INSTITUTO PARTICULAR INCORPORADO

NRO. 9203
CRUZ ROJA ARGENTINA-UNIDAD OPERATIVA
CASILDA.-

TÉCNICO SUPERIOR EN ENFERMERÍA 2022.-

ESPACIO CURRICULAR: Cuidados de

Enfermería en Salud Mental.-

PROFESORA: Bristiel Ludmila Cora.-

ALUMNA: Claudia Valeria Giupponi,

Repeto Lorena.-

CURSO: 3er. Año.-

Definición de Salud Mental.
Podemos decir que con respecto a lo leído en los apuntes, para la Organización
Mundial de la Salud (OMS) la Salud mental es el estado de completo bienestar físico
social y mental, para Ana Quiroga la Salud mental es una construcción social a
partir de los vínculos donde nos encontramos a diario, como el trabajo, la vida
familiar, la política, la justicia, el uso del tiempo libre, las formas de la sexualidad, la
crianza es decir nuestra vida cotidiana.
Ana Quiroga también plantea que una persona puede tener padecimientos mentales
por los problemas sociales, económicos, de empleo, de vivienda, los cuales deben
ser atendido por médicos y psicólogos en conjunto con los trabajadores sociales, los
antropólogos, los psicopedagogos, los arquitectos, los sociólogos, los enfermeros,
los educadores con un abordaje comunitario con un lazo social que asegure una
reciprocidad que permita la convivencia de los semejantes. Creando un lazo social
donde el saber circule, donde va importar el saber del sujeto, la familia, la
comunidad. No solo el saber debe circular, también el poder. Las decisiones no
deben ser solo de una persona o un profesional.
Romper con los estereotipos y falsas creencia nos lleva a entender realmente que
es la salud mental, para mirar desde un punto de vista humanizado a las personas
que padecen una enfermedad mental, el alcohol y la depresión son los problemas
con más frecuencia, en Argentina a partir de los 20 años de edad, la problemática
que surge son los trastornos de ansiedad, las personas con algún padecimiento
mental debe seguir viviendo en sociedad y tienen derecho a ser asistidos, ninguna
enfermedad se cura con el encierro y el aislamiento, detrás de cada persona hay
una historia que determina su presente. No quiere decir tampoco que por padecer
algún problema de salud mental esté relacionado con la violencia y la peligrosidad,
por lo tanto deben ser atendidas en los lugares donde se atiende todo el mundo,
tienen los mismos derechos que cualquier sujeto, por eso debemos integrarlas en la
sociedad, por lo tanto no hay que tenerles miedo, quizás pueden expresar sus
sentimientos de otras formas, debemos acompañar siempre a los paciente y a los
familiares, proporcionando la mejor atención de salud posible, es importante que
estas personas permanezcan en comunidad porque al aislarlas perderían
habilidades sociales, se generaría dependencia y son contrarios a los derechos
humanos.
La Ley Nacional de Salud Mental N° 26.657 garantiza el derecho de todas las
personas a la atención efectiva y oportuna de la salud mental, reconoce a la
persona como un sujeto de derecho en el cual se debe abordar a nivel comunitario.
Por lo tanto la salud mental es un proceso determinado por componentes históricos,
socioeconómicos, culturales, biológicos y psicológicos, cuya preservación y
mejoramiento implica una dinámica de construcción social vinculada a la concepción
de los derechos humanos y sociales de toda persona. Este reconocimiento implica
la promoción de la salud mental, la prevención y atención de padecimientos
mentales, la participación comunitaria y la detección y el abordaje de los
determinantes sociales de la salud.
Como futuras enfermeras es muy importante esta bibliografía que aporta la cátedra
para poder capacitarnos y en base a el conocimiento adquirido en el caso que
ingrese en nuestro lugar de trabajo una persona con algún padecimiento
relacionado a la salud mental le brindaremos la atención humanitaria, observando
siempre su conducta tanto mental como física y social, manifestar interés por el
paciente, permitir que exprese sus emociones, proporcionar un ambiente que no sea
amenazante, respetar su individualidad, no juzgar su conducta, la comunicación
puede ser verbal o no verbal, no hacer preguntas improcedentes, no discutir con la
persona los planteos delirantes, demostrar seguridad y profesionalismo, no humillar
al paciente, respetar las ideas políticas y religiosas, siempre informarle la práctica
que se le va a realizar. La escucha activa es de suma importancia, siempre se
deberán atender lo más pronto posible a estas personas para disminuir el
sufrimiento, invitarla a que cuente sus padecimiento puede ayudar a estos pacientes
a sentirse más sostenidos y acompañados, es mucha ya la carga que reciben en la
sociedad con el rechazo de las demás personas siendo discriminados y excluidos
en diferentes ámbitos. En ningún momento vamos a dejar a estas personas solas, y
alejaremos todos los elementos peligrosos que puedan generar riesgos para sí
mismo como para terceros, como por ejemplo un bisturí, si creemos que el riesgo de
violencia es alto, trabajaremos acompañadas, con equipo de salud y personal de
seguridad, en el caso que la persona ingrese sola hay que tratar de localizar los
vínculos.