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EL TIEMPO EN EL DERECHO

CONFIRMACION.

ES LA MANIFESTACION DE LA VOLUNTAD POR MEDIO DE LA CUAL EL TITULAR DE UNA


ACCIÓN DE NULIDAD RELATIVA RENUNCIA A ACCIONAR, Y MEDIANTE UN NUEVO
CONSENTIMIENTO, CONVALIDA RETROACTIVAMENTE EL ACTO. LA CONFIRMACION
PUEDE SER TÁCITA. IMPLICA LA RENUNCIA A LA ACCIÓN ANULABILIDAD.-

 
 Ineficacia del contrato - Confirmación de actos jurídicos inválidos - Compraventa
- Confirmación tácita

En la especie, firmado el compromiso de compraventa, el accionante se atuvo


a lo pactado, reconociendo los saldos adeudados, actualizados conforme a las
pautas que hoy ataca de nulidad, pagando y extendiendo la garantía
hipotecaria conforme lo expresamente previsto y así obtiene que se le extienda
la escritura traslativa de dominio, conforme también lo acordado. Más aún -ya
vimos- hasta efectuó un pago parcial de la deuda reconocida y garantida con la
hipoteca. A mi juicio el compromiso de compraventa estaba ya íntegramente
consumado y, por consiguiente, tal cumplimiento lleva ínsito la confirmación de
cualquier vicio o defecto que el mismo hubiere podido adolecer.
Consecuentemente, su nulidad o la de alguna de sus cláusulas es inviable. De
igual modo lo es la escritura en que consta el reconocimiento del saldo y el
otorgamiento de la garantía hipotecaria, luego de obtener el accionante la
escrituración a su nombre del inmueble vendido.
0.71 || Gaspar, Luis vs. Neme, Fuhad A. s. Ordinario /// 2ª CCCMPT,
Mendoza, Mendoza; 07/08/1992; Sumarios Oficiales Poder Judicial de
Mendoza; RC J 2752/14

LEER LIBRO SEXTO DE LOS DERECHO PERSONALES Y


REALES, ART. 2532 A 2572.-

CADUCIDAD: una ley caduca en el caso de haberse establecido un


determinado periodo para su vigencia. Es la perdida de vigencia y eficacia de
la ley. Puede ser por falta de uso, ha sido reemplazada para otro uso; y falta
de concordancia por las normas del derecho.

DIFERENCIA ENTRE CADUCIDAD Y PRESCRIPCION.-

Si bien la prescripción y la caducidad de instancia se edifican sobre la idea de


abandono y tienen algunos puntos en común, son esencialmente distintos en
naturaleza (aun cuando la perención se rija por el término de la prescripción,
cuando el de ésta fuere menor), de tal forma que uno extingue la acción o el
derecho, según la doctrina con que se comulgue, mientras el otro produce
solamente la extinción de la instancia o el proceso, sin perjuicio que, en alguna
situación, a tenor de lo dispuesto en la parte pertinente del art. 3987, Código
Civil, pueda contribuir por vía indirecta a la extinción de la acción, al borrar el
efecto interruptivo de la demanda y siempre que, ante tal circunstancia, por el
tiempo transcurrido, se haya ya cumplido el plazo de prescripción.

 Los términos de caducidad, a diferencia de los de prescripción, pueden y deben ser


aplicados de oficio, ya que tienen por objeto consolidar una situación legal que hay interés en
amparar, por lo que no resulta óbice a su acogimiento la circunstancia de haberse planteado
en la fundamentación del recurso extraordinario, toda vez que el término señalado en el art.
251 persigue otorgar certeza a la decisión tomada por la asamblea.
0.002 || Asociación de Tiro y Gimnasia de Quilmes vs. Iglesia, Daniel y otro s. Rendición
de cuentas /// SCJ, Buenos Aires; 06/09/2006; Jurisprudencia de la Provincia de Buenos
Aires; 86033; RC J 7637/11

SUSPENSION O INTERRUPCION DE LA CADUCIDAD

Los plazos de caducidad no se interrumpen ni suspenden salvo disposición legal en contrario


(art. 2567, CCyC). Por las mismas razones recién indicadas, son aplicables también por
analogía las reglas de la prescripción liberatoria antes analizadas.

§ 11. La caducidad de los derechos y la aplicación de la ley en el tiempo

Se han incorporado en los artículos 2566 a 2572 del CCyC normas que disponen sobre
la caducidad de los derechos en general, y que no existían en el Código Civil.
Se establece en el artículo 2566 del CCyC que "La caducidad extingue el derecho no
ejercido", lo cual -desde nuestra óptica- es cuestionable, ya que compartimos la opinión
de aquellos que señalan que "en la caducidad el derecho está en potencia, y depende,
para que se adquiera definitivamente, que en el plazo de caducidad tenga lugar el hecho
positivo o negativo que la impide" [41].
Sin perjuicio de esta digresión, en lo que ahora nos interesa, las cuestiones que revisten
interés son las que siguen.

[41] LÓPEZ HERRERA, Edgardo, Tratado de la prescripción liberatoria, Lexis-Nexis, Buenos Ai


PIZARRO, Ramón Daniel y VALLESPINOS, Carlos Gustavo, Instituciones de Derecho
Hammurabi, Buenos Aires, 1999, t. 3, p. 759.

§ 7. Las causales de interrupción de la prescripción

En el caso del reconocimiento, que es un acto instantáneo, la virtualidad interruptiva y


el efecto consiguiente dependerán de la ley vigente al tiempo en que aquéllos hayan sido
otorgados. Como dice Roubier, "la ley aplicable es la ley en vigor al día en que se
produce el hecho interruptivo" [36].
Ahora bien, si se trata de lo que en el Código Civil se denomina interrupción de la
prescripción por demanda (arts. 3986 y 3987), y en el CCyC interrupción por petición
judicial (arts. 2546 y 2547), se presentan algunas situaciones particulares.
Siempre, recordamos, contemplamos el caso en que la situación se encuentre en
tránsito al tiempo de la entrada en vigencia de la nueva ley, ya que si con anterioridad
quedó finiquitada será regida por la antigua, y si la petición judicial se efectúa luego del
1° de agosto de 2015, se regirá exclusivamente por el CCyC.
Los supuestos que pueden presentarse son los siguientes:
1. Si previo a la entrada en vigencia del CCyC se entabló la demanda (o se otorgó algún
otro acto procesal equiparado a ella) y la causa se encuentra en trámite, la subsistencia
de la causal de interrupción se resolverá por lo establecido en el artículo 2547 del
CCyC. Es que "mientras esa situación judicial no se haya agotado, es siempre
susceptible de caer bajo el imperio de una ley nueva que, en virtud de su 'efecto
inmediato', deberá aplicarse a la mencionada situación" [37]. Por ende, quedan sin
virtualidad alguna las posiciones que interpretaban -en el marco del Código Civil- que
la demanda era un acto instantáneo de interrupción de la prescripción, y que esta última
se interrumpía sucesivamente con cada acto de impulso del proceso [38].

2. Si, en la misma situación, se asumiera la postura restrictiva respecto a los alcances del
artículo 3986 del Código Civil (aunque ello es improbable, ya que casi de manera
unánime se postula lo que ahora se encuentra consagrado en el art. 2546, CCyC), debe
entenderse que si al día 1° de agosto de 2015 la prescripción aún no se había
cumplido, queda interrumpida con los efectos del artículo 2547 del CCyC.
Por otra parte, en nuestra opinión la interrupción por solicitud de arbitraje se mantiene
inalterada respecto de lo establecido en el artículo 3988 del Código Civil, sin perjuicio
de que luego de la entrada en vigencia del CCyC regirá de manera inmediata lo
dispuesto en el artículo 2548 del CCyC (en especial, en todo lo vinculado a la cesación
del arbitraje).
Por último, y sin perjuicio de la eliminación (por la Comisión Bicameral) de lo
dispuesto en el texto originario del artículo 2548 del Anteproyecto [39], debe entenderse
que se mantiene lo sostenido por la doctrina y la jurisprudencia respecto a que, si no es
posible promover acción judicial sin formular reclamo administrativo previo, éste
interrumpe la prescripción, cesando su efecto una vez que ha concluido la instancia
administrativa obligatoria.
[36] ROUBIER, Le Droit transitorie cit., p. 299.

[37] MOISSET DE ESPANÉS, Irretroactividad de la ley y el nuevo artículo 3º (Código Civil) cit., p. 185

[38] MÁRQUEZ y CALDERÓN, Prescripción y caducidad en el Código Civil y Comercial cit.

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