HISTORIA CONTEMPORANEA CYNDY DAYAN AYALA PIRAGUA 4088216 TRABAJO SOCIAL 1-C
MUJERES INVADIDAS
¿Por qué las mujeres han sido objeto de violencia en la conquista y en el
conflicto armado interno colombiano? Todo comenzó desde que hubo la conquista en américa ya que marca especial mente a un sector indígena femenino. Siendo estas mujeres unas victimas fáciles de la violencia y de abusos sexuales, la mujer fue esclavizada y violada en sus derechos a causa del machismo. A causa de esto la mujer indígena se sintió objeto de posesión de los conquistadores, quedando completamente anulada sin ninguna alternativa que la resignación. A pesar de esto eran importantes en la conquista, los temas religiosos la limpieza de su sangre, los rangos sociales tenían su principal función, ya que eran las encargadas de traer los niños al mundo, niños mestizos, manchados o de basto linaje como los denominaban, fruto de violaciones a manos de los españoles colonizadores. En estos actos tiene participe la hipocresía de la iglesia hacia discriminar categóricamente a estas mujeres y a estos niños por motivo de raza y procedencia. De aquí nace el chantaje machista en contra de las mujeres ya que empezaron a verse como objeto de satisfacción sexual, de estos acontecimientos se han identificado 4 principales manifestaciones de violencia que afectan especialmente a las mujeres dentro del conflicto armado. En primer término, los actores del conflicto armado emplean distintas formas de violencia física, psicológica y sexual para "lesionar al enemigo", ya sea deshumanizando a la víctima, vulnerando su núcleo familiar y/o impartiendo terror en su comunidad, con el fin de avanzar en el control de territorios y recursos. En esta clase de violencia, las mujeres pueden ser blanco directo o víctimas colaterales, como resultado de sus relaciones afectivas como hijas, madres, esposas, compañeras, o hermanas. En segundo término, la violencia destinada a causar el desplazamiento forzado del territorio y el consecuente desarraigo de su hogar, vida cotidiana, comunidad y familia. En tercer término, la violencia sexual que puede acompañar el reclutamiento forzado de las mujeres, destinado a hacerlas rendir servicios sexuales a miembros de la guerrilla o las fuerzas paramilitares. En cuarto término, la violencia destinada a hacerlas objeto constante de pautas de control social impuestas por grupos armados ilegales en poblaciones o territorios bajo su control. Las secciones que siguen ofrecen un diagnóstico sobre estos cuatro fenómenos.
¿por qué la violencia se ha ejercido especialmente en sus cuerpos?
Se ha ejercido principal mente por el dominio y la preferencia que ha tenido el
hombre en la sociedad, ya que desde un tiempo remoto la mujer no poseía derechos y era excluida de tomar decisiones y era recriminada por ser vista como objeto sexual FACTORES DE CONSECUENCIA Los factores de riesgo de violencia de pareja y violencia sexual son de carácter individual, familiar, comunitario y social. Algunos se asocian a la comisión de actos de violencia, otros a su padecimiento, y otros a ambos. Entre los factores de riesgo de ambas, violencia de pareja y violencia sexual, se encuentran los siguientes:
un bajo nivel de instrucción (autores de violencia sexual y víctimas de violencia
sexual); la exposición al maltrato infantil (autores y víctimas); la experiencia de violencia familiar (autores y víctimas); el trastorno de personalidad antisocial (autores); el uso nocivo del alcohol (autores y víctimas); el hecho de tener muchas parejas o de inspirar sospechas de infidelidad en la pareja (autores); las actitudes de aceptación de la violencia (autores y víctimas). Entre los factores asociados específicamente a la violencia de pareja cabe citar: los antecedentes de violencia (autores y víctimas); la discordia e insatisfacción marital (autores y víctimas). las dificultades de comunicación entre los miembros de la pareja. Y entre los factores asociados específicamente a la violencia sexual destacan: la creencia en el honor de la familia y la pureza sexual; las ideologías que consagran los privilegios sexuales del hombre; y la levedad de las sanciones legales contra los actos de violencia sexual. La desigualdad de la mujer con respecto al hombre y el uso normativo de la violencia para resolver los conflictos están estrechamente asociados tanto a la violencia de pareja como a la violencia sexual ejercida por cualquier persona.