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SALMO 39 El significado verso por verso

El versículo 1 Y 2 y yo dije: prestaré atención a mis caminos, que no pecaré con mi lengua:
mantendré mi boca con una brida, mientras que el impío está delante de mí .: estaba mudo de
silencio, mantuve la paz, incluso del bien y mi pena se agitó.

Aquí, vio la importancia del silencio. Hay tiempo para todo, hay tiempo para plantar y cosechar,
hay tiempo para hablar y no hablar también. Por lo tanto, estos dos versículos se pueden traducir
cuando uno necesita permanecer en silencio, a menos que digamos que los malvados nos
reprochan y acusan injustamente. Podemos meditar en silencio. Aquí David fue consciente de no
pecar con su lengua que puede escupir palabras mientras espera en el Señor, en este versículo
podemos rogar que nos instruya sobre qué hacer entre la corrupción, la paciencia de lo que
estamos pidiendo.

Versículo 3: Mi corazón ardía dentro de mí, mientras pensaba que el fuego ardía: luego habló con
mi lengua, Señor, hazme saber mi fin y la medida de mis días, qué es: para que sepa cuán frágil Yo
soy.

Al reflexionar sobre una situación, los versículos se pueden usar para clamar nuestra exasperación
a Dios. Los versículos se pueden orar para buscar la sabiduría de Dios. Independientemente de la
posición de uno, uno debe presentarse ante Dios con toda humildad. Se puede orar para pedirle
ayuda a Dios para conocer los planes que Dios ha establecido para nosotros como individuos.

Versículo 4-6 Señor, hazme saber mi fin y la medida de mis días, de qué se trata: para que sepa
qué tan frágil soy. He aquí, has hecho mis días como un ancho de mano, y mi edad es como nada
ante ti: en verdad cada hombre en su mejor estado es completamente vanidad. Ciertamente, todo
hombre camina en vano espectáculo; seguramente se inquieta en vano: acumula riquezas y no
sabe quién las juntará.

David conocía su lugar ante Dios, incluso se comparó a sí mismo con un palmo. Sabía que solo Dios
puede mostrarle misericordia y ayudarlo en la situación en la que se encuentra. De esta manera
podemos orar estos versículos a Dios para que nos ayude con un corazón humilde, le pedimos a
Dios lo que queremos, podemos encomendar todos nuestros asuntos en las manos de Dios ya que
la vida es corta y no es del que quiere, sino solo Dios puede tener misericordia de nosotros. Tan
frágiles como somos, no tenemos poder propio, solo Dios puede ayudarnos.

Versículo 7-8 Y ahora, Señor, ¿qué me espera? Mi esperanza está en ti. Líbrame de todas mis
transgresiones: no me hagas el oprobio de los necios.

Estos versículos pueden usarse para hacer confesiones a Dios, cómo confías en él, cómo lo tomas
como tu confidente, cómo tienes fe ciega en él para verte en todas las situaciones. Al pasar por
una situación, puedes rezar estos versículos para renovar tu esperanza en Él. Podemos pedirle
ayuda a Dios usando estos versículos que sabes que Él es para ti. Ponga cada una de sus
expectativas y esperanza en Dios. El último verso puede usarse para pedir perdón y perdón por
cada uno de tus pecados. Además, una oración que se puede rezar para que los enemigos no se
regocijen por su caída, pero Dios debe elevarlo en todos sus esfuerzos.
Versículo 9-11 Era tonto, no abrí la boca; porque lo hiciste Aparta tu golpe de mí: estoy consumido
por el golpe de tu mano. Cuando reprendiste al hombre correcto para la iniquidad, haces que su
belleza se consuma como una polilla: seguramente cada hombre es vanidad.

Estos versículos pueden usarse para respaldar nuestra fe y ayudarnos a caminar con Dios mientras
estamos en un viaje temporal aquí en la tierra. A medida que avanzamos en nuestras actividades
diarias, podemos memorizar estos versículos como recordatorios constantes de que nuestro viaje
aquí en la Tierra es como el de una hoja que vive en la mañana y se marchita en la noche. También
usando estos versículos podemos derramar nuestros deseos de corazón a Dios, debemos creer
que Dios siempre peleará nuestras batallas por nosotros, debemos depender totalmente de los
Suyos y no continuar hablando palabras vanas. Estos versículos también se pueden rezar cuando
necesitamos que Dios nos alivie de nuestras aflicciones.

Versículo 12-13 Escucha, Señor, mi oración, y escucha mi clamor; No guardes silencio ante mis
lágrimas, porque soy un extraño contigo y un extranjero, como lo fueron todos mis padres. Oh,
perdóname, para que pueda recuperar fuerzas antes de partir, y no estaré más.

Estos versículos se pueden traducir como una humilde oración para recuperar el favor y recuperar
las fuerzas.

CUANDO NECESITO ESTE SALMO:

Cuando tu alma está incómoda y en agitación.Cuando necesitas la sabiduría y el favor de Dios

Cuando quieres que Dios pelee por ti.Al pedirle perdón a Dios.Cuando necesitas tu esperanza, la
fuerza para ser restaurada.Cuando necesitas que tu lengua se detenga ante tus torturadores.

uestro hoy determina nuestro mañana (Salmo 39:4)

“Hazme saber, Jehová, mi fin, y cuánta sea la medida de mis días; sepa yo cuán frágil soy.”.

Salmo 39:4

INTRODUCCIÓN

Se cuenta que cruzando el desierto un viajero vio a un nómada árabe sentado debajo de
una palmera y que a corta distancia descansaban sus caballos pesadamente cargados con objetos
de valor. El viajero se le acercó y le pregunto, - ¿puedo ayudarlo en algo? Me parece verlo muy
preocupado, -Tiene razón- respondió el árabe- estoy muy preocupado porque he perdido la más
preciosa de las joyas. Extrañado el viajero pregunto – ¿y qué joya era esa? –Era -dijo el nómada
una joya como no volverá a hacerse otra. Estaba tallada en un pedazo de piedra de la vida, y había
sido hecha en el taller del tiempo, la adornaban 24 brillantes, alrededor de los cuales se agrupaban
60 joyas más pequeñas, joya igual no podrá producirse jamás. –su joya debió haber sido preciosa -
dijo el viajero, pero no cree que con suficiente dinero se puede hacer otra igual.-Imposible -dijo el
árabe, porque la joya perdida era un día, y un día con sus 24 horas y cada hora con sus 60 minutos
no pueden recuperarse jamás.

nuestro-hoy-determina-nuestro-mañana

Nuestro hoy determina nuestro mañana

Hay tres tiempos en la vida del ser humano, el ayer, hoy y mañana. Con el ayer no podemos
hacer nada, el mañana le pertenece a Dios, pero el hoy nos pertenece y depende de nosotros lo
que sembremos hoy para tener un mejor mañana, ya que también es un hecho de que nuestra
vida es frágil y temporal. El salmista declaraba su interés en conocer la medida de sus días, en
estar consiente que esta vida es temporal y sumamente frágil. La Biblia está llena de metáforas
que enseñan lo breve, temporal y transitoria que es la vida, por tanto debemos ser sabios en la
forma de cómo vamos a vivir nuestros días, ya que son pocos y por ello es importante las
decisiones que tomemos Hoy. La forma de cómo vivamos nuestro hoy determina nuestro mañana
y para asegurar un buen futuro debemos tener en cuenta dos verdades importantes:

1. La vida comparada con la eternidad es extremadamente breve.

2. Solo hay dos lugares para pasar la eternidad.

Veamos en que consiste cada punto.

I. LA VIDA COMPARADA CON LA ETERNIDAD ES EXTREMADAMENTE BREVE.

“Pues nosotros somos de ayer, y nada sabemos, siendo nuestros días sobre la tierra como
sombra”.

Job 8:9

Esta vida solo es un preámbulo de la venidera. Dios nos ha creado para ser eternos y un día a
través de la muerte pasaremos a la eternidad, por tal motivo el Señor está interesado en que
estemos listos para ese momento. La primera verdad que debemos comprender es que esta vida
comparada con la venidera es extremadamente corta por lo que todo lo que planeemos, nuestras
prioridades y actos deben estar de acuerdo a este principio. Pero, ¿cómo debemos establecer
nuestras prioridades? ¿Qué aspectos debemos tomar en cuenta para aprovechar esta vida corta?
Salomón nos dice que lo importante es acordarse de Dios desde la misma juventud:

“Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los
años de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento; antes que se oscurezca el sol, y la luz,
y la luna y las estrellas, y vuelvan las nubes tras la lluvia; cuando temblarán los guardas de la casa,
y se encorvarán los hombres fuertes, y cesarán las muelas porque han disminuido, y se
oscurecerán los que miran por las ventanas”

Eclesiastés 12:1-3

Salomón hace ver que un día perderemos toda nuestra potencia y habilidad porque
envejeceremos. Por ello es importante acordarse de Dios antes que los días malo lleguen:
Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos. La primera
prioridad en la vida del hombre debe ser: Reconocer a Dios en todos sus caminos.
Lamentablemente no ocurre así en muchos casos ya que el pecado y este mundo roban la
atención del ser humano. El ser humano pierde sus días ocupándose en las cosas que este mundo
le ofrece, sin embargo, la Biblia nos dice que debemos huir de él y no amar esas cosas pasajeras
que solo conducen a la condenación eterna: “No améis al mundo, ni las cosas que están en el
mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el
mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del
Padre, sino del mundo. Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios
permanece para siempre”, (1 Juan 2:15-17). Lo que este mundo ofrece es temporal, inútil y no
asegura nuestro bienestar eterno; pero ocuparse en hacer la voluntad de Dios tiene recompensa
eterna. ¿Cuántos estamos reconociendo a Dios en nuestros caminos? O ¿estamos viviendo para
nuestros deseos que son en contra de la voluntad de Dios? Realmente es en vano afanarse en este
mundo y cualquier logro que alcancemos es vano si Cristo no esta en nuestra vida porque al final
todos nuestros logros quedaran aquí pero nuestra alma se perderá:

“Porque ¿qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? ¿O qué
recompensa dará el hombre por su alma?”.

Mateo 16:26

El deseo de Dios es darnos una vida con propósito y bendecida; pero este mundo nos quiere
desviar y hacer que perdamos nuestros días en cosas vanas las cuales cuando muramos no las
vamos a poder llevar, solamente lo que hagamos para el Señor trascenderá en la eternidad y esto
nos lleva al segundo punto:

II. SOLO HAY DOS LUGARES PARA PASAR LA ETERNIDAD.


“De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no
vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida. De cierto, de cierto os digo: Viene la hora,
y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que la oyeren vivirán…. No os
maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz;
y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; más los que hicieron lo malo, a
resurrección de condenación”.

Juan 5:24-25, 28-29

Jesús deja claro que solo hay dos destinos en la eternidad para la humanidad: heredar la
vida eterna o la condenación eterna. En aquel día los que nunca reconocieron a Jesús en sus vidas
harán gran lamentación pero será muy tarde para arrepentirse, porque dejaron pasar todos los
días de sus vidas y nunca lo reconocieron. No obstante, el Señor Jesús ofrece la vida eterna y
escapar de la condenación y nos dice: De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al
que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.
Debemos elegir bien cómo viviremos el resto de nuestros días antes que sea demasiado tarde.

CONCLUSIÓN

Nuestro hoy determinara nuestro mañana. Nuestros días en esta tierra son cortos y no debemos
olvidar que nuestras almas son eternas por lo que debemos vivir sabiamente, reconociendo a Dios
en nuestros caminos, abandonar el pecado y lo que este mundo ofrece ya que:

1. La vida comparada con la eternidad es extremadamente breve.

2. Solo hay dos lugares para pasar la eternidad: El paraíso y el Infierno.

Para ello es necesario hacer a Jesús el Señor de nuestras vidas hoy mismo para construir un mejor
mañana.

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