Está en la página 1de 5

www.isep.

es

EMDR
Creencias Negativas Creencias Positivas
Auto Concepto NO Adaptativo Auto Concepto Adaptativo
No estoy bien como soy Estoy bien como soy Merezco ser
No merezco ser amado(a). amado(a), puedo tener amor.
Soy una mala persona. Soy una buena persona.
No valgo nada (inadecuado[a]). Soy Soy valioso(a), valgo mucho.
una vergüenza. Soy noble.
No soy querible (no digno[a] de ser Soy querible (digno[a] de ser
amado[a]). amado[a]).
No sirvo para nada, soy inútil. Sí sirvo.
Merezco solo cosas malas. Merezco cosas buenas.
Estoy dañado(a) para siempre. Soy (puedo ser) sano(a), saludable.
Soy una desilusión, debo ser Estoy bien como soy. Soy inteligente.
perfecto(a). Soy significante (importante).
Soy tonto(a). Merezco vivir.
Soy insignificante (poco importante). Estoy bien como soy.
Merezco morir.
Soy seguro(a).
Soy feo(a), mi cuerpo es detestable.
Soy habilidoso(a).
Soy inseguro(a).
Soy torpe.
Responsabilidad apropiada
Responsabilidad no apropiada
Hice lo mejor que pude. Aprendí
Tendría que haber hecho algo. Hice
(puedo aprender) de eso.
algo malo, por eso soy malo(a).
Hago lo mejor que puedo. Hice lo mejor
Debía haber sabido mejor.
que pude.
Fue mi culpa.
No merezco perdón
Seguridad
Peligro
Soy confiable.
No soy confiable.
Puedo (aprender a) confiar en mi
No confío en mí mismo(a). mismo(a). Puedo confiar en mis juicios.
No puedo confiar en mis juicios. No Puedo elegir en quien confiar.
puedo confiar en nadie.
Puedo (aprender a) cuidarme.
No puedo cuidarme, protegerme. Terminó, estoy a salvo ahora.
Estoy todavía en peligro.
Puedo sentir (mostrar) mis emociones
No puedo sentir (mostrar) mis con seguridad.
emociones con seguridad.
Puedo pedir lo que quiero.
No puedo pedir lo que quiero.
Puedo decidir contarlo si quiero.
No puedo contarlo.

Falta de control, falta de opciones


Control y elecciones
No puedo tener control.
Puedo tener control ahora.
www.isep.es
Soy débil, temeroso(a). Soy fuerte.
Soy un fracaso (voy a fracasar). No Puedo elegir.
logro tener lo que quiero. Puedo tener (merecer) lo que quiero.
No puedo tener éxito. Puedo tener éxito, triunfar.
Soy pesimista. Soy optimista.
No tengo fuerzas, no tengo opciones. Lo puedo manejar.
No me puedo proteger, soy vulnerable Puedo (aprender a) protegerme.

ISEP Barcelona ISEP Madrid ISEP Valencia Universidad ISEP


C. Berlín 9, bajos C. Raimundo Lulio 3, 4º Av. Tres Forques 2 C. Lázaro Cárdenas 151 Sur,
08014 Barcelona 28010 Madrid 46018 Valencia Colonia Centro Sinaloa
+34 934 877 777 +34 915 399 000 +34 963 944 829 80000 Culiacán, Sinaloa
barcelona@isep.e madrid@isep.es valencia@isep.es +52 3346240052
s mexico@isep.com
www.isep.es

Igualmente curioso es que este aumento y diversificación del sufrimiento humano haya corrido

paralelo, en buena parte, al rechazo del dolor y de la incomodidad como si no fueran fenómenos

naturales que devienen del simple hecho de ser humanos. O lo que es igual, la humanidad parece

comprometida en un afán por superar lo natural y evadirse de cualquier inconveniencia de la vida,

buscando un grado de bienestar que siglos atrás sólo se hubiera concebido como digno de dioses

o ángeles. El ser humano, aspirando a no sufrir nunca ni por nada, ha terminado propiciando sufrir

más y por más cosas. La cuestión es dónde reside el poder que permite, por un lado, la exitosa

adaptación a las condiciones más adversas del medio natural a través del control y la manipulación

de su impacto sobre nuestro organismo y que, por otro lado, nos expone al sufrimiento por nuevas

razones cuando las penalidades de la vida (las razones clásicas del sufrimiento), como tales, son

muchas menos. La paradoja, decíamos, es vivir en un mundo más cómodo (en el mundo

desarrollado), más seguro, más preciso, muchísimo menos doloroso, y encontrarnos abrumados

por el sufrimiento generado, precisamente, por ese mundo diseñado para buscar la felicidad

evitando el sufrimiento. Decía Russell

que los animales son felices en tanto cubren sus necesidades básicas; los humanos, sin embargo,

pueden no ser felices aun cuando las tengan cubiertas.

El mismo autor señalaba que aun aburriéndonos menos que nuestros antepasados tenemos más

miedo de aburrirnos. Miedo al que podría añadirse un considerable número de otros miedos

igualmente «psicológicos», como el miedo a no tener éxito, el miedo a estar solo, el miedo a no

saber qué hacer, etc. La cuestión probablemente esté en que se ha psicologizado tanto la vida y se

ha hecho tan extraordinariamente compleja que no es extraño que la demanda de ayuda por

ISEP ISEP ISEP Universidad


Barcelona Madrid Valencia ISEP
www.isep.es

malestares subclínicos y problemas de la vida cotidiana se haya incrementado sobremanera, a la

vez que se hayan multiplicado los servicios ofrecidos (por ejemplo, Marinoff, 1999).

ISEP ISEP ISEP Universidad


Barcelona Madrid Valencia ISEP
www.isep.es

Acudir al psicólogo o al psiquiatra, o «tener un terapeuta», se ha convertido en los países

desarrollados en algo casi tan «normal» como lo es tener un peluquero, un médico o un

abogado

ISEP ISEP ISEP Universidad


Barcelona Madrid Valencia ISEP

También podría gustarte