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Ley 1420 Piedra fundacional de la Educación Argentina

El 8 de julio de 1884 se promulgó la Ley 1420 que establece la educación primaria común, gratuita y obligatoria.

La Ley 1420 fue promulgada durante la presidencia de Julio Argentino Roca y es considerada la base primordial del sistema educativo nacional. El eje fundamental se centró
en la gratuidad y obligatoriedad escolar con el objetivo de que la escuela fuera un medio al alcance de los niños y niñas. Uno de los temas de confrontación fue la  laicidad,
la incorporación de contenidos religiosos en los programas escolares.

¿Cómo era el contexto histórico que posibilitó la creación de la Ley 1420?

-La Ley 1420 es un típico elemento de la década de 1880 del siglo XIX. Un momento de fuerte modernización de la sociedad argentina, una Argentina que intenta insertarse
en el mercado mundial como una sociedad moderna y lleva a cabo cambios económicos, políticos, culturales y educativos, dirigidos por una oligarquía terrateniente que se
está beneficiando mucho con esta situación y que propone modernizar al país. Sin lugar a dudas la figura de Domingo Faustino Sarmiento que había sido presidente años
anteriores y que, en este momento, tenía otros cargos educativos, es central para pensar la cuestión.

-¿Sobre qué cimientos se creó esta Ley?

-En la idea de pensar la educación como un derecho. La Ley 1420 dice educación común y no es una palabra menor. Pensar la educación común, la educación de los iguales,
educación obligatoria, se pone en la base del proyecto. En cierta forma, una primera lectura que se puede hacer de la Ley 1420, es que cierra todo el debate educativo del
siglo XIX e inaugura el debate educativo del siglo XX.

Hay que pensar que en el siglo XIX la sociedad argentina termina de pasar del modelo colonial a un proyecto que llamaremos independentista. La idea de formar un nuevo
sujeto político, pensado en el ciudadano pero en un ciudadano que no se explica, exactamente, cual ciudadano europeo. No es lo mismo el ciudadano francés, por ejemplo,
que el latinoamericano. Esta cuestión de salir de un pasado colonial, de una presencia de otros grupos, sobre todo la presencia de grupos originarios, las marcas de la
colonia, que presuponen una nueva forma de participación política que está en la base de la Ley 1420.

La Ley 1420 establece la educación común para todos los niños y niñas, con interesantísimos avances en cuestiones de igualdad de género, sobre todo para la época. Acá
hay que pensar, no sólo en el trabajo de Domingo Faustino Sarmiento sino de una de las personas que más lo acompañó y más ideas le brindó, como fue Juana Manso.

-¿Qué aspectos no están contemplados en la Ley?

-La tolerancia religiosa, que se comprende como laica, al menos sectores católicos la entienden como laica porque no salió la enseñanza religiosa obligatoria, presupone
que la enseñanza religiosa obligatoria podía ser dada a los alumnos que lo quisieran, fuera del horario de clase y por los ministros de culto. Esto es en la práctica y hay
muchos ejemplos históricos que muestran que era prestarle la escuela al sacerdote para que dictara religión a contra turno.

El otro término que no está en la Ley 1420, y que se podría esperar que estuviera, es el de patria. La escuela no nace como templo de la patria, sí como templo de la nación.
El proyecto patriótico se sumará al de escuela argentina posteriormente, ya sobre el centenario, con la presidencia del Consejo Nacional de Educación de José María Ramos
Mejía.
Otro error común se refiere a pensar que la Ley 1420 actúa sobre todo el país y no es así. Es una ley que sólo actuaba en las escuelas que dependían de la Nación, las
escuelas que no eran provinciales. Sí, en 1905, la Ley Láinez hizo que ampliara su rango de acción en muchas otras partes, pero la Ley 1420 nunca tuvo vigencia en todo el
país.

-¿Qué produjo su derogación?

-Su derogación se produjo, de hecho, por la dictadura cívico militar, cuando en 1978 transfirió las escuelas de la dependencia nacional a las jurisdicciones dónde estaban y
terminó de completarse, en 1992, cuando el menemismo sancionó la Ley federal de Educación.

-¿Por qué se puede considerar a la Ley 1420 como la más importante en materia educativa?

-La Ley 1420 es considerada la ley más importante educativa, por lo menos hasta muy avanzado el siglo XX, porque estableció la idea de la educación como un derecho. La
idea de que todos los ciudadanos, fuera quien fuera, todos los niños de esta país, hombres y mujeres, nativos, inmigrantes, rurales o urbanos, pobres o ricos, debían
concurrir a la misma escuela, en igualdad de condiciones, aprender lo mismo, para formarse como ciudadanos y poder ejercer sus derechos

¿Qué lugar tenía la educación en la vida de las mujeres antes de la implementación de la Ley 1420?

-Lo principal es no perder de vista el contexto histórico. El papel de la mujer estaba relegado al espacio privado, la vida íntima de la familia, el cuidado de las hijas y los hijos,
la atención al esposo, la casa, etc. Su imagen en la sociedad era del “ángel del hogar”, el acompañamiento, estar detrás y a la sombra del hombre. Muchas mujeres fueron
silenciadas por la historia patriarcal, las que tuvieron protagonismo en los espacios de decisión públicos, por ser hijas, amantes, esposas.

Las mujeres de la elite social tenían acceso a educación y cultura, la que se impartía domésticamente con tutores, ya que protocolarmente tenían que ser excelentes
acompañantes de los hombres; las que no, debían saber cocinar, bordar, criar hijas e hijos, atender al hombre, ser silenciosas y recatadas.

¿Por qué se habla de la Ley 1420 como un factor importante en el reposicionamiento de la mujer en el espacio público?

-Es una ley que moderniza profundamente la educación. En primer lugar, habilitando el acceso a la educación de manera universal, laica, gratuita. Hasta su promulgación,
sólo accedían al conocimiento los varones de clases acomodadas, a cargo de la institución eclesiástica. Con la ley, se amplían las posibilidades de acceso a la educación,
principalmente en la necesidad de formar las maestras argentinas que serían quienes ocupen el nuevo rol social.

De allí en adelante, se abre un abanico de posibilidades para la mujer: estudiar, formarse, obtener un trabajo remunerado y reconocido socialmente, con la consecuente
incidencia profesional en el espacio público que antes le era negado, y con su salario propio. No sólo el acceso a esta movilidad social hasta revolucionaria, sino también a
su independencia del hombre, la decisión de casarse, tener hijos (no siempre propia sino impuesta) ahora está acompañada de la decisión de trabajar afuera de su casa, y
no depender económicamente el varón que la tuviera a cargo. La promulgación de la ley genera una ruptura hasta en el tejido social, habilitando espacios antes negados.

-¿Cómo están considerados, en la educación argentina actual, los principios fundamentales de la Ley 1420?

-La educación obligatoria está contemplada, desde los derechos y las obligaciones ciudadanos, en los niveles inicial, primario y secundario. Desde la sala de la primera
infancia hasta los 17 y 18 años. Esto no quiere decir que luego de esta edad no haya posibilidad de finalizar estudios. Al contrario, existen cada vez más más becas para la
finalización de los estudios secundarios, como las Becas Egresar y para continuar estudios universitarios o terciarios como las Becas Progresar.
Hoy se sigue garantizando la gratuidad de la educación a través de la construcción de escuelas, de gestión estatal, en los barrios que van resurgiendo, en las localidades que
van aumentando la población. Hay que hacer un análisis profundo de los accesos, distribuidos por zonas, de esta gratuidad. Tenemos que trabajar mucho en la educación
para que esos chicos, de 16 a 18 años, que están excluidos del sistema, puedan incluirse a través de los centros de formación profesional gratuitos que brinda la educación
pública. El Estado nacional, a través del giro de los fondos a los estados provinciales y municipales, garantizan la gratuidad de la educación de los niveles inicial, primario,
secundario y universitario.

En relación a la gradualidad podemos decir que hoy los diseños curriculares incluyen la complejización de los contenidos, de los más generales a los más específicos, a
través de los años escolares. En el paso de la primaria al secundario las asignaturas pasan a dividirse según las especialidades. Los docentes pasan de ser una maestra de
grado en primaria, a varios profesores en las asignaturas del secundario como así también en el nivel universitario. Ahí se va dando una gradualidad.

Si hablamos de laicidad el diseño curricular en las escuelas de gestión estatal, de toda la República Argentina, no incluye formación religiosa ni teología ni una asignatura
llamada Catequesis. Si ocurre en instituciones educativas privadas que imparten esta formación que corresponden según las ideologías o la orden perteneciente.

La igualdad viene acompañada de la inclusión. Es el concepto más importante que abre la puerta de la educación. La escuela pública abre la puerta a la igualdad y a la
inclusión y está garantizada por los programas de finalización de estudios obligatorios, según las distintas edades. Los equipos de integración tenemos que trabajar y
profundizar mucho más en la Ley Federal de Educación y en las leyes provinciales, para garantizar mayor igualdad, mayor derecho a la educación, mayor inclusión, mayor
diversidad. El concepto de igualdad tiene que ser pensado como equidad. El Estado nacional y los estados provinciales y municipales tienen que desarrollar políticas
públicas para garantizar esta igualdad, esta inclusión y mayor diversidad. Esa es nuestra escuela pública. 

¿Cuáles son los desafíos de la educación a partir de la pandemia?

-En este contexto actual, muy vulnerable, de una crisis mundial, la educación ha tenido que adaptarse a la virtualidad y la no presencialidad. El primer gran desafío con el
que nos hemos encontrado es el de la conectividad. El haber discontinuado el Plan Conectar Igualdad hizo que chicos y chicas, estudiantes de nuestras escuelas, no tengan
los recursos y los insumos tecnológicos al igual que los docentes y las escuelas sin conectividad. Lo didáctico también se tiene que trabajar a partir de lo que es virtual. La
planificación ha cambiado y hay que adaptarla a la virtualidad, utilizando recursos audiovisuales.

El desarrollo de esos recursos audiovisuales debe ser una verdadera incorporación, como estrategia pedagógica, con un sentido y un fundamento dentro del proceso de
aprendizaje. La pandemia nos puso el desafío de empezar a contemplar e incorporar estos cambios sociales educativos, que son la virtualidad y la innovación educativa. Eso
sin perder la esencia de la educación que es brindarles el conocimiento a los estudiantes, a los niños y niñas que tenemos en nuestras escuelas, despertar las pasiones y las
vocaciones.

Ley 2.737

Ley reglamentando las subvenciones nacionales para el fomento de la instrucción primaria

El Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina, reunidos en Congreso, etc., sancionan con fuerza de-- LEY:
Art. 1° Tan pronto termine el ejercicio del Presupuesto del presente año económico de 1890, las subvenciones nacionales para el fomento de la instrucción primaria en las
provincias, se distribuirán con sujeción á las condiciones y formalidades de la presente Ley.

Art. 2° La subvención nacional se concederá para los fines siguientes:

 1° Construcción de edificios para escuelas públicas.


 2° Adquisición de muebles, libros y útiles para escuelas.
 3° Sueldos de preceptores.
Art. 3° Solo gozarán de los beneficios de la subvención nacional, las provincias que se sujeten á las siguientes prescripciones:
 1° Dictar un Presupuesto Escolar por el órgano de sus autoridades institucionales con determinación de la renta destinada al sostén y fomento de sus
escuelas. 2° La cantidad total del Presupuesto Escolar ó la cantidad destinada en el Presupuesto General con aquel fin, no podrá ser menor al 10 % de sus
entradas ó rentas generales.
 3° Suministrarán en las planillas cuatrimestrales que deben elevar al Consejo Nacional de Educación, los siguientes datos contenidos en las mismas y que
este Consejo distribuye.
a) Los nombres, sueldos, diplomas y empleo del personal docente de cada escuela.
b) La categoría de la misma.
c) El nombre de cada uno de los alumnos que concurren á la escuela, que debe ser escrito por ellos mismos, debiendo hacerlo el preceptor en caso de
no poder hacerlo alguno de ellos.
d) Los textos porque en ella se enseña.
e) Si la casa en que la escuela funciona es de propiedad del Estado y en caso de ser de propiedad particular, la cantidad mensual de arrendamiento que
por ella se paga.
f) Las escuelas particulares que funcionan en el distrito escolar respectivo, su número y el de los niños que las frecuentan.
g) Nombre del distrito, número y denominación de la escuela.
4° Si el censo nacional no se levantase en breve, cada provincia hará el escolar de las ciudades que haya en su jurisdicción que pasen de (4000) cuatro mil
habitantes, debiendo levantarlo cada cinco años si la Nación no lo hiciere.
5° Funcionará en cada provincia un Consejo Escolar ó un Superintendente, que tendrá á su cargo la dirección de la instrucción primaria y la inversión de las
rentas escolares.
6° Cada provincia tendrá una inspección escolar dirigida por un Profesor ó cuando menos por un Maestro Normal.

Art. 4° La subvención nacional se pagará por cuatrimestres corridos cuando se reciban las planillas, estadísticas escolares, de que habla el artículo anterior,
debiendo acompañarse el recibo original de los preceptores.
Art. 5° La subvención para compra de libros, útiles y muebles escolares se invertirá por el Consejo Nacional de Educación, debiendo cada Provincia hacer
su pedido acompañando el certificado de depósito en el Banco Nacional, á la orden del Presidente del Consejo, de la cantidad en que esté obligada á
concurrir en la proporción que adelante se establecerá. Cada provincia podrá nombrar un encargado que intervenga en la compra de los objetos indicados.
Art. 6° El Consejo Nacional podrá negar la provisión solicitada si á su juicio no estuviesen comprendidos los objetos pedidos en la designación del artículo
2°; pero en estos casos dará apelación de sus resoluciones ante el Ministerio de Instrucción Pública, si así se solicitase.
Art. 7° Cuando se trate de la subvención para construir una escuela, se acompañará el pedido respectivo, el plano de la obra, el presupuesto de su costo, la
copia de la escritura de cesión ó compra del terreno en que deba construirse y la declaración ó informe del Gobierno de la Provincia respectiva, de tener ya
reunida la cantidad que conjuntamente con la de la subvención nacional, ha de cubrir el importe de la obra. Los planos serán examinados y aprobados
previamente por el Departamento de Obras Públicas y podrán modificarse ó aprobarse según su dictamen.
Art. 8° La subvención para la construcción de edificios escolares se abonará por terceras partes: la 1ª al tener un metro de altura los cimientos; la 2ª cuando
aquellos estén techados, y la 3ª cuando se haya terminado completamente el edificio.
Art. 9° Las provincias gozarán de la subvención nacional en proporción á lo que invierta en instrucción primaria, en la forma siguiente: La tercera parte:
Buenos Aires, Córdoba, Santa-Fe y Entre Ríos. Las dos terceras: Corrientes, Tucumán, Santiago del Estero, Salta, Mendoza, San Juan, Catamarca y San Luis.
Las tres cuartas partes: Jujuy y La Rioja.
Art. 10. Ninguna provincia podrá percibir anualmente (cualquiera que sean sus erogaciones para sostener la educación común) más de la décima parte del
total de la cantidad que el H. Congreso destine para el fomento de la instrucción primaria de la República.
Art. 11. No habrá derecho tampoco para cobrar suma alguna, alegando que la cantidad votada en la Ley de Presupuesto General, y distribuida según lo
determina el artículo precedente, no alcanza á cubrir la cantidad que pueda corresponder á cada provincia en relación á los gastos escolares hechos por
alguna ó algunas de ellas.
Art. 12. En cada una de las provincias habrá un Inspector Nacional encargado de facilitar y vigilar la estricta ejecución de la presente Ley. Las funciones de
estos Inspectores serán reglamentadas por el Consejo Nacional de Educación.
Art. 13. De acuerdo con lo dispuesto en la Ley de 8 de Julio de 1884, art. 57, inciso 3°, el Consejo Nacional de Educación queda encargado de adoptar todas
las medidas que repute convenientes, á fin de garantir la fiel aplicación de los fondos que se destinen en el Presupuesto General para el fondo de la
Educación Común, así como exigir el exacto cumplimiento de las condiciones impuestas para gozar de los beneficios que acuerda la presente Ley.
Art. 14. Quedan derogadas todas las disposiciones que estén en oposición á lo prescripto en la presente
Ley. Art. 15. Comuníquese al Poder Ejecutivo. Dada en la Sala de Sesiones del Congreso Argentino, en Buenos Aires, á primero de Octubre de mil
ochocientos noventa.
M. DERQUI. L. MANSILLA. B. S. Campos, Uladislao S. Frias, Secretario del Senado. Secretario de la Cámara de D.D. (Registrada bajo el núm. 2737.)
Departamento de Instrucción Pública. Buenos Aires, Octubre 4 de 1890. Téngase por Ley de la Nación; cúmplase, comuníquese, publíquese é insértese en
el registro Nacional. PELLEGRINI. JOSÉ M. GUTIERREZ.

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