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Colombian Applied Linguistics Journal

ISSN: 0123-4641
caljournal@yahoo.com
Universidad Distrital Francisco José de Caldas
Colombia

Montoya Castillo, Mario


La fuerza del discurso epidíctico para motivar y tejer comunidad: el caso de profesores y estudiantes
de primer semestre de la Universidad Distrital
Colombian Applied Linguistics Journal, vol. 16, núm. 2, julio-diciembre, 2014, pp. 233-259
Universidad Distrital Francisco José de Caldas
Bogotá, Colombia

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=305732268008

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UNIVERSIDAD DISTRITAL DOI: http://dx.doi.org/10.14483/udistrital.jour.calj.2014.2.a07
FRANCISCO JOSÉ DE CALDAS

Research Article

La fuerza del discurso epidíctico para motivar y tejer comunidad:


el caso de profesores y estudiantes de primer semestre
de la Universidad Distrital1
The power of the epideictic speech as motivation and homonoia strategy:
A case of freshmen students at Universidad Distrital

Mario Montoya Castillo, M.A. 2

Citation / Para citar este artículo: Montoya, M. (2014). La fuerza del discurso epidíptico para motivar y tejer
comunidad. El caso de profesores y estudiantes de primer semestre de la Universidad Distrital. Colombian
Applied Linguistics Journal, 16(2),233-259.

Received: 4-Aug-2014 / Accepted: 28-Aug-2014

Resumen Abstract
La retórica epidíctica es muy usada en el territorio es- The praise and the censure are always present in the
colar especialmente cuando de valores se trata. El epi- classroom rhetoric epideictic speech, particularly when
díctico contribuye a moldear el carácter, por lo que en the teacher transmits values. The epideictic speech also
nuestra época deba tomársele en serio. contributes to shape the students’ personality, and this is
Ubicar la retórica epidíctica en el ámbito del aula de why nowadays, this speech must be taken seriously.
clase y pensar las formas como se alaba y censura es lo Locating this speech in the classroom environment, and
que denominamos en este trabajo el epidíctico como thinking of the different ways to praise and to censure is
valorización, y se muestra su fuerza para co-construir con what we call, in this work, the epideictic as valuation and
los Otros. La vocación política consiste en llegar a con- its power to co-build with the others. The political voca-
vertir el epidíctico en un laboratorio social, que en esta tion is making the epideictic to become a social labora-
perspectiva retórica exige comprender que la pedagogía tory under this rhetoric perspective, where the pedagogy
también es un intercambio de emociones. must be also understood as an exchange of emotions.
La orientación de este trabajo es pues resignificar el con- The approach here is to give the concept of the epideictic
cepto del género discursivo epidíctico en la educación speech genre in the university education a different me-
universitaria a partir de la investigación empírica que re- aning, based on an empiric research. The results of the
coge las interacciones de profesores y estudiantes. En este research of two categories of analysis are presented: The
artículo presentamos los resultados de investigación de dos Ethos and the Epideictic formulas.
categorías de análisis: el Ethos y las fórmulas epidícticas. Keywords: classroom, epideictic, epideictic formulas,
Palabras clave: aula de clase, educador, epidíctico, ethos, ethos, homonoia, motivation, orator, teacher, classroom
formulas epidícticas, homonoia, motivar, orador

1 Este artículo muestra resultados de la investigación titulada "El género discursivo epidíctico en el aula de clase: el orgullo del maestro"
desarrollada en el marco del Doctorado Interinstitucional en Educación (énfasis en lenguaje) de las universidades Distrital, Pedagógica y
del Valle.
2 Universidad Distrital Francisco José de Caldas, Bogotá, Colombia. mmontoya@udistrital.edu.co

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Introducción cuando lo reciben. (Bielher & Snowman, 1992, pp.


440-441)
En la interacción maestro-alumno tiene una im-
portancia inmensa el ambiente de clase. Cual- Podemos decir, entonces, que la motivación es
quiera que haya pasado por un aula de clase sabe fundamental para alcanzar los logros y el apren-
perfectamente que un niño o un joven asustado, dizaje de los estudiantes; por lo mismo hay una
inseguro, des-conocido, no reconocido, sin auto- preocupación por la formación de profesores que
estima, sin deseo de conocer, estará en un terre- puedan mostrar a sus estudiantes las necesidades
no poco fértil para los procesos de aprendizaje. de cumplir sus expectativas, de responder a sus
Dicho de otro modo, el derrotismo y el pesimis- necesidades, pero especialmente profesores que
mo del ambiente escolar serán los caminos que puedan comprender dichos procesos como espa-
conduzcan al fracaso, a los choques, a la inco- cios cooperativos; en donde el estudiante juega
municación y a procesos que nada tienen que ver un papel importante, que toma distancia de aque-
con la formación del hombre. De esta manera, llas prácticas centradas en la competitividad orga-
los espacios de formación en lugar de permitir el nizada por el maestro (Cf. Bielher & Snowman,
progreso, arruinarán las posibilidades de niños 1992, p. 452). En efecto, la autorrealización y el
y jóvenes inquietos que realmente tienen deseo “efecto de expectativa”, son fundamentales, pues
de conocer. Por ejemplo, la falta de interés en el se sabe que si el profesor tiene expectativas altas
aula, según Bielher y Snowman (1992) frente a lo que pueden hacer sus estudiantes, ya
que los valora y los considera portadores de una
a menudo conduce hacia un círculo vicioso. potencia que seguramente redundará en que rea-
Una presentación aburrida que haga el maestro licen las cosas bien. De igual forma, las relacio-
hace que los estudiantes demuestren que están nes y los procesos se desarrollarán en ambientes
aburridos e inquietos; la falta de respuesta de los positivos y afectivos, pues la pedagogía sería, fun-
estudiantes hace que el maestro pierda confianza damentalmente, un intercambio de emociones.
y entusiasmo y suponga que nada puede hacerse Didácticamente esto anima al profesor a ofrecer
para despertar el interés del alumno. La reacción materiales más avanzados. Por el otro lado, crear
fatalista del maestro aumenta el aburrimiento del ambientes desagradables puede afectar todo pro-
estudiante, y así sucesivamente. (p. 442) ceso de aprendizaje, pues habrá menos atención,
más tensión, menos goce y menos tranquilidad
En algunos casos, se le pide al profesor que (Cf. Goldenberg, 1992).
recurra al elogio como reforzador, aspecto que En este trabajo la relación profesor-estudian-
se encuentra en estrecha relación con nuestro te es el centro, a pesar de que solo nos interesa
trabajo, abordar el discurso del profesor. Lo anterior, en
razón a que no podemos descuidar la perspectiva
hasta el punto de sugerir que usted conforme contextual del discurso, la situación, que en este
su propia conducta para aumentar su productivi- caso responde a las primeras clases de primer
dad como elogiador. Sin embargo, [se] supone que semestre de la carrera. Sin duda, allí se puede
los maestros del aula rara vez utilizan el elogio apreciar una proximidad entre estos dos actores,
como una forma eficiente o deseable de reforza- que podemos traducir en una interacción cara a
miento […] la conducta del maestro respecto del cara, como camino posible para hacer conforta-
elogio está condicionada por los estudiantes y no ble el salón de clase y lograr que los estudiantes
a la inversa. Algunos estudiantes piden el elogio y se sientan libres, motivados y comprometidos con
refuerzan al maestro reaccionando positivamente su carrera profesional. En general los profesores

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consideraron a sus estudiantes como seres huma- entonces, que la tarea es el análisis lingüístico de
nos y nunca como números, lo cual es indicador un texto retórico y que los instrumentos de análi-
de relaciones efectivas y afectivas, fundamen- sis son los recursos del método lingüístico, pues
tales en los procesos de comunicación y en los sabemos que esta es la vía para poder analizar
procesos de aprendizaje de todo estudiante. No- los datos y, en tal sentido, debemos recordar que
tablemente, esta proximidad individual puede “toda aplicación estratégica de un sistema semió-
dificultarse en los salones con mayor cantidad de tico puede ser legítimamente considerada como
estudiantes. No obstante, esta es una necesaria una retórica. Hay así una retórica de lo verbal
e importante meta para el profesor cuando crea y de lo no verbal, de lo consciente y de lo in-
un ambiente de aprendizaje creativo en su salón consciente” (Cf. Plantin & Muñoz, 2011). En este
de clase (Cf. Cole, Sugioka, & Yamagata-Lynch, sentido, entrar a los datos nos exige acercarnos a
1999). En suma, podemos decir que estos instrumentos que ofrece la lingüística. De
otro modo, el centro de este trabajo es el análisis
[…] el uso contingente de la atención del maes- del discurso público de algunos profesores uni-
tro puede ser un medio efectivo en el desarrollo de versitarios en el aula de clase, el cual se orienta a
conducta deseable en el salón de clase. Hace mu- un auditorio concreto con intencionalidades, pro-
cho que los maestros eficientes saben que elogiar pósitos y contenidos bien definidos y que busca,
en forma casual las conductas deseadas e ignorar fundamentalmente, que los estudiantes adhieran
sistemáticamente las perturbadoras pueden ser y apropien contenidos y valores propios de la
procedimientos útiles para ayudar a mantener la Universidad, la Facultad y la Carrera, así como
disciplina adecuada dentro del salón. Lo que quizá también los saberes disciplinares; es decir, nos
le resulte sorprendente al personal docente, es el interesa el discurso epidíctico en el que el orador
grado en que la conducta del alumno responde a la se hace educador (Cf. Perelman & Olbrechts
atención sistemática del maestro. (Vance, Lund, & Tyteca, 1994).
Jackson, 1980, p.253)
Perspectiva retórica de investigación y el uso
La enseñanza no puede ser, entonces, un pro- social del discurso
ceso solitario, sino que exige una comprensión de
esta como un proceso en el que intervienen dife- Es sabido desde Cicerón que en el origen de la
rentes actores, de los cuales el profesor y el estu- humanidad hablar es situarse en un equilibrio de
diante son la médula. El trabajo en el aula debe fuerzas (Cf. Cicerón, 1983); a su vez reconoce-
ser compartido, co-construido, debe ser un acto mos que cada vez que nos inscribimos en el im-
comunicativo que permita ser y estar para, con perativo de la comunicación, la tarea es siempre
y en el Otro, para construir, crear y transformar tratar de acortar dichas distancias o, algunas ve-
la realidad. El aula de clases debe ser un espacio ces, agrandarlas (Cf. Meyer, 2008); pues se trata
para construcción, de co-construcción de nuevas de orientar la pregunta de si podremos vivir jun-
formas de solidaridad. tos, la cual ocupa un lugar importante en las ta-
En el contexto anterior, indicamos que este reas de la filosofía contemporánea. Así, más allá
trabajo se inscribe en un marco muy general de de interpretar a la retórica como arte de persua-
los discursos retóricos de algunos profesores uni- dir y convencer (Cf. Aristóteles, 1999; Perelman
versitarios y, desde allí, se quiere hacer el aná- & Olbrechts Tyteca, 1994; Danblon, 2005), es-
lisis de sus interacciones discursivas que tengan tamos convencidos de que la retórica encara ese
como objeto el elogio y la censura, es decir, las desafío tan crucial de lo humano, en un presente
secuencias discursivas epidícticas. Podemos decir, que requiere acuciantemente de nuevas formas

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de solidaridad. En esta misma línea, indicamos mirada al epidíctico desde este horizonte está en
que nos interesa una concepción de comunica- proximidad con lo que es una teoría de la acción.
ción que sea interpretada como un estar para y Baste decir aquí que en el Tratado de la argumen-
con el Otro, a fin de construir, transformar, cam- tación se indica que los otros dos géneros discur-
biar el mundo (Cf. Restrepo, 2012, pp. 123-124), sivos (el deliberativo y el judicial), tienen efectos
siempre con Otro para movilizar los sentidos y en el mundo de la vida, gracias al papel que cum-
las realidades. De este modo, la retórica la inter- ple el género epidíctico, que no es otro que el de
pretamos como un campo en el que es posible fortalecer la adhesión.
formular la pregunta de si podemos vivir juntos En fin, la perspectiva retórica de investigación
y, en consecuencia, la retórica sería toda apli- y el uso social del discurso que se aborda en este
cación estratégica de un sistema semiótico (Cf. trabajo, cuestiona esa mirada tradicional de la ar-
Plantin & Muñoz, 2011) que nos permite acortar gumentación epidíctica como mera decoración y
distancias y estar con el otro, co-construyendo la abre un panorama amplio que ubica este discurso
realidad, el mundo. en convergencia con dimensiones éticas, estéti-
De acuerdo con lo anterior, diremos que la cas, sociales y políticas del discurso. Esta apertura
perspectiva retórica de esta investigación y el uso de panorama seguramente haga fértil el estudio
social del discurso están ligados por el género del epidíctico a futuro y haga cada vez más fuer-
discursivo epidíctico que sitúa el papel funda- te el análisis de este género discursivo entendido
mental que juega en toda comunicación el espec- como valorización. El primer paso se ofrece en
tador (theorôs); pues este evalúa, critica, analiza y este trabajo que muestra su funcionamiento y su
vigila lo que se elogia, lo preferible y lo creíble y potencia valorativa.
se encuentra siempre en la posibilidad de propo-
ner observaciones al discurso del hablante y del El discurso epidíctico o ¿la valorización como
orador (Cf. Pernot, 1993). Desde esta perspectiva, acto?
diremos que el auditorio o el espectador asumen
el epidíctico como valorización, pues lo que ha- Puede decirse que la pedagogía es también un
cen está ligado a reforzar o a desvirtuar cierto tipo intercambio de emociones.3 De hecho, la inte-
de creencias, cualesquiera que ellas sean, por lo racción pone en escena las tres instancias retóri-
que el epidíctico es realmente transversal, ya que cas (logos, pathos, ethos) en un mismo nivel y es
este ejercicio se puede hacer en cualquier campo justamente una de las posibilidades de la retórica
del mundo de la vida: la ciencia, la política, la contemporánea (Cf. Meyer, 2008). En este sentido,
ética, la filosofía y la cultura, entre otros. El epi- las emociones, las pasiones, el talante del orador,
díctico puede inscribirse, también, en el marco de entre otros tantos elementos que se dan en los
discusión que ha existido siempre entre retóricos procesos de interacción, florecen y se manifiestan
y filósofos. Esta relación es de suma importancia en el mundo de la vida, en los discursos retóri-
para nuestro presente y contexto, pues se ponen cos. En esta línea, la de reconocer a la pedagogía
en correspondencia estas dos, filosofía y retórica, como intercambio de emociones, diremos que
para pensar la educación.
3 Esta fue una intuición que me acompañó desde mis inicios
Lo anterior requiere de una nueva orientación como profesor. Hoy, luego de una comprensión compleja de las
y concepción de lo que es la argumentación epi- emociones (Ramírez 2001), de una comprensión de la retórica
que reconoce el mismo valor de las tres instancias retóricas
díctica, pues aquí se toma distancia de esa mirada (ethos, pathos y logos) (Meyer 2008) y, luego de comprender
peyorativa y despreciativa que tuvo este géne- el papel que juegan las emociones en la interacción (Meyer,
2008; Plantin, Doury, Traverso, 2000), puedo decir que es una
ro, al ser interpretado solamente como el juego tesis que bien vale la pena seguir defendiendo para bien de la
de ornamentación, de estilística. En realidad la educación y de todo proceso pedagógico.

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las emociones y las pasiones se convierten en un la satisfacción, la victimización y, en fin, con el


tema esencial para la retórica de nuestro presente. epidíctico interpretado como valorización que es
Sobre la riqueza del género epidíctico poco lo que nos ocupa en este trabajo. En suma, siem-
se ha dicho. Una primera revisión documental da pre hay una convergencia entre el epidíctico, la
cuenta del bajo número de estudios dedicados emoción (pathos) y el ethos, especialmente cuan-
a este objeto de estudio o, dicho de otro modo, do el orador toma cierto tipo de riesgos y cuando
son pocos los investigadores del lenguaje que hace uso de la palabra. En palabras de Dominicy
encuentran en el elogio, el encomio, el vitupe- (2001), diremos que el epidíctico es una fábrica
rio y en la censura la posibilidad de construir un de construcción de ethos.
espacio que arroje conclusiones fecundas para Lo interesante de la amplificación es el hecho
la interpretación del ser actual. Lo anterior se de que se muestra desprovisto de alguna inten-
debe, quizá, a las limitaciones que a lo largo de ción que intente persuadir al auditorio y, más
la historia ha tenido la retórica como campo de bien, la amplificación se presenta como si se tra-
estudio, que ha orientado una lectura bastante pe- tara de un argumento natural, se pone en escena
yorativa de la misma retórica y, en su interior, una como si se tratará de una exclamación que no
mirada más negativa de lo que entendemos como depende únicamente del orador. El juego de una
género discursivo epidíctico, pues se le interpreta retórica epidíctica consiste en que el mismo au-
como un discurso marcadamente convencional ditorio descubra el valor argumentativo de la am-
que ofrece pocas posibilidades de análisis y, en plificación. Sin embargo, la amplificación como
consecuencia, pocas posibilidades para interpre- argumento no es inferencial, tal como sucede con
tar el complejo tejido de la cultura. argumentos deliberativos y judiciales (el ejemplo
y el entimema), sino más bien la amplificación
Retórica del elogio y la censura o de la es una imagen total que se da para ser vista (Cf.
amplificación como argumento Dominicy & Franken, 2001). Esta idea es muy
cercana a la imagen de Grice (1979), cuando afir-
Las intenciones del elogio y la censura se ins- ma que la amplificación destaca la significación
criben en la retórica del elogio y la censura. La natural o, en términos epidícticos, diremos que el
amplificación es la técnica que usa el orador para elogio significa naturalmente que tal o cual perso-
lograr su propósito. Recordemos, sin embargo, naje es virtuoso, lo cual indica que el camino de
que dicha técnica no necesariamente evoca y la amplificación se muestra, no se dice.
describe minuciosamente las acciones, las vir-
tudes, sino que más bien referencia categorías El epidíctico en la realidad práctica: la
generales que el auditorio puede reconocer o, motivación y la homonoia
más bien, se supone que conoce (Cf. Danblon,
2001); es decir, la amplificación como técnica Lo anterior abre una nueva ventana en esta
permite que el auditorio vea categorías genera- discusión. A propósito del discurso epidíctico del
les a través de las cuales es posible reconocer profesor, suceden dos cosas que son de mucha
virtudes y vicios. Como ya se ha indicado, este importancia para este trabajo. La primera, que
reconocimiento provoca emociones, por lo que los estudiantes se adhieren a las valorizaciones
la argumentación epidíctica está coligada con las que hace el profesor (también pueden efecti-
emociones, con los enunciados poéticos, con la vamente rechazarlas, pero esto no se produce,
catarsis y, en consecuencia, con el compromiso, normalmente, en el momento del acto comuni-
la figura del héroe, la indignación, la insatisfac- cativo, este hecho no se da en la presentación
ción, el modelo, la motivación, la orientación, que hace el profesor). En este contexto, diremos,

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preliminarmente, que en el epidíctico no se toma a la acción de los estudiantes, desde una valoriza-
ninguna decisión, ni se busca la verdad, ni la ve- ción que se puede considerar como virtuosa. De
rosimilitud, sino que más bien se evocan decisio- acuerdo con lo anterior, diremos también que el
nes que se debatieron con anterioridad y sobre epidíctico se puede desarrollar en una cultura que
las cuales todos están de acuerdo. Desde esta considera el discurso como factor de cohesión
perspectiva, el profesor busca que los estudiantes social y de las comunidades y las tribus.
se adhieran a un conjunto de valores y acciones Siempre nos orienta la preocupación por una
propios de la vida universitaria: el rigor, la per- homonoia que recontextualice una pregunta cen-
sistencia, la disciplina, la crítica, la lectura, la es- tral del siglo XX ¿podremos vivir juntos? (Tourai-
critura, el estudio, entre otras. El hecho de estar ne, 2000), bajo la perspectiva de poder vivir una
allí, en este espacio, el universitario, significa que buena vida que permita resignificar la retórica
hay un orador que se presenta en una actitud de como persuasión y, en últimas, pensarla como
aceptación y recepción a ese tipo de discurso y posibilidad de comunidad y de habitar en colec-
que propicia la adhesión a cierto tipo de valores y tivo; esto es, una retórica que permita aproximar-
acciones. nos a la homonoia en un presente que tanto lo
En el discurso del profesor circulan, entonces, necesita.
unos valores propios del quehacer universitario Para el caso de los “primíparos”, la impor-
sobre los cuales los estudiantes se adhieren, pues tancia de la homonoia está en tejer lazo social
están de acuerdo con ellos. En este sentido, la ar- e instituir una comunidad que se motive, se
gumentación epidíctica contribuye a la construc- comprometa y se anime a habitar el mundo uni-
ción de la realidad social y del tejido social que versitario desde las bondades que ofrece; pero
los griegos denominaban la homonoia. En lo que también tomando distancia de los peligros que
respecta a los “primíparos”, diremos que ellos allí se pueden encontrar, pues sabemos que todo
están de acuerdo con la idea, según la cual, se va espacio está atravesado por virtudes y por vicios.
a la Universidad a estudiar, que es, por ejemplo, Aristóteles muestra que el carácter del orador
importante ocupar una plaza en la universidad es uno de los elementos más persuasivos y firmes
pública; ahora, cuando el profesor hace el elo- medios para la consecución de la persuasión,
gio de su propia área, de su programa curricular, tanto en los discursos epidícticos como en el
de su Facultad, de la Universidad, lo que hace es deliberativo y el judicial. Pero también con este
amplificar todas sus virtudes: su equipo, su cali- planteamiento se hace del talante del orador un
dad, su procedencia. Con dicha amplificación, accesorio del discurso persuasivo, pues solo es
lo que busca es un efecto de homonoia, es decir, un medio para lograr la persuasión. La condición
una emoción colectiva que creará una disposi- del orador no es el fin del discurso epidíctico sino
ción a la acción (Cf. Perelman & Olbrechts-Tyte- que es en este último donde se puede, a partir
ca, 1994, pp. 19-47). de la aceptación de los valores de la comunidad,
Decimos entonces que la argumentación epi- presentar al orador como defensor de unos valo-
díctica, entendida como valorización, tiende a res morales, lo que permite la persuasión del au-
reforzar la homonoia social, que se sitúa más allá ditorio. Ya que, como se dijo antes, la persuasión
de la deliberación pues, en el fondo, el epidíctico del orador es digna de crédito cuando hace su-
tiene como resultado un tipo de consejo que re- yos, por medio del discurso, dichos valores.
fuerza una disposición hacia razonamientos, va-
lores, costumbres y, en general, representaciones Por lo tanto no es cierto que en el arte, como
ya establecidas; por consiguiente, el epidíctico afirman algunos tratadistas, la honradez del
puede tener como resultado un consejo orientado que habla no incorpora nada en el orden a lo

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convincente, sino que por así decirlo, casi es el ta- estamos señalando que este estudio es la conver-
lante personal quien constituye el más firme medio gencia entre retórica y lingüística, pues se hace,
de la persuasión. (Aristóteles 1999, p. 1356a, 10) como ya se indicó, un análisis desde las herra-
mientas que ofrece el análisis del discurso en in-
El talante del orador es, pues, un medio para teracción, de un discurso retórico.
la persuasión efectiva del auditorio y su construc- En esta fase se hizo un rastreo en bases de
ción inicia a partir de la exposición de los discur- datos, a partir de las palabras clave: epidíctico y
sos epidícticos. educación. Infortunadamente se encontró un solo
artículo sobre este tema, titulado “Prophetic Epi-
Diseño metodológico deictic Rhetoric: Poetic Education Beyond Good
and Evil” de Jim Garrison (2003), en la Revista
Nos hemos preguntado sobre la importancia de Educational Theory (53) pp. 221–41. También se
los “planos” en el ejercicio investigativo. En al- hizo una pesquisa en las bibliotecas de la Univer-
guna parte, recuerda Marx que “el hombre se sidad Javeriana, Universidad Nacional y Universi-
distingue del topo en que, antes de construir, le- dad de los Andes, así como en la biblioteca Luis
vanta los planos” (Marx citado por Bloch, 1962). Ángel Arango. Allí se encontraron referencias al
De alguna manera, esto es lo que se pretende ha- epidíctico pero en su formulación clásica, es de-
cer en un diseño metodológico con el propósito cir, el epidíctico visto como decoración o asocia-
de avanzar por el camino abierto y llegar a una do únicamente a lo poético.
respuesta y cosecha de unos objetivos a partir de
una pregunta formulada, lo que puede traducirse Descripción: Una forma de observar prácticas
en el campo de la investigación como el ejercicio El propósito de esta fase es capturar y sistematizar
de una sociedad del conocimiento que además las secuencias discursivas epidícticas en el dis-
de producirlo, sabe cómo se produjo, cómo debe curso retórico de algunos profesores en el aula de
usarse en los diversos contextos para que este clase, es decir, aquellos discursos que se utilizan
pueda aproximarse a los problemas sociales. para la valorización.
El diseño metodológico no es necesariamente
lineal, sino que se emergen elementos en para- Las secuencias discursivas epidícticas: unidades
lelo o también de forma circular. De esta forma, de análisis
en el desarrollo de este trabajo ubicamos tres Para capturar y sistematizar nuestro corpus hemos
grandes fases: análisis documental, descripción e definido nuestras unidades de análisis como “se-
interpretación. cuencias discursivas epidícticas” que, parafrasean-
do a Plantin (2012), son las unidades discursivas
Análisis documental que nos permiten el estudio de la expresividad o
del discurso epidíctico siempre en situación, en
Una forma de analizar teoría contexto. Desde esta perspectiva, una secuencia
Se busca armar el marco de referencia sobre no- no es una categoría sino más bien una unidad dis-
ciones y conceptos de retórica (género discursivo cursiva que posibilita, operativamente, la compren-
epidíctico, el epidíctico como valorización, ar- sión del funcionamiento del discurso epidíctico en
gumentación epidíctica, instancias retóricas del el contexto del aula de clase, con estudiantes de
ethos, el pathos y el logos), lingüística (prácticas primer semestre (Plantin, 2012a, p. 58).
discursivas, comunicación, actos de habla, fun- Para procesar y sistematizar nuestro corpus,
ciones del lenguaje, análisis del discurso y aná- a fin de tener nuestras secuencias epidícticas,
lisis del discurso en interacción). Con lo anterior recurrimos al software Transana. Las secuencias

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discursivas epidícticas se obtuvieron con la fun- En la Tabla 1. presentamos las convenciones


ción Time Code, que es un marcador que el de transcripción definidas exclusivamente para
investigador utiliza de acuerdo con sus necesi- esta investigación. Las convenciones de trascrip-
dades de análisis. El procesamiento se hace en ción generales utilizadas para la transcripción de
una pirámide de tres niveles. El primer nivel es nuestro corpus son las definidas para el software.
lo que se denomina las series. La serie de nues-
tro corpus está dividida en cuatro partes que El corpus y el marco institucional
corresponden a los profesores que permitieron El corpus sobre el que trabajamos se recogió a par-
grabar sus clases. Luego de las series vienen las tir de la observación y grabación de los discursos
colecciones; así pues, tenemos cuatro colec- retóricos de cuatro profesores universitarios, du-
ciones de la siguiente manera: Martha Graham, rante las primeras dos semanas de clase del primer
Pina Bausch, Santiago García y Konstantín Sta- periodo académico 2012 (del jueves 8 de marzo
nislavski. Cada colección contiene las secuen- al miércoles 21 del mismo mes). En la descripción
cias epidícticas a partir de lo que llamamos del funcionamiento del epidíctico en estos espa-
ahora colecciones y que constituyen las cate- cios, podemos observar las representaciones, las
gorías de análisis que mostraremos más adelan- creencias y valores del profesor. Dicho corpus nos
te: tipologías expresivas, formulas epidícticas y llevó por buen camino y la grabación de casi 21
ethos. Finalmente, Transana permite vincular las horas de clase fue suficiente, luego del análisis con
colecciones a un conjunto de palabras que am- nuestras categorías, con el propósito de mostrar el
plían las posibilidades del análisis. funcionamiento del discurso epidíctico.

Tabla 1. Convenciones de transcripción

Convenciones utilizadas exclusivamente para la transcripción


del corpus de esta investigación
Símbolo Nombre Uso
Pa Profesora Indica que el turno de palabra es de la profesora
Pr Profesor Indica que el turno de palabra es del profesor
EF Estudiante femenino Indica que el turno de palabra es de una estudiante
EM Estudiante masculino Indica que el turno de palabra es de un estudiante
Indica que el turno de palabra es de varios estudiantes
VE Varios estudiantes
(reacciones, respuestas, actuaciones en coro)
Transcripción colección
Tr. CMG Indica la transcripción del personaje
Martha Graham
Transcripción colección
Tr. CPB Indica la transcripción del personaje
Pina Bausch
Transcripción colección
Tr. CSG Indica la transcripción del personaje
Santiago García
Transcripción colección
Tr. CS Indica la transcripción del personaje
Stanislavski
Eth. Ethos Indica el nombre de la colección
T.E. Tipologías expresivas Indica el nombre de la colección
F.E. Fórmulas epidícticas Indica el nombre de la colección

Fuente: elaboración propia.

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Sobre la recolección de datos forma es importante señalar que en el proceso


Las grabaciones se hicieron con videograbadora y de investigación casi siempre emergen otras nue-
los actores (profesores y estudiantes) estaban in- vas, que finalmente son las que complejizan la
formados de dicha grabación, lo cual significaba investigación.
hacer abiertamente la instalación de equipos. La Se formularon un conjunto de preguntas que
Coordinación del Proyecto Curricular nos facilitó consideramos elementos fundamentales para el
la tarea, pues mostró, a través de un comunicado análisis de los datos. A cada pregunta se le asignó
oficial, a la comunidad académica la importancia una categoría de análisis o un conjunto de pala-
de esta investigación en el marco de lo que signi- bras clave. Veamos la guía de análisis:
fica la calidad académica y la pertinencia de inte-
rrogar las prácticas educativas universitarias. • ¿Quién o qué es objeto de la valorización hecha
por el profesor? Categoría: el modelo.
Los participantes • ¿Cómo se hace la valorización? Categoría:
Los estudiantes de primer semestre que se llaman verbos, fórmulas epidícticas, tipologías
también “primíparos”, se encuentran en edades expresivas.
entre los 15 y 21 años. La gran mayoría viene de • ¿Cuál es la naturaleza de la valoración?
colegios públicos del Distrito Capital. Estos estu- Categoría: indicadores de amplificación.
diantes no se conocen entre ellos pues la proce- • ¿Para qué se realiza la valorización? Categoría:
dencia es para cada caso diferente. pathos y ethos.
Los profesores que participan en esta investiga-
ción poseen larga trayectoria en la educación supe- Categorías de análisis
rior. Las profesoras Martha Graham4 y Pina Bausch5 Definimos tres categorías de análisis: tipologías
son profesoras de planta, tiempo completo, con expresivas, fórmulas epidícticas y ethos. Salvo la
doctorados en Ciencias de la Educación y en Cien- categoría de ethos que no tiene subcategorías,
cias Sociales, Niñez y Juventud, respectivamente. las otras dos las hemos subdividido, por lo que a
Los profesores Konstantín Stanislavski6 y Santiago continuación presentamos las categorías y subca-
García7 son profesores de cátedra con dedicación tegorías. Para este trabajo tenemos en cuenta so-
de ocho horas por semana, con maestría en edu- lamente las fórmulas epidícticas y el ethos.
cación y literatura, respectivamente. Todos los pro-
fesores tienen como compromiso político motivar Grupos de palabras clave
y sensibilizar a los estudiantes que ingresan, en lo Estas categorías dan cuenta de nuestro marco teóri-
que se refiere al el objeto de estudio de la carrera. co que pone en convergencia retórica y análisis del
discurso en interacción: a su vez, nuestro interés
Interpretación: Una forma de analizar corpus de describir el discurso epidíctico o argumentación
epidíctica, contando con las herramientas de lo
Toda interpretación es la apertura a un horizon- pragmático, lo semántico-enunciativo y gramatical.
te y exige unas categorías de partida. De igual Para lo anterior, definimos ocho grupos de palabras
clave desde la caracterización de lo expresivo o la
4 “Los grandes bailarines no son geniales por su técnica. Son expresividad, los cuales permitieron dar cuenta del
geniales por su pasión”.
5 “Hay que dejar que cada cual se exprese según sus motivacio-
funcionamiento del género discursivo epidíctico
nes internas”. interpretado como valorización. Veamos:
6 “En arte, la tesis debe transformarse en idea espontánea, en
sentimiento”.
7 “Los hombres y mujeres se hicieron verdaderamente humanos
a. Verbos expresivos de elogio: admirar, agrade-
cuando empezaron a celebrar la vida y a conservar la memoria”. cer, alabar, aprobar, condoler, cumplido, desear,

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despedir, disculpar, exaltar, felicitar, gloriar, jac- antimodelos y los maniobras retóricas que utiliza
tar, ponderar, realzar, reconocer, respaldar, salu- para proyectar la mejor imagen de sí; lo cual nos
dar, verificar. pone muy de cerca con la concepción pragmáti-
b. Verbos expresivos de censura: abuchear, acusar, ca del lenguaje, específicamente en las interac-
adular, advertir, corregir, cuestionar, denunciar, ciones que constituyen nuestro corpus, donde al
deplorar, depreciar, desaprobar, desencantar, cumplir su rol social como maestro, este cons-
excusar, indignar, lamentar, quejar, recriminar, truye una forma de presentarse o, mejor, se pro-
rehacer, victimizar. ducen ciertas emergencias del ethos, a pesar de
c. Indicadores de amplificación: compromiso, hé- que este rol puede estar atravesado por modelos
roe, indignación, insatisfacción, modelo, moti- construidos y articulados al interior de cada cul-
vación, orientación, satisfacción, victimización. tura y de cada sociedad.
d. El modelo: el estudiante, el profesor y su que- Para seguir, recordemos con Pernot (1993)
hacer, el saber académico, el saber discipli- que “antes de ser un género oratorio, el elogio
nar, el saber pedagógico, la clase, la cultura, y la celebración constituyen […] más amplia-
la disciplina, la educación, la escritura, la mente, un fenómeno político y social” (Pernot,
figura representativa, la institución, la lectu- 1993, p. 621), que sin duda se materializa (o se
ra, TIC (Tecnologías de la Información y la espera que se materialice) en toda puesta en es-
Comunicación). cena del maestro; ya que al proyectar una ima-
e. Ethos: animador, autoridad, autoritario, carismáti- gen de sí, el maestro lo hace a fin de influenciar
co, cínico, demagógico, gracioso, irónico, mater- a sus estudiantes, con el propósito de ofrecer
nal, orientador, provocador, respetuoso, sincero. un orden al poder, ejercer el poder, acortar o
f. Pathos: alegrar, amedrentar, animar, apiadar, agrandar las distancias, argumentar y fascinar,
avergonzar, comprometer, condicionar, displa- dar instrucciones, “regañar”, explicar, cons-
cer, divertir, encolerizar, invitar, motivar, recor- truir comunidad, entre tantas otras cosas que
dar, responsabilizar, retar, seducir, simpatizar. se tejen en la red de significaciones del aula de
g. Sujeto discursivo: nosotros, portavoz, ustedes, yo. clase, cosas que sin duda tienen que ver con
h. Valores de persuasión: lo bello, lo bueno, lo el funcionamiento del discurso epidíctico en
malo, lo vergonzoso. el aula de clase. Bajo esta perspectiva, en esta
parte veremos el género epidíctico en su rela-
Puesta en escena para cuatro personajes: las ción con una de las tres pruebas de la retórica:
secuencias epidícticas para “primíparos” el ethos o la imagen que proyecta de sí el pro-
fesor, en el aula de clase.
La tarea que sigue es mirar cómo funciona el epi- Desde la perspectiva de lingüística interac-
díctico en nuestro corpus. Abordamos, entonces, cional, es decir, aquel espacio en el que in-
en esta parte, la puesta en escena que se hace de ter-actúan los hablantes, la imagen de sí es una
la palabra en situación de interacción dentro del co-construcción hecha en y por el discurso y
aula de clase. Este espacio es donde entran en ejerce una influencia mutua entre los hablantes.
escena cuatro personajes que representan cuatro Esta perspectiva es central en nuestro trabajo que
monólogos o cuatro conferencias para los que interpreta la retórica, no necesariamente como
habitan el mundo de los “primíparos”. la disciplina de persuadir y convencer sino, más
Iniciamos con la imagen de sí o el ethos bien, la retórica como posibilidad de habitar con
como se le conoce desde la época antigua, es el otro, es decir, ser uno mismo con el otro. En el
decir, la manera como se pone en escena el imperativo de la comunicación siempre estare-
maestro, la forma en que construyen modelos, mos con un otro que siempre necesitamos.

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El término comunicación proviene de commu- de ethos lo que más se valoriza es el saber peda-
nis, que según algunas etimologías se descompone gógico; en las fórmulas epidícticas es la cultura y
en co, que implica ser-con, y muni, que proviene en las tipologías expresivas es la disciplina.
de la raíz mei, del sanscrito méthati, que significa Desde el punto de vista de la argumentación
`cambiar´, `mover´. La comunicación, en esta vi- epidíctica diremos que lo más edificante del dis-
sión, es la acción de cambiar, de mover sentidos curso del profesor son estos tres aspectos que se
uno-con-otro. Esta manera de reconocer la comu- aprecian en la Figura 1.
nicación transforma la visión unidimensional y ver- Veamos ahora lo más valorizado por persona-
tical de la transmisión de significado de uno a otro, je. En la Figura 2. se evidencia que Martha apre-
en donde el emisor es quien ostenta el poder sobre cia en primer lugar la cultura, luego la disciplina
un receptor en estado de pasividad. La influencia y el profesor y su quehacer. En el caso de Pina
es mutua; es una co-relación en la que entre uno (Figura 3.) el modelo más fuerte o, lo que más
y otro se gestan interpretantes que transforman el estima , es el profesor y su quehacer, lo mismo
pensamiento, crean hábitos de acción y producen que sucede con Santiago (Figura 4.). Finalmente,
conocimiento. (Restrepo, 2012, p. 124) el profesor Stanislavski (Figura 5.) valoriza mucho
más la disciplina.
La puesta en escena: valorizaciones dominantes
¿Cómo se hace la valorización?
¿Quién o qué es objeto de valorización? Recordemos las palabras clave de dos conjun-
Al analizar los datos en la perspectiva del ob- tos de palabras que definimos en el diseño de esta
jeto a valorizar, observamos que en la categoría investigación: 1) Indicadores de amplificación

Figura 1. El saber pedagógico, la cultura y la disciplina como modelo

Fuente: elaboración propia.

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Figura 2. Martha y el orgullo de la cultura

Fuente: elaboración propia.

Figura 3. Pina y el orgullo del profesor y su quehacer

Fuente: elaboración propia.

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Figura 4. Santiago y el orgullo del profesor y su quehacer

Fuente: elaboración propia.

Figura 5. Stanislavski y el orgullo de la disciplina

Fuente: elaboración propia.

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(compromiso, héroe, indignación, insatisfacción, Si el discurso retórico de los profesores recurre


modelo, motivación, orientación, satisfacción, con mayor frecuencia al ethos y a los indicadores
victimización) y 2) Ethos (animador, autoridad, de amplificación, ahora veamos cuáles son las
autoritario, carismático, cínico, demagógico, gra- palabras más recurrentes de estos conjuntos.
cioso, irónico, maternal, orientador, provocador, Podemos decir, entonces, que la forma más
respetuoso, sincero). Así que frente a la pregunta frecuente como se hace la valorización es con los
de ¿Cómo se hace la valorización?, la Figura 6. indicadores de amplificación. La Figura 7. mues-
muestra que se realiza fundamentalmente con las tra que es la orientación y el compromiso lo que
palabras que se muestran allí, es decir, con indi- predomina, es decir, que el discurso retórico del
cadores de amplificación y con los elementos que profesor muestra la dirección en la que se orien-
definimos para caracterizar el ethos de nuestro ta la Licenciatura, la disciplina y la Universidad;
corpus. Vemos que el modelo, el elogio y el pa- con lo cual, si seguimos nuestras definiciones de
thos también son importantes para las valoriza- palabras clave, podríamos traducirlas como la in-
ciones que hace el profesor. Es relevante también vitación a seguir una conducta o una tendencia
destacar que en estos discursos retóricos los profe- que en este caso es la invitación a seguir sus es-
sores recurren con menor frecuencia a la censura. tudios, a asumir el contrato que inician en estos

Figura 6. Argumentación epidíctica: ethos e indicadores de amplificación

Fuente: elaboración propia.

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momentos (nos referimos al inicio del semestre) retórico de los profesores la victimización y la
como estudiantes. Sin duda, este contrato es, a la indignación son muy poco frecuentes, al fin y al
vez, un acuerdo y un consenso inmediato sobre cabo nuestro espacio de interacción se construyó
lo cual no se da ninguna discusión, al menos en en las primeras clases que normalmente tienden a
ese momento. Con el compromiso, lo que se pre- mostrar el camino fértil y abierto a seguir.
tende es mostrar la obligación social que se impo- Veamos ahora lo que sucede con el ethos. La
ne en este espacio, pues de lo que se trata es de Figura 8. muestra con claridad que para la va-
cumplir el rol de estudiante, de asumir el proyec- lorización el profesor recurre a la autoridad y al
to de formarse como profesor investigador, que hecho de orientar. Evidentemente, la situación
no se da por el compromiso solamente del estu- evidencia a los personajes, en este caso profeso-
diante sino también de los profesores y, en ge- res de primer semestre, con atributos materiali-
neral, de la comunidad universitaria. Esta acción zados en saberes disciplinares, conocimiento del
conjunta lo que quiere es producir un entusiasmo mundo universitario, experiencia como docentes,
en los estudiantes que más adelante mostramos pero fundamentalmente, personajes que en esta
en la perspectiva del ethos como la motivación. primera escena son los actores centrales y los es-
Es importante destacar también que en el discurso tudiantes son los de reparto, en el sentido de que

Figura 7. Argumentación epidíctica, amplificación: orientación, compromiso y motivación

Fuente: elaboración propia.

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la mayor parte de parlamento lo tienen los profe- misma situación, es decir, la autoridad y el orien-
sores y allí se siente la fuerza social del discurso. tar son las formas más fuertes como se hace la
De otro lado, el corpus muestra también, que valorización (Figura 9.).
en el género discursivo epidíctico del profesor Es importante indicar que lo demagógico, lo
hay una dominancia a orientar, pues una tarea carismático, lo autoritario y lo irónico rara vez
central es la de mostrar el camino, dirigir un con- aparecen en el parlamento de nuestros actores.
junto de acciones a determinados objetivos y por Esto puede ser un indicador de interés, para eva-
determinados caminos, es decir, en tanto profeso- luar la actuación de los profesores y bien podrían
res, nos caracteriza la vocación política de mos- ser nominados, pues su discurso epidíctico se ca-
trar a nuestros estudiantes el camino por el que racteriza fundamentalmente por aquellos elemen-
más conviene seguir, lo cual no escapa a los valo- tos que hacen sentir orgullo y admiración, pues
res y a las valorizaciones. se hacen valorizaciones edificantes del profesor
Si nos detenemos en este punto y miramos el y su quehacer, de la disciplina, la cultura y el sa-
ethos dominante por personaje encontramos la ber pedagógico. Un comentario que no podemos

Figura 8. Argumentación epidíctica, ethos, autoridad y orientar

Fuente: elaboración propia.

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Figura 9. Caracterización ethos de nuestros cuatro personajes

Fuente: elaboración propia.

dejar pasar, refiere a los modelos más débiles: la La Figura 11. nos muestra la valorización
escritura y la educación. A pesar de ser, de cierta desde la censura. Lo que más hacen los pro-
manera, elementos medulares de la formación, en fesores con el discurso epidíctico es desapro-
esta etapa de iniciación poco se referencian. bar, (hacer) rehacer y cuestionar. Es de mucho
Ahora veamos algunos datos con relación al interés este asunto, pues tiene que ver con la
ethos y los verbos que hemos indicado para el elo- pregunta ¿para qué se hace la valorización? Se-
gio. Realmente, para la argumentación epidíctica guramente, el profesor censura de esta manera,
desde el ethos y el conjunto de palabras para elo- para fin de que los estudiantes puedan y logren
giar, lo que más hace el profesor en el aula es real- hacer bien las cosas.
zar, aprobar y reconocer (Figura 10.).

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Figura 10. La puesta en escena de los profesores para elogiar

Fuente: elaboración propia.

Figura 11. La puesta en escena de los profesores para censurar

Fuente: elaboración propia.

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¿Cuál es la naturaleza de la valorización? el modelo es también la Licenciatura y la Univer-


Con el propósito de revisar la naturaleza de la sidad, es decir el espacio que los “primíparos”
valorización recurrimos a los valores de persua- llegan a habitar.
sión, los cuales hemos definido con las palabras Si se observa la frecuencia de lo malo y lo ver-
clave que siguen: lo bello, lo bueno, lo malo y lo gonzoso diremos que el discurso epidíctico aquí
vergonzoso (Figura 12.). no hace valorizaciones para mostrar desgracias ni
Como se observa, el discurso epidíctico del vergüenzas, sino todo lo contrario, aspectos que
profesor sigue siendo edificante en su naturaleza, llenan de orgullo. De alguna manera, todo el dis-
pues lo que más hace el profesor es mostrar las curso se esfuerza por mostrar este espacio univer-
cosas buenas y bellas. Podemos decir que este es sitario como un modelo.
otro motivo de orgullo o, mejor, que el discurso
retórico epidíctico del profesor está lleno de orgu- ¿Para qué se realiza la valorización?
llo y admiración y muy distante de las cosas ma- Ya indicamos que la función del género discur-
las, vergonzosas y reprochables. sivo epidíctico en el aula es fundamentalmente el
Evidentemente lo bueno aquí indica el lugar de orientar e instalar y proyectar la imagen de au-
que deben ocupar las cosas, cómo deben ser toridad. Estos dos elementos son los que permiten
y cómo conviene que sean. La argumentación a nuestros profesores construir discursos edifican-
epidíctica del profesor orienta la mirada a lo de- tes, resaltar cierto tipo de ethos colectivos y ocul-
seable, lo cual se encuentra lleno de cualidades tar o rechazar otros; es decir, ir a la defensa de un
afortunadas, que a la vez caracterizan un modelo: cierto tipo de ethos y declinar otros. Por supuesto
la disciplina, la cultura y el quehacer del profesor; el discurso epidíctico también les sirvió a nuestros
los cuales en el marco institucional indican que actores para construir comunidad (homonia), a fin

Figura 12. Los valores de persuasión más frecuentes

Fuente: elaboración propia.

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de llegar a los consensos y decisiones inmediatas, valorización al saber, mucho más en estos espa-
con el propósito de motivar y comprometer con cios universitarios, en donde es posible nombrar-
la vida académica universitaria a los estudiantes, nos sabedores, a fin de situar el lugar en el que
a los “primíparos”. debe estar el saber en una institución universitaria.
El nombrar, en este caso, indica el camino por el
La puesta en escena de Martha Graham que se avanzará a lo largo de la formación: un
53 Pa: ... . vamos eh a crear un correo. Entonces aquí camino de saber, en el que transitan los sabedo-
con Danna . vamos a crear un correo, aquí,. en res. El discurso de Martha realiza una valorización
particular;. entonces vamos a ° buscar un nombre, de las culturas prehispánicas, pues al nombrar
en el próximo encuentro que tenga que ver mu- el saber (sabedores) con las palabras de lenguas
cho . Ya se (amauta) . ya sea (jaibaná) o ya sea . un prehispánicas (jaibaná en quechua y amauta en
nombre que tenga que ver con el saber (1) (amau- embera) se les está reconociendo también y esto
ta) significa sabedor en . En quechua . y (jaibaná) podría generar algún entusiasmo o motivación en
significa sabedor en . en los (1) en la gente. En los los estudiantes. Hasta aquí vemos las diferentes
emberas katios . En el Chocó. Entonces son pala- maniobras retóricas que utiliza la profesora para
bras para que nos podamos, (bauticemos) el grupo la valorización que se muestra en este caso como
y creemos un correo y empezamos a enviar y em- algo bueno, como algo que debe ser elogiado. Al
pecemos a trabajar también de forma virtual. Si en hacer estas valorizaciones Martha, como profeso-
algún momento, de pronto yo no estoy o no puedo ra, reconoce una realidad que es por la que los es-
o estoy en una reunión o tengo algo (urgente) algo tudiantes deberían inclinarse o, también, diremos
adverso. Entonces. nos escribimos por correo, pero que desde la argumentación epidíctica se orienta
yo siempre estoy aquí todas las semanas, siempre a los estudiantes con el propósito de que realicen
estoy aquí con ustedes. Los voy a estar acompa- cosas que son consideradas como buenas y bellas.
ñando en este trasegar. (Tr. CMG, eth., clip 088)8 Podemos inferir que es bueno seguir por la senda
del saber, que nuestro saber ancestral es bello y en
Este discurso de Martha pone en evidencia el tanto tal, debe ser digno de elogio.
epidíctico como valorización. Se hace una valo- Decimos, entonces, que la forma de nombrar
rización a través del reconocimiento de las tec- es la de sabedores y se escogen dos lenguas pre-
nologías de la información y la comunicación hispánicas. Podemos inferir que aquí hay una
TIC, pues a través de estas se instituye un espacio censura pues hay un esfuerzo por recuperar estas
de trabajo en donde las tareas que se van a de- lenguas poco estudiadas, poco reconocidas. En
sarrollar se pueden hacer de manera más fluida, definitiva, el uso del correo no está desprovis-
más eficaz. Las tecnologías en nuestro presente to de significado y más bien se le muestra como
contribuyen a construir comunidad, contribuyen algo de suma importancia y todo el discurso se
a tejer una sociedad red. También se hace una orienta a comprometernos en su uso para po-
tenciar procesos de aprendizaje. De otro lado,
8 Transcripción para colección “Martha Graham > Ethos”, clip
“Martha_Graham_088”. (Ver convenciones Tabla 1 de este tra-
todo lo anterior cobra sentido retóricamente
bajo). Las transcripciones del corpus procesado con el software cuando se muestra una imagen de Martha com-
Transana recupera la colección (en este caso es “Martha Graham
> Ethos”); luego el clip (en este caso es “Martha_Graham_088”.
prometida, que acompaña, que va a estar ahí,
Esta información es de mucha utilidad pues da cuenta de la siempre acompañando el trasegar del camino,
manera como se procesó la información y además permite al
investigador y al lector movilizarse en la complejidad textual que
de los estudiantes. Desde la retórica ubicamos
resulta de una transcripción de textos orales auténticos. Para el esta secuencia como manifestación del ethos, es
lector que no pueda tener acceso a la base de datos creada en
Transana, puede recurrir al Tomo II Anexos de esta investigación,
decir, proyección de la imagen de la profesora
donde se presenta el corpus debidamente procesado. que está comprometida con su quehacer y a la

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vez compromete a sus estudiantes en las diversas afirmación genera una expectativa que propicia
tareas a desarrollar. Evidentemente, se trata, tam- otras afirmaciones y finaliza con una lista de tipos
bién, de un ethos colectivo pues se trata de un de evaluación.
compromiso de todos los actores, no solamente Ahora, la profesora presenta el programa que
del profesor sino también de los estudiantes. se irá a desarrollar a lo largo del semestre. Pero
Desde nuestra forma de agrupar las palabras en esta secuencia no se hace énfasis en aspectos
clave indicamos que el modelo referido en esta referidos a contenidos y metodologías, sino a algo
secuencia es el profesor y su quehacer, las TIC y que aún no se ha dicho y que es de suma impor-
la cultura. El elogio es a la vez reconocer los mo- tancia. Seguramente, con el propósito de motivar
delos, es decir, las TIC, la cultura, el profesor y su a los estudiantes para que abran la boca, para que
quehacer. En esta misma línea, el ethos del profe- digan, para que participen, para que co-constru-
sor es el de orientador, pues su rol es el de orientar yan, la profesora les informa que está esperando
a estos jóvenes “primíparos” que entran al mundo una pregunta. Estar a la espera de una pregunta en
universitario, que se abren camino en el campo de este momento es algo crucial que no vale la pena
las humanidades, la lengua castellana y la educa- decirlo literalmente, sino más bien es necesario
ción. Epidícticamente diremos que los indicadores poner el discurso en una dramaturgia en donde
de amplificación más fuertes de esta secuencia son alguien espera lo más querido, lo más preciado:
el compromiso y el modelo, cuyo sujeto discursivo en este caso lo más preciado para la profesora
es el nosotros (profesor y estudiantes) y los valores para el caso que la ocupa, el de presentar el pro-
de persuasión son lo bello y lo bueno. grama universitario, refiere al tema de la evalua-
ción. En este sentido, la maniobra retórica desde
53 Pa: ... . no sé si ustedes tienen alguna pregunta al un punto de vista pragma-dialéctico es mostrar
respecto (1) a ver si me hacen alguna pregunta que la importancia que tiene la evaluación para todo
estoy esperando . >estoy esperando una pregunta< proceso académico-universitario. En el enunciado:
(3) ya leí el programa, estoy esperando una pre- “e:::sa pregunta en especial”, la ´e´ prolongada le
gunta . está dando fuerza a la respuesta de los estudian-
54 EM: (además) ¿la forma de evaluar? tes y ”pregunta especial” está amplificando el tipo
55 Pa: esa pregunta en especial (3) entonces . Bueno de pregunta que se hace, pues la pregunta por la
eh… la forma de evaluar mía, es un tanto… Rompe evaluación no es cualquier pregunta, es una muy
ciertos (paradigmas). Yo manejo procesos de eva- especial. A todas luces encontramos el uso epi-
luación, autoevaluación, coevaluación y heteroe- díctico en este nivel fonológico y sintáctico del
valuación. (Tr. CMG, eth., clip 089) enunciado. Luego viene el enunciado “la forma
de evaluar mía (.) es un tanto (.) rompe ciertos (pa-
En esta secuencia es interesante la manera rámetros)”, que proyecta una imagen de sí. Es de-
como la profesora inicia con “no sé si ustedes cir, si estábamos esperando una pregunta especial,
tienen alguna pregunta al respecto”. Esta es una también vamos a mostrar una forma especial de
pregunta que no tiene la función de preguntar evaluar, en donde se ve el orgullo de la profesora,
nada, sino más bien es una pregunta que se uti- pues “mi propuesta”, puede interpretarse epidíc-
liza para reforzar y puntualizar aspectos que se ticamente, especialmente desde Perelman y Ol-
explican, a partir de las preguntas de los estu- brechts Tyteca, como una profesora revolucionaria
diantes, pues Martha más que preguntar les dice que es capaz de transgredir y romper con ciertos
que “estoy esperando una pregunta”. Así que en valores tradicionales de la evaluación y proponer
lugar de preguntar lo que se busca es que los es- un nuevo marco para esta acción. De esta forma,
tudiantes formulen una pregunta en especial. La lo epidíctico se manifiesta y funciona desde la

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instancia retórica del ethos y recurre a posicionar en la que participan los estudiantes y la profeso-
una imagen amplificada de la profesora Martha. ra, esta última interviene a través de preguntas,
de aprobaciones o desaprobaciones a ciertas res-
1 Pa: ... (.) VAMOS A LANZAR (.) vamos a hacer puestas. Aquellas respuestas que le parecen bue-
UNA MINGA de pensamiento (.) a lanzar (.) una nas las escribe en el tablero, las que considera no
palabra (.) que reúna lo que ustedes crean (.) y que tan importantes no las escribe en el tablero. En
esa palabra (.) a ver a dónde se ajusta más (.) a este esta co-construcción la profesora anima e invita
contexto ((Pa señala la primera columna)) (.) o a ° con expresiones como: “escucho”, “otra” (den-
este ° ((Pa señala la segunda columna)) (.) ¿LISTO? me otra respuesta), “sin callarse, tú la dices yo te
(.) entonces vamos a escuchar (.) (frases) (.) espero la acepto”. Con lo anterior se busca aumentar la
que todos de una u otra manera participemos (.) participación de los estudiantes y hacer del aula
porque todos venimos de un proceso de formación de clase una auténtica co-construcción (aumentar
(.) entonces escucho (.) que nos evoca educación la adhesión a la acción que se desarrolla), pues
(.) a ver (Tr. CMG, eth., clip 094). tal como lo indica la profesora desde una proyec-
En términos de lo que se elogia en esta secuencia ción de sí como alguien que escucha, los anima
tenemos lo que aprueba la profesora, es decir, las a poner su voz, pues “faltan voces”, en este caso
respuestas de los estudiantes; quien reconoce, tam- la de los estudiantes y, además, en la co-construc-
bién, lo dicho por algunos de ellos pero a la vez ción es necesario escuchar todas las voces y “yo
lo verifica, por lo que el modelo en este caso es el escucho todas las voces”. También diremos que
estudiante que forma parte activa de la “minga”9 o, en el plano disciplinar es importante la descrip-
en nuestro registro, la co-construcción del discurso ción y definición de educación, pues al no dar
en el aula de clase que sin duda potencia la homo- una definición, de entrada, la profesora considera
noia y el tejido de lazo social, que como ya hemos pedagógicamente más importante construir con
dicho es una función importante del discurso epi- los estudiantes, pues seguramente le parece más
díctico. La imagen que proyecta Martha es la de significativo. La figura del profesor en esta cons-
animadora y orientadora y el indicador de amplifi- trucción es importante y se visualiza discursiva-
cación es la motivación. A su vez, podemos ver en mente en el sujeto discursivo “yo”, es decir, el
términos del pathos la función de animar y de in- profesor “los escucho”, “denme”, “otra”. En la
vitar a los estudiantes a que habiten la Universidad orientación epidíctica que tenemos, el estudian-
desde la co-construcción del discurso. te es el modelo porque es quien es reconocido
en esta secuencia, pues lo que él dice es impor-
Pero, ¿por qué se está en la co-construcción tante y, algunas veces, aprobado. En otras pala-
del discurso? Se observa en esta secuencia epi- bras, aquello que se dice de parte del estudiante
díctica que la profesora Martha no entra con una es considerado como bueno, independiente de
definición, sino que quiere habitar en el ejercicio que sea falso o verdadero. También en el mar-
de recordar, es decir, pensar aquello que se ca- co epidíctico y disciplinar, la caracterización de
racteriza, para luego, seguramente, llegar a una educación es interesante pues se enuncian as-
definición. Es en el marco de la co-construcción pectos marcadamente positivos: emprendimien-
to, formación, valores, innovación, didáctica,
9 La minga es un vocablo de uso en los países latinoamericanos investigación, las cuales definen una lista de as-
que hace referencia al trabajo comunitario o colectivo en favor
de la comunidad, es decir, de interés social. Forma parte de la
pectos positivos de lo que podría ser educación.
tradición precolombina y recontextualiza el sentido de los va- En general es una secuencia epidíctica que en-
lores colectivos, tan importantes en este trabajo. La minga es un
correlato de lo que era en los griegos la homonoia, para nuestros
comia la palabra educación, a través de una des-
indígenas es la minga. cripción positiva.

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Es de un interés mayor esta secuencia, si recor- En el contexto del aula se producen fórmulas
damos que el género discursivo epidíctico es una epidícticas de elogio y censura que van desde el
herramienta para construir y alimentar una reali- elogio con carácter de aprobación hasta la ironía
dad social a través del refuerzo de la homonoia, que censura. Para comenzar existe una gama y la
es decir del sentido comunitario o colectivo que, abordaremos desde el elogio y, según el caso, su
sin duda, da cuenta de una racionalidad colec- contraposición de censura para observar cómo
tiva. En este caso, “una minga de pensamiento” nuestros actores ponen en escena construcciones
indica una comunión de valores ligados al géne- lingüísticas, tales como las fórmulas epidícticas
ro epidíctico del aula de clase como ritual, que o, en otro registro ‘unidades fraseológicas’, defi-
siempre busca reforzar los lazos comunitarios a nidas en la segunda parte de este trabajo y de las
fin de construir y poner a circular el conocimien- cuales hemos escogido cuatro grupos de fórmu-
to. En este caso el aula es un espacio “ritualístico” las epidícticas: está bien, muy bien, ¡qué bien!;
que recurre al epidíctico, pues allí circulan unos imagínese/imagínense, se imagina, imaginar; im-
valores, entre los que se encuentra la fundación y portante, es importante, importantísimo y, por
promoción de una comunidad, en este caso una último, dale, dale.
comunidad interpretativa, científica de “sabe- Cada grupo se caracteriza por permitir iden-
dores”, por lo que diremos que el epidíctico no tificar tanto la intención del profesor de elogiar
forma parte de un ritual sino que en sí mismo es y censurar como el hecho de ser construcciones
un ritual, que en este caso es la clase introducto- discursivas, que permiten ver la proyección que
ria al campo y al mundo universitario. Evidente- nuestros cuatro profesores/actores realizan de su
mente, el ritual del aula de clase con estudiantes propia imagen.
nóveles que ingresan a este mundo universitario
es marcadamente epidíctico por la intención de Está bien, muy bien, ¡qué bien!
motivar, animar, orientar, tejer lazo social, cons- El adverbio bien presente en el discurso del
truir comunidad, pero especialmente con el fin profesor posee un primer uso epidíctico: aprobar
de promover valores propios de esa comunidad, (estar de acuerdo, dar consentimiento). Es esta-
que sin duda están en relación directa con el blecer de forma explícita la aceptación de una
tema que se desarrolla, como es la educación que participación, tanto en su grado de corrección o
promueve: aprendizajes, formación, innovación, inexactitud, que esta posee en relación con la te-
emprendimiento. matización que dirige el profesor, ya que, no ne-
cesariamente el error es inadmisible o el acierto
¡Qué bien! ¡Imagínense! ¡Importantísimo! ¡Dale!: puede llegar a ser acreedor de una felicitación.
Formulas epidícticas en el aula Veamos un caso de inexactitud que es aprobado
Señalamos en la segunda parte que una de nues- por Santiago García como una participación que
tras categorías de análisis son las fórmulas epi- da pistas:
dícticas. Nos interesan las fórmulas epidícticas
(discursivas y psico-sociales), para este análisis. 384 Pr: ... . señorita]((indica a otro estudiante))
El discurso epidíctico recurre a la amplifica- 385 VE: [((hablan))]
ción con el propósito de elogiar o censurar y 386 EF: [es que . ( )]
esto se materializa lingüísticamente, también, en 387 Pr: sh::: sh::: . (escuchemos a la niña) . si hubiera
expresiones cortas como interjecciones, verbos, estado qué?
nombres, entre otros (por ejemplo, un profesor 388 EF: si hubiera sido correcto . de usar lo del cien
dice con frecuencia “muy bien” para alabar una por ciento . en un contexto (formal) . (de carácter
acción de un estudiante). público) . uno no puede abreviar . en los números

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. me hago entender? . hubiera tenido que ser la que sean bien fuertes . bien fuertes, así, bien tras-
palabra completa (cien por ciento) . pues . sí . sí se lada su valor no hacia lo que está bien hecho o
puede digamos . ( ) . pero en un texto (escrito con bien dicho, sino hacia lo que se debe hacer, bien
más corrección no son números) adquiere el carácter de determinante intensifica-
389 Pr: póngale cuidado Oscar. lo que está (dan- dor (para el caso sería el valor de muy). De esta
do pistas) . está bien . quién más hace falta de forma, hay una acción de censura contenida en
comentarios la fórmula “bien fuertes”. Martha censura con la
390 VE: [((hablan))] (Tr. CSG, F.E., clip 130). construcción de una advertencia, advierte que ha-
brá problemas, que habrá dificultades, pero que
El aporte de EF no es totalmente correcto en su todas la contraposiciones existentes serán supe-
construcción pero es aprobado, es algo que está radas si ellos tienen un carácter centrado en sus
bien, sirve para la actividad propuesta por Santia- metas y en consecuencia, son conscientes de van
go, que en esta secuencia es la revisión de la es- a lo que van: y bien fuertes . bien fuertes . en to-
critura de un protocolo. Con esta primera fórmula das sus . en todas sus posiciones . y a lo que vinie-
epidíctica y siguiendo el valor de bien, tenemos ron muchachos.
un segundo uso, la construcción de fórmulas que Estos dos ejemplos, que ilustran dos polos de
tienen por objetivo “[…] que el receptor haga la fórmula epidíctica, van de la aprobación a la
algo.” (Corpas, 1996, p. 203), es decir, fórmulas advertencia, dan pie para observar, en esta línea
epidícticas de tipo directivo: de intensificación del elogio y la censura, dos fór-
mulas igualmente ricas en las posibilidades dis-
57 Pa: ... entonces . ya se acabaron las vacaciones . cursivas de la proyección del ethos del profesor,
ya tuvimos un receso un poquito la:::rgo . YA es- estas son: muy bien y ¡qué bien! Para el primer
tamos descansados . están todos ávidos por leer . caso, observaremos a Stanislavski, ya que, ade-
por trabajar . pues aprovechen todo esto mucha- más de ser, entre nuestros cuatro actores quien
chos . si? . no . no se dejen . no se dejen amilanar registra mayor uso ejemplar de esta fórmula del
. sino sigan pa’lante . como sea. y bien fuertes . valor del elogio proferido por el profesor hacia el
bien fuertes . en todas sus . en todas sus posicio- estudiante, es también quien registra mayor uso
nes . y a lo que vinieron muchachos . ¿(tres) minu- de esta fórmula expresiva y a su vez este uso es el
tos? . (que nos lean) . entonces . ¿si? ... (Tr. CMG, que mayor carga emocional posee.
eth., clip 193). Stanislavski expresa su sentir frente a las parti-
cipaciones del estudiante donde el indicador de
En esta secuencia Martha Graham proyec- amplificación predominante es la satisfacción,
ta un ethos de animador, es decir, pretende que veamos:
los estudiantes consideren el primer semestre en
la universidad como un inicio, ellos vienen sin 106 Pr: ... alguien más nos quiere compartir su texto
cargas académicas pasadas, con toda la motiva- 107 EF: es problemática porque es netamente humana
ción; pero, este carácter animador no le quita la . está con nuestras contradicciones . con nuestro
imposibilidad de expresar de forma implícita que lado obscuro . y en sí . se vuelve como despedida .
ingresar a la universidad no va a estar exento de indeterminada y misteriosa
fracasos o dificultades, por ello, esta actriz procu- 108 Pr: muy bien . una escritora º completa º
ra impregnar su discurso de la intensidad suficien- 109 EF: ((ríe)) (Tr. CS, F.E., clip 066)
te para garantizar que su público, sus estudiantes, 115 EF: profe . yo quiero leer también.
serán afectados por sus palabras. Martha les pide 116 Pr: pobre . los tengo abandonados

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117 EF: no . yo lo que escribí . fue que . la literatura a que se adelantó a la historia, afortunadamente, es
través del tiempo adquiere un valor problemático . importante eso, ESTO ES UN TEMPLO, de acuer-
y que ese valor genera controversia y contradicción do? . aquí está todo, bue:::no! . ya . se apagaron,
. y que por ende . el mismo despierta el interés . ah:::, yo::: dejé todo, <na:::rrativa>, QUÉ más que
eh . conlleva una- una connotación que le atribu- lenguaje, ay! Digo, muy fuerte, más fuerte, muy
ye::: un carácter obscuro . y ahí es donde juega un importante, IMAGÍNENSE uno decir, ay! No, aquí
papel (intenso) . porque es ahí es donde se aseme- está todo, INSISTO . INSISTO, a ver . cuéntanos,
ja con el comportamiento humano . que hay una te escucho, no . dilo dilo, ojalá, no:::, OBJECIO-
controversia entre el yo interno . entre el compor- NES, es el más importante, MUCHO MÁS, eso! .
tamiento que- o sea . un comportamiento como eh:::, eso está muy bien, sí . correcto, eh:::! . mu-
individuo . y el comportamiento que da ante la chacho!, gracias . hay que darle gracias al señor,
sociedad . que muestra ante la sociedad . y::: que aquí hay una cosa importante, dale dale dale, listo,
es indeterminado . porque varía según la sensibili- seguimos, le tocó muy duro . muy bravo, UN PEN-
dad de cada individuo SADOR MARAVILLOSO, pero especialmente, hay
118 Pr: muy bien . no . >toda una escritora también< . una cosa muy linda, : a ver, SOY INCAPAZ DE DE-
analítica . ... (Tr. CS, F.E., clip 068). CIRLO, algo así, es un texto . mu:::y mu:::y bello
. muy bello, sale muy caro, me gustaría, qué más
Como se observa, muy bien supera la aproba- podemos decir . tú querías decir algo . tú querías
ción y pasa al cumplido, al reconocimiento de decir algo, suerte muchachos, ALGUNA EVEN-
las cualidades e importancia de la actuación del TUALIDAD, bueno . ahora sí, entonces . (veamos)
estudiante, más que estar bien hecho, EF tiene más . aquí . amigo, no . ninguna otra . cierto? .
como atributo ser escritora y por demás, ser ana- bueno entonces SALTEMOS A ESTA, y tal, pero
lítica. Este último carácter del elogio denota otro SOBRE TODO, bien . qué más sigue, mire . ahí es
indicador de amplificación del discurso del pro- la primera parte . sí o no?, ahí ya la embarró . otra
fesor, la motivación, y por ende el objetivo implí- vez, estamos?, entonces pilas con eso, usted es el
cito de motivar al estudiante para que mantenga que tiene que- y aquí le damos duro ahí en la ca-
estas cualidades. Tenemos aquí, por decirlo así, beza . o::: duro en la cabeza es un decir . o::: no .
un muy alto rango de elogio a un estudiante, en estamos?, . entonces . ¡ojo!, uff:::, ush!, sí . intere-
el sentido de la satisfacción que vive el profesor. sante, así no haya hecho un carajo, si la embarran
Ahora, observemos algunas secuencias que (1) lo lamento, no cierto?, ah . no, ah . sí?, se nota
presentan cómo es el inventario para una puesta que, sh::: sh::: (1) chito please, tú tranquis, ahoriti-
en escena: ca . hablamos, bueno . bien . (es evidente), bueno .
amigos::: . amigas, ¡ay! . sí, (shhh) . tenaz, ah . ese
¿de acuerdo?, no sea malito . vea lea . mire mijito sí lo conozco, ah . está bien . listo gracias, hay un
por vida suyita, no muchachos, bueno . enton- gran grupo que . que salió de . del glorioso barrio
ces, algo así, ay!, ay! (. ) Virgen . San Pedro, bien . de Bosa (3) bueno . la niña allá, m::: . muy buena
. entonces, es cosecha de ustedes, tan, o sea, dis- pregunta, algún comentario adicional?, la palabrita
ponible para ustedes, MUY BUENA la pregunta, que a mí me gusta más, muy bien . (muy buena la
bienvenida . sí?, estar mínimo, PERO QUÉ RICO, cita), se ven muy juiciosos . y juiciosas, así por las
listo=, ¡huy! . tan juiciosos, muy bien, ¡ojo!, ese buenas, qué pena, bueno . bien por esa parte, muy
respeto, esos fueron más vanidosos, bien . otra, bien . una escritora º completa º, no no no bien .
qué más?, muy buena pregunta, AY! . ERA UNA bien . bien . ahí . ya con eso . ya con eso . correc-
DELICIA, ° exactamente °, MUY . muy muy, él sí to, bueno . va por ahí pero, muy bien . ° ah eso °

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. ° eso ° . ° sí °, qué bien . si ve . que sí se puede . Lo anterior nos muestra la vocación política
¡a:::h bueno! . ¡muy bien! . ¡la tesis! . ¡correcto!, que orientó este trabajo: la fuerza social del dis-
cómo vamos hasta ahí, no . siempre me pasa lo curso epidíctico, más allá de la decoración, más
mismo, estuvo . muy . muy bueno 10. allá del ornamento. Así el epidíctico es una posi-
bilidad poderosa para tejer comunidad, alcanzar
Vemos que a la hora de hacer valorizaciones consensos inmediatos, la toma de decisiones y
los profesores recurren con mayor frecuencia a poner en circulación en el aula las emociones y
las cosas que consideran buenas y bellas, es de- también las razones. Un discurso epidíctico en
cir, que la puesta en escena de los valores desde voz de nuestros cuatro personajes, nos muestra
lo que denominamos valores de persuasión dan cómo este tiene una fuerza enorme para la cons-
cuenta de un discurso que destaca más lo bueno trucción social de la realidad, donde emergen sin
y lo bello. Lo mismo sucede con la valorización duda los modelos, los anti-modelos, las cosas que
desde lo que son las fórmulas epidícticas, pues son reprochables y vergonzosas. En nuestro estu-
esta se hace más con el discurso del elogio que dio el discurso epidíctico dio cuenta de aquello
con el de la censura. Ahora, cuando miramos las que es digno de admiración, de aquello de lo que
fórmulas epidícticas que utiliza el profesor en sentimos orgullo. En tal sentido el epidíctico debe
su clase, vemos que también usa con menor fre- convertirse en un laboratorio fundamental de
cuencia la censura. Lo que más hace el profesor toda práctica pedagógica, pues de lo que se trata
a la hora de censurar es desaprobar, cuestionar es de acortar las distancias, es decir de comuni-
y quejarse. Por el otro lado, cuando valorizamos car, de estar en y para con el Otro para construir,
a través del elogio, vemos que lo que más usa el co-construir, para comprometer, para motivar,
profesor es realzar, aprobar, verificar, reconocer, para apartar de aquello que considramos peligro-
respaldar y exaltar. Es decir, estas son las manio- so, para tejer comunidad alrededor de unos valo-
bras retóricas, específicamente la argumentación res aceptados; con Platón podemos decir que el
epidíctica, que utiliza para construir realidad y epidíctico es fundamental para tener una buena
defender modelos, pero especialmente en estas vida (Cf. Platón, 1999a)
clases de inicio el profesor utiliza el epidíctico A lo largo de esta investigación se pudo esta-
para motivar. blecer la relación entre retórica y emoción; consi-
deramos que son las emociones la puerta abierta
Conclusión a toda retórica y que estas definen también el
discurso como algo inacabado, en permanente
Los datos de esta investigación dan cuenta de un construcción. Al indagar sobre la argumentación
discurso epidíctico con una fuerza inmensa en epidíctica en las prácticas discursivas del profesor,
lo que refiere a los indicadores de amplificación se pudo constatar cómo el pathos como instancia
y al ethos. Sin duda, el discurso potenció funda- retórica se superpone al logos en estas puestas
mentalmente la orientación, la motivación y el en escena. Son las emociones las que instituyen
compromiso. En cuanto a la puesta en escena de fundamentalmente la identidad de los maestros,
los profesores la predominancia fue la figura de también sus diferencias, es decir, las emociones
autoridad, el profesor orientador y provocador. materializadas en el discurso epidíctico pueden
Es gracias al género discursivo epidíctico que los reafirmar la identidad y la diferencia de todo su-
profesores logran estas cosas. jeto. En este sentido, acortar o agrandar distancias
10 Este es un pequeño inventario de las secuencias epidícticas de
siempre será un imperativo de la comunicación
los profesores. Las fórmulas lo dicen todo casi sin hablar. que pone en juego las emociones.

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