Algo que no me gusta de mi

Fernanda Cecilia Yépez Acosta

Grupo I
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Algo que no me gusta de mí misma, fuera de mis inseguridades físicas es que me enojo con
demasiada facilidad. Actualmente trabajo en servicio al cliente, por lo que he tenido que
aprender a controlar con mi enojo y buscar maneras asertivas de lidiar con él. Mi mejor amiga
conoce ese problema con mi carácter y hemos hablado múltiples veces de eso y de que soy muy
orgullosa, en general no le molesta, pues dice que muchas cosas me han llevado a no saber
controlar mi enojo y mis emociones en general.
¿De qué me di cuenta?
Me di cuenta de que, ya tengo bastante tiempo con este problema, sin embargo, trabajando en
distintos lugares de atención al cliente no he aprendido en sí a canalizarlo de una manera del todo
sana, pues muchas veces me guardo las cosas y reprimo mis emociones, entonces se va
acumulando todo de tal manera que ante cualquier mínima provocación exploto y lo saco todo en
forma de gritos o de insultos.
Me di cuenta también de que es algo que debería de tratar porque, en sí, si afecta mi vida
cotidiana, porque muchas veces no me doy cuenta de que acumulo esas emociones hasta el
momento en que exploto y sin querer lastimo a la gente o soy grosera.
¿Qué emociones me generó y cómo afectaron el trabajo?
Durante la realización de este trabajo me invadieron emociones de confusión e intranquilidad,
pues nunca me había dado cuenta de que la emoción del enojo que experimentaba fuera tan
intensa, yo pensaba que era una emoción como cualquiera, que con dejarla pasar era suficiente,
pero me di cuenta de que lo guardo y lo acumulo de tal manera que exploto. No solo me sentí
confundida, también me sentí enojada conmigo misma.
¿Por qué es importante o relevante?
En sí, es relevante para mí, para mi familia y comunidad porque el saber manejar mis emociones
de manera asertiva me vuelve un miembro más funcional, ya no explotaría ni lastimaría a nadie.
¿Qué pienso hacer diferente como resultado de la información obtenida?
Algo que pienso hacer diferente es ya no callar las situaciones que no me agradan d en mi
trabajo, en caso de que sea con un cliente, hablaré con mi supervisora para que lo atienda ella,
pues las personas groseras son las que más hacen que acumule enojo y guardo mis emociones,
eso genera un ambiente de tensión que puede llegar a afectar emocionalmente no solamente a mí,
sino que también afecta emocionalmente a las personas a mi alrededor.