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Romano 1:18-19 “ 18 Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda
impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad; 19 porque
lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó.”
Desde el verso 18 comienza el cuerpo de los romanos. Pablo comienza a explicar
su punto central. Comienza el cuerpo de esta carta y lo primero que menciona es
sobre el pecado, lo menciona primero en términos de enseñar la salvación.
Para entender la salvación debemos estudiar y entender primero qué es el pecado, es
importante entender esta secuencia, en este orden. Si se estudia la salvación primero,
entonces no es una secuencia correcta.
El pecado comienza en los romanos 1:18 hasta
los romanos 3:20. En especial el capítulo 1:18-21 vemos versículos muy importantes y
a través del pasaje de hoy vemos sobre el pecado que existe dentro de los gentiles, la
impiedad y la injusticia, cuando estudiamos el libro de romanos estas dos palabras
debemos recordarlas. Y a través de los romanos se enseñan tres cosas principales.
Lo primero que entendemos es que el pecado se define como impiedad e
injusticia. La impiedad es no querer retener a Dios en el corazón, la injusticia es la lista
de todos los pecados que surgen a partir de la impiedad, es decir, estos pecados surgen
porque no se quiere tener a Dios en el corazón. Y vemos que este mundo está lleno de
estos pecados.
Lo segundo es que la impiedad y la injusticia terminan resultando en la idolatría y la
corrupción moral y en especial en la corrupción sexual.
Lo tercero es que por estos pecados se recibirá la ira de Dios y habrá destrucción.
Pablo está señalando que el punto principal y fundamental es la impiedad y la
injusticia. La impiedad se comete con relación a Dios y la injusticia es el pecado
que se comete en relación al hombre. En otras palabras, la impiedad es un pecado que
se comete verticalmente y la injusticia es el pecado que se comete horizontalmente.
Entonces Pablo les explica que ellos pecan verticalmente y horizontalmente.
Nosotros debemos tener interés en saber lo que es la injusticia, pero primero antes
que todo debemos estudiar la impiedad, porque la impiedad es la raíz de todo pecado, el
no querer tener a Dios en el corazón, es el comienzo de todos los problemas. Y si no
resolvemos la impiedad no podremos resolver el problema de la injusticia.
Cuando eliminamos la mala hierba, debemos quitar la raíz primero. Esto resulta en la
idolatría. Pero las personas que no sirven a Dios, sirven a otra cosa como si fuera
dios, aunque ellos digan lo contrario. Todo lo que las personas deciden adorar es
comparable a insectos delante de la gloria de Dios. Lo más precioso es Dios y solo
cuando las personas están con Dios pueden experimentar felicidad.
Pablo de alguna forma nos está diciendo que ellos han reemplazado a Dios por
cosas que son tan insignificantes como los insectos, cosas que delante de Dios es igual a
nada y que no tienen poder para salvar.
Hoy en día no es diferente, hoy en día las personas
idolatran a muchas cosas, idolatran a personas y también a sí mismos, idolatran a
famosos, animales; entre otras palabras, están idolatrando la naturaleza, idolatran todo
lo creado y si vemos claramente no están sirviendo a Dios, luego terminan sirviendo a
cualquier cosa menos a Dios.
Desde ese momento, al adorar otras cosas, comienzan los problemas y
la corrupción moral. El hombre debe conocer a Dios y servirle, pero como no está este
conocimiento en cada persona, se cometen estos pecados.
1.-Romanos 1:18-32.
La impiedad y la injusticia traen la corrupción moral y comienza la destrucción, pues la
ira de Dios se manifiesta.
La base para la salvación es conocer el pecado, si uno no
conoce los pecados no se puede conocer la salvación. Si uno no conoce una
enfermedad no se podrá sanar.
Romanos 1:20-21 “20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad,
se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por
medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa. 21 Pues habiendo
conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se
envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido.”
En el capítulo 1, Pablo habla que todos conocen a Dios, toda la creación habla de
Dios, todo lo visible. El espíritu del hombre está procurando de Dios, el girasol siempre
busca el sol, aunque neguemos a Dios siempre le buscamos, porque Dios nos creó de
esa forma, esta es la imagen original de Dios.
Agustin dice que él buscaba a Dios en lo externo y Dios estaba en su interior, el habla
de la paz interna. Nuestra existencia busca de Dios, las personas sin Dios no pueden
vivir, y solo dentro de Dios se puede vivir esta paz y felicidad.
El hombre por sí mismo sabe que Dios existe, el hombre no puede vivir separado
de Dios. Cuando pensamos en el girasol no podemos pensar sin el sol, el sol siempre
está en su lugar y el girasol siempre busca al sol. De esta misma manera aunque la nube
del pecado cubre nuestra vista para no ver a Dios, él existe y está ahí, el espíritu del
hombre busca a Dios sinceramente.
Jesús explica que esta relación es la del Padre y el
Hijo, cuando uno dice la palabra Padre, ya está implicando al Hijo, porque hay padre y
hay hijo, y el hecho de que hay un hijo, es porque hay un padre y estos dos no se
pueden separar, si lo separamos surge la ansiedad, esta es la relación entre el padre y el
hijo. Jesús explica que esta relación es así, nosotros necesitamos de Dios y Dios de
nosotros.
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Para los que dicen que Dios no existe, podemos ver a través de la creación y
la naturaleza el poder y deidad de Dios, en otras palabras siguiendo las cosas visibles
podemos decir que Dios existe. En griego tenemos las palabras cosmos y logos.
El universo sigue una orden como un reloj, en medio de este universo existe el logos
que es la verdad, Dios creó el universo y estableció leyes y principios dentro de este
universo.
Pablo nos dice que este universo es ordenado, porque hay un creador, es
imposible que este universo se haya creado al azar. Pero a pesar de esto las personas
dicen que Dios no existe, porque no se le puede ver, pero el hecho de que no se pueda
ver no quiere decir que no exista.
Ellos dicen que Dios no se ve, pero Pablo les dice que si miran la creación le
pueden ver, todo señala que hay un Dios, no tienen excusa. Un edifico no puede crearse
al azar, no es algo que pase al azar, una casa no se crea sola o por una gran explosión,
es tan simple de decir que hay alguien que la diseñó y la construyó.
La creación cuando dice que no existe el creador, porque dicen que no lo pueden
mirar, dicen que es irracional e ilógico, pues existe un ser que está más allá de lo que
podemos ver, reconocer y pensar. Él me creó a mí, y ese es un argumento más científico
y con lógica, porque si vemos un diseño es porque existe un diseñador. Aunque no lo
pueda ver, él me diseñó, él me hizo.
2.-Romanos 1:18-32.
Romanos 1:22-23 “22 Profesando ser sabios, se hicieron necios, 23 y cambiaron la
gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de
aves, de cuadrúpedos y de reptiles.”
Aquí vemos a Pablo señalar el pecado, cuando se cae en impiedad, más tarde
eso nos lleva a la injusticia. Cuando se peca, de la impiedad surge la idolatría, ¿Qué
es lo que la biblia nos enseña con respecto a esto? nos habla de no crear ídolos, esto es
muy importante, esto quedó grabado dentro de los 10 mandamientos.
Éxodo 20, nos habla de esto, el primer y segundo mandamiento está relacionado con el
pecado de la impiedad.
Éxodo 20:2-4 “2 Yo soy Jehová tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa
de servidumbre. 3 No tendrás dioses ajenos delante de mí. 4 No te harás imagen, ni
ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las
aguas debajo de la tierra.”
Entonces vemos que no debemos servir a otros ídolos, no debemos poner en
nuestro corazón a otros falsos dioses y no debemos hacernos una imagen visible de Dios
como una escultura.
Éxodo 20:5-6 “5 No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu
Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la
tercera y cuarta generación de los que me aborrecen, 6 y hago misericordia a
millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos.”
¿Por qué Dios nos pide no hacer ídolos o imágenes? Porque estamos convirtiendo
a Dios en un objeto, lo estamos rebajando a algo que no es, entonces él ya no sería Dios,
pues entendemos que Dios no puede caber en un objeto, no puede ser creado por manos
humanas. Dios es aquel que existe por sí mismo.
Éxodo 3:14 “Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a
los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros.”
Nadie puede decir que es Dios o como es él, este mandamiento es grandioso.
Pues en el momento que creamos una imagen, esto distorsiona nuestro entendimiento de
lo que es Dios y viviríamos una vida distorsionada. Esto surge al ver esto de mala
manera.
Romanos 1:24 “24 Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las
concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios
cuerpos,”
Mientras más buscan las personas todo aquello que no es Dios, sufren más y más,
este es un problema de las personas de hoy. Entonces las personas que son
arrogantes, no son sinceras a pesar de sentir este vacío en su ser, no buscan de
Dios y siguen llenándose de cosas más y más intensas y estimulantes. En este proceso
terminan destruyéndose terminan en un estado más y más depravado.
Aunque cerremos los ojos, el cielo no va a desaparecer, no importa cuánto queramos
negar a Dios, aun nuestras almas buscan de él, aun escuchamos la voz de Dios en
nuestras almas que necesitan de Dios.
El salmo dice que como el ciervo brama por las aguas
así clama mi alma por Dios, este es un clamor del ser humano que ha dejado a Dios.
Entonces aquellos que rechazan hasta el final y olvidan a Dios hasta el final, ellos
terminan idolatrando y caen, estos terminan siendo esclavos.
Cuando perdemos a Dios hay un síntoma que siempre aparece, es la lujuria
(deseo exagerado o exacerbado por lo sexual y todo lo que le estimula sus sentidos
desordenadamente), esto sin falta les va a pasar. Entonces aquellos que ignoran a Dios,
simplemente se están hiriendo así mismos. Así cuando el hombre deja a Dios y vive a su
manera, lo inevitable es la lujuria, y así piensan que pueden vivir una vida sin Dios, pero
esto no es posible y estas vidas jamás llegaran a la gloria de Dios.
En Romanos nos enseña que hay armas para pecar y armas para la justicia,
cuando caemos en la impiedad somos armas de injusticia, pero nosotros debemos
acordarnos de esto, no debemos de caer en la impiedad que nos lleva a la idolatría, esta
es la única forma de no caer en una vida inmoral.
El abandono de Dios, es que aunque él nos muestra su ira y nos da sus advertencias,
llega el momento en que Dios los abandona porque ellos no quieren cambiar,
entonces decimos que Dios los entregó, Dios los abandonó, esta ira nace del amor.
Dios es Dios de amor y Dios de ira, pero si no fuera así y nos mira pecar y no hace
nada, sería irresponsable y diríamos que Dios no ama al hombre, pero entonces Dios
tiene ira, eso es correcto. La ira de Dios muestra que él es el verdadero Dios, el celo de
Dios nos muestra que él es verdadero.
En el idioma coreano existe una palabra JAN, es algo como esto, hay padres que
tienen hijos, pero los hijos reciben el amor y aunque tú los sirvas, les ayudes, estos hijos
no sienten nada por sus padres, y mientras más quieras acercarte a ellos más y más se
alejan. Este es el sufrimiento en el corazón de Dios, por el corazón del hombre, esto es
JAN.
Si el hombre no se acerca a Dios, él podría forzarlos, pero eso no es así, Dios no
obliga a las personas, porque el amor verdadero no puede ser obligado, el amor genuino
no puede ser forzado, si esto se hace así esto ya no sería amor.
Dios espera que lo amemos con nuestra propia voluntad, sin embargo vemos que
aunque Dios está amándonos siempre, vemos que las personas no quieren tener a Dios
en sus vidas, y siguen sus propios planes y deseos. Entonces en esta situación ¿Qué
va a hacer a Dios? ¿Acaso los va a destruir o los va a castigar? no, Dios es alguien que
está en un mundo más alto que nosotros.
Dios no nos obliga, él lo que hace es dejarnos para que
hagamos lo que queramos. Esto es de temer, debemos ser gente diferente y entender
esto, pues así es el hombre caído, el hombre falso que hace sentir a Dios este dolor.
Vemos que Dios delante del amor deja de ser poderoso, es un Dios débil, porque no
puede forzar a las personas a que lo amen, entonces los deja, y le dice has lo que quieras
hacer.
Esto lo vemos en el hijo prodigo, el padre hizo todo lo que se pudo para que no se
fuera, pero al fin y al cabo se va y le pide la herencia y se va, está es la imagen de Dios
que los deja ir.
Dios espera y nos deja, el hijo prodigo vivió una vida miserable, y los que
rechazan a Dios hasta el final, ellos experimentan oscuridad y dolor hasta el final. Este
abandono no causado por Dios, es un abandono causado por sus pecados, ellos
experimentan en esta tierra el infierno, y nosotros podemos vivir en un infierno, si miramos
las noticias de este mundo, la mayoría son malas.
Es un infierno en esta tierra y nosotros
también podemos vivirlo si caemos en estos pecados, para el mundo todo es relativo,
pero podemos identificarlo pues está en nosotros.
5.-Romanos 1:18-32.
Aquí vemos que Pablo habla sobre todos los pecados del gentil. Existe una lista de los
pecados y lo que sale aquí es algo principal, ellos tenían un problema muy serio, ellos no
amaban a Dios, ellos lo odiaban, esta es la raíz de todos los pecados, esta mente está en
todo hombre caído.
Si queremos ignorar a Dios no es algo fácil, pero vivir así es realmente
difícil, porque si lo niegas en tu mente y en tu corazón, y sigues creyendo esto, entonces
es una lucha que es por siempre.
Esto no es simplemente arrogancia, esto es decepción, el
decir que Dios no existe, no es una cuestión tan simple, es como engañarse a uno mismo
es ser deshonesto, es creer en una mentira.
El que quita a Dios de su vida solo vivirá en discordia con su corazón y con el mismo,
es una vida de ansiedad, muchos nervios, y no gozaremos nunca de verdadera vida y
satisfacción. Las personas solo quieren escuchar su mente y no su corazón haciendo
muchas cosas, pero no se puede ignorar el alma.
Todos los pecados se vienen al odiar a Dios, esto pasa en el momento en el cual no
se quiere tener a Dios. Esto es algo que se debe resolver. Debemos tener comunión con
Dios y tener buenas prácticas y usar bien nuestros tiempos para estar cerca de Dios, esto
es lo más sabio que podemos hacer.
Nuestros problemas con las personas nacen de alguna incapacidad, de alguna
deficiencia en nuestra relación con Dios, y esto es lo más importante que debemos
restaurar, si hacemos esto todo lo demás se restaurará.
Nosotros dependemos tanto del teléfono celular hoy, que si nos falla nos sentimos
muy mal, y lo único que queremos es arreglar esto, y esto en lo espiritual, nuestra relación
con Dios si se restaura también la relación con todos los que amamos se arreglará.
La respuesta no está en otro lugar, está en nuestra relación con Dios, esa es la
clave, pero las personas son obstinadas, rebeldes y quieren resolver sus problemas de
otra manera y resulta peor.
6.-Romanos 1:18-32.
Cuando nosotros resolvemos nuestros problemas sin Dios, es como dar golpes al
aire, se puede arreglar, pero no dura nada y termina peor que como comenzó. Nosotros
debemos resolver nuestra relación con Dios y no ver el problema en otro lugar.
Debemos restaurar nuestra relación con Dios, debemos enfocarnos bien y cada
persona debe establecer su relación con Dios. Porque cuando nosotros cambiamos,
cambia el entorno y cambiaria todo al final, esto viene al restaurar nuestra relación con
Dios, esto es lo más serio.
Han existido movimientos para arreglar este mundo, pero sin Dios no
se puede crear un mundo maravilloso. Puede durar solo un tiempo, pero no durará para
siempre, un ejemplo de estos movimientos es el comunismo.
Este sistema se miró como maravilloso, viviendo en igualdad, teniendo todo por
igual, se escuchaba muy hermoso, pero sin Dios. Ellos enseñan una copia del reino de
Dios, solo que dejaban fuera a Dios, y el mundo soñaba con un paraíso.
Y muchos se dejaron llevar por ese sueño, pero la verdad es imposible crear un
mundo sin Dios, pues el orden él lo dio, la verdad de Dios se debe restaurar y entonces
este paraíso se vivirá como en el principio.
Nuestro deber es restaurar este mundo en el amor y verdad
de Dios, muchos reciben a Cristo en sus vidas, pero no continúan más allá. Nosotros
debemos cumplir con su orden, esto es la gran comisión, de llevar la salvación hasta los
confines de la tierra. Todo debe volver al punto principal, tener una relación con Dios y así
se restauraría todo.
Isaías 11:6 “Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará;
el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará.”
Aquí vemos animales que no podrían estar juntos, porque el uno se come al otro y en el
mundo es así siempre, hay alguien que quiere ser superior a otro, es un mundo sin Dios el
mundo que odia a Dios, es un infierno, muchos hablan de lo hermoso que es, pero en
realidad es un infierno.
Este mundo de amor es posible cuando resolvemos este problema
con Dios, a través de estos versículos Pablo nos dice que el origen del pecado está en
nosotros, por eso debemos ver al hombre original, nosotros originalmente fuimos creados
como hijos de Dios, recibiendo la guía y cuidados de Dios.
Las personas en Roma no vivían bien, se apartaban de Dios y esto mismo les trajo la
destrucción.
Existe la corrupción moral que nos lleva a la lujuria, que nos lleva a la
depravación sexual. Y cuando vemos la corrupción sexual y el pecado sigue empeorando,
surge la homosexualidad, es la destrucción de lo natural. Dios creo al hombre y la
mujer, pero esto lo destruyeron y se están revelando contra Dios y no desean vivir de la
manera que Dios lo estableció.
Los griegos definían el amor de diferente forma, fide amor entre
hermanos, agape amor de Dios y el eros el amor físico. Y si no tenemos amor agape
termina en eros y la depravación o corrupción sexual. Pablo está señalando esto para
estos tiempos también.
Esta vida que vivimos, examinemos bien la dirección y corazón que
tenemos, nuestro corazón debe estar brillando y soplando el viento del Espíritu Santo.
Si no dejamos entrar el oxígeno en un lugar después de mucho tiempo, en ese lugar se
echa a perder todo, si se abre para que entre el viento y se refresque, todo cambia. En la
biblia la luz es la palabra de Dios, en este mundo actual lo que les falta es la palabra de
Dios, les falta el Espíritu Santo.
7.-Romanos 1:18-32.
Nosotros queremos ser aquellos que expulsan la oscuridad, el poder del pecado, y ser
aquellos que vivimos llenos de la luz de Dios, llenos de la palabra de Dios.