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Juicio Ejecutivo
Juicio Ejecutivo
Uno de los primeros trámites de este juicio es el embargo, con lo que se acentúa el
carácter expeditivo del proceso ejecutivo. Pero ello no debe autorizar para
confundirlo con el proceso de ejecución, que no termina en sentencia, mientras que
el juicio ejecutivo sí acaba con sentencia. El procedimiento del juicio ejecutivo,
siendo un proceso de cognición, es esencialmente distinto del juicio ordinario de
mayor cuantía. Incluso es frecuente denominar ejecutante al demandante,
y ejecutado al demandado.
Complementación de la conceptualización:
Juicios ejecutivos: Se define que son los procedimientos judiciales en los cuales
la actividad de ejecución, que en los juicios ordinarios se desarrolla a partir de la
sentencia, precede, en una medida determinada, a la fase de cognición o
declaración que también forma parte de estos juicios. Son, pues, juicios en que
primero se ejecuta algo y luego se entra en el fondo del asunto; pero, en todo caso,
el alcance de estos procedimientos están tasados por la ley: ni la ejecución previa,
ni el conocimiento de la pretensión son completos. El juicio ejecutivo común está
regulado de forma válida para todos los supuestos excepcionales previstos por la
ley adjetiva general. Frente a este tipo genérico, se encuentran los juicios ejecutivos
especiales que, en su mayoría, están regulados por leyes especiales.
Juicios ejecutivos especiales: Son procedimientos que, sobre la base del juicio
ejecutivo común, presentan características que los distancian, con intensidad
variable según los casos, del modelo matriz. Así, los juicios cambiarios son
especialidades del juicio ejecutivo común por fundamentarse en letras de cambio,
cheques o pagarés. El juicio ejecutivo en materia de seguro obligatorio de
automóviles, el procedimiento de apremio en negocios de comercio y el sumario
ejecutivo para la reclamación de la minuta de honorarios de Abogado y Procurador
en un litigio, constituyen, junto con los anteriores, los cuatro grupos principales de
juicios ejecutivos especiales.
PROCESO DE EJECUCIÓN
I concepto.
II. Naturaleza.
III. Tipos de Ejecución.
IV. Presupuesto de la Ejecución.
A. la acción ejecución.
B. el titulo ejecutivo.
C. patrimonio ejecutable.
1) Inembargabilidad por razones de interés público. a). bienestar nacional.
b). ejidos y parcelas concebidas por la administración. c) sumas debidas
a contratistas.
2) Inembargabilidad por razones de interés social. a) salarios y honorarios.
b) alimentos y pensiones alimenticias. c) mobiliario y vestidos del deudor
y de su familia. d) instrumentos de trabajo. e) pensiones, montepíos y
jubilaciones. f) seguros. g) sepulcros y mausoleos.
3) inembargabilidad por razones de interés privado. a) uso, habitación y
usufructo. b) derechos en el fideicomiso. c) patrimonio familiar.
4) bienes exceptuados por otras leyes.
I. Concepto:
La doctrina reconoce, como más adelante se dirá, que las sentencias propiamente
ejecutables son las de condena y no las meramente declarativas o constitutivas.
Igualmente, como la apunta Guasp, no es preciso que se encuentre una conexión
inescindible entre proceso de conocimiento y proceso de ejecución, ya que ambos
pueden presentarse en forma autónoma e independiente.
II. La Naturaleza
A. La Acción Ejecutiva.
Empleamos el termino acción porque es el que sigue usándose en las
practicas forenses guatemalteca. No hay razón para desvincular el estudio
de la acción ejecutiva del de la acción en general. Sin embargo, no podemos
dejar de apreciar que algún aspecto peculiar la caracteriza, que para su
ejercicio debe justificarse la existencia de un derecho ya reconocido. Cuando
se ejercita una acción para ejecutar una sentencia, la vinculación con el
derecho es evidente, porque en la misma sentencia está reconocido. Por ello
también cuando se trata de ejecución de sentencias, no solo se limita la
posibilidad de oponer excepciones en cuanto la naturaleza de estas, sino que
solo pueden hacerse valer las nacidas con posterioridad a la sentencia. La
relación entre el derecho y la pretensión ejecutiva que se hace valer también
existe cuando el título base de la ejecución es de naturaleza u obligacional,
o de bien carácter administrativo.
B. El Titulo Ejecutivo
Conforme a las ideas que en cuanto al proceso de ejecución expresa. De la
plaza las pretensiones del actor han fundarse en un título que, por su sola
apariencia, dispense de entrar en la fase de discusión y presente como
indiscutible, al menos de momento, el derecho a obtener la tutela jurídica. En
el proceso de ejecución su finalidad exclusiva, es la de actuar un derecho ya
reconocido, por modo más o menos perfecto, con propósito de reparar una
violación de determinadas obligaciones por el que las contrajo o fue
constreñido a su cumplimiento. También el proceso se ha de modelar sobre
ciertas bases evitando en lo posible el perjuicio innecesario en el patrimonio
del obligado.
c) Patrimonio Ejecutable
Ya señalamos que el proceso de ejecución en su forma es común u ordinaria
hace efectivos los derechos del acreedor a través de la afectación del
patrimonio del deudor. La ejecución in personam solo existe en lo penal. En
lo civil la ejecución se lleva acabo in rem. Por ellos en los ordenamientos
civiles suelen estipular que el deudor responde de sus obligaciones con todos
sus bienes presentes y futuros y también por eso se afirma que sobre dicho
patrimonio existe una especie de prenda general a favor de sus acreedores.
El creedor que posee un título ejecutivo suficiente con base en el cual inicia
un proceso de ejecución, persigue, obviamente la satisfacción de su crédito
mediante el embargo de bienes suficientes tomados del patrimonio del
deudor, a fin de ser vendidos para satisfacer ese crédito con el producto que
se obtenga
Este aspecto es estudiado por Guasp, quien sostiene que la ejecución expropiativa
tiene que ser objetivamente posible, dice Guasp “por encima índole, no cabe admitir
ninguna imposibilidad, a priori, en la ejecución de entrega de una cantidad de dinero.
3º) Se trata, pues en nuestro sistema, tal como lo apunta Guasp para el régimen
procesal español, de una hipótesis de su realización del proceso, que no afecta a
su validez o regularidad, en la situación comentada también nos supone de
manifiesto que no tiene objeto continuar con tramites de un proceso de ejecución si
no se cuenta con bienes embargados suficiente que puedan ser objeto de
adjudicación judicial en pago a los de venta forzosa.
El proceso de ejecución nos enfrenta a una actividad instructora esencial para que
ese proceso tenga eficacia. Guasp enseña que las actividades de instrucción en el
proceso de ejecución, tienden a proporcionar al juez bienes con los cuales se hace
posible la terminación normal del mismo y que el embargo es precisamente el acto
con el que trata de satisfacerse esta necesidad instrumental.
Código procesal guatemalteco le concede al creador el derecho a designar bienes
sobre los cuales haya de practicarse el embargo (art. 301), pero en el art. 306
establece qué bienes no pueden ser embargados. También leyes especiales
disponen la inembargabilidad de otros.
a) Bienes Nacionales
Es criterio generalmente admitido que los bienes del Estado no son embargables.
Entre nosotros se invoca la aplicación del art. 1348 del vetusto código fiscal, que
dispone: Ningún tribunal podrá despachar mandamiento de ejecución ni dictar
providencia de embargo contra las rentas o bienes nacionales. Este código es de
fecha 17 de junio de 1881 y no ha merecido la atención que debe de parte de los
legisladores. La ley Orgánica del Presupuesto, Contabilidad y Tesorería de la
Nación o sea del DECRETO Presidencial No. 552, de fecha 22 de febrero de 1956,
establece EN EL ART. 119.
1º Pues bien, relacionado todas estas normas se concluye en que tales bienes son
inembargables. Los bienes municipales se encuentran en esa situación.
Les comunes conocerán de todas las controversias de derecho privado en las que
el Estado, el municipio o cualquier entidad descentralizada, autónoma
semiautónoma, actúen como parte. Algunas legislaciones, como por ejemplo la
chilena, con templan específicamente el caso.
No son embargables los elegidos de los pueblos y las parcelas concedidas por la
administración pública a los particulares, si la concesión lo prohíbe (art 306 inc. 1o
Código Procesal Civil y Mercantil). Siendo los elegidos, inmuebles de uso común
para os vecinos de un pueblo lindante con él, es lógico que la ley los proteja
No son embargable según el inciso 2do. Del art. 306 del Código procesal. Las
sumas 0debidas a los contratistas de obra pública, con excepción de las
reclamaciones de los trabajadores de la obra o de los que hayan suministrado
materiales para ella, pero si podrá embargarse la suma que deba pagarse al
contratista después de concluida la obra.