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Texto monográfico apuntado al actuar de los medios

de comunicación y las autoridades frente a la


pandemia del COVID-19
Materia: Taller de integración

MONOGRAFÍA
Emanuel Oliva
INTRODUCCIÓN

Ya han pasado más de dos años de aquel 11 de enero del año 2020 en el cual la Organización
Mundial de la Salud declaró una inesperada pandemia en el mundo debido a la extrema
propagación del virus SARS-CoV-2 o mejor conocido como COVID-19. Esta enfermedad, que en
el momento de su origen, supo tener a casi toda la población mundial aterrorizada se basa
principalmente en atacar el sistema respiratorio causando desde un simple malestar, similar a
una gripe, hasta graves complicaciones que llevaron la muerte a millones de vidas.

Si bien la propagación del virus no terminó realmente debido a la eficacia de las vacunas o al
cambio de intereses de los medios de comunicación y los llamados “poderosos”, hoy, pasados
2 años del comienzo del caos, se puede analizar la pandemia desde diferentes puntos de vista
y desde un contexto actual.

En el mismo, está a la vista, tanto en los medios masivos como en el día a día, la indiferencia o
más bien la poca importancia que se le da a la enfermedad en comparación a tan solo unos
meses atrás. Hecho que lleva innegablemente a cuestionarse planteos como ¿La pandemia ha
dejado de estar entre los primeros puestos del foco de preocupaciones de la humanidad a
pesar de ser tan letal como supuestamente lo planteaban los medios? incógnitas como estas
son las que te invito a resolver juntos en la presente monografía que será abordada desde un
enfoque filosófico y social apoyándonos en diversas investigaciones bibliográficas.

En primer lugar, vamos a hondar en las líneas de “La invención de una pandemia” del filósofo
Italiano Giorgio Agamben comparando su obra con la de su colega francés Jean-Luc Nancy
“Excepción Viral” en donde ataca de forma puntual la teoría planteada por el primer autor
mencionado. Más adelante se confeccionará una argumentación personal que será apoyada
por la nota periodística que realizó Ariel Torres para el diario La Nación “¿Terminó la
pandemia?” y por la obra del escritor (y también filósofo) Franco “Bifo” Berardi titulada como
“RESET”.

DESARROLLO

La pandemia ha dejado algo positivo, si se quiere, dentro del océano de desgracias que la
misma conllevó y es la cantidad de nuevos materiales literarios que autores de todo el planeta
han confeccionado. Lógicamente se ha abordado el tema desde muchísimas perspectivas y con
diferentes opiniones, Giorgio Agamben, por ejemplo, es un filósofo Italiano de renombre
internacional que se ha referido a la causa en su obra “La invención de una pandemia” (27 de
febrero de 2020) en la que tiene una mirada sumamente crítica con los medios de
comunicación y las medidas del estado “ítalo”. Según el, en un contexto en donde cerca de un
90% de los infectados transitan la enfermedad de manera tranquila y con síntomas similares a
una gripe, la presencia mediática que se le daba al tema y las políticas de estado en ese
momento, eran altamente exageradas. Hoy en día, a pesar de que el virus siga circulando, la
masiva cobertura a la problemática que menciona Agamben, no se ve.

Pero siempre existen dos caras de la moneda, dos lados de la brecha, el “Yin” y el “Yang”, y la
pandemia no hizo caso omiso a esta regla no establecida pero comprobada de la vida. Jean-Luc
Nancy fue un reconocido filósofo francés que falleció en el año 2021 pero no sin antes emitir
su pensamiento sobre el actuar del estado frente a la pandemia del COVID-19. En su texto
“Excepción viral”, como si de una tiradera musical se tratara, el filósofo francés plantea una
especie de “respuesta” a “Invención de una pandemia” de su colega Giorgio Agamben en
donde lo cita directamente para plasmar su pensamiento.
A diferencia del primer autor Jean-Luc Nancy tiene una visión más científica de la enfermedad
y, quizás, no filosofa tanto como si lo hizo Agamben, él se posiciona en un pensamiento en
donde ,apoyándose en estadísticas, demuestra la alta gravedad del COVID-19 sin dar lugar a
pensamientos de reproche o cuestionamientos frente al actuar del estado, los medios de
comunicación y la repercusión o indiferencia para con el tema, el tan solo los cataloga como
unos tristes emisores de la realidad que se vive.

Ambos filósofos, ambos nacidos en años similares, y en un mismo contexto situacional, en este
caso difieren totalmente en su pensamiento relacionado con el tema en cuestión, mientras
que uno intenta ver y analizar un poco mas allá de la realidad que muestran los medios de
comunicación y lo que nos bajan como sociedad las autoridades, otro se apoya en las
estadísticas reales y comprobadas que hay sobre una enfermedad, que en ese momento, era
menos conocida que al día de hoy. Curiosamente, esta diferencia en los filósofos se vio y se ve
reflejada en muchas acciones y opiniones divididas de los miembros de la sociedad, un claro
ejemplo, se ve reflejado en los “Anti-Vacuna”, personas que no creen en la existencia de un
virus que azote a la sociedad de la manera que lo hizo y, por otro lado, las personas que
extreman los cuidados a pesar de estar vacunados para resguardarse lo mas posible de esta
enfermedad.

ARGUMENTACIÓN

¿Qué más se puede decir de la pandemia que no se haya dicho? Pensamientos


extremadamente contrarios arrasaron con fuerza el campo de la “opinología”¹ tanto de
autores como de personas que viven en la sociedad sin ninguna labor periodística y/o literaria.

Prácticamente desde que se conocieron las primeras informaciones con respecto a la


enfermedad hubo dos posiciones diferentes en la que la sociedad se apoyaba, un lado A y un
lado B. Las principales discrepancias se vieron reflejadas entre las personas que con afán de
prevenir la circulación del coronavirus apoyaban el confinamiento y de alguna manera “Creían”
o, mejor dicho, confiaban en lo que decían los medios de comunicación y las autoridades. Por
otro lado, siempre existieron y existen los desconfiados, los curiosos, los que van más allá de la
realidad que nos quieren mostrar, nadie sabe si esta acción es irresponsable frente a una
pandemia que se llevó tantas vidas o es heroica por enfrentar el pensamiento hegemónico que
quieren imponer los poderosos. Sin irnos demasiado del enfoque, a comparación de hace muy
poco tiempo, la relevancia y la información que recibe la sociedad frente al coronavirus es
prácticamente nula, basta para comprobarlo con prender la televisión, la radio o simplemente
salir a la calle, entre otros ejemplos. Esta indiferencia para con la enfermedad hizo que
muchísimas personas se cuestionen si realmente seguían viviendo en un ambiente pandémico
en donde es esencial el cuidado para proteger sus vidas, una de ellas, es el periodista Ariel
Torres, que publicó en el diario La Nación un articulo titulado con una pregunta que mucha
gente se hace día a día al ver el panorama actual “¿Terminó la pandemia?”.

En este texto Torres citó un título de la prestigiosa revista científica “Scientific American” que
decía “Es la gente, no la ciencia la que define cuando una pandemia termina”. El concepto de
“Término de una pandemia” generalmente, se refiere al retorno de la vida que se vivía antes
de que la situación se propague mundialmente, en este caso, y para relacionarlo con lo antes
mencionado, en Argentina la mayoría de las actividades que paulatinamente quedaron
suspendidas por el COVID-19, hoy en día funcionan con total normalidad a pesar de la
información que llega tímidamente sobre nuevas mutaciones del virus y nuevas olas que
atravesar.
El periodista también mencionó que la ONU aclaró que la pandemia no había terminado aún,
pero siendo realistas, es casi una idea descartada totalmente el volver a un confinamiento
extremo sea cual sea el panorama con respecto al coronavirus, cierre de escuelas,
universidades, comercios, turismo, y por ende la recaída económica que eso conllevaría. Sin
embargo, una información que no se ha divulgado tanto es que los decesos por coronavirus en
Argentina ascendieron a un 145% y la llegada del invierno trajo muchos contagios nuevamente
y esta vez, con diferentes variantes como la “Epsilon” o la “Omicron”. Pero como se ha
mencionado anteriormente, el principal foco informativo no es ni por cerca la situación del
COVID-19 cuando en momentos en donde la enfermedad no había causado tantos estragos y
la circulación del virus era aún menor que la de hoy en día, si lo era.

Si lo era también cuando el filósofo y escritor Italiano Franco “Bifo” Berardi, publicó “RESET” el
día 27 de marzo de 2020, en pleno epicentro caótico e informativo de la pandemia. Era el
momento más leve de la misma, el comienzo, y como todo criterio de noticiabilidad lo indica,
el factor de que sea algo nuevo para la sociedad actual y que nos pueda afectar a todos hizo
que el foco principal este allí durante meses.

Como se mencionó en contadas ocasiones, el tiempo pasó y la principal preocupación de la


sociedad no pareciera ser el coronavirus, sin embargo, Berardi advirtió sobre el “regreso a la
normalidad” que hoy en día está en proceso. “nunca más debemos volver a la normalidad. La
normalidad es lo que ha vuelto al organismo planetario tan frágil para dar lugar a la pandemia.
Incluso antes de que la estallara la pandemia (…)”.

Bajo mi punto de vista, ya hemos retornado a la tan mencionada “normalidad” y, para disgusto
de Berardi, se están cometiendo los mismos errores o aciertos que antes se tomaban, es decir,
no veo una diferencia social o un cambio drástico de la sociedad postpandemia más allá de
algunas cuestiones que pudieron llegar a modificar la vida que uno solía llevar hasta el año
2020. Por otro lado, estoy de acuerdo con el titular que el periodista Argentino Ariel torres nos
hizo conocer, “Es la gente, no la ciencia la que define cuando una pandemia termina”, siento
que poco a poco, en Argentina, ya sea por necesidad o cansancio las personas empezaron a
hacer la vida que llevaban antes que la enfermedad abordara y se vio reflejado con el
desplazamiento del tema tanto en los medios masivos como en los discursos principales de las
autoridades, la problemática todavía existe, no hay discusión pero también hay otros temas
importantes a tratar.

CONCLUSIÓN

A lo largo de esta monografía se intentó llegar de una manera clara y comprensible a la


incógnita planteada, la indiferencia de los medios y las autoridades en la actualidad para con el
COVID-19.

A pesar de todos los estudios y observaciones que se realizaron desde el comienzo de la


pandemia hasta hoy, la realidad es que es un suceso tanto reciente como delicado, estamos
hablando de vidas de personas que fueron arrebatadas por esta enfermedad mas allá de la
difusión, indiferencia o lo que fuere. Actualmente vivimos en una sociedad en donde gracias a
la tecnología exigimos una inmediatez absoluta para cualquier cosa, instintivamente buscamos
soluciones, planteos, problemas. Un claro ejemplo fue la comparación de los textos de
Agamben y Nancy, a días nada más de haber arrancado la pandemia y el caos dos filósofos
distintos plantearon sus ideas totalmente opuestas.
También creo que es normal que esto haya ocurrido, me refiero a las discrepancias y opiniones
divididas que hasta el día de hoy sigue generando el tema, tan solo han pasado dos años y
quien sabe cuando se va a terminar. Quizás tendremos todo más claro y detallado en los
futuros libros de historia allá por el 2100, mientras tanto, nos toca ser partícipes de la misma.

1: Opinología: Término utilizado irónicamente para dar cuenta a opiniones generales de la


gente.

Bibliografía:

Agamben. G (2020) https://ficciondelarazon.org/2020/02/27/giorgio-agamben-la-invencion-


de-una-epidemia/

Berardi. F (2020) https://lobosuelto.com/reset-franco-bifo-berardi/

Nancy. J (2020) https://ficciondelarazon.org/2020/02/28/jean-luc-nancy-excepcion-viral/

Torres. A (2022) https://ficciondelarazon.org/2020/02/27/giorgio-agamben-la-invencion-de-


una-epidemia/

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