Está en la página 1de 3

Invasión de Dinamarca

Ir a la navegaciónIr a la búsqueda
Invasión de Dinamarca
Parte de Parte de la Operación Weserübung
9. April 1940 i Åbenrå (6510701623).jpg
Una patrulla de motocicletas danesas en Åbenrå
Fecha 9 de abril de 1940
Lugar Bandera de Dinamarca Dinamarca
Casus belli Incidente del Altmark
Resultado Victoria decisiva alemana
Cambios territoriales Ocupación alemana de Dinamarca
Beligerantes
Bandera de Alemania nazi Alemania nazi Bandera de Dinamarca Dinamarca
Comandantes
Bandera de Alemania Leonhard Kaupisch1 Bandera de Dinamarca Cristián X
Bandera de Dinamarca William Wain Prior2
Fuerzas en combate
1400 soldados3 14 000 hombres
2 tanquetas
Algunas piezas de artillería
Bajas
56 muertos 3 5 muertos
[editar datos en Wikidata]
[ocultar]
Campaña de Noruega (Operación Weserübung)
DinamarcaValentineDrøbakNamsosÅndalsnesNarvik (IIIIII)JunoAlphabet
La invasión de Dinamarca por Alemania fue parte de la Operación Weserübung
ejecutada el 9 de abril de 1940, cuando los alemanes cruzaron la frontera danesa,
violando su neutralidad. Para evitar un inútil derramamiento de sangre, el gobierno
danés se rindió casi inmediatamente, y como recompensa se les respetó su autonomía,
permitiéndose indirectamente (de manera clandestina) el escape de la comunidad
judía. La campaña alemana contra Dinamarca fue la más breve de la historia
militar.4

La ocupación alemana se volvió hostil cuando los daneses empezaron a ejecutar


labores de sabotaje en el verano de 1942. Dicha ocupación finalizó el 5 de mayo de
1945, cuando Alemania se rindió a los Aliados.

Índice
1 Antecedentes
2 La invasión
2.1 Ejércitos enfrentados
2.2 Ataque alemán
3 Consecuencias
4 Referencias
4.1 Pie de página
4.2 Bibliografía
Antecedentes
La exitosa política de neutralidad de Dinamarca durante la Primera Guerra Mundial
había animado al gobierno danés a mantenerla durante la Segunda. No queriendo
provocar a los alemanes, se redujo el ejército danés de 30.000 efectivos a menos de
15 000.

La decisión alemana de invadir Dinamarca surgió de la necesidad de invadir Noruega,


que representaba un excelente campo para lanzar ataques aéreos al Reino Unido y
asegurar el suministro de hierro de Suecia. Dinamarca ocupaba una posición
estratégica, ya que desde sus bases aéreas podían despegar aviones a Noruega. El
mayor interés alemán se centraba en hacerse con el control de los aeródromos de
Aalborg, en Jutlandia.5 Con ello, se lograría extender el sistema germano de
defensa aérea y hacer más complejos los bombardeos británicos sobre el norte de
Alemania.6 No obstante, se conoce que hasta febrero de 1940 la decisión no había
sido tomada. Además, partes del territorio danés había sido alemán entre 1864 y
1918, aunque Hitler no tenía mucho interés en reclamarlos. Sin embargo, la captura
de un barco alemán por parte de los ingleses en aguas noruegas llevó a Hitler a la
conclusión de que Reino Unido no respetaría la neutralidad de Noruega y decidió
ocuparla, y esto a su vez implicaba la necesaria ocupación de Dinamarca.

La invasión
Ejércitos enfrentados
El día de la invasión, las fuerzas danesas consistían en 14.500 soldados, de los
cuales 8.000 eran reclutas. Estaban divididos en la División Zeeland y la División
Jutland, y en total eran 8 regimientos de infantería, 2 de caballería y 3
regimientos de artillería.7 Sólo 2.000 hombres estaban acuartelados en el sur de
Jutlandia. La División Zeeland poseía sólo dos tanquetas Landsverk compradas a
Suecia y que poco podían hacer frente a los Panzers germanos.

El General alemán Nikolaus von Falkenhorst estaba al mando de las 170.ª y 198.ª
divisiones de infantería de la Wehrmacht: Se planeó que la 198ª División ocuparía
Selandia y las islas del sur, así como Copenhague, al mismo tiempo que
paracaidistas tomarían la fortaleza de Masnesø y un puente cercano. Por su parte la
170.ª División y dos compañías Panzer, con 36 carros en total, atravesarían de sur
a norte la costa este de Jutlandia. Otros cuerpos avanzarían de forma paralela por
la costa norte de Jutland para asistir a los paracaidistas que estarían ocupando
los aeródromos.8 Como apoyo, avanzarían unos 70 Panzer, varios batallones de
ametralladoras, artillería pesada y baterías antiaéreas, además de tres trenes
blindados. La Luftwaffe proporcionó 10 escuadrones de cazas y 10 escuadrones de
bombarderos, con un total de 527 aparatos.9

Ataque alemán
A las 4 de la madrugada, el embajador alemán en Dinamarca, von Renthe-Fink, llamó
al Ministro de Relaciones Exteriores danés, Munch, y pidió una entrevista urgente.
Cuando se reunieron veinte minutos después se le notificó a Munch que en aquel
mismo momento las tropas alemanas estaban entrando a su país. Se le dijo que se
había hecho esto para «proteger» a Dinamarca de una invasión anglo-francesa, y se
le exigió que no ofrecieran resistencia y que se abriera el diálogo a las
autoridades alemanas, amenazando con que de lo contrario, se bombardearía
Copenhague.

En efecto, a las 04:15 a. m. la invasión germana ya había comenzado. Los


paracaidistas habían tomado sus objetivos, incluyendo la fortaleza de Masnesø. Al
mismo tiempo se hacían desembarcos en las islas del país.

Soldados daneses junto a un cañón antitanque, en las primeras horas de la invasión.


A las 04:20 a. m. el barco alemán «Hansestadt Danzig» desembarca en Copenhague un
batallón del 308º Regimiento de Infantería de la Wehrmacht.10 Ayudados por la
sorpresa, los alemanes tomaron diversos puntos de la ciudad sin apenas encontrar
resistencia, centrando sus esfuerzos en capturar el Palacio Amalienborg.11 Pero
cuando se acercaron la residencia del Rey Cristián X, los daneses trajeron
refuerzos al edificio y se iniciaron choques entre la guarnición y las tropas
alemanes. El combate concluyó rápido con sólo un herido danés y los alemanes
retirándose, sin deseos de herir al rey. Dentro del palacio, se discutía la
situación entre los ministros y los jefes militares. Mientras tanto, los
bombarderos alemanes ya habían llegado a la ciudad y estaba dando vueltas sobre la
misma, presionando a los daneses a rendirse. Finalmente, todos los presentes en el
palacio, excepto el Comandante Supremo Danés General William Wain Prior, llegaron a
la conclusión de que la resistencia era inútil y a las 06:00 enviaron un mensajero
para dar la noticia al embajador alemán.12

Mientras tanto, a las 05:25 los Messerschmitt Bf 110 alemanes ya habían llegado al
aeródromo de Værløse, donde estaba toda la fuerza aérea danesa, que no era mucha.
En ese momento los aviones estaban calentando, por lo que en cuestión de minutos se
pudo neutralizar a toda la Fuerza aérea danesa.

Cuando se dio la orden de rendición, el comandante danés Bennike del 4.º Regimiento
de Infantería estacionado en Roskilde, creyendo que Suecia también había sido
atacada, se dirigió con sus tropas a Helsingor para tomar el ferry y escapar a
Suecia para continuar la lucha allí. De esta manera, una hora después llegaron a
suelo sueco, pero cuando se dieron cuenta del trato amable que estaban recibiendo
los daneses de parte de los alemanes, muchos regresaron de vuelta a Dinamarca.

Consecuencias
La principal consecuencia de esta invasión fue la Ocupación de Dinamarca por la
Alemania Nazi, la cual duró hasta mayo de 1945, cuando las últimas tropas alemanas
acuarteladas en el país se rindieron a los ejércitos británicos sin oponer
resistencia significativa.

Existió un inicial trato amable de Alemania al pueblo danés durante los primeros
años de la ocupación militar, lo cual se puede explicar basándose en la ideología
de la superioridad nórdica. Debido a esta situación Dinamarca fue considerada un
"protectorado modelo" por Hitler, al punto que se permitió al Parlamento danés
seguir funcionando y se mantuvo en libertad al rey Cristián X, aunque los nazis
impusieron censura de prensa y controlaban cada aspecto de la vida política y
económica del país.

A partir de 1943 los ocupantes alemanes impusieron medidas represivas contra los
daneses debido al aumento de la resistencia clandestina por la marcha de la guerra,
que ya era desfavorable a los nazis para ese entonces; no obstante, antes de ese
periodo final de la ocupación el Tercer Reich pretendía convencer a los daneses y
otras naciones escandinavas para unirse a ellos, en vez de obligarlos mediante la
fuerza.

También podría gustarte