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El Beso de la Mujer Araña

Literature Seminar (Ohio University)

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EL BESO DE LA MUJER ARAÑA: UN ACERCAMIENTO A LA CONSTRUCCIÓN DE

GÉNERO

LAURA DANIELA DE ALBA

MARÍA PAULA MORENO

DIANA MÉNDEZ

FACULTAD DE CIENCIAS BÁSICAS Y DE LA EDUCACIÓN

LICENCIATURA EN LENGUA CASTELLANA E INGLÉS

2017

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Literatura Latinoamericana I

El beso de la mujer araña: un acercamiento a la construcción de género

Resumen: Se analizará, a través de las teorías queer de Judith Butler y otros pensamientos

acerca de la concepción de género, cómo los personajes de El beso de la mujer araña

realizan ciertos actos performativos que configuran quienes son y cómo se desenvuelven

como prisioneros en una celda, mostrando así al género al que pertenecen sin importar su

sexo.

Palabras clave: masculinidad, feminidad, identidad, género, performatividad.

The kiss of the spiderwoman: an approach to gender construction

Abstract: It will be analyzed, through the queer theories of Judith Butler and other

thoughts about the conception of gender, how the characters of The kiss of the

spiderwoman perform certain performative acts that shape who they are and how they

perform as prisoners in a cell, showing this way the gender they belong to no matter what

sex they are.

Key words: masculinity, feminity, identity, gender, performativity.

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Literatura Latinoamericana I

El beso de la mujer araña: un acercamiento a la construcción de género

“Entre dos individuos la armonía nunca viene dada

sino que debe conquistarse indefinidamente”
Simone de Beauvoir

Es El beso de la mujer araña una de las obras más icónicas y transcendentales del escritor

argentino Manuel Puig (1932-1990), quien es considerado como uno de los iniciadores del

post-boom latinoamericano, y quien incursionó en el séptimo arte, lo que causará que sus

novelas tengan unos matices cinematográficos. Fue también de los primeros escritores en

incorporar el elemento de la cultura de masas, sus textualidades y

producciones pop policiacas, y adaptarlas al género de la novela y sus particulares modos

de captar lo psico-social en un relato totalizante. La obra fue publicada en 1976, causando

controversia por su discrepancia con las ideas sociales tradicionales, lo que rápidamente

llevó a que este polémico libro fuera vedado o censurado. La historia narrada en él, data

entre 1972-1976 una época donde el país está sometido a un fuerte régimen autoritario

impuesto por los militares y donde hay una marcada persecución hacia los grupos

revolucionarios, hacia cualquiera que no encajara con los ideales impuestos por el gobierno,

en un acto de hegemonía; en un contexto donde el miedo, el atosigamiento y el

sometimiento eran predominantes. Son los presos, Molina y Valentín, los protagonistas en

esta historia, uno encerrado por corrupción a menores y el otro, preso político, ambos

considerados a la luz de la sociedad como temibles.

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Literatura Latinoamericana I

Conforme avanza la narración se observa cómo se va estrechando un lazo entre los

protagonistas, en la medida que Molina le relata una serie de películas a Valentín para lidiar

con el insomnio y que, a raíz de ellas, empiezan a surgir temas personales que van haciendo

que los hombres se vayan conociendo y sintiendo afinidad el uno por el otro, a pesar de las

diferencias que le acometen, en razón a que Molina se caracteriza por ser sentimental,

sensible, homosexual, y quien, con convicción, se refiere a sí mismo como mujer; mientras

que por el contrario Valentín se le ve serio, concentrado en lo académico y en seguir con su

lucha política. Como se mencionó anteriormente, existe una clara dicotomía entre

personalidades e ideologías de los protagonistas, quienes a lo largo de la historia se

confrontan a sí mismos hasta que finalmente Molina acepta su conciencia política y

Valentín su inclinación homosexual, hallando en sus discursos, un marcado enfrentamiento

entre el sentimiento y la razón, el deseo con el deber, el cuerpo con la mente, y entre otros,

el género y el sexo. En este sentido, Valentín representa los ideales estereotipados de la

masculinidad, mientras que los rasgos de Molina lo identifican con la feminidad. Esta obra

se caracteriza por desarrollar temas como la identidad de género, que a partir de los

postulados presentados en la teoría performativa de Judith Butler, serán confrontados y

analizados.

Teniendo todo lo anterior en cuenta, el propósito de este ensayo es conocer y explicar

cómo los mecanismos de poder, el encierro y la opresión configuran la identidad de un

individuo, y cómo este, a través de unos performances, adopta designaciones diferentes de

las esperadas acciones de género, y también, cómo las características performativas que se

encuentran en la teoría de Judith Butler obran en El beso de la mujer araña. Es por eso que

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Literatura Latinoamericana I

nuestro principal enfoque será analizar las características de feminidad y masculinidad ya

mencionadas anteriormente.

Según la teoría de la performatividad de Judith Butler el “género” del individuo no se

limita solamente a un aspecto biológico o anatómico, sino que es más bien un constructo

social que ha sido impuesto al individuo, y que este ha adoptado a través de reiteraciones de

dichos modelos de identidad preestablecidos, los cuales construyen una visión estable de

género y sexo. Viéndolo desde esta perspectiva, la construcción del género toma un cauce

social y por ende político “la consecuencia de llevar la sexualidad al terreno de lo social es

que dado que lo social está atravesado forzosamente por el poder se convierte en político”1,

donde los mecanismos de poder configuran la identidad del individuo, entonces el género

no es determinado por lo que se es sino por lo que se hace; Simone De Beauvoir declaró

que “No se nace mujer: se llega a serlo” (1998, p. 109) siendo el género una identidad

inestable, la cual depende de unos actos performativos que la configuren.

“El ordenamiento disyuntivo de los seres humanos como "masculino" o "femenino" se

da a través de un simbolismo heterosexualizante y su correspondiente tabú sobre la

sexualidad” (Butler, 2002, p. 242). En la obra observamos cómo constantemente Molina se

refiere a sí mismo como una fémina, él elige identificarse como una mujer, defiende lo

femenino al mismo tiempo que refuta y se opone a todo lo que conlleva ser un hombre, es

una muestra clara de cómo se puede llegar a ser femenino sin ser mujer, o en contraste, es

como poner a una mujer en un cuerpo de un hombre, nacer en el cuerpo equivocado ya que

biológicamente él pertenece al sexo masculino pero nunca se ha sentido de esta manera.

-¿Sos un señor burgués en el fondo, entonces?

- Una señora burguesa. (Puig, 2004, p.42)

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1
Tomado de: [https://amerika.revues.org/3544] referenciado en la bibliografía

Es claro que Molina se identifica como una mujer, y así mismo lo ve Valentín al final de

la obra “vos sos la mujer araña, que atrapa a los hombres en su tela” (2004, p. 206)

Molina siente una inmensa admiración hacia las mujeres, él cree que por haber sido tan

mimado fue que quedó “así” (homosexual, afeminado):

Que de chico me mimaron demasiado, y por eso soy así, que

me quedé pegado a la pollera de mi mamá… pero que
siempre uno se puede enderezar...[yo] les contesto… ¡regio!.
Ya que las mujeres son lo mejor que hay…yo quiero ser
mujer… (Puig, 2004, p. 23).

Por haber sido tratado con mucha delicadeza y dulzura, las personas que se encontraban

a su alrededor pensaban que su confusión de identidad se debía a eso y para ellos, la mejor

solución era que él encontrase a una mujer, porque esta es la mejor manera de sentirse

completo, realizado. Es como si de alguna manera, la homosexualidad se pudiese curar,

como si fuese una enfermedad, pero Molina no quiere buscar una mujer sino transformarse

en una, o sea, prefiere ser que tener. Molina crea la identidad femenina, al repetir esta serie

de rasgos que culturalmente se adhieren a la mujer, de inmediato lo convierte en una.

El género no es, de ninguna manera, una identidad estable;

tampoco es el locus operativo de donde procederían los
diferentes actos; más bien, es una identidad débilmente
construida en el tiempo, una identidad instituida por una
repetición estilizada de actos (Butler, s.f. , p. 296).

Para Molina su homosexualidad es irrelevante, para él lo importante es ser mujer y

además su feminidad depende del hombre, o sea, es mujer porque se acuesta con hombres

“Nosotros somos mujeres normales porque nos acostamos con hombres” (Puig, 2004, p.

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164). Molina no es un hombre al que le gusten personas de su mismo sexo, él es una mujer

y por lo tanto le gustan los hombres. Al construir esta identidad femenina, renuncia a todo

lo masculino y aquí se da una idea de cómo todo lo femenino siempre está relacionado o al

menos va encaminado hacia el hombre y lo masculino.

También vemos sumisión por parte de Molina “Pero si un hombre... es mi marido, él

tiene que mandar, para que se sienta bien. Eso es lo natural, porque él entonces... es el

hombre de la casa” (2004, p. 193) Para él ser mujer también implica tener que sentirse

inferior. Él se adapta a las estructuras sociales ya impuestas, donde el hombre es quien

tiene poder y control y las mujeres son solo un elemento más para satisfacerlos, o sea, si

ser mujer no conllevase en esta sociedad patriarcal sometimiento e inferioridad, él

fácilmente podría tener una relación de igualdad. Es aquí donde se ve reflejada la

dependencia que siente la mujer del hombre y para Molina esto es lo natural, lo normal

Por otra parte, la concepción que se tiene de Valentín al comienzo de la historia es un

poco diferente a la del nudo o desenlace de esta. Arregui vendría a representar en la obra la

masculinidad en relación a la convivencia con Molina. A lo largo de la novela este

personaje se va “ablandando” un poco, y comienza a ceder. Valentín Arregui, con unos 26

años, un preso de subversión, piensa que puede cambiar al país con las armas y es además

un idealista social, cree que mientras todos se unan aún hay algún tipo de esperanza,

incluso sustenta en repetidas ocasiones que para él es más importante la revolución que los

sentimientos. Estudia mucho, más enfáticamente sobre sociología, y está alerta todo el

tiempo con todo lo que sucede en la cárcel. En la obra podemos observar dos maneras

totalmente opuestas del concepto masculinidad; por una parte, tenemos a Molina, que tiene

de alguna manera idealizado el concepto, es un estereotipo “ser lindo, fuerte, pero sin hacer

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alharaca de fuerza, y que va avanzando seguro. Que camine seguro, como mi mozo, que

hable sin miedo, que sepa lo que quiere, adónde va, sin miedo de nada.” (Puig, 2004, p. 55),

pero en cambio para Valentín tiene mucho más que ver con el honor, va mucho más allá de

cómo lo ve la sociedad:

No dejarme basurear... por nadie, ni por el poder... Y no, es

más todavía. Eso de no dejarme basurear es otra cosa, no es
eso lo más importante. Ser hombre es mucho más todavía, es
no rebajar a nadie, con una orden, con una propina. Es más,
es... no permitir que nadie al lado tuyo se sienta menos, que
nadie al lado tuyo se sienta mal.” (2004, p. 56).

Es como un contraste ya que por un lado es superficialidad, deleite, perfección, por el otro

es contienda, soledad y tortura.

Como se mencionó anteriormente la masculinidad de Valentín se refleja por medio de su

relación con Molina. Esta relación corresponde a la relación de los dos géneros, hombre y

mujer (identificándose Molina como una). De alguna manera, para él es importante ya que

ser mujer conlleva una posición en relación con lo masculino, es decir, su asociación con un

hombre, le da cierta postura como mujer, además Valentín se cataloga como un hombre,

porque según él, el cumple con todas esas cualidades que describe2. De acuerdo con Butler,

la biología de la persona no es suficiente para encasillarla en un género específico, sino

que se debe tener en cuenta la conducta de la persona para clasificarla en el momento de la

actuación.

Es así como cada personaje se significa de una manera distinta, siguiendo, a pesar de

todo, con los estereotipos que la sociedad en la que se desenvuelven les ha impuesto;

mostrando claramente a Molina como la imagen femenina y a Valentín como todo lo

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2
Ver la cita anterior

contrario: el componente masculino. Fue, entonces, esta la forma en que se construyeron

sus identidades de género: resultado de un acto performativo.

La teoría de la performatividad de género de Butler hace énfasis en la construcción de

género con base en actos reiterativos en vez de actos instintivos, se resiste a los conceptos

género y sexo como categoría de seres, pues “la división entre los sexos parece estar «en el

orden de las cosas», como se dice a veces para referirse a lo que es normal y natural, hasta

el punto de ser inevitable (Bourdieu, 2000, p. 21) y decide remarcar su carácter construido.

A través de los personajes Molina y Valentín se puede observar este constructo social

establecido que ha sido roto y reiterado a la vez; roto porque Molina, siendo hombre se

significa como mujer, ese es su género, y reiterado, porque en su propia concepción de sí

mismo como una mujer sigue con los mismo parámetros que la sociedad ya ha establecido:

la mujer necesita de un hombre.

El género es instituido por actos internamente discontinuos,

la apariencia de sustancia es entonces precisamente eso, una
identidad construida, un resultado performativo llevado a
cabo que la audiencia social mundana, incluyendo los propios
actores, ha venido a creer y a actuar como creencia (Butler,
s.f. , p. 297)

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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

BAO, J. (2012) El beso de la mujer araña metáfora performativa. En:

[https://amerika.revues.org/3544] Consultado en Internet: Noviembre 2017

BEAUVOIR, S., (1998), El segundo sexo, volumen 1. Catedra En:

[http://users.dsic.upv.es/~pperis/El%20segundo%20sexo.pdf] Consultado en

Internet: Noviembre 2017

BOURDIEU, P. (2000), La dominación masculina. Barcelona: Anagrama

BUTLER, J. (s.f.) Actos performativos y constitución de género: un ensayo sobre

fenomenología y teoría feminista.

BUTLER, J. (2002) Cuerpos que importan. Buenos Aires: Paidós

PUIG, M., (2004) El beso de la mujer araña. Madrid: Espasa

10

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