PRESUPUESTOS PROCESALES

Los presupuestos procesales son los requisitos o condiciones que deben cumplirse para
la iniciación o desarrollo válido de un proceso.
Art. 98. Los presupuestos procesales son los requisitos que permiten la constitución y
desarrollo del juicio, sin los cuales no puede iniciarse ni tramitarse con eficacia jurídica,
por lo que deben existir desde que éste se inicia y subsistir durante él estando facultada la
autoridad Judicial para estudiarlos de oficio

LOS PRESUPUESTOS PROCESALES SON:

Artículo 99.

1.- LA COMPETENCIA. ART. 100. La competencia es el límite de la jurisdicción, en

razón de la materia, del territorio, de la cuantía y del grado, en términos de lo que
establece la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado.
La competencia se expresará en el capítulo de derecho de la demanda, y esta será en el
tenor de lo dispuesto por los artículos 106, 107 y 108 fracción VIII.
2.- EL INTERÉS JURÍDICO. ART. 101. El interés jurídico es la necesidad en que se
encuentra el actor de obtener de la autoridad judicial la declaración o constitución de un
derecho, o la imposición de una condena, ante la violación o desconocimiento de ese
derecho. El interés jurídico en el demandado es la potestad para oponerse, allanarse o
transigir cuando así lo permita la Ley, sobre las pretensiones del actor.
El interés jurídico será expresado en el capítulo de prestaciones de la demanda, y con él
el actor aduce ser el propietario del inmueble y solicita le sea reintegrada la posesión del
mismo, por estar en alguno de los supuestos del artículo 634 del CPCP

3.- LA CAPACIDAD. ART. 102. La capacidad es la aptitud jurídica en que se encuentra

una persona para comparecer a juicio.
En este caso el actor hace uso de su capacidad de ejercicio para reclamar su derecho
a que se le restituya el bien inmueble el cual arrendó, a través de un juicio de
desocupación el cual promoverá por derecho propio.
4.- LA PERSONALIDAD. ART. 103. La personalidad es la facultad para intervenir en los
procedimientos judiciales, ya sea compareciendo por derecho propio, ya como
representante de otro.
La personalidad se expresa en el proemio de la demanda y esta puede ser por "propio
derecho" El arrendador debe acreditar su personalidad como dueño del bien arrendado.
5.- LA LEGITIMACIÓN. ART. 104. La legitimación activa en el proceso se produce cuando
la acción es ejercida en el juicio por aquel que tiene aptitud para hacer valer el derecho
que se cuestionará, bien porque se ostente como titular de ese derecho, bien porque
cuente con la representación de dicho titular. La legitimación pasiva en el proceso se
produce cuando la acción, vincula identificando como un solo sujeto al demandado, con la
persona que habrá de actuar la voluntad concreta de la Ley.
La legitimación hace referencia a la relación del sujeto (en este caso el arrendador) con la
situación jurídica que se deduce en el juicio. Esta relación se concreta en la afirmación de
la titularidad (en este caso como dueño del bien inmueble arrendado) de la situación
jurídico sustancial cuya tutela se pretende en el proceso.
6.- PRESENTACIÓN DE UNA DEMANDA FORMAL Y SUSTANCIALMENTE VALIDA.
ART. 105. La demanda es formal y substancialmente valida, cuando se ajusta a los
términos que se precisan en esta Ley y permite se establezca con eficacia la relación
jurídica procesal entre las partes y el órgano jurisdiccional.
La demanda deberá cumplir con lo establecido en el Capítulo Tercero, sección Primera:
Reglas Generales, artículos del 194 al 201 del CPCP.
7.- CUALQUIER OTRO QUE SEA NECESARIO PARA LA EXISTENCIA DE LA
RELACIÓN JURÍDICA ENTRE LAS PARTES ESTABLECIDO POR LAS LEYES.