GUÍA DE ESTIMULACIÓN DEL LENGUAJE

PARA INFANTES Y NIÑOS

(0 - 3 años)

1. Sobre todas las cosas, juegue y diviértase con su hijo.

2. De a su hijo mucha estimulación verbal. Nombre los objetos conforme los vea usted y los
toque. Describa las cosas y su textura, compárelas con otras cosas. Conforme transcurran sus
actividades cotidianas, discuta lo que ustedes estén haciendo y porqué.
3. Hable en oraciones completas. Pronuncie palabras claramente, con mucha melodía.
Permanezca cercano al niño.
4. Lea en voz alta diariamente. A los niños muy pequeños se les debe mantener muy cerca para
compartir la experiencia de libros, historias, cuentos y rimas infantiles.
5. ¡Cántele a su niño! Llene su día con todo tipo de música y canciones. Disfrute d ella
interacción entre el canto y el juego.
6. Dentro y fuera de la casa, muéstrele y dígale el nombre de lo que encuentra a su alrededor.
7. Dígale el nombre de las cosas que utiliza cuando lo baña, cuando come, cuando le cambie de
ropa.
8. Déle oportunidad de estar con otras personas, adultos y niños.
9. Prémielo con un beso, con una sonrisa y con caricias cuando diga una palabra nueva.
10. Ayúdelo a llevar el ritmo de la música con sus manos o tocando un tambor.
11. Mencione el nombre de las personas, animales y cosas del ambiente.
12. Enséñele las figuras de un libro o una revista; el nombre de los juguetes para que aprenda a
señalar el que usted le nombra.
13. Frente a un espejo señale las partes del cuerpo del niño, luego en el de otra persona, para
después hacerlo en un muñeco y en figuras: los ojos, el pelo, las manos. Anímelo a que diga
los nombres.
14. Imite el sonido de los animales: la vaca hace muuu, el gato hace miau, el perro hace guau,
guau; los sonidos del ambiente; el reloj hace tic tac.
15. Exprese con gestos sus sentimientos de alegría, sorpresa, susto, llanto, aplaudiendo,
cantando, tristeza.
16. Pídale que cumpla órdenes sencillas: “Llévale estos zapatos a mamá”, “pon la muñeca en la
silla”, para que reconozca lo que significan las palabras.
17. Escúchelo atentamente cuando él trate de contarle algo, respóndale con palabras claras y
correctamente pronunciadas para que no tenga lenguaje ininteligible.

¡Asegure los mejores resultados para su niño!