el
suelo ondulando' o 'meciéndose en un bote'. Esto se percibe
como fuerzas que actúan sobre la cabeza o el cuerpo en lugar
de un fenómeno visual y, por lo tanto, no sería coherente con la
definición de vértigo externo de la ICVD, que se define como un
fenómeno visual. La intensidad de esta fuerza sobre el cuerpo
puede fluctuar a medida que el punto de referencia de la
fuente de movimiento cambia entre el individuo y el entorno.
Actualmente se desconoce la base de esta percepción en MdDS.
Las personas con MdDS pueden experimentar simultáneamente
mareos, definidos como "una sensación de orientación espacial
perturbada o deteriorada sin una sensación de movimiento falsa o
distorsionada". El mareo puede ser espontáneo (2.1) o puede tener
uno o más factores desencadenantes (2.2), incluido “después de una
exposición prolongada al movimiento pasivo (como ocurre después
de los viajes por mar)” [1]. Tanto el mareo por movimiento de la
cabeza (2.2.2) como el mareo inducido visualmente (2.2.3) son
particularmente comunes en MdDS y pueden ocurrir
simultáneamente con los síntomas centrales de MdDS [23].
Otros síntomas que pueden formar parte del
espectro de MdDS incluyen ralentización cognitiva,
fatiga, fotofobia, fonofobia, dolor de cabeza y ansiedad
[23]. Estos ocurren en mayor o menor grado en cada
individuo y su presencia no agrega precisión
diagnóstica dada su naturaleza inespecífica.
4. Características clínicas del SDMD
4.1. Epidemiología
Una práctica de neurotología de nivel terciario informó que el
1,3% de sus pacientes de la clínica fueron diagnosticados con
MdDS en comparación con el 8,6% con la enfermedad de Ménière
durante un período de cinco años [24]. Sin embargo, debe tenerse
en cuenta que el MdDS con frecuencia se diagnostica erróneamente
como otros trastornos en la comunidad médica general (consulte la
Sección 6), lo que dificulta una medición directa en la población [25].
4.2. Demografía
La experiencia temporal de vértigo no giratorio por
exposición posterior al movimiento que dura menos de 48
horas es común en personas sanas y muestra una
distribución de sexo aproximadamente igual [11, 26]. Sin
embargo, los MdDS que duran más de 48 horas y, en
particular, que duran más de 1 mes, están
mayoritariamente representados por mujeres (75-100 %)
[13, 27, 28]. La edad de inicio alcanza su punto máximo
entre los 40 y los 49 años y sigue una distribución normal
[13]. Se ha notificado MdDS en niños de hasta 12 años y en
adultos de más de 70 años, aunque la experiencia clínica
no publicada dentro del presente comité indica que los
límites superior e inferior se extienden más [13].
4.3. curso temporal
Un individuo puede experimentar más de un episodio de por
vida de MdDS, así como episodios de vértigo oscilante persistente
similar pero no desencadenado por el movimiento que siguen o
pueden estar intercalados con episodios desencadenados por el
movimiento [23]. Los episodios subsiguientes suelen ser, aunque no
siempre, más prolongados que los episodios anteriores y la
posibilidad de una recuperación espontánea disminuye en función
exponencial de la duración de la enfermedad [23].
La gravedad de los síntomas de MdDS dentro de un episodio
actual puede fluctuar debido a factores como el estrés, la falta de
sueño y factores hormonales, y estos últimos se representan por el
empeoramiento de los síntomas perimenstruales [13, 15]. La
intensidad del vértigo puede estar modulada por la posición del
cuerpo. Aunque estar de pie es generalmente peor que sentarse o
acostarse, aproximadamente un tercio de las personas informan
una mayor amplitud del vértigo al acostarse [13]. Por lo tanto, a
diferencia de los trastornos que se caracterizan principalmente por
la inestabilidad al estar de pie, el vértigo de MdDS persiste en
diferentes posiciones del cuerpo.
4.4. Síntomas concurrentes comunes
Las personas con MdDS comúnmente tienen síntomas
adicionales que se desarrollan con o después del inicio de
su trastorno. Estos incluyen sensaciones de desorientación
espacial, fatiga, intolerancia al movimiento visual, dolores
de cabeza y ansiedad [13, 23]. Estos pueden
 Y.-H. Cha et al. / Síndrome de mal de débarquement
son anteriores a la aparición de MdDS y pueden empeorar con
la aparición de MdDS, pero no se consideran elementos
centrales de MdDS. Se desconocen sus posibles conexiones
fisiopatológicas con MdDS. Cuando cualquiera de estos
síntomas es lo suficientemente grave como para constituir una
afección diagnosticable por sí mismo (p. ej., un dolor de cabeza
específico o un trastorno de ansiedad), estos diagnósticos
deben realizarse además de MdDS y tratarse con terapias
establecidas.
5. Exámenes de laboratorio
El diagnóstico de MdDS se basa únicamente en la historia
clínica, relevante para los Criterios AD. No hay hallazgos en el
examen físico, las pruebas de laboratorio o las imágenes que
sean patognomónicos de MdDS [23, 29]. El nistagmo posicional
estático que cambia de dirección en la oscuridad se ha
observado en MdDS, pero es un hallazgo no específico que
también se observa en personas sin MdDS [7].
Cuando hay un inicio típico de los síntomas de acuerdo
con los criterios establecidos, el rendimiento de las pruebas
de función vestibular y auditiva es muy bajo e incluso
puede descarrilar un diagnóstico preciso al descubrir
hallazgos inespecíficos o falsos positivos [23, 28]. Del
mismo modo, la literatura disponible indica que las
imágenes cerebrales estructurales clínicamente disponibles
con MRI o CT son de bajo rendimiento en el diagnóstico de
MdDS [23]. Se pueden realizar pruebas complementarias
del canal semicircular, otolitos o función coclear y/o
imágenes cerebrales en casos con características atípicas,
como aquellos con pérdida auditiva concurrente,
anomalías motoras oculares o déficits neurológicos [24].
Se han identificado alteraciones en los reflejos vestíbulo-
oculares y cambios en el metabolismo cerebral y la
conectividad funcional en la investigación de neuroimagen
en MdDS [30-32]. Sin embargo, estas tecnologías de
neuroimagen no se recomiendan para diagnósticos
clínicos.
6. Diagnóstico diferencial
6.1. Migraña vestibular
La migraña vestibular se define actualmente como un
trastorno episódico en el que ocurren al menos cinco
episodios distintos de síntomas vestibulares que duran de
5 minutos a 72 horas en un individuo con antecedentes de
migraña típica y en el que el 50% de los episodios de
vértigo están asociados con una o más características de
migraña sin vértigo, por ejemplo, aura, pho-
289
tofobia y fonofobia [33]. Los síntomas vestibulares episódicos
relacionados con la migraña pueden responder al tratamiento
convencional contra la migraña [34-41].
La migraña vestibular y el MdDS comparten muchas
características. Ambos ocurren más comúnmente en mujeres,
empeoran durante el período perimenstrual e involucran
síntomas vestibulares que comienzan más tarde en la vida [13,
33, 42]. Los dolores de cabeza por migraña pueden
desarrollarse simultáneamente con el inicio de MdDS y
empeorar con el desarrollo de MdDS [43]. Las personas que
desarrollan vértigo persistente no provocado por el
movimiento que es fenotípicamente similar a MdDS (consulte la
Sección 7) tienen una tasa más alta de dolores de cabeza por
migraña preexistentes que aquellos que desarrollan MdDS
según se define en estos criterios, lo que indica que puede
haber cierta biología compartida entre migraña vestibular y
percepciones persistentes de oscilación [23, 43].
A pesar de las características clínicas compartidas,
existen varias diferencias entre la migraña vestibular y el
MdDS. El porcentaje de personas con antecedentes de
migrañas antes de la aparición de MdDS no parece ser
mayor que la población basal [23, 25]. Aunque los dolores
de cabeza por migraña pueden desarrollarse con el inicio
de MdDS, más del 50% de los pacientes con MdDS no
cumplen los criterios de migraña en ningún momento de
sus vidas [43]. El dolor de cabeza asociado con MdDS
también puede describirse como una presión persistente
en lugar de un dolor punzante unilateral característico de
la migraña [43]. Finalmente, MdDS y trastornos de vértigo
oscilante persistente desencadenados por no movimiento
se presentan con un curso crónico que no cumpliría con las
restricciones temporales de los criterios para la migraña
vestibular [13].
Debido a las distinciones entre MdDS y migraña
vestibular, se debe hacer un diagnóstico de migraña
vestibular.ademása MdDS si se cumplen los criterios
para ambos trastornos, por separado. Se necesitan más
investigaciones para determinar cuánta superposición
biológica existe entre estos trastornos.
6.2. Cinetosis
El movimiento pasivo o activo de la cabeza o el movimiento del
campo visual pueden inducir el mareo por movimiento. El mareo por
movimiento incluye una combinación variable de náuseas,
conciencia estomacal, sudoración, somnolencia, dolor de cabeza o
tensión ocular/visión borrosa (mareo por movimiento inducido
visualmente) [6, 44]. No está asociado con el vértigo según lo
definido por ICVD [1]. El mareo por movimiento se produce durante
el estímulo del movimiento y aumenta gradualmente con una
exposición más prolongada. Aunque algunos síntomas pueden
persistir más allá de la exposición al estímulo, no comienzan
290 Y.-H. Cha et al. / Síndrome de mal de débarquement
de novodespués de que el estímulo haya terminado por completo. Esta
característica es diferente a MdDS, que comienza después de que finaliza
el estímulo de movimiento.
Las personas con MdDS pueden experimentar mareos
durante la exposición que desencadenó sus síntomas y
también pueden experimentar náuseas al principio del
curso de sus síntomas [14]. Sin embargo, las náuseas
generalmente disminuyen con el tiempo en MdDS y no son
una característica distintiva [23]. Además, la anulación del
vértigo oscilante al conducir o viajar en automóvil
implicaría que MdDS es fisiopatológicamente distinto del
mareo por movimiento.
6.3. Mareos perceptivos posturales persistentes
El mareo perceptivo postural persistente (PPPD, por sus
siglas en inglés) se define como un trastorno vestibular crónico
que dura al menos tres meses y se manifiesta con mareos,
inestabilidad o vértigo no giratorio [45]. La postura erguida, el
movimiento activo o pasivo y la estimulación visual exacerban
la PPPD, aunque los síntomas de la PPPD pueden fluctuar con o
sin una provocación específica [45]. El mareo perceptivo
postural persistente se desencadena por trastornos
vestibulares o neurológicos, angustia psicológica o
enfermedades médicas. Por lo tanto, los precipitantes y
provocaciones de MdDS difieren de los de PPPD. MdDS se
desencadena por la exposición al movimiento pasivo, mientras
que PPPD se desencadena por eventos que interrumpen la
función de equilibrio. Las personas con MdDS, como criterio
definitorio del trastorno, experimentan una reducción temporal
de los síntomas con la reexposición al movimiento pasivo,
mientras que las personas con PPPD tienen muchas más
probabilidades de experimentar un aumento de los síntomas
como característica definitoria. Además, las personas con PPPD
experimentan una exacerbación de los síntomas con la
exposición a estímulos de movimiento visual complejo como
una característica definitoria del trastorno. La sensibilidad a los
estímulos de movimiento visual ocurre en la mayoría de las
personas con MdDS, pero no es una de sus características
principales [23].
7. Áreas de incertidumbre
Se ha descrito un trastorno fenotípicamente similar al MdDS
tanto en informes clínicos como en estudios de intervención en
los que se produce un vértigo persistente caracterizado por
una percepción de oscilación (balanceo, balanceo, balanceo) sin
un desencadenante de movimiento previo. Este síndrome se ha
llamado de forma variable "SMD espontáneo", "SMD
aberrante", "SMD atípico", "similar al SMD", "SMD no
desencadenado por el movimiento".
y 'mixto-MdDS.' [13, 31, 43, 46]. Este último término se ha utilizado para
describir casos en los que un episodio desencadenado por el movimiento
sigue a un episodio desencadenado por el movimiento, reconociendo que
los individuos pueden experimentar tanto episodios desencadenados por
el movimiento como no desencadenados por el movimiento [23].
Los miembros del comité examinaron intensamente la
cuestión de cómo categorizar los casos de vértigo oscilante
persistente no desencadenados por el movimiento con
respecto a MdDS y PPPD. Hubo apoyo para alinear la
presentación desencadenada sin movimiento con cada uno,
ambos y ninguno en función de características clínicas similares
y distintas de cada grupo de diagnóstico (Tabla).
El principal punto de discusión en el comité fue el
efecto del movimiento activo o pasivo sobre los
síntomas. Estos individuos actualmente no
categorizados no cumplirían con el Criterio B pero
cumplirían con los Criterios A, C y D para MdDS. Los
factores incitadores para este grupo desencadenado
sin movimiento se alinean estrechamente con los de
PPPD, sin embargo, el Criterio B para PPPD requiere
que los síntomas se exacerben por el movimiento
activo o pasivo sin importar la dirección. Se aclara
aún más en la sección Comentarios de los criterios
de PPPD que este movimiento puede ser
autogenerado o implicar un movimiento pasivo,
como viajar en un vehículo. Por lo tanto, el grupo de
vértigo oscilante moderado por movimiento
desencadenado por no movimiento estaría excluido
de PPPD. Sin embargo, agregando una capa de
matices,
Se plantearon las teorías de los mecanismos subyacentes de
MdDS, PPPD y el grupo de vértigo oscilante moderado por
movimiento no desencadenado, pero finalmente se decidió que
actualmente no hay suficientes datos para respaldar la inclusión del
grupo de vértigo oscilante moderado por movimiento no
desencadenado por movimiento en ninguna de las categorías. .
8. Direcciones futuras
El comité estuvo unánimemente de acuerdo en que se
requerían más investigaciones científicas para alinear con
precisión los fundamentos biológicos de MdDS con la
nomenclatura de ICVD e identificar más claramente sus
distinciones de los trastornos fenotípicamente
relacionados. Actualmente, la DCV incluye algunos
trastornos definidos en descripciones fenomenológicas
(migraña vestibular) [33], otros con criterios diagnósticos
que incluyen tanto síntomas como signos asociados (VPPB,
enfermedad de Ménière, vestibulopatía bilateral,
presbivestibulopatía, hemodinámica ortostática).
 Y.-H. Cha et al. / Síndrome de mal de débarquement 291

tabla 1
Comparación de las características clínicas de MdDS, PPPD y un síndrome de superposición

Mal de desembarque No activado por movimiento Persistente Postural-Perceptivo

Síndrome (MDDS) moderado por movimiento Mareos (PPPD)
vértigo oscilante
Síntomas centrales
Vértigo no giratorio Interno, rara vez externo Interno, rara vez externo Interna o externa, puede ser
oscilatorio oscilatorio oscilatorio a veces
Inestabilidad Puede ocurrir Puede ocurrir Caracteristica que define

Hipersensibilidad a los complejos visuales. Puede ocurrir Puede ocurrir Caracteristica que define

estímulos de movimiento

precipitantes
Movimiento (barcos, aviones, coches, etc.) Sí No No
Otros médicos, psicológicos, No Sí Sí
o eventos vestibulares
Respuesta a la provocación
Reducido por el movimiento pasivo Sí Sí No
Empeorado por el movimiento pasivo No Extraño Sí
Empeorado por el movimiento activo Variable Variable Sí
Empeorado por la postura erguida Sí Sí Sí
Pruebas de diagnóstico
Pruebas de función vestibular Normal Normal Variable (relacionada con la activación
condición)
Neuroimagen clínica Normal Normal Normal
Respuesta al tratamiento
ISRS/IRSN Sí Sí Sí
Benzodiazepina Sí Sí Sí (no primera línea)
Terapia física No No Sí
Psicoterapia No Desconocido Sí
Hallazgos de la investigación de neuroimagen
IRMf Cortical de largo alcance, insular, Desconocido cortical de largo alcance,
límbico y cerebeloso periopercular, límbico y
cambios de conectividad conectividad cerebelosa
cambios
MASCOTA Hipermetabolismo en el Desconocido Desconocido
corteza entorrinal &
amígdala; hipometabolismo
en prefrontal y temporal
cortezas

mareo/vértigo) [47-51], y otro que tiene un criterio basado
en la respuesta al tratamiento (bloqueantes de los canales
de sodio en la paroxismia vestibular) [52]. La ampliación del
espectro de trastornos vestibulares puede requerir la
adaptación de nueva terminología en el futuro para evitar
inconsistencias inherentes. Por ejemplo, si la experiencia
de vértigo oscilante persistente es distinta de otras formas
de vértigo no giratorio en términos de demografía,
síntomas asociados, desencadenantes, factores de
modulación e implicaciones futuras para la salud, puede
estar justificado crear su propia designación.
Un área de incertidumbre con respecto a MdDS es si la
mejora con el movimiento pasivo es una característica
crítica que diferencia el vértigo persistente caracterizado
por percepciones oscilatorias de otros trastornos
vestibulares, independientemente de la causa. Existe
evidencia de la importancia pronóstica de la vía mecánica
tomada para el desarrollo de los síntomas. Por ejemplo,
El hidrops endolinfático tardío debido a un daño previo en el oído
interno tiene un peor pronóstico que la enfermedad de Ménière
idiopática, aunque ambas conducen a episodios de vértigo y pérdida
de audición [53, 54]. De manera similar, el vértigo oscilante
persistente que se desarrolla después de un desencadenante sin
movimiento tiene una tasa de respuesta al tratamiento más baja
que el MdDS desencadenado por movimiento [13, 43, 46].
Se proponen algunas áreas de exploración futura para
resolver esta ambigüedad:
Estudios cualitativos: Los distintos elementos entre estos grupos
(activados por movimiento y sin movimiento) pueden ser demasiado
sutiles para capturarlos con los métodos cuantitativos actualmente
disponibles. Puede haber beneficios al evaluar las diferencias en
cada grupo en función de temas como la historia natural y las
futuras implicaciones para la salud.
Análisis de la marcha:Las estrategias de marcha activadas
por individuos con MdDS vs PPPD vs otros trastornos de vértigo
persistente podrían diferenciarse. Para examen-
292 Y.-H. Cha et al. / Síndrome de mal de débarquement
Por ejemplo, la velocidad al caminar puede verse afectada por la
periodicidad del vértigo interno y si esta percepción es anulada por
el movimiento.
Pruebas posturales:Se pueden evaluar las diferencias en las
estrategias posturales involucradas durante la perturbación del equilibrio
en cada grupo, especialmente aquellas desencadenadas por estímulos
visuales.
Síndromes asociados:El curso temporal y el impacto de la
migraña, los trastornos psiquiátricos, los dominios cognitivos o
los antecedentes familiares pueden revelar características
disociables.
Respuesta al tratamiento:La respuesta a clases
específicas de medicamentos, fisioterapia, terapia
vestibular, psicoterapia o neuromodulación puede mostrar
diferentes tendencias en cada grupo.
Estudios de imagen:La conectividad funcional inducida por
la tarea y el estado de reposo, así como las mediciones
morfológicas, pueden mostrar correlaciones entre las regiones
visual, vestibular, insular, límbica, prefrontal y cerebelosa que
pueden proporcionar información sobre las operaciones de las
conexiones vestibulares centrales que sustentan la percepción
de la estabilidad de la cabeza y el cuerpo en cada grupo.
Expresiones de gratitud
Las reuniones de trabajo para la Clasificación
Internacional de Trastornos Vestibulares (ICVD) cuentan
con el apoyo financiero de la Sociedad Internacional Bárány
y de Neuro+eV, Berlín, Alemania, una asociación sin fines
de lucro para la investigación neurológica.
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