Subsistema de Proyección Trimétrico

La palabra trimétrico proviene del latín tri que significa “tres”

y del griego μέτρον (metron) que significa “medida”.

Una proyección de tipo trimétrico consiste en la representación

gráfica de un objeto tridimensional de manera bidimensional,
en la cual, los 3 ejes que constituyen el plano de proyección
forman 3 ángulos de amplitud diferente.

En éste tipo de proyección, las dimensiones correspondientes

a cada uno de los ejes se manejan en tres escalas diferentes,
es decir, existe alteración en las medidas del plano descriptivo
(montea) correspondientes a las profundidades y a las
anchuras, siendo las alturas las únicas que conservan su
magnitud original. Con éstos ajustes ocurre una ligera deformación
del objeto, misma que refleja una disminución aparente en su
tamaño, la cual resulta proporcional a la distancia que se
percibe por el ojo humano.

120º 150º 150º 135º 135º 105º

90º 75º 120º

Como ocurre en el subsistema dimétrico, el ajuste a las

profundidades se hace a 2/3 de la magnitud real del objeto en la
montea; el ajuste a las anchuras es a 5/6 partes de la magnitud real.
 Desarrollo
Proyectar los ejes ortogonales de manera que el plano forme un ángulo aproximado a 135º

15º 30º
Para trasladar la información corresponiente al eje de anchuras es necesario hacer
una reducción de la información de la montea a 5/6 partes de la magnitud real.

Para trasladar la información corresponiente al eje de profundidades es necesario

hacer una reducción de la información de la montea a 2/3 partes de la magnitud real.

Generar el gradiente de piso > Trazar líneas guía para localizar cada punto del
objeto a proyectar dentro del plano. Éstas líneas parten del eje que las origina, de
forma paralela al eje contrario. Es decir, la información que corresponde al eje de
anchuras, deberá ser trazada hacia el interior del plano de proyección, de forma
paralela al eje de profundidades y viceversa.

Localizar sobre el piso cada uno de los puntos que corresponden al objeto a
proyectar y levantar sobre ellos –los que tengan altura- una línea vertical,
perpendicular a la línea del plano del cuadro.

Tomar de la montea la altura correspondiente a cada punto elevado; usar el punto

que se encuentra sobre el piso como origen para trazar la altura. Unir los puntos
del objeto con sus correspondientes para generar la proyección tridimensional.

Dar calidad de línea identificando las partes visibles del objeto.