La leyenda cuenta que José Ignacio Chopitea estaba enamorado de la hija de un hacendado, pero el padre no aceptaba la relación debido a que Chopitea era pobre. Una noche, Chopitea fue al cerro de Santo Domingo y se encontró con el diablo, con quien hizo un trato para recibir oro a cambio de almas. Con el oro, Chopitea se hizo rico y el padre aceptó la relación. Sin embargo, el diablo comenzó a cobrar las almas que Chopitea le había pro
La leyenda cuenta que José Ignacio Chopitea estaba enamorado de la hija de un hacendado, pero el padre no aceptaba la relación debido a que Chopitea era pobre. Una noche, Chopitea fue al cerro de Santo Domingo y se encontró con el diablo, con quien hizo un trato para recibir oro a cambio de almas. Con el oro, Chopitea se hizo rico y el padre aceptó la relación. Sin embargo, el diablo comenzó a cobrar las almas que Chopitea le había pro
La leyenda cuenta que José Ignacio Chopitea estaba enamorado de la hija de un hacendado, pero el padre no aceptaba la relación debido a que Chopitea era pobre. Una noche, Chopitea fue al cerro de Santo Domingo y se encontró con el diablo, con quien hizo un trato para recibir oro a cambio de almas. Con el oro, Chopitea se hizo rico y el padre aceptó la relación. Sin embargo, el diablo comenzó a cobrar las almas que Chopitea le había pro
Dolores Luna Victoria y Manuel Antonio Chopitea Villalobos, eran los padres de José Ignacio Chopitea y Luna Victoria.
Cuenta la leyenda que en el distrito de Laredo en tiempos de Hacienda había un hacendado
con una hija muy linda y esta niña le gustó a José Ignacio Chopitea, pero el padre no le gustaba que su hija anduviera con personas que no están a su altura (nivel económico). Entonces al saber que su suegro no lo aceptaría por ser pobre el recordó haber escuchado que, en un cerro en el caserío de Santo domingo, se encontraba el diablo. Por tal motivo Chopitea en la noche se fue al cerro de Santo Domingo los pobladores dicen que puede ser el cerro oreja o el cerro que está aledaño a este, cuando él estuvo a las faldas del Cerro subió hasta lo más alto donde Posteriormente se encontró con el diablo este le comentó lo que estaba pasando con el hacendado, y entonces llegaron a un acuerdo donde José Ignacio Chopitea le entregaría almas a cambio de oro. Posteriormente José Ignacio fue a su suegro y se presentó cómo rico, tras ello su suegro lo aceptó y dio la mano de su hija, se casaron y tuvieron una Hacienda grande con trabajadores e hijos. Pero como todo lo bueno llega a su fin el diablo comenzó a cobrar las almas, primero José Ignacio les dio la de sus empleados, luego la de sus hijos, después la de su esposa y se quedó solo, pero el diablo le seguía dando el oro. Entonces José Ignacio al ya no tener más almas que dar le terminó dando la suya. Cuando murió José Ignacio Chopitea fue enterrado en el cementerio Miraflores de Trujillo se dice que el cajón había puesto ladrillos ya que no encontraron ningún cuerpo. La hacienda qué le perteneció ahora en la actualidad es un colegio llamado José Ignacio Chopitea donde hay inicial y primaria.