Está en la página 1de 10

Pobreza económica y salud mental en la época del Covid-19

Rosa Angélica Palma Chaparro

Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación, Universidad del País Vasco - Euskal


Herriko Unibertsitatea

3º Sociología

Prof: Pedro Manuel Martínez Monje

27 de Marzo de 2022
Introducción 3
Pobreza y salud mental post Covid-19 3
Medidas Post Covid-19 5
Políticas aplicables 6
Conclusiones 7
Bibliografía 8
Introducción:

La desigualdad económica durante la pandemia ha sido un gran condicionante para las


personas que no tenían suficientes recursos, la pobreza económica es un condicionante a la
hora de tratar o no la salud y la salud mental, todo esto se ve agravado a causa de la
emergencia sanitaria, Covid-19. En este informe se pretende dar a conocer qué políticas
sociales se han ido utilizando para paliar este problema, tanto por el lado económico como
por el lado sanitario, enfocándonos en los problemas mentales. También mostraremos que
medidas realmente han dado frutos a la hora de tratar el problema en conjunto, como es el
caso de la Renta Básica en Finlandia.

Pobreza y salud mental post Covid-19

Según informes como el de Cáritas del 2021, las personas más pobres son las que menor
importancia le dan a su salud física y mental. La salud mental es un tema que cada vez tiene
más resonancia a través de los medios de comunicación, forma parte de la salud en un sentido
más amplio en el que abarca la esfera física y psicosocial “La salud es un estado de completo
bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades.”
(OMS, 2018); por tanto consideramos relevante estudiar aquellas variables de la salud que no
se limitan a lo físico y que intervienen en la salud mental de las personas, siendo en su
mayoría el de las mujeres. Entre los condicionantes que pueden afectar a estas personas
encontramos: cambios sociales rapidos fruto de un proceso migratorio, condiciones de trabajo
estresantes y precarias definido como un trabajo en el que no hay certeza de continuidad, bajo
control del trabajo (trabajo de los cuidados y tener personas a su cargo) y un nivel de
protección e ingresos reducidos, discriminación de género (feminización de los cuidados),
exclusión social (pobreza) y/o bajo nivel educativo. (Rodgers y Rodgers, 1989, citado en
Jiménez y León, 2010, et al.).

El Estado de Bienestar es una organización política que nace en Europa con el fin de atender
a las problemáticas de desigualdad social, que en su momento nació después de la 1era guerra
mundial. Los logros que quiere alcanzar un Estado de Bienestar son los siguientes:
- Redistribución de la renta y los excedentes mediante un sistema fiscal progresivo y un
crecimiento del gasto público
- Garantía de un mínimo de bienestar, cobertura de necesidades básicas y protección
social. Garantiza una renta mínima, minimiza la inseguridad apoyando a las y los
ciudadanos y sus familias frente a ciertas contingencias sociales tales como la
enfermedad, el desempleo o la vejez, y hace provisión de un conjunto de servicios
pactados a los cuales tiene igual derecho toda la ciudadanía.
- Compatibilidad con el sistema económico capitalista
- Intervención del Estado en el campo social, laboral y económico.
- Concertación entre fuerzas sociales, diálogo y negociación
- Reconocimiento de los derechos sociales.

La red de protección social en España no ha sido de las mejores desde antes de la pandemia,
la cobertura que se hace a las personas pobres no son óptimas cuando se trata de sacar a esta
parte de la población de la pobreza. Philip Alston, ex Relator Especial de las Naciones
Unidas, en su última visita comentó que “la red de protección social de España ya era
completamente inadecuada antes del Covid-19, pero desde entonces la pandemia ha puesto en
evidencia cuán profundamente le está fallando a la gente”.

En el informe que realizó para la ONU, tras su visita, remarcó que una de las primeras
medidas que se deberían tomar en el país es la adopción de un Ingreso Mínimo Vital a nivel
nacional, y que esta es una medida con un gran poder simbólico pero al mismo tiempo es sólo
el inicio para poder atacar este problema. “La pobreza en España está anclada en un sistema
de protección social que está roto e insuficientemente financiado, en el que es imposible
orientarse y que no llega a las personas que más lo necesitan”, dijo Alston. “La necesidad de
reformas en profundidad ha quedado aún en mayor evidencia desde mi visita. El COVID-19
ha arrojado luz sobre las graves deficiencias en las políticas del gobierno central y las
comunidades autónomas para combatir la pobreza, con millones de personas que no pueden
trabajar sufriendo por retrasos en el pago de prestaciones, problemas técnicos y una asistencia
inadecuada”.

Según una encuensta del CIS sobre la salud mental de los/as españoles/as durante la
pandemia de la Covid-19, demostró que las personas con pocos recursos son las que más se
sienten deprimidas o sin esperanzas que las que se consideran de clase más favorecida. Esta
encuesta aunque fué elaborada durante la pandemia, nos muestra una realidad que
constantemente se ha repetido incluso antes de la crisis sanitaria. Los riesgos de tener un
problema en la salud mental es mucho más alto en personas con pocos recursos que con la
población que es más acomodada.

El profesor e investigador Xavier Martín comentó que “En el caso del binomio pobreza y
salud mental, es necesario tomar medidas que suavicen esos factores de riesgo, esa curva, de
manera que se reduzca la incidencia de los problema de salud mental en la población más
desfavorecida.” No todo el mundo sin recursos va a tener un problema de salud mental,
admite Martín, pero las estadísticas y las probabilidades van a continuar subiendo en este
sector de la sociedad.

Para poder hacer frente a esta situación se necesita implementar políticas que suavicen la
situación, por lo que se tienen que crear medidas de carácter político, técnico y social, que al
mismo tiempo favorezcan la cohesión social. “En general”, según explica Martín, “los países
con mayores niveles de desigualdad registran niveles de cohesión social más bajos. Esto se
puede ver en países como España o Francia, frente a los países escandinavos donde la
desigualdad es menor y la cohesión social mayor”.

Con esto no sólo vemos que es necesario ese apoyo económico o material, este tiene que estar
acompañado con un acompañamiento de carácter comunitario, ya que este entorno social
ayuda a que las personas sean más resistentes a los factores de riesgo que les puedan llevar a
tener problemas de salud mental.

Medidas Post Covid-19

Si echamos un vistazo a las ayudas que crearon tras la pandemia como el Fondo REACT-EU,
nos daremos cuenta que las primeras eran reactivaciones económicas a los fondos
presupuestarios de las comunidades autónomas, muchas de ellas están dirigidas a la
reactivación económica tanto de pequeñas empresas como a autónomos, todo esto con el fin
de amortiguar los efectos de la crisis de la Covid-19, pero vemos al mismo tiempo que estas
inyecciones de dinero sólo son comerciales y ninguna de ellas pone como preocupación
principal a las personas pobres ni a la comunidad. Según el Gobierno, el objetivo de estos
fondos es “impulsar la recuperación social y económica del país tras el impacto provocado
por la COVID-19. Para ello se fortalece el Estado de Bienestar con el objetivo de no dejar a
nadie atrás.” (Ministerio de Hacienda, 2020).

Estas ayudas denominadas “ayudas por la Covid”, no van dirigidas a la población teniendo en
cuenta realmente la situación de exclusión que están viviendo, están más enfocadas en la
reactivación económica que a la ayuda social. Pese a que vemos que hace frente a uno de los
tantos problemas de crisis que causó la pandemia, esta no es la única que debe ser atendida ni
la única que necesita una inyección económica.

Aunque vemos que el primer plan mencionado sólo se centra en la reactivación económica,
existen otros que están centrados en la salud mental. El plan de acción 2021-2024 Salud
Mental y Covid-19, está diseñado como “un documento estratégico pensado por y para
profesionales y pacientes de Salud Mental. Una hoja de ruta que permite avanzar con pasos
afianzados hacia la mejor salud mental, en su más amplio sentido", comentó el presidente
Pedro Sanchez. Al mismo tiempo comentó que se ampliarán los sectores de sanidad,
incorporando la especialidad de psiquiatría infantil y adolescente a la Formación Sanitaria
Especializada, con lo que se sumarían más plazas libres a las que ya se ofertan.

Estas medidas son ayudas que se van planteando de forma separada, se va tratando el
problema económico por un lado y el problema de salud mental por el otro, pero debemos
destacar nuevamente, como comentábamos al principio, la salud mental se puede ver afectada
por muchas causas, y en su gran mayoría son por las condiciones de vida, la precariedad
laboral o la incertidumbre que se siente hacia el futuro, todas estas eventualidades son
causantes de distintos trastornos, como pueden ser la ansiedad o depresión, y está en manos
de las políticas públicas atacar estas causantes de manera conjunta, no por separado. Al
mismo tiempo podemos ver estas medidas como pasos iniciales hacia unas políticas de
cambio, ya que como el propio Pedro Sánchez ha comentado, “existe la importancia de no
estigmatizar los trastornos mentales como signo de debilidad de quienes los padecen.
Visibilizarlos es un ejemplo de valentía y de coraje. Porque nadie está a salvo de ellos. Y
porque una sociedad fuerte es la que está más cohesionada, la que no excluye, la que integra".
Políticas aplicables

De entre las medidas que se han ido utilizando para paliar la pobreza económica, nació la
Renta Básica, que países como Finlandia puso a prueba hace unos años. Los resultados de esa
renta, que constaba de unos 560€, revelaron que no necesariamente alentó a la gente a volver
al trabajo, pero sí que mejoró la confianza en ellos mismos, y el bienestar mental, es decir que
se vió un impacto positivo en la salud mental.

Como antes hemos comentado, la incertidumbre que sufren las personas con pocos ingresos
económicos hacen que su salud mental merme cada vez más, pero si podemos brindar esa
seguridad de que tienen una estabilidad económica básica, poco a poco podremos empezar a
resolver los problemas mentales que la inseguridad económica causa.

Según un artículo de El Confidencial, investigadores de Helsinki concluyeron que “Los


beneficiarios de los ingresos básicos estaban más satisfechos con sus vidas y experimentaron
menos tensión mental que el grupo de control. También tenían una percepción más positiva
de su bienestar económico”. Y si vemos realmente la cuantía, es limitada y no sirve
plenamente para subsistir, pero deja en claro que de ser posible aplicarla a España podría ser
beneficiosa para combatir la pobreza y la exclusión social.

En España no se ha optado por la Renta Básica, pero si por el Ingreso Mínimo Vital, que a
pesar de que no está destinado a todo el mundo sin ningún tipo de condición, es un tipo de
ayuda que va dirigido a las personas que más urgentemente necesitan una fuente de ingresos
mínima. No podemos decir que esta política social sea la más correcta y efectiva, pero lo que
sí podremos ver es cómo irá evolucionando, y que efectos reales pueden tener en la población
más vulnerable. Tras estos resultados, podremos ir cambiando las políticas para que estas
hagan beneficiarios a más parte de la población, y para que finalmente lleguemos a tener una
Renta Básica Universal, sin condiciones, ni revictimizaciones.
Conclusiones:

Pese a que no encontramos políticas sociales que ayuden de forma plena y satisfactoria a
nuestro principal problema, creemos que las alternativas que aún se siguen poniendo en
manifiesto, van por buen camino. Tras toda la información que hemos recopilado podemos
llegar a unas cuantas reflexiones. La primera de ellas sería, que no podemos pretender acabar
con la pobreza económica si no atacamos al mismo tiempo la exclusión social, hemos visto
que el apoyo económico no sirve por sí solo, es necesario que haya un entorno que
complemente esta ayuda, y que al mismo tiempo que se intenta sacar a las personas de la
pobreza, se les brinde ese acompañamiento y soporte emocional.

La segunda reflexión sería que, debemos reformar las políticas sociales actuales, pasar del
workfare, que hunde cada vez más a las personas que solicitan ayudas, y les piden
condicionantes constantemente, al welfare, que busca el bienestar de todos, sin importar la
condición de estas. No es un paso fácil, pero la Renta Básica podría ser un buen comienzo,
dejar de revictimizar a las personas y que den conocimiento de cuán mal están, a asegurar, no
una ayuda, sino un derecho a todos los ciudadanos, para así poder darles esa libertad de vivir
plenamente.
Bibliografía:

Alston, F. (2020) Informe del Relator Especial sobre la extrema pobreza y los derechos
humanos. (En línea) Disponible en:
https://www.eapn.es/ARCHIVO/documentos/noticias/1594019269_alston-spain-report-final-
es.pdf . Consultado en 27/05/2022

Confederación Salud Mental España. (2021) Salud mental y pobreza, una curva peligrosa.
Revista Encuentro n2. (En línea) Disponible en: Revista Encuentro nº 2 año 2021 -
Confederación Salud Mental España. Consultado en 26/05/2022

Equipo de Estudios de Cáritas Española y Grupo Observatorio de la Realidad Social (2021).


La crisis de la Covid-19, Del tsunami al mar de fondo: salud mental y protección social. La
realidad de las familias acompañadas por Cáritas en abril de 2021. (En línea) Disponible en:
https://www.caritas.es/main-files/uploads/2021/06/Del-tsunami-al-mar-de-fondo.pdf
Consultado en 26/05/2022

Martínez, C. (2009). Salud Mental en un Contexto de Pobreza Urbana: Una aproximación


cualitativa. Rev Fac Nac Salud Pública 27(1): 61-65
http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0120-386X2009000100011
Consultado en 26/05/2022

Ministerio de Hacienda. (2020) Hacienda comunica a las CCAA el reparto de los 10.000
millones de la iniciativa REACT-EU para reactivar la economía y blindar los servicios
públicos. (En línea) Disponible en: Nota de prensa del Fondo REACT-EU Consultado en
26/05/2022

Ministerio de Hacienda. (2020) MECANISMO DE RECUPERACIÓN Y RESILIENCIA.


(En línea) Disponible en:
https://www.hacienda.gob.es/es-ES/CDI/Paginas/FondosEuropeos/Fondos-relacionados-COV
ID/MRR.aspx
Organización Mundial de la Salud, (2018). Salud mental: fortalecer nuestra respuesta. (En
línea) Disponible en:
https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/mental-health-strengthening-our-respon
se . Consultado en 26/05/2022

Zamorano, E. (2020) ¿La renta básica funciona? Estos son los países donde se ha probado (y
sus resultados). Revista Alma, Corazón y Vida. (En línea) Disponible en: ¿La renta básica
funciona? Estos son los países donde se ha probado (y sus resultados). Consultado en
26/05/2022

También podría gustarte