Biografía de Roberto Arlt

Roberto Arlt fue un prolífico escritor y periodista argentino. Con su impronta

creativa y disruptiva, dominó la escena cultural de la Argentina de la primera parte
del siglo XX. Escribió en casi todos los registros: cuentos, crónicas, novelas, obras
de teatro. Como nadie realizó una aguda radiografía del Buenos Aires de su
tiempo: analizando costumbres y personajes. Se lo considera un pionero de la
novela argentina moderna.
Nació en Buenos Aires un 26 de abril del 1900 y se crio en el barrio porteño de
Flores, en una familia conformada por sus padres, dos inmigrantes, muy, muy
pobres; su papá era prusiano y su mamá austrohúngara, más dos hermanas que
terminaron falleciendo a causa de la tuberculosis, una de las afecciones más
comunes y mortales de aquellos años.
A los ochos años fue expulsado de la escuela por mala conducta y decidió
volcarse al autoaprendizaje.  Abandonó su hogar cuando era un adolescente a
causa de disputas con su padre. Cursó estudios elementales, pero frecuentó las
bibliotecas de barrio, donde se inició desordenadamente en la lectura de Rudyard
Kipling, Emilio Salgari, Julio Verne, R. L. Stevenson y Joseph Conrad, entre otros,
a la vez que desempeñaba diversos oficios: dependiente de librería, aprendiz de
hojalatero, mecánico y vendedor de artículos varios
En 1922 inició su actividad como periodista en el periódico de ultraderecha Patria,
en el cual claramente duraría muy poco a razón de su ideario político, en absoluta
oposición con la línea editorial.
Se casó con Carmen Antinucci y un año después nació su hija Mirta.
Ya casado se trasladó a Córdoba, pero el fracaso en su intento de mejorar la
situación económica le obligó a regresar con su familia a Buenos Aires.
En 1926 escribió su primera novela El juguete rabioso, a la cual le iba a poner
inicialmente como título La vida puerca, pero en esa época Arlt era secretario y
luego amigo de Ricardo Güiraldes quien le sugirió que el nombre original La vida
puerca sería demasiado tosco para los lectores de ese tiempo. Tras varios
intentos logró publicar en la revista Proa dos capítulos de su novela, que llegaría a
considerarse un hito en la literatura argentina.

En la capital trabajó como periodista e inventor. En la Revista Popular publicó su

primer cuento, Jehová, al que le siguió un ensayo, Las ciencias ocultas en la
ciudad de Buenos Aires. Luego colaboró en Patria, periódico nacionalista de
derechas, pero dos años después pasó a publicaciones de signo opuesto como
Extrema Izquierda y Última Hora.
A la par de su carrera literaria y periodística desarrolló una intensa actividad como
inventor, incluso, tuvo una sociedad con el actor Pascual Naccaratti, llamada
ARNA, con quien instaló un laboratorio en la localidad bonaerense de Lanús.En el
laboratorio llevó a cabo las más diversas y disparatadas invenciones, entre ellas
unas medias reforzadas con caucho, que presumieron de ser irrompibles, que
patentó, pero nunca fueron comercializadas.Inventó otros objetos muy singulares:
un señalador automático de estrellas fugaces, una tintorería para perros, una
máquina que escribía con caracteres de imprenta al tiempo que una persona le
dictaba, una máquina de prensar ladrillos, rosas de cobre etc…
El periodismo fue, para Arlt, el medio principal de subsistencia. En 1927 ya era
cronista policial en Crítica y un año después pasó a ser redactor del diario El
Mundo. Allí aparecieron sus cuentos El jorobadito y Pequeños propietarios. Su
columna Aguafuertes porteñas (1933), en la que arrojaba una mirada incisiva
sobre la ciudad y sus habitantes, le dio gran popularidad: eran textos llenos de
ironía y mordacidad, retratos de tipos y caracteres propios de la sociedad porteña.
Dio a conocer artículos, cuentos y adelantos de novelas desde las páginas de las
revistas Claridad, El Hogar, Azul y Bandera Roja. Resultado de su labor como
corresponsal en Europa y África son Aguafuertes españolas (1936) y El criador de
gorilas (1941), cuentos de tema "oriental".
Para muchos su obra más acabada es Los siete locos (1929), una inquietante
novela sobre la impotencia del hombre frente a la sociedad que lo oprime y lo
condena a traicionar sus ideales.
Arlt protagonizó un intento de renovación del teatro argentino a través
de Trescientos millones (1932), a la que siguieron otras siete piezas
dramáticas, Piedra de fuego (1932), Saverio el cruel, El fabricante de
fantasmas (1936), La isla desierta (1937), África (1938), La fiesta del hierro (1940)
y El desierto entra a la ciudad (1941), presentadas casi todas en el Teatro del
Pueblo que dirigía Leónidas Barletta.
Aunque conoció el éxito y fue leído masivamente, los sectores académicos
criticaban sus incorrecciones sintácticas. A finales de los años cincuenta su obra
comenzó a ser reivindicada como uno de los mayores logros de la literatura
argentina. El estilo arltliano se caracteriza por frases cortadas o desestructuradas
y por la incorporación de jergas y barbarismos. Su obra refleja la frustración de las
clases populares urbanas durante la crisis que culminó en 1930: sus personajes
son a menudo marginados que atraviesan situaciones límite; el mundo cotidiano
de la gran ciudad aparece vinculado con un universo enrarecido, sórdido y hasta
fantástico.
Tras el fallecimiento de su esposa en 1940, se casó con Elisabeth Mary Shine.
Tuvo un hijo póstumo, Roberto.
Roberto Arlt murió el 26 de julio de 1942, a la edad de 42 años, en Buenos Aires,
de un paro cardíaco. Sus restos fueron incinerados en el Cementerio de la
Chacarita y sus cenizas esparcidas en el Río Paraná. En la ceremonia de
despedida habló el escritor Nicolás Olivari, y el poeta Horacio Rega Molina leyó un
poema. Al día siguiente el diario El Mundo publicó la última de sus famosas
aguafuertes: «Un paisaje en las nubes». El suceso no sonó en los diarios porque
entre las noticias se encontraba el desagravio a Jorge Luis Borges, por entonces
relegado del Premio Nacional de Literatura.

Obras
Novelas
 1926 - El juguete rabioso
 1929 - Los siete locos
 1931 - Los lanzallamas
 1932 - El amor brujo
Cuentos
 1933 - El jorobadito (Buenos Aires, Librerías Anaconda).
 1941 - Viaje terrible (publicado en «Nuestra Novela», año 1, nº. 6, 11 de
julio).
 1941 - El criador de gorilas (en Obras de Roberto Arlt, vol. 6, Buenos Aires,
Ed. Futuro), ilustrada por Enrique Sobisch.
 1972 - Regreso (Buenos Aires, Corregidor).
 1984 - Estoy cargada de muerte y otros borradores (Buenos Aires, Torres
Agüero Editor)
 1994 - El crimen casi perfecto (Buenos Aires, Aguilar)
 1996 - El resorte secreto y otras páginas (Buenos Aires, Simurg)
Teatro
 1932 - Trescientos millones (Buenos Aires, Victoria).
 1938 - Separación feroz (diario El Litoral, nº. especial, Santa Fe, 1 de
enero).
 1947 - Prueba de amor
  1950 - Saverio el cruel, El fabricante de fantasmas, La isla desierta, 300
millones (en Obras de Roberto Arlt, vol. 9, Buenos Aires, Ed. Futuro).
 1952 - El desierto entra en la ciudad (Buenos Aires, Futuro).
Teatro estrenado
 1930 - El humillado (capítulo de Los siete locos).
 1932 - Trescientos Millones
 1936 - Saverio el cruel
 1936 - El fabricante de fantasmas
 1938 - África
 1938 - La isla desierta
 1940 - La fiesta de hierro
 1952 - El desierto entra en la ciudad (farsa dramática en cuatro actos,
escrita en 1942. Prólogo de Mirta Arlt. Buenos Aires, Editorial Futuro, 1952,
p. 102).
Aguafuertes
 1933 - Aguafuertes porteñas
 1936 - Aguafuertes españolas (primera parte, Buenos Aires, Talleres
Gráficos Argentinos).

"Yo no creo que estés loco. No, no lo creo. Lo que hay en vos es un
exceso de vida, de caridad y de amor al prójimo"
- Roberto Arlt

Glosario
Póstumo: Que nace o sale a la luz después de la muerte del padre o autor.