Debe ser entendida como un conjunto de actividades que conducen a los
estudiantes a enfrentar una situación, desafío o problema complejo. Se desarrolla
en etapas sucesivas y, por lo tanto, se extiende en varias sesiones. Estas actividades son potentes (desarrollan el pensamiento complejo y sistémico), consistentes y coherentes (deben tener interdependencia entre sí y una secuencia lógica). Asimismo, para ser consideradas auténticas, deben hacer referencia directa a contextos reales o simulados, y, si es posible, realizarse en dichos contextos. La experiencia de aprendizaje es planificada intencionalmente por los docentes, pero también puede ser planteada en acuerdo con los estudiantes, e incluso puede que ellos planteen de manera autónoma las actividades para enfrentar el desafío (RVM 094-2020-MINEDU:7). Se caracterizan por tener un conjunto de actividades secuenciadas que deben responder a las necesidades de desarrollo de las competencias de los estudiantes frente a los retos de la situación planteada Partamos de que hay dos sentidos de la frase "experiencia de aprendizaje"
Respecto del primero, una experiencia es una vivencia de cualquier
persona que dicha persona considera como una lección de vida. En este primer sentido, la experiencia de aprendizaje es la vivencia de aprender y todos las vivimos hasta el final. Es una vivencia que hemos pensado y asumido. Respecto del segundo sentido, aparece cuando usamos "experiencia de aprendizaje" como un término técnico en la pedagogía. Es parte de un enfoque que se basa en el concepto de "aprendizaje auténtico". En este segundo sentido, la experiencia de aprendizaje es un formato didáctico. Se define como el proceso de generar condiciones de actuación en el estudiante a partir de una situación significativa que implique un contexto de vida.
En tanto ejercemos como docentes, emplearemos "experiencia de aprendizaje"
como un formato didáctico. Es un formato definido por un modo de generar aprendizajes en el estudiante y no por características formales.
Son actividades que presentan situaciones para que el estudiante aborde la
situación significativa. Están articuladas alrededor de esa finalidad. Cuando el estudiante pueda actuar en relación con esa situación significativa, ha logrado el aprendizaje. Las actividades no generan el aprendizaje directamente, es la interacción del estudiante con la situación la que lo genera. Recordemos que el docente no ha planteado la situación, solo la presenta de un modo especial. Por lo tanto, no es una secuencia estructurada previamente a la selección de la situación.
Lo que es cierto es que el docente busca la situación con una idea previa: que lo ayude a formar un aprendizaje determinado