CARRERA

DERECHO

ASIGNATURA
DERECHO PROCESAL DEL TRABAJO

PROFESOR TITULAR – Jefe de Cátedra:

PROF. DR. FELIPE SANTIAGO PAREDES

ASISTENTE
Abog. Sandra Bazán Silvero

SEMESTRE: Décimo CÁTEDRA: Primera

TURNO: Noche AÑO: 2020

LIBROS A SER UTILIZADOS POR LOS ALUMNOS
UNIDAD TERCERA

LECCIÓN 9
PLAZOS O TÉRMINOS
Unidad Tercera LECCIÓN 9 PLAZOS O TÉRMINOS

PLAZOS PROCESALES
En nuestro Derecho Procesal del Trabajo existe sinonimia entre los vocablos “plazo” y “término”.
En el Libro II, Título III del Código, cuando desarrolla “los términos”, se refiere a “plazos”.
Raymundo L. Fernández los unifica, al decir: “Término es el plazo dentro del cual las partes
deben ejercer sus derechos y cumplir las resoluciones judiciales” (Código de Procedimiento
Civil Comentado – Edic. 1955, pág. 122). En general, la doctrina sigue igual orientación. Suele
utilizarse también la expresión “espacio de tiempo” como equivalente a plazo.
Los plazos o términos son lapsos preestablecidos para la realización de los actos procesales.
Los plazos o términos pueden ser por horas, días y años. Como excepción se consideran como
plazos las fracciones de horas (media hora para alegato oral), o minutos de tolerancia para el
inicio de una audiencia (ver Art. 95 CPT).
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FUNCIONES DE LOS
PLAZOS O TÉRMINOS
Regula el impulso procesal, genera la preclusión de las diferentes etapas del procedimiento,
y garantiza la defensa de derechos de los litigantes.
Existe un orden de las diferentes etapas del proceso: Demanda. El avance de una etapa a la
otra es posible mediante el impulso procesal de las partes, de oficio por el Juez o Tribunal,
y/o a petición del Ministerio Público (art. 58 CPT).
Y la preclusión de un estadio procesal presupone la clausura del anterior.
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CLASIFICACIÓN
Los términos pueden ser legales, judiciales y convencionales; perentorios, prorrogables e
improrrogables, de ampliación, individuales y comunes, ordinarios y extraordinarios.
Términos legales: Son los establecidos en la Ley. Ej.: seis días para contestar la demanda,
3 días para contestar traslados sin término expreso, y otros.
El término judicial: Es el determinado por el Juez o Tribunal, conforme a la Ley. Según el
art. 134 el término de prueba no excederá de 20 días, pero el Juez fijará la duración del
término extraordinario “atendiendo a la distancia y facilidad de las comunicaciones,
cuando la prueba haya de producirse fuera de la República”.
Términos perentorios: Son aquellos preclusivos, que vencidos producen la caducidad del
derecho, sin intervención del Juez o de las partes. Este carácter surge del art. 76 del CPT
que dice: “Todos los plazos establecidos son improrrogables y perentorios, salvo las
excepciones previstas”.
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La excepción expresa, que aparece en la Ley con respecto a la improrrogabilidad es el término

de ampliación del art. 134 que autoriza aumentar el periodo de diligenciamiento a razón de un
día por cada cincuenta kilómetros, cuando se produzca en otro lugar, pero dentro de la
República”. Es también facultad del Juez señalar el término extraordinario que considere
suficiente (art. 135 CPT).
El término individual: Es el que rige para las partes destinado a realizar un acto procesal,
computándose independientemente para cada una. Ej.: plazo para contestar la demanda si son
varios los demandados.
El término común: Es para ambas partes. Ej.: para diligenciar las pruebas, y presentar alegatos.
El término ordinario: Es el normal, previsto para todos los casos: 20 días para diligenciar
pruebas, 3 días para producir pruebas en el incidente de tacha de testigos, etc.
Término extraordinario: Que fija el Juez, cuya duración depende de las circunstancias
(producción de pruebas fuera del país, teniendo en cuenta la distancia y los medios de
comunicaciones).
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REGULACIÓN Y MODOS DE COMPUTARSE

Es importante considerar el comienzo, transcurso, y expiración de los términos. Los plazos
correrán desde el día siguiente al del emplazamiento, citación o notificación. Los plazos en
horas comenzarán a correr desde la medianoche del día de la notificación.
Para computar el transcurso del término, en realidad no existe diferencia respecto a los
fijados en días y horas. La expresión “desde la medianoche del día de la notificación” es
igual que “el día siguiente de la notificación”. Y desde luego, se excluyen los días inhábiles
(Art. 77 CPT). Los plazos comunes, correrán desde la última notificación.
Es posible que los plazos sean contados de fecha en fecha, como en la caducidad de la
instancia, por aplicación del Art. 334 del Código Civil.
El plazo incluye el día del vencimiento. Si fuere domingo o feriado, el cumplimiento tendrá
lugar el primer día siguiente que no lo sea (Art. 338, último párrafo del C. Civil).
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LOS TÉRMINOS EN DÍAS Y HORAS

Expiran a la medianoche del día de su vencimiento, porque empiezan a correr desde la

medianoche del día de la notificación; los términos en meses y años en la medianoche de la
misma fecha del mes correspondiente, salvo el caso en que el término corra desde el último
día de un mes con más días que el mes del vencimiento, como ocurre si comienza el 31 de
Diciembre para un plazo de dos meses, que vencerá el 28 o 29 de Febrero del año siguiente
(Guía laboral Nº 1 – Mayo 1971).
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SUSPENSIÓN DE LOS TÉRMINOS

Se suspenden los términos cuando dejan de contarse momentáneamente. La Ley menciona,
los casos:
a- Días feriados establecidos legalmente;
b- Receso anual del Poder Judicial (feria del mes de Enero);
c- Fallecimiento o incapacidad legal sobreviniente de la persona contra quien corren.
El art. 78 del CPT., erróneamente utiliza el vocablo “interrupción”, refiriéndose a las
causantes de suspensión. La suspensión no borra el plazo ya transcurrido con anterioridad.
Se lo tiene en cuenta al reanudarse el cómputo.
También son días de suspensión los feriados legales vigentes, que incluye los Domingos,
fechas de algunos acontecimientos históricos y los feriados religiosos móviles, así como
los días sábados, pues no se atienden en los Juzgados y Tribunales, salvo excepciones
reglamentadas en determinadas jurisdicciones.
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En el receso anual (Feria, mes de Enero), no funcionan los Juzgados y Tribunales de la

República, conforme al Código de Organización Judicial. Pero permanecen de Turno varios
jueces y otros funcionarios, para atender las causas o urgencias comprendidas en
Acordadas de la Corte Suprema de Justicia.
Cuando se produce el fallecimiento o la incapacidad legal sobreviniente de la persona contra
quien corren los términos, el Juez, una vez recibida la comunicación, fijará un plazo a los
herederos o al curador del mismo insano, para que se presenten a tomar intervención en el juicio.
Cuando el plazo vence el viernes o sábado, el escrito podrá ser presentado el día siguiente
hábil, sin cargo de Escribano, conforme art. 150 del CPC.
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INTERRUPCIÓN DE LOS TÉRMINOS

Se produce cuando por algún motivo queda borrado el tiempo anterior, y comienza el
cómputo de un nuevo plazo. Ej.: la presentación de la demanda interrumpe el plazo de
prescripción, una audiencia de conciliación ante la A.A. (Autoridad Administrativa del
Trabajo) con intervención de ambas partes, también tiene efecto interruptivo.
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DEBER DEL JUEZ

El Juez del trabajo puede impulsar la causa iniciada, hasta ponerla en estado de sentencia.
El sistema procesal del trabajo es inquisitorio. El Juez cumple una misión activa. En
cambio, el sistema dispositivo civil deja en manos de los sujetos de la relación procesal el
impulso de la Instancia.
El art. 79 del CPT, dispone: “transcurridos los plazos el Juez o Tribunal, de oficio o a
petición de parte, ordenará la prosecución del juicio, según su estado”.
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EFECTOS DEL VENCIMIENTO

El efecto principal del vencimiento del plazo es la preclusión (pérdida, extinción o

consumación de una facultad procesal – Couture). Al respecto Alsina comenta: La
inobservancia de los principios legales en materia de plazos, puede ocasionar la pérdida de
un derecho y hasta la extinción del proceso mismo. Así, la falta de contestación dentro del
término de Ley, ocasiona la pérdida del derecho a contestarla en adelante; las resoluciones
judiciales adquieren el carácter de preclusivas si no se interponen en tiempo el recurso de
apelación contra las mismas; si el apelante no expresa agravios, se produce la deserción del
recurso, y la sentencia de primera instancia queda firme. La inactividad de las partes da
lugar a la caducidad de instancia que extingue el proceso, etc.
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LECCIÓN 9
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