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RECONOCE A L@S

TÓXIC@S
ESTEBAN HIDALGO

1 EDICIÓN

Para todos mis amigos, amigas y familia.


Índice

Prólogo 4

Uno 5

Dos 8

Tres 9

Cuatro 10

Cinco 12
Epílogo 14
RECONOCE A L@S

TÓXIC@S
Prólogo

¿Una palabra de moda? ¿Una moda en sí


misma? ¿Una nueva variedad en la
amplia gama de especies psicológicas?
Lo cierto es que ser Tóxic@ es un
concepto que ha venido a catalizar una
serie de actitudes que se manifiestan en
una persona y que dan como resultado,
lógicamente, envenenar espacios, a
personas, a comunidades y muchos
etcéteras más que develaremos en las
siguientes páginas, pero antes de
empezar: ¿Eres una persona Tóxica?...
UNO
“Me ponía de mal humor, me sentía cansada cada

vez que me levantaba para ir al trabajo y a veces,

con el sólo hecho de pensar en encontrarme con

esas personas mis manos se ponían temblorosas

y mi voz se entrecortaba”.

Este testimonio es verdadero y, si lo observas

detenidamente y además te dedicas a escuchar un

poco más dentro de tus diversos círculos, caerás

en la cuenta de que estamos frente a una situación

más común de lo deseable.

Y es que la toxicidad está por todas partes y es

perfectamente reconocible por los grados de

estrés y alienación en las sociedades ( hasta un

63% de estrés se han revelado en diversas

muestras por países), por la depresión ( hasta 21%

de depresión en algunos países), por las drásticas

decisiones que toman los ciudadanos ( sociedades

en donde hasta la increíble suma de 206.278

personas se suicidan al año) y otros muchos signos

más que encienden la lucecita de alerta en

nuestras vidas porque no somos ajenos a dichos

fenómenos en este mundo cada vez más global y,

por lo mismo, susceptible a las tendencias,

enfermedades , creencias y demases que avanzan

a toda velocidad por el aire, por las redes y por el

contacto con el/la otro/a.


“Pero ¿qué es lo tóxico? ¿Qué nos puede afectar

tanto como para no querer ir, trabajar, encontrarse

con otro o con otros en un mundo en donde

supuestamente somos todos seres sociales?

¿Existen realmente los seres tóxicos? Y si es así

¿cómo puedo reconocerlos y qué puedo hacer para

que no me afecten?

Sigamos...
DOS
“Suele apartar a algún grupo de personas con

ideas similares y desde allí generar rumores,

alimentar desinformación o atacar en jauría a

quien vean como una amenaza”

Este tipo de toxicidad lo veremos desde las acciones

y no desde la búsqueda de las causas, que pueden

ser muchas y que están más que mencionadas en

diferentes medios (baja autoestima, egocentrismo,

manipulación, etc.).

Lo cierto es que existen personas a las cuales

puedes no caerle bien y que activan sus métodos

para hacerte caer, sentir mal, sentir que “no encajas”,

que eres de otra tribu , que critica tu modo de ser y

atribuye tus características a algo (simbólico o real)

indeseable, peligroso, descontextualizado para

posteriormente , junto o a través de otro grupo de

personas que no requieren de pruebas, sin rasgos

de pensamiento crítico o tergiversando hechos,

atacarte directa o indirectamente con el fin de que

“abandones”, renuncies, te alejes o desaparezcas

para con ello constatar su inalimentable ansia de

poder absoluto y su necesidad de tenerte fuera de

su vista a la espera de otro “obstáculo” que puedan

derribar.
TRES
“ Se quejaba de lo mismo que, como amiga, había

escuchado por al menos cuatro años y los

diálogos empezaban a parecer monólogos y

empecé a pensar que en realidad mis aportes y

opiniones no le importaban, porque jamás ni si

quiera intentó un plan de acción y nuestras

reuniones siempre terminaban en lo mismo”

Hablar de sí mism@ nunca va a ser malo, por el

contrario, el hecho de hacerlo implica un nivel de

confianza y afecto por el otro invaluable y , para uno,

el que habla de sí, una oportunidad para “vaciar” lo

que llevamos dentro en un cuenco que confiamos

nos devolverá un reflejo de nosotros a través de su

experiencia, sus consejos o su silencio necesario.


Sin embargo, en el diálogo, en ese ir y venir de

experiencias y sentimientos, es necesario avanzar,

porque embarrarse en el mismo charco sin

continuar el camino y además extrañar dicho charco

volviendo continuamente a la sensación de hundirse

o estar sumergido en él ciertamente no nos provee

de beneficio alguno.

La vida misma es un gran ejemplo de

interdependencia y avance: nos beneficiamos de la

naturaleza, de sus frutos, estaciones, oportunidades


y ella se beneficia de nosotros con nuestro cuidado,

nuestra valoración e incluso con nuestra muerte.

Pero el río no se detiene,porque debe llegar al

océano ¿no es así?


CUATRO
“ Me enseñó muchas cosas, pero en la medida que

iba aprendiendo y destacándome en ciertas

áreas, empezó a minimizarme, a apartarme de

personas o labores que podían significar una

amenaza para su posición”

No todos somos iguales y eso está claro y

realmente qué aburrido sería que todos lo fuéramos

¿no?.

Sin embargo hay quienes no saben o no entienden

que tienes inquietudes, tendencias o interés en

seguir creciendo, en saber mucho más, en

experimentar para conocer y cuando eso se

manifiesta en ti, se ponen a la defensiva y, me

atrevería a decir, a la ofensiva sin haber recibido más

provocación que sus propias creencias o

convicciones.

Muchas veces esas personas se encuentran dentro

de un círculo cercano, pero, ¡atent@s!: es el círculo

más íntimo de tu existencia el que debes

salvaguardar por sobre todas las cosas. La toxicidad

de este tipo de personas involucra amistad, historias

comunes e incluso experiencias muy nutritivas para

tu aprendizaje, por lo que debes ser más cauto aún,

puesto que deberás captar ese cúmulo de actitudes,

forzarte a despersonalizar dichas situaciones(nada

es personal, salvo que tú lo acojas)


“y tomar decisiones que impliquen no que tú te

quedes sol@ o marginad@ por dicha influencia, sino

que debes ser tú quien elijas tus horizontes sin que

creencia alguna impida lo que la vida misma nos

enseña a diario: crecer y multiplicarse.


CINCO
“ Me decía que me concentrara con

palabras hirientes, dándome a

entender que no era apta, que no era

capaz sin su ayuda, aumentando el

volumen de voz ,con lo que sentía

miedo”

Mucha gente cree que con mostrar más

volumen, con ocupar más espacio, con

levantar más la voz va a conseguir el

reconocimiento del otro o el miedo o la

subordinación.

No voy a negar que ello puede funcionar,

está hasta en videos de Youtube (cómo

demostrar autoridad o hacer que te

respeten), pero, podemos estar de

acuerdo en lo siguiente: el respeto es un

vínculo que reconoce en el otro un rol,

necesario, respetable y cercano.

La autoridad en el discurso, en la posición

social, en la mirada hacia el otro o la otra

es una cuestión de convivencia y

supervivencia, puesto que ello

necesariamente debe tener eco en otro u

otra que depende de instrucciones, guías


y sí, también de un trato digno que no se

refiere a establecer posiciones de poder

(que están más que establecidos en una

planilla, página web, reglamento interno,

etc.), sino comprender la mutua certeza

de que ambas partes son necesarias,

complementarias y, en definitiva, que en

este mundo moderno no existen ya los

emperadores o emperadoras y que todas

las partes son fundamentales en el

engranaje dela vida.


Epílogo

Sé que no es un escrito muy extenso, que

no me refiero necesariamente a

relaciones tóxicas (hay muchos escritos al

respecto), pero mi intención es

sencillamente enseñarte a reconocer a

esas personas, grupos de personas y

situaciones tóxicas que te pueden estar

afectando en tu día a día.


Te invito muy cercanamente a reconocer

dichas situaciones y a tener la certeza de

que no eres tú, de que en tu vida las

cosas no necesariamente andan mal, de

que si quieres moverte por diferentes

espacios no es tu voz ni tu carácter ni tus

ideas ni tu físico ni tus ganas de surgir o

conocer más lo que está mal, no lo es.


Puede que seas una amenaza para

algunas personas o grupos de personas o

algún sistema, PERO TEN LA CERTEZA DE

QUE DEBES ATENDER A ESOS LLAMADOS,

ESOS LLAMADOS QUE TE INVITAN A

CRECER, A CONOCER, A EXPANDIRTE Y A

RECONOCERTE COMO ALGUIEN

DIFERENTE.

De eso se trata la vida ¿no? De entender,

aceptar y fomentar, naturalmente, que

todos y todas necesitamos un camino y

que no hay nada ni nadie que deba

impedirnos salir del charco y emprender

pasos nuevos para ser lo que queremos

ser.

Un gran abrazo para tod@s ustedes.

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