Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
1. Organigrama jerárquico
Es el más común, pues depende del poder o control dentro de la empresa (de mayor a
menor), siguiendo un diseño piramidal. Este diseño facilita la comunicación entre superior
y subordinado. Además de ser visualmente más claro, aunque también más rígido a la hora
de definir las funciones de cada trabajador.
2. Organigrama matricial
Es típica en empresas con más de un director, o más de un responsable por proyecto, o más
de un superior por departamento o trabajador. Su capacidad de incluir relaciones
interdepartamentales puede ser muy positiva para el desarrollo de proyectos conjuntos. Pero
también confusa a la hora de gestionar responsabilidades.
3. Organigrama plano
Un organigrama sin cargos de mando intermedios, dejando solo dos roles; directivos y
empleados. Supone una relación mucho más directa, proporcionando más autonomía a los
trabajadores.
1. Organigrama general
Se especifican los cargos hasta llegar a los departamentos.
2. Organigrama integral
Llega un paso más allá, entrando en todas las unidades administrativas.
3. Organigrama funcional
Se especifican todos los puestos que existen en la empresa, e incluso pueden añadirse las
tareas que dependen de cada rol.
En función a la representación visual
1. Organigrama vertical
Los datos se representan en forma de pirámide. En la cúspide de la pirámide se encuentran
los directivos de la empresa o entidad más importantes, y abajo están los trabajadores con
menos poder de toma de decisiones.
2. Organigrama horizontal
Se ordenan de izquierda a derecha. Los niveles de jerarquía se representan en forma de
columna.
3. El organigrama circular
En el centro está la dirección y alrededor los demás miembros ocupando un puesto en base
a su cargo y poder.
4. El organigrama mixto
Incluye elementos verticales y horizontales para completar las posibilidades de
gratificación.
Relación Laboral
Una relación laboral es un vínculo entre un trabajador y una empresa. Normalmente, dicho
vínculo se establece mediante un contrato, en el cual se indican las características del
acuerdo entre ambas partes: salario, horario, duración, así como otras circunstancias.
Las relaciones laborales legales están enmarcadas dentro de una legislación en la que se
indica qué normas deben regir el trabajo ( en España el texto legislativo es el Estatuto de
los Trabajadores ).
Cualquier relación laboral es un pacto entre dos partes. Un trabajador que cede su tiempo y
su destreza profesional y un empleador o empresario que gratifica con un salario la
actividad del empleado. Si bien el contrato entre las dos partes especifica las condiciones
básicas del acuerdo, en ocasiones surgen conflictos y es preciso recurrir a los tribunales
para solucionarlos.
Los sindicatos son un elemento básico en las relaciones laborales, ya que intentan mejorar
las condiciones de los trabajadores y velar por sus intereses. Desde el punto de vista
empresarial, también hay asociaciones que defienden los intereses de las empresas.
Las empresas de tamaño grande suelen disponer de un departamento de recursos humanos a
través del cual se gestiona todo lo relativo a las relaciones laborales. En las empresas
pequeñas o medianas, el tipo de relación entre empleado y empleador es más directo y no
es habitual la intervención de un departamento de recursos humanos.
Cuando una relación laboral se realiza dentro del marco de la ley, puede haber problemas,
pero hay mecanismos correctores para solucionarlos ( básicamente lo que establece la ley ).
Sin embargo, cuando el trabajo es clandestino, alegal o ilegal, el concepto de relación
laboral cambia radicalmente. Desaparecen las reglas del juego clásicas: un contrato, una ley
y unos derechos.
El trabajo al margen de la legalidad es una fuente de conflictos. Son muy diversas las
situaciones donde la relación laboral no está dentro de la ley: cuando las empresas no son
legales, cuando hay explotación y cuando el trabajador realiza una actividad sin las
necesarias garantías para su salud.
Una de las peculiaridades atípicas de algunas relaciones laborales consiste en establecer un
acuerdo con apariencia legal y con un contrato en regla, pero que en realidad esconde una
situación de explotación laboral.
La capacitación en la actualidad representa para las unidades productivas uno de los medios
más efectivos para asegurar la formación permanente de sus recursos humanos respecto a
las funciones laborales que deben desempeñar en el puesto de trabajo que ocupan.
Si bien es cierto que la capacitación no es el único camino por medio del cual se garantiza
el correcto cumplimiento de tareas y actividades, sí se manifiesta como un instrumento que
enseña, desarrolla sistemáticamente y coloca en circunstancias de competencia a cualquier
persona. Bajo este marco la capacitación busca básicamente:
Promover el desarrollo integral del personal, y como consecuencia el desarrollo de
la organización.
Propiciar y fortalecer el conocimiento técnico necesario para el mejor desempeño de
las actividades laborales.
Con la finalidad de que los centros de trabajo identifiquen y apliquen los aspectos mínimos
necesarios que deben ser considerados para emprender un proceso de capacitación
organizado, que involucre como actividad natural del mismo el dar cumplimiento a las
disposiciones legales que se establecen en la materia, las fases sugeridas son las siguientes: