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y FRANCESCO CASADEl

CARA A CARA

CON EL DEMONIO

Una familia perseguida por el maligno

Con entrevistas a los exorcistas

Colección ANDREA GEMMA Y GABRIELE AMORTH

e Fenómenos y
REENCIA
S
CARA A CARA CON EL DEMONIO
tucia e Francesco Casadei, la, ed,
MILAGROS CUANDO LA CIENCIA SE RINDE
.';averio Gaera, la, ed,
¡NO ES VERDAD,., PERO LO CREOI
Gilles jeanguenín, la. ed,
NUE'3TROS "AMIGOS" LOS TESTIGOS
Sergio Pollina, la, ed
NUEVA ÉPOCA, ¡-';UEVA ERA
(;"sparc Barbiellini, la, ed,
I ,E SUCEDE A LOS MUERTOS?
Thérese Nadea", la, ed,
REENCARNACI()N, LA
Bo<!wntura Kloppenburg, 2a, eJ,
VEl'>:IDOS DEL MÁS ALLÁ
Giuseppe Pasquali, 1a, reimpr,
SAN PABLO
Presentación

Los autores de estas páginas, cónyuges y padres, son unos amigos


míos muy apreciados que el Señor ha puesto en mi camino sacerdo­
tal y a los cuales he ofrecido con afecto la ayuda de mi oración y de
mi ministerio.
Cuando me comunicaron el deseo de hacer pública su dolorosa
experiencia, con el fin de ayudar de manera caritativa a los demás
hermanos, animé y bendije su intención.
y aquÍ está el precioso resultado de esta iniciativa, por la cual
debo también agradecer al editor que aceptó hacerse cargo de la im­
presión.
No veo la necesidad de asegurarle al lector que cuanto viene des­
crito en estas páginas corresponde plenamente a una realidad de la
cual el suscrito fue y sigue siendo testigo hasta el momento.
Si este volumen contribuye, como lo espero, a clarificar ese mys­
terium iniquitatis sobre el cual la Sagrada Escritura nos ha puesto en
Título original
guardia, ya convencer, sobre todo a los ministros sagrados con el fin
Título traducido
A fU per fU con jI ¡fiar% Cara ti cara ron el demoniu de que estén a disposición de manera generosa para esa batalla de la
Autor Tnldu~ción que habla el apóstol Pablo (cf. Ef 6, 10-18), debemos bendecir a Dios
I./Iciu y Fram.:esco C({sa¡/ei I./lis Alh"r/o GIJII:úle:
"que nunca perturba la alegría de sus hijos, sino para prepararles una
Edizioni Sanl'anlo la. edición. 201
Piazza Soncino, 5 Queda hecho el depósito legal según
más cierta y más grande".
C0092 (,inisello B~lsal11o (Mil-italia Ley 44 de 1993 y Decreto 460 de 1995
Por consiguiente, me permito presentar una humilde petición a
ISBN
978·958-715-620-1
quienes hojeen estas páginas: eleven plegarias a Dios cada día por
SAN PABLO
Carrem 46 No. 22A.90 Distribución; Departamento de Ventas
todos los que estén atribulados en el cuerpo y en el espíritu, sobre
nd.: 3681099 - Fax. 2444383 Calle 17A No. 69-67 todo por aquellos que son objeto de vejaciones por parte del maligno
¡::-mail: editorial(a?sanpablo.com.co 4114011 -- Fax.- 4114000
\Vw~.sanpablo,c()m.co E-mail: direcciollcomerciai@lsanpablo.COITI.co y sus emisarios.
BO(;OT Á COLOMBIA

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Estamos convencidos, con Juan Pablo JI, de que "el mal no tendrá
la última palabra':
Con esta confiada esperanza, sobre la que el santo padre Bene­ Introducción
dicto XVI no se cansa de llamarnos la atención, pido a Dios que de la
lectura de este sincero y en algunos aspectos dramático testimonio,
todos obtengan nuevas fuerzas para oponerse al mal, a sus lisonjas,
a sus engaños y revivan en su pensamiento una invencible confianza
en el corazón de Dios que es Padre yen la intercesión de la santísima
Virgen, la eterna enemiga de Satanás y reina de las victorias.
¿Pero, por qué? ¿Por qué precisamente a nosotros? ¿Por qué a no­
+ANDREA GEMMA sotros que nunca nos hemos interesado en la magia, en sesiones es­
Obispo, lsernia, 7 de octubre de 2008 piritistas ni en cosas parecidas? ¿Por qué a nosotros que ni siquiera
nos imaginábamos que pudieran existir ciertas cosas ... ? ¿Por qué?
Éstas fueron las preguntas ansiosas y algo obsesivas que a menudo
nos hicimos durante los últimos años, desde cuando finalmente y de
manera completamente casual, descubrimos ser objeto de "un inte­
rés extraordinario" por parte del demonio.
y con frecuencia nos decíamos: "Si lo hubiéramos sabido antes, si
solamente lo hubiéramos imaginado ...".
Este libro quiere ser una contribución al mejor conocimiento de
una problemática que aflige a tantas personas, muchas de las cuales
son completamente ignorantes acerca de los orígenes y las motiva­
ciones de ciertas perturbaciones inexplicables en el plano físico, psi­
cológico y espiritual.
Ante todo es conveniente presentarnos: nuestros nombres son
Lucia y Francesco Casadei, y vivimos en una ciudad al norte de Ita­
lia. Escribimos este libro juntos porque juntos vivimos esta historia,
aunque mirada desde ángulos distintos, con experiencias diversas, a
menudo con emociones y sentimientos diferentes. Algunos hechos
se expondrán dos veces, es decir narrados por ambos de manera se­
parada para dejar espacio a los diferentes enfoques, otros en cam­
bio se escribirán a cuatro manos. Francesco es periodista, Lucia es
empresaria. Tenemos dos hijos, Eleonora y Alessio. Por evidentes
motivos de discreción estos nombres y apellidos son inventados, no

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queremos publicidad, nuestros hijos son menores de edad y desea­ El único consuelo verdadero es que descubrimos que aun las
mos defenderlos de la curiosa morbosidad de los demás; por otra pruebas más difíciles y los hechos más aberrantes que se relatarán
parte, somos personas conocidas con actividades laborales conso­ en este libro, a través de nuestra historia o también mediante los
lidadas y queremos proteger nuestra familia. Algunos nombres de testimonios directos de los sacerdotes, exorcistas, auxiliares de los
sacerdotes y de personas citadas también han sido cambiados, lo exorcistas y personas sometidas a exorcismos, suceden siempre por
mismo que el nombre de nuestra diócesis. Pero el empleo de seudó­ "permiso divino", lo que significa que si hemos vivido o estamos vi­
nimos representa la única "falsedad" contenida en este libro. Todos viendo una prueba determinada es porque ésta nos convenía. No se
los demás hechos, particularidades y circunstancias son la verdad trata de un castigo divino, como creen muchos, sino por el contrario,
fehaciente y fruto de vivencias experimentadas directamente, que de un acto de amor, vale decir de una oportunidad de crecimiento y
tuvieron como testigos a algunos de los sacerdotes y exorcistas ita­ purificación. Está en cada persona saber luchar fuertemente, saber
lianos más calificados. trabajar profundamente, para transformar los acontecimientos ne­
gativos de la vida en ocasiones positivas de evolución.
En este libro la palabra "demonid' se emplea con frecuencia, pero
no hay que entenderla en sentido antropomórfico, de hecho no se Nuestra experiencia nos ha enseñado que el amor divino nunca
necesita pensar en un espíritu individual con una forma extraña y permite que una persona sea sometida a un peso mayor del que
monstruosa, como a menudo se la representa, que viene a tentar y a pueda soportar, así que de manera paradójica, cuanto más grande
molestar a los hombres, sino más bien como un conjunto de terribles sea la carga que se presente mayores serán potencialmente nuestras
fuerzas malignas que actúan con determinación y con un fin preciso capacidades de trabajo para deshacerla.
tanto al exterior como en el interior de nosotros. Estas fuerzas traba­ Pero también hemos aprendido que, cuando el problema es
jan siempre, de manera incesante, en cada persona, y representan la grande se necesita tener la humildad de pedir ayuda a quien esté en
llamada "tentación ordinaria" que origina la muy conocida contra­ capacidad de prestarla, es decir, a los sacerdotes. Y esto no es para
posición entre el bien y el mal. Pero las fuerzas malignas pueden ser eludir nuestra responsabilidad descargando en los demás nuestro
también ampliadas y desencadenadas contra personas individuales peso, sino para luchar juntos con mayor eficacia. Extrañamente,
o núcleos familiares y convertidas en algo más pernicioso, mediante cuando se habla del demonio la ayuda de los sacerdotes no siempre
actos premeditados realizados por despreciables individuos, vivien­ llega de manera puntual, aunque debería ser precisamente un de­
tes o difuntos, que utilizan ritos de magia negra y que mantienen ber específico de ellos, más bien a veceS uno se siente desanimado
maleficios, maldiciones, etc. Cuando esto sucede, la vida de quien y hasta burlado por ellos o se vislumbra en algunos temor e incluso
es golpeado cambia de manera radical, a veces gradualmente, otras terror. Pero se necesita tener comprensión, compasión, valor y bus­
de repente, y toda referencia racional deja de existir, porque lo que car persistentemente en alguna otra parte sin perder la confianza
acontece sobrepasa el campo de la conciencia material y se aden­ después de los primeros rechazos. Al lado de las puertas cerradas
tra en los recodos desconocidos de lo inmaterial, de lo invisible, de encontramos también muchas abiertas, más aun, de par en par, y es
lo desconocido, donde nuestra mente vacila y peligra perderse fá­ precisamente gracias a la ayuda de sacerdotes como el padre Gra­
cilmente, dando lugar también a patologías psiquiátricas. Pero ya ciano, monseñor Andrea Gemma, el padre Gabriele Amorth, el pa­
llegará el momento en que expliquemos mejor estos conceptos, ma­ dre Luigi, el padre Stanislao, el padre Fernando, el padre Bruno, el
durados precisamente en el encuentro "cara a cara" con estas fuerzas padre Ciriaco, y de personas como sor Agostina, el hermano Paolo,
malignas devastadoras. el padre Humberto y otros más, como logramos hacer frente con
eficacia a la acción demoníaca.
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Por tanto, este lihro pretende ser un recorrido de esperanza, más
certeza, sobre la justicia y el amor divino, a fin de que les
claro a todos que, para decirlo como monseñor Gemma, "¡las Prólogo
fuerzas del mal no podrán prevalecer jamás!':
lectura y... buen trabajo!

Escrito por Francesco


Durante los largos meses que me llevaron a mí y a mi familia a la
dolorosa toma de conciencia de que algo muy extraño estaba suce- .
tanto en nuestras personas como en nuestras habitaciones,
se acumularon en nosotros numerosas emociones. Al principio, in­
capacidad de comprender (en muchos años no supimos reconocer el
origen "del mal"); luego, asombro (nunca hubiéramos pensado que
la acción demoníaca existiera de verdad); después, temor, increduli­
dad, rabia, exasperación; enseguida, determinación a la acción unida
a la aceptación ya la confianza. Desde ese momento también dimos
lugar al perdón. Afortunadamente, ¡nunca a la resignación! Hasta
hace sólo pocos meses estamos en capacidad de leer racionalmente
los numerosos y extraños acontecimientos que han sucedido en
nuestra vida como enfermedades repentinas e inexplicables, dicho
por los mismos médicos, enfermedades que aparecían y desapare­
cían y que nos llevaron aun a intervenciones quirúrgicas inútiles, a
prolongados tratamientos farmacológicos y a tremendos
tos tanto a nosotros como a nuestros hijos. Ruidos repentinos en la
casa, percepción de apariciones, oleadas de aire helado que recorrían
habitaciones aun con las puertas y ventanas cerradas. Y también
lposibilidad de finalizar negocios que supuestamente parecían ha­
cluido. Ataques físicos con fuertes dolores en las articula­
en el hígado, en el bazo, en los brazos, en las piernas, que
de manera inexplicable y que de modo igualmente inexpli­
cable desaparecían. Opresión súbita en la garganta o en los pulmo­

o
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Cuando el buen ladrón le dice: "Señor, acuérdate de mí cuando
estés en tu reino", Jesús no responde: ''Ajustemos primero las cuentas G\PiTliLO XVI
y veamos qué estuviste tramando'; sino que le dice: "Hoy estarás con­
migo en el paraíso": hay una mutua acogida totaL Y el ladrón antes De exorcizado a asistente del exorcista
no era bueno, era ladrón y basta. Pero en aquel momento recibe a
Dios, elige la bondad en vez del rechazo y los insultos.

¿De modo que para hacer una buena confesión no necesariamente


se necesita un buen sacerdote?

Una vez aceptada esta óptica, no es importante la bondad del sa­ Escrito por Francesco
cerdote, porque es Cristo quien actúa directamente en los sacramen­
Durante los exorcismos había quedado muy impresionado por
tos. Por tanto, se necesita sencillamente encontrar a un sacerdote
las personas laicas que ayudaban al padre Amorth, por lo que un
que preste este servicio, porque la relación es con la Iglesia y el Señor.
día, con ocasión de un viaje de trabajo a Roma, pasé a saludarlo a
Claro que si el sacerdote es amable, está a disposición, si trata la pequeña iglesia al terminar su labor matutina de exorcismos y le
de entender, si comprende los esfuerzos del penitente, puede ayu­ pregunté si de vez en cuando podría también yo ayudarle con los
dar mucho más a realizar un buen camino espiritual, aun si se tiene otros laicos: no lo dudó un solo instante y me dijo que las personas
presente que está de por medio el trabajo del diablo que quita todos que deseaban orar junto con él eran cada vez más escasas y que por
temores cuando se debe cometer el mal iY los restituye cuando se tanto ¡eran bienvenidas!
trata de confesarlo!
Así me di cuenta de que mediante ese servicio podría restituir
un poco del tiempo y de los esfuerzos anteriores dedicados a mí,
¿Pero es cierto que uno se puede confesar sencillamente para agra­
y al mismo tiempo verificar mis eventuales reacciones durante los
decerle a Dios lo que se tiene?
exorcismos a los demás. Aprovechando esta doble oportunidad, hoy
Es cierto, la confesión puede ser también de alabanza, es decir, día trato de programar mis viajes de trabajo a Roma dejando libres
agradecimiento a causa de todo lo que parecía imposible y que el para mí las mañanas de los martes o de los viernes, los dos días en
Señor volvió posible a través de la gracia obtenida mediante la co~­ los que normalmente se llevan a cabo los exorcismos más exigentes
fes ión frecuente. Obviamente, no se trata de agradecer las cosas ma~ en el lugar que conozco tan bien.
teriales, como el haber ganado la lotería o porque puedo tener. un Como ya lo dije, el padre Amorth está siempre rodeado de un
automóvil lujoso, sino por las conquistas espirituales que nos hacen grupo de asistentes, algunos de los cuales han estado con él por años;
conscientes de ser personas en realidad afortunadas y privilegiadas. su trabajo es absolutamente indispensable y complementario.
Entre sus colaboradores fijos están el padre Stanislao yal menos
tres o cuatro laicos que constituyen un grupo de oración y de "re­
ducción del exorcizado': Cada mañana comienza a las 8:50 a.m., con
la bendición del agua, de la sal, del aceite que le llevan un pequeño
grupo de personas que evidentemente tiene una gran necesidad de

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ellos; además, siempre hay tres o cuatro personas que aprovechan esa E! pequeño cuarto es en realidad cálido en el verano, en cambio,
ocasión para pedir una bendición rápida. La mañana de exorcismos en el invierno es algo frío.
empieza a las 9:00 a.m., con un intervalo de media hora entre una Otra de las paredes del local está ocupada por una vieja biblio­
cita y la otra. Cada mañana hay cinco citas, en las que intervienen en teca donde están colocados más bien en desorden, diversos textos
la mayor parte de los casos personas conocidas que llegan de Roma religiosos, desde el Misal Romano hasta grandes obras teológicas
y del Lazio, aunque no son pocos los que vienen de las regiones limÍ­ y biografías de algunos santos. Durante los exorcismos se acercan
trofes, del norte de Italia y del exterior. En algunas ocasiones, la cita al interior del saloncito una serie de sillas disparejas de la antigua
para nuevos. casos es defendida por altos prelados que denuncian la antecámara, que también hace las veces de sala de espera para las
imposibilidad de encontrar un buen exorcista en sus diócesis. personas que se han de exorcizar y que se van acomodando durante
El aspecto del pequeño salón donde se llevan a cabo los exor­ la mañana según el horario de su cita. Las sillas no sólo sirven para
cismos es extraño, casi surrealista; se accede a él por una pequeña el padre Amorth y los acompañantes de las personas que vienen a
puerta de madera cubierta con vidrios opacos, y apenas se entra la ser exorcizadas, y que de ordinario son los cónyuges, sino también
mirada es atraída por una vieja poltrona de terciopelo marrón gas­ para el padre Stanislao, Cristina, Rosa y Teresa, que son los asistentes
tado que se encuentra en la pared opuesta a la entrada y que sirve fijos, a los que se une Francesco, y de vez en cuando, otros laicos y
para acoger a las personas que se deben exorcizar y que presenten las hasta frailes, seminaristas y sacerdotes de todas las partes del mundo
reacciones más leves. que a menudo se presentan para aprender o ver lo que sucede, y
E! techo del pequeño cuarto es alto, las paredes pintadas de un mientras tanto ayudan como puedan con su oración.
blanco algo sucio, y la parte superior de una de las dos paredes más Al ser el padre Amorth tan conocido en todo el mundo, de vez
largas está dominada por un gran ventanal con vidrios gruesos y en cuando llegan también otros exorcistas de diferentes lugares para
opacos que se elevan desde e! piso en unos dos metros y medio y saludarlo o para unirse al grupo.
llegan casi hasta-e! techo. Los dos ventanales iluminan el salón con Lo que me sigue impresionando es que la mayoría de las perso­
una luz algo diáfana y en los días soleados el calor de los rayos que nas que acuden a los exorcismos están tranquilas apenas entran al
logran filtrar, entrada la mañana, calientan el ambiente ya menudo pequeño cuarto, exactamente como lo estaba yo, antes bien, algu­
también los corazones. nas hasta bromean o abrazan a los presentes que conocen, ya que
Debajo de los ventanales yace una vieja camilla de visitas médi­ han sido tratadas por años. Casi todas son personas normales, si no
cas forrada con un paño verde descolorido, cubierto con una gruesa fuera por las facciones tensas y los ojos sufrientes que invariable­
manta suplementaria al fondo, donde se apoyan los pies de los exor­ mente muestran el dolor del alma. Son relativamente pocos los casos
cizados obligados a utilizarlo, que son la gran mayoría. Debajo de la de personas que tengan que ser llevadas dentro a la fuerza por los
camilla una caja de madera contiene las correas y cuerdas que sirven parientes porque quieran escaparse.
para amarrar a las personas más fuertes y robustas, generalmente El trabajo de los laicos durante los exorcismos es doble. E! pri­
hombres, para evitar que se hagan algún daño durante la oración. mero es muy práctico y consiste en mantener en su puesto a los
De lo que sucedía durante mis exorcismos, recuerdo poco, pero exorcizados que casi siempre forcejean salvajemente, dan puntapiés,
ahora puedo dar testimonio de que algunas personas no podrían ser rasguñan, tratan de morder y apartar la estola del sacerdote, escu­
mantenidas quietas ni siquiera por seis o siete voluntarios si no fueran pen, a veces vomitan, mientras que el segundo deber es el de ofrecer
amarradas, así que es una precaución sumamente útil, por su bien. un apoyo de oración personal en el momento en el que los sacer­
I

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~
dotes recitan las complejas fórmulas del antiguo ritual latino. Pero El segundo, en cambio, se refiere a otra mujer de unos treinta años,
existen también lapsos en los que todos juntos oran al unísono. Con pudiente y con títulos universitarios, quien recibió un maleficio de
el tiempo, uno se acostumbra a los gritos, a los gruñidos, a los escu­ la madre. No lograba dejar de comer y llegaba a gastar hasta unos
pitajos ya las blasfemias. 500.000 pesos al día para consumir lo que fuera. Naturalmente, nun­
Sin embargo, sólo ahora al vivir de cerca los exorcismos de los ca tenía dinero y se la veía con frecuencia rebuscando en las canecas
demás, me doy cuenta de la completa humillación en la que caen las de la basura con tal de comer algo. Además, siempre andaba por la
víctimas de la posesión demoníaca. mitad de la calle entre el tráfico caótico de Roma y de milagro nunca
fue atropellada. Lo increíble es, que a pesar de todo lo que comía, era
¿Pero quiénes son los asistentes del padre Amorth? Son todas
delgada y con una fuerza increíble que se manifestaba durante los
las personas que han sido probadas en la vida, mujeres y hombres
exorcismos, lo cual en realidad causaba mucho problema para man­
que a menudo comenzaron por la necesidad de recibir ayuda, pero
tenerla quieta. Después de muchos años de exorcismos se restableció
que luego han terminado por ofrecer una parte de su tiempo a los
completamente y ahora está felizmente casada y con hijos.
demás. Algunos son asistentes fijos, otros se alternan cuando las
obligaciones laborales o familiares lo permiten.
Rosa se ha encontrado con miles de víctimas de maleficios por
Vale para todos la historia de Rosa, la decana del grupo del padre obra de parientes o conocidos, pero también bastantes personas que
Amorth, su primera y valiosa asistente. Rosa es una mujer esquiva han frecuentado voluntariamente CÍrculos de hechicería de los que
que te mira con ojos tiernos y dulces apenas empañados por el su­ luego ya no lograban salir o que han puesto su confianza en magos
frimiento, es un pozo de experiencias vividas que sin embargo no o hechiceras tratando de resolver sus problemas yendo así de mal
le gusta contar, las ha visto y sentido de todos los colores, ha cola­ en peor. Además, ha conocido a cierto número de personas que han
borado activamente en miles de exorcismos, ha sido la secretaria practicado ritos satánicos y magia negra, utilizando rituales horren­
de la Asociación Internacional de Exorcistas fundada por el padre dos que tenían que ver con sacrificios y profanación de tumbas.
Amorth, y se ha encontrado en más de veinte años de actividad con
Rosa experimentó en su propio cuerpo y en el de sus familiares la
las patrañas diabólicas y ha visto con sus propios ojos todas las po­
perfidia diabólica, el dolor y el sufrimiento, pero también la fuerza
sibles manifestaciones y reacciones.
impresionante y salvífica de los milagros. En la década de los años
Dos de los episodios que más me han impresionado, cuenta Rosa, ochenta descubrió por casualidad, que su familia había sido objeto
sucedieron entre 1987 y 1988, cuando acababa de comenzar. de un poderoso hechizo por parte de un pariente cercano, lo que
causó con los años enormes dificultades tanto en el ámbito de las
El primero se refiere a una mujer ya bastante anciana víctima de un relaciones conyugales como en el plano de la salud de los hijos y del
poderoso maletlcio que, después de años de exorcismos, se liberó un esposo. Un día, al extremo de las fuerzas y con el hijo mayor en el
día vomitando una cantidad increíble de cosas raras: había muñe­ hospital por una extraña y gravísima enfermedad intestinal, decidió
cos, pilas eléctricas, mechones de cabellos amarrados, largos clavos ir a donde el padre Cándido Amantini, un sacerdote pasionista y
y pedazos de vidrios cortantes, todo expulsado sin causarle ninguna célebre exorcista que por muchos años actuó en Roma en la Scala
herida porque estas cosas se materializaban poco antes de salir. Al Santa alIado de la basílica de San Juan de Letrán y de quien luego el
final pesamos más de dos kilos de material, pero desde entonces la padre Amorth aprendió el "oficio':
mujer comenzó a mejorar. Mi hijo seguía yendo al hospital y saliendo de él, cuenta Rosa en
voz muy baja, porque los médicos le habían diagnosticado una seria

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enfermedad en el colon que necesitaba una intervención quirúrgica. dijo: "Ahora que lo pienso bien, conocí a un asistente de anestesia
Después de la primera intervención los doctores se quedaron per­ con ese nombre apenas vine a trabajar aquí, ¡pero hace por lo menos
plejos porque lo que esperaban encontrar de mi hijo no lo hallaron y veinte años que murió!".
todo estaba aparentemente bien. Pero él seguía enfermo, estaba des­ Las piernas me comenzaron a temblar porque sólo en ese mo­
esperado de manera preocupante y entonces fue necesaria una nueva mento caí en la cuenta de que a quien había encontrado no podía
hospitalización con la correspondiente serie de exámenes clínicos y ser sino un ángel enviado para ayudarme. En efecto, mi hijo se curó
diagnósticos que hacían prever lo peor, es decir, un tumor en el in­ completamente y ya no volví a ver a esa persona.
testino. Tampoco la segunda intervención quirúrgica puso nada en
Pero las tribulaciones apenas acababan de empezar, porque poco
evidencia y los médicos ya no sabían qué hacer. Mientras tanto, mi
después a mi esposo se le diagnosticó un tumor en la garganta. Es­
hijo seguía peor.
tábamos ya en vísperas de la operación cuando lo convencí de que
Decidí entonces ir a pedirle ayuda al padre Cándido, quien, según fuéramos a donde el padre Cándido: lo bendijo y... el tumor desapa­
se me había contado, poseía dotes fuera de lo común y se decía que reció del todo con gran desconcierto de los médicos que no lograban
si él oraba sobre un caso desesperado éste se resolvía. Me puse en entender lo que había pasado.
fila con mi hijo junto con otras decenas de personas que espéraban Desde entonces comencé a frecuentar al padre Cándido el cual
encontrarlo y, cuando finalmente logré llegar a su presencia, sólo me me dijo un día con sencillez y también con autoridad: "Me gusta­
dejó decir unas pocas palabras, bendijo a mi hijo y me dijo: "¡Már­ ría que en adelante ayudaras al padre Amorth en su trabajo porque
chate y verás que ya no sucederá más!". siento que ésta es una obligación tuya':
Esta frase sibilina seguía zumbando en mi cabeza. Comencé a ir Era 1987 y desde entonces nunca he dejado al padre Amorth.
todas las mañanas a misa a la Scala Santa, donde observé a un mu­
chacho muy parecido a mi hijo. Un día lo vi salir de un encuentro con Rosa ha pagado y aun sigue pagando en sí misma y a través de sus
el padre Cándido, luego, al final de la misa se me acercó, se presentó familiares, un precio costoso por esta elección suya que, si por una
y me dijo ser un asistente de anestesia del mismo hospital en el que parte ha salvado su vida y la de sus seres queridos, por otra ha pro­
se había estado mi hijo. Me pidió informaciones médicas precisas y vocado una continua sucesión de impedimentos, enfermedades, ac­
detalladas y me dijo que no me preocupara, porque él seguiría a mi cidentes ... Ella le ofrece a Dios todos estos sufrimientos, aun cuando
hijo. Me acompaí'ló un poco mientras iba a tomar el automóvil para ahora se siente en verdad cansada y agotada.
regresar a casa, pero en cierto momento me volteé y ya no estaba. Lucia y yo hemos encontrado a muchas personas que ayudan a los
Comencé a pensar quién podría ser esta persona que en realidad exorcistas también en otras ocasiones y ciudades, hay quienes cum­
nunca había visto y que en cambio debería conocer, habiendo ya te­ plen un servicio eficaz al poner orden durante las muy concurridas
nido contacto con todos los médicos y con todo el personal al ver la misas de curación, en algunos casos celebradas en grandes espacios y
gran recuperación de mi hijo. bajo enormes estructuras para contener a los centenares de personas
que participan allí, hay quien actúa como delegado del exorcista y va
Fui entonces a informarme directamente al hospital y el nombre al domicilio a orar con las familias de los enfermos espirituales, hay
que se me había dado efectivamente no existía. Entonces, pensando quienes toman la información y hacen una primera selección acerca
que lo había entendido mal, describí detalladamente a la persona de las necesidades reales de quienes solicitan ayuda, hay quien acon­
con quien me había encontrado, y tampoco en este caso daban in­ seja al sacerdote porque está dotado de carismas especiales de dis­
formación. Sin embargo, en cierto momento un médico anciano me

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cernimiento, y hay quienes en cambio trabajan en primera línea en
los grupos de oración y contención alIado del exorcista.
C:\I'IT\:Ul XVII
Es gracias, precisamente, a la labor silenciosa y efectiva de tantas
personas como Rosa, Cristina, Teresa, Patricia, Paolo, Divo, Sergio, Algunas experiencias de exorcismo
Pino y muchas más, que los pocos exorcistas activos pueden actuar
con mayor seguridad y eficacia. Su actividad representa un extraor­
dinario ejemplo de abnegación, fe y espíritu de servicio, por encima
y más allá de todo.
¡Gracias a todos ellos!
Escrito por Francesco
He orado y ayudado durante bastantes decenas de exore ismos.
Cada experiencia es absolutamente única e impresionante, as i algu­
nos esquemas y reacciones se repitan. Veamos una breve descrLpción,
utilizando deliberadamente el lenguaje aséptico o frío del crc::mista,
de unos veinte exorcismos en los que he participado y que trle han
impresionado de manera especial, señalando que algunas de las per­
sonas mencionadas, cuyos nombres han sido omitidos a propósito,
las he encontrado varias veces con el pasar del tiempo.
Maldiciones de padre a hijo. Un hombre adulto bastante corpu­
lento, de unos 55 a 60 años; fue tratado en la poltrona. Ha s-.Ifrido
una maldición intergeneracional hecha contra la familia p:aterna
(inicialmente contra el padre y luego pasada a él). Estaban taI11bién
la esposa y el hijo, un adolescente. Se verificaron reacciones muy
enérgicas bajo el exorcismo directo como durante el exorcismo efec­
tuado sucesivamente sobre los familiares, los cuales en cambio no
mostraron ninguna reacción. Dolores sumamente fuertes en el es­
tómago y una tos muy persistente y violenta se alternaban con los
gritos y risotadas que hadan que la piel se pusiera de gallina.
Un rito mágico en 1ünez. Mujer adulta de entre 35 a 40 años
acompañada por su anciana madre; fue tratada en la camilla. El pa­
dre es tunecino, pero ella nunca ha vivido en ese país. Durante su
juventud pasó unas cortas vacaciones en Túnez participó en u n rito
mágico y desde entonces comenzó a estar mal y a ser molestada.
Durante el exorcismo ha pronunciado muchas veces largas _rases

158 159

aparentemente en árabe o en alguna lengua semejante, aunque no Posesiones y pesadillas terribles. Muchacha romana, alta y mo­
conoce ese idioma. Siendo de constitución delgada, desarrollaba una rena, de unos 27 años, que llegó sin acompañante; fue tratada en la
fuerza enorme tanto que se necesitaban siete personas para mante­ camilla. Desde pequeña presenta pesadillas continuas con numero­
nerla quieta. Durante el interrogatorio sobre el demonio que la po­ sas serpientes y con presencias extrañas que la rodean, además se le
see permanece encerrada en un mutismo absoluto. El padre Amorth dificulta concentrarse, recordar cosas y tiene frecuentes problemas
dice al final que se trata de una posesión muy profunda y arraigada. físicos. Desde el inicio de los primeros momentos del exorcismo ha
comenzado a silbar y a contorsionarse rítmicamente como si ella
Consagrada a Satanás en el seno materno. Una muchacha de unos
misma fuera una serpiente. Lleva bastantes años bajo exorcismos y
35 años, proveniente de la periferia romana; ha sido tratada en la
en uno de los anteriores surgió, durante el interrogatorio hecho al
camilla. Estaba acompañada por la hermana más pequeña y parece
demonio que la posee, que fue consagrada a Satanás por tres mujeres
que fue consagrada a Satanás cuando se encontraba todavía en el
cuando estaba todavía en el seno materno; periódicamente se le apa­
seno materno por un pariente cercano, bien identificado, que practi­
recen en el sueño estas mujeres, sin rostro. Ha llorado sin llanto, con
caba misas negras y ritos semejantes. Estaba muy agotada psíquica y
los ojos volteados y en blanco durante todo el exorcismo; además,
físicamente, pero la hermana confirmó que, desde el punto de vista
casi nunca ha dejado de gritar y agitarse. Cuando el padre Amorth
médico, todo era normal. Durante el exorcismo estaba visiblemente
le pregunta al demonio su nombre, después de algún titubeo surge
poseída, porque tenía los ojos completamente al revés, además ha
como un silbido y con voz profunda y cavernosa pronuncia elnom­
pronunciado frases en un idioma incomprensible y ha tenido reac­
bre de Satanás; se le pregunta si ha sido ya fijada por Dios la fecha en
ciones muy violentas. Al terminar el exorcismo
la que deba marcharse y responde afirmativamente, pero cuando se
por volver en sÍ. Supe que está bajo exorcismo hace unos diez años.
le interroga sobre la fecha responde que no la sabe. El padre Amorth
La fuerza de la oración durante el exorcismo. Muchacha de Perusa declara que seguramente existe un problema de naturaleza espiri­
de casi 30 años acompañada por su sacerdote; ha sido tratada en la tuaL pero sospecha también un problema psiquiátrico y aconseja
camilla. Es una joven que de ordinario ora mucho, y ha tenido en un médico experto y muy capacitado en sus conocimientos para un
su mano un denario durante todo el exorcismo tratando, aun en ese análisis más objetivo.
caso, de repetir las invocaciones del padre Amorth, pero luego ha
Un caso en vía resolución. Mujer de unos 35 años de la pro­
perdido el control y ha comenzado a gritar y a reaccionar violenta­
vincia de Frosinone, acompañada por la madre; fue tratada en la
mente, tanto que era todo un problema mantenerla quieta. Estaba
poltrona. Años antes sufrió un maleficio de un familiar aun sin iden­
como desdoblada, de vez en cuando volvía en sí y trataba de orar
tificar, pero la noticia se la reveló un parapsicólogo serio y experto.
para luego volver a caer en los gritos y las reacciones violentas. Se
Permanece aparentemente serena y ora con nosotros en la primera
le han aconsejado repetidas bendiciones entre un exorcismo y otro
parte del exorcismo, con los ojos abiertos y atentos, luego, de impro­
para debilitar la posesión. Al cabo de unos meses la he vuelto a ver y
viso, comienza a reír de manera terrorífica y pierde completamente
llegar sola porque había tenido un altercado con su sacerdote acerca
el control, voltea los ojos y empieza a gritar fuertemente frases in­
de la admisión de algunas personas en su grupo de oración durante
coherentes, blasfema y al final vomita. De vez en cuando, durante la
las bendiciones; según ella, algunas de estas personas no eran aptas
media hora del exorcismo, recupera la lucidez y trata de luchar para
y su presencia la fastidiaba. Se le aconsejó reconciliarse con el sacer­
mantenerse vigilante y atenta, pero de nuevo pierde el control. El
dote y exponerle esta vez de manera tranquila sus dudas, teniendo
caso sigue adelante desde hace unos tres años y está en vía de reso­
presente que sólo pertenecía al sacerdote la elección definitiva de sus
porque al principio la posesión estaba mucho más arraigada;
colaboradores.

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",

e! padre Amorth aconseja proseguir con la oración personal, con que sufren debido a un maleficio efectuado por el padre que cuando
las frecuentes confesiones y con las bendiciones repetidas, pero no murió se volvió contra ellas. Entra la de mayor edad y se recuesta en
volver a donde él sino en caso de recaídas. la camilla; desde el inicio del exorcismo ha comenzado a hablar en
un idioma incomprensible y a reaccionar violentamente gritando y
docente poseído por Asmodeo. Hombre de unos 40 ó 45 años,
agitándose. Ha gritado de manera ininterrumpida durante todo el
con fuerte acento sureño, bajo exorcismo aproximadamente más de
exorcismo y al final no lograba volver en sÍ. Fue necesario aplicarle
un año, declara que desde hace algún tiempo afortunadamente logra
repetidamente bolsas de agua bendita sobre la frente antes de que
recordar y recitar en latín sus oraciones favoritas; además, en e! tra­
retomara la conciencia. Mientras tanto, la hermana menor que es­
bajo recuerda mejor las obligaciones que ha de realizar cuando hace
peraba fuera había comenzado a sentirse mal y se le hizo entrar para
algún tiempo le era imposible. Es profesor de secundaria. Es tratado
una bendición rápida a la cual reaccionó de modo muy violento.
en la poltrona y antes de las bendiciones recita tranquilamente al­
Luego se le hizo recostar en la camilla donde comenzó a forcejear, a
gunas oraciones comunes. Durante la primera parte de! exorcismo
silbar y a contorsionarse como una serpiente, a escupir y a hablar la
no reacciona y está en guardia, aunque parece que cada vez más le
misma lengua extraña de la hermana. Aunque no había sido previsto
cuesta tener los ojos abiertos. En cierto momento cierra los ojos y
un exorcismo por no haber hecho una cita con anterioridad, el padre
comienza la respiración forzada y alterada común a muchas perso­
Amorth se dedicó a ella por unos veinte minutos haciendo esperar a
nas en problemas. El padre Amorth trata de levantarle los párpados
las demás personas. Tampoco ella lograba volver en sÍ.
y se da cuenta de que los ojos están blancos y volteados. El exorcismo
prosigue y cuando está casi en la mitad, el hombre empieza a gritar, Exorcismo familiar efectuado en pareja. Familia completa prove­
a decir no, que 10 dejen, etc. Durante e! interrogatorio al demonio niente de Umbría, la madre es corpulenta y tranquila, el padre enér­
que lo posee, reacciona violentamente cuando se le pregunta si es gico y preocupado, con un comportamiento atento, la primera hija
Asmodeo. Al final sale violentamente del trance y de inmediato está tiene 19 ó 20 años, tranquila y sosegada, mientras que la segunda,
atento y listo a responder en el mismo tono. de unos 15 años, desde los tres años se volvió muda; ahora se ve
esquelética, con los dedos largos, desproporcionados y muy del­
Maldición de un pariente cercano. Mujer corpulenta de Fiuggi, de
gados, se la observa como agazapada, aparentemente ausente. Los
unos 40 años; ha sido tratada en la camilla. Llegó acompañada por
médicos no logran saber de qué se trata porque los principales pa­
tres personas, de las cuales dos amigos del movimiento de Renova­
rámetros clínicos están dentro de lo normal. Cuando los familiares
ción del Espíritu, que han ayudado a mantenerla quieta. Reacciona
entran al pequeño cuarto de los exorcismos, la muchacha se queda
de inmediato al comenzar el exorcismo, grita, no logra dejar de toser
afuera, inmóvil, sentada en una silla y replegada en sí misma. En
violentamente y tiene tremendos conatos de vómito, de hecho, mu­
cierto momento el papá la toca en determinado punto del cuerpo
chas veces arroja una baba pero no logra liberarse. Maldice y se agita
y ella se levanta como un resorte y corre hacia la poltrona de los
de seguido, los ojos están casi siempre cerrados y, cuando el padre
exorcismos donde casi se lanza permaneciendo tranquila, en espera.
Amorth trata de forzar los párpados para mirarlos y valorarlos, es­
El padre se pone dos guantes de trabajo hechos de piel (porque a
tán volteados. De vez en cuando abre los ojos espontáneamente y se
veces muerde y rasguña) para sujetarla por las muñecas y al mismo
puede observar una mirada transparente con la pupila fija, es decir,
tiempo bloquearle las piernecitas esqueléticas. Una escena en ver­
que no se dilata ni contrae a las variaciones de la luz. Con base en
dad desgarradora que aun en este momento en el que la narro, me
las informaciones obtenidas por los acompañantes, llegó a saber que
hace llorar. Durante el exorcismo de la niña efectuado por e! padre
ha sufrido una potente maldición por parte de un pariente cercano.
Amorth, otro sacerdote ha exorcizado a la madre que se ha sentado
Maleficío del padre a las hijas. Dos hermanas, la mayor de unos alIado. Apenas comienza el exorcismo de las dos, la niña comienza a
30 años, y la menor de 25, acompañadas de la madre que cuenta 10 forcejear, pero luego se bloquea de repente y no se le oye un solo so­
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nido durante todo el tiempo, un silencio petrificante e irreal que pa­ le trata en la camilla. Es un actor profesional que no logra encon­
recería más ensordecedor que cualquier grito; en cambio, la madre trar trabajo porque, según su relato, es objeto de maleficios y ritos
reacciona violentamente, grita y se agita aunque con poca fuerza yes satánicos por parte de personas de su ambiente laboral, quienes pro­
mantenida firme por un par de personas. Mientras tanto, la hermana bablemente le han hecho tragar alguna cosa con maleficio. Afirma,
mayor, que está presente y sentada aparte no da ninguna señal apa­ además, haber vivido en una antigua casa en Florencia junto con
rente de molestia. Terminada la oración, a la hermana pequeña se le otros actores y luego se descubrió que la habitación se había alqui­
hace acomodar en la camilla mientras en su puesto se sienta la her­ lado anteriormente a una secta satánica para efectuar ritos donde se
mana mayor, que aun en este caso no da señal alguna durante todo el sospecha hayan sido sacrificadas personas. El fraile franciscano pre­
exorcismo, cuando la madre, por el contrario, sigue reaccionado con sente aquel día me contó que según informaciones recibidas existe
fuerza en su puesto. Se le hace al padre también un breve exorcismo, una especie de triunvirato mágico-satánico que regula el ambiente
y afortunadamente no muestra ninguna reacción, mientras que la italiano del espectáculo, con tres regentes que se encuentran respec­
madre sigue reaccionando con violencia. El caso ya lleva unos años, tivamente en las ciudades de Turín, Bolonia y Bari; un número im­
y por fin se ha descubierto que se trata de un maleficio realizado por portante de los actores y actrices estarían sometidos, la mayor parte
la hermana del marido contra la mujer y las hijas. Antes de partir, de las veces de modo inconsciente, a su poder oculto. El hombre es
el padre lleva el automóvil frente a la iglesia, y el baúl está lleno de atado fuertemente por las piernas a la camilla. Inmediatamente des­
agua, velas, sal y aceite que son bendecidos y exorcizados para luego pués del inicio del exorcismo voltea los ojos hacia abajo y empieza
ser empleados como ayuda sacramental en la vida diaria. La mujer a reaccionar con violencia, cambia por completo de voz y blasfema
logra orar y recita a menudo el Rosario, pero no puede hacerlo en de seguido en especial contra Nuestra Señora, aunque luego afirma
compañía del esposo, porque reacciona insultándolo cuando éste la que para él, ella es demasiado deslumbrante. Sigue siendo violento
invita. Es una situación de veras triste y la compasión ante tantas durante casi todo el exorcismo, tose, escupe y a veces vomita una
tribulaciones hace que sienta un nudo en la garganta mientras los baba que rápidamente se le limpia con una servilleta. Durante el in­
despido antes de su partida. terrogatorio declara ser Asmodeo, pero que no está solo. Los ojos
Un caso leve pero es mejor continuar. Muchacha en los 25 ó 26 se le voltean constantemente. Al terminar el exorcismo vuelve en sí
años, romana, acompañada de los padres; fue tratada en la poltrona. con prontitud y le pide al padre Amorth que interceda ante otro pre­
Primero llegaron los papás y luego, con algunos minutos de retardo, lado que antes había intervenido con el fin de ayudarle a hacer una
la joven que no vive con ellos. Durante todo el exorcismo perma­ prueba para un papel en un programa de televisión; la alternativa a
nece aparentemente tranquila y de vez en cuando logra pronunciar la recomendación del prelado para tratar de obtener el papel sería,
parte de las plegarias. Luego, hacia el final, voltea los ojos y empieza según él, una relación homosexual con el productor de la presenta­
a gritar pero sin forcejear de modo especial. Durante el interrogato­ ción. En un último encuentro el actor tuvo reacciones en realidad
rio al demonio, se queda completamente muda, con la respiI:ación más suaves y parecía estar mejor, pero la tercera vez que lo vi estaba
presurosa y no natural, las manos heladas. Se efectúa el exorcismo de nuevo muy decaído y poseído como la primera vez.
también a la madre sin que se presenten efectos particulares y se Un rito satánico. Muchacho de Campania, de unos 25 años, acom­
concluye con una rápida bendición al padre. El padre Amorth dice pañado por dos voluntarios del grupo local Renovación del Espíritu
que es un caso relativamente leve pero les da una nueva cita para que yo había visto una vez con otra persona. El joven es reticente y
después de un mes y medio. de inmediato es amarrado a la camilla. Supe luego que había partici­
El actor víctima de ritos satánicos. Hombre de unos 35 años, barba pado en un rito satánico en un cementerio, seis años antes. Ha sido
descuidada, mirada atemorizada, expresa estar sumamente mal; se tratado desde hace unos cuatro años y se encuentra en un estado en

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verdad lastimoso. Apenas se inicia el exorcismo, cae de inmediato vela ninguno de los nombres de los demonios que la poseen. Al final
en trance, los ojos completamente desaparecidos, los cuales cuando le cuesta volver en sí.
son abiertos por el padre Amorth huyen de la luz y literalmente gi­ La hija de una médica. Joven toscana de unos 20 años en estado
ran hacia atrás de un modo no natural. Tiene arrebatos sumamente de semiinconsciencia, va por primera vez donde el padre Amorth,
violentos y difícilmente contenidos, pero casi no pronuncia palabra recomendada por el obispo de su diócesis. Viene acompañada por
alguna, la respiración está del todo alterada, las fosas nasales dilata­ dos jóvenes que pertenecen a un grupo de oración de la Renovación
das. Hacia el final del exorcismo no se muestra para nada debilitado del Espíritu y por la madre que es médica y afirma haberlo inten­
y sigue reaccionando con violencia; luego se interroga al demonio tado todo; las verificaciones clínicas son negativas y tanto la medi­
que está en él, el cual, con voz profunda e increíblemente tranquila cina como la psiquiatría son completamente impotentes. Todos los
e impasible, responde a tono a las preguntas del padre Amorth y del problemas de la muchacha comenzaron unos años antes cuando la
padre Stanislao y declara que el muchacho es suyo y que nunca lo de­ doctora se armó de valor y se separó del esposo que era violento y
jará. Al terminar el exorcismo el joven no sale del trance, se intenta que luego descubrió pertenecía a una secta mágico-satánica. El pa­
hacerle beber un poco de agua bendita que acepta y la mantiene en la dre violó a la hija cuando apenas tenía seis años, y luego declaró que
boca y luego la escupe con fuerza. Interrogado acerca de su nombre, si se la dejaban llevar dejaría en paz al resto de la familia (compuesta
afirma llamarse como realmente es su nombre, pero en realidad no por un hermano menor, también con problemas físicos y psíquicos
es él; los ojos están aun exorbitados y apenas se le coloca un pañuelo inexplicables y por una hermana mayor igualmente en problemas).
con agua bendita en los ojos, se agita con violencia y a pesar de to­ La joven presenta hoy día un fuerte rechazo a lo sagrado, tiene a me­
dos nuestros esfuerzos no vuelve en sí. Entonces el padre Stanislao nudo en casa crisis repentinas de blasfemias y violencia, tanto física
coloca su estola sobre los ojos del muchacho y comienza lentamente como verbal, respecto a los familiares; de vez en cuando escribe en
a interrogarlo sobre lo que sucedió la noche de su consagración sa­ las paredes de la casa y de la ciudad frases de contenido satánico,
tánica. El relato es alucinante y no viene al caso repetirlo en sus de­ además ha intentado ya el suicidio tratando de lanzarse por la ven­
talles horripilantes. Finalmente, el muchacho sale del trance después tana y ha sido salvada de milagro. La muchacha ha reído burlona­
de casi una hora y es llevado afuera en brazos porque no puede en mente durante todo el exorcismo y se encontraba en un estado de
absoluto caminar. inconsciencia; treinta minutos de una risa satánica horripilante llena
Un rito de macumba en Venezuela. Mujer aterrorizada de unos 35 de desafío, con pocas reacciones físicas, y al final del exorcismo no
años, que ha sufrido mucho; se la trata sobre la camilla. Es de origen lograba volver en sí (se necesitó más de una hora para lograr que
venezolano, su madre y probablemente ella, padecieron años antes en se mantuviera de pie y saliera de la iglesia por su propios medios).
Venezuela un rito de macumba o algo parecido; llega adonde el pa­ El padre Amorth ha dicho que es un caso largo y difícil, con una
dre Amorth con su esposo, italiano, que no tiene problemas y ayuda posesión arraigada; la madre, desesperada lloraba resignada. Sin
a mantenerla quieta mientras es tratada. Durante todo el exorcismo embargo, según el padre Amorth la muchacha no podrá llevar a tér­
se agita y grita con una voz tremenda, prácticamente masculina, for­ mino los tentativos de suicidio porque ahora está bajo la protección
cejea con una energía extraordinaria, escupe en abundancia y de vez de la Iglesia y a él nunca le ha sucedido en tantos años que una per­
en cuando tiene una tos violenta con conatos de vómito, pero no sona bajo exorcismo se haya quitado la vida.
logra vomitar nada. Ojos constantemente volteados, síntoma de po­ ¡Poseída por la redención de la Iglesia! Mujer originaria de Cam­
sesión arraigada y profunda. Durante el interrogatorio ríe de manera pania, de unos 35 años, corpulenta, es llevada dentro de la habita­
tan burlona que en realidad hace que uno se estremezca pero no re­

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ción a la fuerza, por tres acompañantes hombres que luego se sabe asustada que pide ayuda a los padres, y es una voz diferente a la de la
son familiares. Es puesta en la camilla, pero comienza de inmediato muchacha tanto en el timbre como en el léxico, que se muestra como
a forcejear y quiere escaparse, tiene los ojos cerrados y la mujer no infantil. Al final del exorcismo se recupera rápidamente y recibe una
está en absoluto consciente. Enseguida el padre Amorth nos dice a nueva cita.
los laicos que no la podemos tocar porque puede ser peligroso, así Cristiana ortodoxa convertida al catolicismo. Mujer muy corpu­
que en mantenerla quieta deben pensar exclusivamente los tres pa­ lenta de origen eslavo, de unos 40 años, es acompañada por otra mu­
rientes y el padre Stanislao, quien celebra el exorcismo junto con el jer y por un sacerdote locaL Apenas es colocada en la camilla quiere
padre Amorth porque para este caso ha recibido una autorización escapar, y cuando comienza el exorcismo hay que amarrarla. Grita
especial de parte del obispo de su diócesis. Más que un exorcismo y gruñe, escupe y muerde, demuestra una posesión muy arraigada y
es una batalla, una lucha violenta donde la muchacha por momen­ permanece constantemente en estado de trance con los ojos comple­
tos emite unos chillidos terroríficos, otras veces se queda com­ tamente cerrados, pero según el padre Amorth la reacción violenta
pletamente muda y agónica, en otros momentos gruñe y trata de es una buena señal porque la posesión ha sido descubierta, algo que
morder. Cuando el padre Amorth al final del exorcismo interroga antes nunca había sucedido. Al final del exorcismo pierde momen­
a los demonios que la poseen, surge una risa burlona que con toda táneamente la sensibilidad de las piernas y luego de los brazos, pero
propiedad se puede definir como satánica. Al terminar, todos se en­ cosa curiosa, no al tiempo; cuando las piernas están insensibles los
cuentran exhaustos y el padre Amorth afirma que éste ha sido uno brazos no, y viceversa. Después de más o menos media hora se recu­
de los casos más difíciles que le haya sucedido. Para hacerla volver en pera completamente y puede salir de la iglesia.
sí se necesita mucho tiempo y el padre Stanislao la hace llevar fuera
del pequeño cuarto en un diván y se dedica a ella con oraciones y Organista de la iglesia. Muchacha de unos 30 años, llega de Li­
bendiciones por más de media hora antes de que pueda ser retirada guria acompañada por un sacerdote que también es exorcista, junto
de la iglesia. En una de las siguientes veces se me explicó que ella con otras dos personas; se la trata en la camilla y ha estado incons­
era una muy buena enfermera. Se dieron cuenta de sus problemas ciente a su llegada, por lo que es ingresada en brazos. La joven se
cuando estudiaba, porque poco antes de los exámenes era poseída porta de ordinario normalmente, es cristiana practicante y hasta
y ya no podía hacer nada; se necesitaban largos exorcismos directos toca el órgano durante la misa. Hace algún tiempo, durante una fun­
o telefónicos, incluso de dos horas para liberarla temporalmente, y ción, comenzó a sentirse mal, a agitarse y a insultar blasfemando.
en efecto, al día siguiente superaba los exámenes de manera exitosa. Muchas veces ha sido exorcizada por el sacerdote que la acompaña,
Durante un exorcismo, el demonio que la poseía dio una declaración quien ha solicitado la ayuda del padre Amorth para verificar si lo­
desconcertante: estaba poseída por voluntad de Nuestra Señora para graba desbloquear la situación, parece que hay una maldición sobre
que ofreciera su sufrimiento por la redención de la Iglesia. Es un ver­ ella. Durante el exorcismo la muchacha toma fuerza y se vuelve muy
dadero ejemplo de posesión no culpable por voluntad divina. violenta, grita y blasfema, voltea los ojos, a intervalos insulta a la
madre, durante el interrogatorio a los demonios dice no conocer el
Monólogo con el papá muerto. Mujer florentina, de unos 35 a 40 nombre de quien la posee y al final no logra volver en sÍ. Se necesita
años, llega tranquila, sube a la camilla quitándose los zapatos y co­ más de una hora para que se recupere completamente y pueda dejar
mienza el exorcismo orando con nosotros, pero después de un par la iglesia.
de minutos ya no puede hablar, cierra los ojos, los bloquea volteán­
dolos hacia atrás y empieza a gritar violentamente, se dirige a la ma­ Mi sufrimiento es una oportunidad. Mujer toscana, empresaria
dre diciéndole que la deje en paz y le ruega al papá (que está muerto) consagrada. Llega sola y es tratada en la poltrona. Permanece cons­
que la ayude. Durante todo el exorcismo la voz parece la de una niña ciente en la primera parte del exorcismo y llora suavemente, luego

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·"'\~¡ii _'F'T''''J.Hl.j~~1~~~~IUkJ~,~~,;;~<,1.'.'¿,L c-""': lP,5!I!~)V!f!lI!IUUI,I;!'II)""III"""IlIIIlWIIIIII'"''_'''

de repente comienza a toser de forma violenta y a vomitar, siente


fuertes dolores en el estómago y en el plexo solar. Hacia el final está
mejor. Hace tiempo, de manera regular, recibe bendiciones de un C\PlTULO XVIII
sacerdote que vive cerca de su casa, probablemente haya sido víc­ La responsabilidad de la Iglesia
tima de un maleficio en el ámbito laboral. Hasta hace pocos meses
no había logrado implicar a su esposo, quien rehusaba creer esa his­
toria y en que semejantes cosas pudieran ocurrir; además, no creía
en la existencia de Dios. Sobre todo estaba encolerizado con todo el
mundo porque había perdido a su madre a la que estaba muy unido.
Luego, un día se dejó convencer para que participara en una ben­
dición suya, y cuando vio la reacción de la mujer se puso a llorar y Suena el teléfono. Es el padre Luigi:
cambió de actitud, comprendió y comprobó que después de la vida -Hola, mira que he leído el capítulo que me has dedicado. ¡Gra­
terrenal existe otra vida en los mundos espirituales y se reconcilió cias, en realidad nuestra historia es hermosa! Pero, Lucia, al
consigo mismo. Gracias a su ayuda, ella está mejorando rápidamente leerte, debo decir que probablemente estés bastante enfadada
y de la posesión inicial ahora ha pasado a las vejaciones que sólo la con el arzobispo de Megalópolis ...
golpean a nivel físico y psíquico. Una vez más el amor está realizando
el milagro. La mujer ha concluido afirmando que su experiencia, por -¡No es posible que no esté informado de cómo intervienen, o
muy difícil y traumática, se está transformando en una oportunidad. mejor no intervienen, los exorcistas nombrados por él, de lo
que sucede en su diócesis! Me siento enfadada porque con su
conducta abandona a las personas al sufrimiento y autoriza a
sus sacerdotes a hacer otro tanto. De hecho, ¡es negar o mini­
mizar el sufrimiento de los demás! -replica Lucia.

-¿Has dicho sufrimiento? ¡Entonces explica dicho sufrimiento


-insiste el padre Luigi- de modo que quien te lea pueda en­
tender mejor tus motivos y tus quejas contra la Iglesia!

Así nació este capítulo.


A este punto es útil recordar una vez más que los sacerdotes que
niegan las obras del demonio y no actúan para combatirlas, o que obs­
taculizan a quienes quisieran actuar, de hecho niegan su existencia.
Pero hablar hoy del diablo es como referirnos a los tiempos anti­
guos, afrontar la magia negra lleva a pensar en la ignorancia popular
un poco crédula, así que en muchos interviene una especie de de­
gradación psicológica que lleva instintivamente a considerar a quien
enfrenta ciertos argumentos con sospecha o escarnio.

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Pero al obrar de esa manera no se comprende una de las fun­ Como ya se recordó, también los laicos pueden efectuar oracio­
ciones más importantes de Jesús y de la Iglesia, es decir, combatir y nes de liberación por sí mismos y por los demás, pero sería mejor si
arrojar a los espíritus malignos. En el Evangelio según san Mateo se alguien les explicara claramente cómo comportarse. Personalmente,
lee que Jesús eligió a los doce y "les dio el poder de expulsar a los es­ siempre hemos estado un poco perplejos respecto a aquellos grupos
píritus inmundos y de curar toda clase de enfermedades" (Mt 10, 1). de oración en los que algunos laicos, aparentemente en posesión de
También en el Evangelio según san Lueas se relata que: "Convocando carismas especiales, imponen las manos sobre otros pidiendo para
a los doce y les dio autoridad y poder sobre todos los demonios, y la curación o la liberación. Una cosa es la plegaria o la invoca­
para curar enfermedades" (Le 9, 1). Igualmente el evangelista Mar­ ción realizada con énfasis y con fe, y otra la acción directa que lleva
cos refiere que, después de una noche en oración, el Maestro escogió a estas personas a transformarse, mediante la imposición de manos,
a los doce "para enviarlos a predicar y para que tuvieran el poder de en "canales preferenciales para el Espíritu Santo",
sacar los demonios" (Me 3, 1
Las manos de los sacerdotes han sido preparadas a propósito, es
Pero esto no termina aquÍ, porque tales poderes no se confiaron decir, consagradas, para esta tarea a través de la unción con el santo
sólo a los doce apóstoles, sino también a los setenta y dos discípulos Crisma que tiene lugar durante la ordenación. Sus manos se vuelven,
que al regreso de sus campañas de evangelización afirmaron con én­ por tanto, potentes canales colectores purificados con la capacidad
fasis delante de Jesús: "... hasta los demonios se sometían a nosotros de "encauzar eficazmente" al Espíritu Santo; pero no pidan confir­
en tu nombre" (Le 10, 17). mación de estas afirmaciones a su párroco, porque probablemente
Por tanto, la Iglesia, y no olvidemos que también todos nosotros no sea consciente de ello.
los laicos somos la Iglesia, ha recibido tal potestad directamente de Lo mismo, en cambio, no sucede con un laico, que rara vez está
Jesús. preparado de manera adecuada para esta labor, es decir, difícilmente
¿Acaso estaba Jesús un poco loco al practicar exorcismos? ¿Será es tan puro y desinteresado como para que sea neutro durante la
que las referencias en los evangelios a las liberaciones son simples intervención. La tentación de sentirse protagonista, en vez de simple
metáforas? ¿Si así fuera, no podría ser también una especie de inter­ instrumento, es fuerte. Por consiguiente, el carismático sin la sufi­
pretación forzada la institución de la Eucaristía? ¿O su muerte en la ciente humildad y personalidad corre el peligro, de manera incons­
cruz y su resurrección no podrían ser simplemente una exageración? ciente, de transmitir durante la imposición de sus manos, energías
No quisiéramos parecer demasiado integristas, pero según nuestro espirituales propias no aptas, o de absorber del enfermo las enferme­
punto de vista, debemos tomar como bueno todo el evangelio, algo dades que deseaba curar. Muchos sostienen que, de todas maneras,
así como en un viaje "¡todo incluido!': ¿Con qué derecho se permi­ el que actúa es el Espíritu Santo, pero cuando un laico impone las
ten hoy los sacerdotes "escoger" lo que quieran? manos puede canalizar hacia fuera o hacia sí espíritus que de santos
tienen de veras poco. Y de hecho hay cada vez más sacerdotes que
Algunos historiadores afirman que en las primeras comunidades
refieren que entre estas personas alguna se excede y no son raros los
cristianas todos podían arrojar los espíritus inmundos en nombre de
casos de enfermedad o de problemas psíquicos.
Cristo, algo así como sucede también hoy entre los cristianos orto­
doxos, y sólo después dicha práctica fue reglamentada poco a poco Para una plegaria eficaz de liberación, para una bendición a las
de una manera cada vez más restrictiva hasta llegar a la situación personas o las cosas no hay duda, en verdad es mejor que quien in­
actual. tervenga sea un sacerdote. Los sacerdotes, aun los no autorizados,
pueden orar tranquilamente con oraciones específicas por quien

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tenga enfermedades físicas, psíquicas y espirituales sin que infrinja sido de una religiosidad "maníaca y fanática", que siempre hemos
ningún código canónico. Están las bendiciones, la unción de los en­ pensado que la magia era pura fantasía, podemos testificar que los
fermos, las oraciones de curación y liberación oficiales, a partir de la poderes demoníacos existen lo mismo que la magia negra. Que estos
de san Miguel Arcángel, o también las personales con una infinidad espíritus pueden temporalmente tomar posesión del cuerpo de una
de variaciones determinadas por el lugar o la ocasión; todas son de persona y hacerle realizar acciones que de otra manera serían impo­
gran provecho y no implican riesgo alguno. ¿Entonces, por qué a sibles, y que algunos de ellos pueden ser indiferentes a toda clase de
tantos sacerdotes se les reprocha o son objeto de mofa por parte de oración que no sea un exorcismo mayor. Quien está poseído puede
sus cohermanos simplemente porque oran con fuerza y convicción? llevar aparentemente una vida perfectamente normal hasta cuando
Se podría pensar maliciosamente en un poco de celos, algo muy aparece un momento de crisis. En esta óptica, se podrían también
humano, teniendo en cuenta que los pocos sacerdotes empeñados explicar mejor muchos delitos feroces que son llevados a cabo en es­
en el ministerio de la consolación tienen invariablemente las iglesias, tado de total posesión, cómplices de drogas, alcohol, ritos mágicos,
los toldos, los templetes, y cualquier otro lugar que logren encontrar, música ensordecedora y luces psicodélicas, que no hacen otra cosa
llenos, incluso más rebosantes, y pueden alcanzar que oren con de­ que abrir de par en par las puertas a estos espíritus malignos. En
voción y fe los fieles necesitados por horas enteras sin que se cansen. efecto, es algo típico el que muchos culpables afirmen, durante los
En fin, lo contrario de lo que sucede cuando a los fieles se les obliga procesos, que no se dieron cuenta de qué los llevaba a actuar de ese
a escuchar larguísimas y tediosas homilías autorreferenciales total­ modo, que no eran conscientes de lo que estaban haciendo.
mente fuera de la realidad. Es conveniente recordar igualmente que la mayor parte de las
¡Si ciertas iglesias se vacían y otras se colman es porque debe exis­ personas molestadas por seres malignos no está poseída, lo cual no
tir algún motivo! significa que no tenga gravísimos problemas y que no esté necesitada
también de ayuda. Más aún, es precisamente sobre estas personas,
Aun sabiendo que no se debe juzgar a nadie, consideramos que si
en las que los espíritus inmundos no son descubiertos de manera
alguien deliberadamente ignora el estado de sufrimiento en el cual
palpable donde se debe ejercer una oración continuada y donde se
caen los poseídos y las personas con problemas, comete un grave
deben administrar los "exorcismos exploratorios': Si Francesco no
pecado de omisión. Y si luego se trata de sacerdotes, creemos que su
hubiera tenido la oportunidad de encontrarse casualmente con el
culpa es todavía más grave.
padre Amorth y su potente exorcismo en aquella fatídica tarde de
Nos sentimos profundamente ofendidos por quienes salen del Pascua, ¡quién sabe por cuánto tiempo más su posesión hubiera per­
paso con estos problemas valorándolos como "de naturaleza psiquiá­ manecido oculta!
trica': Hace algún tiempo leímos un libro de una periodista ameri­
Queridos sacerdotes, cuando alguien se les acerque diciéndoles
cana que, con la típica frialdad de la cronista consumada, catalogaba
que en su casa suceden cosas extrañas como ruidos, golpes, ráfagas
a todos, exorcistas y enfermos espirituales, como desequilibrados,
heladas y que tales manifestaciones son perfectamente perceptibles
personas con fijaciones, fanáticos, condicionados por manías reli­
por toda la familia y hasta por algún amigo, su obligación es la de
giosas.
intervenir pronta y repetidamente, sin miedo alguno, con raciona­
Con nuestra experiencia, nosotros que nunca hemos frecuentado lidad y equilibrio, pero también con fe y convicción. Podemos ates­
hechiceros o ritos satánicos, que no tenemos enfermedades psiquiá­ tiguar que parte de estas molestias desaparecen con bendiciones y
tricas declaradas (¡al menos por el momento!), que nunca hemos oraciones de liberación que, 10 repetimos, cualquier sacerdote digno
de este nombre debería saber y querer impartir. Nosotros experi­

174 175
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mentamos que, después de una misa y una bendición de la casa, la darlo a alguien que pudiera mejorarse. Si después se llega demasiado
situación mejoró muchísimo y quisiéramos que esto le quedara claro tarde, paciencia: ¡lo importante es no abusar de él! Para mí es un ver­
a quien se nos rió en la cara o al que abandonó el confesionario y dadero misterio dicho comportamiento, ya que hemos comprobado
también a quien simplemente mostró desinterés. su fuerza. La unción es la medicina más apta para muchos males, o
Es justo el discernimiento, es sensato verificar si el problema real­ mejor una ayuda eficaz, para que por medio de la gracia divina se
mente existe, pero luego ¡hay que obrar! ¡Sin miedo! pueda uno curar más rápidamente del mal físico, mental o espiritual.
Además, a quien clasifique a los "enfermos espirituales" como Una de las peores situaciones que un "enfermo espiritual" deba
algo locos le hacemos caer en la cuenta que no es para nada fácil afrontar es que no le den ayuda donde se supone que la debía encon­
mantenerse perfectamente lúcidos y racionales cuando se viven trar, además pesa como una piedra inmensa e! escarnio del cual se
ciertas experiencias. Muchos "enfermos espirituales" presentan pro­ es objeto. En lo que nos corresponde, e! Señor ha hecho de nosotros
blemas psicopatológicos clasificables en el ámbito de las psicosis unos privilegiados y nos permitió obtener ayuda por parte de exor­
esquizofrénicas, neurosis histéricas o delirios depresivos, y estos dis­ cistas de categoría y de encontrar también a otros sacerdotes dotados
turbios pueden ser absolutamente reales. Los psiquíatras se limitan a de grandes capacidades y voluntad de oración; ¿pero cuánta gente
diagnosticar y curar los síntomas de la enfermedad, lastimosamente hay que pueda permitirse los largos, frecuentes y costosos viajes que
a veces con muy escasos resultados, sin darse cuenta de que en en cambio nosotros sí pudimos realizar, que pueda permitirse no
gunos casos tales enfermedades declaradas así son la directa con­ trabajar durante meses para tratar de encauzar un problema desbor­
secuencia de "enfermedades espirituales" que, por tanto, requieren dante, que tenga la capacidad de expresarse de manera culta y por
también o exclusivamente, de una curación espiritual que compete ende que se haga escuchar de quien debería ayudarla?
al sacerdote. Afortunadamente, las alianzas entre los mejores exor­ Tal vez sería mejor que nuestros párrocos, entre la organización
cistas y algunos psiquíatras visionarios son cada vez más frecuentes de bazares, la excursión al parque de diversiones o la recolección de
y muchos sacerdotes cuentan que algunos casos les han sido envia­ fondos para el asilo (o el oratorio, la torre, e! atrio de la iglesia, las flo­
dos a ellos precisamente ¡por los mismos médicos! res para el santo patrono... ) previeran también un poco de tiempo
Quisiéramos ahora abrir un breve paréntesis sobre los sacramen­ para este no muy tenido en cuenta "ministerio de la consolación':
tales, es decir, sobre el agua, la sal, e! aceite, benditos y exorcizados, Si los exorcistas de Megalópolis y todos los demás sacerdotes que
considerados como muy útiles por los enfermos espirituales. Quién niegan hasta una bendición entendieran realmente el alcance del su­
sabe si de veras lo sean tanto, pero nos inclinamos por el sí. También frimiento que aflige a los "enfermos espirituales", entonces podrían al
en este caso, obtenerlos puede significar un esfuerzo arduo, hasta e! menos tratar de poner en práctica la virtud de la piedad, es decir, te­
punto de desanimar a los espíritus menos fuertes: ¡probablemente se ner compasión y orar con fe, fuerza y convicción por ellos. Sería más
trate de una clase de selección natural de la especie! provechoso para todos, sacerdotes y enfermos. Y sería también más
A la mayoría de los sacerdotes, quién sabe por qué, no les gusta rápido, porque un exorcismo o una plegaria de liberación se termi­
bendecir el agua, la sal, e! aceite que luego son llevados a casa por nan en tiempos más expeditos frente a los absurdos discursos que nos
los peticionarios. No hablamos luego del óleo de los enfermos, que hemos aguantado sobre la "no existencia de! diablo" o sobre las enfer­
para muchos se debe emplear únicamente en la extremaunción, es medades psiquiátricas. Pero los que nosotros hemos encontrado, ¿son
decir, que se puede suministrar sólo en el momento de la muerte, sacerdotes o psiquíatras fallidos? Probablemente el problema esté en
posiblemente justo en el último instante, así no se corre el riesgo de la arbitrariedad con la cual un sacerdote sólo pueda decidir actuar o

176 i77
quizá también en la ignorancia teológica, además de práctica, sobre
cómo se manifiestan las "obras del diablo" en el mundo moderno.
Quizás el tema merezca volverse a considerar y profundizar mejor en Epílogo
los seminarios.
Oremos para que el Papa elimine el vínculo que permite a los sa­
cerdotes efectuar exorcismos sólo previa autorización de los obispos.
Si así fuera, ningún sacerdote tendría ya escapatorias canónicas para
dejar de intervenir y estaría obligado a obrar según su conciencia
y con plena responsabilidad. A 10 mejor después de haber apren­
dido bien las técnicas de quien ya ejerza desde hace tiempos o, quizá Este libro comenzó con una serie de preguntas, entre las cuales:
no me esté atreviendo demasiado, después de haber frecuentado un "¿Pero por qué? ¿Por qué precisamente a nosotros? Comprendimos
curso apropiado. que no nos corresponde a nosotros responder, dichos interrogantes
Sin embargo, se debe aclarar que los obispos que no procedan que son más grandes que nosotros, pero ciertamente esta experien­
con los nombramientos o autoricen a quienes no tengan intención cia nos cambió profundamente y, además, escribir el libro nos
de obrar seriamente, o los sacerdotes que no presten la ayuda, son permitido volver a pensar con calma y con mente fría toda nuestra
directamente responsables tanto de los sufrimientos que no alivien historia.
como de los que provoquen personalmente. Durante la búsqueda de un exorcista encontramos cerradas algu­
Éste es el clamor de denuncia que esperamos llegue al corazón de nas puertas, pero también muchas abiertas, hemos conocido a per­
la Iglesia y que convenza a todos aquellos sacerdotes que desconfían sonas extraordinarias, entre sacerdotes y entre laicos. Hemos vivido
de la necesidad y bondad de su intervención. y comprobado que el mundo espiritual, al cual todos nosotros vol­
veremos al término de nuestras vidas terrenales, existe realmente y
está habitado tanto por seres extraordinariamente buenos como por
otros ferozmente malvados ...
Hoyes 28 de agosto de 2008; empezamos a escribir este libro en
febrero de 2007, luego lo descuidamos y finalmente, en julio de este
año, volvimos a prometer que lo terminaríamos a finales de agosto.
Cumplimos. Ha sido un mes muy difícil, lleno de graves proble­
mas de salud para Lucia y de pesadas vejaciones e insomnio para
Eleonora. En algún momento, encontramos a un sacerdote, el padre
Ciríaco, acompañado por una religiosa, Agostina, una carismática
extremadamente sensible. "Fuimos mandados", así nos lo dijeron.
No tenemos dudas sobre el hecho de que hayan sido enviados. Ha­
blar con sor Agostina nos permitió reconstruir el mosaico de las
revelaciones de los otros parasicólogos. Pudimos ordenar todas las
piezas, comprendimos finalmente de dónde partió la maldición, de

178 179
una bisabuela de Francesco que era hechicera de magia negra. A ella Agradecemos también de corazón a la muy querida madre su­
se unieron una tía abuela que también practica la magia y la madre periora y a sus monjas, cuyo afecto palpable nos acompaila diaria­
de Francesco, que no actúa de manera directa, sino que, al dirigir mente.
pensamientos negativos y al estar en línea sanguínea con estos an­ Y agradecemos a la santísima Virgen a quien entregamos este li­
tepasados, provoca dailos con su voluntad. A esta fea situación ge­ bro, nuestra familia y a todas las personas necesitadas de ayuda espi­
neracional se añade la posición de nuestra casa, construida sobre ritual. Que ella nos proteja bajo su manto y aplaste definitivamente
antiguos lugares de culto druídicos, y en fin, maldiciones diversas la cabeza del maligno.
sobre el trabajo... En una palabra, ¡no nos hace falta prácticamente
Que el Señor los bendiga a todos, y no duden nunca ¡porque el
nada!
bien está destinado siempre a derrotar al mal!
Nuestra situación no está por tanto resuelta, pero esperamos que
con la ayuda divina salgamos adelante. Y sobre todo oramos para
que sean protegidos nuestros niilos, las víctimas más inocentes, ig­
norantes e indefensas de esta macabra vicisitud.
Hemos sido privilegiados, hemos tenido la manera de experi­
mentar todas, pero todas las variantes por las que de ordinario pasan
las personas afligidas por males espirituales, hemos comentado que
tal vez una voluntad superior querí<l; que probáramos primero en
nuestra piel lo que luego deberíamos contar y atestiguar mediante
las páginas de este libro. Y, en efecto, sor Agostina, a quien aun no le
habíamos dicho que estábamos escribiendo el libro, nos dijo: "Se les
pide a ustedes que den testimonio':
Esperamos haberlo hecho ya que en esto pusimos todo nuestro
empeilo.
Somos plenamente conscientes de que nuestro testimonio no
puede ni debe terminar con estas páginas. Probablemente a este libro
le sigan otros. De todas maneras, ofrecemos todo el empeño nece­
sario para escribirlo a todas las personas necesitadas y a sus fami­
liares y conocidos, esperando que puedan encontrar en sus páginas
consuelo y valor, pero sobre todo determinación y confianza, a fin
de que también su experiencia pueda transformarse en una oportu­
nidad.
Agradecemos a todos aquellos que nos han ayudado a sobrevivir
a esta dolorosÍsima experiencia, en primer lugar a Bruno que nos
indicó el camino y a los sacerdotes y laicos que han orado y siguen
haciéndolo por nosotros.
181
180
Apéndice
Oraciones aconsejadas por el Padre Arnorth

En estas páginas hemos exhortado de manera repetida a los sacerdo­


tes a que realicen oraciones de liberación y bendición por los fieles
que lo necesiten. ¿Pero cuáles son las plegarias más adecuadas que
todo consagrado puede recitar sin temor a infringir alguna regla ca­
nónica?
Le preguntamos al padre Amorth, sin duda alguna el mejor ex­
perto en este campo. Enseguida señalamos algunas de ellas, no pre­
tenden ser inéditas, pero son ciertamente eficaces.

Antífona a la santísima Virgen

Bajo tu amparo nos acogemos, santa madre de Dios, no desatien­


das las oraciones que te dirigimos en nuestras necesidades, mas
branos siempre de todo peligro, Virgen gloriosa y bendita.

Augusta reina del cielo

Augusta reina del cielo y soberana de los ángeles, tú que recibiste


de Dios el poder y la misión de aplastar la cabeza de Satanás, te pe­
dimos humildemente nos envíes las legiones celestes para que, a tu
mandato, persigan a los demonios, los combatan en todas partes,
repriman su audacia y los devuelvan al abismo.
¡Oh excelsa madre de Dios!, envía también a san Miguel, el jefe
invencible de los ejércitos del Señor, para la lucha contra los emisa­
rios del infierno en medio de los hombres. Destruye los planes de

183
F'

los impíos y humilla a todos aquellos que desean el mal. Obtén para Plegaria de liberación
ellos la gracia del arrepentimiento y la conversión, para que honren
al Dios viviente Uno y Trino y a ti. ¡Oh poderosa protectora nues­ Espíritu del Señor, Espíritu de Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo,
tra!, por medio de los resplandecientes espíritus celestiales, protege santísima Trinidad, Virgen inmaculada, ángeles, arcángeles y santos
por toda la tierra las iglesias, los lugares sagrados y especialmente el del paraíso, desciendan sobre mÍ. Úneme a ti, Señor, modélame, llé­
Santísimo Sacramento del altar. Impide toda profanación y destruc­ name de ti, úsame.
ción. Los ángeles están a todo momento en espera de una señal tuya Arroja fuera de mí las fuerzas del mal, aniquílalas, destrúyelas,
y arden del deseo de acogerlo. para que yo pueda estar bien y realizar 10 bueno. Arroja fuera de mí
¡Oh Madre celestial!, finalmente protege también de las insidias los maleficios, las hechicerías, la magia negra, las misas negras, las
de los enemigos, nuestras cosas y nuestras habitaciones. Haz que los maldiciones, las ataduras, el mal de ojo; la infestación diabólica, la
santos ángeles moren siempre en ellas y les traigan las bendiciones posesión diabólica, la obsesión diabólica; todo lo malo, el pecado, la
del Altísimo. ¿Quién como Dios? ¿Quién como tú, oh María? ¿Tú que envidia, los celos, la perfidia; la enfermedad física, psíquica, espiri­
eres la reina de los ángeles y la vencedora del demonio? ¡Oh buena tual, diabólica. Quema todos estos males en el infierno, para que ya
y tierna madre!, tú siempre serás nuestro amor y nuestra esperanza. no vuelvan a tocarme ni a ninguna otra criatura del mundo.
¡Oh madre divina!, envía a los santos ángeles para que nos defiendan Ordeno y mando con la fuerza del Dios omnipotente, en nombre
y para que arrojen fuera de nosotros al cruel enemigo infernal. San­ de Jesucristo salvador, por intercesión de la Virgen inmaculada a to­
tos ángeles y arcángeles, defiéndannos y guárdennos. Amén. dos los espíritus inmundos, a todas las presencias que me molestan,
Un Padrenuestro, un Avemaría, un Gloria. Amén. dejarme inmediatamente, dejarme definitivamente e ir al infierno
eterno, encadenados por san Miguel Arcángel, san Gabriel, san Ra­
fael, nuestros ángeles custodios, aplastados bajo el calcañal de la san­
A san MibJUel arcángel tísima Virgen. Amén.

Gloriosísimo príncipe de las milicias celestiales, arcángel san Mi­


guel, defiéndenos en la batalla contra las potencias de las tinieblas y Letanías de la preciosísima sangre
su malicia espiritual. Ven en ayuda de los hombres creados por Dios
a su imagen y semejanza y rescatados a gran precio de la tiranía del
demonio. Tú eres venerado por la Iglesia como su custodio y pa­ Señor, ten piedad, Señor, ten piedad.
trono, y a ti el Señor ha confiado las almas que algún día ocuparán Cristo, ten piedad, Cristo, ten piedad.
los lugares celestiales. Pide, pues, al Dios de la paz que mantenga Señor, ten piedad, Señor, ten piedad.
aplastado bajo nuestros pies a Satanás, a fin de que no pueda seguir Cristo, óyenos, Cristo, óyenos.
manteniendo como esclavos a los hombres y hacer daño a la Iglesia. Cristo, escúchanos, Cristo, escúchanos.
Presenta al Altísimo tus plegarias con las nuestras, para que pronto Dios, Padre celestial, ten piedad de nosotros.
desciendan sobre nosotros sus misericordias divinas, y que tú pue­ Dios, Hijo redentor del mundo, ten piedad de nosotros.
das encadenar al dragón, la serpiente antigua, Satanás, y encadenado Dios, Espíritu Santo, ten piedad de nosotros.
expulsarlo de nuevo al abismo, donde no pueda ya seducir las almas. ten piedad de nosotros.
Dios único, santa Trinidad,
Amén.

184 185
Sangre de Cristo, Sangre de Cristo,

unigénito del eterno Padre,


sálvanos. consuelo de los moribundos,
sálvanos.

Sangre de Cristo,
Sangre de Cristo,

Verbo de Dios encarnado,


sálvanos. paz y dulzura de los corazones,
sálvanos.

Sangre de Cristo, Sangre de Cristo,

de la nueva y eterna alianza,


sálvanos. promesa de vida eterna,
sálvanos.

Sangre de Cristo,
Sangre de Cristo, que liberas a las almas

que cayó en tierra en la agonía,


sálvanos. del purgatorio,
sá/vanos.

Sangre de Cristo, Sangre de Cristo,

sálvanos. dignísima de toda gloria y honor,


sálvanos.

abundante en la flagelación,

Sangre de Cristo, que goteaba


Cordero de Dios,

sá/vanos. que quitas los pecados del mundo,


perdónanos, Señor.

en la coronación de espinas,

Sangre de Cristo, Cordero de Dios,

sálvanos. escúchanos, Señor.

derramada en la crucifixión,
que quitas los pecados del mundo,

Sangre de Cristo,
Cordero de Dios,
ten piedad,
precio de nuestra salvación,
sálvanos. que quitas los pecados del mundo,
de nosotros, Señor.
Sangre de Cristo,
sin la cual no hay perdón,
sálvanos.
Nos redimiste con tu sangre, ¡oh Señor!
Sangre de Cristo,

en la Eucaristía bebida .
sálvanos. y nos hiciste reino para nuestro Dios.
y purificación de las almas,

Sangre de Cristo,
río de misericordia,
sálvanos. Oremos: ¡Oh Padre!, que en la sangre preciosa de tu único Hijo
Sangre de Cristo,
redimiste a todos los hombres, guarda en nosotros la obra de tu mi­
vencedor de los demonios,
sálvanos. sericordia, para que celebrando estos sagrados misterios obtengamos
Sangre de Cristo, los frutos de nuestra redención. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
fortaleza de los mártires,
sálvanos.
Sangre de Cristo,

vigor de los confesores,


sálvanos.
Sangre de Cristo,
que haces germinar las vírgenes,
sálvanos.
Sangre de Cristo,

apoyo de los vacilantes,


sálvanos.
Sangre de Cristo,

alivio de los que sufren,


sálvanos.
Sangre de Cristo, consuelo en el llanto,
sálwmos.
Sangre de Cristo,

esperanza de los penitentes,


sá/vanos.

186 187
111'"

Índice

Presentación ::>

Introducción 7

11

CWrIlTLO I
Una difícil toma de conciencia: el del encuentro

con el Graciano 19

G'II'ITULOII
'")c
La difícil búsqueda un exorcista autorizado L.::>

C!\PÍTlJLOIII
El encuentro con monseúor Gemma 30

G'IPITl:W IV

Entrevista a monseñor Gemma 35

G \I'ÍTllLO V

El padre Paolo: un haile joven y valiente. pero muy 51

CM'ITU J) VI

Hechiceros. videntes, carismáticos: una ventana

abierta a lo invisible 59
179
GwrrllLO VII Epílogo
El padre rerGlI1anClO: un ele primera línea 65
l\péndice
por el AmOlth 183
Oraciones
G \l'ITeW VII
El Francesco ¡un exorcista hien 77

G\I'ITllL() IX
Encuentro y entrevista con el Amorth 94

)X
C,\!'ITl 'u
El exorcismo padre yel
la posesión 104

C:\I'ITUU) XI
El un como amlgo 111

C,\PITUU) XII
oraciones y bendiciones 120

GWl1TUl XIII
liberación y la recaicla 129

GWITI'U ) XIV

La la oración, sacramentos

y
los 137

G\I'ITl'Ul XV
Una sohre la con el 145

G\i'IlTUJXVI
De exorcizado a asistente del exorcista 150

G \I'ITI 'U) XVII


l\I!c,JUnéls experiencias de exorcismo 158

GWITI 'U) XVIII


La la 170
Por tanto, este libro pretende ser un recorrido de esperanza, más
aún, de certeza, sobre la justicia y el amor divino, a fin de que
quede claro a todos que, para decirlo como monseñor Gemma, "¡las Prólogo
fuerzas del mal no podrán prevalecer jamás!':
¡Feliz lectura y... buen trabajo!

Escrito por Francesco


Durante los largos meses que me llevaron a mí y a mi familia a la
dolorosa toma de conciencia de que algo muy extraño estaba suce­
diendo tanto en nuestras personas como en nuestras habitaciones,
se acumularon en nosotros numerosas emociones. Al principio, in­
capacidad de comprender (en muchos años no supimos reconocer el
origen "del mal"); luego, asombro (nunca hubiéramos pensado que
la acción demoníaca existiera de verdad); después, temor, increduli­
dad, rabia, exasperación; enseguida, determinación a la acción unida
a la aceptación y a la confianza. Desde ese momento también dimos
lugar al perdón. Afortunadamente, ¡nunca a la resignación! Hasta
hace sólo pocos meses estamos en capacidad de leer racionalmente
los numerosos y extraños acontecimientos que han sucedido en
nuestra vida como enfermedades repentinas e inexplicables, dicho
por los mismos médicos, enfermedades que aparecían y desapare­
cían y que nos llevaron aun a intervenciones quirúrgicas inútiles, a
prolongados tratamientos farmacológicos y a tremendos sufrimien­
tos tanto a nosotros como a nuestros hijos. Ruidos repentinos en la
casa, percepción de apariciones, oleadas de aire helado que recorrían
las habitaciones aun con las puertas y ventanas cerradas. y también
imposibilidad de finalizar negocios que supuestamente parecían ha­
ber concluido. Ataques físicos con fuertes dolores en las articula­
ciones, en el hígado, en el bazo, en los brazos, en las piernas, que
llegaban de manera inexplicable y que de modo igualmente inexpli­
cable desaparecían. Opresión súbita en la garganta o en los pulmo­

10
nes con la impresión de no poder respirar y que luego descubrimos los dos años, de repente comenzó a no dormir de noche debido a
que desaparecían con la oración y la bendición. terribles pesadillas. Las innumerables idas al médico culminaron con
jarabes tranquilizantes, prácticamente inútiles, hasta que un neuro­
Todo esto no sólo sucedía a un miembro de la familia, sino por
patólogo declaró que la niña estaba siendo molestada desde el ex­
turnos, a todos, incluidos los niños. Pensamos seriamente que es­
terior, sin darnos ninguna otra explicación comprensible. Mediante
tábamos locos, en una especie de histeria colectiva. Pero afortu­
una placa metálica cargada magnéticamente a través de un programa
nadamente no estamos locos, ¡aunque el límite entre la locura y la
computarizado y colocada en la cama de Eleonora los síntomas
normalidad en ciertas situaciones delicadas es definitivamente débil!
aparecieron inicialmente, luego reaparecieron y volvieron a desapa­
Podría entrar en detalles para explicar la desesperación y el des­ recer.
aliento que nos invadían, pero dejo esta tarea a Lucia auien definiti­
Nos aconsejó controlar nuestra casa sobre eventuales geopatías,
vamente es más que yo...
es decir verificar la eventual presencia de corrientes de agua sub­
terráneas, cavidades, infiltraciones de radón, nudos de Hartmann,
Escrito por Lucia etc. Para efectuar el análisis de la casa contratamos a un equipo de
personas especializadas que nos informaron acerca de algunas pro­
La primera vez que oímos las palabras "maldición" y "mal de ojo" blemáticas más bien comunes, aunque no particularmente graves.
fue hace muchos años, con ocasión de la adquisición de la casa en: Conseguimos algunos pequeños aparatos para desviar los campos
la que actualmente vivimos. Los anteriores propietarios la habían magnéticos, a precios bastante altos, y luego nos aconsejaron, al
construido sin registrarla en el catastro y de ello nos dimos cuenta berles contado también los problemas de Eleonora, que pusiéramos
sólo poco antes de adquirirla definitivamente, cuando ya habíamos fotos del Santo Sudario sobre las imágenes de algunos parientes nues­
dado una suma importante; esto hizo que se corriera unos meses tros, difuntos o vivos, en particular de la madre de Francesco que en
el tiempo establecido anteriormente para concluir la compraventa, esa· época había aprendido varias técnicas de Nueva Era acerca de
pero mientras tanto ya habíamos tomado posesión de la nueva vi­ curaciones psicoespirituales. Semejante consejo nos pareció muy ex­
vienda. Los antiguos propietarios exigían más dinero y nos nega­ traño, pero nos dijimos que nada se perdería con ensayar. De nuevo
mos a darles gusto. A esto siguieron amenazas y un día la mujer surgieron los problemas de nuestra hija, primero disminuyeron y
del propietario profirió maldiciones y males de ojo a nosotros y a luego reaparecieron. Al año siguiente nació Alessio, quien desde los
nuestra descendencia. Eso nos hizo reír y pensamos que no sabía lo primeros días de vida manifestó serios problemas respiratorios, se
que decía. Finalmente, después de algún tiempo se concluyó la com­ sentía su difícil respiración y siempre tenía mucho catarro. Las idas
praventa y luego de unos días la fachada de nuestra morada fue em­ al médico no produjeron ningún resultado porque, a pesar de las
badurnada con barniz rojo lanzado dentro de los faroles. 'Iodo hacía dificultades respiratorias, el niño crecía bien. Sin embargo, de hecho
pensar en una enorme mancha de sangre que goteaba. Pero una vez pasaba de una bronconeumonía a otra y de una terapia antibiótica a
más nuestra mente y nuestro corazón estaban totalmente distantes la otra; transcurrió sus tres primeros años de vida entre los antibió­
de imaginar oscuras intenciones y por eso pensamos que los autores ticos y la cortisona; fuera de eso, su sistema inmunológico estaba,
del hecho ya se habían desahogado y que, por tanto, desde ese mo­ según los médicos, gravemente comprometido aunque no lograban
mento nos dejarían en paz. ¡Y efectivamente así fue! proporcionarnos unos motivos serios. Mientras tanto, a Eleonora
Por algunos aílos nuestra vida transcurrió normalmente; después le dio un mal de estómago inexplicable, al comienzo diagnosticado
de algún tiempo nació Eleonora, quien, sin embargo, poco antes de como una simple gastroenteritis recurrente (atípica por no estar

12 13
nunca acompañada de las características diarreas), luego como ma­ sentía ruidos, a veces parecidos a golpes, otras como crujidos, luego
nifestaciones psicosomáticas de malestar, aunque nadie supo nunca como raspaduras y finalmente como golpes provenientes del techo
identificar las causas. y de las paredes. Como vivimos en una casa aislada, sin vecinos,
Siempre en ese período a mí me aquejaron serios problemas de ruidos que oíamos eran definitivamente extraños. Lo mismo sucedía
salud que culminaron con una cirugía en el intestino, la cual me de­ también en el apartamento que teníamos cerca al mar; muchas veces
bilitó y postró en el plano psicofísico. Finalmente, después de algún nos pasó que al ir allí en invierno cuando el condominio estaba solo,
tiempo, de manera inexplicable y súbita, sin ningún motivo aparente sentíamos durante la noche puertas que golpeaban y pasos apresu­
ni preaviso, a Francesco le comenzaron a doler las piernas; le prac­ rados en las escaleras. Y por la mañana, de nuevo la casa quedaba
ticaron en el plazo de cuatro meses dos intervenciones quirúrgicas, tranquila. Y nos preguntábamos ... "¿Quiénes serán esos maleduca­
cada una de las cuales fueron inútiles según declaraciones de los dos que por la noche hacen ruido y de día se van r:
mismos ortopédicos que aun hoy no nos han aclarado por qué en­ También Francesco a veces instintivamente se sentía incómodo
tonces decidieron operar. Las intervenciones empeoraron la situa­ en casa: se le ponía la piel de gallina al entrar en algunos cuartos de
ción, tanto que Francesco tuvo que recurrir a las muletas para poder ambas casas y también en ocasiones en algunas alcobas. Nos decía­
caminar. A la segunda intervención siguió un examen histológico y mos que eran simples sugestiones, el estrés, el cansancio...
un veredicto que dejaba poco espacio para la alegría: se trataba de un y ni hablar de los olores extraños. Algunas veces, al entrar en un
mal incurable e incapacitante; la única posibilidad de limitar el dolor cuarto percibíamos olores de algo podrido que luego desaparecían
eran los ciclos de terapia con cortisona inyectada directamente en las con la misma rapidez con la que se habían presentado.
articulaciones. De hecho, Francesco a los treinta años arrastraba una
y luego los insectos, principalmente las hormigas, que eran le­
pierna y sus perspectivas no eran para nada favorables.
giones. Miles de hormigas en movimiento o como adormecidas en
Un poco en broma y un poco en serio nos dijimos que, viendo los rincones más impensables de la casa, en los muebles de la alcoba,
las condiciones generales de salud, sólo nos quedaba hacernos ben­ entre las sábanas de los niños, en el cuarto de baño, en el estante de
decir. Dicho y hecho, un día invitamos a nuestra casa al padre Luigi, las ollas en la cocina o en fila en el monitor del computador.
un sacerdote amigo mío desde que era adolescente y que conocía
nuestro infortunio. No se hizo rogar y llegó a nuestra casa equipado Todos estábamos desesperados y al límite de nuestras fuerzas
tanto físicas como psíquicas, hasta el punto que me fui a ver a un
con todo 10 necesario: agua bendita con la que nos bendijo, lo mismo
psicoanalista amigo mío, el cual, además de suministrarme fármacos
que a toda la casa, luego ungió con el óleo de los enfermos las pier­
antidepresivos, hizo que conversara con él cada sábado durante unos
nas que cojeaban. ¡Milagro! ¡Misteriosamente y casi de inmediato
dos años para ayudarme a desenrollar la madeja de una vida, la cual
el mal desapareció completamente y por más o menos una semana
parecía salirse de control cada vez más.
Francesco caminó sin muletas! Luego el dolor volvió a atormentarlo,
pero aun no éramos capaces de comprender las razones. Ni siquiera En aquel período oscuro conocimos por casualidad a Mario, un
el padre Luigi entendió lo extraño de la situación: ¿cómo habría po­ estudioso de medicina natural, psicología y esoterismo que, con
dido desaparecer una enfermedad degenerativa luego de una unción todo desinterés nos ofreció explicaciones alternativas e interesantes
con óleo de los enfermos? respecto a cuanto nos estaba sucediendo. Siguiendo sus consejos,
Siempre en aquel período comencé a percibir en casa un "extraño modificamos nuestra alimentación, desintoxicando el organismo de
aire pesado" cuando ingresaba a determinados cuartos a menudo las toxinas acumuladas con años de fármacos y estrés, realizando al­

14 15
gunos días de ayuno, utilizan~o prod.uctos homeop~ticos ~~ drenaje maL Desde hace algunos años hemos dedicado de manera regular
e infusiones depurativas y aSI obtuvimos un cambIO pOSitIVO en la parte de nuestras ganancias a la beneficencia y adoptamos a distan­
salud de todos nosotros. cia algunos niños. Esta experiencia espiritual intensa nos ha llevado,
Luego, trabajamos a nivel psicológico para eliminar o limitar al­ paradójicamente, a un mayor acercamiento a la religión católica y
gunos miedos profundos que nos maniataban e impedían nuestra a la Iglesia. ¡Los caminos del Señor son en realidad muy variados y
curación o la modificación de nuestras actitudes; se nos explicó que misteriosos!
algunas veces existen motivaciones antagónicas a un nivel incons­ A pesar de que todos estos esfuerzos fueron utilizados en el
ciente que bloquean en nosotros todo proceso de transformación y campo físico, psíquico y espiritual los ruidos, las sensaciones de ma­
que, por tanto, tales motivaciones debían ser removidas, algo que lestar, las percepciones de presencias invisibles que a veces trataban
hicimos mediante sesiones de regresión de la memoria sin hipnosis; de tocarnos, se acrecentaron en vez de disminuir.
emergieron asuntos particulares, de verdad interesantes, relativos a Para completar el cuadro, Eleonora, que en esa época tenía me­
experiencias pasadas, sepultados dentro de nosotros de manera tan nos de nueve años, escuchaba claramente voces y veía presencias que
profunda que no teníamos la más mínima idea de ellos. La raciona­ querían aterrorizar, sentía que la tocaban y declaraba que visuali­
lización de estas experiencias nos hizo bien e incentivó el siguiente zaba un halo alrededor de las personas bajo la forma de una luz más
proceso, el del plano espiritual. En la práctica, trabajamos sobre el o menos desvanecida. La descubrimos porque ella inocentemente
perdón ejercitándolo o tratando de llevarlo a cabo con todas las per­ nos describía a veces los diversos colores que veía, sobre todo alre­
sonas que de alguna manera nos hubieran causado mal y a las que dedor de las personas que no le agradaban o con las que se sentía
nosotros hubiéramos podido causarlo, así fuera de manera acciden­ bien. ¿Estaba loca? Absolutamente no, sólo era especialmente sen­
tal. Utilizamos visualizaciones, invocaciones y oraciones, y en algu­ sible y algo clarividente, una cualidad que poseen muchas personas,
nos casos tuvimos experiencias muy profundas y comprometedoras. en particular los niños pequeños y que está muy bien descrita en
La persona que abrió ante nosotros este camino "espiritual" no centenares de libros de las más diversas procedencias. También yo
lo hizo por algún interés económico o para atraernos a su bando, he tenido siempre un "sexto sentido" que me ha permitido captar
en realidad no pertenece a ninguna secta o grupo y no hace prose­ inmediatamente el positivismo o la negatividad de las personas con
litismo, al contrario, siempre nos dijo que utilizáramos el libre arbi­ las que he tenido que tratar.
trio del que nos dotó Dios para escoger, con una mente serena y un Pero una cosa es la sensibilidad personal más o menos desarro­
corazón abierto, lo que consideráramos fuera la vía más justa hacia llada y no buscada, y otra las diferentes molestias que a través de
el amor con A mayúscula, es decir, el que sea puro y desinteresado. nuestra sensibilidad se hacen aun más evidentes. Nos ha sucedido
En ese período leímos y estudiamos muchos libros de psicología, el ser literalmente "atacados", por turnos, por entes que buscaban,
de espiritualidad cristiana, de esoterismo y profundizamos en las lográndolo en parte, privarnos completamente de toda energía vital,
varias subdivisiones de lo invisible, propuestas por varias escuelas hasta llegar a permanecer totalmente postrados, privados de fuerza
de pensamiento. Descubrimos también que es posible practicar la y vitalidad. Poco a poco aprendimos a protegernos y a no hacer más
magia negra y que los efectos pueden ser en realidad devastadores caso a los simples ruidos y crujidos, incluso porque cuando se les
y aun por este motivo nos alejamos siempre de ella lo más posible. ignora, después desaparecen; además sabemos que la oración ayuda
No nos adherimos a ningún grupo, nunca participamos en sesio­ mucho, por lo que comenzamos a rezar por nosotros y por los de­
nes de espiritismo y jamás se nos pasó por la cabeza actuar para el más. Pero la oración a veces parece producir el efecto opuesto, como

16 17
si estuviéramos "pisándole los callos a alguien" ¡que no se siente real­
mente feliz de que se los pisen! Muchas personas nos han dicho que
G\I'ITl'U) 1
cuanto más uno se esfuerce en elevarse espiritualmente, tanto más
se da cuenta de que alguien trata de tirarte nuevamente hacia abajo, U na difícil toma de conciencia:
de hacerte precipitar en la mediocridad materialista. Aun desde el
de vista psicológico el fenómeno se explica bien y nace de las
el regalo del encuentro
resistencias ejercidas por la mente inconsciente frente a todo cam­ con el padre Graciano
bio que se promueva, mediante el razonamiento, por la mente cons­
ciente, en una palabra, una especie de autosabotaje que hace que el
camino evolutivo sea difícil.
El primero que nos aconsejó que fuéramos a donde un exorcista fue
Entiendo perfectamente este punto de vista porque lo hemos ex­ Mario, nuestro amigo psicólogo. Por entonces no teníamos idea de
perimentado a diario. cómo la Iglesia reglamentaba el exorcismo, al no saber nada sobre
Pero ya todo trabajo psicoespiritual que tratábamos de llevar a autorizaciones, sacramentales, grupos de oración por la liberación,
cabo sobre nosotros mismos era completamente inútil y nos encon­ religiosos que recibían personas y bendecían "a escondidas': cómo
trábamos en un punto muerto; había llegado el momento de buscar actuaban los exorcistas de nuestra diócesis de Megalópolis ... , es de­
ayuda en otra parte, para tratar de salir de una situación que defini­ cir, no sabíamos absolutamente nada.
tivamente estaba en el límite de lo soportable ... En primer lugar nos acercamos a fray Antonio, un capuchino
santo y sabio, ya sin fuerzas, que se limitó a una rápida oración en
latín pronunciada en la sacristía.
Él nos dirigió al padre Bruno, un sacerdote que presidía un grupo
de oración del Padre Pío y que realizaba bendiciones personales para
la curación. De él, luego de una conversación, tuvimos la primera
bendición verdadera de la casa y el consejo de emplear agua y sal
bendecidas y exorcizadas. El padre Bruno fue alguien muy tranqui­
lizador, nos dijo que todo estaría bien y que no tendríamos más pro­
blemas.
Pero nuestras dificultades físicas continuaron, el niúo había co­
menzado a sufrir dolores sumamente fuertes en las piernas, que no
tenían explicación médica ninguna y los ruidos en casa en realidad
se acrecentaron ... , pero, aún no conocíamos el alcance real de la si­
tuación.
Pasados algunos meses, cada vez más desesperados y desorienta­
dos, fuimos a donde Bruno, un conocido que sabíamos pertenecía a
un grupo de oración, que en el pasado nos había contado que había

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sufrido una experiencia bastante tremenda. Al charlar sobre esto y y que JO desarmaba a uno; sin embargo, se mostraba firme
aquello comenzamos a hablar de nuestra situación y él, con cuando hacía preguntas y deseaba obtener respuestas precisas.
franqueza, nos contó su terrible historia, hecho que resulta de una
Durante el viaje, entre un chiste y un canto gregoriano, Lucia lo­
maldición con su consiguiente "maleficio mortal': Incluso, nos contó
gró contarle desde el principio hasta el final todas nuestras vicisitu­
lo que extrajo de su almohada una carismática...
des familiares. padre Graciano vino a donde nosotros a darle una
nos caído directamente en el Medio­ bendición completa a la casa y para una primera plegaria de libera­
evo porque siempre habíamos considerado estas cosas como fanta­ ción a finales de octubre del 2006, la cual, supimos después, fue su
sías, pero ¿por qué habría de mentirnos? ¿Por qué no escucharlo? única salida del año y la última de su vida. Asperjó con agua bendita
teníamos ningún motivo para no creerle! exorcizada todos los cuartos y rincones de nuestra casa salmodiando
Este vecino nos aconsejó que nos dirigiéramos inmediatamente de memoria extrañas oraciones en latín y quemando incienso ben­
a un sacerdote calificado, pero nos informó al mismo tiempo de1la­ decido con hojas de olivo del Domingo de Ramos; además, dejó en
mentable estado de indiferencia y hasta de burla por el cual él había cada habitación una vela encendida con la orden de dejarla arder sin
pasado al acudir a varios sacerdotes hasta que encontró a un fraile apagarla hasta que se extinguiera. Luego realizó sobre cada uno de
capuchino de nombre Graciano que había sido transferido desde ha­ nosotros una larga bendición, durante la cual Lucia sintió una rara
cía algún tiempo a un monasterio que distaba cien kilómetros desde opresión en el estómago y en los pulmones que casi no la dejaba res­
donde vivíamos. Gracias a su ayuda la situación definitivamente ha­ pirar: ¿una simple sugestión?
bía mejorado, pero el de los males espirituales es un camino difícil El padre Graciano nos explicó que en adelante
del cual nunca se ha curado segura y definitivamente y él, con el paso zar algunas sustancias benditas y exorcizadas, llamadas sacramenta­
de los años, seguía viviendo diversas dificultades. Nos aconsejó tam­ les, que podrían ser útiles para ayudarnos a combatir al "enemigo", y
bién contactar a fray Paolo, un joven franciscano de un monasterio con tal fin bendijo y exorcizó con oraciones siempre en latín, todo el
cercano que él sabía era sensible a estos temas. aceite, la sal y el agua que teníamos en casa y que íbamos a emplear
El mismo día nos pusimos en contacto tanto con el padre Paolo en la cocina, lo mismo que velas e incienso que habríamos de que­
como con el padre Graciano; el primero nos escuchó brevemente y mar en abundancia en casa cada vez que sintiéramos la necesidad;
nos ofreció una cita para un mes después a fin de profundizar me­ bendijo también los automóviles, los teléfonos, el computador, la cal­
jor. El segundo, en cambio, luego de una larga conversación telefó­ dera de calefacción y las entradas del acueducto y de la electricidad.
nica, se puso de inmediato a nuestra disposición para venir a nuestra Nos informó acerca de la necesidad de una protección adecuada
casa al día siguiente, a pesar de su edad y de que su salud estuviera mediante una intensa vida espiritual compuesta de confesiones fre­
seriamente afectada a causa de un tumor en el páncreas y de que cuentes, misa diaria con Eucaristía y, finalmente, recitación diaria
su monasterio quedara a una hora y media de donde vivíamos. En del Rosario.
cuanto subió a nuestro carro, en el trayecto a nuestra casa nos dimos
El encuentro con el padre Graciano nos transformó inicialmente
cuenta de que el padre Graciano era un hombre excepcional, aunque
un poco, pero fue en verdad un gran regalo porque al dirigirse a
debilitado en lo físico pero con unos ojos de un azul claro y límpido
nosotros fue muy contundente: todos los problemas de salud no re­
que radiografiaban el alma, miraban de manera directa y receptiva,
sueltos por los médicos, los ruidos, los malos olores de la casa, los
con un rostro que ofrecía una sonrisa abierta y entusiasmante, casi
impedimentos para el trabajo y las otras manifestaciones tenían su

20 2
explicación en una acción del demonio fuera de lo ordinario, pro­ golpeaban a nuestra familia eran atribuidas a una "vejación diabó­
bablemente a causa de la intervención de alguna persona malévola, : que los repentinos pensamientos destructores y pesimistas que
toda vez que de parte nuestra no habíamos tenido contactos volun­ de vez en cuando invadían a Francesco y de los cuales no lograba
tarios con el mundo de la magia. Él había enfrentado centenares de liberarse y que luego desaparecían con la misma rapidez con la que
casoS semejantes, no estábamos locos, ya no debíamos andar a tien­ habían llegado eran llamados "obsesión diabólica", y que, finalmente,
tas sin saber a dónde dirigirnos, no debíamos tener miedo porque en casos extremos se podía perder completamente el control de las
ahora que conocíamos la naturaleza del mal podíamos comenzar la propias acciones y entonces se estaba en presencia de una "posesión
curación. diabólica: Afortunadamente este último síntoma no nos pertenecía
En el viaje de regreso, mientras lo volvíamos a acompañar hacia o al menos así lo creíamos entonces.
su monasterio, al pasar frente a algunas casas que estaban a lo largo Después de la bendición de la casa por el padre Graciano, la si­
de la calle enviaba una bendición acompañada de una leve señal de tuación en nuestro hogar en realidad no mejoró. Al siguiente día,
la cruz, eran todos amigos o conocidos, a menudo personas necesi­ Lucia tuvo un leve accidente en el automóvil, nada grave, gracias a
tadas como nosotros. Dios, pero fue la confirmación de que estábamos en el buen camino.
Nos explicó que las personas molestadas por los "espíritus malig­ ¡El padre Graciano nos lo había advertido! La situación inicialmente
nos" eran muchas, más de las que se creía y que él, en el confesiona­ empeoraría, los ruidos en la casa se multiplicarían y las molestias
las había tenido de toda clase. En el pasado, cuando la salud y físicas se acentuarían, ¡pero era la señal de que las oraciones moles­
los superiores se 10 permitían, había intervenido con frecuencia para taban a quien nos estaba fastidiando!
"bendecir" habitaciones y lugares de trabajo donde sucedían cosas A propósito de oraciones, a pesar de la enorme dificultad para
raras, y aun había presenciado casos verdaderamente únicos como lograr conciliar con el trabajo y la familia, la misa diaria, el Rosario
invasiones de saltamontes que habían aparecido de la nada, conatos vespertino y la confesión frecuente, comenzamos inmediatamente a
de incendios sin que nadie hubiera encendido ni siquiera un fósforo, poner en orden nuestras ideas y nos dimos cuenta de que valía la
obras en construcción en las que cada día sucedía un accidente pena comprometerse en primera persona, además era un acto de
rente, y casi siempre con una buena bendición, a veces repetida un corrección y coherencia tanto hacia nosotros mismos como frente a
par de veces, esas molestias habían terminado. quien nos estaba ayudando; en una palabra, nunca pensamos dejar
Francamente no sabíamos si estábamos más atemorizados o más de responsabilizarnos, no depender exclusivamente de los sacerdotes.
bien tranquilizados, pero la bondad y la serena determinación del Mientras tanto llegó el día de la cita con el padre Paolo, quien
padre Graciano eran contagiosas y al final nos despedimos con ale­ recibió a Francesco en un cuarto estrecho del convento. Luego de
gría y con una carga de energía a cuestas. ber escuchado atentamente nuestra historia prometió tratar de venir
El último consejo fue el de conocer mejor lo que estábamos a nuestra casa y que también celebraría allí la misa que siempre so­
afrontando y que para tal fin deberíamos conseguir algunos libros y lía ser de extraordinaria eficacia en situaciones semejantes. El padre
leerlos con atención, en primer lugar los del padre Gabriele Amorth Paolo fue de gran ayuda para nosotros en los meses siguientes, pero
y los de monseñor Andrea Gemma. de él hablaremos más adelante.

Supimos así que los hechos extraños que ocurrían en nuestra casa El padre Graciano tenía mucha confianza en las indicaciones de
se encontraban relatados en una amplia bibliografía y que eran un carismático llamado César, porque con el tiempo había expe­
mados "infestaciones diabólicas': que todas las molestias físicas que rimentado su veracidad y después de algunos días de su visita nos

22 23
dirigió a él para que le pidiéramos indicaciones acerca de nuestra
situación real. Llamamos a César por teléfono y luego de haber es­ GWITULO II
cuchado brevemente nuestra historia, nos pidió nuestros nombres
y un par de días para hacer unas comprobaciones, luego de lo cual La difícil búsqueda

nos llamó a su casa y entregó unas hojas para cada miembro de la


familia, las cuales contenían una larga serie de indicaciones sobre el
de un exorcista autorizado

estado de la salud física, psíquica y espiritual. Todo absolutamente


gratis: no quiso aceptar ni siquiera una ofrenda voluntaria nuestra.
Respecto a las partes psicofísicas había acertado con increíble
precisión en las problemáticas cada uno de nosotros, sobre las ¿Por qué a nosotros? ¿Por qué precisamente a nosotros? ¿Qué mal
no le habíamos comentado absolutamente nada, y además hemos hecho? ¿A quién molestamos tanto para que desencadenára­
añadió informaciones que después vimos eran exactas; en cambio, mos un mecanismo perverso semejante? Estas preguntas se presen­
en lo referente a la parte espiritual, nos dijo que mostráramos las taban continuamente en nuestras mentes turbadas, pero la respuesta
hojas al padre Graciano, quien luego de haberlas examinado atenta­ no llegaba. Si la hubiéramos tenido antes, si sólo la hubiéramos
mente nos dio una sola indicación: "Deben buscar a un exorcista au­ imaginado, ciertamente habríamos podido enfrentar el mal desde
torizado porque necesitan un exorcismo mayor; lo que pueda hacer entonces, evitando que hubiera tenido el tiempo de radicarse tan
yo por ustedes no es suficiente". profundamente y nos habríamos ahorrado montones de
inútiles, intervenciones quirúrgicas e impedimentos que
Así descubrimos que el padre Graciano nos había impartido ora­
zaron cada aspecto de nuestra vida ...
ciones de liberación, llamadas exorcismos menores, que cualquier
sacerdote de buena voluntad puede recitar y que son eficaces en la Pero evidentemente ¡el plan de Dios nos reservaba muchas otras
mayor parte de los casos, pero que nosotros necesitábamos un ver­ experiencias!
dadero exorcismo solemne que sólo un obispo o un sacerdote auto­ Así, tras una y otra pregunta, después de una lectura y de una
rizado por él podía administrar. reflexión, nos dirigimos a nuestra diócesis donde, después de una
Luego de unas semanas de esta conversación el tumor tomó ven­ búsqueda persistente para encontrar sacerdotes autorizados en exor­
taja y el padre Graciano volvió a Dios. cismo, entramos en contacto con el padre Lorenzo, exorcista oficial,
que de manera increíble nos dio una cita para el día siguiente. Estuvi­
mos reunidos un par de horas durante las cuales, luego de habernos
permitido brevemente entrar en materia, habló casi sin interrupción
de psicología y psiquiatría dejándonos de verdad perplejos. A duras
penas admitió que el diablo existe, ya que el evangelio fue escrito en
un lenguaje arcaico adecuado a la época y por tanto las referencias al
diablo no serían más que metáforas; además, la oración asidua y re­
petida que nos había aconsejado el padre Graciano corría el peligro
de ser una pura repetición ordinaria y por consiguiente inútil, incluso
causa de irresponsabilidad; la misa diaria una pérdida de tiempo y

24 25
valga lo mismo para otros asuntos doctrinales y psicológicos. "La co­ época"? ¿Quieres ver que al padre Amorth " y monseñor Gemma,
ronilla de los 100 réquiem", una larga oración dedicada a los difuntos de quienes ya leímos los libros, son en verdad terroristas que "llenan
que recitábamos de vez en cuando, era una pérdida de tiempo y era de fantasías las cabezas de las personas': como lo afirmó de manera
inútil recitar 5 Avemarías cuando bastaba con una sola bien dicha. perentoria el padre Lorenzo? Si Jesús dijo: "Vayan, curen, prediquen,
Lo mismo hay que decir de la corona del Rosario que contempla 50 arrojen los demonios en mi nombre", ¿por qué una buena parte de
Avemarías, 5 Padrenuestros y 5 Glorias eran como trastos viejos que los ministros de Dios predica, se ocupa de asilos y oratorios, de reco­
había que evitar. Pero la gota que desbordó el vaso fue la declaración lección de fondos, de embellecer las iglesias, de política, e ignora casi
de que los exorcistas de Megalópolis (que son numerosos porque la por completo el "curen" y "arrojen los demonios"? ¿Tal vez habría
diócesis es bastante amplia) tienen un encuentro anual y, durante que "considerar buena" la Sagrada Escritura sólo en algunas partes?
la última reunión, se dijo que ninguno de ellos en toda su carrera, En nuestra muy avanzada y muy racionalista civilización estamos
había estado alguna vez en contacto con una posesión demoníaca bastante acostumbrados a considerar ciertos acontecimientos de la
acertada: ¡sólo un caso dudoso! El demonio existía, pero venía a mo­ vida simplemente como "afortunadas casualidades" y otros como
lestar a los santos y en realidad nosotros no podíamos ser conside­ "mala suerte':
rados como tales. ¡El nuestro era un pecado de soberbia! En todos
los demás casos se trataba de problemas psiquiátricos, de personali­ Normalmente, el único encuentro con el mundo espiritual es el
dades inestables, de fantasías injustificables, de mistificaciones. Nos de la misa del domingo, suponiendo que vayamos, que sepamos por
despidió después de una fugaz Avemaría entre dientes y una breve qué vamos y que estemos atentos a lo que sucede a nuestro alrede­
bendición con el aspersorio seco porque no tenía agua bendita. dor, es decir, que seamos conscientes de lo que estamos haciendo.
Para otros, el encuentro con lo preternatural sucede mediante sesio­
Salimos de semejante conversación mudos, confundidos, pero hes espiritistas, magos, cartománticos y astrólogos. Pero está ausente
también enojados y resueltos. Aun no sabíamos que el padre Lo­
renzo sería sólo el primero de una larga serie de sacerdotes incré­
de la gran mayoría de nosotros la conciencia de los planos invisibles,
1> sin embargo, buena parte de nuestra vida se desarrolla en los ám­
dulos y temerosos, empeñados en racionalizar y en materializar la bitos espiritual, mental y emocional, que son, precisamente, com­
relación con Dios, de tal manera que terminaban con banalízarla, pletamente invisibles, pero no por eso menos reales. Las emociones
con tal de purificarla de todo posible vínculo y contraposición con y los pensamientos no se ven, no se pesan ni se miden, pero a pesar
el reino del maL de esto ninguno de nosotros puede afirmar que no existen y que no
Pero dado que "los molinos del Señor muelen lentamente ... pero están en capacidad de influenciar tanto a nuestro comportamiento
hasta el último granito': sólo nos queda confiar a la piedad divina a como el de las personas cercanas a nosotros. Estos planos invisibles
estos personajes, ya que deberán dar cuenta algún día de su indolen­ poseen sus propias frecuencias, sus propios espacios y leyes, el único
cia, indiferencia y crueldad para con los pacientes que les han sido límite está en que nuestros conocimientos científicos actuales no se
confiados. ~n(:uentran aún en grado de relacionarse con ellos y de medirlos o
En nuestra cabeza giraban pensamientos encontrados. ¿Quieres ~pminarlos como lo hacemos habitualmente con las ondas radiales,
ver que lo que está escrito en el evangelio no se debe tomar literal­ la electricidad, los rayos X, los infrarrojos y ultravioletas que tam­
mente, sino que es sólo para "hacerse comprender de la gente de la bién son invisibles y, sin embargo, muy reales para nosotros. De lo

,< AMORTH, Gabriel. que el mal. San Pablo, Bogotá, 2010.

26 27
cual se deduce que no tenemos generalmente ningún conocimiento domicilio aunque pensaban que se hallaría en la región. Después de
de cómo nuestras acciones y nuestros pensamientos puedan influir innumerables llamadas telefónicas a las parroquias de Molise, un pá­
en nuestra vida y en la de los demás y, por tanto, subestimamos los rroco de la provincia, luego de haber escuchado nuestras oportunas
riesgos derivados del odio, de la calumnia, del rencor y del expo­ explicaciones, nos dio un número de teléfono despidiéndose con sus
nerse a ritos ya encuentros mágicos. Tenemos en general una rela­ deseos-promesa: "¡Que Dios les ayude!". Y así fue, Dios nos ayudó y
ción vaga con la religión y con los religiosos que, por otra parte, a esa misma tarde hablamos por primera vez con el padre Andrea, el
veces están tan empeñados en administrar el mundo material que cura de la parroquia que hospedaba a monseñor Gemma, quien nos
llegan a descuidar el espiritual, el cual más bien debería ser su ám­ tranquilizó: "No están locos, han terminado de buscar, los pondré en
bito de gestión primario. En cambio, quien practica la magia negra contacto con el obispo".
conoce bastante bien estos planos invisibles, junto con las leyes que Así, luego de algunas conversaciones por teléfono y el envío de
los regulan, porque es precisamente a través de estos planos como una carta que relataba los hechos principales de nuestra historia, el
ejercen sus maleficios. 21 de diciembre del 2006 logramos finalmente una cita para encon­
A menudo la ambición desenfrenada y el egoísmo nos conducen trarnos con el único obispo exorcista italiano y así comenzó nuestro
a caminos equivocados, peligrosos y de gran daño para nosotros y primer viaje de la esperanza.
los demás. Cuánta gente acude a los magos y adivinos para prever y
enderezar el éxito de un negocio, para perjudicar deliberadamente
a un competidor o para atraer a sí a una persona, ignorando, sin
embargo, el valor benéfico y la fuerza de la oración y de la confianza.
También se subvalora la importancia de los sacramentos porque no
se llega a comprender su significado real y naturalmente se ridiculi­
zan los evangelios allí donde se haga referencia al diablo o al maligno
porque son cosas de otras épocas.
No, no podíamos liquidar la paternal seudopsiquiatría del padre
Lorenzo con un simple movimiento de hombros, no podíamos fingir
no vivir lo que estábamos viviendo, sólo para no pasar por locos, no
podíamos ignorar las autorizadas y razonadas argumentaciones que
habíamos leído en los libros, y tampoco el consejo del padre Paolo,
quien, mientras tanto, había venido a celebrar una misa en nuestra
casa y a repetir la bendición completa a los espacios y a nosotros.
Así que nos pusimos en contacto telefónico con el padre Amorth
quien, sin embargo, fue enfático: "Lo siento, tengo demasiado trabajo,
no puedo recibir personas fuera de Roma, ¡diríjanse a su diócesis!".
Entonces comenzamos la búsqueda de la dirección de monse­
ñor Gemma, que por entonces acababa de pensionarse. No fue fá­
cil, porque en su antigua diócesis nos dijeron no conocer su nuevo

28 29

mo s con aquellos desesperados que dejan atrás su pasado para aven­


turarse hacia un futuro desconocido, pero lleno de promesas ...
G\PITULO III
Nos fuimos esperanzados, pero también ansiosos: ¿qué nos dirá?
El encuentro con monseñor Gemma ¿Qué sucederá?
Estábamos algo atemorizados: ¿se nos considerará realmente
locoS?
Partimos más bien enfadados: ¿cómo era posible que tuviéra­
mos que hacer semejante trayecto para encontrar ayuda sólo porque
quien debería haberla ofrecido y que estaba cerca de nuestra casa no
El despertador debía sonar a las seis de la mañana, pero a esa hora lo consideró necesario? ¿Pero cuánta gente conocemos que haya re­
mi esposo y yo ya estábamos despiertos; los niños dormían en el piso corrido 2.000 kilómetros en un día para ir a donde un obispo a con­
superior y allí subió después una amiga cercana que los despertó tarle sus problemas? Cuando el avión aterrizó en la suave mañana
para llevarlos a la escuela y cuidarlos el resto del día. Nuestro pro­ romana todas las dudas desaparecieron, como la neblina matutina
grama era realmente denso; salida del avión hacia Roma a las 8:10 apenas salen los primeros rayos del sol.
a.m., alquiler de un carro y otros 180 kilómetros para llegar a Carpi­
Mientras el automóvil subía por las estrechas callejuelas del pue­
none, el pueblecito perdido del Molise donde nos esperaba monse­
blecito de Carpinone en la provincia de Isernia, teniendo a nuestras
ñor Gemma a eso de las 11:30 a.m., finalmente, regreso a Roma en la
espaldas los contrafuertes ya nevados de las altas montañas donde
tarde y nuevo avión a eso de las 10:00 p.m., para volver a casa.
tantos esquiadores dentro de pocos días se divertirían, nos encon­
Nuestro automóvil se desplazaba veloz por las carreteras semi­ tramos sumergidos en un ambiente rural de antigua belleza formado
desiertas en una mañana fría y cubierta de escarcha, pero nuestros por casas donde se mezclaban la madera, la piedra y la cal con estre­
corazones se sentían calurosos y llenos de esperanza. Durante el tra­ chos senderos arreglados, olor a leña que salía de las estufas, aromas
yecto que separaba nuestra casa del aeropuerto tuvimos apenas el de cocina dominados por el infaltable sofrito de cebolla y ajo, de la
tiempo de recitar una corona del Rosario, sin ocuparnos mucho de carne que se cocinaba lentamente en las ollas de barro junto con la
la vida que nos rodeaba y que aumentaba de intensidad a medida Salsa de tomate ...
que las primeras luces se asomaban para iluminar la nueva jornada.
Luego de unos 45 minutos desde la salida estábamos ya en fila para El último trecho de calle para llegar a donde monseñor Gemma
el check in. podía hacerse sólo a pie y estaba formado por una subida de amplias
gradas que avanzaban por entre los altos muros de piedra de las ca­
Cuando el avión despegó de la pista pensamos en todas las veces sas del centro histórico. Apenas llegamos a la cima de la escalera,
que, por trabajo o vacaciones, habíamos tomado un avión, cientos apareció un gran patio, que sólo poco después nos dimos cuenta de
de vuelos a destinos cercanos o lejanos, pero nunca como esa vez que era una pequeña plazoleta frente a la bellísima Catedral de Santa
éramos conscientes de estar a punto de iniciar un viaje en verdad es­ María de la Gracia.
pecial, un viaje del que esperábamos mucho aunque no tuviéramos
idea de lo que íbamos a encontrar, yen ese momento comprendimos Un poco más adelante nos saludaba un joven sacerdote con so­
~ana negra; era el padre Andrea, el párroco que hospedaba a monse­
el verdadero significado del "viaje de la esperanza" y nos identifica­
ñor Gemma desde cuando se había pensionado.

31
.,.,.,..

Pidió que entráramos en un amplio salón en el que había divanes y que él, esa mañana, había querido "conocer el terreno" sin exten­
y poltronas de piel, una mesa con sillas de madera maciza y un escri­ derse más allá.
torio lleno de documentos detrás del cual estaba sentado monseñor Durante las vacaciones de Navidad volvimos con los niños a
Gemma. Como nunca nos habíamos encontrado con un obispo, ni donde monseñor Gemma; de nuevo oramos juntos, impuso las ma­
siquiera se nos pasó por la cabeza besarle el anillo o llamarlo exce­ nos también a nuestros hijos y una vez más nos animó y nos dio
lencia, y a decir verdad, su sonrisa cordial y su vestidura sacerdotal
seguridad. No hubo ninguna reacción por parte de nosotros excepto
informal, dominada sólo por una cruz grande de bronce que caía so­
un sentido de opresión en la garganta de Lucia y de extrañas con­
bre el pecho sostenida por una cadena de eslabones delgados, infun­
tracciones intestinales en Francesco. Pero nos dijimos que también
dían instintivamente seguridad y sentido de confianza, exactamente
podrían haber sido fenómenos psicosomáticos debido a la autosu­
lo opuesto a un ceño fruncido autoritario que podríamos haber es­
perado. Nos hizo sentar en un gran diván de cuero marrón y él tomó gestión.
asiento en una poltrona al lado de nosotros, examinándonos aten­ Durante varios meses nos contactamos telefónicamente con mon­
tamente a través de los anteojos de lentes oscuros. Nos explicó que señor Gemma, en los cuales tuvimos ocasión de hablar largamente;
estaba un poco indispuesto a causa de una reciente intervención en no sólo lo llamábamos en los momentos de crisis, sino también en
los ojos, pero luego nos preguntó y escuchó con atención mientras otras ocasiones. Nació una relación de afecto que iba más allá de
acariciaba rítmicamente el gran crucifijo que llevaba al cuello. Miró la necesidad de bendiciones que, sin embargo, nos las otorgaba en
atentamente las fotografías de nuestra casa y de nuestros niños, nos abundancia. En una palabra, la nuestra era más una relación con un
dijo que lo que sucedía en la casa era probablemente la consecuencia padre atento que reprende a sus hijos cuando es necesario, pero que
de algo que se nos había hecho, lo cual explicaba las muchas tribula­ ayuda y aconseja con sabiduría.
ciones inexplicables en el plano físico. Lo que nos dejaba asombrados de monseñor Gemma era la ex­
Nos exhortó a la oración, nos dijo que deseaba ver a nuestros ni­ traordinaria memoria con la que recordaba todos los aspectos de
ños, nos aconsejó, a causa del tratamiento recibido, no acudir a los nuestra historia y luego la inmensa fe que lo sostenía y la fuerza
exorcistas de la diócesis de Megalópolis y nos prometió su ayuda. con la que oraba. Muchas veces fuimos testigos de la eficacia de su
Oramos juntos, luego impuso a cada uno por separado sus manos oración. Cuando en momentos particularmente difíciles nos dijo:
sobre nuestras cabezas y recitó una breve oración en latín. ¡No su­ "Oraré por ustedes': siempre obtuvimos cambios palpables, como
cedió absolutamente nada! Nos despidió con su bendición y con las inyecciones de una gracia divina revitalizadora. Y además, su deseo
palabras: "¡No tengan miedo; vencimos ya!': ¡Satanás es un perdedor de comprender, su disponibilidad a escuchar.
frente a Cristo! Estoy con ustedes, oraré por ustedes todos los días. Fue a raíz de las conversaciones con él cuando decidimos escribir
Ya no están solos. Tengan fe. Si tienen alguna dificultad o se sienten este libro, para presentar el testimonio de dos personas laicas que
malllámenme, estoy a su lado".
"no hubieran imaginado nunca que existieran ciertas cosas': Y es
Estábamos algo desconcertados, habríamos esperado un exor­ justo en cambio que la gente esté informada.
cismo completo, habíamos leído que duraba unos veinte minutos, en Decidimos que una parte del libro estaría dedicada a recoger tes­
cambio nada, ¿ 1.800 kilómetros para venir a recibir una "simple ben­ timonios directos mediante entrevistas a sacerdotes que practicaban
dición" y tener una conversación de más o menos media hora? Sólo oraciones de liberación o exorcismos, mientras otra contendría el
más tarde supimos que entre las técnicas de monseñor Gemma está relato de nuestra historia, cuyo desarrollo no podíamos imaginar
la de impartir órdenes perentorias al demonio utilizando la mente por entonces.

32 33
IIIIIP"

Aprovechando la estadía temporal de monseiior Gemma en una


comunidad religiosa relativamente cerca de nuestra casa, pensamos
comenzar a entrevistarlo. El día anterior, por un largo rato, Lucia es­ GWITU.o IV
tuvo mal durante la noche: dolores muy fuertes que desde la espalda Entrevista a monseñor Gemma
se propagaban hasta las piernas y los brazos, un extraño ardor en la
piel de las extremidades que "se desplazaba" de una a otra parte, difi­
cultad al respirar, imposibilidad de ponerse de pie. No había manera
de aliviar los síntomas ni siquiera con agua bendita.
Por consiguiente, Francesco fue a encontrarse con él, mientras
para Lucia comenzó un largo tratamiento médico, una serie de aná­ ¿Cuándo comenzó a practicar el ministerio del exorcismo?
lisis clínicos que no dieron ningún resultado: "¡Señora, usted está tan
sana como un pez, sus exámenes son normales!': Pero sólo podía po­ En 1992, después de un año de episcopado, debo decirlo delante
nerse de pie con dificultad, cada día, durante dos semanas le fueron de Dios: tuve una especie de iluminación. Me encontraba en la ba­
dados calmantes vía intravenosa y perdió peso de manera dramática sílica de San Pedro en Roma y celebraba la misa Juan Pablo 11; me
hasta llegar a cuarenta y tres kilos. Su recuperación fue lenta y impresionaron mucho las palabras del evangelio que se leía ese día,
pero no dejamos de lado ni la oración ni la esperanza. Era el enésimo en particular "las puertas del infierno no prevalecerán" (Mt 16, 18).
e inexplicable malestar físico, sucedido, iY fíjese usted!, precisamente Me sentí entusiasmado y me dije: "Ya soy obispo y, por tanto, es­
en vísperas de la entrevista a monseñor Gemma, con la que de hecho toyen el poder pleno que Jesús dio a su Iglesia; me dedicaré a fondo
estaba por iniciarse este libro: de esto hablamos esa tarde. ~ este ministerio". Allí comenzó todo. Luego volví a casa y escribí mi
~rta pastoral número 14, en la que, luego de haber tomado algunos
pasajes del evangelio, exhortaba a los sacerdotes y a los otros obispos
j:\ escuchar a las personas necesitadas para evitar que se dirigieran a
los agentes de lo oculto que no sólo no mejoran la situación, sino
la empeoran terriblemente.
.. El que vaya a estos hechiceros tal vez en un primer momento ad­
vierta un ligero mejoramiento, de liberación, pero luego es un desas­
tre. Y puedo asegurar que el 99.9% de quienes han venido a mí han
tenido contacto con tales personas; si no directamente, a través de
sus parientes o antepasados.

y usted, ¿cómo aprendió a intervenir?

No "aprendí': me valí del ritual latino yen los primeros tiempos lo


leía, luego lo aprendí de memoria. Aun ahora uso esas oraciones y he
eXperimentado su gran eficacia. En verdad he comprobado el poder
de la Iglesia de dominar al maligno.

34 35

I
Como obispo, me dije: "El exorcismo es una oración': y así me salvación!': Y yo respondí: "Porque ustedes son espíritus purísimos.
dediqué a orar intensamente, con fe, con fuerza, con una plegaria Estuvieron dotados de una fuerza grandísima, no tenían la debilidad
que invoca toda la potencia de Dios y de la Iglesia. De manera que de nosotros los pobres mortales, y, sin embargo, escogieron el mal':
exorcizar es una práctica que me fortalece porque vivo en plenitud la
grandeza del Omnipotente. Puedo afirmar que el demonio siente estos celos y este odio gra­
y visceral frente a nosotros los hombres, porque nosotros po­
demos convertirnos y él no.
Por tanto, sin querer levantar polémicas estériles sobre los rituales
antiguos de los exorcismos en vez de los modernos, ¿podemos decir
con certeza que la Iglesia puede actuar contra el maligno? ¿Pero tiene usted el apoyo de sus cohermanos y de los demás
obispos?
Claro que sí. Sin embargo, tengo que decir que los hombres de
No. Muchos en la Iglesia no ven bien que se hable de estos temas.
Iglesia se han cuidado de quitar un poco de aquí y de allí las refe­
Pareciera que no comprenden el Evangelio. Para mí es una apostasía.
rencias de la actuación del maligno. Nunca he entendido el porqué.
Ciertamente, el silencio de los sacerdotes es una victoria del
¿Por qué usted es el único obispo que practica el exorcismo?
mundo oscuro.
Yo también me lo pregunto, pero no he podido encontrar una
Aproximadamente, ¿cuántas personas han acudido a usted en respuesta. Tal vez les dé miedo, piensan en los castigos y las vengan­
estos años? zas. Alguna vez un obispo me dijo que era una pérdida de tiempo,
que él prefería dedicarse a los sacerdotes y dejar a los demás la prác­
Muchísimas; vienen de todas partes. Y yo nunca he rechazado tica del exorcismo.
a nadie porque ése es mi ministerio. A veces me siento en realidad
agotado. Hay alguien que supo mi número telefónico y me llama
¿Así que las mayores dificultades que usted ha encontrado pro­
cada día, porque sin bendiciones sufre demasiado. Hasta he acon­
vienen más de los hombres de Dios que de la acción del demonio
sejado a quien viene de lejos que pida la bendición a su sacerdote;
mismo?
aunque no sea exorcista, la bendición es siempre importante; pues
bien, hay sacerdotes que rehúsan bendecir a quien se lo pide. ¡Quién Exactamente.
sabe por qué!
Paradójicamente, ¿podríamos afirmar que el ostracismo de una
¿Cómo ha cambiado su vida al dedicarse a este ministerio? cierta parte de la Iglesia sea obra de Satanás?
Seguramente ha reforzado mi fe. Me ha ayudado muchísimo y Claro que sÍ. Él me dijo: "Si todos los obispos obraran como us­
ha sido un "tratamiento" continuo de ejercicios espirituales, porque ted, nosotros ya estaríamos derrotados, deberíamos escapar': Creo
ciertas verdades han llegado a ser mucho más claras. que, en vez de tantas conferencias y celebraciones, nosotros los obis­
Tuve el caso de una poseída que rompió en llanto y el espíritu que pos deberíamos hacer esta labor.
estaba en ella me dijo: "¿Por qué usted se puede arrepentir y nosotros Por ejemplo, el año pasado fui a Lourdes con un grupo en el que
no? Usted puede ir al paraíso en cambio para nosotros iya no hay se hallaban algunas pobres personas que se encontraban en un grave

36
37
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Aun a esta pregunta yo no sabría dar una respuesta racional. Son


estado de sufrimiento. Teníamos la capilla para la misa de la tard~:
Mientras me preparaba, leí un aviso que decía: "En esta capilla no s~ reacciones instintivas, emotivas, que no tienen justificación alguna
hacen oraciones de liberación': Después, esa misma tarde encontre racional y, aun, menos teológica. Según el nuevo ritual, para poder
por casualidad a la persona que había puesto ese anuncio para la len­ proceder se necesita la certeza de la acción extraordinaria; ¿pero
gua italiana; así que le miré a los ojos y le pregunté: "¿Pero el Padre­ cómo puedo yo juzgar con certeza si antes no comienzo mi oración?
nuestro es o no una plegaria de liberación?': No decía nada, y El demonio es astuto y trata de esconderse. A menudo, para sacarlo de
de repetírselo varias veces me respondió que sí; entonces le dije su escondite hay que acudir al poder de Dios mediante el exorcismo,
tuviera cuidado con poner ciertos avisos en las capillas. Y al1adí: "Y al que él no puede resistir. De tal manera que el exorcismo es una
dele gracias a Dios de que no le haga un exorcismo ahora, ¡si no us­ práctica curativa y que sirve para identificar la acción del maligno.
ted caería al suelo!': Imagínese cuál sería su expresión. La verdad es
que existe la preocupación frente al rumor de que estos pobres están ¿Por qué el exorcismo del papa León XIII rara vez se recita?
obligados a hacer lo que hacen a pesar de su disgusto.
Porque la gente no lo conoce. Tampoco es conocida la oración a
san Miguel Arcángel que es tan eficaz. Creo que si el papa León tuvo
¿Pero usted no tiene miedo?
la iluminación de introducir estas oraciones en la liturgia y precisa­
No. Fuera de un poco de ansiedad cuando comencé; a veces estoy mente al final de la santa misa tenía sus buenos motivos, de modo
cansado físicamente, pero lleno de fervor espiritual. que no entiendo por qué hayan sido eliminadas.
Nosotros los cristianos somos definidos también como comuni­
¿Hay en realidad mucha diferencia entre un sacerdote que ha sido dad sacerdotal (lP 2,9), por tanto, ¿cada uno de nosotros en virtud
nombrado como exorcista y un obispo, o entre un obispo y un sa­ del bautismo recibido y de la fe podría efectuar un exorcismo pri­
cerdote común y corriente? vado en su familia en caso de necesidad?
Sí, hay alguna diferencia. También cuenta mucho la "santidad" Claro que sí y además lo aconsejo: "En virtud de mi bautismo, te
del ministro; incluso nos lo dice claramente la historia de los santos. ruego Señor que me liberes, arroja al maligno':
Por otra parte, existen sacerdotes nombrados que no creen en la ac­
ción del maligno y se rehúsan a intervenir. ¿Se puede realizar el exorcismo también a distancia o por teléfono?
En un encuentro hablé de esto con Juan Pablo 11 y él me remitió Sí, y es muy eficaz. Al principio yo tenía algunas dudas, pero vi
a la CEI; si alguna vez logro tener un encuentro con Benedicto que funciona y es muy cómodo para quienes se encuentren lejos.
le diré que el demonio está haciendo estragos y se necesita una obra
consciente y continua. Pero si el exorcismo funciona también a distancia, ¿simplemente
orando y pensando en una persona lejana se la puede ayudar?
Como ya lo dijimos, el exorcismo es una oración en la cual, me­
diante el poder de Dios se pide y se ordena a los espíritus que mo­ Es verdad que esto funciona y que se le ayuda. Por eso tranquilizo
lestan que se vayan. ¿Por qué una simple oración necesita tantas de inmediato a quien me llame: "Estás en mi oración, oro por ti".
precauciones y limitaciones? Tengo presentes en mi intención los casos más serios, los presento

38 39
pedazos; desde entonces no pude volver a usarla. A partir de ese mo­
· y estoy seguro d e que en ese momento la persona reO'bc un
ante DIos mento me mantengo un poco alejado, temo alguna agresión física.
beneficio, sin duda alguna.
Sé que algún exorcista se pone de acuerdo antes con el exorci­
zando y lo ata, pero eso me parece muy feo, nunca he querido hacerlo.
Además, estamos en el campo del espíritu donde no existen
distancias ...
¿Las personas poseídas vienen espontáneamente a usted a han de
No, se trata de crear una comunicación a través de Dios, Él no ser traídas a la fuerza?
conoce limitaciones de espacio o de tiempo.
Cuando están tranquilas y serenas quieren venir, pero cuando
¿Pero le ha sucedido orar a distancia y tener en seguida
luego se realiza el proyecto cambian de idea: algunas comienzan a
una verificación?
oponerse cuando ya están de viaje o cuando inician la subida que
conduce a mi iglesia; el ápice es cuando cruzan el umbral de la puerta
Sí, es la eficacia de la oración. Si yo oré por una persona y ésta lo de mi casa, entonces ya no quieren, a menudo vienen arrastradas.
sintió, me siento contento. A menudo me encuentro con personas
que me agradecen, que dicen haber experimentado mi oración. Ya Según usted, ¿cómo tiene lugar la posesión por parte de un espíritu
lo tengo como costumbre, mientras rezo el Rosario encomiendo en diabólico? ¿Cuál es la puerta que se utiliza para entrar?
cada Avemaría a una persona, estoy convencido de que no es una
distracción, sino el dirigir personalmente una oración. Me siento La primera causa es el permiso de Dios, que puede ser también
muy tranquilo, en familia, en comunión fraterna al saber que las para purificar el alma. El padre Giovanni Calabria fue poseído por
almas experimentan la eficacia de la oración y me encuentro el demonio.
reconfortado. La segunda causa es frecuentar agentes de lo oculto; participar en
sesiones espiritistas, tablas ouijas, péndulos y otras cosas. Ésta es
Las personas poseídas son la manifestación más impresionante causa principal.
y brutal de la acción demoníaca, pero afortunadamente son sólo
La tercera causa es la vida libertina, alejarse de los sacramentos y
una minoría respecto a las personas molestadas Y vejadas; según
de una vida cristiana correcta.
su experiencia, ¿cuál es el porcentaje de las unas Y de las otras?
La cuarta causa, cada vez más frecuente, el resultado de una plaga
SÍ, los poseídos son una minoría, no del transmitida por los parientes, los ancestros. Por tanto, puede suce­
der que una persona no lo sepa, pero tal vez tenía un abuelo o algún
¿Pero usted nunca ha sentido miedo al contacto con los poseídos, otro antepasado que realizaba prácticas extrañas ... En
cuyas manifestaciones pueden llegar a ser violentas? alguna referencia a la prolongación de ciertos problemas en las si­
guientes generaciones. Claro que si uno se empeña en una vida co­
La primera persona que liberé era también muy corpulenta, no
rrecta logra salir; pero ésta es también una causa.
fueron suficientes mi secretario y el sacristán de la catedral; éramos
tres, pero no lo podíamos sostener. Ella logró tomar la cadenilla de Sin embargo, es verdad que la primera causa es que Dios lo per­
mi primera cruz, la que llevaba el día de mi ordenación y la mite, y muchas veces he preguntado: "Señor, ¿por qué?". Cuando me

4
40
:i'

diatamente comenzó a comer. Desafortunadamente nació también


he puesto a buscar, con f·recuenCla
. he encontrado parientes cel'CU10S
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un hermanito, Giuseppe, en la misma situación: hay alguien que los


que han llevado a cabo prácticas satánicas. Las situaciones son a~l~
odia y persigue. Cuando la madre me lo presenta, apenas después de
más claras cuando están en juego los niños ... ¿qué culpa tienen es
tos? la bendición se toma todo el biberón, de otra manera, no. Es preci­
samente en estos casos cuando se ve inmediata e irrefutablemente
Alguna vez pregunté a través de una poseída: "¿Pero por qué van la acción del exorcista: un niñito que succiona el biberón no puede
a estos inocentes? ¿Por qué no van a XY? (y mencioné a ciertos ser condicionado o sugestionado, se comporta como siente poder
ticos ... r: y la respuesta fue: "¡No, esos Son ya hacerlo.
Otro niño, llamado Lorenzo, de nueve años, estaba poseído. Te­
En cambio, ¿cómo tiene lugar la molestia y la consiguiente nía una fuerza extraordinaria: ni el papá ni el abuelo lo podían man­
ción? ¿En este caso el espíritu diabólico actúa fuera del individuo? tener quieto. Era asombroso cómo el niño, de un momento a otro,
¿Quién y qué pone allí al espíritu demoníaco?
hablaba con la voz de un anciano y decía cosas impensables para su
Se trata de un malvado que actúa directamente a través de he­ edad. La primera vez, logré hacerlo volver en sí, en cambio, en las
chiceros de magia negra con el fin de crear impedimentos a un ene­ dos veces siguientes, se ve que la legión se había fortalecido, no logré
migo, a un rival en la profesión; o quien desea obtener un objeto liberarlo. Aquel día me sentí de veras derrotado, los ojos se me llena­
determinado o una persona en particular. Es el llamado maleficio: ron de lágrimas. Los padres me dijeron que algunos días los pasaba
ataduras y otras cosas, es maldad pérfida y diabólica. Con completamente en poder del maligno, no podía ir al colegio, no se le
frecuencia hay intermediarios. podía dejar solo porque se escapaba. Pero también en este caso, los
padres y los abuelos se habían dirigido en repetidas ocasiones a los
Es verdad que si una persona llega a buenos niveles de elevación
agentes de lo oculto.
espiritual no se ve afectada. Siempre le digo: "Tranquilícese, nosotros
venceremos. Las puertas del infierno no prevalecerán" (Mt 16, cosas que aún desde el punto de vista teológico no logro ex­
plicarme.
¿ Las maldiciones y hechicerías realizadas por magos u ocultistas Es el caso de otro Lorenzo, un buen hombre, padre de Iamllla
son difíciles de erradicar mediante el exorcismo? que está poseído y que periódicamente viene a verme. El espíritu que
lo posee me suplica: "Sácame de aquí, sácame de aquí': pero luego
Sí, muy difíciles. Paradójicamente, casi más difíciles que las pose­
no se va. Por lo que he comprobado que los espíritus demoníacos
siones. Liberé a un poseso velozmente, casi no le pude hacer la señal
están obligados a obedecer a quien les ordenó poseer o vejar a una
de la cruz y ya estaba libre, como un balón que se desinfla. En otro
persona. No me detengo en esta sección y nunca quise volverme a
caso, un joven estuvo aquí en Isernia durante toda una Cuaresma y
interesar, pero se oye hablar mucho de sacrificios de sangre ...
cada día durante varias horas estuvimos juntos. Fue algo bastante
difícil, pero recuerdo ese bellísimo Sábado Santo en el que el espíritu Desde el punto de vista esotérico, hay quien sostiene que estos
dijo: "Ahora me tengo que ir': iY en verdad se hechiceros utilizan técnicas para servirse de almas perdidas ligadas
a la tierra para encadenarlas a las personas o a los lugares.
¿Puede citar casos que lo hayan impresionado profundamente? Ciertamente hay almas que están encadenadas y dominadas en
un determinado lugar o atadas a determinada persona y quisieran
Un niñito, Paolo, víctima de un maleficio, no quería Comer.
que la Iglesia las arrojara de allí; ellas no gozan de nimmna manera al
tuvo tres meses en el hospital. Bastó el contacto conmigo e inrne. atormentar a una persona.

42 43
Según usted, ¿orar y frecuentar asiduamente los sacramentos es de
¿No le ha sucedido alguna vez encontrarse con hechiceros que
quisieran cambiar de vida?
veras una ayuda tan fundamental o es más importante la actitud
mental?

No, desafortunadamente no.


¡Los sacramentos son más importantes! ¡Negarlo sería una here­
jía! Jesús dice que oremos continuamente (Ef6, 18; 1Ts 5, 17; Me 9,
Según usted, ¿un pensamiento malvado o una maldición verbal
29), Y es lo que debemos hacer. Todos, con mayor razón los que están
repetidos con frecuencia y con intención pueden ser considerados
en problemas.
para todos sus efectos maleficios que producen efectos de malestar?
La premisa es que para estar en paz se necesita ser discípulos fer­
Sí, todos somos responsables con nuestros pensamientos y nues­ vorosos de Jesús, por tanto, mucha fe y mucha oración, y hacer uso
tras palabras del bien nuestro y del de los demás. de estos medios que la santa Iglesia nos pone a disposición: misa, sa­
cramentos, confesión, sacramentales, Rosario ... No hemos hablado
¿Cuántas de las personas que han acudido a usted tenían efectiva­ de Nuestra Señora, pero debemos recordar aquí que ella está siempre
mente maleficios en vez de simples problemas psiquiátricos? presente, y el demonio le tiene un pavor terrible. También me lo han
dicho muchos durante los exorcismos: "¡Ésa te protege, si no ya te
Desde 1992, cuando comencé a intervenir, puedo decir con cer­
teza que sólo dos personas estaban enfermas de la mente. Yo digo hubiéramos destrozado!': Estoy seguro de que el Señor me ha pre­
que hay que oírlos a todos y darles a todos una bendición: no cuesta parado dándome una gran devoción a la santísima Virgen, porque
nada y puede ser una especie de autosugestión. El exorcismo es una preveía que yo me ocuparía de estas cosas. Tener la confirmación
medicina con todos sus efectos. El mismo Padre Pío sostenía que de ello fue el mensaje más hermoso que haya recibido del demonio.
para muchos enfermos mentales podía ser una ayuda en la enferme­
dad. El exorcismo es una plegaria de liberación, de curación. Algunas personas con maleficios afirman que cuando oran o
reciben la Eucaristía están peor que antes ...
En este sentido, ¿sería deseable una colaboración entre el mundo de ¡Claro, y qué bueno! Es signo seguro de que la bendición hace
la medicina y la Iglesia? bien, es señal de que el sacramento funciona. Al comienzo hay un
Claro, en efecto, psiquíatras sabios e inteligentes tratan con ánimo empeoramiento, pero luego, poco a poco se recupera. Sucede lo con­
de tener contactos con un referente espiritual. Pero a toda persona trario con los hechiceros: se mejora de inmediato, pero por poco
que se dirija a un sacerdote por un problema de carácter oculto se le tiempo y luego se está aun peor.
dice sobre todo que se fortalezca en la fe mediante los sacramentos
de la Eucaristía y de la confesión y que tenga mucha confianza en el Según usted, los sacramentales como la sal, el agua y el aceite
resultado positivo de la lucha que se está llevando a cabo. Confianza, benditos y exorcizados...
confianza, confianza: se necesita confianza.
Tienen un grandísimo valor, el demonio les tiene un miedo in­
creíble. Yo a veces lo tomo del pelo: "¿Pero cómo, le tiene miedo a un
poco de agua?': Incluso he hecho la prueba de la diferencia entre el
agua normal y la bendita y exorcizada. Por ejemplo, con el pequeño
Giuseppe la mamá trató de ponerle una gota de agua bendita en el

44 45
jt~1:~I:;,~ .

¿Existen personas sensibles que efectivamente tengan la capacidad


biberón junto con la leche: no fue posible hacerle acercar los labios,
de "ver y entender" dónde están los problemas, por ejemplo saber
Preparo, e1b'b'
1 eron Con el · y corriente y ¡d'
agua comun e IIlm edhto
< se
cuáles son los objetivos a través de los cuales se esté realizando un
alimentó! No puedo tener dudas sobre esto porque tendría que negar
la evidencia. maleficio?

Sí, las hay. Probablemente aun en mi propia diócesis haya alguna


¿Cómo hace usted para saber si una persona necesita verdadera­ que pueda hacerlo. Yo no tengo este discernimiento y no aconsejo a
mente la intervención del exorcista? los exorcistas dar diagnósticos demasiado precisos porque puede ser
peligroso. ¡Pero tengo la medicina! Y si estoy seguro de poseer el re­
Hago el exorcismo para saber si hay necesidad, lo uso con fines
valorativos. medio universal no necesito hacer el diagnóstico preciso, basta con
ofrecer el remedio, la medicina justa para todos los males.

¿Cómo sabe cuándo una persona está finalmente liberada?


¿Qué función pueden tener los "carismáticos" en la liberación?
¿Puede una persona ser liberada contra su voluntad?
Pueden ofrecer un gran servicio, sobre todo si son humildes y si
Pienso que no sea posible, aunque no pueda afirmarlo con cer­
teza. Pero, por otra parte, no creo que las personas que experimenten aconsejan a las personas que vayan al sacerdote, al exorcista. Pero,
tales tribulaciones quieran permanecer en ellas de manera cons­ por otra parte, la humildad es también la cualidad que deben tener
ciente. Es también cierto que se necesita un poco de colaboración, los exorcistas, quienes no deben gloriarse por la que es la obra del
Así como quien desea confesarse debe pedir perdón, de la misma Señor.
manera, quien quiera un exorcismo ha de acudir al exorcista.
¿ Tiene alguna utilidad real la intervención exorcista en las
En promedio, ¿cuánto tiempo se requiere para liberar habitaciones o las cosas o sólo se trata de una ayuda psicológica?
a una persona? ¡Es muy útil! En el antiguo ritual existía la bendición contra mures
Cada caso es independiente, sin embargo, podemos hablar hasta y luego la bendición contra los ratones y también contra los salta­
de diez años. Son tiempos definitivamente largos; en otras ocasiones montes; incluso había una misa por las infestaciones en el campo...
la liberación es inmediata. El problema está en que a menudo las La Iglesia siempre ha mantenido la convicción de que las cosas y los
personas no comprenden enseguida, es decir, se dan cuenta de que lugares sean el instrumento con el cual el demonio puede hacer mal
su problema es maléfico después de décadas. En determinado mo­ a las personas. Por ejemplo, con las muñequitas perforadas con al­
mento comprenden y entonces regresan en el tiempo buscando las fileres o trenzas que alguien encuentre en lugares donde nadie haya
posibles causas ... pero como en la medicina el mal con el tiempo se podido ponerlas, Ciertamente allí el demonio realiza materializacio­
gangrena y es más difícil extirparlo. nes. ¡Ésta es una estupidez suya porque se deja descubrir! De este
modo él quiere demostrar su poder. En otras ocasiones pueden ser
Según su experiencia, ¿cuántas veces sucede que la persona fetiches de los agentes de lo oculto que transmiten energía negativa.
liberada vuelva a ser poseída?

No he registrado ningún caso.

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46
"I~:'I =! '_PJ\!!!"· "'''''H'"'

Según usted, en el casa de una habitación que se deba liberar o de Conviene también enfatizar en que, a medida que la fe en la Igle­
un objeto dentro de la habitación, ¿es útil hacer un exorcismo en el sia y en la comunidad decae, como sucede hoy día, entonces esta at­
lugar o es suficiente can una plegaria de liberación? mósfera desacralizada crea un alimento agradable para el demonio.
Pensemos en Sodoma y en Gomorra (Gn 18,20; 19,24; 19,28; Jr 23,
No, es útil la salida del exorcista. La Iglesia siempre lo ha hecho 14; Am 4, 11; Mt 10, 15; Rm 9, 29), Y veamos la sociedad de hoy: se
con las bendiciones de las casas, precisamente para liberar los luga­ siguen creando cada vez más las condiciones para un aumento de las
res donde habitan las personas con influjos maléficos. Las mismas fuerzas del mal. Por eso es importante que los fieles se unan cada vez
celebraciones de la consagración del altar, de la consagración de las más para darle mayor poder a las fuerzas del bien.
iglesias, tienen esta base litúrgica y por ende teológica, es decir, las
cosas de por sí están bajo el dominio del maligno que es el príncipe
Es cierta también que los fieles que quieren fundar grupas de ora­
de este mundo Un 12,31; 16, 11; Ef2, 2) como lo dice Jesús, yes tra­
ción, tal vez dedicadas a la liberación, a menudo san hostigadas.
bajo específico de la Iglesia con sus bendiciones y oraciones apartar
de las influencias maléficas estas realidades. A ellos les digo: "¡Háganlo donde quieran! En el prado cuando
hace buen clima o en una casa si hace frío, háganlo libremente':
Para un sacerdote exorcista, ¿qué tan importante es tener la ayuda Afirmo que ningún obispo puede prohibir a las personas que se re­
de un grupo comprometida y numeroso de oración? únan para orar; cuanto más, tiene el deber de vigilar a fin de que
todo se haga según criterios de rectitud.
¡Es sumamente importante! Desafortunadamente yo no lo tengo,
siempre me he encomendado a las oraciones de los fieles, pero nunca
¿Par qué en algunas grupas de oración hay un porcentaje tan
he tenido un grupo dedicado. Donde haya un grupo organizado es
grande de personas poseídas, mientras en otras na; según usted,
algo muy hermoso porque el diablo le teme mucho a la oración. Lo
se debe esto al carisma particular de las sacerdotes que guían estos
dice Jesús: "Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre
grupas?
allí estoy yo en medio de ellos" (Mt 18, 20) Y si se halla Jesús, ¿cómo
puede estar el demonio? No, si acaso a su disponibilidad para aceptar a estas personas in­
festadas que se manifiestan precisamente gracias a la oración especí­
¿Pero par qué permite Dios que algunas veces personas inocentes, fica ejercida sobre ellas.
cama las niños, por ejemplo, sufran tanta tiempo?

A veces hay un vínculo con cuanto hayan hecho los padres u Alguien afirma que exigirles simplemente a los espíritus que moles­
otros parientes, y entonces sirve para hacer entender cuál es la gra­ tan que se vayan puede representar un peligra, parque la entidad
vedad del pecado, del mal que se haya hecho. y luego para valorar el expulsada irá inmediatamente a la búsqueda de un nueva cuerpo
recurso a Dios o para implorar su poder. Refiriéndonos al gravísimo al que poseer. ¿Cuando una persona es liberada a dónde va a parar
problema del mal, sobre el cual tantos estudiosos han disertado, de­ el ser que la molestaba? ¿A quién es entregada?
bemos recordar que con el pecado original entró la muerte al mundo Yo digo al demonio: "Vayan a esos puercos (Mt 8, 30-32; Mc 5, 11
(Sb 2, 24; Rm 5, 12), Y con ella todos los males. Sólo podemos decir: l3; Lc 8,32-33), a esas moscas y deja en paz a los hombres':
"Señor, ten piedad de nosotros':

48 49
•••••••••••IIII1I11.e~~',~"c:'.::!
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~

¿Pero no sería una obra de misericordia pedir que el espíritu ex­


hacer signos de la cruz, pero los demás han de ser muy cuidadosos.
pulsado sea entregado a la luz o a un arcángel a fin de que sea
No obstante, de manera privada se puede orar tranquilamente por
acompañado hacia un camino de evolución superior, de modo que
el bien de la propia familia; por otra parte, el Padrenuestro es la pri­
ya no pueda perjudicar a nadie?
mera plegaria de exorcismo.

No olvidemos que está de por medio el dogma de la eternidad del c~


' le.
¿Tiene algún mensaje para sus cohermanos, para el clero?
infierno. Es inútil desearle a un demonio algo que nunca será posi­
ble. En caso de que se trate de un alma atada, entonces ciertamente Pongan en práctica la orden de Jesús: "Vayan, prediquen, curen
pero es un sector aun inexplorado; de esto se habló en una re­ los enfermos, arrojen los demonios (Mt 10, 7-8; Mc 16, 15). Se trata
unión de exorcistas. A veces dudo de que las personas estén poseídas aquí de obediencia directa al Evangelio, ¡no tienen escapatoria!
por un alma y no por un demonio y entonces pregunto: "¿Podemos
orar por ti?': En algunos casos me han respondido que sí, en otros
que no. Pero nunca doy crédito a lo que me responda el poseído, éste
es un mundo oscuro, así como es misterioso el mal. Por tal razón, no
puedo creer en lo que se me diga.

Por consiguiente, ¿en el momento en el que se produzca la


liberación no hay peligro para las personas presentes?

Absolutamente no, lo temen también algunos obispos, pero no


existe ningún peligro. Todas las personas que me han ayudado están
sanas y tranquilas.
Me contó un sacerdote que algunos laicos hicieron muchas ora­
ciones de liberación o aun de exigencia, en privado, por personas
seguramente poseídas y en ese momento se sintieron molestadas a
su vez, y alguno hasta llegó a intentar el suicidio.
No, yo creo que, si alguien se encontró en esta situación fue por
permiso de Dios o por culpa de la misma persona; ciertamente no
porque haya hecho el bien a otra persona.
Sin embargo, lo dije claramente en mi carta pastoral: "Se abstenga
el laico de realizar gestos que son propios del ministerio sacerdotal,
porque podría ser un acto de soberbia, de presunción. Al mismo
tiempo es un acto que provoca al demonio y así se le obliga a perse­
guir a la persona': Hay que permanecer tranquilos, humildes y orar
de rodillas lo más intensamente posible, sin hacer gesto alguno.
cambio, el sacerdote puede hacer mucho, puede imponer las manos,

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Probablemente fueron los moretones causados por el suero apli­


cado diariamente en los brazos de Lucia, luego de la enfermedad
v inexplicable que la había aquejado la víspera de la entrevista con
monseñor Gemma, lo que lo convenció de la necesidad de su inter­
El padre Paolo:
vención en nuestra casa.
un fraile joven y valiente, pero nluy solo
La vida del padre Paolo no era nada sencilla, dado que, literal­
mente, era asediado por personas que acudían a él buscando des­
esperadamente ayuda, y en el convento su modo de obrar no era
visto con buenos ojos, de ningún modo apoyado y cuando mucho
tolerado.
Monseñor Gemma nos había recomendado buscar a un joven sacer­
dote cercano a nuestra casa que nos siguiera e impartiera bendicio­ Era joven, no había llegado aún a los cuarenta años, y decía que
nes frecuentes y, por esta razón, en enero del 2007 nos encontramos se había acercado a este universo de sufrimiento gracias a algunos
con el padre Paolo, un joven franciscano que residía en un convento cohermanos, entre ellos los ya difuntos padres Tito y Graciano, quie­
vecino a nuestra casa que, aun sin ser un exorcista autorizado, se nes habían sido su punto de referencia. La suya era una verdadera
ocupaba activamente de ese "sector': vocación. Decía que si no hubiera sido por este ministerio, quizá no
Ya lo habíamos contactado en el otoño, pero siempre estaba su­ habría encontrado el verdadero objetivo de su vida sacerdotal.
mamente ocupado, literalmente sumergido en las peticiones de Había participado respetuosamente de un congreso de exorcistas
ayuda por parte de una gran humanidad doliente que utilizaba su y simpatizantes y tenía ideas claras sobre lo que podía o debía hacer.
confesionario para lanzar sus propias solicitudes de auxilio. Era el En otras palabras, sabía que no podía ejercer el exorcismo, pero se
único religioso de nuestra zona del que teníamos conocimiento que valía de todos los instrumentos lícitos que la Iglesia ponía a su dis­
practicara activamente el "ministerio de la consolación' y que, ade­ posición.
más, algo muy raro en la diócesis de Megalópolis, iba a domicilio a
Muy probablemente el padre Paolo tenía también dones carismá­
bendecir personas y lugares. ticos y su mirada no se limitaba a la de los ojos, sino que llegaba más
Que fuera el único del vecindario o al menos uno de los pocos era allá y lograba vislumbrar aun lo invisible; esto se percibía al ver cómo
también verificado por la multitud que atestaba la iglesia del con­ se protegía en casa o por las observaciones que hacía, pero nunca se
vento los miércoles por la noche, cada 15 días, cuando organizaba desequilibró a causa de eso.
un encuentro de oración muy comprometedor en el que se recitaban
No obstante, vino a muestro hogar una tarde de febrero de 2007
también fórmulas de liberación específicas para los males físicos,
para una primera plegaria de liberación y para una bendición de la
psíquicos y espirituales. Nosotros íbamos a confesarnos con él a pe­
casa, definitivamente minuciosa. ¡Ambos estuvimos mal!
sar de los treinta kilómetros que nos separaban de su convento y la
interminable cola que teníamos que soportar. Lucia comenzó con una tos incontrolable y violentísima, no lo­
graba detenerla y además aparecieron conatos de vómito. Estaba
Íbamos a confesarnos, a recibir bendiciones Y consejos, a hacerle
muy lúcida y por más que se esforzaba no podía controlar su mal
bendecir agua y velas, pero también con la esperanza d.e qu~ ,tarde o
hasta cuando el padre Paolo tomó e! incensario y comenzó a enviarle
temprano fuera a nuestra casa para aliviar un poco la sItuaClon.
e! humo de! incienso a todo su cuerpo, incluyendo la nariz y la boca.

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Por lógica, esto le hubiera producido aun más tos y no lograría ni habían sucedido los accidentes. La cosa es un poco risible y se podría
siquiera respirar, dado que estaba envuelta en una densa nube pensar que Francesco conducía como un loco (aunque tres fueron
incienso, en cambio, así como llegó la tos de la misma manera destrozadas por Lucia quien es sumamente prudente), pero no era
apareció dejándola completamente así, aun porque en treinta años de conducir sólo una vez averió una
llanta contra un andén. Hasta el señor del montallantas se mostraba
Francesco, en cambio, experimentó un fuerte dolor en la
incrédulo y preocupado: j11tmca había tenido clientes como noso­
del estómago y al mismo tiempo en el abdomen, como si una mano
tros!
invisible le estuviera apretando las vísceras; en este caso, para que
desaparecieran fue necesario hacer repetidos signos de la cruz con Otra cosa curiosa tiene que ver con el desagüe del lavaplatos de
aceite bendito en el estómago, orar e imponer las manos. Luego la cocina que un día, por casualidad se atascó después de una bendi­
unos minutos su malestar también desapareció y el padre Paolo ción completa de la casa. Al ver que los acostumbrados arreglos "há­
pudo seguir bendiciendo la casa utilizando el mismo ritual practi­ galo usted mismo" no daban resultados, llamamos a un fontanero
cado por el padre Graciano, es decir, bendiciendo cada cuarto con amigo que trató de destaparlo con una sonda y luego con aire COm­
agua e incienso benditos y ungiendo con aceite bendecido todas las primido, pero sin resultado, por el contrario se tapó del todo. Así que
ventanas y puertas de la casa, además de las entradas de agua, de luz, llamamos a una firma especializada en drenajes y que emplean esos
de gas, de la caldera y los teléfonos. equipos sofisticados que tienen detonantes, sondas con microtelecá­
Los niños no estuvieron presentes durante dichas bendiciones y maras que se infiltran en los desagües, tubos que lanzan agua bajo
no tenían idea de nada, pero durante la noche tuvieron pesadillas te­ presión y al mismo tiempo aspiran el líquido excesivo. Después de
rribles, y Eleonora sintió que la cogían de la garganta cuando estaba dos horas de intentos infructuosos, en cierto momento el agua bajo
en la cama. Pero ya sabíamos qué hacer y para consolar a nuestros presión no sólo no logró liberar la obstrucción, sino que comenzó
hijos bastó recitar la oración a san Miguel Arcángel, bendecirlos y a brotar en el techo de la casa. El dueño de la firma de destapes es­
hacerles la señal de la cruz junto con el óleo bendito para que taba aterrorizado: "En veinticinco años de trabajo jamás me había
viera a ellos la tranquilidad y el silencio. pasado algo semejante; el agua siempre se recupera con la aspira­
dora, son cinco atmósferas de presión, ¿cómo es posible que el agua
Luego de esa primera bendición hubo otras; sucedían a menudo
salte y salga del techo?". Buena pregunta, ¡también nosotros hubié­
por la noche, después de cenar para poder bendecir también a nues­
ramos querido saberlo! Luego de gastar 630.000 pesos, tuvimos que
tros hijos antes de que se fueran a dormir y enseguida celebrábamos
resignarnos y romper paredes y pisos de la casa para realizar nuevos
una misa breve en los diferentes cuartos de la casa usando como altar
desagües porque los anteriores estaban completamente
la mesa de la cocina, algunas veces un escritorio, otras una mesita
plegable de campamento. Nuestros síntomas físicos casi habían des­ Para no hablar de la calefacción que comenzó a dañarse más
aparecido, pero habían comenzado a verificarse secuencias increí­ de cualquier expectativa normal, o de las tres o cuatro bombillas que
bles de pequeños incidentes que hasta nos da vergüenza contarlos ... semanalmente tuvimos que sustituir porque seguían "quemándose"
o de los pequeños electrodomésticos que de vez en cuando no fun­
Por ejemplo, nos vimos obligados a cambiar nuev~ neumáticos
cionaban y luego volvían a hacerlo. También registramos repentinas
del automóvil de Francesco en ocho meses, todos semldestruidos y
invasiones de insectos o ratones. Por ejemplo, un día encontramos
con los rines torcidos como si el carro hubiera caído dentro de gran­
nuestro mesón lleno de moscas, eran muchísimas y luego de verifi­
des huecos o en una acequia, pero en al menos cinco de estos casos
no pudimos descubrir la mínima imperfección en el asfalto donde car que no hubiera algo que las atrajera, rociamos agua bendita, ce­

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rramos puertas y ventanas y nos fuimos a pasar el fin de semana a la religioso amigo y a asistir a reuniones sobre el tema, propuestas por
playa; al regresar, las moscas habían desaparecido, no había muestra la Iglesia católica, a leer libros de toda clase con el fin de no dejarme
alguna de sus cuerpos y nunca reaparecieron. También las hormigas condicionar ni por posiciones demasiado ateas ni por las demasiado
repetidamente invadieron la casa, se alternaron en varios cuartos y medievales, con la intención de comprender las razones de ambas
se establecieron en todas partes, en los armarios, en las camas, en los partes.
muebles y de nada sirvieron los repelentes ordinarios; a veces eran Luego, un cohermano me invitó a una plegaria de liberación
tantas que sus cuerpos cubrían las paredes y el suelo, luego, repenti­ y después me dirigí a unos grupos carismáticos con el fin de ver
namente así como llegaron desaparecieron. qué sucedía realmente, qué hacían aquellos que ya actuaban en ese
Casi todos los días una dificultad, un problema, un obstáculo, campo desde hacía años. En esa época se me pidió seguir de manera
un gasto imprevisto. Un desastre tras otro, una situación agotadora. directa a una persona necesitada y de allí surgió lo demás. A medida
Pero, aunque hemos tomado nota de la absurdidad de estas situa­ que proseguía, me daba cuenta de que cada vez era más importante
ciones, hemos decidido burlarnos de ellas, y cada vez que sucede escuchar lo que las personas contaban, ver lo que sucedía durante
algo agradecemos el lindo regalo, incluso porque nos decimos que o después de la bendición, dejando atrás todo tipo de prejuicio o
¡es mejor que los problemas tengan lugar en las cosas y no en las imposición de lectura establecida de antemano. Si pudiera compor­
personas! tarme de esta manera, lograría adaptar la realidad a mis conocimien­
tos teológicos, no habría juzgado sino sólo observado objetivamente
Volviendo al padre Paolo, hemos de reconocer que ha dejado una a la persona que en ese momento el Señor me presentaba.
marca profunda en nuestra familia y cuando supo que estábamos
escribiendo un libro sobre el tema, nos animó; así que nos aprove­
¿Tiene el apoyo de los demás sacerdotes y de sus cohermanos?
chamos de esto para hacerle a él también algunas preguntas.
Muy útil ha sido y sigue siendo hasta el momento la confron­
Padre Paolo, ¿por qué ha comenzado a ocuparse de oraciones de tación con los pocos sacerdotes y laicos que conocen esta realidad
curación y liberación y cómo ha aprendido a intervenir? desde dentro, porque hablamos el mismo lenguaje, aquel que única­
mente puede comprender quien haya tocado con la mano eso de lo
Durante los años de seminario y al frecuentar las parroquias, que se está hablando.
también siguiendo los consejos de los sacerdotes con los que estaba
en contacto, clasificaba en la categoría de enfermos psíquicos a todos En lo referente a la relación con mis cohermanos, depende: hay
cuantos pedían recibir una bendición o a aquellos que en sus relatos algunos que me miran con respeto, otros que me expresan clara­
hablaban de sentir presencias, olores o cosas semejantes. Gracias a mente su disentimiento, y algunos otros que de vez en cuando soli­
Dios, después de la ordenación, algunos cohermanos me pidieron citan informaciones o pareceres que ellos mismos están siguiendo.
que me interesara en la pastoral de la consolación. Pronto tuve que No obstante, hoy por hoy, se tiene la impresión de que la pasto­
cambiar de opinión. La realidad que se me presentaba era un poco ral de la consolación es realizada por sacerdotes que son algo locos,
tangible y, cada vez más confirmaba los años de estudio teológico y exactamente como la grey que se les ha confiado.
de camino de fe. Ahora, en cambio, tengo la manera de ver el puente A quienes me critican les recuerdo que un viejo principio de la
que une tanta teoría teológica con la vida de todos los días. Es como filosofía reza que: contra los hechos no valen los argumentos. Mi
si las verdades de fe comenzaran a tomar forma en episodios concre_
actuación comienza allí donde observo hechos, no me limito a las
tos de la vida cotidiana. Comencé a intervenir por invitación de un teorías o a las suposiciones.

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¿Cómo interviene generalmente? y la gravedad del problema, es decir, si se trata de formas de
vejación, obsesión, posesión o de las tres juntas.
Tengo que aclarar algo: no soy exorcista sino sencillamente un
• Actuar directamente donde los casos sean "evidentes" y claros
sacerdote que administra los sacramentales, así como la Iglesia lo
con oraciones de liberación y con frecuentes bendiciones a la
prevé en el catecismo y según las indicaciones oficiales del magiste­
rio respecto a las oraciones de curación. Por lo que mi intervención persona y a los lugares de residencia, de manera que el lugar
se limita a: donde se viva esté bajo la protección divina.
• Enviar a un exorcista experimentado a las personas que yo
• Conversar con quien solicite una bendición, para comprender
por qué la pide y cuál sea en realidad la necesidad; a veces son considere necesiten intervenciones más radicales que sólo el
simples miedos que persiguen a la persona y realmente sólo exorcismo mayor pueda lograr curar; pero aun en este caso
basta con saber escuchar, aspecto que hoy falta de manera tre­ sigo sosteniendo a la persona con oraciones de liberación y
menda, porque todos van de prisa y tienen que hacer muchas con bendiciones, exactamente como lo estoy haciendo con su
cosas, pero según parece, lo más importante que se debe hacer, familia.
es escuchar, ya no estamos en capacidad de hacerlo.
Según su experiencia ¿cuál es el papel que ejercen los hechiceros
• Dirigir a las personas hacia el camino de la fe real, en resumen, y la magia?
hacia una conversión sostenida con la confesión frecuente,
con la Eucaristía al menos semanal, y cuando sea posible aun Se trata de una función realmente considerable y subvalorada por
diaria, con la oración mediante el Rosario o aunque sea con la mayoría. Cierta vez tuve que vérmelas directamente con una he­
un momento de oración dentro de la familia. Orar no es algo chicera, la cual me dijo con cierto tono de desprecio: "La categoría
para "gente beata': sino la única vía directa que tenemos para más estúpida que existe sobre la tierra es la de ustedes los sacerdotes,
hacer que la gracia de Dios pueda entrar en nosotros; con esto porque no creen en el poder que tenemos. Tú en cambio eres dife­
nos damos perfecta cuenta de quién vive con fe intensa la vida rente y tienes modo de comprobar directamente, comprendes cómo
sacramental. gira el mundo': Esto me hace pensar cómo nosotros los sacerdotes
con frecuencia nos arriesgamos cuando dejamos fácilmente nuestras
• Bendecir siempre a la persona que solicite ayuda; es mejor dar
tareas en manos de los médicos. Somos doctores del espíritu y del
siempre una bendición, así para muchos sacerdotes parezca
alma (¡no se trata de la psique!). Yo, como sacerdote, debo conver­
algo superfluo.
tirme en un "profesional de las cosas de Dios" confiando en Él que
• Recitar oraciones específicas con base en lo que se me haya me permite intervenir y luego, donde sea necesario, confiar también
contado, algunas veces de curación, otras de liberación. Sin en los profesionales de los asuntos del mundo.
embargo, siempre trato de que la persona participe activa­
mente y de que no se limite a recibir la plegaria de manera El padre Paolo no era ayudado por ningún grupo de oración,
pasiva. pero se encomendaba a las oraciones de quienes iban a él por ayuda.
En el otoño del 2007 se mostró demasiado nervioso y malhumorado,
• Hacer seguimiento algunos meses a la persona o la familia para luego fue trasladado de repente a otro convento, no nos avisó ni se
una valoración más profunda, de la cual obtenga los elementos despidió; ninguno de sus cohermanos nos quiso decir a dónde había
suficientes para que me hagan comprender la situación real
sido enviado y de él perdimos todo rastro.

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11 LLllii:¡:'~~"!"" ,

por lo cual se llegará a ella sólo por consejo de gente de confianza o


por los mismos sacerdotes; nunca dirá: "Yo tengo este poder, puedo
C.\PITl'Ul VI saber esto, no se preocupe que de eso me encargo': o frases seme­
jantes; nunca predecirá el futuro, nunca hablará mal de nadie, por el
Hechiceros, videntes, carismáticos: contrario, se comportará siempre de manera más bien esquiva, no se
una ventana abierta a lo invisible autopromoverá y, sobre todo, jamás pedirá dinero alguno, si acaso
aceptará pequeñas ofrendas, teniendo en cuenta que algunos de ellos
ya no tienen posibilidad o tiempo de trabajar para mantenerse. Ade­
más, su humildad los lleva a menudo a confrontarse con sus padres
espirituales y a obedecer sus eventuales indicaciones.
Es sabido que existen personas dotadas de capacidades supranorma­
Por el contrario, quien actúa por el mal se exhibirá, usará con
les, pero una cosa es saberlo o haberlo escuchado y otra verificarlo
personalmente. ¡A nosotros nos tocó también esta experiencia! frecuencia el pronombre "yo': hará promesas y garantizará el éxito
de los propios servicios, propondrá soluciones y sobre todo querrá
Existen quienes mirando a una persona a la cara u observando su que le paguen.
fotografía, relatan la vida, muerte y milagros acerca de ella, incluidos
los problemas de salud o de relaciones interpersonales; y hay quienes Como ya se dijo anteriormente, nuestra primera experiencia
ni siquiera tienen necesidad de verte, basta una llamada telefónica e tuvo lugar con César, y a él llegamos mediante el consejo del pa­
inmediatamente, sin haberte jamás conocido o haber hablado con­ dre Graciano. Utilizando su sensibilidad radiestésica estudió nues­
tigo anteriormente, te dicen si existe o no un problema o si sobre ti tra historia después de una conversación telefónica corta con Lucia.
o sobre tu familia cae una maldición, si se ha hecho algún maleficio Sin conocernos y sin pedir nada a cambio, nos entregó después de
por parte de un hechicero o te aconseja eliminar de la casa un de­ un par de días unas doce páginas que resumían detalladamente un
terminado objeto que no sólo es identificado, sino localizado en la gran número de aspectos ligados a los caracteres, a las inclinacio­
habitación misma donde se encuentre. Y, naturalmente, el objeto en nes y a la vida actual de cada uno de los componentes de la familia,
cuestión se encuentra precisamente allí. La casuística es casi luego puso en evidencia en nuestra casa la infestación de espíritus de
tada. Pero para todos vale la misma regla: sus capacidades, más o naturaleza maligna y descubrió que habíamos sido objeto tanto de
menos evidentes, omiten las estrictas reglas del plano material y se maldiciones como de un hechizo continuo a causa de envidias y de
extienden a los planos invisibles. celos, y que los responsables se encontraban entre los parientes de
Francesco. Nos dijo, además, que había objetos en la casa que traían
Es necesario ser siempre muy cautos cuando haya que tratar Con
negativ~smo. Finalmente, el examen de nuestros árboles genealógi­
tales personas, porque el límite entre un poder sobrenatural de ori­
cos presentaba rasgos problemáticos que exigían intervenciones con
gen divino, es decir, un carisma, y un poder de origen preternatural
oraciones y misas en sufragio por antepasados específicos que, aun­
de origen maligno es muy sutil. Existe, sin e~1barg~, de manera ge­
neral, un modo muy sencillo de identificar mmedIatamente quién que muertos desde hacía mucho tiempo, estaban aun "atados a la
tierra' y, por tanto, necesitados de ayuda.
actúa por el bien y quién por el mal.
Precisamente con base en estas revelaciones, el padre Graciano,
La persona que esté animada únicamente de servic~o .y obre por
el bien lo hace de modo desinteresado, no le gusta exhIbIrse pocas semanas antes de morir, nos aconsejó buscar a un exorcista, y
los acontecimientos siguientes demostraron que tenía toda la razón.

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guna manera una vez fueran prendidas. Que cuando terminara la
Pero nos~tros, ~n un primer momento, estábamos escépticos o al
combustión, deberíamos sellar el residuo de la ~era en el vaso de
menos muy mdeclsos: ¡no era fácil racionalizar lo que se mostraba
como algo completamente irracional! aluminio y llevárselo a ella.

Por eso le solicitamos al padre Graciano que nos indicara al me­ Estábamos también listos para esta enésima prueba. Del examen
nos otro carismático, para tener siquiera las contrapruebas. de los residuos de las velas la señora Idia, a la que no se le había con­
tado nada sobre nuestra historia, puso en evidencia de inmediato la
Entonces conseguimos a Mauricio. Con él también el primer existencia de un poderoso hechizo en nuestra familia y afirmó que
acercamiento fue por teléfono y, sin contar absolutamente nada de la persona más golpeada era Francesco; confirmó además que los
nosotros o de nuestra historia, nos dijo que había encontrado en problemas provenían nada menos que de algunos familiares suyos
nuestra familia problemas debidos a un hechizo perpetuo realizado de sexo femenino. Nos pidió que le dejáramos los residuos de
por dos mujeres de la familia de Francesco; acertó perfectamente en velas para que ella los hiciera destruir de un sacerdote con un ritual
los problemas de salud de Lucia y aconsejó eliminar dos cuadros col­ adecuado, nos exigió también que le lleváramos la foto de nuestra
gados en casa, de los que nos indicó exactamente la posición como
familia, declarando que oraría por nosotros, y que volviéramos a
si conociera hasta en lo mínimo nuestro cuarto; las indicaciones re­
donde ella después de cuarenta días; pero también afirmó que de­
cibidas eran de una precisión y de unos detalles impresionantes. Nos
bíamos seguir empeñándonos y que teníamos que mandar celebrar
aconsejó, finalmente, fotografiar todos los cuadros, los peluches de
misas por nuestros antepasados, además, una por todos los difuntos
niños y algunas chucherías y llevarle las fotos apenas estuvieran
por los que nadie nunca ora. Tampoco esta vez ninguna petición
listas. Fuera de las fotos solicitadas, en las cuales no encontró ningún
de dinero, sino sólo el encuentro de una larga fila de personas en
problema particular, le llevamos también una serie de retratos de fa­
espera de poder acceder a su modesto apartamento situado en la
miliares y de amigos, sin especificarle las relaciones de parentesco o
parte superior de una vivienda ubicada en un estrecho callejón de
de si pertenecían a la familia de Francesco o de Lucia, y de cada uno
un pueblecito ribereño.
110S dijo si poseían problemáticas personales especiales y sobre todo
si eran influencias malignas respecto a nosotros. Las revelaciones Un encuentro posterior se cumplió mediante la llamada telefónica
fueron asombrosas: resultó que las peores inf1uencias provenían de al profesor R., un habitante carismático de Marche, muy estimado
la madre de Francesco y de una prima, y que ésta se hallaba en con­ por el padre Amorth, que sólo pidió nuestros nombres y declaró que
tacto con un hechicero que podía realizar maleficios. Estos podrían existía un maleficio, que el más golpeado era Francesco y que todo
ser probablemente limitados y en algunos casos eliminados, Con la provenía de unos parientes de éste. ¡Menos de unos minutos para oír
ayuda de los sacerdotes exorcistas y también de algunas personas repetir básicamente lo que ya sabíamos de memoria!
dotadas de carismas especiales de liberación unidos a una gran ca­ En una segunda llamada telefónica añadió que sobre nuestra ha­
pacidad de oración. bitación habían sido puestos "guardianes" con la tarea de mantener
Así llegamos hasta donde la señora Idia, que nos pidió por telé­ la familia constantemente bajo la acción del maleficio, lo cual hacia
fono que consiguiéramos velas blancas de cera, que las hiciéramos más complicada la desinfestación.
bendecir por un sacerdote, que las extrajéramos de ~u. caja de plás­ Todas las revelaciones de estos carismáticos llevaban a una sola
tico, que las pusiéramos en un pequeño vaso de alu~mlO desechable dirección, a mujeres de la familia de Francesco, pero su extraordina­
y encendiéramos una en cada cuarto de la cas~ deJandola consumir ria univocidad no le restaba nada a la incredulidad de Francesco, a
hasta que se acabara. Además, noS recomendo no tocarlas de su incapacidad de "digerir" que sus mismos consanguíneos, hasta su

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I

y persona que hay que perdonar, porque tiene lugar en un plano espi­
propia madre, hubieran hecho un maleficio a nuestro maUlI1
por ende a toda nuestra vida. y sobre todo emocional antes que material; el perdón
puede ser considerado verdaderamente completo y eficaz cuando, al
Pero todas las reservas se derrumbaron cuando llegó sor Agos­ hablar de la persona en cuestión, no surge ya ninguna emotividad.
tina, una religiosa carismática que, una tarde, acompañada por un
sacerdote, confirmó las indicaciones anteriores y añadió que los Paradójicamente es mucho más fácil perdonar en el plano mental
"guardianes", las mismas palabras empleadas por el profesor R., eran y espiritual que en el emocional; en efecto, existen varios casos de
cuatro, uno de los cuales era muy, pero muy poderoso. Ver a sor personas que sostienen haber "perdonado de corazón" por la ofensa
Agostina indicar las fotografías de los diversos personajes de la fami­ sufrida, excepto que no quieren ni siquiera oír nombrar a la persona
lia, colocándolos en su rol, nos permitió finalmente, pocas semanas en cuestÍón. En este caso el perdón no está completo, es más, los psi­
después, comprender por qué nuestros disturbios están aun presen­ quíatras explican precisamente que esta tensión emotiva y reprimida
tes en el momento en el que estamos escribiendo este libro y es en verdad peligrosa y corre el peligro de crear serios desequili­
actuar para tratar de liberarnos definitivamente. brios psicológicos, a menudo somatizados a través de enfermedades
y malestares.
Inútil subrayar que todas estas personas no se conocían ni fre­
cuentaban, es más, se encontraban a kilómetros de distancia en re­ El trabajo que hay que llevar a cabo para perdonar completa­
giones diferentes. mente es en verdad difícil, especialmente cuando están involucrados
los familiares, pero no existe otra posibilidad, porque de lo contra­
Incredulidad, consternación, incapacidad de tomar en conside­
rio uno es devorado por un sordo rencor y una rabia profunda que
ración una hipótesis semejante: ¿qué debíamos hacer? El consejo de
tarde o temprano están destinados a explotar de manera violenta y
monseñor Gemma fue claro: cortar o reducir al mínimo cualquier
desestabilizan te.
relación con quienes se sospechaba estuvieran en el origen de los
problemas y al mismo tiempo orar por ellos, además de seguir con la En fin, encontrar las personas que revelen el origen de un pro­
plegaria de protección personal. j Yeso fue lo que hicimos! Pero blema es útil con tal de no dejarse luego agobiar por las revelacio­
prueba tan difícil, qué cosa tan aberrante, qué desconcierto en los nes; sin embargo, generalmente estos personajes lo saben muy bien
sentimientos. Al menos ahora sabíamos de dónde provenía el mal y y ofrecen los propios conocimientos solamente a quien esté en capa­
podíamos estar más atentos y protegidos. cidad de sufrir las consecuencias.
Afortunadamente, 'estas revelaciones llegaron en un momento
en el que ya estábamos muy activos espiritualmente, por lo que ni
siquiera un momento caímos en la tentación de experimentar senti­
mientos de odio o de venganza, antes, tratamos por todos los medios
de cultivar los sentimientos opuestos, es decir, el amor y el perdón.
Perdonar a una persona no significa tratar de comprenderla o
peor aún, justificarla; tampoco significa condonar sus acciones u
vidarlas, sino por el contrario, quiere decir comenzar a tomar distan­
cias de ella y de su actuar, confiándola mientras tanto a las manos de
Dios. El perdón no necesita necesariamente el contacto físico con la

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.J

omitían el tema del demonio; se agarraban de un clavo ardiente para


explicar varias cosas, pero cuando se hablaba de demonios, que sin
GW1Tt 'L< ) VII embargo son citados tan a menudo en el Nuevo Testamento, éstos
eran ignorados completamente, como si no existieran. Y en los po­
El padre Ferdinando:
cos casos en los que se hablaba de ellos, historiadores ilustres sos­
un sacerdote de primera línea
tenían que se trataba sólo de las creencias de la época; por ejemplo,
decían que la epilepsia no se conocía y que, por tanto, consideraban
que los endemoniados fueran en realidad epilépticos. Esto me hizo
pensar: "Según mi parecer, no saben qué están diciendo; ¡basta ver a
un endemoniado para convencerse de que no se trata en absoluto de
De vez en cuando frecuentábamos también otro grupo de oración e¡>ilepsia o de simples problemas psiquiátricos!':
que se reunía los jueves por la noche en la amplia capilla de una
comunidad de hermanas en un pueblecito de las afueras de Mega­ Así que se llevó a cabo una meditación continua ...
lópolis; allí se llevaban a cabo oraciones de curación y liberación. Por formación académica soy más bien racionalista, por tanto
De ello había hablado monseñor Gemma y nos había aconsejado nunca había enfrentado estos temas. Aun cuando había presentado
que fuéramos cuando pudiéramos. Los encuentros de oración eran la película El exorcista en algún cinefórum no me había impre­
presididos por un sacerdote, el padre Ferdinando, y eran frecuenta­ sionado tanto, la había valorado más como película cinematográ­
dos por un gran número de personas con problemas. i Fue allí donde fica que otra cosa. También el pensamiento eclesiástico moderno
vimos por primera vez a verdaderos poseídos y nos sentimos muy desconfía mucho más de las palabras que de los hechos, y habla y
impresionados! Pero en vista de que nos habíamos empeñado en es­ escribe, pero a menudo termina por convertirse en incoherente por­
cribir este libro, seguimos frecuentando el grupo por algún tiempo y que, al volar demasiado alto, acaba por ignorar los hechos concretos.
luego Francesco le pidió al padre Ferdinando que le concediera una Así comencé, dándome cuenta de que el camino que iniciaba no era
entrevista. En efecto, hoy día la jerarquía eclesiástica o me ignora o me
combate a través de terceros, actitud doblemente odiosa porque raya
¿Cuándo comenzó a practicar los encuentros de oración por la con la hipocresía.
curación de los enfermos espirituales? ¿Por qué lo inició? ¿Qué lo
motivó? ' ¿Cómo han cambiado su vida estos encuentros?
Comencé hace unos catorce años. Ha sido una experiencia per­ La han cambiado para bien y para mal. En cuanto a lo positivo,
sonal que me ha convencido de que es un camino que no se debe creo haber entendido cuáles son los valores, los instrumentos que
descuidar. También me pareció que cuanto veía de negativo en el nosotros los sacerdotes debemos llevar adelante. He comprendido
mundo fuera a veces en verdad un poco exagerado, sobrepasaba los que en ciertas situaciones delicadas no sirven muchas palabras, más
límites para ser exclusivamente el fruto de decisiones humanas. y bien, entre menos se hable mucho mejor ya que es el Señor el que
entonces me pregunté: "¿Es posible que el hombre sea así de guía. He visto conversiones impensables, sobre todo en el mundo
así de perverso, que haga autónomamente ciertas cosas? ¡Debe ha­ juvenil. En verdad me he convencido de la grandeza del sacerdocio.
ber un porqué!': Otro motivo provino de las lecturas: al leer algu­ Sabemos que la ordenación realiza un cambio radical de la persona,
nos estudios exegético s del Nuevo Testamento, me di cuenta de que pero saberlo es una cosa y verlo otra: pensemos en la Eucaristía,

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cómo las palabras del sacerdote producen un cambio y lo que antes Debo decir que personas completamente poseídas del demonio
era un simple pan se convierte en el cuerpo de Cristo (Mt 26,26; Mc no las he encontrado nunca. Para mí, el poseído es una marioneta
22; Lc 22, 19; 1Co 11, 24). La diferencia está en que en la Euca­ en las manos de Satanás y ya no hay nada que hacer. Los que vienen
ristía esto se acepta y aun se da como algo natural, en cambio, en la a mí son perturbados, quizás en un alto grado, pero sólo desequi­
plegaria de liberación nada se da por descontado. librados. Hay momentos en los que son vejados, sobre todo si son
estimulados por la oración, pero luego llevan una vida sumamente
En cuanto a lo negativo está el problema de que la gente me
normal. Lo que asombra es ver que no se conocen entre ellos, vienen
abruma; y luego están los fanáticos perturbados que hacen perder
de sitios diferentes, pero cuando están allí hablan y reaccionan de la
muchísimo tiempo sin motivo alguno.
misma manera, como si antes se hubieran puesto de acuerdo. Por
ejemplo, todos hablan en masculino, aun las mujeres. He tratado de
¿Hay personas que vienen a usted para un encuentro personal o
decir: "¡Pero si eres una mujer!': y he oído responder: "No, yo no soy
asisten exclusivamente a misa ya los encuentros de oración?
una mujer". Es algo muy raro.
Yo hago oraciones públicas. En esto estoy en desacuerdo con
quienes piensan que el exorcismo no es una misión a la que la Igle­ ¿Cuáles son las mayores dificultades con las que se encuentra?
sia deba dedicarse. Por consiguiente, pienso que cuanta más Iglesia
La mayor dificultad es la desconfianza con la que soy mirado,
haya mucho mejor; dado que para mí la oración comunitaria por la
desconfianza que a veces se vuelve burla. Pero me pregunto: "Si Jesús
liberación tiene un valor superior (Mt 18, 19). Claro que existen epi­
dijo: 'Vayan, curen, prediquen y arrojen demonios en mi nombre'
sodios un poco fuertes para quien participe por primera vez, pero no
lO, 8; Mc 16, 17; 1, 32-34), ¿por qué nosotros no lo hacemos?
acepto las impugnaciones del clero. Si no hay por qué reír cuando ce­
¿Porqué consideramos bueno sólo ir y predicar?". Esto lo he pensado
lebro la Eucaristía y la gente ora conmigo, o cuando recitamos juntos
mucho y para mí es una tentación, es obra del demonio que actúa en
el Rosario, no veo por qué alguien deba sentirse incómodo si oramos
por la liberación de las personas que sufren. No existe justificación los hombres de Iglesia.
alguna para esta diferencia en el tratamiento de la plegaria pública.
¿Por qué nunca ha recibido del arzobispo la autorización para
¿Por qué, respecto a otros grupos de oración, en el suyo hay un intervenir como exorcista autorizado?
porcentaje tan grande de personas perturbadas? Hace unos aí'los pedí al arzobispo la autorización para ciertos ca­
sos y me respondió que no, porque si me hubiera vuelto exorcista,
Porque quien tiene perturbaciones sabe que oramos de verdad y
hubiera dejado de ser párroco y él necesitaba párrocos. Luego me
por eso viene; si hubiera muchos grupos como el nuestro, no habría
dijo: "Si no te conociera bien, no creería lo que me cuentas, pero
muchísimas personas en esas condiciones entre nosotros; pero en
sabiendo cómo eres y cómo piensas el asunto me preocupa': y quiso
vista de que saben lo que hacemos, vienen en cantidades. Por otra
que le enviara relatos, sobre todo referentes a las curaciones. Desde
parte, ¿a dónde podrían ir estas pobres personas? Nadie las escucha,
entonces, todos saben cómo actúo, pero oficialmente nunca me han
o más bien las envían a los psiquiatras. Y después de tres o cuatro
aí'los de análisis, luego de haber gastado muchísimo dinero, se en­ autorizado.
cuentran en las mismas condiciones o peor.

68 69
¿Cuál es la diferencia entre un sacerdote que actúa como usted y un les o demasiado lentos. Con el grupo de oración se cuenta con mayor
exorcista autorizado? poder.

La diferencia es ésta: el sacerdote normal actúa de manera indi­ ¿A través de los poseídos ha recibido usted alguna vez indicaciones
vidual, el exorcista actúa como Iglesia y, por tanto, está protegido y para su vida personal?
cuenta con un poder sumamente importante. Sólo que muchos exor­
cistas nombrados no lo hacen, tienen miedo, tienen problemas ... No Me han hecho entender algunas cosas ¡pero el demonio es menti­
he comprendido todavía por qué este trabajo se encomienda a esos roso y yo no lo escucho! Un 8,44).
santos hombres ancianos y ultra ancianos, de probada santidad ...
Estoy completamente de acuerdo con la santidad, pero esta ¿Cuántas de las personas que han acudido a usted tenían efectiva­
físicamente es pesada y un anciano no la puede realizar. Un exorcista mente problemas de carácter espiritual y cuántas en cambio eran
debe tener como máximo cincuenta o sesenta años para que trabaje enfermos psiquiátricos?
sin demasiado cansancio.
Cuando uno está desequilibrado tiene siempre problemas psico­
¿Por qué las cosas no son de otro modo?
lógicos; es inevitable. Por eso es demasiado fácil considerar que el
aspecto psicológico sea todo, en cambio a menudo es sólo la conse­
Porque los obispos tienen la obligación de hacer el nombramiento cuencia de la influencia demoníaca. Y así es difícil comprender; el
y dado que lo consideran superfluo, escogen sacerdotes de setenta y sacerdote no es experto porque no conoce el aspecto médico, no es
cinco a ochenta años, y así cumplen formalmente con la obligación. apto el psiquiatra porque no conoce el punto de vista eclesiástico; se
Si luego este sacerdote no hace nunca nada, por estar cansado, en­ procede a tientas, con pequeiias ayudas, poco a poco. No se puede
fermo o porque no cree en eso, paciencia. No quiero juzgar a los caminar por atajos, porque no se puede poner en pel igro a esta gente,
obispos, pero creo que deberían cambiar de actitud. ya ha arriesgado lo suficiente y sufre demasiado.

¿Cuántas personas se han dirigido a usted en estos años? ¿Ha sentido miedo alguna vez de afrontar poseídos?

Cientos, miles, vienen a cada momento, de seguido. Pero yo soy ¿Si Dios está con nosotros quién puede estar contra nosotros?
párroco y tengo dos parroquias, así que sólo dispongo de unos pocos (Rm 8, 31). Sin embargo, cuando vemos que alguien está muy agi­
espacios para este problema. Hago lo que puedo. Si todos los párro­ lado, hay un grupo de personas que ayuda a contenerlo. El problema
cos actuaran, sería más fácil, habría menos presiones y sería un bien es cuando logran forcejear. Cierta vez uno me agredió en el altar, me
para la gente. fue bien. pero, cIaro, corrí un gran peligro.

¿Cuán importante es para. un sacerdote tener la ayuda de un grupo Ciertamente todos los sacerdotes de este sector recomiendan prac­
de oración comprometido? ticar asiduamente los sacramentos ...
Es sumamente importante. Es posible que el sacerdote sea un pe­ Es lo más importante. Fortalecerse en la fe ayuda a la persona a
cador, aun el pecador más grande de su grupo, pero puede actuar convencerse de que no está sola, con ella aumenta la fuerza y ella
igualmente como sacerdote, aunque sus resultados puedan ser débi­ misma realiza la liberación. Siempre les digo a las personas que acu­

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den a mí que el exorcismo más grande es la confesión, no otro Pero cuando una persona es liberada, ¿a dónde va a parar el ser
tan poderoso. que la maltrataba? ¿Hay cierto peligro para algunas de las perso­
nas presentes?
Entre las personas que vienen a confesarse con usted, y que usted
Cuántas veces he oído decir: "Quiero salir de aquí, pero sólo no
conoce como maltratadas, ¿ha habido alguna vez por parte de éstas
puedo: ¡libérame, hazme salir!", y yo he respondido: "¡No soy yo
o de sus familiares algún error grave que haya "abierto las puertas"
quien te libera, es el Señor: oremos juntos!': entonces la respuesta es:
al problema?
"¡No, no puedo orar. .. !", ¿qué hacer? Yo quiero liberar a la per­
Claro que sÍ, por ejemplo el frecuentar a algunos hechiceros ver­ sona, los demonios regresan al infierno. Muchas veces el espíritu
daderos, que tratan con el maligno. No los charlatanes que sólo sa­ dice que es un alma condenada, a menudo muerta en condiciones
can dinero, sino los hechiceros verdaderos que por desgracia existen dramáticas; a veces llegan incluso a decir en qué naciones vivieron,
y actúan sin lugar a dudas. Y hay que decir que el maligno es astuto, pero yo no lo creo, porque los espíritus son mentirosos. Otras ve­
ces afirman ser demonios, y yo replico: "¡Sólo eres un estúpido, no
no se revela de inmediato la primera vez que uno va a donde el he­
eres ningún demonio!': Luego les ordeno volver al lugar de donde
chicero, sino después ...
vinieron, es decir, al infierno. Cuando sucede la liberación, no existe
absolutamente ningún peligro para las demás personas que ayudan
¿Cuánto tiempo en promedio se necesita para liberar a una o asisten.
persona?

Se requiere muchísimo tiempo, para mí en promedio un par de Así que el empeño personal es fundamental ...
años: sólo Jesucristo podía liberar en un momento. Tengo varias per­
Siempre he dicho que el 90% lo hace el individuo, el 9% lo hace el
sonas que ya están curadas y otras que van por buen camino. Para
Señor y el 1% el sacerdote. El sacerdote tiene la tarea de mostrar las
mí, un síntoma de inminente liberación es cuando las personas co­
puertas, pero luego las personas tienen que caminar solas.
mienzan a recordar los episodios y dicen: "Recuerdo lo que hice, yo
estaba allí, pero había una fuerza que me manipulaba y yo no era
capaz de resistir': Algunos afirman que la repetición de exorcismos podría ir contra
la responsabilidad...
¿El hecho de que muchas personas arrojen con el vómito o las heces Efectivamente, el trabajo es de la persona. Hay quienes me solí­
elementos o sustancias extrañas y no fisiológicas significa que han citan repetidos y cercanos encuentros. Yo digo entonces que lo que
sido objeto de maleficios o del mal de ojo? cuenta no es el número, sino que es necesario poner manos a la obra
y estar dispuestos a cambiar.
Para mí el mal de ojo no existe, para mí existe el maleficio, lo que
se llama hechicería. Suceden hechos extraños, y quien no lo ve con
sus ojos difícilmente lo cree. Por ejemplo, hay quien vomita mecho­ Según su experiencia, ¿existen personas que efectivamente tengan
nes de cabellos. Lo he visto con mis propios ojos, por tanto lo creo. la capacidad de "ver" dónde están los problemas? ¿Qué rol pueden
Cierto superior mío piensa que esto no es posible, que yo también tener los encargados en la liberación?
loco. Sí, existen y ayudan a localizar el problema y por tanto indican al
sacerdote el campo de acción. Creo que con frecuencia los mismos

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sacerdotes "ven" o "sienten" si algo no va bien; me ha sucedido a Otra cosa que siempre me ha hecho reflexionar es que, con oca­
menudo. Por ejemplo, alguna vez fui llamado a una casa, y percibí sión de fiestas solemnes, se colocan relicarios sobre el altar. Pensán­
que en la biblioteca había algo raro, pero no sabía qué. La mujer, que dolo bien, he comprendido que no se trata de su belleza artística,
había notado mi perplejidad, tomó un libro de los estantes y me lo sino del poder que emana de ellos.
dijo: "Adentro, de la solapa de la portada había polvo de Sai Baba':
En otra ocasión vinieron a mi casa los padres de un famoso fut­ Pero según usted, ¿por qué permite Dios que personas inocentes,
bolista de un equipo de primera división, y me contaron ciertos por ejemplo los niños, sufran por tanto tiempo?
episodios y su malestar. Al final, me dieron una foto del hijo y yo,
mirándola, dije: "¡Tiene problemas en una pierna!': y ellos: "¡No, está Está escrito en la Biblia que el Señor prueba a quien ama (Dt 8,
en el Japón y se encuentra muy bien, juega fútbol!". En la noche me 12-16; Pr 3, 12; leo 11,32; Hb 12, 4-11). Con mucha frecuencia
llamaron por teléfono y me dijeron que habían hablado con el hijo, el se trata de la responsabilidad de los padres o de los antepasados
cual se quejaba de fuertes dolores en una pierna. Alguna otra vez, un que recae sobre los niños. Y luego está el pecado original, que
marido me trajo una foto de la esposa, la pensaba mucho porque se siempre nos ha seguido .. , es verdad; muchos sacerdotes se ríen
acababa de ir a trabajar a los Estados Unidos y me pidió una oración de ciertas afirmaciones. Es absurdo, pero para algunos sacerdotes
por ella. Mirando la foto le dije: "¡Esta mujer tiene problemas en los la Biblia vale sólo para ciertas cosas, pero no para otras.
ojos!': y él: "¡Pero si partió ayer y estaba muy bien!". Esa noche habló
con ella por teléfono: la mujer estaba en cama con una fuerte con­
juntivitis. Claro que pueden ser casos fortuitos, pero han sucedido Según usted, ¿una maldición pronunciada con perversidad, con el
con frecuencia. Tanto es aSÍ, que la gente viene a veces a pedirme único fin de causarles algún mal a las personas, tiene un efecto
informaciones sobre parientes lejanos; yo no los atiendo porque no funesto aunque no intervenga un hechicero?
soy un adivino.
Para mí, sÍ; aunque seamos individualistas, constituimos una
¿Es de alguna utilidad real la intervención sobre las habitaciones y comunidad, todos estamos vinculados, así que quien piense el mal
las casas o sólo se trata de una ayuda psicológica? lo transmite. Cuando oramos por una persona se actúa de manera
positiva sobre ella, de la misma manera al mal decirla se tiene una
Sí, tiene una gran utilidad. Desafortunadamente, los pocos sa­ incidencia negativa.
cerdotes que realizan las oraciones de liberación y los exorcistas no
salen a liberar las casas porque no tienen tiempo. Bendecir las casas
Nosotros los cristianos somos una comunidad sacerdotal (1 P 2, 9),
en Navidad es una costumbre, pero también aquí el objetivo ha sido
con el bautismo se nos dio la facultad de obrar y bendecir; cada uno
mal entendido, se habla de ella como de una ocasión para el diálogo.
en su casa es sacerdote de la propia familia y de sí mismo ...
¿Pero qué clase de diálogo?, me pregunto. Muy bien que haya diá­
logo, pero si durante siglos los sacerdotes fueron mandados a bende­ Es verdad, nosotros los cristianos somos todos sacerdotes.
cir las casas, había una razón bien precisa: alejar el mal de los lugares carácter sacramental no es otra cosa que la participación en el sa­
donde vive la gente. Ahora hemos llegado a la paradoja de enviar a cerdocio de Cristo. Será algo mínimo, pero indudablemente existe.
las hermanas y a los laicos a bendecir las casas. En eso no estoy de A tal punto que los dos esposos, en el momento del matrimonio,
acuerdo, no tiene sentido; entonces más vale no ir. Se necesita un desempeñan el oficio de sacerdotes cuando recitan la fórmula del
sacerdote que sea bien consciente de lo que está haciendo y de cómo sacramento. En el antiguo ritual de la Iglesia existía la bendición de
lo hace.

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la mesa, del pan, que era realizada por el padre; la bendición del bendita hacia el baño. De inmediato abrió la puerta y renunció a su
padre a los hijos que salían de viaje ... se bendecía todo momento y propósito.
ocasión. Hoy día, todo se ha olvidado. Cuando alguien se va se le de~ Al volver a pensar o al leer estas cosas, puede que hasta den ganas
sea buena suerte y se le hacen recomendaciones, se prepara la maleta de reír, pero en realidad son hechos muy graves. En otra ocasión,
pero no se da ninguna bendición. durante una oración de liberación, una mujer agitada de manera es­
pecial me lanzó un zapato que me golpeó la cara. Al tInal, cuando se
¿Nos puede contar algunos episodios particularmente significativos calmó, le llevé el zapato, tenía un fuerte dolor en una mejilla, la cual
que haya vividor estaba bastante hinchada. Pues resulta que era la misma mejilla en
la que su zapato había golpeado la mía, sólo que yo no tenía ningún
Presencié el caso de dos hermanos, ambos con problemas; uno
rastro.
se encontraba en mi estudio, el otro fuera. Se pusieron a escribir al
mismo tiempo en una grafía que no conozco, ciertamente ni en he­ Ahora bien, nadie puede provocarse ciertas marcas en la cara si
breo ni en árabe, no sabría decir qué idioma. Al comparar las dos está en medio de las demás personas y si nadie ve mientras se las
hojas se veía que era lo mismo, sólo se diferenciaban en detalles mí­ hace; tienen un origen misterioso.
nimos. Pregunté acerca de las diferencias. El primero me respondió: Un hecho más. Un muchacho había comenzado a quejarse de
"Eres un ignorante, la de él es una escritura normal, la mía es una unos dolores de cabeza muy agudos a los que no podía poner reme­
escritura noble". Si yo le decía algo al hermano en el estudio, el otro dio. Después de varias recuperaciones en el hospital fue enviado a
afuera oía la pregunta y respondía de la misma manera, estaban en un psiquiatra, al que no quiso ir porque decía: "¡Me duele la cabeza,
comunicación. Uno de los dos hombres se esforzó, se convirtió y pero no estoy 10co!'Z Luego de repetidas bendiciones se curó, ahora
ahora está curado, mientras el otro se encuentra todavía en las mis­ estudia y está terminando la universidad, está feliz y ennoviado. De
mas condiciones dramáticas. vez en cuando me viene a visitar y a pedirme otra bendición, por
Tuve el caso de una persona a la que ¡le rocié la cara con agua seguridad. Hay alguien que se adormece mientras lo bendigo y ya no
bendita y se quemó! Fue al hospital para hacerse medicar y, al temer siente nada. Alguno descansa apenas lo toco.
que fuera considerado loco, dijo que se había quemado con el café.
Me ha impresionado mucho, al frecuentar su grupo de oración, ver
Otra había comenzado a tener problemas de salud, con hemorra­
a personas que entraban a la iglesia absolutamente tranquilas y
gia ocular y corría el peligro de quedar ciega; los médicos no sabían
con autonomía, tomaban una de las bolsas de plástico colgadas en
cómo curarla y ella se encomendó a la Iglesia. Poco a poco el caso se
la pared y luego, durante la oración se encolerizaban, vomitaban ...
fue manifestando, con momentos muy dramáticos en los que trató
de quitarse la vida. Desafortunadamente, el deseo de suicidarse es Sí, uno de estos muchachos es precisamente un acólito y ayuda
una de las tentaciones atroces recurrentes provocadas por el demo­ durante la liturgia. Gracias a Dios, durante la misa nunca ha suce­
nio. Un día se encerró en el baño y quiso lanzarse por la ventana. No dido nada, es un muchacho sumamente bueno que viene cada do­
había manera de hacerla salir, me llamaron y yo corrí, pero no me mingo y se confiesa con regularidad; los problemas se presentan sólo
escuchaba. Finalmente, como en la cerradura no estaba la llave, el durante las oraciones de liberación.
Señor me inspiró y por la ranura de la llave introduje un rociador de
los que se usan en el lavado de la ropa y disparé un chorro de agua

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su servicio. Así que cada vez me he convencido más de que Jesús no


sólo predicó; no sólo mandó bautizar a los que creyeran en Él (Mt
CI\PITUU) VIII 28, 19-20; Heh 2, 38); no sólo perdonó a los pecadores arrepentidos
y confirió a sus sacerdotes el poder de absolver los pecados (Mt 9,
El padre Francesco Bamonte: 10-13; Me 2,17; Le 5, 31-32; 24, 47); no sólo curó a los enfermos (Mt
exorcista bien organizado! 4,24; 8, 16; 14, 14; 14,35-36; 15,30; 19,2; Me 6,56); no solo celebró
y mandó celebrar el sacrificio eucarístico (Le 22, 19-20; Mt 26,26-28;
lCo 11, 23-25; Me 14,22-24), sino que también realizó exorcismos
de manera frecuente y mandó sacar los demonios en su nombre.
Obrando así, confirió en todos los que creen en Él y están en su Igle­
Entre los diversos libros que tratan el tema, nos había impresionado sia el mismo poder de arrojarlos (Mt 10,8; Me 16, 17-18; 1, 32-34).
mucho Posesiones diabólicas y exorcismos (Paulinas) del padre Fran­
De manera que, he sentido fuertemente que el exorcismo es un
cesco Bamonte. Luego de haber descubierto que vivía y trabajaba
mandato específico de Cristo que no se puede desatender, porque
en Roma, decidimos entrevistarlo, porque demostraba tener ideas
claras y sobre todo por haber creado un protocolo bien organizado si se obrara así uno se haría responsable grandemente del tremendo
que partía de escuchar a los necesitados y actuaba a través de sus sufrimiento de personas que pueden ser ayudadas solamente por
colaboradores, de modo que acudieran a él por el exorcismo sólo este ministerio que Jesús confió a la Iglesia y que, sin duda, se cuenta
personas valoradas con anterioridad. En vista de que los exorcistas entre las obras de misericordia corporales y espirituales.
son, literalmente, asediados por la gente, la importancia de este me­ Por eso, apenas fui ordenado sacerdote pedí a mis superiores po­
canismo de valoración preventiva no se debe subvalorar. der dedicarme también a esto. Desafortunadamente, no todos los
sacerdotes que hacen dicha petición obtienen la autorización. Para
¿Cómo llegó a ser exorcista? mí fue relativamente fácil, porque di con un superior general muy
comprensivo ante esta mi "vocación en la vocación': En general, cabe
Personalmente ejerzo el ministerio del exorcismo por vocación. señalar que en estos últimos años la situación en Italia ha mejorado,
Cuando me preparaba para el sacerdocio en el seminario y frecuen­ porque ha crecido el número de los exorcistas; lástima que todavía
taba la facultad de teología, cada vez iba madurando más dentro seamos dramáticamente pocos respecto a las numerosas peticiones
de mí la convicción de que quien desee verdaderamente estar con que nos llegan. En el extranjero la situación es aún peor.
Cristo y difundir su reino en el mundo, debe inevitablemente en­
frentarse con el poder de las tinieblas, es decir, con aquel mundo os­
¿Pero cómo hizo usted para tener esta "vocación" especial de exor­
curo e invisible, pero real, constituido por Satanás y los demonios a
cista? Presumo que en los seminarios no se hablaba mucho de
su servicio (Heh 26, 18), cuya existencia se nos ha revelado por Dios
ella ... ¿Cómo maduró su convicción?
y que por tanto es considerada como una certeza por el magisterio
de la Iglesia católica. Sin embargo, el poder de las tinieblas no sólo Nació de la certeza interior de que la vida cristiana conlleva ine­
está compuesto por los espíritus rebeldes, que al inicio de la creación vitablemente la lucha contra el poder de las tinieblas. El apóstol Juan
eran ángeles y que ahora actúan en el mundo para oponerse al reino nos recuerda que Jesús vino al mundo para "destruir las obras del
de Dios entre los hombres, sino también por los mismos hombres diablo" (lJn 3, 8; Heh 10, 38). Esta lucha contra el poder de las ti­
que, con su vida, se ponen de manera consciente o inconsciente a nieblas es mucho más amplia que la sola liberación de las posesio­

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..

nes diabólicas, es una liberación global de todo aquello que Satanás XVI, han exhortado a los sacerdotes a que estén disponibles para
busca presentar para oprimir al hombre en su ser de hijo de Dios y las confesiones. Claro que confesar requiere tiempo, empeño, con­
alejarlo de Él (Lc 8,12; Ef6, 10-12; 2Trn 2, 25-26; Hb 2,14-15; lP S, centración y, si un párroco está solo, ¿cómo hace para confesar en
8). En este contexto surge la vocación de dedicarme de manera es­ cinco minutos antes de la misa a decenas de personas que llegaron
pecial a las personas que sufren posesiones, sin excluir, no obstante, momentos antes? Por eso, hay muchas parroquias en las cuales se es­
los demás aspectos de la lucha contra el demonio, la cual es mucho tablecen momentos durante la semana en los cuales los fieles saben
más extensa. que encontrarán al sacerdote disponible sólo para las confesiones,
quedando abierto su derecho de poder confesarse en cualquier mo­
Por ejemplo, el mismo ministerio de la confesión es más impor­
mento, en caso de necesidad.
tante que el exorcismo, porque libra no los cuerpos, sino las almas del
dominio de Satanás; en efecto, es muy peligroso que nuestra alma se
encuentre en pecado mortal, porque morir en tales condiciones sig­ Volviendo a los exorcismos, según usted, ¿por qué sus superiores lo
nificaría ir a la perdición en el infierno. El infierno no es una fábula escucharon cuando manifestó su vocación exorcista?
para aterrorizar a los niños cuando se portan mal, sino el estado del
Porque evidentemente el superior general de mi Instituto había
tormento eterno y de la lejanía definitiva de Dios, al cual van aque­
comprendido que se trata de un ministerio necesario en la Iglesia,
llos que, hasta el último instante de su vida y por libre y misteriosa
un bien para todo el pueblo de Dios, y por eso, al ver en mí esta vo­
elección, se cerraron totalmente al amor y a la misericordia de Dios.
cación y al entender que era auténtica no me desanimó. Obviamente,
Desafortunadamente, no parece que todos los sacerdotes estén no me podía dar el nihil obstat apenas ordenado sacerdote, pero me
gustosamente a disposición de quienes quieran confesarse. La caren­ permitió seguir, estudiar y profundizar teológicamente todo lo re­
cia de confesores disponibles es una llaga abierta, pero es también ferente a este tema, acercarme a sacerdotes que desde hacía mucho
verdad que muchos cristianos aun no han entendido el significado tiempo eran exorcistas e inscribirme en la Asociación Internacional
y el valor de este sacramento; no son pocos los que piensan en la de Exorcistas, y así, cuando llegó el momento, me autorizó a que le
confesión como en una especie de trato, encontrar algún pecado solicitara al obispo la licencia.
para contar al sacerdote sin entender bien el porqué. Falta una ca­
Fueron diez años de preparación desde 1990, cuando fui orde­
tequesis apropiada sobre la confesión, comenzando por los niños;
nado sacerdote, hasta el 2000, momento en el que recibí la licencia
desafortunadamente, a menudo los párrocos delegan mucho en los
de realizar exorcismos en los poseídos. Entre 1999 y el 2006 escribí
catequistas, los cuales no siempre tienen ideas bien claras al respecto.
también libros con temas vinculados a este ministerio: ¿Qué hacer
Después del bautismo es el sacramento más importante y su benefi­
con esos hechiceros?, publicado en 1999, y Los daños del espiritismo,
cio es enorme en nuestra vida espiritual. Es el sacramento que, junto
publicado en el 2003, ambos con la Editorial Áncora, y Posesiones
con la Eucaristía, nos acompaña durante toda la vida; pero la Eu­
diabólicas y exorcismo, publicado con las Paulinas de Milán en el
caristía no puede ser recibida sin la confesión periódica, porque es
2006.
precisamente gracias a ella por lo que, así sólo tengamos pecados
veniales, somos ayudados a no caer en los pecados mortales. ¿Com­
prende entonces por qué una de las actividades más llevadas a cabo Así que, ¿con apenas cuarenta años2 es uno de los exorcistas más
por el demonio entre los católicos es precisamente contra este sacra­ jóvenes?
mento? Es posible, pero no estoy seguro.
Hay varios documentos del magisterio de la Iglesia que enfatizan
su valor y muchas veces, primero Juan Pablo II y ahora Benedicto
2 En el 2007 en el momento de la entrevista (N. del R.).

80 81
Usted logró tener la autorización luego de un largo recorrido de ¿Por qué el exorcismo requiere tanto esfuerzo?
preparación que duró diez años. ¿Por qué motivo, en cambio, mu­
chos exorcistas nombrados son "reclutados" sin que tengan alguna Porque hay que dedicarle horas y horas a una persona y los resul­
inclinación o preparación en este campo especifico? ¿ Y cómo con­ tados se ven después de años; por consiguiente, si las personas son
ciliar esto con lo que acabo de leer en algún libro acerca de que muchas, lo mismo es el esfuerzo. Si a una persona se le deben dedicar
en algunas diócesis de Francia hay sacerdotes que no creen en la dos horas, ¿cuántas podrán ser tratadas en una mañana? Máximo
existencia del demonio y aún así son nombrados exorcistas? tres. ¿Y con cuántas puede uno encontrarse en una semana? ¡Muy
pocas! Además, a mí no me gusta hacer las cosas de prisa. Primero
Lo mínimo que un obispo debería hacer siempre es informarse deseo tener una conversación y oír cómo le ha ido desde el último
si hay alguien que tenga la disposición necesaria para realizar este encuentro y animar a la persona, prepararla porque es una lucha
ministerio, y sé que muchos obispos lo hacen; desafortunadamente, muy dura la que está por afrontar. A menudo, antes de proceder con­
a veces no encuentran sacerdotes que quieran comprometerse en fieso, y de esta manera en una mañana me puedo encontrar con dos
este campo pastoral, de modo que se ven obligados a preguntarle o tres personas. Me canso mucho también por los gritos que rompen
a alguien en quien precisamente no pensaba. En estos casos los re­ los tímpanos, luego al tratar de evitar puños, puntapiés, escupitajos
sultados son evidentes, porque no hay experiencia ni pasión, ni pre­ y en fin al tener que enfrentarme con las tácticas psicológicas que
paración en el sacerdote. En Francia ha sucedido que, teniendo que el demonio lleva a cabo para desanimarme, deprimirme o para im­
nombrar a alguien para ese servicio, el sacerdote encargado, que no
pedirme orar durante el exorcismo y reducir así la eficacia misma.
tenía formación alguna y ni siquiera creía en la posibilidad de la ac­
Además, mi ministerio sacerdotal no está dedicado exclusivamente
ción extraordinaria del demonio, mandó a todos a donde el psiquia­
a los exorcismos, también tengo otras obligaciones, como la de con­
tra sin hacer el más mínimo discernimiento. Pero si un poseído es
fesor en el seminario. Muchos sacerdotes no quieren dedicarse a este
sometido a curaciones psiquiátricas que no necesita, corre el peligro
ministerio porque tienen demasiadas ocupaciones, o por la falta de
de ser arruinado, y así ese sacerdote incompetente será responsa-
ante Dios de todos los sufrimientos que habría podido ahorrar formación en los seminarios acerca de la real existencia de las po­
a aquella persona. El demonio sabe muy bien que las curaciones sesiones y la consiguiente necesidad de la respectiva lucha; un sa­
psiquiátricas no necesarias son devastadoras y se esfuerza en hacer cerdote puede no sentirse competente o hasta puede llegar a tenerle
creer en una enfermedad psíquica que no existe. miedo al demonio, pero, como dice el padre Gabriele Amorth,
un sacerdote confiesa, no debe temer exorcizar porque confesar es
arrancarle las almas al demonio, y al demonio le interesa más domi­

Según usted, ¿por qué los mismos obiSpos no practican


nar las almas que los cuerpos':

el exorcismo?

Alguno en Italia lo hacía, por ejemplo monseñor Gemma, quien ¿Puede aclarar mejor esa diferencia entre posesión diabólica y es­
ahora está pensionado, aunque sigue interviniendo; también sé de clavitud del alma por parte del demonio?
otros, pero de manera muy reservada. No obstante, los obispos están
muy ocupados yel exorcismo requiere demasiado esfuerzo y tiempo Supongamos que un hombre muera en estado de posesión diabó­
que por tanto sería bueno que concedieran licencias de exorcizar a lica pero en gracia de Dios: ¡se salva! Su alma va al cielo porque no es
sacerdotes, los cuales deberían ser eximidos de otras obligaciones. prisionero del demonio. En cambio, un hombre que no esté poseído
pero muera en estado de pecado mortal, va al infierno, porque su
alma en aquel momento era esclava del demonio. Así se comprende

82 83
por que la actividad que más le interesa al demonio es la tentación, Esta diversidad en los estados de conciencia se debe a que existen
sugerirnos el pecado y, mediante nuestro consenso, llevarnos a la unas posesiones demoníacas más fuertes que otras. Durante la crisis,
ruina eterna. al estar la voluntad bloqueada, la persona no es en lo más mínimo
Hay otros aspectos que es importante aclarar: el pecado mortal responsable de cualquier acción que lleve a cabo. Algunas señales
no hace que el demonio entre en el alma del hombre, pero crea una indicadoras para distinguir la posesión de las enfermedades men­
dependencia del alma, como un encadenamiento, que se vuelve más tales y de las simulaciones son el hablar o comprender lenguas des­
fuerte entre más numerosos y graves sean los pecados mortales co­ conocidas por la persona; el conocimiento de cosas o hechos que el
metidos. Esta dependencia que encadena al alma es más peligrosa sujeto no puede saber; una fuerza física o un peso corporal anormal
que la posesión diabólica, que es una acción que interesa al cuerpo, que, una vez terminada la crisis, desaparece; la aversión a lo sagrado,
pero no al alma y por tanto, de manera semejante, es como una en­ como sentirse mal donde se encuentren los sagrarios, en los san­
fermedad que daña el cuerpo, pero que no perjudica necesariamente tuarios o en los lugares en los que se conservan reliquias de santos;
la salvación eterna del alma. sentir la mano del sacerdote impuesta sobre la cabeza como un peso
insoportable; recibir quemaduras en el cuerpo como consecuencia
contacto con el agua bendita que viene rociada encima y tener
Ciertamente, cuando una persona está poseída en lo físíco, tiene
reacciones violentas, furiosas y agresivas. En especial, si se ora sobre
tales manifestaciones que es difícil entender si su alma está en gra­
un poseído o se le bendice, blasfema, rompe objetos, se lanza contra
cia de Dios: quien se encuentra en este estado blasfema, insulta
los presentes. Todo esto puede suceder aunque haya alguno que sólo
y es agresiva y la separación entre cuerpo, mente y alma es poco
esté orando mentalmente. Sucede frecuentemente, en estos casos,
evidente.
que la persona, al volver la calma, no recuerde nada de su comporta­
Respecto a los criterios de discernimiento para comprender miento; puede, además, cambiar el timbre de la voz, que se deforma
cuándo hay una verdadera posesión diabólica, escribí en mi último en tenebrosa, impostada o en la de barítono, lúgubre o ronca; otras
libro que la posesión no es un desdoblamiento de la personalidad, veces, en cambio, se vuelve estridente o metálica; puede vomitar ob­
como sucede en el caso de una enfermedad psíquica. Se trata más jetos como agujas, clavos, pedazos de cadenas, piedrecillas, mecho­
bien de una especie de "sustitución temporal" de la persona, en los nes de cabello, vidrios, pedazos de tela, carne, flores, cuerdas, anillos,
"momentos de crisis" tiene lugar el dominio despótico, brutal y vio­ aretes y muchas cosas más. Estos objetos son aquellos sobre los cua­
lento de un espíritu demoníaco (o también de más de uno), que actúa les se ha llevado a cabo el maleficio. Ordinariamente son arrojados
desde dentro del cuerpo, haciéndole hablar y actuar como quiere, sin por la boca, pero no siempre provienen del estómago de la persona;
que la víctima pueda resistirse. La posesión es estable, así se alternen así se explica por qué el poseído no sufre nunca daños físicos, aun
períodos más o menos largos de calma y de crisis. Durante el mo­ cuando salgan grandes pedazos de vidrio; se trata, en efecto, de una
mento de la crisis algunos son conscientes de lo que sucede, pero no acción de transferencia del objeto que ha recibido el maleficio en el
se pueden oponer; para otros, el momento se caracteriza por una instante en el cual sale de la boca. En general, este fenómeno es signo
sucesión convulsiva de instantes en los que están conscientes y otros de la progresiva liberación de la persona, pero la liberación no está
en los que no. En estas alternaciones, algunos logran aun reaccionar ligada necesariamente a estas manifestaciones; además, el poseído
con la oración, otros no. En fin, en los casos más graves, la persona puede ser sensible a alimentos y vestidos que hayan sido bendecidos
durante la crisis puede entrar como en una especie de coma y perder sin que él lo sepa, o a imágenes sagradas, objetos como camándulas,
completamente la conciencia de lo que pasa. crucifijos o reliquias.

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¿ y usted cómo se siente cuando practica el exorcismo? ¿Qué pasa ¿Exactamente, qué diferencia hay entre una plegaria de liberación
por su mente y su corazón? y un exorcismo?
Me siento en comunión con Cristo y con la Iglesia, que tiene la La primera es una invocación que se dirige a Dios, directamente
misión de liberar a la humanidad de las fuerzas del mal que la ame­ o mediante la intercesión de la santísima Virgen, de los santos o de
nazan. Siento además una gran compasión por la persona, torturada los ángeles, implorando la liberación de ese hermano que está po­
por quien quiere su destrucción en todos los sentidos. Soy consciente seído por el demonio. En cambio, el exorcismo está constituido por
de que a través del ministerio de los exorcismos puedo evitarle a al­ una parte invocadora en la que se le pide a Dios la liberación y una
guien el sufrimiento (así no sea de inmediato, sino gradualmente), y imperativa con órdenes directas al demonio, que vienen impartidas
agradezco a Cristo que me da la posibilidad de ayudar en su nombre.
en nombre de Jesucristo y de la Iglesia, con el fin de que desista de
atormentar a aquella persona.
¿ nene usted el apoyo y la ayuda de sus cohermanos?
Si con el exorcismo, que prevé también las órdenes al demonio,
Sí, en mi instituto religioso de los Siervos del Corazón Inmacu­ se necesita tanto tiempo, ¿qué se obtiene con las oraciones de libera­
lado de María, nadie niega la existencia del demonio y la posibilidad ción, que son súplicas? ¿Sirven para algo?
de su acción ordinaria y extraordinaria, por lo cual hay un gran res­ La liberación depende de muchos elementos. Cuando en realidad
peto hacia este ministerio y hacia quien lo ejerce legítimamente. El
existe una posesión, el demonio reacciona de manera mucho más
único problema está en que en la Casa Generalicia yen el seminario
fuerte a la orden imperativa que a la oración de liberación, porque
de mi Instituto, donde vivo con mis cohermanos, provocaría dema­
siente toda la fuerza de la orden que se le imparte en nombre de
siado ruido y confusión al recibir a estas personas que, durante los
Jesús y con la intercesión de toda la Iglesia. Pero también es cierto
exorcismos, a menudo gritan de manera terrible; pero la providencia
ha venido en mi ayuda y el rector de la basílica de Santa Anastasia en que la plegaria de invocación, hecha con mucha fe por un sacerdote
Roma, en la cual se instituyó la adoración perpetua las veinticuatro no exorcista, puede tener algunas veces el mismo efecto y obtener
horas, no sólo puso a mi disposición un lugar muy bien acondicio­ la misma reacción por parte del demonio. Pero la liberación más o
nado, aislado acústicamente, sino que también me dijo que esperaba menos rápida depende también de otros factores como la fe de quien
ofrecer hospitalidad a algún exorcista autorizado. Es un hecho rarí­ está poseído, la fe de quien ora por él, las causas que la provoca­
simo que los sacerdotes ofrezcan "alojamiento" a los exorcistas, por­ ron (satanismo, espiritismo, maleficios, maldiciones, etc.), el tiempo
que temen el problema que se pueda presentar. transcurrido desde cuando comenzó la posesión y el momento de
los primeros exorcismos, la colaboración que el poseído preste al
¿ y si estas personas se vuelven muy agresivas, no tiene usted miedo? exorcista y la intensidad de la vida espiritual que lleva.
Por ejemplo, si un niño es consagrado a Satanás recién nacido y
Bueno, por supuesto, se requiere cierta prudencia. Es conveniente la presencia del demonio se manifiesta de manera evidente cuando
tener un equipo de colaboradores que sean ante todo hombres de es adolescente o adulto, es claro que la liberación será mucho más
oración y que luego estén listos a intervenir, cuando sea necesario, lenta, porque el demonio "echó raíces" con más profundidad, dado el
manteniendo firme al poseído, que puede hacerse daño él mismo ya tiempo transcurrido. Permanece el hecho de que la orden imperativa
los demás, aun sin quererlo. Algunas veces, cuando no logran esca­ es muy sentida por el demonio, son como latigazos que le llegan, y
parse de la oración, el demonio induce a los poseídos a agredir al sa­ así se entiende la manera como reacciona. La reacción del demonio
cerdote por lo que se necesita la asistencia de un grupo de personas.

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al exorcismo es física y verbal, y cuando se manifiesta hay que pro­ 15), pero con un poder que tenía un origen muy diferente: no era su
ceder con decisión y paciencia, sin desanimarse a causa del tiempo poder, sino el poder del único y verdadero Dios que actuaba a través
necesario o si los resultados son lentos. Cada exorcismo reduce el de él. Hoy día, muchos hechiceros hacen pasar por dones de Dios
poder del demonio y por tanto, al proceder con perseverancia, salvo o carismas las que en realidad son acciones ocultas del demonio li­
casos raros, la liberación llega. Es también cierto que el demonio beradas luego de ritos de magia, de brujería o de satanismo. Puede
trata de esconderse algunas veces, hace todo lo posible para no ma­ también suceder que alguien crea tener ciertas facultades fuera de lo
nifestarse abiertamente, por lo cual, cuando hay fundadas sospechas normal por dones de Dios, cuando en realidad está bajo la acción de
de que en realidad sea él de verdad y se esté escondiendo, para sa­ espíritus malos de los que ni siquiera es consciente.
carlo a la luz se necesita continuar con las oraciones de liberación y También hay sacerdotes que se apoyan en supuestos carismáti­
con las bendiciones ordinarias. cos; sin embargo, el peligro está en que se dejen "guiar" por ellos sin
un discernimiento profundo y personal de los casos individuales;
¿Con qué frecuencia se encuentra con las personas necesitadas de por eso no comparto tal modo de proceder. Cuando me encuentro
exorcismo? ante un caso sobre el cual necesito saber si hayo no posesión, antes
que correr riesgos confiando en carismáticos prefiero, además de las
Depende de la gravedad del caso: si es posible, una vez por se­ conversaciones que son siempre necesarias, orar con la persona y
mana, de lo contrario cada dos semanas. Para los casos menos gra­ con el equipo que me asiste, y el Señor me ayuda a entender por los
ves, cada tres o cuatro semanas. signos que se manifiestan o por lo que experimento interiormente,
si tiene o no necesidad de exorcismos. Si un sacerdote se esfuerza
¿Qué piensa de los carismáticos? en usar la razón, el buen sentido, mucha fe y mucha oración, estoy
seguro de que Dios hará que no le falten las luces del discernimiento.
En el movimiento de la Renovación del Espíritu se presta una
atención especfal a los carismas que Dios pueda conceder a quien
quiera, como quiera y cuando quiera; sin embargo, cuando no co­ ¿Las maldiciones proferidas por los familiares crean de veras
nozco personalmente a alguien, no me fío, porque pueden ser ca­ mayores dificultades para la liberación?
rismas aparentes que en cambio son acciones ocultas del demonio. Hay que ser cautos en este tema porque se podrían crear falsos
Existen carismas verdaderos y falsos. Una misma manifestación apa­ temores. Si son sólo un modo de decir, son inocuas; pero si son en
rentemente carismática puede venir de Dios o del demonio. Dios, verdad maldiciones salidas del corazón de una persona pérfida y de­
que lo sabe y lo ve todo, puede permitir algunas veces que una per­ dicada profundamente al demonio, y en particular, si esa persona
sona vea o escuche o comprenda ciertos hechos que no pueda saber, tiene un vínculo de sangre con aquel que es maldecido, parece a ve­
pero aun el diablo puede ver y conocer más cosas que nosotros, los ces que suceden efectos maléficos reales, en especial males físicos
seres humanos, aunque en una medida infinitamente menor res­ que golpean a la víctima con verdaderas formas de maltrato.
pecto a Dios. Se necesita entonces tratar de comprender de dónde
viene ese conocimiento fuera de lo normal que alguien tenga, por­
¿Cuántas personas han acudido a usted en estos años?
que el demonio, con un fin malo, puede sugerir a alguien informa­
ciones a veces exactas. Al leer a Moisés se ve que hubo una lucha Desde que comencé hasta hoy, miles; pero no todas las que han
entre él y los hechiceros que en cierto momento lograron realizar los venido a mí necesitaban efectivamente exorcismos; sólo del 5 al! 0%.
mismos prodigios que él llevaba a cabo (Ex 7, 11; 7, 22; 8, 3; 8, 14­ Los tiempos necesarios para la liberación varían mucho. Los casos
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menores se resuelven en algunos meses, otros un poco más graves pre después de haber adquirido algo que pertenezca a la persona.
en unos dos o tres años, otros requieren definitivamente varios años. En general, trata de introducir el maleficio en la almohada en la que
duerme la persona señalada, pero es preciso afirmar siempre que, si
En lo que respecta a quien haya sido liberado por el Señor es
en una casa se ora y se está en gracia de Dios, existe una barrera y
necesario que siga recibiendo exorcismos todavía por un cierto pe­
para los agentes de lo oculto es más difícil obtener el efecto deseado.
ríodo, porque la fase posliberación es en verdad muy delicada.
Si se hace un maleficio en la comida o en la bebida que luego se con­
sume, el efecto puede ser muy fuerte.
¿Por qué es tan delicada?
Respecto a lo anterior, es bueno pedirle siempre al Señor que ben­
Ha sucedido algunas veces que, llevados por el entusiasmo inicial, diga el alimento que se está por comer; la simple bendición hecha de
algunos hayamos bajado la guardia y el demonio haya regresado. Se este modo puede mitigar o anular el eventual maleficio sobre lo que
necesita que el nivel de la vida espiritual se mantenga siempre alto. se está por comer o beber; no sólo esto, sino que está bien pedirle
Además, se continúa con los exorcismos aun cuando se vea que la siempre a Dios que bendiga todo lo lícito que uno use, haga, coma
persona no caiga ya en trance o no tenga reacciones violentas, co­ o beba y agradecerle todos sus dones. Luego están los sacramentales
nocimiento de cosas ocultas, lenguas desconocidas, aversión a lo que se emplean con fe como por ejemplo, el agua bendita que se
sagrado, etc. En efecto, el demonio podría haberse ido, así como rocía con devoción en uno mismo, en los familiares y en la casa,
podría sólo fingir haberlo hecho, esperando de ese modo evitar como también en la cama por la noche antes de dormir, a fin de que
exorcismos; por tanto, se debe continuar como si aun estuviera, con­ el Señor nos guarde con su presencia y aleje todas las insidias del
siderando la posibilidad de que pueda haber llevado a cabo el truco demonio. Aun un objeto conservado con fe sobre la persona puede
de no manifestar ya reacciones, porque el exorcista, llevado por la servir de protección si es llevado tratando de imitar las virtudes de
duda, disminuyó su atención y concentración en la oración. Sólo si aquel o aquella que representa, como por ejemplo: Jesús, Nuestra
después de un año no se ve ninguna manifestación y la persona pa­ Señora o un santo, a los cuales se les pide (mientras se esfuerza uno
rece haber mejorado psicológica y espiritualmente, se puede pasar a en imitarlos), la custodia y la protección. Ésta es la diferencia fun­
cortas bendiciones y a los exorcismos con regularidad para su pro­ damental entre fe y superstición, entre un objeto sagrado y un amu­
tección. Tenga en cuenta además que algunos, aun cuando el demo­ leto. Finalmente, están las invocaciones con las que se pide a Dios su
nio se haya marchado, siguen muy debilitados, por lo que necesitan protección.
varios años para rehabilitarse, si no del todo al menos en parte, de
malestares físicos y psicológicos dejados por la lucha que ¿A dónde van los espíritus que se alejan de las personas durante los
sobrellevado durante tanto tiempo. exorcismos?

¿Es posible que sólo sean objeto de maleficios las habitaciones, las Eso queda en el misterio de Dios. Nunca lo he sabido, para mí lo
cosas y no las personas?
importante es que se hayan ido; digo con frecuencia: "Ve a los pies
de la cruz de Jesús y que Él te dé tu destino". ¡No creo que el Señor le
En teoría, sí; depende mucho del poder maléfico que tenga el he­ permita entrar en otra persona!
chicero y de cuáles objetos logre obtener de la persona sobre la que
pretenda actuar. Si llega a tener cosas personales, la acción puede ser
más eficaz. Algunas veces puede actuar a distancia, pero casi siem­

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Alguien afirma que se puede tratar de almas de difuntos erran­ los descendientes de aquellos que han poseído tratando de suscitar
tes que tienden a "parasitar" a un viviente que tenga los mismos las mismas propensiones y actitudes negativas que fomentaron en
los ancestros. El exorcismo bloquearía la transmisión generacional
vicios.
del espíritu maligno, es decir, liberaría a la familia. Siempre según
Cuando exorcizo y estoy delante de un ente real espiritual, sólo esta teoría, si las personas están en gracia de Dios el espíritu malo
pienso que me encuentro ante el demonio y no delante de almas es bloqueado, pero si están en pecado mortal entonces la puerta se
errantes, así a veces afirmen serlo. Por otra parte, según la doctrina abre para que pueda pasar y hacer daños. El espíritu maligno, que se
de la Iglesia, cuando una persona muere su alma va de inmediato al transmite de generación en generación, iría así a hacer más pesada
paraíso, al purgatorio o al infierno; no están previstas otras posibi­ aun la carga de tentaciones que oprime la vida de cada uno; podría
lidades. Es verdad que, según algunos santos, en ciertas ocasiones, ser el vicio de beber, las perversiones sexuales, la tendencia de recu­
porque Dios lo permite, alguien podría cumplir su expiación, en vez rrir a la hechicería o a practicarla, etc.
del purgatorio en el lugar donde habitualmente vivía, y allí repara­
ría de alguna manera sus pecados. Algunos afirman que no siempre Yen tales casos, ¿se hacen oraciones especificas o se emplea el
ciertos fenómenos de infestación de los lugares estarían ligados a la ritual acostumbrado?
acción extraordinaria del demonio, sino que podrían tener su origen
en la presencia de almas que allí estarían cumpliendo su purgatorio, Para los propios antepasados sirve cualquier oración como tam­
y Dios permitiría señalar su presencia con la manifestación de fenó­ bién santas misas de sufragio. Desde hace algún tiempo, circulan
menos insólitos en el lugar, de modo que, al llamar la atención de igualmente oraciones por la curación y la liberación del árbol genea­
alguien, pudieran luego recibir sufragios; pero sobre esta hipótesis lógico realizadas mayormente en los ambientes de los grupos de la
la Iglesia nunca se ha pronunciado. A mí nunca me ha sucedido du­ Renovación del Espíritu. Cuando parece que uno se encuentra ante
rante los exorcismos encontrar almas errantes, me parece que estas la posesión de un espíritu malo que proviene de la cadena genealó­
ideas son parte del espiritismo o del esoterismo; cuando he encon­ gica se puede entonces proceder también con el exorcismo, pero no
trado un ser que molestaba, siempre se ha tratado del demonio. Hay existen exorcismos específicos para estas situaciones, sólo oraciones
quienes afirman que desde el momento en el que un alma conde­ de liberación y de curación del árbol genealógico.
nada está en el infierno y por ende completamente bajo el poder del
demonio, sería posible que en una posesión el demonio utilizara un Padre, al leer el Catecismo de la Iglesia Católica nos hemos sentido
alma condenada en su poder; no obstante, esta hipótesis requeriría más bien desmoralizados; a pesar de toda la buena voluntad, de­
estudios teológicos de más profundidad para comprender si es o no beríamos ser ya medio santos para leerlo todo y santos completos
admisible. para poderlo aplicar seriamente ...

En realidad, sus dimensiones han efectivamente desanimado a


En lo referente al árbol genealógico, hay varios libros que hablan de
muchos. Precisamente por eso, hace algunos años se publicó Com­
él y que presentan la necesidad de "limpiarlo':
pendio del Catecismo de la Iglesia Católica, el cual es más accesible
Según algunos, las "almas errantes" no serían otra cosa que de­ a todos por la simplificación y el resumen de todas las verdades de
monios que fingen ser almas. Tales demonios serían los que han nuestra fe cristiana. El mismo Catecismo de la Iglesia Católica nos
dominado la vida de algún antepasado y que permanecieron en la enseña que, como cristianos, debemos ante todo seguir a Cristo es­
descendencia de la cadena genealógica; entonces irían a molestar a forzándonos, con la ayuda de su gracia, implorada en la oración, en

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...

amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a nosotros mis­
mos (Dt 6, 5; Lv 19, 18; Mt 22, 37-39; Me 12,30-31; Le 10,27); de
G\l'ITI '1.0 IX
modo que todo se resume en amar a Dios y al prójimo y en especial,
como cristianos, en amarnos los unos a los otros como Cristo nos Encuentro y entrevista
ha amado Un 13,34-35; 15, 12; 15, 17; Rm 12, 10; lP 1, 22). En los
diez mandamientos, los tres primeros se refieren al amor de Dios, con el padre A1TIOrth
los otros siete al amor al prójimo. Un cristiano que ora y practica por
amor a Dios los diez mandamientos, está en gracia de Dios. Claro
que las imperfecciones, las pequeñas caídas pueden siempre suceder
y la confesión sirve precisamente para perseverar en el camino del Para los días de descanso de la Pascua del 2007 programamos unas
bien. La confesión no es un peso que se nos ha colocado sobre las vacaciones a Roma con toda la familia. La excusa oficial fue la de
espaldas para hacernos más difícil la vida, sino para aliviarnos, para conocer mejor esa hermosa ciudad con nuestros hijos, además, en­
conservar y reforzar nuestra comunión con Dios y sostenernos en el contraríamos a monseñor Gemma, quien debía participar de una
camino para nuestro encuentro con Él en la patria celestial. solemne celebración con el Papa. Pero también estaba la motivación
de entrevistar al padre Gabriele Amorth en la tarde de Pascua.
Habíamos comentado que, en nuestro libro, sería útil insertar
su testimonio por tratarse del exorcista más conocido en el mundo,
presidente honorario de la Asociación Internacional de Exorcistas,
aquel que mediante sus libros, traducidos a muchos idiomas, ha
dado a conocer el tema al gran público. La cita era en la tarde de
Pascua a las 3:00 p.m., directamente en la comunidad religiosa en
la que vive, a pocos pasos de la espléndida basílica de San Pablo, a
las afueras de la ciudad. Obtener la cita para la entrevista había sido
relativamente fácil. Fue suficiente dejar un mensaje, un poco antes,
en su contestador automático explicando los motivos de la llamada y
al día siguiente ya fuimos notificados; en cambio, fue más difícil fijar
una fecha que tuviera en cuenta nuestras mutuas obligaciones. Pero
ahora estábamos dentro del gran patio y el padre Amorth, con pa­
sos lentos y moderados venía a nuestro encuentro saludándonos de
lejos con la mano para hacerse reconocer. Habríamos esperado a un
hombre más bien antipático y autoritario, en cambio descubrimos de
inmediato que, bajo esa sotana que revoloteaba y esa cabeza calva,
se escondía un ánimo abierto y burlón, listo a bromear, un homb~e
alegre dotado de un enérgico apretón de manos que no se esperana
de una persona de más de ochenta años. El bello día primaveral nos

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permitió dejar a nuestros hijos en un pequeño jardín contiguo al Padre Amorth, en veintiún años de actividad usted ha practicado
cuarto donde fuimos recibidos por el padre Amorth. Equipados con decenas de miles de exorcismos: ¿no está cansado?
lo necesario: grabadora, lista de preguntas, hojas y bolígrafos, la en­ No, mientras el Señor me dé la fuerza, trabajo cada día del año,
trevista inició sin ni siquiera habernos dado cuenta. aun en Navidad y Pascua. Mi gran maestro, el padre Cándido, lo
hacía solamente por la mañana y nunca en los días festivos. Pero
Ayer me telefoneó un sacerdote que había confesado a una
él tenía una fuerza enorme, podía encontrarse hasta con ochenta
persona exorcizada por mí, comenzó el padre Amorth sin darnos
personas en una mañana. Pocos minutos le eran suficientes para
tiempo a plantearle la primera pregunta, y me dijo que, en cierto
mirarlas y saber cuál era el problema; aun mirando las fotografías
momento, dicha persona empezó a hablar en lenguas extrañas y
comprendía y actuaba sólo en las que lo necesitaran. Yo, en cambio,
él se quedó atónito. Al final le dijo con voz sibilante: "Vendré a
no entiendo nada y precisamente trabajo para comprender algo.
molestarte esta noche". Se apoderó del sacerdote un miedo tre­
mendo y de inmediato me llamó. Le aseguré que no le pasaría
nada y así fue; pero me di cuenta de que quien nunca ha oído ¿ y cómo juzga usted el hecho de que algunas personas, laicas o
hablar del tema, o no lo ha estudiado o no ha visto jamás qué su­ sacerdotes, tengan dones?
cede en realidad, se encuentra desconcertado o no sabe qué hacer ¡Son los carismas! Claro que el límite entre el padre carismático
cuando está frente a un caso real. y el padre sobrenatural, aun maléfico, es muy sutil. Aunque no se
llegue a los dones de curación verdaderos, hay personas que tienen
Efectivamente, también nosotros nos encontramos muy descon­
sensibilidades particulares. Lo importante en estas cosas es la humil­
certados la primera vez que participamos en un grupo de plegaria de
dad, el ocultarse. No decirle nunca a nadie: "¿Sabes que puedo hacer
liberación en un pueblo de los alrededores de Megalópolis, donde
esto o aquello ... , tengo este carisma .. :: ¡nunca! Pero si el Señor lo
había un porcentaje importante de verdaderos endemoniados, que
quiere, la gente logra descubrir que la persona tiene capacidades es­
tenían reacciones violentas físicas y verbales. Nosotros nos encon­
peciales y va a buscar ayuda. Y luego se necesita mucha oración, una
trábamos allí para orar y, de manera extraña, salimos de la iglesia
vida de oración, saber que todo viene de Dios, saber que sin Dios
con una gran serenidad, algo que no nos hubiéramos esperado
nada vale (Jn 15,5). A través de los años he realizado más de 70.000
nunca, porque durante la oración había una fuerte tensión emotiva
exorcismos, y 70.000 veces supe que yo era insignificante, que Dios
y no sólo espiritual.
lo h~cía todo.
Eso significa que ustedes hacían las cosas bien. Pero aun
Corno las peticiones de exorcismo que me llegan son enormes,
cuando hay quienes salen molestos, nerviosos o con dolores inex­
me he acostumbrado a no recibir a las personas de buenas a pri­
plicables, es siempre un bien, porque quiere decir que existe algún
meras porque no tengo tiempo suficiente. Sólo recibo a quien me
mal que está oculto y que se manifiesta con la oración comuni­
haya sido enviado por otro sacerdote y que haya recibido repetidas
taria. A veces uno cae en la cuenta de tener un maleficio u otro
bendiciones, de manera que se tenga la certeza de que se necesita a
mal al entrar por casualidad a un santuario mariano o al asistir a
un exorcista autorizado.
una misa que al final realiza una plegaria de liberación. No es la

A pesar de esto, con mucha frecuencia la necesidad de las perso­


oración la que causa el mal, sino que es la oración la que obliga al
nas que vienen a mí es la de la conversión; no van a misa, no conocen
mal a salir y presentarse.
los diez mandamientos, no oran, no están dispuestas a hacer sacri­

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ficios, no se acercan a los sacramentos ... , es imposible que quien no no hay culpa alguna en la persona golpeada y lamentablemente con
se convierta se libere: no basta con el sólo exorcista, se requiere la frecuencia no existe ningún remedio. No siempre se logra liberar de
conversión. Por ejemplo, de cien parejas que vienen a mí, al menoS la posesión diabólica, pero sí se puede dar algún alivio. Muchas per­
noventa y ocho no cumplen los mandamientos: conviven o se han sonas, que antes debía exorcizar semanalmente atadas a la camilla,
separado del otro cónyuge ... , en fin, llevan una vida que no sigue ahora las veo una vez al mes o cada dos meses y se pueden sentar en
las leyes de Dios. Yo no puedo hacer nada si las personas no siguen la silla y colaborar; así pues, no hemos llegado a una liberación total
la ley; cuando cumplan las reglas entonces puedo comenzar a ac­ pero sí a un alivio de los síntomas con gran provecho espiritual lo
tuar. ¿Qué puedo hacer yo por alguien que está en pecado mortal? mismo que material.
¿Qué puedo hacer por un hombre que tiene esposa e hijos pero vive
con otra mujer? ¡Nada! El resultado más grande que he tenido desde
Algo que nos ha impresionado al frecuentar un grupo de oración
que soy exorcista es el número elevado de conversiones; por otra
cerca de nuestra casa es ver cómo personas, aparentemente muy
parte, cuando las personas vienen a mí es porque se encuentran en
normales, llegaban sin ayuda alguna, conduciendo personalmente
un estado de sufrimiento, y por eso están bien dispuestas a cambiar,
el carro; durante la oración estallaban en una gran cólera y luego
a convertirse. Aconsejo una vida en gracia de Dios, recitar el Rosa­
nuevamente se iban con toda tranquilidad.
rio, ir a misa frecuentemente, confesarse al menos cada quince días
aunque preferiría que fuera semanalmente o menos. Recuerde que Muchas lo hacen aSÍ, en cambio muchas otras ya en casa, cuando
una buena confesión es más eficaz que un exorcismo. Pero aun aSÍ, saben que deben ir a donde el exorcista comienzan a encolerizarse
no siempre los problemas se resuelven por completo, se necesita algo y deben ser obligadas a ir; luego, al final, salen tranquilas, tanto que
más. ¿Por qué? dan la impresión de haber sido liberadas. Pero mi maestro, desde la
La vida de los santos nos puede servir de enseñanza. Por ejem­ primera lección teórica me dijo: "No espere nunca tener una libera­
plo, me he enamorado de una joven, la beata Eustochio, sepultada ción inmediatanrénte al final de un exorcismo, ¡la gente es liberada
en Padua en la iglesia de San Pedro. Una monja que murió a los cuando el Señor lo quiera!': Él era muy devoto de Lourdes y Loreto,
veinticinco años, poseída del demonio desde el nacimiento hasta la porque había tenido a muchas personas que se habían liberado pre­
muerte, y sin embargo una gran santa. Su madre había sido una her­ cisamente al ir en peregrinación a esos lugares. Yo he tenido a una
mana en un instituto de religiosas, en un período histórico en el que persona que, recientemente, se liberó delante de la gruta de Lourdes:
había una corrupción tremenda entre los religiosos. El Señor le dio ¡era un caso sumamente fuerte! ¡Nunca hubiera pensado que se li­
la gracia de encontrar a un director espiritual que la comprendió y beraría en un tiempo tan breve! y, sin embargo, después de la pere­
convenció a las demás hermanas de que la aceptaran a pesar de que grinación vino a verme, realicé un exorcismo de verificación y pude
crisis de posesión fueran terribles. Pero cuántos santos han su­ comprobar su liberación plena.
frido problemas tan pesados. Más recientemente, sor María de Jesús
Crucificado, fue poseída dos veces en la vida, con necesidad de exor­ ¿ y cómo se verifica si una persona es libre plenamente?
cismos. La hermana era sacada del convento y llevada por el diablo
por toda la ciudad causando gran escándalo en todas partes; no ha­ Porque ya no manifiesta ningún sufrimiento, no tiene ataques,
se siente libre. Y cuando va a donde el exorcista ya no muestra to­
bía un solo monasterio dispuesto a aceptarla. ¿Qué podemos decir?
Sólo Dios sabe el porqué de las cosas, evidentemente quería su me­ das las manifestaciones de antes y está completamente tranquila. Sin
embargo, se necesita precaución; aun después de la liberación hay
joramiento, ¡la santificación de las almas! Es verdad que a menudo

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......

un maleficio y éste se fija en la víctima. A menudo el maleficio


que seguir orando con la misma constancia de antes, porque mu­
se hace a través de alimentos o bebidas que se dan al atormen­
chas veces he encontrado personas a quienes he preguntado: "¿Si tú
tado.
no hubieras tenido estos problemas orarías así?" y me respondieron:
no, jamás!". No obstante, es preciso seguir haciendo lo mismo 3. La primera causa culpable es la que se da por prácticas de ocul­
porque si se la saca de la vida cristiana entonces se vuelve a la misma tismo. Brujos, hechiceros, cartománticos, sectas satánicas, con­
condición. Como dice el evangelio, al salir el demonio, toma a otros sagraciones a Satanás, todas las formas con las que alguien se
siete espíritus peores que él (Mt 12, 43-45) Y regresa a donde es­ dedique voluntariamente al ocultismo pueden abrir las puertas
taba antes, y la condición de la persona se vuelve decididamente más al demonio.
grave. Tuve un caso en el que no sólo había abandonado la vida de
oración, sino que se había entregado al pecado, sin tener en cuenta 4. En cuanto a los rabdomantes y los radiestesistas depende: si es
que el demonio no cede; cuando una persona es liberada, él siempre una virtud natural, no hay mal alguno, pero en general han de
trata de volver a tomarla. Lo dice san Pedro y lo leemos en las Com­ ser precavidos porque podrían tener problemas físicos.
pletas del martes: "El diablo, como león rugiente, está alrededor bus­ Siempre debemos recordar que Dios nos creó para el cielo y nos
cando a quién devorar" (lP 5,8). Y yo lo reduzco ahora al singular: él da muchas posibilidades de redención. Quien escoja ir al infierno se
da vueltas alrededor de cada persona, cerca de cada uno de nosotros, va con sus propios pies, al desviarse del camino señalado.
buscando el punto débil, y cuando lo encuentra muerde.
A propósito de la confesión, hay quienes aconsejan que sea
Según usted, ¿puede venir el problema o la molestia sólo por obra semanal, otros mensual ...
del demonio o también de almas obligadas?
Yo la aconsejo por lo menos una vez al mes y si es necesario en­
Hay unas posibilidades que son ciertas y otras que están en estu­ tonces con más frecuencia. Si cada persona examina profundamente
dio como hipótesis de trabajo. la propia alma, se encuentra siempre algo que no se conforma com­
Las posibilidades de que uno sea golpeado por el demonio son pletamente a Cristo: los momentos de impaciencia se escapan siem­
pre, lo mismo que los de resentimiento; a veces estamos a disgusto
cuatro:
en la oración; aun de estas cosas comunes hay que arrepentirse y tra­
1. La voluntad de Dios. El Señor puede permitir que una persona tar de corregirse, porque la confesión no sólo sirve para la remisión
sea golpeada por el demonio, nunca poseída sino sólo maltra­ de los pecados sino también para acercarnos a la santidad (Hch 26,
tada. Pienso en el Padre Pío, quien por años sufrió violencias 18), Y mientras no lleguemos a la santidad que nos ha indicado Jesús,
físicas incluso muy fuertes, como la vez que lo arrojó contra el es necesario caminar. Yo siempre digo que el Señor nos indicó la vía
suelo y le golpeó violentamente la cabeza y tuvieron que po­ que hay que seguir, pero llegar a esa meta es prácticamente imposi­
nerle puntos en el arco superciliar. Hay personas que sufren ble porque nunca estamos satisfechos de nosotros mismos.
estos hechos para su santificación y por la santificación de las
El beato Santiago Alberione, fundador de mi congregación, la So­
almas. Ésta es una causa en la que uno no tiene la
ciedad de San Pablo, en los últimos lOa 15 años de vida se confesaba
2. Otra causa libre de culpa, la más frecuente, es cuando uno su­ todas las noches, para recibir la grada del sacramento, para pedir
fre un maleficio, es decir, que hay otra persona ligada directa­ perdón de las faltas del día. Por otra parte, escrito "El justo peca
mente al demonio o mediante un hechicero o brujo que hace

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siete veces al día" (Pr 24, 16), Y nosotros ¿qué pretendemos? ¿No ha­ nada, eso quiere decir que hay que actuar sobre la habitación. Algu­
ber pecado al final de una semana? ¿No tener materia de confesión? nas veces se logra liberarla, otras no y entonces es preciso cambiar
de lugar. Pero también ha sucedido que después de una mudanza
El problema es la falta de conciencia de lo que es el pecado y de
la situación se haya mejorado inicialmente, para luego volverse a
lo que es la perfección que Dios desea de nosotros. Ser mansos y
presentar los mismos problemas, después de cierto tiempo, que se
humildes de corazón (Mt 11, 29), saber perdonar de corazón (Mt
tenían en la casa antigua. En efecto, a menudo el maleficio llega al
18,21-22) ... Sin embargo, cuántas veces en cambio nos irritamos y
mismo tiempo en la persona o en las propiedades, todo es posible.
luego nos olvidamos enseguida. "Sean santos como su Padre celes­
tial" (Mt 15,48; lP 1, 15; Col 4, 12) quiere decir que el camino que
y cuando el maleficio o la maldición realizada con maldad,
debemos recorrer es inmensamente más grande que el que hemos
proviene de alguien de la familia, ¿qué se debe hacer?
hecho.
¡Perdonar y orar, perdonar y orar, perdonar y orar! Los maleficios
¿Qué sucede en el caso de maleficios llevados a cabo y suponiendo provenientes de la familia son los más tremendos. Como lo escribí
que la acción se mantenga en el tiempo porque quien lo realizó lo en mi primer libro, donde relaté mis experiencias con el padre Cán­
quiso así? dido, sucedió el caso de un padre y una madre, personas sencillas,
con una hija que se había graduado. Ésta se enamoró de un obrero
A menudo sucede que quien haya iniciado la obra maléfica quiera del cual los padres no querían saber nada, deseaban otras oportuni­
continuarla, y así perdure en la renovación del maleficio que sigue dades para ella. Cuando se dieron cuenta de que no había nada que la
atacando. A veces llevamos a cabo una acción de tire y afloje: hay pudiera disuadir, fingieron aceptar, pero en realidad se valieron de la
una persona que cada semana, desde hace veinte años, viene a mí perfidia, una verdadera malicia satánica, con la intención precisa de
para que la exorcice. Cada vez yo intervengo, pero a la semana si­ dañar. El día del matrimonio, durante el banquete, el padre le pidió a
guiente debo recomenzar desde el principio. Me decía mi maestro, el la hija que viniera a donde él y la maldijo con una maldad extrema,
padre Cándido: "Cada vez es más sutil, se necesita constancia y pa­ a ella,a su marido y a su familia. Aunque nunca se nombró al diablo
ciencia en la práctica del exorcismo, para que siempre se puedan ver y no se valió de hechiceros, esta pobre muchacha tuvo problemas de
leves mejorías". La liberación puede ser retardada por el maleficio diversas clases, y ni siquiera con los exorcismos logramos liberarla
renovado pero no puede ser impedida; esto significa que los male­ del todo. Pero claro que obtuvimos que, aun en la desgracia, estas
ficios repetidos tienen menos eficacia a medida que pasa el tiempo. personas no perdieran nunca la fe, siguieran orando, perdonando y
que ofrecieran sus sufrimientos a Dios. El Señor tiene sus planes por
Según su experiencia, ¿los maleficios se hacen sobre las personas, lo que ciertas cosas que a nosotros nos parecen impensables poseen
las habitaciones o las dos? un valor grandísimo y cuando lo encontremos le agradeceremos por
estos sufrimientos.
A veces parece que sean víctimas del maleficio las habitaciones y
Las maldiciones entre familiares son en verdad tremendas. Está
no siempre se logra liberarlas, a pesar de las repetidas bendiciones y
también el asunto del árbol genealógico que yo estoy valorando y
las misas celebradas en las casas. Por tanto, yo le pregunto a la per­
estudiando; el padre Cándido no creía en él pero a veces veo que,
sona qué sucede cuando sale a trabajar o a vacaciones: si los sínto­
al ir a buscar entre los padres, los abuelos y demás antepasados,
mas persisten, significa que el problema está ligado a la persona y no
puede existir una influencia maléfica o males de esta clase que son
a la casa; en cambio, si al cambiar de ambiente ya no vuelve a suceder
heredados.

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'f

Existen otros temas que están bajo examen. Por ejemplo, sabe­
moS lo que hacen los ángeles, que los ángeles custodios oran por G\PITl ~L\) X
nosotros y nos protegen (Sal 90, ll-l2; Ex 23,20-23); sabemos que
las almas de los difuntos que están en el cielo ruegan por nosotros El exorcismo del padre Amorth

para que se nos concedan las gracias; sabemos que las almas del pur­
gatorio pueden recibir nuestros sufragios ... Jamás algún teólogo se
y el descubrimiento de la posesión

ha preocupado de decirnos qué hacen las almas en el infierno y yo


he encontrado a algunas varías veces mientras realizaba exorcismos.
Siempre estaban bajo la guía, la orden imperativa de un demonio.
Me he encontrado con personas poseídas de almas condenadas y Terminada la entrevista, el padre Amorth pidió que le explicáramos
siempre dan a entender que era el demonio el que las mantenía allí. brevemente nuestra situación personal; escuchó con atención e hizo
algunas preguntas para aclarar ciertas dudas; luego miró el reloj y
Usted exorciza personas de todas las religiones. Si a un católico le dijo riendo: "Pues bien, hasta ahora han trabajado ustedes, ¡ahora es
recomienda seguir escrupulosamente ciertas directrices de carácter justo que yo también trabaje un poco!". Y dirigiéndose a Francesco,
religioso, ¿qué les dice a quienes pertenecen a otras religiones? aiiadió: "¡Ánimo, comencemos contigo, siéntate en esa poltrona
mientras te doy una buena bendición!':
Les recomiendo que sigan su fe. Si viene a mí un mahometano,
le indico que siga las reglas de su religión, que ore como se le tiene Nadie ni nada nos habría podido preparar a lo que sucedería
prescrito, cinco veces al día. A nadie lo obligo a que se convierta, poco después ...
pero a todos les digo que exorcizo en nombre y con la fuerza de Je­
sucristo (Hch 4,30). El exorcismo de Francesco relatado por Lucia
¿ y si algún católico se dirigiera a otras religiones, por ejemplo, a un Cuando Francesco se sentó en la vieja y desvencijada poltrona
ortodoxo griego? forrada en imitación piel y con débiles brazos de madera, estaba ab­
solutamente tranquilo y sonriente; es más, me hizo un guiiio algo
Quien no encuentre exorcistas católicos puede dirigirse tranqui­
di;vertido cuando me había sentado en una silla que estaba a pocos
lamente a los ortodoxos o a los anglicanos, está muy bien.
m!etros, frente a él, mientras el padre Amorth, que observaba de per­
se sentaba en una silla que daba al lado izquierdo de la poltrona,
¿Hay alguna relación de intercambio entre exorcistas de varias trataba de sacar la estola que se hallaba bajo su sotana con algún tra­
religiones? bajo y con cierto movimiento cómico, dado que las piernas estaban
No, pero todos los cristianos intervienen en nombre de Jesucristo casi enredadas en el brazo izquierdo de la poltrona.
(Mc 16,17; Hch 16, 18). La estola es esa franja de tela de color morado, parecida a una
bufanda, que los sacerdotes utilizan, o deberían llevar siempre que
realicen actos sagrados, como las bendiciones, la administración de
los sacramentos o de los sacramentales. La estola del padre Amorth

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estaba seguramente muy "usada", es decir, más bien gastada y con pero el padre Amorth rápidamente se la volvió a colocar y me pidió
algunas manchas que se observaban aquÍ o allá. Pero no se limitó que le ayudara a mantener firme a Francesco, el cual, mientras tanto,
a ponérsela en el cuello como había visto hacer a muchos otros sa­ había estirado las piernas e iniciado una especie de convulsión que
cerdotes, sino que se sirvió de ella para rodearse en un gran abrazo le sacudía todo el cuerpo.
tanto a sí mismo como a Francesco, por lo que un borde de la estola Era una locura: Francesco, mi Prancesco, gruñía como un perro
caía sobre el pecho del padre Amorth y el otro sobre el de Francesco, rabioso.
con las cabezas muy próximas una de la otra. A cierto punto, el padre Amorth se puso a interrogar al espíritu
Pensé que era un gesto muy hermoso, una especie de fusión y que lo poseía con preguntas perentorias: "¡Dime tu nombre! ¿Cuán­
de compartir entre las dos personas, pero en ese momento no re­ tos son? ¿Ya te fijaron la fecha de salida?': A cada pregunta Francesco
f1exioné en aquello que sólo enseguida me resultó más claro, es decir, respondía con un gruñido terrible, rechinando los dientes. Luego
que dicho gesto servía para ligar espiritualmente de modo indisolu­ preguntó:
ble al exorcizado con el exorcista.
-¿Cuándo te vas?
padre Amorth inició con el signo de la cruz y la recitación
del Padrenuestro, luego puso su mano derecha sobre la cabeza de -Márchate tú -le respondió de inmediato Prancesco con una
Francesco y empezó a recitar de memoria una compleja letanía en voz alterada y furibunda.
latín: "Te exorcizo, inmundísima criatura ...". Prancesco comenzó a
-Eres tú quien debe marcharse -le dijo el padre.
cerrar lentamente los ojos y a respirar de manera rápida utilizando
sólo la nariz, luego empezó a cerrar los labios, primero de manera -No, vete, márchate tú...
imperceptible, luego teniéndolos cada vez más apretados casi for­
mando una mueca malévola. Entre tanto del padre Amorth prose­ y así continuaron en una especie de macabro altercado.
guía impertérrito su oración en latín y observaba atentamente las Entonces el padre Amorth ordenó casi gritando: "¡Hagan el signo
reacciones. Luego las manos de Francesco comenzaron casi a aga­ de la cruz!", y luego agarró la mano derecha de mi eSI?oso y comenzó
rrarse de los brazos de madera de la poltrona y de su boca empezó a a guiarla con la señal de la cruz mientras repetía: "En el nombre del
salir una especie de gruñido, muy leve y casi inaudible. Entonces el Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo': concluyendo el amén con una
padre Amorth trató con la mano izquierda de levantar los párpados palmada en la frente. Fueron necesarios tres signos de la cruz y otras
de Francisco ya cerrados estrechamente. ¡Qué horror! No se vislum­ cuantas palmadas en la frente para que Francesco volviera un poco
braban ni el iris ni la pupila, sino sólo se veía el blanco innatural en sí; lo acomodamos luego en una silla cercana y le ofrecimos como
del globo ocular al revés. Había leído en algunos libros que cuando bebida agua bendita, conservada en una botella plástica, que le ha
esto sucede, o cuando la pupila no reacciona a los estímulos lumino­ costado trabajo pasar.
sos, es un signo inequívoco de posesión: no lo podía creer. Comencé
a llorar silenciosamente pero, a pesar de las lágrimas, ¡no lograba -Esto es lo que se llama una verdadera posesión, mí querida
apartar mis ojos de lo que le estaba sucediendo a mi marido frente a señora -me dijo dirigiéndome una mirada de compasión-o
mí! En cierto momento Francesco comenzó a gruñir ruidosamente ¡Ven, ahora quiero bendecirte también a ti. Acomódate en la
haciendo rechinar los dientes, y siempre con los ojos cerrados y con poltrona!
movimientos casi mecánicos trató de quitarse la estola del cuello,

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Yo estaba completamente anonadada, comprendimos que éra­ de algunos minutos, Francesco se repuso casi por completo y mien­
mos molestados y vejados por espíritus maléficos, pero de ahí a la tras tanto le supliqué al padre Amorth que lo siguiera en los meses
posesión había una gran diferencia. Me moví como un autómata siguientes; le manifesté que vendríamos a Roma cuantas veces fuera
observando una vez más la cara transformada de Francesco quien necesario, que nos comprometíamos por completo para salir de esto
estaba literalmente derrumbado en la silla y casi replegado sobre sí en el menor tiempo posible. Al principio no quería oír hablar: "¡Ya
mismo. Cuando el padre Amorth me puso también la estola alrede­ tengo demasiado trabajo, cómo hago!': pero luego se dejó convencer
dor de mi cuello sentí un miedo terrible, ¿qué sucedería si yo tuviera y nos dio otras dos citas cercanas la una de la otra, la primera al mes,
las mismas reacciones? Por un momento pensé en nuestros hijos que para darnos tiempo de reservar los vuelos con antelación.
estaban jugando fuera del salón y rogué se me ahorrara el tormento Nos estábamos alistando ya para salir, cuando el padre Amorth
que acababa de padecer a través de mi marido. Afortunadamente observó: "¡No los puedo dejar ir sin darles una pequeña bendición
no tuve ninguna reacción evidente, sólo la acostumbrada opresión también a sus niños!". Dicho y hecho, los hicimos entrar y también
en la boca del estómago y en la garganta que tantas veces había ya sobre ellos se realizó una versión abreviada con las complicadas fór­
experimentado, acompañada con las habituales dificultades respira­ mulas del ritual exorcista: ¡afortunadamente sin ninguna reacción!
torias. "Mi querida señora, no hay posesión en ti, pero se ve que
eres molestada; además, te digo que el maleficio ha sido hecho a la
familia, porque durante la oración sobre ti, también reaccionaba tu El exorcismo contado por Francesco
esposo, 10 que significa que hay un vínculo maléfico entre ustedes':
En efecto, durante el exorcismo sobre mí, mantuve casi siempre los Cuando me senté en la vieja poltrona forrada, imitación piel, me
ojos abiertos y vi que en ciertos momentos Francesco se agitaba en cuenta de que debajo del asiento desgastado había un resorte que
la silla y volvía a empezar a temblar y a rugir. sobresalía ligeramente y sonreÍ. "Se ve que estos sacerdotes tienen
unas antigüedades de tercera categoría': me dije. Me relajé apoyando
Nuevamente el padre Amorth hizo que Francesco se acomodara
las manos en los débiles brazos de madera y esperé a que el padre
en la poltrona, éste se encontraba semiaturdido, aunque trataba de
Amorth terminara de colocarse la estola; me quedé más bien estupe­
reaccionar y de hablar para tranquilizarme.
facto cuando me haló un poco hacia delante la cabeza cómodamente
Apenas el padre Amorth inició de nuevo el exorcismo sobre apoyada en el espaldar de la poltrona y me deslizó detrás del cuello
Francesco, reaparecieron los síntomas anteriores, aunque en forma el borde de la estola que hizo que cayera sobre el tórax.
más leve, y los gruñidos y convulsiones se alternaban con una voz
La cruz bordada en oro que se encontraba al final de la estola se
cadenciosa que repetía monótonamente: "Ave María, Ave María, Ave
apoyaba exactamente sobre la boca de mi estómago y de inmediato
María, Ave María ...", algo así como lo que sucedía con los discos que
pensé: "Este sacerdote se las sabe todas ..."; en efecto, había yo leído
se rayaban cuando yo era pequeña.
en un libro que precisamente a través del plexo solar se forman vín­
Esta segunda experiencia fue también en realidad angustiosa, y culos invisibles energéticos entre las personas vivas y, a veces, tam­
nuevamente se realizaron bastantes signos de la cruz acompañados bién entre las fallecidas. Además, la estola del padre Amorth debería
de palmadas en la frente para hacerlo volver en sí. haber tenido algo metálico, e inmediatamente pensé que fueran reli­
Luego, dirigiéndose a mí: "Esta vez ya no hay una posesión com­ quias, las que muchos exorcistas utilizan en abundancia.
pleta; en efecto, trataba también de reaccionar y orar. Sin embargo, se Apenas apoyó su mano derecha en mi cabeza, rezamos juntos un
le dieron repetidas bendiciones y se le hicieron exorcismos". Después Padrenuestro, luego comenzó a recitar su oración en latín y sentí

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lIiL..
enseguida la necesidad de cerrar los ojos. Tuve apenas tiempo de Me hicieron acomodar en una silla, me sentía como un balón
pensar que de esa manera me relajaría mejor cuando, de improviso desinflado y de nuevo experimenté mucha vergüenza; creo que lle­
y de manera inexplicable, comencé a sentir un extraño hormigueo gué a balbucir: "¡Perdóname, no quería esto!".
por todo el cuerpo, en especial en la cara, y me di cuenta de que el Asistí al exorcismo de Lucia en un estado semiinconsciente, re­
ritmo de mi respiración estaba cambiando, se volvía más profundo cuerdo que de vez en cuando el cuerpo me transmitía dolores bas­
pero también irregular, y sólo podía inspirar y expirar con la nariz, tante fuertes y que se alternaban en la espalda, la zona lumbar, el
porque los labios parecían pegados. Luego comencé a sentir que de hígado, el bazo y el estómago.
mí salía un sonido extraño, pero no tenía ningún control sobre
Sin que casi me diera cuenta me encontré de nuevo en la poltrona
que estaba sucediendo.
de los exorcismos ligado al padre Amorth por medio de la estola;
Mis oídos escuchaban perfectamente el exorcismo, pero las de­ noté que la reliquia que sostenía pesaba sobre mi tórax como si fuera
más partes de mi cuerpo estaban como independizadas, los ojos no de plomo.
querían abrirse, las manos no querían apartarse de los brazos de la
y después, otra vez la mano en la cabeza y sentí un corrientazo
poltrona, las piernas no querían dejar de agitarse, todo estaba com­
eléctrico que recorrió todo mi cuerpo, el cual se puso de nuevo a
pletamente fuera de controL Después sentí que gruñía como si fuera
temblar; ¡oh, no, estaba sucediendo de nuevo!
un perro y me espanté y hasta me avergoncé; no era posible, era pre­
cisamente yo quien emitía esos ruidos. Esta vez estaba preparado a las reacciones de mi cuerpo, y de in­
mediato comencé conscientemente a combatir con todas mis fuer­
¿Pero cómo hacía para emitirlos y al mismo tiempo tener la luci­
zas, traté de orar pero la única frase que salía de mi boca era: "Ave
dez de darme cuenta y también de avergonzarme?
María, Ave maría .. :: que seguía repitiendo rítmicamente. Dentro
Estaba completamente dividido, impotente, desgarrado, poseído de mí se estaba desarrollando una especie de tire y afloje, yo quería
por una fuerza desconocida que hacía de mí lo que quería. ¡Pero marchar en una dirección pero otra parte me llevaba en la dirección
ese cuerpo afeado y agitado en la poltrona ya no era yo! Luego, a opuesta.
un cierto punto también la mente comenzó a nublarse y desde ese
Las palmadas en la frente, que me trajeron a un estado consciente,
momento me encontré en la oscuridad, en una especie de pantano
llegaron como una verdadera liberación, y el padre Amorth sólo se
viscoso del que cualquier intento para liberarse resultaba completa­
detuvo cuando se dio cuenta de que yo lograba hacer solo la seí1al
mente inútiL
de la cruz.
En cierto momento me di cuenta de una palmada en la frente,
que por un momento me hizo salir de la inconsciencia, luego otra
palmada y una más; traté de abrir los ojos, esta vez mis párpados
respondieron con rapidez a mi orden, lo mismo que las manos y
las piernas que se movieron de nuevo tras mi requerimiento. Lucia
lloraba a mi lado. Sólo pensé: "¡Pero si estaba sentada delante de mí
cuando empezamos!". No recordaba con exactitud lo que había pa­
sado, pero sabía que había sucedido algo grave, inesperado e inexpli­
cable, algo que nunca había acaecido anteriormente.

110
convento a los diez años yen el período de preparación al sacerdocio
había vivido en una localidad muy aislada en donde "la otra mitad
GWlTt:u ) XI
del cielo" había sido descrita como fatua, maliciosa, tal vez un poco
El padre Luigi:
perversa. En una palabra, fuente de pecado, o algo asÍ.

un sacerdote como amigo


Por mi parte, jamás hubiera imaginado pasar unos días con un
sacerdote sin tener que afrontar discusiones religiosas, con un sacer­
dote que no quería convertirme a toda costa, sino que me aceptaba
con afecto por lo que yo era.
Con el paso de los años, el padre Luigi cambió de cargo y ciudad
Escrito por Lucia varias veces, hoyes un "sacerdote importante': pero nuestra relación
continuó y se extendió, primero a Francesco y luego a los niños. Fue
Tenía necesidad de compartir esta experiencia, con alguien, con él quien celebró nuestro matrimonio, la primera confesión y comu­
un amigo verdadero, que no juzgara y que, aun con dificultad, hu­ nión de los niños, quien sepultó a mis padres.
biera comprendido.
Para los niños es un camino intermedio entre un abuelo, un con­
Con el padre Luigi nos conocíamos hacía más de treinta años. Era tador de fábulas y una montaña de nueces.
yo una quinceañera curiosa y rebelde, él un joven sacerdote ocupado
Cuando nos vemos, Eleonora y Alessio se lo disputan y uno de
en su segunda licenciatura y en búsqueda de su lugar en la congrega­
los dos va siempre a parar a sus brazos, aunque Eleonora sea ya una
ción en la que había profesado sus votos. adolescente.
Una relación que comenzó por el azar y que siguió a pesar de su
Fue el padre Luigi quien, hace algunos años, administró la unción
traslado a otra ciudad. En ese tiempo no existían los celulares y no
de los enfermos a Francesco ya Alessio, quienes luego, durante algu­
se telefoneaba a menudo, pero estaban las muchas cartas y el deseo
nos días, habían superado sus problemas de salud, pero ni siquiera él
de reír y de bromear juntos, de hablar de los problemas y de las as­
había reflexionado seriamente en las motivaciones de esas curacio­
piraciones con alguien que te escuchaba y te comprendía, al menos
nes temporales, en el origen real de nuestros males.
por empatía.
Fuera de nuestra salud, no le había hablado nunca de nuestros
No era bien vista esa amistad entre un joven sacerdote y una mu­
problemas. ¿Por pudor? ¿Por miedo al ridículo? ¿Por vergüenza?
chachita. El padre Luigi tuvo algún problema por esto, alguien no
¿Para protegerlo? No lo sé; a pesar de que seguíamos frecuentándo­
entendía que lo que estaba naciendo era un sentimiento profundo y
nos, había preferido dejarlo fuera del tema.
recíproco, pero absolutamente inocente.
Durante una llamada telefónica en la primavera del 2007, poco
Crecimos juntos, él cada vez más descontento con el cargo al que
después del exorcismo del padre Amorth, percibió la tensión, la pre­
la comunidad le había destinado, yo en búsqueda de un futuro.
ocupación y quiso indagar; entonces no me fue posible disimular la
Nos escuchábamos y escribíamos, habíamos realizado excursio­ situación. Ante la pregunta directa, sólo pude responder:
nes y pasado lindísimos días de vacaciones en el mar.
-¿Sabes?, en Pascua fuimos a donde el padre Amorth para una
Alguna vez me dijo que nunca hubiera pensado pasar días tan entrevista; él le hizo un exorcismo a Francesco y se puso en
felices en compaüía de una mujer, quizá porque había ingresado al evidencia una posesión demoníaca. Gracias al cielo, los niños

112 113
no han manifestado reacciones, yo sólo tengo algún problema -Ciertamente existe, la Escritura no dejan de ello ninguna duda.
físico.
- ¿y cómo es posible que en todos estos años de sacerdocio, tú
Luego de un momento de silencio, se hizo oír una fuerte carca­
no hayas nunca encontrado a nadie que te haya pedido ayuda?
jada y la afirmación:
-Lucia, te conozco demasiado bien; tú no estás endemoniada. -A decir verdad, he encontrado a alguno, pero pensaba que fue­
ran fijaciones, problemas psicológicos, huida de la realidad,
Después hizo algunas preguntas rápidas para saber el motivo de jamás he dado crédito a quien solicitaba ayuda por estas cosas.
la entrevista y pasamos luego a otros temas.
En la siguiente llamada, pocos días después, el padre Luigi com­ - ¿y ahora por qué sí crees?
prendió de inmediato que la tensión estaba muy subida y, luego de
-Porque te conozco demasiado bien y sé que no estás loca, por­
haberme averiguado las causas, me preguntó:
que te quiero, porque comprendo tu sufrimiento y lo vivo con
-¿Pero sigues con esa tal historia del demonio? ¿Sabes?, conozco ustedes.
bien al padre Amorth porque cuando yo viví en Roma fue mi
padre espiritual; explícame mejor qué te está pasando. El padre Luigi es un cabeza dura que se autodefine como un hom­
bre del Sur, con el corazón del Sur y el cerebro analítico del Norte.
- Desafortunadamente, seguimos todavía aquí con el diablo; va­ Ha prevalecido el corazón del Sur, apoyado por la mente analítica
mos a Roma dos veces al mes, estoy preocupada y algo aterro­ del Norte. Ha leído todos los libros sobre el tema, ha estudiado el
rizada. ritual, ha orado asiduamente y una noche al teléfono, muy alegre y
determinado, me dijo sin aspavientos:
Ante esto, el padre Luigi dejó de reír, escuchó varias veces la his­
toria, se informó detalladamente. Telefoneaba más veces por semana -¿Sabes qué?, he decido solicitarle al arzobispo la autorización
y nos tranquilizaba: para ser un exorcista ad personam, para ti y tu familia.

-Oro por ustedes, celebro la misa por ustedes, les he pedido a Así comenzó su aventura. Ante todo para saber a quién dirigirse
amigos y religiosos orar por la liberación de ustedes. ¿Qué más para la autorización, que parecía había de ser solicitada a un anciano
puedo hacer? ¿Cómo les puedo ayudar? y enfermizo obispo auxiliar delegado por encargo. Luego para lograr
encontrarlo, porque el prelado, entre varias enfermedades y tareas,
y después añadió: casi nunca se encontraba. Cuando por fin lo halló, se le dijo al padre
-¿Por qué no me lo dijeron antes?; ¿por qué nunca me hablaron Luigi:
de eso? -En verdad aquí tenemos una gran necesidad de exorcistas por­
que nadie lo quiere hacer. Pero nunca concedemos una autori­
-Cuando te lo dije te pusiste a reír. zación ad personam; quien lo haga, acepta el encargo por cinco
años y para toda la diócesis.
-Sí, pero ahora ya no he vuelto a reír.
Una gran contrariedad para el padre Luigi ... cinco años y toda la
- Bueno, tú que eres un sacerdote convencido, ¿qué piensas del diócesis de Megalópolis ... ¡con las tareas que ya tenía! Habló de ello
diablo? con sus superiores quienes le dieron vía libre:

114 liS
-¡Lo lograste, pero piénsalo bien! dado que estás disponible para exorcizar, toma un poco de expe­
riencia con otros y luego te podrás ocupar de ellos': habría sido una
Así, regresó a donde el obispo auxiliar y le dijo: respuesta sensata, competente, razonable. ¿Por qué entonces el arzo­
- Está bien, empiezo, porque quiero ayudar a esta familia; pero si bispo dio semejante respuesta, tan insensata aparentemente? ¿Que­
hay otras personas que necesiten verdaderamente ayuda, estoy remos arriesgar una posible hipótesis?
disponible; naturalmente en el tiempo en el que mis tareas de En diciembre del 2006, el padre Lorenzo afirmaba que "el demo­
comunidad me dejen libre. nio no se ocupa de las personas normales, porque se preocupa en
tentar y poseer a los santos, y ustedes son demasiado insignificantes,
-Correcto -fue la respuesta-, debo pedir la confirmación de­ por tanto, ¡el pecado de ustedes es uno de presunción!':
finitiva del arzobispo, pero con la necesidad que tenemos no
El padre Gianni, otro exorcista autorizado de la diócesis de Me­
habrá problemas; se requerirá una semana.
galópolis a quien nos dirigimos un día, afirmaba: "Nuestro deber
Pasaron dos meses sin que el obispo auxiliar avisara o respon­ como exorcistas es el de desenmascarar a los impostores y mandar­
diera al teléfono, siempre estaba ausente u ocupado. los a donde los psiquiatras. Yo nunca he encontrado a alguien con
una posesión; para mí, el padre Amorth con sus libros y todas esas
Pero el padre Luigi es un hombre testarudo y logró encontrarlo.
transmisiones radiofónicas y televisivas hace un verdadero terro­
"Lo siento, fue su lacónica respuesta, el arzobispo prefiere que quie­
rismo psicológico y espanta a la gente. Lo que se necesita es hablar
nes necesiten ayuda se dirijan a los exorcistas diocesanos, por tanto,
del Espíritu Santo y no de los demonios':
no te concedemos la autorización".
Finalmente, el padre E., otro sacerdote autorizado pero dotado de
El padre Luigi, fiel a sus sagrados votos de obediencia me
una gran cultura y disponibilidad para escuchar, nos confió un día
"Te quiero mucho y quisiera ayudarte, pero no voy a desobedecer':
que los exorcistas de Megalópolis reunidos en asamblea decidieron
y yo nunca se lo hubiera pedido. Pero siento que debo hacer una no realizar más exorcismos exploratorios y no salir nunca a bendecir
reflexión. los lugares porque las peticiones eran excesivas y por tanto debían
El padre Luigi no es un muchachito emotivo, es un sacerdote de estar siempre fuera.
más de sesenta aflos, muy conocido y estimado, equilibrado y jovial, A pesar de esto, una tarde el padre E. vino a nuestra casa y celebró
uno de los superiores de su Orden, con cargos de responsabilidad. la misa, pero se cuidó de pronunciar ninguna plegaria de liberación
Ha llegado a solicitar la autorización de exorcizar luego de un ca­ o siquiera una sola bendición, aun frente a fuertes dolores abdomi­
mino interior ni fácil ni inmediato, ha aceptado las discusiones y al nales de Francesco; nunca había sucedido que mi esposo hubiera
final ha llegado a una elección de amor. Un amor que quizás al inicio sido vejado durante una misa. Más tarde, conversando, afirmó no
estuvo dirigido a nuestra familia, pero que enseguida se puso a dis­ haber realizado nunca un exorcismo, porque jamás vio la necesi­
posición de todos los que necesitaran ayuda. dad; más aun, en los pocos casos en los que creía podría servir, tuvo
¿No está el amor en la base de la enseflanza de Cristo y no es ese miedo porque se encontraba sólo frente a personas corpulentas.
su mandamiento más importante? Este encuentro con el padre E. y la charla con él me hizo reflexio­
Si el arzobispo de MegalópoUs hubiera respondido: "Estás dema­ nar mucho. Pensé que tal vez no era consciente de la autoridad que
siado involucrado emocionalmente con esta familia, conviene que lo estaba encarnada en él en aquel momento, la autoridad de la Iglesia
pienses mejor, dirígelos a los exorcistas diocesanos y mientras tanto, de Cristo y la voluntad expresa de Jesús en el evangelio de comba­

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tir al maligno. Quizás el padre E. no lo sabía, pero el diablo sí, y lo que se ponga a su disposición un lugar adecuado, en y sobre todo
demostró vejando a Francesco en lo físico. A 10 mejor para el padre que sean obligados a trabajar.
E. hubiera sido el momento preciso para adquirir experiencia, para En efecto, ¿para qué sirve un exorcista si no es para exorcizar?
efectuar su primer exorcismo, para ver y sentir lo poderoso que es
Queriendo continuar, se podría preguntar quién habría condu­
el Señor. .. Quizás hubiera sido el momento justo... En cambio, él,
cido al arzobispo de Megalópolis hacia esta línea de conducta. Pro­
sumiso a las indicaciones de la asamblea de los exorcistas de Me­
bablemente aquel de quien alguien escribió: "Ciertamente el diablo
galópolis, optó por una palmadita en la espalda y la sugerencia de
tiene todo el interés en hacer creer que no existe':
comprar un libro de chistes para reír. Afortunadamente, aquel día
también estaba presente el padre Ciríaco quien, luego de repetidas Si se considera que el padre Amorth "trabaja" por la mañana y
oraciones, bendiciones, imposiciones de manos y unciones logró por la tarde cada día del año, al menos diez exorcismos entre direc­
alejar el dolor. tos y telefónicos, y que fue nombrado hace más de veinte años, se en­
tiende cómo el dato de más de 70.000 exorcismos practicados no sea
jy
creo que los exorcistas de Megalópolis nunca han encontrado
el fruto de la fanfarronería, sino de la completa dedicación a la tarea
una posesión! Si nunca practican exorcismos, ¿cómo van a hacer
para la que fue llamado. En este sentido, es ciertamente la persona
para hacer salir de su guarida a este demonio que en cambio tiene
con más experiencia del "sector': Si luego se valora la determinación
todo el interés de permanecer bien escondido?
y la fuerza con que ora y la grandeza de su fe, se comprende porqué
Por eso, en un contexto intelectual semejante, creo que el padre con él los demonios se encolerizan tan rápidamente; con frecuencia
Luigi, un sacerdote convencido de la necesidad de este ministerio, en he pensado que, si fuera un demonio, también yo reaccionaría por­
cierta manera un "convertido': representa para la diócesis un peligro, que no sabría en realidad cómo resistir.
una mina errante. Nombrarlo hubiera significado incluir voluntaria­
Se explica así claramente por qué el padre Amorth encuentra un
mente una onda anómala en un modus vivendi cómodo para todos.
porcentaje tan alto de endemoniados; teniendo en la cuenta que rea­
"Mejor negar la autorización", habrá pensado el arzobispo. liza el exorcismo exploratorio, está en capacidad de desencuevar al
Yo agregaría: "Por lo que debe obediencia y puede permitirse el demonio si está por ahí, y cuando lo ha sacado de su guarida actúa
no darle ni siquiera explicaciones sensatas': para que sea derrotado.
¿Fantarreligión? Es posible, pero en la diócesis de Megalópolis, las En todo esto lo más paradójico es que este nuestro padre Luigi,
pobres ovejas asediadas por los lobos que buscan ayuda en sus pas­ como muchos otros sacerdotes que han sido consagrados hace tan­
tores sin recibirla son muchas. ¡Quién sabe qué pensaría el profeta tos años, entre las "órdenes menores" que recibieron estaba también
Ezequiel de ciertos hechos! la del exorcismo, la cual, sin embargo, es actualmente el único minis­
En esta época, muchos desean una intervención papal que obli­ terio que necesita la autorización episcopal para poder ser realizado.
gue a los obispos a nombrar exorcistas en número suficiente en cada En realidad, hoy día el orden del exorcismo ha sido abolido y los
diócesis. A la luz de nuestra experiencia, sin embargo, queremos su­ nuevos sacerdotes ya no lo reciben.
brayar que no basta con nombrarlos, se necesita que sean escogidos Opina el padre Luigi que tarde o temprano el Papa, si no el actual
solamente entre los sacerdotes que crean en la existencia del demo­ quien lo suceda, se decidirá a declarar que el exorcismo puede ser
nio, que sean formados mediante el apoyo de quien sea ya experto, ejercido por todo sacerdote que lo haya recibido como ministerio y
que se les conceda el tiempo necesario para llevar a cabo su labor, que tenga deseo de hacerlo. Ciertamente esto sería un gran punto a

118 119
r

favor de aquel que dijo: "Vayan, curen, prediquen, saquen los demo­
nios en mi nombre".
CAPITt ¡LO XII
El padre Luigi, por su parte, aun permaneciendo en los límites de
lo lícito y de la obediencia, ha decidido aplicar todos los instrumen­ Exorcismos, oraciones y bendiciones
tos que la Iglesia pone a su disposición.
Por eso, cuando sus tareas se lo permiten, viene a nuestra casa
para un verdadero "tour de force espiritual": confiesa a toda la fami­
lia' bendice la casa cuarto por cuarto, celebra la santa misa, y bendice
el agua, el incienso, la sal, el aceite y las velas, es decir, todo lo que ne­
cesitamos para nuestra "supervivencia" hasta la siguiente visita. Y no Lo que sucedió en aquella tarde de la Pascua del 2007 nunca nos
sólo esto, nos suministra también la unción de los enfermos, porque lo hubiéramos imaginado, jamás hubiéramos pensado que alguno
afirma ser un sacramento sumamente útil en caso de enfermedades, de nosotros estuviera poseído. Nuestros hijos, afortunadamente, ig­
y la nuestra no es sino una enfermedad espirituaL Después de estas noraban por completo el drama que estábamos viviendo en aquel
jornadas, vivimos períodos de relativa paz y de "silencio", luego, de pequeño cuarto con el padre Amorth y sobre todo no habían presen­
modo completamente repentino e inesperado, vuelven a aparecer los ciado ninguna reacción durante la plegaria exorcista.
problemas, y así vamos a controlar las respectivas agendas para bus­ Entre tanto éramos un mar de dudas. ¿Pero cómo llegó Francesco
car las fechas en las que sea posible un nuevo encuentro. a ser poseído? ¿Pero los poseídos del demonio no deberían tener
Sabemos que él a menudo nos recuerda en la santa misa y sucede una aversión terrible hacia lo sagrado? Francesco iba a misa regular­
que bendice por teléfono a los niños, en especial a Eleonora cuando mente y con la misma frecuencia se confesaba y recibía la comunión.
se encuentra muy afectada. Pero de vez en cuando él y yo nos vemos ¿No se reconoce a los poseídos porque hablan lenguas extrañas y tie­
fuera de estas contingencias familiares y no hablamos de demonios, nen una fuerza extraordinaria? ¡Nada de todo esto había sucedido!
sino que hacemos como en los viejos tiempos, reímos juntos de mu­ Durante el exorcismo "sólo" se había verificado una pérdida total del
chas cosas y nos sentimos alegres al ver un cielo azulo un cerezo en control psicofísico junto con un cambio de personalidad, en realidad
una especie de desdoblamiento, ¡porque en ciertos momentos Fran­
flor.

cesco observaba y analizaba la escena como si el cuerpo que se en­


Con mucha amistad.
contraba en la poltrona no le perteneciera. La primera reacción fue
de pánico: ¿estaré poseído o loco de atar? La segunda de vergüenza;
la tercera de seria preocupación; la cuarta de una necesidad resuelta
de salir rápidamente de esto.
El lunes de Pascua, que era el día siguiente al exorcismo del padre
Amorth, llamamos por teléfono a monseñor Gemma para contarle
10 acaecido y su reacción nos dejó asombrados:

Muy bien, de veras muy bien, eso fue una gran cosa, el demo­
nio fue obligado por el exorcismo a salir a la luz, por lo tanto, ese

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cobarde ya no puede esconderse como lo hacía antes. Es mejor gritan, blasfeman y se desmandan. Hay una especie de acuerdo entre
ahora que en el pasado, le caeremos encima hasta que se vaya, el padre Amorth y sus cohermanos: entran en el convento las per­
no le daremos tregua y lo arrojaremos fuera. Cuando el diablo se sonas no demasiado ruidosas; en cambio, los endemoniados y los
manifiesta, en la práctica está ya medio derrotado. Pero ustedes más bulliciosos se deben tratar en otra parte. Y aSÍ, el padre Amorth,
deben seguir orando con fuerza y confianza, nunca han de des­ todos los martes y los viernes por la mañana, hace un viaje breve y
animarse porque hemos vencido ya. Estoy con ustedes y ¡también se hospeda en la parte de atrás de una hermosa iglesia del centro de
rezo siempre por ustedes! Roma que, después de la misa de la mañana, cierra las puertas y abre
un pequeño cuarto apropiado para los casos más difíciles y ruidosos.
Así que en nosotros apareció la aceptación y, habiendo aprendido Pero volvamos ahora al segundo exorcismo ...
que a menudo del mal sale el bien, nos dimos a la tarea de disfru­
tar esta extraña y traumática oportunidad que se nos había ofrecido.
Aceptación no significa sumisión, porque si es verdad que aquello Escrito por Lucia
había sucedido, ya no se podía cambiar, ahora era necesario trabajar
fuertemente con el fin de crear las mejores condiciones para el fu­ Cuando Francesco se sentó en la consabida poltrona comenzó a
turo. En una palabra, era preciso hacer realidad el célebre lema bene­ sudar frío, porque el recuerdo de lo que le había pasado estaba toda­
dictino Ora et labora, "ora y trabaja': conscientes del hecho de que la vía fresco. Había tratado de convencerse de que esta vez no sucedería
oración era importante, pero igualmente lo era la labor de purifica­ nada, que con la fuerza de voluntad y con la oración lograría no caer
ción realizada sobre nosotros mismos, lo único que nos permitía no en aquel estado de tremenda degradación. ¡Yen cambio fue peor
dejarle más pretextos al mal: misa diaria, confesión semanal, Rosario que la vez anterior!
nocturno, además, de vez en cuando oíamos la voz de monseñor Esa mañana había también un anciano cohermano ayudando al
Gemma a través del teléfono, algunas veces llegaba el padre Paolo a padre Amorth, cuyo deber era el de contener a las personas más in­
bendecir la casa y a celebrar la misa, y finalmente, nuestro querido quietas, y hasta yo fui a ayudar a tratar de bloquear las inesperadas
amigo el padre Luigi, primero incrédulo, y a la vuelta de algunas se­ y violentas reacciones de Francesco, pero a pesar de que éramos dos
manas transformado en un aliado muy valioso. los que le teníamos inmovilizados los brazos, el padre Amorth reci­
Para el segundo exorcismo del padre Amorth nos fuimos los dos, bió un puño en la cara mientras Francesco buscaba cómo quitarse
aprovechando los vuelos de la mañana y dejamos al cuidado de nues­ la estola del cuello. Gritos, gruñidos, risotadas que sólo podían de­
tros hijos a una amiga de confianza de la familia. A las 11 :00 a.m., en finirse como satánicas, ojos vueltos al revés o abiertos totalmente
punto estábamos de nuevo en el mismo pequeño salón de la tarde de por más de un minuto sin mover los párpados. Nunca podré olvidar
Pascua, habíamos descubierto que esa era "la oficina privada" del pa­ esos ojos, normalmente tan límpidos y de ese color verde-azulado,
dre Amorth. El superior de la comunidad le asignó ese cuartico sin que en aquel momento se habían transformado en un pozo de odio
adornos y aislado con una posición estratégica, efectiva y relativa­ y violencia, de color gris sucio ... Esos ojos que expresaban una bru­
mente cerca de la entrada de la casa, pero lo suficientemente distante talidad y una fealdad habrían podido ser los de un asesino ... iY en
de las demás habitaciones, lo cual permite recibir la interminable cambio eran los de mi esposo!
procesión de los desamparados que diariamente acuden a él sin cau­ Difícil también olvidar las voces inhumanas que salían de su boca,
sarle demasiada molestia al resto de la comunidad, habida cuenta de más aun, de todo su cuerpo. Cuando el padre Amorth comenzó, re­
que muchas de las personas en problemas son más bien bulliciosas, citando siempre las acostumbradas fórmulas latinas, al trazar cruces

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sobre los ojos, los oídos, la nariz, la boca, el cuello y el plexo solar con Aprovechando la estadía de monseñor Gemma en una casa de su
el dedo pulgar anteriormente untado con el óleo de los enfermos que congregación, que se encontraba a unos cien kilómetros de nosotros,
tenía en el regazo, Francesco se le lanzó con la boca abierta y, no faltó le pedimos hiciera un exorcismo a Francesco y él ciertamente no se
nada para que le arrancara un dedo a mordiscos. hizo de rogar. Era una templada mañana de finales de abril del 2007
Durante el exorcismo, hay un momento en el cual se le ordena y Francesco había estado de mal genio durante todo el viaje.
al demonio que se vaya: "¡En nombre de Jesucristo, márchate! Una vez llegados al gran patio del convento, rodeado de un gran
intercesión de la bienaventurada Virgen, márchate! ¡Por intercesión parque con una densa vegetación formada por árboles de troncos
del Padre Pío, márchate! ¡Por intercesión del padre Cándido, már­ altos, bellas cercas llenas de hojas frescas y de flores listas a abrirse,
intercesión de Juan Pablo II, márchate!..:: Cada una de vimos aparecer a monseñor Gemma con una camándula en la mano
estas órdenes se repite con fuerza tres veces. Durante la invocación que desgranaba rítmicamente; sabíamos que también estaba orando
de intercesión a Juan Pablo II se desencadenó el desbarajuste; Fran­ por nosotros. Después del saludo y algunas breves formalidades, nos
cesco empezó a gritar fuertemente y a gruñir, ¿pero en realidad era acompañó a la tranquila capilla del convento, donde pensaba efec­
Francesco el que reaccionaba así o los demonios que lo poseían? Al tuar el exorcismo.
final del exorcismo estábamos todos extenuados y sudando, y tam­
Francesco estaba sentado en la banca de la primera fila, justo de­
bién esta vez fueron necesarias bastantes señales de cruz y las corres­
sagrario, y yo me había acomodado a su derecha, en cambio
pondientes palmadas en la frente para hacerlo volver en sí.
el obispo se quedó de pie detrás de nosotros. La técnica de exor­
El padre Amorth, dirigiéndose a mí, me exhortó diciendo: "Con­ cismos de monseñor Gemma es diferente de la del padre Amorth;
mucho en Juan Pablo II porque los está ayudando. Pero ya no ninguna estola para compartir, nada de óleo de los enfermos, nada
puedo recibirlo aquí, hay demasiado ruido, además, necesito mayor de cruces en la mano, sino sólo sus dos grandes manos puestas en
ayuda para mantenerlo quieto. La próxima cita se la doy para dentro la cabeza de la persona. Francesco estaba tenso y nervioso, y apenas
de un mes en una iglesia del centro, donde me ayudan bastantes per­ monseñor Gemma apoyó sus manos sobre la cabeza y comenzó a
sonas". Luego de habernos dado la dirección y de habernos explicado recitar de memoria las fórmulas latinas del antiguo ritual preconci­
cómo llegar a la iglesia, nos despedimos completamente transforma­ liar, empezó a quejarse de fuertes dolores en todo el abdomen, luego
dos. Francesco había regresado absolutamente normal, lúcido y sen­ aparecieron las convulsiones, los gruñidos y los espasmos. Francesco
sible como de costumbre, sólo se sentía tremendamente agotado y pasaba de la conciencia a la inconsciencia, yen cierto momento sin-
recordaba muy poco de lo que había pasado durante el exorcismo. también fuertes dolores en la rodilla derecha, precisamente aque­
padre Amorth aprovechó para exorcizarme también a mí, y también lla que había sido sometida a dos inútiles intervenciones quirúrgicas,
esta vez, no hubo afortunadamente ninguna reacción. y de repente explotó con fuertes gritos e insultos.
Esa tarde nos trasladamos al Vaticano a orar delante de la tumba Ya monseñor y yo no teníamos ninguna posibilidad de detenerlo
de Juan Pablo II, y fue un momento emocionante porque Francesco, y en cierto punto cayó en el suelo y comenzó a rodar y a contor­
de rodillas en el piso de mármol, tenía el rostro lleno de lágrimas. sionarse en el piso, hasta que de un momento a otro agarró de un
Volveríamos con frecuencia a la tumba del anciano Papa que había caballete cerca del altar un extraño contenedor en forma de estrella,
dejado una marca tan grande en la historia de la humanidad y que se arrodilló y lo puso sobre la frente. De pronto se calmó y perma­
ahora volvía a ocuparse también de nosotros. neció inmóvil durante un minuto largo mientras el obispo y yo

124 125
observábamos un poco jadeantes por el esfuerzo anterior. Enseguida El señor Paolo preguntó de repente: "¿Atado o sin atar? ¿Te agi­
comenzó a llorar en silencio y cayó al suelo sin sentido. Yo iba a tas?': En un primer momento no captamos lo que nos quería decir,
intervenir, pero monseñor Gemma me hizo entender que no me pero luego nos dimos cuenta de que, al vernos por primera vez que­
preocupara, en efecto, poco después Francesco se volvió a levantar ría saber si durante el exorcismo era necesario contener a Francesco
tranquilamente y empezó a hablarnos con voz normal. con cuerdas para evitar que se hiciera daño. Sin saber qué decir, nos
Cuando le pregunté a monseñor Gemma qué era esa estrella de quedamos callados, pero nuestros corazones empezaron a latir con
metal que Francesco había agarrado, me respondió con amabilidad: fuerza. Luego de algunos minutos terminó el exorcismo anterior y
bella reliquia de san Luis Orione, el fundador de nuestra orden. se abrió la puerta de vidrio, salió sostenida por una mujer, una mu­
No es la primera vez que intercede durante un exorcismo, ¡yo lo in­ chacha menuda, de cabellos negros, largos y desgreñados, con las
voco con frecuencia!': Así, antes de despedirnos nos dio una reliquia mejillas hundidas y ojeras evidentes. Nuestros ojos se cruzaron en
del santo guardada en una pequeña estrella metálica forrada en paño una fracción de segundo y los suyos eran como dos pozos oscuros
rojo y protegida con un vidrio transparente, una copia en miniatura sin fondo ...
de la que en aquel día se había manifestado en verdad oportuna. El padre Amorth nos esperaba y nos pidió que entráramos. Una
En las semanas siguientes nos transformamos en "necesitados" vez dentro, me impresionó de inmediato el leve olor a sudor y vó­
del exorcismo y en el avión a Roma encontrábamos a otros viajeros mito. En el centro del pequeño cuarto ya estaba lista una camilla, pa­
habituales, hombres de negocios o sacerdotes, con los cuales inter­ recida a las que se encuentran en los centros médicos, cubierta con
cambiábamos sonrisas o saludos. una tela azul desteñida, mientras que un poco en desorden estaban
La pequeña iglesia en donde el padre Amorth nos esperaba a las esparcidas unas sillas disparejas, desde las de madera con el asiento
11 :00 a.m., de un cálido día de mitad de mayo, estaba en una calle de paja hasta las hechas con tubos de metal cromado con el espaldar
central de la ciudad, con mucho tráfico. Siguiendo las instrucciones yel asiento de plástico verde claro o marrón.
recibidas, la localizamos e hicimos sonar inmediatamente la campa­ El padre Amorth no estaba solo, había también tres mujeres, dos
nilla puesta detrás de la alta verja de hierro colado que protegía la ancianas, pequeñas y una más joven y robusta, y tres hombres, un
entrada. Después de algunos segundos, apareció al lado del pesado muchacho joven que luego supimos era seminarista y otro de mayor
portón de la iglesia un señor anciano, bajito y corpulento, que luego
edad, además de Paolo que nos había recibido. Sentado, un poco
descubrimos se llamaba Paolo, el cual preguntó: "¿Quiénes son?':
distante, se encontraba otro sacerdote, de unos cuarenta años, con
Una vez identificados, abrió la pesada verja de hierro y nos hizo pa­
una densa cabellera oscura y crespa, vestido de una manera real­
sar adentro.
mente casual: se le reconocía únicamente porque llevaba en el cuello
El contraste entre la fuerte luminosidad del exterior y la penum­ una vistosa estola de color morado encendido. Era el padre Stanis­
bra de la iglesia tuvo como efecto el lanzarnos a la oscuridad, donde lao, otro exorcista, ayudante fijo del padre Amorth que aprendería­
sólo la débil luz de algunas velas y de los vitrales alIado del altar per­ mos a conocer mejor por su fuerza y capacidades. Luego de un breve
mitían admirar la belleza del lugar. De inmediato se nos hizo seguir saludo, el padre Amorth declaró de manera perentoria: "¡Es mejor
a través de una puerta lateral a un oscuro corredor que llevaba a una que lo hagamos sobre la camilla!", y a la pregunta hecha por alguien
pieza con sillas, un viejo diván pequeño y una larga mesa central.
acerca de la conveniencia de amarrar a Francesco la respuesta no
Detrás de una puerta con vidrios opacos se adivinaba otro cuarto
se hizo esperar: "¡Sí, es mejor!': Tal vez el padre Amorth recordaba
cual provenían gritos desgarradores y gruñidos que ponían la piel de
todavía el puño en la cara que había recibido durante el último en­
galli na, intercalados con las monótonas oraciones del padre Amorth
cuentro...
y otras personas.

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Francesco, absolutamente imperturbable, se tendió en la camilla más de tiempo, tuvo pocos problemas en volverse a poner de pie.
y de inmediato se le inmovilizaron las piernas con fuertes cuerdas, Asistí impotente, con el corazón desgarrado a esta enésima prueba,
luego se acercaron unas sillas donde se sentaron todos los presentes, pero ya ni siquiera lloraba, debía mantenerme lúcida y fuerte. Mi
rodeando literalmente a Francesco. Eran seis, listos a intervenir para esposo necesitaba mi determinación y mi amor.
mantenerlo quieto, más dos sacerdotes, así que me senté aparte y me
puse a orar en voz baja. Apenas se inició el exorcismo, Francesco
comenzó como de costumbre a cambiar el ritmo yel tipo de la respi­ Escrito por Francesco
ración, pero en al menos cinco minutos no sucedió nada.
El abismo, ¡qué profundo es el abismo que cada vez me conduce a
Después, de repente, empezó a gruñir y a agitarse, quería levan­ lugares inexplorados, a lugares que nunca hubiera querido explorar,
tarse y escapar, pero sus ojos se habían volteado hacia atrás. Desde ese a lugares que tal vez debía explorar!...
momento comenzó el desbarajuste con los gritos, gruñidos bestiales,
gemidos, contorsiones, pero esta vez todas las personas presentes, ¡Oh, Dios, si es posible, ayúdame a salir pronto de esta experien­
excepto el padre Amorth que siguió con el exorcismo como si no cia, pero no obstante, que se haga tu santa voluntad ahora y siempre.
pasara nada, intervinieron al unísono e inmovilizaron a Francesco, Te ofrezco mis humillaciones y sufrimientos, te ofrezco mi pequeña
uno de las piernas, el otro de las manos, el de aquí de la espalda, el de cruz. Te agradezco por haberme ofrecido esta extraordinaria opor­
más allá de la cabeza. Comenzó un cuerpo a cuerpo tremendo para tunidad! Amén.
tratar de limitar sus violentas reacciones, pero mientras tanto se pro­
seguía y, al momento de interrogar a los demonios, el padre Amorth
exclamó: "'Iü eres Satanás, cobarde, te reconozco ... no estás solo, lo
sé, ¿cuántos son? ¿Está también Asmodeo? ¿Está Lilith? ¿Cuándo te
marchas? ¿Te han fijado la fecha?':
Francesco, con las facciones del rostro completamente trastorna­
das, pero ahora del todo inmovilizado, respondía a las preguntas con
impresionantes gruñidos sordos.
Luego, todos los presentes se pusieron a recitar en coro: "¡En
nombre de Jesucristo, márchate! ¡En nombre de Jesucristo, már­
chate! ¡Por intercesión del Padre Pío, márchate!': ¡Por intercesión
del Padre Pío, márchate ... !': hasta llegar nuevamente a Juan Pablo
n. También en este caso, apenas pronunciaron el nombre del Papa
difunto, se desencadenó una reacción violenta; ya no había duda al­
guna, los demonios que poseían a Francesco se molestaban mucho
cuando se le invocaba.
Al final del exorcismo, las habituales señales de cruz y las palma­
das en la frente para que Francesco volviera en sí, el cual, esta vez,
luego de ser desatado y dejado sentado en la camilla por un poco

128 29
"'JlII~~"~l'"lll-

Francesco pensaba a menudo en una frase que había leído años


antes en un libro: "No por ser difíciles las cosas no se hacen. Es por
C:\PITULU XIII no hacerlas por lo que son difíciles". En fin, estaba convencido de
que con la voluntad se podía realizar Cualquier cosa, aun la más di-
La liberación y la recaída pero en esta circunstancia se había dado cuenta de que fuera
de la voluntad se requería también humildad, una confianza total de
modo que se relegara a un rincón el yo soberbio, material y carnal,
una confianza total como para abrir las puertas, sin
ceptos, con la ayuda divina.

Siguió otro exorcismo a finales de mayo del 2007, otro encuentro


en el que se llegó a tocar fondo; pero fuera de estos dramáticos mo­ Escrito por Francesco
mentos, la vida continuaba de manera aparentemente normal. Los
ruidos y crujidos en casa se habían atenuado mucho, sólo cambios En aquella mañana del 22 de junio del 2007, el avión planeaba
repentinos de humor nos llevaban de vez en cuando a discutir entre plácidamente sobre una Roma soleada, y estaba siguiendo el vuelo
nosotrQS y a fruncir el ceño por algunas horas, Lucia con los niños, habitual a baja altura para tomar la pista de aterrizaje de Ciampino.
Francesco con Lucia, Lucia con Francesco, éste con los niños, los hi­ La ruta de acercamiento al aeropuerto permitía gozar de una vista
entre sÍ. Son cosas que pasan en todas las familias, nos decíamos, panorámica de la ciudad que es en realidad única. Ni una sola nube
aunque haCÍamos todo el esfuerzo para que no sucedieran. en el cielo, con el sol de las 8:30 a.m., que hacía prever un día bas­
Los problemas físicos evidentes habían desaparecido casi del tante cálido.
todo. Y luego estaban las obligaciones del trabajo, un trabajo que Desde la ventanilla observaba la frenética metrópolis que estaba
se trataba de llevar adelante a pesar todo, las obligaciones de la debajo de mí, perfectamente visibles los monumentos principales,
familia, los muchos esfuerzos por tratar de no involucrar dema­ las grandes plazas, las amplias vías llenas de tráfico, y de pronto apa­
siado a nuestros hijos. Y luego la más por los demás que rece, por unos pocos segundos, aun la iglesia donde también esa ma­
por nosotros mismos, la aceptación de nuestra situación pero nunca ñana tocaría el fondo de mí mismo. la señalé con una sonrisa a
la resignación, y en fin, una especie de comprensión de estar me­ Lucia, que estaba sentada a mi lado y que aquel día había decidido
tidos en un juego más grande que nosotros, de estar en presencia acompañarme; ambos nos encontrábamos en un estado de absoluta
de un teatro colosal donde sucedía una cautivadora representación calma, ya habíamos tenido el tiempo rezar el Rosario y de leer
espiritual entre fuerzas benignas y malignas. ¿Cuál era nuestro pa­ algunas páginas de los libros que habíal1los llevado.
pel allí? No ciertamente el de directores. Estos y otros pensamientos Cuando el avión se posó suavemente en la
se entrelazaban durante nuestras conversaciones nocturnas, con las
ni siquiera dejé de leer, pero un sutil hilo de tenSIón, umdo a una
pocas energías que nos quedaban después del Rosario. La dualidad,
expectativa preocupante, se apoderó de mí y no me dejó sino
la eterna dualidad en la que se debate la humanidad, que es mate­
llegar a la iglesia. La misma campanilla detrás de la verja de hierro
ria y también espíritu, personalidad e individualídad, emisividad y
colado, la acostumbrada sonrisa de bienvenida de parte de quien nos
receptividad, luz y tinieblas. Cuánto trabajo para llegar a la unidad,
abrió la puerta para dejarnos entrar luego de habernos reconocido.
un trabajo difícil pero por lo mismo estimulante y de hecho, a veces,
En la fresca penumbra respiré a pleno pulmón ese "perfume suave"
enaltecedor.

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que sólo algunas iglesias poseen, y cuando entramos a la antecámara nunca antes había experimentado. Era como si la escena que se es­
del salón de los exorcismos, continué, entre una y otra Avemaría, taba llevando a cabo en aquella habitación perteneciera a alguien
desgranando tranquilamente la camándula. Gritos inhumanos nos diferente de mí y yo la estuviera siguiendo con indiferencia.
llegaban muy claros y se sobreponían a la salmodia regular del exor­
cismo que el padre Gabriele Amorth y el padre Stanislao estaban Al notar mi estado de ánimo, el padre Amorth me dijo que dejara
practicando a la mujer que tenía cita antes de mí. la camilla y me acomodara en la poltrona gastada en la que se trataba
a las personas con reacciones no demasiado violentas; el exorcismo
¿Era posible que dentro de poco también yo llegara a tanto? Oh continuaría allí.
Dios, que se haga en mí tu santa voluntad; finalmente había apren­
dido, me estaba confiando completa y totalmente, despreocupado de Durante los primeros cinco minutos seguÍ recitando en voz
lo que me sucedería. el Avemaría en latín, como lo prefería hacer ahora desde hacía
gún tiempo; me encontraba en un estado de paz y tranquilidad to­
Sabía yo que esa mañana todo un monasterio de monjas de clau­ tales, y luego, no sé cómo, me puse a rezar al unísono con el padre
sura estaría orando por mí y que desde las 11 hasta las 11 :30 a.m., Amorth las complicadas fórmulas en latín del exorcismo que estaba
intercederían con todo su fervor. De manera increíble, había nacido realizando en mí. ¡Me estaba exorcizando yo mismo! No sabría decir
una amistad entre la madre superiora, la única monja autorizada a si en verdad era mi boca la que pronunciaba claramente las pala­
de vez en cuando, y nuestra familia, y descubrimos que
bras, pero mi mente se hallaba experimentando veloces reacciones
en realidad bastan pocas palabras para sentirnos unidos y apoyados. de apertura, unidas a una completa tranquilidad que nunca antes
Después de unos diez minutos, estaba listo para entrar, preparado había vivenciado. Después, en cierto momento, me sentí envuelto
para encontrarme nuevamente cara a cara con el demonio. por una paz indescriptible, en el silencio más profundo. Me levanté
Después de los habituales saludos, el grupo de ayudantes me hizo lentamente de la poltrona, me arrodillé y me puse a llorar de alegría.
acostar de inmediato en la camilla; alguno de ellos quiso atarme los
El padre Amorth, sin dejarse distraer, completó impertérrito el
pies como de costumbre, pero yo, con una complejo ritual, pero yo ya sabía que mi liberación de la posesión
le dije: "No, esta mañana no". La calma de mi voz unida a la autori­
diabólica era un hecho, que cada laceración en el cuerpo, en la mente
dad, hizo que surtiera el efecto deseado, por lo que durante
y en el espíritu había sido sanada. Todo había llegado con naturali­
ciones preliminares al exorcismo se me dejó completamente
dad y sin ninguna evidencia exterior, sólo la parte más profunda de
para que me moviera.
mí estaba total e indulgentemente asombrada; me sentía inundado
Sin embargo, noté la incomodidad de estar acostado y, mientras de gracia, animado de una energía con una potencia inimaginable, y
recitaba en voz alta el Padrenuestro, traté de sentarme. Al conside­ estaba viviendo una expansión tal de conciencia que me sentía unido
rarse esto como una reacción que anunciaba mi fuga, inicialmente se al mundo entero, aun más, estaba como sumergido en el universo,
me mantuvo como estaba, pero luego de un gesto elocuente del pa­ sin ninguna barrera más de espacio y de tiempo, animado única­
dre Amorth se me dejó también esta vez en condición de moverme mente por la tranquilidad y el deseo de amar a todo ya todos.
libremente.
Este estado de gracia tan completo y total no duró mucho: ¿se­
Ese día no sentí la acostumbrada opresión, más bien estaba en gundos?, ¿minutos?, no sabría decirlo, pero doy gracias a Dios por
un estado de expansión de la conciencia que me permitía orar con haberlo experimentado, porque en ese momento creo haber com­
fervor y al mismo tiempo observar hasta el más pequeño detalle del prendido la situación por la que pasan los místicos durante sus éx­
cuarto y de las personas que lo ocupaban, con una tranquilidad que tasis.

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Recuerdo haber abierto los ojos apenas humedecidos por las lá­ dad, sólo habían" pasado tres meses desde el descubrimiento de la
grimas y ver que todos sonreían, mi esposa, los asistentes y el mismo posesión a la liberación. Un récord positivo si nos atenemos a los
padre Amorth quien mientras tanto había terminado el exorcismo y relatos de los exorcistas. Sin embargo, todos nos habían dicho que no
que con semblante complacido y amigable afirmó: "Ya no hay aquí bajáramos la guardia, que era preciso mantenerse protegidos y con­
ninguna reacción; no te doy otra cita': tinuar con la oración, las misas diarias, la confesión, las bendiciones
y algún exorcismo de vez en cuando...
En realidad, sí había habido una reacción, iY qué reacción!
Pero de hecho, el padre Amorth ya no nos recibía; la ida y regreso
Antes de dejarnos marchar, el padre Amorth realizó también el a Carpinone en un día era una molestia enorme y fray Paolo se había
enésimo exorcismo sobre Lucia y, lo confieso, por un instante temí como desmaterializado; sólo nos quedaba seguir orando y esperar
que la posesión se transfiriera de mí a ella. En cambio, sólo se ma­ que todo siguiera lo mejor posible. Nos comunicábamos a menudo
nifestaron algunas reacciones físicas. Las manos latían, con las ve­ con el padre Luigi y de vez en cuando venía a donde nosotros, pero
nas que se hinchaban y dilataban a través de la delgada piel, algo así eran encuentros esporádicos.
como cuando se lleva a cabo una fuerza intensa, aunque ella estaba
sumamente tranquila y con la respiración lenta y regular. Pero a estas La primera parte de ese verano transcurrió de manera bastante
manifestaciones exteriores ella ya se había acostumbrado. tranquila, pero el hecho de que los problemas de nuestra familia no
estuvieran aun resueltos era evidente, porque de tarde en tarde al­
Después de salir de la iglesia yal regresar al calor de la avanzada guno caía de repente en un estado de postración psicofísica, lo cual
mañana romana, nos dirigimos, incrédulos y aun transformados a la desaparecía con una fervorosa plegaria de liberación y un poco de
basílica de San Juan de Letrán, donde se celebraba la misa del me­ agua exorcizada; los niños se quejaban algunas veces de dolores en
diodía, que se realiza en una bellísima capilla lateral perfumada de las piernas o en la cabeza que invariablemente se curaban con el
incienso. aceite bendito y la oración habitual; en Lucia aparecían de impro­
Después de una parada para tomar fuerzas en el acostumbrado viso extraños dolores que iban del estómago a las piernas, para luego
restaurante en el que ya éramos como de casa, nos dirigimos instin­ desaparecer también de repente después de las unciones, señales de
tivamente a San Pedro, donde nos detuvimos bastante para orar en cruz y oraciones.
las criptas, delante de la tumba de Juan Pablo n, que tantas veces nos Pero ya sabíamos de qué se trataba y no nos preocupábamos más
había hecho sentir su acompañamiento e intercesión. Luego andu­ de la cuenta. Quien no nos quería estaba renovando su maléfico tra­
vimos un buen rato por la imponente basílica, sin preocuparnos de bajo. Yo en cambio me encontraba sumamente bien, estaba de buen
los grupos políglotas de turistas, de los flashes y de todo aquello que humor y no había vuelto a sufrir ninguna manifestación psicofísica
hubiera podido turbar nuestro recogimiento. Estábamos tan felices, de malestar alguno.
caminábamos ligeros, casi como volando de una capilla a la otra.
La estabilidad me hacía cada día más tranquilo, seguro de haber
Cuando el avión que nos regresaba a casa comenzó a decolar del salido adelante; la misa y el Rosario diarios me infundían fuerza y
suelo romano ambos teníamos la certeza de haber vivido un viraje serenidad. Pero resulta que, a finales del verano, mientras el resto de
en nuestra vida, una jornada memorable, única e irrepetible. la familia estaba en el mar y yo en mi casa, solo, para poder trabajar
En los días que siguieron de inmediato a la liberación viví en un más tranquilamente, sucedió algo que hizo que bruscamente pusiera
estado de decaimiento velado por una sutil preocupación. No me los pies en la tierra. Lucia y los niños regresaron a casa porque las
esperaba una liberación así de rápida, aunque parecía una eterni­ vacaciones ya habían terminado definitivamente y hacía poco que

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34

......

habíamos hablado por teléfono para verificar la hora de la llegada, nuestra llegada, le habíamos hablado por teléfono y estaba ansioso
cuando de pronto cayó sobre mí una cortina de oscuridad, una red de abrazarnos; pero apenas bajamos del automóvil comenzó a mal­
de odio que en el transcurso de pocos minutos se apoderó de mí y tratarnos agresivamente. No había modo de hablarle, las comidas
me volvió completamente hostil hacia mi esposa. juntos eran un verdadero infierno, respondía mal a los niños, no nos
soportaba y lo demostraba de todas las formas posibles. Nos miraba
¿Quién tomó de nuevo ventaja? ¿La parte más oscura de mi in­
mal. Yo ya no aguantaba más, estaba lista para decirle que se fuera a
consciente o algún ser enviado a desestabilizar otra vez mi vida?
vivir a otra parte.
La mente comenzó a llenarse de imágenes negativas frente a
Pero antes de hacerlo, hice una llamada telefónica a la madre de
Lucia; yo no hacía absolutamente nada para alimentar dichas imá­
las monjas que nos estaban ayudando con tanto cariño; le expliqué
genes, más bien trataba de combatirlas, pero no lo lograba; estaba
la situación y ella me consoló y aseguró su valioso apoyo gracias a las
abrumado por la habitual fuerza brutal que actuaba a través de mi
muchas oraciones por Francesco. Luego hice otra llamada a monse­
conciencia, y aunque me daba cuenta de la situación absurda y pe­
ñor Gemma y él me aconsejó tener paciencia, callarme, y me pro­
ligrosa, no lograba hacer que la mente reaccionara. El resultado fue
metió sus oraciones por todos nosotros. En fin, me tomé una media
que cuando Lucia y los niños llegaron a casa sonrientes y ansiosos
jornada toda para mí y me escapé para encontrarme con el padre
de volverme a abrazar, me comporté con ellos como si su presencia
Luigi, con el fin de reactivar mi afecto y optimismo.
me fastidiara. Transcurrieron unos días de infierno, en los que mi
sutil hostilidad hacia la familia se manifestaba mediante miradas de Es verdad que todos orában por nosotros, y nosotros mismos,
conmiseración, intolerancia, sarcasmo, aislamiento, frases cortantes con el Rosario y la misa diaria y con la confesión frecuente tratába­
y lapidarias ... En fin, un repertorio ya empleado anteriormente. mos de hacer lo que nos correspondía.
Después de un par de semanas con esta "locura", contra la cual Y sin embargo ... sin embargo ... ¿por qué seguía esta situación?
traté de reaccionar de todos los modos posibles, una mañana, de ma­ ¿Por qué lo permitía Dios? ¡Había algo que no cuadraba!
nera totalmente repentina e inesperada, sentí ser yo mismo nueva­ De todos modos, a la vuelta de muy poco tiempo y de una ma­
mente, estar listo para hablar con Lucia y excusarme por lo sucedido. nera completamente repentina, Francesco volvió a sonreír, a excu­
i Era libre de nuevo! sarse por su comportamiento, a ser cariñoso con los niños.
Enseguida pensé muchas veces qué podría haber provocado tales De 'nuevo, como si se hubiera oprimido el interruptor que encen­
reacciones. Solamente puedo imaginar que Dios me haya ofrecido día la luz en un cuarto oscuro.
una nueva posibilidad de purificación y de comprensión, que haya Gracias queridas monjas, gracias querido obispo, gracias querido
querido tenerme con la cabeza en el cielo pero al mismo tiempo padre Luigi, el Señor escucha sus oraciones, ¡gracias!
mantenerme con los pies en la tierra. Por mi parte, comprendí que
mi trabajo de transformación y evolución sería aun largo ...

Escrito por Lucia

No, Francesco no volvió a la normalidad por casualidad. Ya no


sabía yo qué hacer cuando regresé del mar. Media hora antes de

137
36
F.JO
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¿Pero por qué se necesita llevar una intensa vida espiritual unida
a los sacramentos y a los sacramentales?
C\P1TCLO XIV

La fuerza de la oración, Escrito por Francesco


de los sacramentos y de los sacramentales
Durante mi experiencia he comprobado personalmente que para
una persona que sufre de "males espirituales': como son definidos
de manera elegante los obsesos, los vejados y los poseídos, es funda­
mental tener una intensa vida espiritual. Dicho de este modo, podría
Durante esta experiencia se nos repitió en muchas ocasiones que de­ parecer casi un contrasentido, pero después de un momento de re­
bíamos fortalecernos en la fe, llevar una vida espiritual intensa y orar flexión resulta evidente que un mal espiritual necesita una curación
sin descanso, y además emplear todos los medios que la Iglesia pone en el mismo plano. Esto me ha hecho pensar una vez más que el
a nuestra disposición, en especial los sacramentos de la Eucaristía y mundo espiritual no está sólo habitado por seres benignos (ángeles,
de la confesión junto con los sacramentales como las bendiciones arcángeles, almas santas o almas de difuntos que interceden por no­
realizadas sobre la casa, el, agua, la sal, el aceite, las personas hasta sotros), sino también por seres malignos (demonios, espíritus ma­
llegar al exorcismo. lignos, almas errantes ligadas a la tierra); en fin, exactamente como
Teológicamente hablando, los siete sacramentos (bautismo, con­ sucede en el mundo de la materia, tampoco en los planos invisibles
firmación, Eucaristía, penitencia, unción de los enfermos, orden todo son rosas y flores, y existen el bien y el mal en continua contra­
sagrada y matrimonio) fueron instituidos por Jesucristo y son una posición.
representación objetiva de su ministerio pascual, así que su eficacia Esta visión hace parte, aunque con definiciones diferentes, de
no está ligada a las cualidades morales del sacerdote que los admi­ todas las tradiciones espirituales del mundo. Por tal motivo es ne­
nistra porque es Dios mismo quien actúa en el sacramento, por lo cesario tratar de protegerse de las influencias malignas mediante es­
que es llamada ex opere operato. trategias precisas tanto en el plano físico como en el emotivo, en el
En cambio, los sacramentales (de consagración, bendición y mental y en el espirituaL En efecto, las personas afectadas lo son por
exorcismo) fueron instituidos y propuestos por la Iglesia3 , represen­ lo general en todos estos niveles al mismo tiempo: en el físico, por­
tan uno de los efectos de su fuerza, y su eficacia está muy ligada a que se manifiestan enfermedades inexplicables fácilmente visibles y
la calidad moral del sacerdote que los administra. En sencillas pala­ verificables; en el emocional, porque intervienen sentimientos ne­
bras, si el sacerdote no cree en lo que está haciendo su intervención gativos aparentemente incontrolables; en el mental, porque se hacen
es escasamente eficaz, ¡porque no existe el apoyo de la fe! De ahí por presentes pensamientos pesimistas, de autodestrucción y de autosa­
qué sea algo tonto que los obispos nombren sacerdotes que no crean botaje; en lo espiritual, porque se comprueba la incapacidad de orar,
en éstos o no lo quieran hacer: ¡es pura hipocresía! de participar en los sacramentos y de obrar el bien.
En el plano material, la protección consiste en evitar absoluta­
mente los contactos con aquellos que uno sepa o piense sean promo­
tores del maleficio, la maldición, la atadura o el hechizo.
de Derecho Canóllico, can. 1166s5.

138 139

......
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Al mismo tiempo, en el plano emocional, es preciso velar cons­ tras inclinaciones más bajas y animales que responden únicamente
tantemente para no dejarse llevar por sentimientos deletéreos de a estímulos de placer o de dolor. Lo que significa que todo hombre
odio, de venganza, de posesivismo, de rencor y de temor, que sólo tiende instintivamente a evitar cualquier cosa que provoque dolor en
tendrían como objeto abrir más, de par en par, las puertas del mal él y a perseguir todo lo que le provoque placer, cueste lo que cueste.
y extender sus efectos. Cuando uno se dé cuenta de que está siendo Pero a este comportamiento se opone la mente consciente, que llega
gobernado por tales sentimientos es preciso tratar con todas las fuer­ a postular, de manera racional, que en algunos casos, en cambio, es
zas de valerse de lo opuesto como el amor, la aceptación, el perdón, conveniente sufrir para alcanzar un objetivo superior o altruista, o
la paz y la tranquilidad, no importa si de inmediato no se tiene éxito, que vale la pena limitar ciertos placeres por motivos de conveniencia
ya que el simple hecho de hacer el esfuerzo resulta terapéutico y crea social o salud personal. Sabiendo que la mente inconsciente quisiera
una invisible barrera protectora que está en capacidad de volver me­ recorrer un camino y la consciente otro, nacen en nosotros tensiones
nos eficaz la emoción negativa sucesiva. inevitables, llamadas tentaciones normales, porque irracionalmente
somos tentados para que hagamos lo que racionalmente sabemos
Lo mismo ocurre en el plano mental. Cada vez que uno sea asal­
que es correcto o inadecuado. La Iglesia católica explica que somos
tado por oleadas de pánico, de un sentido de impotencia o de pro­
así a causa del pecado original, por tanto, para no caer en tentación
pósitos destructivos, hay que esforzarse en cambiar inmediatamente
debemos someternos a una continua y agotadora "lucha interior':
el guión, porque si uno se deja atropellar por estos pensamientos
destructivos, se termina también por abrir las puertas a otros pensa­ Que luego la tentación no dependa solamente de cuestiones in­
mientos semejantes que terminan por agravar después la situación. conscientes, sino también de la acción del demonio, la Iglesia no
Por eso tiene razón quien afirma que las personas víctimas de ma­ tiene, al menos en el papel, ninguna duda.
leficios son también enfermos mentales (¿cómo podría ser de otro Muy diferente, en cambio, es la "acción extraordinaria': porque
modo?), pero de aquí a sostener que son exclusivamente casos psi­ proviene de un ataque preciso de orden maléfico llevado a cabo por
quiátricos hay mucho trecho ... entes espirituales malignos, la mayor parte de las veces dirigidos
De la misma manera, en el plano espiritual es necesario orar por contra la persona mediante acciones deliberadas de magia negra,
sí mismo y por el prójimo, implorando la ayuda de Dios y confiando con capacidad de invadir por separado o al mismo tiempo los planos
en su misericordia. físico, emotivo, mental (tanto el consciente como el inconsciente) y
espiritual. Vemos pues cómo se explican las vejaciones físicas, los
Toda esta labor espiritual crea una especie de "armadura" que
repentinos sentimientos de odio, las obsesiones mentales y las pose­
hace más difíciles, y hasta imposibles, los ataques de entes malig­ siones totales.
nos. Si uno no se esfuerza en protegerse, en reaccionar y en contener
los ataques realizados en todos los planos está destinado a sucumbir Extendiendo un velo de compasión sobre las bajas motivaciones
frente a la "potencia del fuego" del enemigo. que llevan a las personas a pedirles a los hechiceros que actúen, tra­
taré ahora de explicar cómo, según mi parecer, puede ser útil la ora­
El "enemigo" actúa mediante las "tentaciones normales" o a través ción en una situación semejante.
de las "acciones extraordinarias':
Imaginémonos a un esgrimista que fuera a competir sin una in­
Las tentaciones normales son experimentadas por cada uno de dumentaria apropiada, sin guantes o sin máscara; a la primera esto­
nosotros a diario y no son otra cosa que el emerger, desde el in­ cada del adversario tal vez tenga suerte y no sufra mal alguno, pero
consciente personal y colectivo según muchos psiquiatras, de nues­ corre el riesgo de ser gravemente herido, de manera que una buena

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40
protección es importante no tanto para impedir los ataques sino A este punto, debemos considerar el inconmensurable valor, y me
para protegerse. atrevería a decir, poder, de los sacramentos, con la Eucaristía en pri­
Hay que tener presente que el esgrimista se expone al duelo sa­ mer lugar, seguida de la confesión. Hablemos en primer lugar de la
biendo que está combatiendo contra un adversario fuerte que quiere confesión, sacramento indispensable para "limpiar de nuevo" nues­
ganar la victoria, mientras que, a menudo, el que es objeto de un ma­ tro ser y hacerlo digno del encuentro eucarístico con Cristo.
leficio lo descubre sólo después de muchos años, como en nuestro El sacramento de la confesión es también llamado penitencia y
caso, y por lo mismo durante bastante tiempo ha venido añadiendo reconciliación, y su enorme valor, suponiendo que se llegue a él con
heridas gravÍsimas sin poder o saber protegerse. corazón sincero y se encuentre un sacerdote de verdad disponible a
La oración tiene el mismo efecto que una armadura. Entre más la escucha, está en el hecho de que cada vez que acudimos a él volun­
consistente sea más protege. Entendamos por consistencia de la ora­ taria y conscientemente se repudia el mal y nos proponemos mejorar
ción no únicamente el aspecto cuantitativo, sino también y sobre todo en el futuro.
el cualitativo. En efecto, si es verdad que un Avemaría bien recitada Cuando uno se confiesa frecuentemente, después de cierto tiempo
vale más que diez masculladas pensando en otra cosa, es igualmente ya no se sabe qué decir ("¿pero qué pecados habré cometido?"), pero
cierto que diez Avemarías dichas con atención valen más que una. La afortunadamente se encuentran también buenos confesores que
corona del Rosario que consta en total de cincuenta Avemarías, cinco aconsejan y hacen reflexionar. Pensemos en el Confiteor que inicia
Padrenuestros y cinco Glorias, más otras oraciones de preparación y la misa: "Yo confieso ante Dios todopoderoso que he pecado mucho
otras de conclusión, está en capacidad de crear día tras día una coraza de pensamiento, palabra, obra y omisión ..::
de protección cada vez más eficaz; pero recitar bien el Rosario no es
Siempre que pensamos mal de algo o de alguien, pecamos, es de­
algo fácil, porque la repetición de la plegaria lleva inevitablemente a
cir, dejamos de cumplir con el precepto del amor que Jesús nos in­
la mente a desconcentrarse y a pensar en otras cosas.
dicó como norma suprema, tanto que la religión cristiana se podría
Muchos sacerdotes afirman que al final está bien, porque el Señor resumir sencillamente en: '~men a los demás como se aman a uste­
premia de todas maneras nuestros esfuerzos y nuestra constancia. des mismos': de lo que se deriva: "No hagan a los demás lo que no
Estoy de acuerdo, pero de seguro la eficacia y la serenidad que deri­ quieran que se haga contra ustedes". Es algo extraordinario cómo el
van de ello son mayores si uno logra mantenerse atento y vigilante, mensaje cristiano pueda ser así de sencillo y, sin embargo, tan eficaz,
vaciando la mente de cualquier otro pensamiento. Para mantener la pero qué difícil es ponerlo en práctica...
atención cuando oramos es muy útil dedicar cada una de las cinco
Si hablamos fuera de propósito o con maldad, pecamos. Si actua­
decenas a un objetivo elevado de interés personal o general, por
mos mal, pecamos; pero si omitimos actuar cuando se nos ofrece la
ejemplo, por los enfermos, los parientes, la familia, las personas que
posibilidad, pecamos del mismo modo.
nos han ayudado en la vida, nuestros enemigos, los sacerdotes, las
almas por las que nadie ora nunca, nuestros antepasados, etc., etc., y En fin, hay motivo para todos los justos; en teoría, habría motivo
luego dedicar cada Avemaría a determinadas personas de acuerdo al suficiente para una confesión diaria. Pero así no tuviéramos nada de
fin que se haya propuesto. Entonces el Rosario no sólo se convierte qué reprocharnos, tendremos siempre la posibilidad de efectuar una
en una extraordinaria oración personalizada, sino también en un confesión de alabanza, es decir ¡para agradecer la oportunidad que
ejercicio mental de concentración comparable con algunas medita­ la vida nos ha ofrecido!
ciones.

142 143
Todos los exorcistas sostienen que una buena confesión es más cerdote autorizado por el obispo y que increpan directamente a los
eficaz que un exorcismo, y yo no puedo sino darles la razón, porque espíritus malignos. Es preciso advertir claramente que, para un laico
he comprobado que este sacramento reviste la misma importancia o un sacerdote no autorizado, exorcizar con un mandato imperativo
que tiene la harina para hacer una torta y sirve en realidad para for­ puede ser extremadamente peligroso.
talecer la coraza de protección espiritual. En cambio, las plegarias de liberación, aun las de contenidos más
A propósito, el sacramento de la Eucaristía es como el amasijo "fuertes': emplean siempre una fórmula de petición de ayuda,
completo de la torta, porque en verdad nos pone en sintonía espiri­ decir una oración, que se basa en la intervención de Dios Padre, de
tual con Cristo, penetra en nosotros a través de un gesto de extraor­ )esús y del Espíritu Santo, y con la intercesión de la Virgen María,
dinaria eficacia y sirve de veras para hacer más luminosa la coraza de los arcángeles, los ángeles, los santos y beatos, para que sean ellos
protección. Al comer su cuerpo, le permitimos que entre en nosotros los que efectúen la labor de la liberación. Esto protege a quien lleva a
y nos transforme asemejándonos a cabo la plegaria de liberación de inconvenientes desagradables por­
Finalmente, los sacramentales representan la pequeña cereza so­ que no sucede nunca una "conexión directa" con los seres maléficos,
bre la torta: la completan, pero sin la harina y los demás ingredientes sino que se deja que el trabajo sea desarrollado en los planos espiri­
del amasijo no serviría de nada. Es inútil esperar un efecto mágico tuales de quien ya se encuentra en éstos. Por otra parte, un sacerdote
del agua y la sal benditas, inútil condimentar la ensalada con el aceite autorizado o un obispo poseen una protección especial que deriva
exorcizado si al mismo tiempo no estamos dispuestos a comprome­ de su actuar en nombre o por cuenta de la Iglesia entera y esto con­
ternos en serio. fiere, junto con su fe y conducta de vida, un poder y una protección
especiales que permiten dar órdenes directas a los demonios para
Creo, personalmente, que el efecto del mismo exorcismo, de por que se alejen, o dialogar con ellos durante el exorcismo sin que sean
sí una oración de extraordinaria potencia y eficacia, resulta muy de­
molestados.
bilitado cuando se suministra a personas que no quieran comprome­
terse. Pero también he tenido la oportunidad de conocer personas Así que, una persona que sufra "males espirituales" no debe
tan vejadas y poseídas como para no tener la fuerza o la posibilidad nunca delegar todo el trabajo de liberación a los exorcistas o a los
de actuar voluntariamente, y que entonces en estos casos el exor­ sacerdotes, sino que, como ya se recordó varias veces, debe también
cismo, más que ser el punto de llegada de un determinado camino se saber trabajar en primera persona ojalá con la ayuda de familiares
convierte obligatoriamente en el punto de partida. y amigos, empleando todos los instrumentos lícitos a disposición,
consciente del hecho de que cada uno de nosotros, en virtud del pro­
En todo caso, los laicos bautizados no deben nunca olvidar que pio bautismo, entra a formar parte de una comunidad sacerdotal y
mismos, y no sólo los sacerdotes consagrados, pueden llevar a es por ende un sacerdote autorizado para que actúe en los límites
cabo oraciones de liberación sumamente eficaces por ellos mismos,
anteriormente indicados.
por sus familiares y aun por otras personas necesitadas, sin ningún
permiso sacerdotal o episcopal; lo contrario sería como decir que, Muchos exorcistas se han encontrado en numerosas ocasiones
para recitar el Padrenuestro, que termina con la invocación de libe­ con la gran eficacia de las oraciones de liberación realizadas por pa­
ración "líbranos del mal" (en realidad en la versión latina es libera rientes o amigos de las víctimas, que precisamente por ser llevadas a
nos a malo, que traducido literalmente significa "¡líbranos del ma­ cabo con la fuerza y la fe provenientes de la implicación directa son
ligno!") se necesitaría primero pedir el permiso. No se deben con- a menudo más eficaces que las oraciones o las bendiciones hechas
nunca dichas oraciones de liberación con los exorcismos que apresuradamente por un consagrado poco motivado.
implican un ritual preciso y sólo pueden ser realizados por un sa­ Una vez más vale el antiguo adagio: ¡ayúdate y Dios te ayudará!

144 145
¿ y cuáles son los pecados que se deben confesar?

C:\PITI iL( ) XV En orden descendiente, la confesión sirve para los pecados mor­
tales porque el hombre, al cometerlos, rompe la relación con Dios,
Una charla sobre la confesión con la moralidad y con la propia conciencia. No es una casualidad el
que para algunos pecados mortales haya excomunión, lo que signi­
con el padre Luigi fica de hecho "sacar de la comunidad':
Dice santo Tomás que aun los más grandes pecadores de faltas
mortales cometen pocos de ellos, es decir, se limitan siempre a esos.
En efecto, si el estatus de una persona es ser homicida, una vez come­
Un día, mientras acompañábamos a su casa al padre Luigi que había tido el primer pecado, probablemente ya no tendrá mayor problema
pasado el día con nosotros, se presentó el tema de la confesión si­ en cometer otros. Pero el pecado es siempre ese. De manera seme­
guiendo un formato que podría ser de esta clase: "Todo lo que usted jante un adúltero apenas tenga una nueva ocasión la aprovechará de
quiso saber de la confesión y no pudo encontrar a quién preguntár­ inmediato.
selo': Como el padre Luigi es un sacerdote que sabe explicar las cosas
En cambio, el pecado grave es un hecho ocasional. Una persona
difíciles con palabras sencillas, pensamos enseguida en hacerle un
puede cometer adulterio, pero arrepentirse y decidir inmediata­
reportaje con los puntos sobresalientes de esta "charla entre amigos':
mente después volver a una vida fiel y correcta y no caer más.

¿Qué es exactamente la confesión? Luego está el pecado venial, en el cual es más fácil caer como por
ejemplo, la rutina del conflicto en la relación de la pareja o con los
El sacramento conocido normalmente como confesión se debe demás familiares.
considerar también con los otro~ dos nombres, es decir, como re­ Bajo ciertos aspectos, las omisiones son pecados graves como por
conciliación y como penitencia. Éstos, en efecto, no son sólo for­ ejemplo, si un cónyuge no quiere al otro, tarde o temprano la fami­
mas diferentes de llamar la misma realidad, sino aspectos del mismo lia inevitablemente se resquebraja. No hay traición, pero la falta de
sacramento. En sí, la lista de los pecados, o sea la confesión, es el amor es una omisión que lleva a la destrucción de la unión.
aspecto menos importante, porque lo fundamental es la penitencia,
vale decir el sentido del pecado y por ende el sentido de Dios, desde De esto se deduce que la confesión es indispensable para el pe­
el momento en que el pecado está siempre en relación con Dios. ASÍ, cado mortal, necesaria para el grave, para librarse de un peso que a la
la celebración de la penitencia significa que el hombre es consciente larga se volvería insoportable, y facultativa para los pecados veniales,
de que no ha cometido algo contra sí mismo o contra algún otro, teniendo en cuenta que esta clase de pecados se perdona normal­
sino sobre todo que ha pecado contra Dios. mente mediante la plegaria de confesión al inicio de la misa o con
otros actos penitenciales.
Viene luego el aspecto de la reconciliación no sólo con Dios, sino
también con la Iglesia, con la comunidad, y así se explica la nece­ Pero hay otro aspecto que se debe tener presente y es que el pe­
sidad de la presencia del sacerdote. Finalmente, hay también una cado es algo así como todas las drogas, crea dependencia, por tanto
reconciliación consigo mismo, es decir, una liberación del peso del pasar del venial al grave y luego al mortal es sólo cuestión de tiempo.
pecado, porque es precisamente el sentido del pecado el que deter­ Así como existe la costumbre de hacer el bien, que se llama virtud,
mina ese peso sobre la conciencia. así también existe el hábito del mal que se llama vicio. Por ejemplo,

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si una persona es atraída de manera especial y morbosa por personas Se comprende así que la confesión no es una especie de lavande­
del otro sexo y no trata de controlar esta inclinación, es posible que ría a donde uno va a limpiarse un poco, sino que es un momento en
tarde o temprano cometa adulterio o hasta violencia carnal. el que se aplica la salvación total, para que se pueda crecer en la vida
espirituaL
Por consiguiente, para no errar es conveniente una confesión fre­ En efecto, el aspecto menos conocido pero el más extraordinario
cuente independientemente de los pecados cometidos ... de la confesión es el positivo, es decir, la obtención de la fuerza espi­
ritual de Jesucristo, que proporciona no sólo la capacidad de no co­
La gran motivación de la confesión frecuente es una penetración
meter más el pecado, sino también la posibilidad de realizar el bien.
de la gracia divina que ayuda al hombre a estar atento a estos aspec­
tos del pecado yal asunto de la costumbre. Si existe un problema y
no se esfuerza en resolverlo es probable que cada vez se convierta en ¿ y entonces por qué la confesión es un sacramento que casi no se
algo más grave. De este modo, la frecuencia del sacramento se vuelve utiliza, considerado como algo de ancianas devotas?
una gran ayuda, porque es la aplicación de los méritos de Jesucristo Seguramente se trata de un sacramento poco conocido y poco
vista en una única persona mediante la absolución, que es un gesto amado, porque lleva a la persona a humillarse ante Dios y ante el
preciso del sacerdote. En fin, es la manifestación de una garantía así sacerdote al reconocerse pecador. Pero también es cierto que no
como es citada en el evangelio: "A quienes perdonen los pecados, les siempre los sacerdotes están en disponibilidad de recibir, escuchar
quedan perdonados; a quienes se los retengan, les quedan retenidos". y responder.
De manera que ésta es la tarea que Jesús le ha señalado explícita­ A pesar de esto, la confesión es esencialmente un sacramento de
mente a la Iglesia, a través de los sacerdotes, así como lo dijo: "Cada gozo que hace mucho bien a quien se esfuerza en acudir a él y tam­
vez que hagan esto, háganlo en memoria mía". Es un sacramento ins­ bién le hace bien al sacerdote que cumple un verdadero servicio de
tituido por Cristo que es como una segunda tabla de salvación, ya liberación. Una persona entra al confesionario con la carga de sus
que el bautismo no se puede repetir. Cuando un bautizado se equi­ pecados y sale revigorizada por la gracia, librada de los pecados y
voca, se le inscribe, por así decirlo, en el registro del infierno; para por ende del maligno.
que no sea condenado puede acceder a este juicio de misericordia.
En efecto, la confesión es precisamente la invocación de la bondad Si se piensa que el exorcismo no es más que una bendición du­
del Padre a través de la muerte y resurrección de Cristo, que ha rea­ rante la cual se le ordena al demonio salir de la persona, se puede
lizado la salvación en el Espíritu Santo. comprender cómo el sacramento sea mucho más: es el mismo Cristo
que actúa en primera persona, da la salvación, la vida nueva, per­
Los santos Padres dicen que es como un segundo bautismo, es una dona y ofrece la posibilidad de perdonar.
manera de volver a aquella gracia original que se pierde con el pecado.
Mediante la confesión es como si Cristo volviera a nacer, a vivir,
La confesión frecuente lleva a realizar un camino espiritual más a morir y a resucitar a favor de esa única persona, como si hubiera
seguro y expedito. Algunos santos se confesaban cada día. ¿Qué los muerto sólo por ella. San Pablo dice: "Sigo a quien me amó y se en­
impulsaba a hacer esto? Por ejemplo, estaban muy atentos a las omi­ tregó a sí mismo a la muerte por mí': De este modo uno queda embe­
siones, es decir, al bien que habrían podido efectuar durante el día y lesado ante el misterio de Dios, porque verdaderamente Él en aquel
que no habían llevado a cabo por varios motivos, tales como el afán, momento se entrega precisamente al creyente.
la distracción o la costumbre.

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Cuando el buen ladrón le dice: "Señor, acuérdate de mí cuando


estés en tu reind: Jesús no responde: "Ajustemos primero las cuentas
C:\PITCU) XVI
y veamos qué estuviste tramando", sino que le dice: "Hoy estarás con­
migo en el paraíso": hay una mutua acogida total. Y el ladrón antes De exorcizado a asistente del exorcista
no era bueno, era ladrón y basta. Pero en aquel momento recibe a
Dios, elige la bondad en vez del rechazo y los insultos.

¿De modo que para hacer una buena confesión no necesariamente


se necesita un buen sacerdote?

Una vez aceptada esta óptica, no es importante la bondad del sa­ Escrito por Francesco
cerdote, porque es Cristo quien actúa directamente en los sacramen­
tos. Por tanto, se necesita sencillamente encontrar a un sacerdote Durante los exorcismos había quedado muy impresionado por
que preste este servicio, porque la relación es con la Iglesia y el Señor. las personas laicas que ayudaban al padre Amorth, por lo que un
día, con ocasión de un viaje de trabajo a Roma, pasé a saludarlo a
Claro que si el sacerdote es amable, está a disposición, si trata la pequeña iglesia al terminar su labor matutina de exorcismos y le
de entender, si comprende los esfuerzos del penitente, puede ayu­ pregunté si de vez en cuando podría también yo ayudarle con los
dar mucho más a realizar un buen camino espiritual, aun si se tiene otros laicos: no lo dudó un solo instante y me dijo que las personas
presente que está de por medio el trabajo del diablo que quita todos que deseaban orar junto con él eran cada vez más escasas y que por
los temores cuando se debe cometer el mal iY los restituye cuando se tanto ¡eran bienvenidas!
trata de confesarlo!
Así me di cuenta de que mediante ese servicio podría restituir
un poco del tiempo y de los esfuerzos anteriores dedicados a mí,
¿Pero es cierto que uno se puede confesar sencillamente para agra­
y al mismo tiempo verificar mis eventuales reacciones durante los
decerle a Dios lo que se tiene?
exorcismos a los demás. Aprovechando esta doble oportunidad, hoy
Es cierto, la confesión puede ser también de alabanza, es decir, día trato de programar mis viajes de trabajo a Roma dejando libres
agradecimiento a causa de todo lo que parecía imposible y que el para mí las mañanas de los martes o de los viernes, los dos días en
Señor volvió posible a través de la gracia obtenida mediante la con­ los que normalmente se llevan a cabo los exorcismos más exigentes
tesión frecuente. Obviamente, no se trata de agradecer las cosas ma.' en el lugar que conozco tan bien.
teriales, como el haber ganado la lotería o porque puedo tener un Como ya lo dije, el padre Amorth está siempre rodeado de un
automóvil lujoso, sino por las conquistas espirituales que nos hacen grupo de asistentes, algunos de los cuales han estado con él por aii.os;
conscientes de ser personas en realidad afortunadas y privilegiadas. su trabajo es absolutamente indispensable y complementario.
Entre sus colaboradores fijos están el padre Stanislao y al menos
tres o cuatro laicos que constituyen un grupo de oración y de "re­
ducción del exorcizadd: Cada mañana comienza a las 8:50 a.m., con
la bendición del agua, de la sal, del aceite que le llevan un pequeño
grupo de personas que evidentemente tiene una gran necesidad de

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