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en teoría y práctica
económica
Volumen 2
coordinadores
Salvador Padilla Hernández
Francisco Venegas–Martínez
Rodrigo Gómez Monge
p r e s e n ta c i ó n
Salvador Padilla Hernández
Por
• Abigail Rodríguez-Nava • Francisco Venegas-Martínez • Juan José Jardón Urrieta
• Francisco López Herrera • Salvador Padilla Hernández • María de la Luz Martín
Carbajal • Rodrigo Gómez Monge
presentaci ó n 6
cap í tul o 1
cap í tul o 2
Recuento de las teorías sobre competitividad
POR MARÍA DE LA LUZ MARTÍN CARBAJAL 35
cap í tul o 3
cap í tul o 6
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presentación
10
presentación
Salvador Padilla
11
C A PÍTULO 1
Sobre la Nueva Macroeconomía Clásica
y la Nueva Economía Keynesiana:
un análisis crítico frente a los
acontecimientos de 2007-2009
Abigail Rodríguez-Nava
arnava@correo.xoc.uam.mx
Departamento de Producción Económica, UAM-X
Francisco Venegas-Martínez
fvenegas1111@yahoo.com.mx
Escuela Superior de Economía, IPN
1. Introducción
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sobre la Nueva Macroec onomía Clásica y la Nueva Economía Keynesiana
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Abigail Rodríguez-Nava Francisco Venegas-Martínez
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sobre la Nueva Macroec onomía Clásica y la Nueva Economía Keynesiana
Para la Nueva Macroeconomía Clásica, los agentes toman sus decisiones de ofer-
ta y demanda de bienes motivados por el comportamiento de una variable real. El
desempleo sólo existe en el corto plazo cuando ocurre un cambio no esperado en
el ingreso nominal, esta variación no previsible confunde a los agentes trabajado-
res quienes suponen que ha aumentado su salario real y por tanto están dispuestos a
ofrecer más trabajo; las firmas, por su parte, suponen que ha aumentado la demanda
y el precio de su producto, en consecuencia creen que aumentó el precio relativo de
su producto y disminuyó el salario real, por lo que aumentan su demanda de traba-
jo. Sin embargo, cuando los agentes reconocen que las variables que se han modi-
ficado son las nominales entonces se regresa a la situación inicial de pleno empleo.
Uno de los estudios más influyentes acerca del empleo fue realizado por Phi-
llips (1958), él observó una relación inversa entre el nivel de desempleo y las tasas
de cambio de los salarios nominales para el Reino Unido entre 1861 y 1957. En la
versión original, la conocida curva de Phillips, era una hipérbola que representaba
exactamente las combinaciones de desempleo e inflación de salarios para las cuales
la tasa de desempleo no cambiaba. Formalmente, la expresión de la curva de Phi-
llips, en la que se relaciona el nivel de desempleo N, con la tasa de cambio del sa-
lario nominal w es:
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Abigail Rodríguez-Nava Francisco Venegas-Martínez
una política monetaria expansiva con crecimientos del producto y del empleo.
En su explicación de la curva de Phillips, Friedman (1975) subrayó que la in-
terpretación errónea de ésta fue propiciada por dos componentes del sistema keyne-
siano que trataban de reflejarse en ella: la noción de precios rígidos, que implicaba
que los individuos planean su comportamiento sin considerar cambios en el nivel de
precios, y así las modificaciones en precios o salarios nominales son equivalentes a
cambios en precios o salarios reales; y la idea de que los salarios reales ex post po-
dían alterarse por una inflación no esperada, porque los trabajadores podrían acep-
tar salarios reales más bajos producidos por la inflación y no reducciones directas
en los salarios nominales.1
Hacia finales de la década de los sesenta y en investigaciones independientes
Friedman y Phelps señalaron que no existía una relación permanente entre infla-
ción y desempleo.2 En particular, Friedman (1968) subrayó que la posibilidad de
reducir el desempleo aumentando la inflación era quimérica porque los trabajado-
res no sufren de ilusión monetaria desde que ellos toman sus decisiones con base
en los precios relativos más que en los absolutos; a partir de esta idea, destacó una
imperfección en el estudio de Phillips: la relación debería establecerse entre la tasa
de desempleo y la tasa de salarios reales.3 Para Friedman la relación correcta de-
bía expresarse como:
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(5)
(6)
1
Friedman, M. (1975). “Unemployment versus inflation: an evaluation of the Phillips curve”, IEA Oc-
casional Paper N. 44, Institute for Economic Affairs, London. Reproducido en Friedman, M. (1992). La
economía monetarista, Gedisa, España, p. 87.
2
Phelps, E. S. (1967). “Phillips Curves, Expectations of Inflations and Optimal Unemployment over
Time”, Economica, Vol. 34, N. 3, pp. 254 - 281.
3
De acuerdo con Friedman: “…there is always a temporary trade - off between inflation and unemplo-
yment; there is no permanent trade - off. The temporary trade - off comes not from inflation per se, but
from unanticiped inflation, which generally means, from a rising rate of inflation. The widespread be-
lief that there is a permanent trade - off is a sophisticated version of the confusion betwen ‘high’ and
‘rising’ that we all recognize in simpler forms. A rising rate of inflations may reduce unemployment, a
high rate will not.” Friedman, M. (1968). “The Role of Monetary Policy”, American Economic Review,
Vol. 58, N.1, p.11.
4
Friedman (1975), p. 92.
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sobre la Nueva Macroec onomía Clásica y la Nueva Economía Keynesiana
5
Ibidem, p. 94. En otro documento, Friedman se refiere a la tasa natural como: “… the level that would
be ground out by the Walrasian system of general equilibrium, provided there is imbedded in them the
actual characteristics of the labour and commodity markets, including market imperfections, stochastic
variability in demands and supplies, the cost of gathering information about job vacancies and labour
availabilities, the costs of mobility, and so on.” Friedman (1968), Op. cit., p. 8.
6
Lucas afirmó: “ …there is an involuntary element in all unemployment, in the sense that no one chooses
bad luck over good; there is also a voluntary element, in all unemployment, in the sense that however mi-
serable one’s current work options, one can always choose to accept them.” Lucas, R. (1978). “Unem-
ployment Policy”, American Economic Review, Vol. 78, No. 2, p. 354.
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Para Lucas: “involuntary unemployment is not a fact or a phenomenon which it is the task of theorists to
explain. It is, on the contrary, a theoretical construct which Keynes introduced in the hope that it would be
helpful in discovering a correct explanation for a genuine phenomenon: large - scale fluctuations in mea-
sured, total unemployment. Is it the task of modern theoretical economics to ‘explain’ the theoretical cons-
tructs of our predecessors, whether or not they have proved fruitful?”. Ibidem, pp.354-355.
8
Hahn y Solow escribieron: “We found that we shared a profound disagreement with the main trend of
macroeconomic theory in the early 1980s, and we wanted to create some sort of respectable theoretical
resistance to it… The irony here is that macroeconomics began as the study of large - scale economic pa-
thologies: prolonged depression, mass unemployment, persistence inflation, etc. This focus was no in-
vented by Keynes… Now, at last, macroeconomic theory has as its central conception a model in which
such patologies are, strictly speaking, unmentionable. There is no legal way to talk about them.”
“Much contemporary macroeconomic theory leaves the impression that unemployment and recession
are primarily the result of excessive rigidity of wages and prices, and perhaps the related inmobility of
labor. If only the artificial barriers to wage and price flexibility were removed -by the weaking of trade
unions and the deregulation of industry and trade- the market mechanism would see to it that the labor
market cleared. True unemployment disappear and business cycle fluctuations would be minimal. This
sort of theory has practical consequences. Central bank governors and ministers of finance are given to
saying in public, even while unemployment rates hover around 10 percent of the labor force, that they
can do nothing about it and should do nothing about it. It is not their problem; the only proper policy is
to chip away at obstacles to wage cuts an labor mobility. Wage flexibility will eventually do the rest. Pre-
sumably they have something more than competitive real depreciation in mind.
Another branch of macroeconomic theory holds that wages and prices are already adequately flexi-
ble, and that observed fluctuation in output and employment are not pathological at all. They are the
economy’s optimal response to unavoidable erratic shifts in tastes for goods and leisure and in the tech-
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nology of production. The implication is that even if public policy could do something to increase pro-
duction and reduce unemployment, the temptation should be resisted. ..
We have no sympathy with either view.” Hahn, F. y Solow, R. (1995). A Critical Essay on Modern Ma-
croeconomic Theory, Blackwell, Inglaterra, pp. 9-10.
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Véase por ejemplo, Stiglitz, J. (1984). “Theories of Wage Rigidity”, Working Papers Series, NBER,
No. 1442, Cambridge, MA., p. 1. donde, sostiene una equivocada interpretación de la Teoría General
cuando suscribe lo siguiente: “Es ampliamente conocido que el supuesto de que los salarios son rígidos
es central en la explicación keynesiana del desempleo involuntario.”
También puede consultarse a Laurent, T. (1992).”La nouvelle economie keynésienne, n’ est pas ce que
l’on croit”, Keynes et les nouveaux keynésiens en Richard Arena et Dominique Torre (coord.), pp. 255
-275, donde el autor coincide en que esta interpretación es errónea y en cambio afirma que la vigencia
de un modelo keynesiano requiere necesariamente la existencia de precios perfectamente flexibles, y se-
ñala por ejemplo como la interpretación errónea es sostenida por Howitt, P. (1990). The Keynesian Re-
covery and Others Essays, Philip Allan ed., y como Schumpeter consideró que la única explicación del
desempleo era la rigidez salarial aunque Keynes deseara evitarla, en Shumpeter J. A. (1954): Histoire de
l’ analyse économique, Gallimard, Paris.
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los agentes no logran hacer compatibles sus acciones, todas las decisiones son no
cooperativas porque cada agente busca maximizar su utilidad o sus beneficios to-
mando las acciones de otros como dadas. Cuando existe complementariedad estra-
tégica, los agentes reconocen el efecto de las acciones de otros sobre las propias y
por tanto su estrategia óptima depende de las estrategias de los demás. En estas con-
diciones, es posible que se produzcan equilibrios múltiples; algunos son más óp-
timos que otros, y las características de optimalidad del resultado dependerá del
grado de complementariedad estratégica. Por supuesto, las fallas de coordinación
pudieran evitarse si todos los agentes actuaran cooperativamente; por ejemplo, po-
drían maximizarse funciones de utilidad o de beneficios agregadas.
Los modelos de fallas de coordinación se asocian a la propuesta keynesiana
porque intentan recuperar como causa de los desequilibrios, las diferencias entre
los agentes consumidores y firmas cuando toman sus decisiones. Una posible inter-
pretación de los desequilibrios en el marco keynesiano es la idea de que los consu-
midores toman decisiones de corto plazo o modificables en el corto plazo, mientras
que las firmas toman decisiones de largo plazo al comprometerse en un plan de pro-
ducción; si no se logran ajustar las decisiones de los consumidores con las expecta-
tivas de demanda de las firmas pueden originarse alteraciones en los niveles de pro-
ducción y empleo.
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El resultado mostrado en (9) expresa cómo varían los precios nominales P ante
cambios en la cantidad de dinero M. Se trata, en opinión de Keynes, de una genera-
lización de la ecuación cuantitativa, porque incluye no sólo el caso en que la velo-
cidad ingreso del dinero es constante, sino también las situaciones en las que varían
precios y dinero, las situaciones de equilibrio y desequilibrio y además, muestra que
las modificaciones en la oferta monetaria afectan en primer lugar a la demanda efec-
tiva, y los cambios en ésta afectan al nivel de precios.
A diferencia de la propuesta keynesiana (sí retomada por la Teoría Post-keyne-
siana) respecto a que los agentes requieren al sistema bancario para obtener liquidez
con la cual realizar sus planes de consumo y producción y que se necesita al siste-
ma financiero para administrar los riesgos a los que los agentes están expuestos ante
la inexistencia de un sistema completo de bienes contingentes; para la Nueva Eco-
nomía Keynesiana, los bancos comerciales y los intermediarios financieros son sólo
un agente más, similar a una firma productiva que busca maximizar sus beneficios,
sus decisiones no están relacionadas con las necesidades de liquidez de otros agen-
tes, entonces es incapaz de justificar la necesidad del sistema bancario. De hecho
como ha señalado Rogers (2008), ni el dinero, ni los bancos comerciales, ni el cré-
dito, ni la banca central tendrían lugar en las economías de equilibrio.
Los modelos que estudian la participación del sistema bancario y financiero
pueden agruparse en los siguientes: contratos eficientes y racionamiento de crédi-
to. Los modelos de contratos eficientes explican cuáles son las condiciones bajo las
cuales se acuerda el otorgamiento de créditos. Se supone que en los contratos se es-
pecifican todos los estados de la naturaleza posibles y las cuantías que el prestatario
debe devolver al prestamista en cada uno de ellos. Como ejemplo de estos modelos
destaca el de Gale y Hellwig (1985) donde se supone que el prestamista no puede
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observar los resultados de la inversión del prestatario, a menos que realice una cos-
tosa auditoría, se trata de un problema de verificación costosa, donde los problemas
de riesgo moral y selección adversa determinan el otorgamiento de créditos.
Por otro lado, los modelos de racionamiento de crédito suponen que la deman-
da de crédito de un prestatario no es concedida, aun cuando éste tenga la disposi-
ción de pagar todos los elementos del contrato de préstamo, relacionados o no con
el precio. 10 Ejemplos de estos modelos son los propuestos por Jaffee y Modigliani
(1969), Stiglitz y Weiss (1981), y Blackwell y Santomero (1982).
El racionamiento de crédito es un concepto que la Nueva Economía Keynesia-
na ha hecho corresponder con el de desempleo involuntario. Para la Nueva Econo-
mía Keynesiana, el racionamiento de crédito se debe a que los recursos no se otor-
gan porque la tasa de interés real es rígida sobre su nivel de equilibrio, es tan alta
que los bancos comerciales están casi seguros de que sólo así podrán compensar las
pérdidas por el incumplimiento que esperan de los prestatarios, no obstante, si la
expectativa es que el monto de las pérdidas por incumplimiento supere al monto de
los ingresos por el cobro de la tasa de interés, entonces los bancos comerciales ele-
girán negar los créditos. Como se ve, se trata de un planteamiento equivocadamen-
te asociado al planteamiento de Keynes; él explicaba los desequilibrios como con-
secuencia de variaciones en la demanda de producto en variaciones de la demanda
de dinero; la Nueva Economía Keynesiana afirma que los desequilibrios se deben a
rigideces del salario real y de la tasa de interés real.
Por último debe señalarse que el concepto de “racionamiento” no es equivalen-
te al de “desempleo involuntario”; un trabajador puede sufrir racionamiento si su
trabajo deja de ser requerido en el sector laboral que demanda las habilidades de tra-
bajo que él posee, pero no sufre desempleo involuntario, porque para que éste exis-
ta, se requiere que su trabajo deje de ser demandado incluso en el sector laboral de
las mínimas habilidades requeridas; es decir, que se le excluya de cualquier forma
de participación legal en el sistema económico. Por tanto, la Nueva Economía Key-
nesiana no es fiel al pensamiento keynesiano respecto a la participación del dinero,
de los bancos y del sistema financiero en el sistema económico.
10
Keeton (1979) distingue entre dos tipos de racionamiento: Racionamiento de tipo I. Se presenta cuan-
do se raciona parcial o totalmente a todos los prestatarios de un grupo; Racionamiento tipo II. Se pre-
senta cuando entre un grupo homogéneo de prestatarios, desde el punto de vista del prestamista, algunos
obtienen el préstamo que demandan, mientras que a otros se les raciona.
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Gráfica 1.
Saldos de títulos de deuda (total mundial)
en billones de dólares
del erario público para contrarrestar los efectos de la crisis, de estos recursos se uti-
lizaron $350 mil millones para el rescate de instituciones financieras e hipoteca-
rias, $100 mil millones para la cobertura de riesgos asumidos por la Reserva Fede-
ral, $200 mil millones para créditos al consumo y a pequeñas empresas, y $50 mil
millones para evitar las ejecuciones hipotecarias y disminuir impactos de la crisis
inmobiliaria; también se ensayó la aplicación de programas de expansión del gasto
público. Evidentemente, con estas medidas se prefirió dirigir el apoyo hacia las ins-
tituciones financieras, en este caso una vez más, las pérdidas son asumidas por insti-
tuciones públicas, pero las ganancias han sido siempre privadas; además se dio pre-
ferencia al apoyo de las instituciones comerciales y en menor grado a las empresas,
en lugar de considerar medidas que impulsaran la demanda interna.11
Bolster Bank Balance Sheets”, documento de trabajo, UNC School of Law, Estados Unidos.
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Cuadro 1.
Deuda Pública como proporción del Producto Interno
Bruto
Fuente: Elaboración propia con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.
Cuadro 2.
Tasas de crecimiento del Producto Interno Bruto
Fuente: Elaboración propia con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.
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Cuadro 3.
Formación bruta de capital fijo (tasas de crecimiento)
Cuadro 4.
Saldos totales en derivados con distintos subyacentes.
Datos en billones de dólares 2010=100
Tipo de Tasas de
Fecha
Total cambio interés Acciones Físicos
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Cuadro 5.
Saldos totales en derivados sobre tipo de cambio por tipo
de contratantes. Datos en billones de dólares 2010=100
Otras
Intermediarios
Fecha Total instituciones Clientes no
financieros
financieras financieros
5. Conclusiones
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sobre la Nueva Macroec onomía Clásica y la Nueva Economía Keynesiana
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capítulo 2
Introducción
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Recuento de los conceptos sobre competitividad
1
Las ventajas absolutas y comparativas aluden a la importancia del comercio internacional en el creci-
miento y desarrollo económico. Para ese propósito existen varias explicaciones: desde la época del mer-
cantilismo se señalaba que en el comercio internacional no todos los países resultaban ganadores, pues-
to que un superávit comercial para una nación se convertía en un déficit para otra. En contraste, la teoría
posterior al mercantilismo que surgió en el siglo XVIII con Adam Smith consideró al comercio como un
juego en donde no existían perdedores si los países se especializaban en producir aquello que hacían me-
jor o más barato. Este marco teórico fue ampliado por Ricardo (1971) al plantear la posibilidad de obte-
ner una ventaja comparativa en aquellos productos que al país le resultara comparativamente más bené-
fico producir para vender a sus socios comerciales, aunque no disfrutase de ventajas absolutas.
36
María de la Luz Martín Carbajal
2
Brouthers y Brouthers (1997) hacen hincapié en el hecho de que el modelo de Porter basado en los seis
determinantes, ya sea que operen de forma individual o colectiva, crean el entorno nacional propicio
para que las empresas e industrias nazcan y aprendan a competir.
37
Recuento de los conceptos sobre competitividad
ción es mundialmente competitiva cuando tiene muchas industrias con ventajas ba-
sadas en fuentes de competitividad locales comunes.
De acuerdo con lo anterior la diferencia entre este modelo y el diamante de Por-
ter se encuentra tanto en la división de factores como en la adición de otros nue-
vos, es decir, Porter incluye a los recursos naturales y al trabajo cuando establece
las condiciones de factores, pero el modelo de nueve factores engloba los recursos
naturales dentro de los recursos heredados, mientras que el trabajo se inserta en la
categoría de trabajadores.
Con respecto al doble diamante generalizado se considera que la competitivi-
dad de una nación depende en parte de las condiciones locales (lo que se denomina
diamante local), pero también de los sucesos externos (llamado diamante extranje-
ro) con el que se relacionan las empresas (Moon, Rugman y Verbeke, 1995). Este
modelo trata de resolver algunas debilidades del diamante de Porter al incorporar
las actividades de las empresas multinacionales y del Gobierno dentro del análisis
del modelo, de tal manera que no los considera como parámetros externos al mis-
mo. Para estos autores el valor agregado sostenible de un país resulta tanto de las
empresas locales como de las extranjeras, y así las actividades de estas firmas son
importantes para la competitividad de una nación o región, pues influyen en todos
los determinantes de ambos diamantes. Así, la actividad multinacional constituye la
diferencia más importante entre ambos modelos.
A partir de esas consideraciones valga destacar dos particularidades metodo-
lógicas entre el diamante de Porter y el doble diamante generalizado: para éste el
valor agregado sostenible en determinado país podría surgir tanto de las empresas
locales como las extranjeras; Porter, en cambio, no incorpora las actividades ex-
tranjeras en su modelo, aunque hace una distinción entre el alcance geográfico de
la competencia y el lugar geográfico de la ventaja competitiva (Porter y Amstrong,
1992). Segundo, la sostenibilidad podría requerir una configuración geográfica que
se extendiera a muchos países, donde una empresa específica y las ventajas de loca-
lización presentes en varias naciones podrían complementarse mutuamente. En ese
sentido, Porter (1986, 1991) argumenta que una estrategia global efectiva reside en
la concentración de tantas actividades como sea posible en un país y servir al mun-
do desde su base local; aunque la empresa global de Porter funcionaría sólo como
un exportador, por lo que su metodología no tiene en cuenta las complejidades or-
ganizativas de las operaciones realmente globales realizadas por las empresas mul-
tinacionales (Moon, 1995).
Apenas anunciadas estas definiciones nótese que con el paso del tiempo las no-
ciones de competitividad económica se han modificado o complementado de acuer-
do con el entorno político, económico, histórico o cultural, aunque ninguno de los
cambios han alterado, en su esencia, el arquetipo creado en el siglo XVIII. En efec-
to, hay determinados rasgos distintivos de la competitividad que están presentes en
la literatura sobre el tema y que son la base de las diferentes ideas que se tienen sobre
dicho concepto. Algunas ideas y convenciones han sufrido modificaciones, aparen-
temente, como la recién mencionada ventaja absoluta de Smith o la ventaja compe-
titiva de Porter, pero han surgido otros conceptos que se refieren a sistemas tecno-
económicos, sociopolíticos, culturales y sistémicos que nutren sus explicaciones con
variables como tecnología, relaciones de poder o institucionalismo. El resto perma-
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María de la Luz Martín Carbajal
nece constante, sobre todo el conjunto de objetivos que pueden distinguir a la com-
petitividad: crear riqueza y lograr el desarrollo económico en una nación, región o
empresa; en otras palabras, la competitividad significa contender en actividades que
llevan al incremento del ingreso de un país en el largo plazo (Lall, 2001).
Cuando se analiza este concepto desde perspectivas diferentes a la económica
lo importante es la continuidad tanto de la idea de la competitividad como de sus
cambios y variaciones. Sin duda, una de las características que definen a la literatu-
ra moderna es la crítica sobre los elementos que estimulan la competitividad en di-
ferentes ámbitos, desde el nacional o macroeconómico hasta el empresarial o mi-
croeconómico y entre ellos existen múltiples espacios como el local, sectorial y el
regional. Por otro lado, aunque el factor común de todos esos análisis es la globali-
zación, también existen otros elementos de carácter general que subyacen en el pro-
ceso competitivo: los ciclos económicos y de innovación, los paradigmas tecnoeco-
nómicos y las trayectorias tecnológicas, los sistemas de innovación y la formación
de capacidades tecnológicas de las empresas, principalmente.
Por cierto, para dar otra respuesta a las preguntas planteadas al principio, sería
ardua la tarea de indagar sobre la continuidad o discontinuidad de la gran mayoría
de los conceptos sobre competitividad desde diferentes esquemas analíticos y las
formas en que se manifiestan, por lo que la intención aquí es analizar dos tendencias
principales de la noción de competitividad: una se refiere a las definiciones que pro-
vienen del ámbito de la economía y las discusiones sobre el nivel en el que debe de-
finirse ya sea nacional, sectorial o empresarial. La otra considera las vertientes que
definen a la competitividad desde la perspectiva sociocultural, es decir, la que encie-
rra aspectos tecnoeconómicos, sociopolíticos, culturales y sistémicos.
Para satisfacer ese objetivo este capítulo se divide en cuatro partes. En la pri-
mera se hace referencia al contexto de la competitividad. Es importante esta sección
ya que en ella se establecen las premisas o señales que permiten comenzar a expli-
car qué es la competitividad. En la segunda sección se explican las acepciones de la
competitividad desde el ámbito de la economía. Esta parte es pertinente porque se
trata de abordar y diferenciar tres esferas de la competitividad: la empresarial, la re-
gional y la nacional –en particular en el caso de la competitividad de un país se ex-
ponen algunos de los principales indicadores y sus respectivos índices. Después de
establecer las diferencias en los postulados de la competitividad económica, ense-
guida, en la tercera parte, se expone brevemente la discusión de la competitividad
desde el punto de vista sociocultural.
Para terminar, en la cuarta sección, ideas clave y perspectivas, se resumen los
principales conceptos sobre competitividad y se discute brevemente el papel del
concepto de competitividad a la luz de las nuevas acepciones para explicarla.
1. Contexto de la competitividad
39
Recuento de los conceptos sobre competitividad
conceptuales que explican el proceso competitivo como son los ciclos económicos,
el ciclo de las innovaciones tecnológicas, los paradigmas tecno-económicos y las
trayectorias tecnológicas, el sistema nacional de innovación y la formación de ca-
pacidades tecnológicas que tienen una relación directa con la importancia de la in-
novación tecnológica (Pérez, 2001; Cimoli, 2000; Metcalfe, 1997; Borrus y Stows-
ky, 1998; Abramovitz, 1989; Gregersen y Johnson, 1998; Nelson, 1990; Kim, 1993,
1995, 1997, 1999; Vernon, 1966, 1979).
Los conceptos anteriores son algunas de las tendencias que contribuyen a ex-
plicar la competitividad. El desarrollo de éste concepto está inserto en la globaliza-
ción que bien se podría considerar un lugar común; enseguida, otro elemento argu-
mentativo para explicar la competitividad son los ciclos económicos –fluctuaciones
de las principales variables económicas que sugieren la marcha de una economía-,
pero también el surgimiento de las innovaciones tecnológicas. Por último dos facto-
res adicionales que están incluidos en la explicación son los sistemas nacionales de
innovación y la formación de capacidades tecnológicas. En consecuencia, estas des-
cripciones son sólo el primer paso para explicar lo que significa la competitividad,
ya que es necesario hablar de algunos principios generales comunes a muchas de las
definiciones sobre el tema y que permitan averiguar las conexiones entre un número
determinado de fenómenos. Sin embargo, estos principios no constituyen una teo-
ría completa porque gran parte de lo que comúnmente se aprecia y considera impor-
tante habrá de quedar fuera del alcance de este trabajo. Las nociones anteriores sólo
sirven entonces para que en las siguientes secciones se estudien las diferentes acep-
ciones de la competitividad, primero, en el marco de análisis de la teoría económica
y después de acuerdo con los enfoques sociocultural y sistémico.
3
Estos autores se refieren a tres habilidades para coexistir en una ambiente de competencia: capacida-
des de sobrevivencia, aquéllas que sirven para adaptarse pasivamente al ambiente competitivo sin cam-
biar significativamente o desarrollarse por sí mismo; capacidades de desarrollo, se refiere a la expe-
riencia para responder activamente a los cambios en el ambiente competitivo y, por ello, mejorar las
cualidades propias y realizar las actividades de manera más eficiente; y capacidades superiores, el ni-
40
María de la Luz Martín Carbajal
vel más alto de la competitividad que se refiere a la habilidad para influir en el ambiente competitivo a
través de la eficiencia en la organización, el rápido desarrollo o el mejoramiento de cualidades con res-
pecto a los competidores.
4
La competencia imperfecta es un efecto de la capacidad de los empresarios para influir en el precio de
mercado de su producto –debido, por ejemplo, al desabasto, además, pueden lograrla por su capacidad
innovadora para contar con la mejor oferta. Algunos casos de competencia imperfecta son el oligopolio,
la competencia monopolística, el duopolio, monopolio o colusión.
5
En ese sentido los países crecen con estrategias específicas que consisten en elegir y proteger a las ac-
tividades económicas que originan competencia imperfecta, pues éstas producen la riqueza que se derra-
ma al resto de la nación, es decir, ellas determinan el poder productivo nacional, la capacidad productiva
o la competitividad. Así, el supuesto implícito o explícito en el pensamiento económico ha sido que si un
país se ocupa en actividades que experimentan cambio técnico, las innovaciones tecnológicas no se di-
fundirán a todos los países en el extranjero, pues muchos de los beneficios se mantendrán en las naciones
productoras como beneficios y altos salarios reales que originan un nivel de vida alto.
41
Recuento de los conceptos sobre competitividad
esa orientación, List (1997), señaló que una estrategia de desarrollo era vender bie-
nes manufacturados y comprar materias primas de manera tal que este principio fue
durante un lapso considerable el sustituto de todas las teorías, además de estar a fa-
vor del libre comercio, ese autor sugería forjar un poder productivo nacional al in-
sistir en la importancia de la creación de infraestructura como la construcción de fe-
rrocarriles, por ejemplo.6
En resumen, según la teoría económica la competitividad es el resultado de un
proceso de competencia imperfecta y producto de los esfuerzos de múltiples agen-
tes para crear de manera conjunta determinadas condiciones para el crecimiento o
generación de ventajas competitivas. A partir de esta definición genérica se despren-
den otras nociones de competitividad que se relacionan con los ámbitos de la em-
presa, de las regiones y de las naciones que en las siguientes tres secciones se abor-
darán por separado.
6
En este sentido en la historia económica se puede acudir a muchas referencias: las ventajas competiti-
vas de Inglaterra radicaron en el fomento a la fabricación de bienes, no en la producción de materias pri-
mas como muestra la revolución industrial. En Inglaterra surgieron nuevas industrias durante el periodo
de transición artesanal al manufacturero. Por ejemplo, en la industria textil los productos fueron mecani-
zados de tal forma que aparecieron bienes diferenciados y de esta forma el país tenía una mayor ventaja
pues su proceso de aprendizaje sobre dicha industria no podía ser alcanzado por sus competidores quie-
nes entraron más tarde a dicha industria. En consecuencia, el país alcanzó economías de escala y prote-
gió a la industria al erigir barreras a la entrada de competidores extranjeros. Los estadounidenses, por su
parte, establecieron protecciones para aislarse del comercio con Europa durante el bloqueo en la guerra
de 1812 lo que estimuló la actividad manufacturera y, por añadidura, una masa crítica de presión políti-
ca en favor de la implementación de tarifas arancelarias; o los cameralistas en Alemania que favorecie-
ron la protección de la manufactura.
42
María de la Luz Martín Carbajal
7
Desde esta perspectiva también es importante que los miembros de la empresa sepan identificar, culti-
var y explotar las competencias clave de la firma y conseguir que las habilidades tecnológicas y geren-
ciales se adapten rápidamente a las oportunidades que les ofrece el mercado. Cohen y Levinthal (1990)
señalan que la habilidad de las empresas para captar la nueva información que proviene del exterior y
sus aptitudes para asimilar y aplicar dicha información para fines comerciales es un elemento crítico que
estimula la capacidad de innovación de las firmas.
8
Este es el núcleo de la competitividad de una empresa, pues el conocimiento productivo no se puede
materializar únicamente al momento de transmitir información; pero en el caso de que el conocimiento
interno más importante para la firma se pueda codificar y entender, el problema de reproducir el conoci-
miento se convertiría en un simple problema de transmisión de información. En efecto, copiar y trans-
mitir conocimientos es imposible en ausencia de transferencia de personas.
9
La composición del portafolio es importante porque facilita el registro como patente de los descubri-
mientos en algunas áreas en comparación con otras. Por ejemplo, en los últimos 20 años, las inversio-
nes en los hallazgos para medicamentos cardiovasculares han sido más productivas que las investiga-
ciones sobre el cáncer.
43
Recuento de los conceptos sobre competitividad
10
Además del know-how específico de las firmas como un factor muy importante ya que las nuevas in-
vestigaciones requieren de científicos altamente especializados en disciplinas tales como la biología, la
bioquímica y la psicología, hay dos capacidades especialmente significativas en las investigaciones so-
bre medicamentos: la habilidad de la empresa para fomentar y mantener un flujo constante de conoci-
mientos científicos que provienen de fuentes externas a las empresas; y, la segunda es la capacidad de
mantener un flujo de información constante a través de todos los departamentos de la empresa, pues los
nuevos descubrimientos en el sector requieren de este tipo de integración. Por ejemplo, el desarrollo co-
mercial de la droga que inhibe la síntesis del colesterol en el hígado (HMG CoA) fue producto del tra-
bajo conjunto de tres áreas: farmacología, psicología y bioestadística.
11
Las diferentes capacidades de la empresa explican en gran medida su productividad en cuanto a la in-
vestigación se refiere. Por ejemplo, una empresa que premia las investigaciones publicadas es 40% más
productiva que una que no lo hace; o una firma que organiza equipos de investigación interdisciplinarios
es más productiva que una que no lo hace.
12
En el primer nivel de decisión la firma debe buscar formas más adecuadas para elevar su productivi-
dad y su relación con el mercado; mientras en el segundo se refiere a las acciones del gobierno para fa-
vorecer la competitividad de las empresas que conforman los sectores industriales. El tercer nivel de de-
cisión, competitividad por sectores, significa que en el área en la que compite la empresa debe integrar
a la mayoría de las firmas en la búsqueda de soluciones a problemas comunes. Finalmente, la competiti-
vidad negociada internacionalmente es la que resulta de las transacciones por medio de tratados y acuer-
dos comerciales entre países.
44
María de la Luz Martín Carbajal
El debate con respecto a la competitividad regional gira en torno a dos aspectos: pri-
mero, la relación entre la competitividad de las firmas y su repercusión en la com-
petitividad de los territorios relacionados con ellas, ya sea a través de su propiedad
o su ubicación; segundo, el desarrollo de una empresa está determinado por las con-
diciones prevalecientes en su entorno y una de las más importante es la proximi-
dad geográfica (Castels y Hall, 1992; Charles y Benneworth, 1996; Malmberg, et al,
1996).14 En este caso el elemento regional de la competitividad tiene que ver con el
hecho de que los factores que mejoran la calidad de vida de cierta zona -creación de
centros de educación, políticas gubernamentales para atraer inversiones y construc-
ción de carreteras, entre otros-, impulsan a ciertas compañías a concentrarse geográ-
ficamente y estimulan la formación de clusters.
Un cluster es un grupo geográficamente denso de empresas e instituciones re-
lacionadas que pertenecen a un campo económico concreto y están unidas por ras-
gos comunes y complementarios entre sí (Porter, 1991) que por su dimensión geo-
gráfica puede ser urbano, regional, nacional o incluso internacional. La presencia
de los clusters significaría entonces que la ventaja competitiva se encuentra fuera de
la empresa, incluso fuera del sector, es decir, que se halla en donde se localizan sus
unidades de explotación o de producción. Por ésta razón, las firmas agrupadas en un
cluster influyen en la competencia en tres aspectos clave: incrementan la producti-
vidad de las empresas o sectores que los integran; aumentan su capacidad para in-
novar y, con ello, su capacidad para aumentar la productividad, además, estimulan
la creación de nuevas compañías, lo cual apoya la innovación y, por consiguiente,
la expansión del cluster. Así que un cluster puede definirse como un sistema de em-
presas e instituciones interconectadas cuyo efectos positivos sobre la competencia
dependen, en cierta medida, de la existencia de relaciones y comunicaciones perso-
nales e interacciones entre redes de personas e instituciones (Porter, 2003).
13
Sin embargo, algunos indicadores para evaluar el origen de las ventajas competitivas son, por ejem-
plo, los métodos de producción y de organización (reflejados en el precio y en la calidad del producto fi-
nal) con relación a los de sus rivales en un mercado específico; calidad y precio del bien o servicio igual
que sus rivales en mercados competitivos; actualización de métodos de producción y organización; ca-
pacitación de los trabajadores, especialmente en un entorno con una elevada rotación de personal; co-
operación interempresa en actividades que puedan implicar retornos elevados (IyD); y, disponibilidad
de crédito (Abdel y Romo, 1994).
14
Para medir la competitividad regional y/o industrial se han tomado indicadores como el resultado de la
competitividad de empresas individuales; la mayor productividad (costos menores en comparación con
rivales internacionales en la misma actividad); productos con mayor valor agregado; nivel de atracción
de un país con relación a otros para ubicar plantas en una determinada industria; participación de mer-
cado o el índice de ventajas comparativas reveladas; concentración de mercado; diferenciación de pro-
ductos; precios internacionales; política industrial; ambiente competitivo; economías de escala (fomen-
tan la creación de infraestructura especializada como centros de investigación e instituciones educativas
para formar cuadros técnicos.
45
Recuento de los conceptos sobre competitividad
15
Dentro del mismo cluster pueden existir más oportunidades de innovación, además de que se produ-
ce un efecto de demostración y otras empresas adoptan las innovaciones. Al respecto se puede consultar
también a Castels y Hall (1992) y Porter (2003).
16
La aglomeración geográfica da origen a “economías externas tecnológicas y pecuniarias (Krugman,
1991), que fortalecen las ventajas competitivas de la industria. Las primeras involucran la derrama de
conocimiento entre empresas lo cual contribuye a que se desarrollen capacidades tecnológicas, mientras
que las economías externas pecuniarias significan la creación de un mercado especializado para la mano
de obra especializada y para los proveedores.
17
El enfoque del distrito innovador es compatible al de la empresa basada en recursos. Esta perspectiva
ve a la firma como un conjunto de recursos y capacidades y puede ser posible aplicarlo a las aglomera-
ciones. Mientras el de la empresa basada en recursos distingue entre recursos internos de la empresa y
recursos disponibles en los mercados, en este caso las aglomeraciones entran en la tercera categoría de
recursos que son internos a la aglomeración (sitio industrial, cluster espacial) pero externo a las empre-
sas individuales (Enright, 2001; Maskell y Malmberg, 1995).
18
Las aglomeraciones surgen debido a los vínculos locales ya sea para reducir costos o incrementar los
ingresos (o ambos) de las empresas que toman parte en los intercambios; la presencia de una aglome-
ración mejora el desempeño por la reducción del costo de las transacciones tanto para tangibles como
intangibles, además, se atribuyen ventajas de la aglomeración por la minimización de la distancia en-
tre una empresa y sus socios comerciales, así como a la rapidez con la que ocurren las comunicacio-
nes entre proveedores y usuarios (Scott, 1983¸1988; Maskell y Malmberg, 1995; Morgan, 1995; Saxe-
nian, 1994; Maillat, 1995).
19
Al contrario de la creencia común Ottati (2002) señala que los distritos industriales no resultan de ma-
nera espontánea del proceso de desarrollo económico, más bien la competitividad y dinámica de las em-
presas en un distrito industrial dependen de la integración social, que usualmente son el resultado de una
coordinación consciente entre las instituciones.
46
María de la Luz Martín Carbajal
20
El concepto de distritos industriales se originó con el trabajo de Marshall quien identificó la forma en
la cual las pequeñas empresas desarrollaron una ventaja competitiva sobre las grandes empresas. Mar-
shall destacó dos explicaciones: i) las economías externas que se refieren a los beneficios resultantes
de las economías de aglomeración; y ii) la concentración espacial y el ambiente industrial que favore-
cía el proceso de aprendizaje y la adquisición de conocimientos (Marshall, 2000; Carmagi, 1991; Be-
catini, 1989).
21
El tecnopolo constituye la infraestructura propicia para las actividades de innovación industrial y la
transferencia de tecnología en el cual se desarrollan oportunidades de cooperación institucional entre
universidad e industria. Pueden estimular el crecimiento de actividades de alta tecnología y fomentar la
transferencia de tecnología que lleva al desarrollo de nuevos procesos y producto rentables. La ubica-
ción de las universidades y centros de investigación cerca de las empresas innovadoras es un elemento
central del concepto de tecnopolo (Shearmur y Doloreux, 2000; Masey, 1992).
22
El contexto innovador es un concepto basado en la idea de un proceso de innovación y aprendizaje
localizado que explora la dimensión sociocultural de las ventajas competitivas locales. Así, las venta-
jas sinérgicas están basada en dos conjuntos de efectos que operan simultáneamente en el contexto in-
novador: los efectos de proximidad que se refieren a la reducción de los costos del contrato cara a cara;
y el efecto socialización que se refiere al aprendizaje colectivo, la cooperación y la formación de redes
(Maillat, 1991).
47
Recuento de los conceptos sobre competitividad
23
Las regiones de aprendizaje funcionan como un recolector y depositario de conocimientos e ideas, y
proporciona un ambiente o infraestructura que facilita el flujo de conocimientos, ideas y aprendizaje.
Una región de aprendizaje se basa en la noción de proximidad y concentración espacial, que lleva al esta-
blecimiento de redes y el aprendizaje interactivo entre empresas y organizaciones. Un espacio de innova-
ción se convierte entonces en un espacio territorial para las empresas involucradas en la innovación y el
proceso de aprendizaje. Además, es un ambiente de aprendizaje dentro del cual las empresas e institucio-
nes pueden aprender por la interacción y llevar a cabo actividades colectivas que constituyen el aprendi-
zaje organizacional (Florida, 2002; Maillat y Kebir, 1999; Putnam, 1993; Malmberg et al., 1996).
48
María de la Luz Martín Carbajal
Cuadro 1
Conceptualizaciones de la competitividad con énfasis
en la economía según autores y definición
24
A menudo se analiza la competitividad del sector manufacturero el uso de indicadores y relaciones téc-
nicas que proporcionan elementos para comparar cuantitativamente el desempeño de varios sectores o
unidades espaciales e introducen herramientas para una descripción cualitativa. Las relaciones técnicas
más frecuentes son: base tecnológica (conjunto de principios científicos y tecnológicos incorporados a
equipos productivos y procesos de producción; densidad de capital (relación capital-producto, que es el
monto de capital fijo requerido por unidad de producto); cuota de plusvalía (relación entre el capital ex-
cedente y el trabajo necesario); cuota de ganancia (relación entre el excedente y los factores de la pro-
ducción utilizados); intensidad del capital (relación capital trabajo, que enfrenta a los factores básicos
del proceso de producción) (Ortiz, 1994; Millán, 1999). Sobrino (2003), señala que de todas las relacio-
nes posibles la más importante es la productividad, ya que es una relación cuantitativa entre el volumen
producido y la cantidad de factores empleados.
25
Una muestra de esa afirmación es el hecho de que los mejores productores pelotas de base ball a nivel
mundial son los Haitianos quienes ganan 30 centavos en una hora de trabajo; pero, si bien las empresas
estadounidense que producen esas pelotas en Haití son competitivas, la producción de pelotas no hace
que la economía haitiana sea más competitiva a nivel mundial. Con este ejemplo se muestra que aunque
una empresa sea competitiva no significa que todas sus actividades hagan que la nación en donde se ubi-
ca sea más competitiva al incrementar sus ingresos. Es decir, los altos niveles de productividad de una
firma no necesariamente conducen a la competitividad de una nación (Scout, 1985).
26
El Foro Económico Mundial (WEF, 2003) y el Instituto de Desarrollo Administrativo (IMD, 2003)
han elaborado sendos índices de competitividad cuyo objetivo común es clasificar a los países tomando
49
Recuento de los conceptos sobre competitividad
en cuenta su clima empresarial, indicador que resumen un número importante de atributos. Para su ela-
boración, en ambos índices se utilizan datos duros, además de encuestas de opinión que cuantifican los
factores relacionados con la tecnología, infraestructura, calidad de las instituciones públicas y entorno
macroeconómico, entre otros.
27
Otro indicador de competitividad es el índice de calidad de las actividades económicas de las naciones
desarrolladas que, de acuerdo con Reinert (1994), muestra la competitividad en el sector manufacturero.
Este índice intenta medir de manera imperfecta cómo difieren las actividades económicas y resumir las
consecuencias macroeconómicas de esas diferencias, al mismo tiempo, el índice destaca los factores y
mecanismos que hacen que exista la competitividad; los factores que permiten que algunas naciones in-
crementen más su nivel de vida en comparación con otros que operan bajo el sistema de libre mercado.
28 Incluso Lall (2001) considera que el análisis competitivo requiere de hacer suposiciones sobre las
capacidades del gobierno así como sobre la naturaleza de las fallas de mercado que repercuten sobre la
ventaja comparativa dinámica. El valor del análisis depende de la validez teórica y empírica de estas su-
posiciones. Si el análisis de competitividad es válido, entonces los índices de competitividad pueden re-
sultar útiles para realizar un estudio comparativo del desempeño nacional. Los índices pueden auxiliar a
quienes formulan políticas para evaluar las deficiencias de sus economías, en la misma forma que los es-
tudios comparativos técnicos ayudan a las empresas a hacer una autoevaluación y ver cual es su desem-
peño con respecto a sus rivales para implementar las estrategias pertinentes. Los índices pueden también
ayudar a los inversionistas a asignar recursos entre países, a los investigadores para analizar temas im-
portantes en términos comparativos, a los donadores e instituciones internacionales para evaluar el des-
empeño económico, y a las industrias locales para compararse a sí mismas con sus competidores.
50
María de la Luz Martín Carbajal
las empresas de un país deben tener la capacidad para pasar de las ventajas compa-
rativas –bajo costo de mano de obra o de recursos naturales- a las ventajas competi-
tivas que surjan a partir de productos y procesos únicos. Ésta precisión del concep-
to contiene la idea de que la fuente de competitividad se halla en la capacitación de
los trabajadores y en la introducción y difusión de innovaciones tecnológicas para
incrementar la productividad de los factores de producción. Es decir, las ventajas
competitivas de un país no dependen en mayor medida de la mano de obra barata y
relativamente poco capacitada.
Sin embargo, las ventajas competitivas y comparativas no están alejadas una de
la otra, pues la primera se construye en cierta medida sobre los factores que deter-
minan a la segunda. Un ejemplo de ésta dependencia recíproca es la innovación tec-
nológica. El desarrollo de nuevas tecnologías o la adaptación de tecnología madura
en los procesos de producción puede ser caro y riesgoso, más aun sin la presencia de
organizaciones que cuenten con la experiencia necesaria para evaluar esas innova-
ciones y financiarlas, las mejoras tecnológicas se traduce en elevados costos de ca-
pital y en la ausencia de innovaciones tecnológicas en la industria. Así, además del
capital, la falta de factores como precios bajos de los energéticos o del transporte
puede constituir un obstáculo para el desarrollo de la ventaja competitiva.
Se mencionó que una de las definiciones de competitividad tiene que ver con
la instrumentación de políticas y su evaluación. En ese sentido algunos de los prin-
cipales instrumentos de medición se resumen en el cuadro 2, en donde se mues-
tran cinco indicadores: i) balanza comercial relativa, mide la balanza comercial en-
tre dos países respecto al mismo bien lo que permite establecer el grado de ventaja
ó desventaja comparativa existente y comparar su evolución en el tiempo; ii) indi-
cador de transabilidad, evalúa la relación entre la balanza comercial neta y el con-
sumo aparente; iii) indicador de especialización internacional, establece la partici-
pación de un país en el mercado mundial ó en un mercado específico, es decir, la
vocación exportadora y su capacidad para crear ventajas permanentes; iv) el indi-
cador del modo de inserción al mercado internacional, muestra la competitividad
de un producto o cadena de producción medida por la variación de su presencia en
un mercado; también permite determinar la adaptabilidad de los productos de ex-
portación en los mercados en crecimiento la cual se puede observar a través de dos
criterios: posicionamiento y eficiencia. Mientras el primero es el dinamismo relati-
vo de un rubro en las importaciones de un país; la eficiencia es la participación re-
lativa de las exportaciones de un país en un producto determinado.; y, v) el índice
de desempeño exportador, que valora la competitividad de un país en los mercados
internacionales.
Uno de los índices utilizados con más frecuencia en los análisis recientes so-
bre la competitividad industrial es el de desempeño exportador con el cual se mide
la competitividad en los mercados internacionales (Clavijo y Casar, 1994; Shwedel,
1994; Márquez Padilla, 1994; Máttar Márquez, 1994; Moreno Brid, 1994; Warman,
1994). Consiste en calcular cinco índices que describen el desempeño exportador en
el mercado internacional -conformado por los países de la OCDE:
51
Recuento de los conceptos sobre competitividad
52
Indicadores Formulación Interpretación
Rango de variación: entre -1 y 1. Si es mayor que cero, se trata de un sector exportador
BC = (Xij – Mij) / (Xij + Mij)
y por ende, competitivo. Si es menor que cero, se trata de un sector importador y
carente de competitividad frente al mercado externo.
Xij = Exportaciones de un producto i por un país j al mercado mundial o un
Balanza comercial relativa Otra forma de leerlo es con las siguientes escalas:
mercado específico.
Entre +0.33 y +1: Existe ventaja para el país.
Mij = Importaciones de un producto i por un país j al mercado mundial o un
Entre -0.33 y -1: Existe desventaja para el país.
mercado específico.
Entre -0.33 y +0.33 : Existe tendencia hacia un comercio intraproducto
Tij = (Xij – Mij) / (Qij+Mij-Xij) Si Tij es mayor que cero, el sector se considera exportador, dado que existe un exceso
de oferta (Xij – Mij>0), es decir, es un sector competitivo dentro del país.
Indicador de transabilidad Xij = exportaciones del producto i del país j. Si Tij es menor que cero, es posible que se trate de un sector sustituidor de
específico.
Posicionamiento (P) = TCMij = Tasa de crecimiento de las exportaciones del Un rubro de exportación está mal posicionado cuando exporta rubros de bajo
producto i por parte del país j. dinamismo relativo y viceversa.
Las exportaciones de un país son poco eficientes cuando la participación del rubro
María de la Luz Martín Carbajal
53
Recuento de los conceptos sobre competitividad
competitividad es un círculo virtuoso a través del cual pueden ingresar más empre-
sas en el mercado internacional; círculo que implica que un país evolucione de las
exportaciones primarias hacia productos con un mayor contenido tecnológico y va-
lor agregado, lo que a su vez representa un mayor potencial para desarrollar las ca-
pacidades tecnológicas de un país.
Cuadro 3
Competitividad en el ámbito nacional según
autores y definiciones
Autor Definiciones
Siggel La inversión extranjera es atraída por la estabilidad, el buen gobierno y las oportunidades de inversión rentables, factores
(2003) que no son similares o idénticos a un fuerte desempeño en las exportaciones de una nación
Boltho La competitividad a corto plazo es equiparable al valor de la tasa de cambio real; a largo plazo es una función del
(1996) crecimiento de la productividad y tiene como objetivo elevar los niveles de vida de la población
La competitividad nacional depende de cuatro elementos: i) Condiciones de los factores que incluye factores de
producción (mano de obra calificada, infraestructura, financiamiento) necesarios para competir en una industria
determinada; ii) Condiciones de la demanda, se refiere a la naturaleza o grado de sofisticación de la demanda en el
Porter
mercado doméstico para los bienes o servicios producidos por una industria determinada; iii) Industrias relacionadas y de
(1991)
apoyo, elemento relacionado con la presencia de proveedores y otras industrias relacionadas competitivas a nivel
internacional; y, iv) Estructura y rivalidad de la industria, refleja las condiciones generales que rigen la competencia entre
las empresas, la forma en cómo se crean, organizan y administran.
La competitividad en las exportaciones comienza con un incremento en la participación del mercado e implica diversificar
UNCTAD la canasta de exportaciones, sostener tasas más elevadas de crecimiento en las exportaciones a largo plazo, aumentar el
(2002) contenido tecnológico y de habilidades en las actividades de exportación y ampliar la base de empresas locales capaces de
competir internacionalmente, de tal forma que la competitividad se vuelva sustentable y se incrementen los ingresos
3. Aspectos socioculturales
54
María de la Luz Martín Carbajal
Cuadro 4
Competitividad: postulados del enfoque sociocultural
según descripción y autores representativos
29
Strange, 1988; Rosales, 1990; y Haque, 1991; Bradford, 1991, 1992; Abbot y Bredahl, 1992; Fajn-
zylber, 1998.
30
Además, la evaluación de la competitividad de un país requiere una visión que va más allá de los lími-
tes de la teoría del intercambio internacional para determinar el patrón de comercio y cómo éste es in-
fluenciado por la estrategia de la firma y la intervención gubernamental (Abbot y Bredahl, 1992).
31
Incluso Haque (1991) critica los modelos de Porter (1991) y Pérez (2001) porque aunque hacen hin-
capié en la armonización entre tecnología e instituciones no explican el éxito de los países de industria-
lización reciente que superaron las fuentes tradicionales en la producción manufacturera. Es decir, la vi-
55
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4. conclusiones
57
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5. Bibliografía
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62
María de la Luz Martín Carbajal
63
Recuento de los conceptos sobre competitividad
64
capítulo 3
Francisco López-Herrera
francisco_lopez_herrera@yahoo.com.mx
División de Investigación, Facultad de Contaduría y Administración, UNAM
1. Introducción
1
Ver, Feldstein (1976), Eaton (1981), Hartman (1988), Turnovsky (1993) y (1996), y Eicher y Turno-
vsky (1997).
2
Existen otras formas; por ejemplo, a través de una restricción cash-in advance o como costos de tran-
sacciones en la restricción presupuestal.
65
Una aproximación patinkiana al crecimiento económico
ce tecnológico, las innovaciones, las instituciones (reglas del juego), entre otros. En
este capítulo, bajo el supuesto de previsión perfecta, se caracteriza el equilibrio ma-
croeconómico en una economía monetaria. En contraste con el enfoque neoclási-
co en donde los modelos explican el crecimiento per cápita en términos de una tasa
exógena de cambio tecnológico, el modelo propuesto explica el crecimiento a tra-
vés de la tecnología, la tasa subjetiva de descuento, la tasa de interés, la tasa impo-
sitiva sobre los ingresos del capital y los parámetros de preferencias. Para ello se
combinan la tecnología Ak con el comportamiento racional de los agentes económi-
cos. Una diferencia importante entre los modelos típicamente endógenos y el mode-
lo propuesto, es que este último no conduce al crecimiento balanceado.3
El presente capítulo está organizado de la siguiente manera. En la siguiente sec-
ción se detallan las características de las unidades familiares que pueblan la eco-
nomía (gustos, dotaciones y tamaño de la población) y se establece la restricción
presupuestal de las familias vistas como consumidores. A través de la sección 3 se
introduce el comportamiento racional de las empresas como maximizadoras del va-
lor presente de los flujos de efectivo futuros. En la sección 4, para cerrar el modelo,
se introduce la restricción presupuestal consolidada del gobierno. En el transcurso
de la sección 5 se combinan el comportamiento racional de los consumidores y las
empresas con las acciones del gobierno a fin de caracterizar el equilibrio de previ-
sión perfecta. En la sección 6 se examina el bienestar económico (función de utili-
dad indirecta) de los agentes y se identifican sus determinantes. En la sección 7 se
presentan las conclusiones del trabajo destacando las limitaciones del modelo pro-
puesto y la agenda de investigación futura. Por último, un apéndice contiene las
condiciones de primer orden para el problema de la decisión de los consumidores.
2. Familias
N (t) = ent,
L(t) = u(t)N(t).
3
Para estudios de países de la OCDE consultar las referencias en Eicher y Turnovsky (1997).
66
Francisco Venegas-Martínez Francisco López-Herrera
donde M(t) es el acervo de dinero nominal y (t) Pes el nivel general de precios.
Los consumidores tienen previsión perfecta de la tasa de inflación, por lo tanto
con P(0) conocido, esto es, los consumidores conocen perfectamente la tasa a
la cual la inflación estará presentándose y, en consecuencia, conocerán el nivel ge-
neral de precios en cada instante t, de tal forma que:
P(t) = P(0)ext.
Una interpretación de esto es como sigue: suponga que el banco central sigue
una regla de oferta monetaria, por ejemplo, mantener la tasa de expansión mone-
taria en un nivel dado. Por supuesto, ocasionalmente, el banco central puede hacer
uso de su discrecionalidad y desviarse de dicho nivel, pero en promedio se man-
tendrá en el nivel dado. En el largo plazo, los agentes adivinarán la regla con todo
y el comportamiento discrecional, e inferirán que la inflación esperada es igual a
la observada.
Los familias son idénticas en gustos y dotaciones y obtienen utilidad de un bien
de consumo y activos (saldos reales) y desutilidad del trabajo y de pasivos (deuda);
ver, por ejemplo, Bardhan (1967) e Intriligator (1971) que también incluyen deuda
en la función de utilidad. Al tiempo t = 0 (el presente) el consumidor desea maximi-
zar la utilidad total descontada, U0, dada por:
(1)
, ,
, 0< ν < 1.
67
Una aproximación patinkiana al crecimiento económico
donde
i=r+π
1 + i = (1 + r)(1 + π)
con tal de que rπ<<1 (es decir, que el producto rπ sea despreciable). Se supo-
ne que los consumidores no quieren dejar riqueza real para al final. De esta manera,
hay una condición de transversalidad que se tiene que satisfacer:
Las condiciones de primer orden para la maximización de (1) sujeto a (2), después
de algunas sustituciones algebraicas (ver apéndice A), conducen a las siguientes re-
laciones de substitución entre consumo y balances reales, y entre deuda y trabajo,
respectivamente
68
Francisco Venegas-Martínez Francisco López-Herrera
(3)
y
(4)
(5)
y
(6)
(7)
y
(8)
3. Firmas
Existe una empresa representativa que produce bienes y realiza los pagos al capi-
tal y trabajo. Se supondrá que la empresa tiene acceso a la tecnología “y = Ak” (ver,
Barro y Sala-i Martin 1992, y Aghion y Howitt 1992 y 1998). La empresa maximi-
za el valor presente de sus flujos de efectivo (beneficios) descontados. Si se supone
que no hay ajustes en costos, el problema de decisión de la empresa se reduce a la
maximización de beneficios. En el equilibrio competitivo, con capital físico positi-
vo, los beneficios están dados por:
(10)
Se puede pensar en w = 0 como el salario sin ser aumentado por el capital hu-
mano. Ver, por ejemplo, Barro y Sala-i Martin (1995) donde cada individuo ofrece
inelásticamente una unidad de trabajo por unidad de tiempo a cambio de w = 0.
69
Una aproximación patinkiana al crecimiento económico
donde
(12)
(13)
γm = γM –π . (14)
5. Equilibrio macroeconómico
70
Francisco Venegas-Martínez Francisco López-Herrera
(15)
donde f(t) es la deuda externa total (pública y privada) per cápita y Y(t) denota
el capital neto de deuda externa total. El supuesto sobre la tecnología que asegura el
crecimiento en c(t), después de gravar el ingreso del capital, es:
(16)
6. Bienestar económico
(17)
(18)
donde
Observe que U0 < 0 cuando θ > 1 y U0 tiene signo ambiguo cuando θ < 1. Es
importante destacar que el bienestar económico depende directamente de la dota-
ción inicial de saldos reales, m(0), e inversamente del nivel de deuda inicial, d(0).
Asimismo, si la tasa de crecimiento de la población, n, aumenta, entonces el bien-
estar disminuye. Obviamente, el bienestar depende de la tecnología a través de A,
la tasa subjetiva de descuento, la tasa impositiva sobre los ingresos del capital y los
71
Una aproximación patinkiana al crecimiento económico
parámetros de preferencias. Por último, en virtud de (16), se tiene que, que siem-
pre que
(19)
y
(20)
en dY(t) / dt, donde c(0) tiene que ser determinado, entonces la solución para la
ecuación diferencial de primer orden no homogénea resultante en Y (t) es:
donde
Note que (17) implica Ψ > 0. También observe que se puede reescribir la rique-
za real como:
En consecuencia,
lo cual lleva a
72
Francisco Venegas-Martínez Francisco López-Herrera
Para garantizar el consumo positivo inicial, es necesario suponer que k(0) >
d(0) + b(0). Por lo tanto,
(22)
Lo cual proporciona la tasa de crecimiento del capital neto de deuda externa to-
tal. Observe que dicha tasa depende del coeficiente tecnológico, la tasa subjetiva de
descuento, la tasa de interés, la tasa impositiva sobre los ingresos del capital y el pa-
rámetro de preferencias sobre consumo y saldos reales. Con este último resultado
se caracteriza completamente el equilibrio macroeconómico de previsión perfecta y
crecimiento no balanceado.
7. Conclusiones
73
Una aproximación patinkiana al crecimiento económico
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74
Francisco Venegas-Martínez Francisco López-Herrera
Apéndice A
βc(t) β(1–θ)–1m(t)(1–θ)(1–β) e–(ρ–n)t = λ(t)(1–τc),
–(1–v)u(t)v(σ+1)d(t)σ(1–v)–ve–(ρ–n)t=λ(t)τrr,
de donde se obtiene
75
capítulo4
Introducción
1
En la teoría económica contemporánea se acepta el postulado de la asimetría de la información y
la inexistencia de información perfecta, razón por la cual el “contrato” aparece no sólo como el me-
dio a través del cual se vinculan los agentes económicos, sino también como el instrumento para re-
solver eventuales conflictos entre ellos. Una definición, en ese sentido, se encuentra en Macho-Stadler
y Pérez-Castrillo (1997) quienes consideran que un contrato es una promesa confiable entre dos partes
(“principal”-“agente”) en el cual se especifican las obligaciones para cada una de ellas, en caso de po-
sibles conflictos. En particular, se incluye el mecanismo de pagos bajo el cual el “agente” será compen-
sado por su esfuerzo. Estos autores hacen hincapié en el hecho de que el contrato sólo se puede basar
en variables verificables (información), de tal manera que éstas puedan ser constatadas por un árbitro
independiente para garantizar el cumplimiento del contrato. Existen también las variables no verifica-
bles, pero éstas no pueden tomarse como base para el establecimiento del contrato dado que no se pue-
den medir o constatar.
*Una versión anterior de este trabajo, en coautoría con María de la Luz Martín, se publicó en “Investi-
gación Económica” Vol. LIX: 228, abril-junio, 1999, Revista de la Facultad de Economía de la Univer-
sidad Nacional Autónoma de México.
77
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
yor detalle que otros de acuerdo con el propósito central del trabajo. Al tomar a la
información y el conocimiento como determinantes del funcionamiento de la em-
presa moderna, se pretende recoger algunos elementos útiles para caracterizar las
formas de comportamiento en las relaciones inter-empresariales, el aprendizaje y la
innovación tecnológica.
Al mismo tiempo, este artículo tampoco pretende abordar in extenso el tema de
la organización industrial. Se trata, en cambio, de examinar una forma de organiza-
ción industrial específica: la formación de redes entre agentes económicos (provee-
dores y compradores) que intercambian información y conocimientos para estable-
cer relaciones mercantiles y tecnológicas, a la vez que promueven la innovación y
el aprendizaje tecnológico.
Por otra parte, las preguntas que este trabajo pretende responder son las siguien-
tes: En el establecimiento de relaciones mercantiles entre empresas proveedoras y
compradoras ¿qué importancia adquieren la información y el conocimiento para
propiciar la innovación y el aprendizaje tecnológicos? ¿Cuáles son los postulados
que sostienen algunas de las nuevas teorías de la firma acerca del papel de la infor-
mación y el conocimiento en el funcionamiento de la empresa contemporánea? y
¿Cuáles son las causas que explican el establecimiento de vinculaciones mercanti-
les y tecnológicas a través de un contrato entre dos agentes económicos conocidos
como proveedores y compradores?
Para responder a dichas preguntas se recurre a los enfoques más conocidos en
la teoría económica de la empresa los cuales, ya sean éstos neoclásicos o de otra fi-
liación teórica, tienen un punto de partida común: la empresa responde a problemas
de información y es una fuente de conocimientos (Fransman, 1994)2.
Para algunos autores como Alchian y Demsetz (1972), Jensen y Meckling
(1974), Coase (1937), Williamson (1975-1985), Simon (1959-1972), la empresa
responde a los problemas de información, por lo que el éxito de la relación entre
productores y clientes depende de que los canales de comunicación establecidos en-
tre ambos agentes sean adecuados.
Asimismo, para Nelson y Winter (1982), Penrose (1959), Chandler (1962-
1977), Teece (1977) y Marshall (1891), la empresa es una fuente de conocimien-
to. De esta forma, de acuerdo con los autores estudiados en este ensayo, el éxito o
fracaso de la relación entre productores y clientes, en términos de la actitud de los
agentes hacia el aprendizaje tecnológico y la innovación, depende de la calidad del
intercambio de información y conocimientos tecnológicos que se logren establecer
entre empresas proveedoras y compradoras.
Por consiguiente, el supuesto que guía esta revisión teórica es que existe una es-
trecha relación de causalidad entre la creciente importancia de la información y el
conocimiento, con la innovación y el aprendizaje tecnológico propiciada por la pro-
liferación de redes entre empresas proveedoras y ensambladoras.
Ahora bien, como punto de partida de este trabajo (subsección 1.1) se establece
la incompatibilidad entre la teoría de la competencia perfecta y la existencia de re-
laciones inter-empresas proveedoras y clientes. Posteriormente se examina (sección
2
El ensayo de este autor sirve -en parte- como modelo para este trabajo; no obstante, en aquel no se plan-
tea como objetivo el tema de la relación entre empresas proveedoras y usuarias, ni el de la innovación y
el aprendizaje tecnológico. Véase gráfica 1.
78
Salvador Padilla Hernández
3
Se le conoce como el Consenso de Washington al listado de recomendaciones de política económica
postuladas por los organismos financieros internacionales a partir del documento, elaborado por John
Williamson, del influyente Institute for International Economics.
79
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
4
En los puntos 1.2.1, 1.2.2 y 1.2.3 se tratan con mayor detalle los conceptos de racionalidad limitada,
información asimétrica, comportamiento honesto u oportunista de los agentes económicos, costos de
transacción, etc.
80
Salvador Padilla Hernández
reduce su flexibilidad para interactuar con otras empresas sobre todo cuando se tra-
ta de productos específicos y con alto grado de complejidad tecnológica. El tercer
tipo de posibilidad, se refiere al mercado de competencia perfecta, el cual es me-
nos plausible en función de sus bajas o nulas potencialidades para la innovación y
el aprendizaje tecnológico.
En el mismo sentido, desde el punto de vista de la expansión geográfica de la
empresa multinacional, Casson (1987: 1) añade que la teoría neoclásica (que ve a la
empresa sólo como una función de producción, uninacional y de una sola planta in-
dividual), bajo condiciones de competencia perfecta se convierte en un caso espe-
cial sumamente trivial.
Ahora bien, la siguiente gráfica muestra, de manera esquemática, qué autores
están más interesados por los problemas de información y cuáles por los problemas
del conocimiento. Se trata sólo de un resumen que no excluye la posibilidad de con-
vergencias y divergencias teóricas más complejas entre concepciones y autores, al-
gunos de los cuales se analizan con cierto detalle en este trabajo.
Gráfica 1
ALGUNOS ENFOQUES SOBRE LA TEORÍA DE LA EMPRESA
¿Q U É ES LA EM PR ESA? ¿Q U É ES LA EM PR ESA?
A L C H IA N Y D E M S E T Z ( 1 9 7 2 ) : N E L S O N Y W IN T E R ( 1 9 8 2 ) :
F O R M A E S P E C ÍF IC A D E O R G A N IZ A R D E P O S IT A R IA D E C O N O C I-
L A A C T IV ID A D P R O D U C T IV A C O N LA EM PRESA COM O LA EM PRESA COM O M IE N T O P R O D U C T IV O , L A S
E Q U IP O S D E P R O D U C C IÓ N . FUENTE DE M ÁS R EN TABLES D ESPLAZAN
RESPUESTA A LOS
A LAS M EN O S R EN TABLES.
PROBLEM AS DE C O N O C IM IE N T O
J E N S E N Y M E C K L IN G ( 1 9 7 6 ) :
C O N J U N T O D E R E L A C IO N E S IN F O R M A C IÓ N P E N R O S E (1 9 5 9 ) :
C O N T R A C T U A L E S E N T R E IN D IV I- O R G A N IZ A C IÓ N A D M IN IS T R A T IV A
D U O S : T E O R ÍA D E L A A G E N C IA , C O L E C C IÓ N D E R E C U R S O S
C O N T R A T O E N T R E P R IN C IP A L P R O D U C T IV O S ” , M A T E R IA L E S
IN C E R T ID U M B R E IN C E R T ID U M B R E
Y AGENTE. HUMANOS.
C O A S E (1 9 3 7 ): C H A N D L E R (1 9 6 2 -1 9 7 7 ):
L A E M P R E S A C O M O S U S T IT U T O IN F O R M A C IÓ N R A C IO N A L ID A D
N Ú C L E O H IS T Ó R IC O D E L O S
D E L M E C A N IS M O D E P R E C IO S . L IM IT A D A
A S IM É T R IC A N E G O C IO S , C A P A C ID A D E S
D IS P O N IB IL ID A D Y C O S T O S D E
O R G A N IZ A C IO N A L E S D IN Á M IC A S .
L A IN F O R M A C IÓ N , T E O R ÍA D E L A
E C O N O M ÍA S D E E S C A L A Y D E
O R G A N IZ A C IÓ N Y E C O N O M ÍA D E
COBERTURA, PROCESOS DE
L O S C O S T O S D E T R A N S A C C IÓ N . R A C IO N A L ID A D R U T IN IZ A C IÓ N D E
A P R E N D IZ A J E E N P R O D U C C IÓ N ,
L IM IT A D A A C T IV ID A D E S C O M E R C IA L IZ A C IÓ N Y D IS T R IB U C IÓ N .
W IL L IA M S O N ( 1 9 7 5 - 1 9 8 5 ) : C O M O F U N C IÓ N D E
EL PR O BLEM A D E LA EM PR ESA ES
L A C A N T ID A D D E T E E C E (1 9 7 7 ):
E L C O M P O R T A M IE N T O
IN F O R M A C IÓ N P R O P IE T A R IA D E “ C A P A C ID A D E S
O P O R T U N IS T A , M Á S Q U E L A O P O R T U N IS M O
C L A V E ” O “C O R E C O M P E T E N C E S ”,
IN F O R M A C IÓ N A S IM É T R IC A ; IN T R A E IN T E R -
L O Q U E L A S D IF E R E N C IA D E
ÉSTA SE PUEDE SUBSANAR E M P R E S A R IA L OTRAS EM PRESAS.
C O N U N C O M P O R T A M IE N T O
HONESTO.
C R E A C IÓ N D E C O N O C IM IE N T O M A R S H A L L (1 8 9 1 ):
S IM O N ( 1 9 5 9 - 1 9 7 2 ) : A C T IV O S O R G A N IZ A C IO N A L E L C A P IT A L IN C L U Y E
C O N O C IM IE N T O Y O R G A N IZ A C IÓ N .
C O O P E R A C IÓ N E N T R E IN D IV ID U O S E S P E C ÍF IC O S ALM ACENADO
C O N E L C O N O C IM IE N T O S E
P A R A P O T E N C IA R S U R A C IO N A L ID A D E N R U T IN A S
IN C R E M E N T A L A P R O D U C C IÓ N ,
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A continuación en las secciones 1.2 y 1.3 se examinan cada uno de los dos en-
foques sobre la teoría de la empresa contemporánea esquematizados en la gráfica
anterior. Se comienza con el análisis de la empresa como respuesta a los problemas
de información y se vincula con la relación proveedor-comprador, el aprendizaje y
la innovación tecnológica. El denominador común que caracteriza este enfoque es
la existencia de información asimétrica, racionalidad limitada, oportunismo, incer-
tidumbre y la creación de activos específicos.
81
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
5
Coase, R., (1937), “La naturaleza de la empresa”, en La naturaleza de la empresa. Orígenes, evolución
y desarrollo, en Williamson y Winter (comps.), FCE, México, 1996.
82
Salvador Padilla Hernández
6
Para ello, Coase (1937) se apoya en A. Marshall, quien asigna a la organización el estatus de “cuarto
factor de producción”; en J.B. Clark quien visualiza la actividad coordinadora del empresario; y en F.
Knight quien, a su vez, introduce el papel del administrador.
7
Los precios relevantes dependen de la interpretación que se dé al concepto “acumulación gradual de
experiencia”. Si se supone que los individuos acumulan experiencia en relación, no sólo con su propio
sistema de datos, sino también con respecto a los gustos y preferencias de los demás, adquirirá gradual-
mente la capacidad para juzgar los precios de equilibrio de un mercado dado; y, por lo tanto, la propor-
ción de la cantidad total de bienes intercambiados en cada período, a las tasas finales de intercambio,
crecerá continuamente hasta que cubra el total de los intercambios, puesto que a largo plazo será con-
veniente para todos los individuos realizar tantas transacciones como sea posible a los precios de equi-
librio (Kaldor, 1973: 33-34)
83
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
es posible que el empresario no pueda asignar los recursos de la mejor manera po-
sible; y, 3) podrían aumentar los precios de oferta de uno o más factores de la pro-
ducción.
Coase advierte que con el uso de las tecnologías de la información de su tiem-
po, las posibilidades de organización espacial tenderían a aumentar la dimensión de
la empresa; pero, por otro lado, está pensando en que el límite de crecimiento de una
empresa está determinado por la capacidad de control y gestión del empresario indi-
vidual. Sin embargo, con el surgimiento de la empresa multidivisional moderna ca-
racterizada por la delegación de responsabilidades; las nuevas formas de organiza-
ción; y, las nuevas tecnologías de la información, la conducción internacional de las
grandes corporaciones ya no es más un problema individual o familiar sino de con-
ducción profesionalizada de la corporación moderna.
Por otra parte, una empresa pequeña puede ser más eficiente que una grande en
la asignación de los recursos y en la producción especializada de cierto tipo de bie-
nes y servicios. Esas son las razones de por qué una empresa grande no crece al in-
finito y prefiere acudir a otras empresas proveedoras. De ahí la actualidad y perti-
nencia de la contribución coasiana en el análisis de las relaciones entre proveedores
y clientes.
No obstante, debe señalarse también que la principal debilidad del análisis coa-
siano radica en la división dicotómica que dicho autor hace entre mercados y jerar-
quías, la cual excluye la posibilidad de una tercera forma de asignación de los recur-
sos económicos: la coordinación inter-empresarial proveedor-comprador.
8
Véase, además, Simon (1957), los ensayos 14, “A Behavioral Model of Rational Choice (pp. 241-260);
y 15, “Rational Choice and the Structure of the Environment”, (pp. 261-273) en Models of Man.
84
Salvador Padilla Hernández
asimétrica sugiere que los participantes en una transacción económica tienen una
información desigual acerca del objeto a negociar9.
Y agrega: “...el oportunismo se refiere a la revelación incompleta y distorsio-
nada de la información, especialmente a los esfuerzos premeditados para equivo-
car, distorsionar, ocultar, ofuscar o confundir de otro modo. El oportunismo es res-
ponsable de las condiciones reales o aparentes de asimetría de la información que
complican enormemente los problemas de la organización económica” (William-
son, 1989: 57).
Asimismo, sugiere que el oportunismo se puede contrarrestar de manera subs-
tancial a través del establecimiento ex ante de cláusulas de salvaguardia apropiadas.
La incertidumbre podría desvanecerse si los individuos fueran enteramente abiertos
y honestos en la búsqueda del interés propio.
Por su parte, Simon argumenta que un mundo con abundante información no
resuelve las dificultades que enfrentamos para tratar de comportarnos razonable-
mente. La abundancia de información acentúa -paradójicamente- la escasez de me-
dios para su manejo.
En el mismo sentido, Andersen (1991), propone que los paradigmas tecno-eco-
nómicos (vistos desde la perspectiva microeconómica, sean interpretados como
interfaces típicas entre proveedores y clientes), señala que éstos son sistemas al-
tamente complejos ricos en información, donde los actores económicos tienen ca-
pacidades limitadas de acopio y cómputo de la misma.
Los paradigmas tecnoeconómicos en la escala microeconómica que propone
Andersen no sólo son una forma de coordinación del conocimiento tecnológico,
sino también de coordinación entre empresas proveedoras y usuarias para el inter-
cambio de un tipo particular de componentes en donde se comparten diseños y es-
pecificaciones entre estos tipos de agentes económicos. El éxito de la relación, la in-
novación y el aprendizaje depende de que la interface que se construya sea rica en
intercambio de información y conocimientos.
9
Willianson (1989: 54) es aun más contundente en la definición del oportunismo: “Entiendo por opor-
tunismo la búsqueda del interés propio con dolo. Esto incluye algunas formas más flagrantes tales como
la mentira, el robo y el engaño, pero no se limita a ellas. Más a menudo, el oportunismo comprende al-
gunas formas más sutiles de engaño. Se incluyen aquí tanto las formas activas como las pasivas, y tanto
los tipos ex ante [“selección adversa”] como los tipos ex post [“azar moral”].
10
Al medir los costos de negociación que privan en el mercado (como son los costos relacionados con
la banca, los seguros, las finanzas, las ventas al mayoreo y el comercio al menudeo o, la contratación de
abogados y contadores, etc.) en la economía de Estados Unidos, Wallis y North (1986) encontraron que
más del 45% del ingreso nacional se dedico a las negociaciones y, además, que este porcentaje se había
incrementado aproximadamente en un 25% desde hace un siglo.
85
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
11
Arrow concede tal importancia a los costos de transacción que por encima de las fallas del merca-
do, esos costos pueden obstruir o impedir la formación de mercados organizados, como los que se es-
tablecen entre empresas productoras y usuarias (véase Williamnson, 1989, nota de pie de página núm.
8, pp. 29-30).
12
Williamson (1989: 61) propone que “Una teoría visionaria de la organización económica requerirá que
se identifiquen los factores responsables de las diferencias existentes entre las transacciones”.
86
Salvador Padilla Hernández
13
Existen cuatro tipo de activos específicos: 1) la especificidad de sitio, alude a la proximidad de la re-
lación productiva entre proveedores y clientes; se caracterizan por su inmovilidad, lo que implica un alto
costo de establecimiento o de reubicación para dar continuidad a la relación de intercambio bilateral du-
rante la vida útil de los activos. 2) La especificidad de los activos físicos se refiere a las características
materiales de los mismos y, por lo tanto, constituyen un dato para que el comprador pueda tomar la deci-
sión de producirlo internamente, en lugar de adquirirlo en el mercado. 3) La especificidad de los activos
humanos tiene que ver con la calificación, la habilidad, el aprendizaje y el conocimiento de las personas
involucradas en el proceso productivo. 4) Los activos dedicados, se refieren a las inversiones realizadas
para expandir la planta existente a causa de la demanda de un comprador particular.
87
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
14
La integración vertical puede definirse como la propiedad o control, por parte de una empresa, de las
diferentes fases del proceso productivo. Se habla de “integración hacia abajo” para las fases que van des-
de la producción a la distribución y de “integración hacia arriba” para las fases que van desde la obten-
ción de materias primas a la producción. La integración vertical puede llevarse a cabo gracias a nuevas
inversiones y/o mediante concentración vertical y adquisición de empresas existentes y cuyas activida-
des se sitúan en diferentes fases de la producción. Uno de los móviles esenciales de la integración verti-
cal es la búsqueda de una mayor eficiencia y la reducción de los costos de transacción. Por el contrario,
la integración horizontal tiene lugar entre empresas que producen y venden los mismos bienes, es decir
entre empresas competidoras (OCDE, 1995).
15
Williamson distingue dos tipos de integración: 1) la integración “mundana”, comprende la integración
de las etapas de producción sucesivas dentro de una tecnología dada y, 2) la integración de las activida-
des periféricas. Esta última comprende, a su vez, la integración hacia atrás (materias primas); lateral (in-
tegración de componentes) y hacia delante (distribución).
88
Salvador Padilla Hernández
16
Para Alchian y Demsetz “las relaciones contractuales no son la esencia de la organización”. [Cabe des-
tacar que los autores se refieren explícitamente a que esas relaciones no son de largo plazo], porque “ha-
blar de administrar, dirigir o asignar tareas a largo plazo es una [manera] engañosa [de ver los contratos]
porque el empleador está continuamente involucrado en negociaciones contractuales en los términos que
sean aceptables para ambas partes [...] que de ninguna manera son relaciones a largo plazo”.
17
Es decir, los miembros del equipo pueden dejar de evadir sus responsabilidades como resultado del
monitoreo y control. Específicamente, se asume que los beneficios del monitoreo y control, que surgen
al elevarse la productividad, excederían los costos de dicha actividad.
89
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
90
Salvador Padilla Hernández
18
Este texto recoge toda una tradición de análisis científico que abarca no sólo a la biología, sino tam-
bién a otras ciencias, además de la economía. Dicha obra se ha convertido en referencia obligada de un
buen número de autores que comparten el mismo enfoque teórico, mediante el cual desarrollan una teo-
ría evolucionista de las capacidades y el comportamiento de las empresas que operan en un ambien-
te de mercado.
91
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
92
Salvador Padilla Hernández
19
Uno de los primeros autores en percatarse de la importancia del conocimiento tácito fue Hayek (1945),
al plantear que el conocimiento de las circunstancias de las que debemos valernos nunca existen en for-
ma concentrada o integrada, sino sólo como pequeñas fracciones de conocimiento incompletas y con-
tradictorias. Bajo esta perspectiva, el uso eficiente del conocimiento tiene varios problemas: a) la forma
como éste se comunica o transmite entre las personas, b) su dispersión entre las personas, c) la existen-
cia de diferentes tipos de conocimientos y d) las circunstancias particulares de tiempo y lugar. En con-
secuencia Hayek propugna por la descentralización del conocimiento porque sólo así se puede asegurar
que el conocimiento de las circunstancias particulares de tiempo y lugar pueden ser utilizadas para adap-
tarse a los cambios tecnológicos.
93
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
ca en la medida en que dichas bases sean heterogéneas. Cuando una empresa usua-
ria establece un acuerdo tecnológico con una proveedora, detenta un conjunto de
saberes diferentes a los que posee su contraparte. Sin embargo, con el acuerdo tec-
nológico se busca lograr la homogeneización del conocimiento.
Estos tres mecanismos son exitosos para la innovación cuando se logra la coor-
dinación cognoscitiva entre las empresas involucradas en el acuerdo. Ahora bien, la
dinámica de tales acuerdos no se puede analizar sin referirse a las características de
las rutinas desarrolladas en ellos.
Algunas de las rutinas equivalen a la creación de activos específicos, tangibles
o intangibles: activos tecnológicos, activos relacionales y activos organizacionales.
El primer tipo de activos son, por ejemplo, aquellos que pueden difundirse y tienen
una aplicación más amplia.
Los activos relacionales dependen de la creación de lenguajes y confianza per-
sonal y organizacional; mientras que los activos organizacionales se refieren a la
construcción de meta-reglas (reglas que sirven para reorganizar el conocimiento)
y que permiten establecer la transferibilidad de soluciones técnicas o la exclusivi-
dad de tales soluciones.
94
Salvador Padilla Hernández
“El corazón en la historia de los negocios es la firma” (Chandler, 1993: 24). Tal es la
premisa en que se apoya este autor para examinar, desde el punto de vista histórico,
el aprendizaje y el cambio tecnológico. La segunda premisa es que el papel prima-
rio de las empresas en el cambio tecnológico ha sido el desarrollo, no el descubri-
miento, de nuevos productos y procesos. Más aun añade que la investigación inno-
vadora ha corrido a cargo de las firmas más que de las agencias gubernamentales20.
Desde la perspectiva de la empresa pueden ser discernidos tres tipos de desarro-
llos. El primero es el aprendizaje implicado en la comercialización inicial de nue-
vas innovaciones tecnológicas. El segundo es la institucionalización del proceso de
aprendizaje para desarrollar nuevos bienes y máquinas, a través de la formación de
organizaciones especializadas y separadas al interior de una firma ya establecida,
pero distintas de los departamentos de producción, distribución y compras. El ter-
cero es el mejoramiento continuo y acumulativo de los productos y procesos exis-
tentes que ocurren al interior de una firma establecida.
Chandler hace hincapié en la relación estrecha entre las empresas, el proceso
de aprendizaje y el cambio tecnológico. Por otra parte, define las características de
la empresa moderna e incluye el aprendizaje “by selling”. Esto es, al aprendizaje en
el proceso de producción agrega el aprendizaje en el proceso de distribución y co-
mercialización internacional.
Con la integración del diseño, la producción y ventas, las empresas se convirtie-
ron en el conducto de enlace continuo entre el proceso tecnológico y las necesidades
20
Esto sin tomar en cuenta la investigación atómica y aeroespacial a cargo de los departamentos de De-
fensa y Energía, de los Estados Unidos.
95
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
96
Salvador Padilla Hernández
su: grupos de aliados, empresas independientes con sus propios bancos y compañías
comercializadoras internacionales.
Por último, para Chandler la empresa puede ser vista como una acumulación de
capacidades organizacionales dinámicas, en las cuales radica la competitividad de
la empresa. Dichas capacidades dependen del conocimiento, la habilidad, la expe-
riencia, los equipos de trabajo y las capacidades humanas organizadas para explotar
el potencial del proceso tecnológico.
En cambio, y para continuar con los autores enlistados arriba, de acuerdo con
Penrose la empresa es a la vez una organización y un acervo de recursos producti-
vos, humanos y materiales en donde la función económica primaria de una firma in-
dustrial es hacer uso de los recursos productivos con el propósito de proveer bienes
y servicios a la economía, de acuerdo con el desarrollo de un plan llevado a efecto
dentro de una empresa (citado por Fransman, 1994: 742).
Para Teece, por su parte, la cuestión de la estrategia de la empresa es el tema
central. Teece también visualiza a la empresa como un depósito de conocimientos,
y del mismo modo propone voltear hacia las capacidades dinámicas de la empre-
sa. Así, la firma es vista como un conjunto de capacidades que se materializan en
el conocimiento.
Mientras que las capacidades de la empresa son el efecto del aprendizaje, las
oportunidades tecnológicas y el proceso de selección en cualquier período de tiem-
po, estas capacidades heredadas son al mismo tiempo su potencial y su limitación.
En otras palabras las capacidades de una firma no pueden ser adquiridas ni transfe-
ridas fácil, rápidamente y a bajo costo.
Existe un concepto central en el pensamiento de Teece denominado capacida-
des clave (“core competence”), las cuales define como una serie de habilidades di-
ferenciales, activos complementarios y rutinas, que constituyen la base de las capa-
cidades competitivas y las ventajas permanentes en una empresa particular.
Por último, Marshall fue uno de los primeros economistas en considerar que el
capital de una empresa está integrado, en buena parte, por conocimientos y organi-
zación. Más aun, llegó a afirmar que el conocimiento es la máquina de producción
más poderosa, la cual permite dominar a la naturaleza y forzarla a satisfacer las ne-
cesidades humanas.
Conclusiones
Del examen de las diferentes teorías de la empresa expuestas en este trabajo surgen
tres tipos de conclusiones:
97
Teorías de la Empresa y el Aprendizaje Tecnológico: La Relación entre Productores y Clientes
tores y clientes.
2. Por otro lado, resulta innegable que a cada una de las teorías de la firma
examinadas en este capítulo se les reconoce importantes contribuciones que han
enriquecido la teoría contemporánea de la empresa, particularmente de la em-
presa industrial. De la misma manera se les señalan algunas deficiencias teó-
ricas. Por ejemplo, tanto Coase como Williamson simplifican el análisis, no la
realidad, con la dicotomía “comprar o producir”, sin poner mayor atención,
como lo hacen, por ejemplo, Lundvall o Richardson, entre otros autores, en el
hecho de que entre el mercado y las jerarquías existen los mercados organiza-
dos, la cooperación o la coordinación interempresarial y la “cuasi-integración
vertical” (Baudry, 1995). Dado lo anterior, se infiere que:
3. La empresa moderna, (y sus diversas formas de cooperación y competen-
cia inter-empresarial, entre ellas las redes de proveedores y clientes, es un or-
ganismo complejo y multidimensional donde la información y el conocimiento
tecnológico han adquirido, cada vez más, un papel protagónico en la conduc-
ción estratégica de los negocios locales, regionales o internacionales.
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99
capítulo 5
Introducción
En donde:
xim = cantidad consumida por la unidad i del input m.
yis = cantidad producida del output s por la unidad i.
vm = precio sombra del input m.
us = precio sombra del output s.
Este mismo programa se resuelve para todas las unidades de la muestra, obteniendo
cada una de ellas sus precios sombra más favorables y sus correspondientes índices
de eficiencia relativa. (García, 2006: 27).
Si se relaja la condición CRS y se sustituye por el supuesto VRS, de mayor rea-
lismo, será necesario modificar el programa matemático anterior de la siguiente ma-
nera (Banker, Charnes y Cooper, 1984):
102
Rodrigo Gómez Monge manuel ricardo romo de vivar mercadillo
103
Una revisi ón teórica/referencial de las aproximaciones DEA
Cuadro 1
Ventajas y desventajas de los modelos DEA
Ventajas Desventajas
Fuente: Elaboración propia con base en la información de: Navarro Chávez, José Cesar Lenin Navarro
(2005), “La eficiencia del sector electico en México”, ed. Morevallado, México.
104
Rodrigo Gómez Monge manuel ricardo romo de vivar mercadillo
105
Una revisi ón teórica/referencial de las aproximaciones DEA
terminando los niveles de eficiencia técnica relativa entre hospitales de baja com-
plejidad y la hipótesis a probar es que una de las principales razones para que las
instituciones prestadoras de servicios de salud públicas no operen de manera efi-
ciente en el mercado, es el sobredimensionamiento en su recurso humano. Como
conclusión principal de la investigación se encontró que alrededor del 70% de las
instituciones analizadas, aquellas que mostraron ineficiencia técnica relativa en su
proceso de producción, presentaron sobredimensionamiento en sus recursos huma-
nos. Esto es, dado un nivel de producción, estas instituciones hubieran podido al-
canzarlo con un nivel menor de insumos.
Romero, Carlos; Javier Maquieyra y Gustavo Ferro (2007) emplean la metodo-
logía DEA al sistema eléctrico argentino. Solo aplican esta metodología y explican
los resultados de eficiencia obtenidos, así como la validación del modelo como una
buena herramienta para la generación de esta información.
Ruiz Hernández, Álvaro (2004) estudian la aplicación del modelo DEA a las
fiscalías de Colombia, toman el modelo de rendimiento variables a escala, ya que
cada una de las unidades presentan variaciones: algunas tienen rendimientos con-
tantes, otras decrementales y otras incrementales.
Sharma, Khem R.; PingSun Leung y Lynn Zane (s/f) emplean la metodología
DEA para evaluar la eficiencia en las librerías del sistema pública de Hawái.
Por último, Thanassoulis, E; Mika Kortelainen, Geraint Johnes y Jill Johnes
(2008) realizan un análisis de eficiencia, a partir del modelo DEA y de regresión,
aplicado al sistema de educación en Reino Unido. Concluyen que el sector educati-
vo no se puede evaluar como un todo, sino con las particularidades que tiene.
En la tabla 2 se presentan las variables utilizadas, así como los países, periodo
muestral y el tipo de estimación empleado.
Cuadro 2
Estudios relacionados con la aplicación del modelo DEA
106
Rodrigo Gómez Monge manuel ricardo romo de vivar mercadillo
-- Número de
académicos.
-- Número de
personal de staff
(administrativos y -- DEA con retornos
Halkos, George E.; Nickolaos G.
técnicos -- Enseñanza. constantes a escala.
Tzeremes, Stravos A. Kourtzidis Grecia 2009-2010
académicos). -- Investigación. -- DEA con r etornos
(2010)
-- Número de variables a escala.
estudiantes.
-- Número de
recursos
económicos.
-- Longitud de
muele. -- DEA con retornos
Infante Jiménez, Zoe y Gutiérrez -- Superficie de la México y Estaos constantes a escala.
-- TEU´s movidos. 2008
Ortiz (2009) terminal. Unidos -- DEA con retornos
-- Número de total variables a escala.
de grúas porticas.
-- Gastos en
-- Publicación de
investigación y
artículos de
desarrollo. -- DEA con retornos
investigación en las
Kocher, Martin G.; Mikulás Luptácik, -- Número de 21 países de la 1980-1998 (datos constantes a escala.
10 principales
Matthias Sutter (2001) universidades con OECD panel). -- DEA con retornos
revistas de
departamentos de variables a escala.
divulgación
economía.
internacionales.
-- Total de población.
-- Horas de trabajo
Korhonen, Pekka; Aapo Siljamäki y por hombre. -- Ventas. No definido (datos -- DEA con retornos
Finlandia
Margareta S oismaa (1998) -- Espacio de -- Utilidad neta. panel). constantes a escala.
ventas.
-- Distribución de
GW/h
-- Pequeños
consumidores.
-- Grandes
Laurens Cherchyer y Thierry Post -- Costos consumidores. -- DEA con retornos
Holanda 2001-2003
(2001) controlables. -- Dem anda de más de constantes a escala.
110 voltios.
-- Demanda de menos
de 110 voltios.
-- Redes.
-- Transformadores.
-- Inscripción de
alumnos en pregrado.
-- Inscripción de
alumnos en pregrado,
en el área de ciencias.
-- Inscripción de
-- Facultades de
alumnos en pregrado,
tiempo completo en
en otras áreas del
ranking de calidad.
conocimiento.
-- Facultades de
-- Inscripción de
tiempo completo -- DEA con retornos
McMillan y Datta. (1998) alumnos en programas Canadá 1992-1993
que reciben becas. constantes a escala.
de grado.
-- Gastos,
-- Inscripción de
excluyendo salarios.
alumnos en programas
-- Gastos de
de maestría.
operación.
-- Inscripción de
alumnos en programas
de doctorado.
-- Gastos en
investigación.
-- Bacas otorgadas.
-- Hits.
-- Homeruns.
-- Porcentaje de
bateo.
-- Porcentaje de
embasado.
-- Porcentaje de
bases robadas.
-- Carreras
anotadas.
-- Carreras por -- DEA con retornos
Miceli y Volz (2010) -- Sin definir. Estados Unidos. 1871-2009
turno al bat. constantes a escala.
-- Partidos ganados.
-- Ponches.
-- Porcentaje de
carreras limpias.
-- Porcentaje de
ganados.
-- Ponches por
partido.
-- Bases por bolas
otorgadas.
-- Trabajo
108
Rodrigo Gómez Monge manuel ricardo romo de vivar mercadillo
109
Una revisi ón teórica/referencial de las aproximaciones DEA
Tabla 3
Resumen de modelos matemáticos para determinar
la eficiencia
110
Rodrigo Gómez Monge manuel ricardo romo de vivar mercadillo
Fuente: Pastor, José Manuel (1995) “Eficiencia, Cambio Productivo y Cambio Técnico en los Bancos y
Cajas de Ahorro Españolas: Un Análisis Frontera no Paramétrico”, WP-EC 95-09, Editor: Instituto Valen-
ciano de Investigaciones Económicas S.A. Primera edición, Junio 1995.
111
Una revisi ón teórica/referencial de las aproximaciones DEA
Tabla 4
Resumen de estudios relacionados con el sistema
bancario
X1=n° de empleados
Análisis de la eficiencia X2=Capital físico Y1=prestamos -- Influencias de 89%
Elyasiani y y tasa de cambio técnico X3=Depósitos de hipotecarios. -- Progreso técnico entre 1980
Mehdian para una muestra de 191 ahorro, plazo y Y2=prestamos industriales DEA y 1985
(1990b) bancos en los años 1980 Certificados de y comerciales -- Progreso técnico no neutral
y 1985. Depósito. Y3=otros prestamos (sesgo hacia el trabajo).
X4= Depósitos vista.
Análisis comparativo de
la eficiencia de 80 X1=Certificados de
bancos de propiedad de Depósito y deposito de -- Eficiencia MOBs 0.89% >
Y1=prestamos
accionistas de ahorro y plazo Eficiencia NMOBs 0.87%
hipotecarios.
Elyasiani y comunidades X2=Capital Físico. -- Mayor eficiencia asignativa,
Y2=prestamos industriales
Mehdian minoritarias (MOB) en X3=n° de empleados. DEA técnica, y técnica pura de
y comerciales.
(1992) relación a los de Coste total= coste de MOBs.
Y3=inversiones en
comunidades no financiamiento+Depósi -- NMBOs más eficiente a
acciones
minoritarias (NMOB) en tos+salarios+otros escala.
1988. Descomposición gastos operativos.
de la eficiencia.
Variables.
Dependientes:
-- Costes totales.
Precios:
-- W1=Gastos Y1=depósitos vista Frontera gruesa de
-- Regreso técnico.
Análisis de cambio personales/n° Y2=depósitos plazo y costes y funciones
-- Resultados similares bajo
técnico de una muestra empleados ahorro medias
Humphrey las tres diferentes funciones
de 638 bancos -- W2=Gastos de Y3=prestamos hipotecarios translogarítmica
(1993) estimadas.
estadounidenses entre inmuebles y Y4=prestamos industriales con dummies
-- Menor regreso técnico en
1977-88. amortizaciones/capital y comerciales temporales o con
grandes bancos.
físico. Y5=prestamos a plazos tendencia.
112 -- W3=tipo de interés
de depósitos.
-- W4= tipo de interés
fondos captados.
Y1=prestamos hipotecarios
Análisis de la eficiencia X1=n° de empleados
Y2=prestamos comerciales -- Ineficiencias de 70%, la
bancos de propiedad de Depósito y deposito de -- Eficiencia MOBs 0.89% >
Y1=prestamos
accionistas de ahorro y plazo Eficiencia NMOBs 0.87%
hipotecarios.
Elyasiani y comunidades X2=Capital Físico. -- Mayor eficiencia asignativa,
Y2=prestamos industriales
Mehdian minoritarias (MOB) en X3=n° de empleados. DEA técnica, y técnica pura de
y comerciales.
(1992) relación a los de Coste total= coste de MOBs.
Y3=inversiones en
comunidades no financiamiento+Depósi -- NMBOs más eficiente a
acciones
minoritarias
Rodrigo (NMOB) en
Gómez tos+salarios+otros
Monge manuel ricardo romo de vivar mercadillo escala.
1988. Descomposición gastos operativos.
de la eficiencia.
Variables.
Dependientes:
-- Costes totales.
Precios:
-- W1=Gastos Y1=depósitos vista Frontera gruesa de
-- Regreso técnico.
Análisis de cambio personales/n° Y2=depósitos plazo y costes y funciones
-- Resultados similares bajo
técnico de una muestra empleados ahorro medias
Humphrey las tres diferentes funciones
de 638 bancos -- W2=Gastos de Y3=prestamos hipotecarios translogarítmica
(1993) estimadas.
estadounidenses entre inmuebles y Y4=prestamos industriales con dummies
-- Menor regreso técnico en
1977-88. amortizaciones/capital y comerciales temporales o con
grandes bancos.
físico. Y5=prestamos a plazos tendencia.
-- W3=tipo de interés
de depósitos.
-- W4= tipo de interés
fondos captados.
Y1=prestamos hipotecarios
Análisis de la eficiencia X1=n° de empleados
Y2=prestamos comerciales -- Ineficiencias de 70%, la
Rangan, de una muestra de 215 X2=Capital físico
e industriales mayoría debido a ineficiencias
Grabowski, bancos estadounidenses. X3=Fondos comprados
Y3=prestamos consumo DEA técnicas puras (sobre usos de
Aly y Pasurka Descomposición de la (depósitos > $100,000
Y4=depósitos vista recursos) y no a escala
(1988) eficiencia técnica en + otros fondos
Y5=depósitos ahorro y subóptima.
técnica pura y de escala. captados)
plazo.
Y1=n° de prestamos y
Análisis de la eficiencia -- Existencia de economías de
X1=n° de empleados seguros
de 14 oficinas de unas escala.
X2=Alquileres por Y2=n° aperturas y
Sherman y cajas de ahorros de -- Potenciales mejoras en
oficina cancelaciones de cuentas DEA
Gold (1985) EEUU. Cuantificación costes si disminuye el empleo y
X3=Gastos de Y3=n° de bonos y cheques
del ahorro potencial en los gastos de materiales en las
materiales por oficina. de viaje
costes. oficinas.
Y4=n° de cobros y pagos
Variables
dependientes:
-- Costes medios. Frontera de costes
-- Coste medios Cobb-Douglas -- Las cajas con mayores
Álvarez y Análisis de la eficiencia
corregidos. Y=volumen de activos estimadas por costes de intermediación no lo
Menéndez de las cajas de ahorro
Variables Exógenas: financieros modelo de efectos compensan con mayores
(1993) españolas 1986-1990.
-- N° operaciones por fijos de datos de márgenes.
oficina, oficinas por panel.
empleado y tamaño
Autor Objetivo Inputs
medio pasivo. Outputs Metodología Resultados
-- Eficiencia creciente en el
tiempo sin incluir progreso
X1=recursos propios
técnico. No se puede rechazar
Análisis de la eficiencia X2=Depósitos Frontera
invarianza si se incluye.
técnica de las cajas de X3=Gastos de Personal Y1=volumen de créditos estocástica con
Álvarez (1993) -- Eficiencia del 91.92% si se
ahorro españolas 1986- X4=Gastos Generales concedidos. eficiencia variante
incluye.
92. X5=Gastos en en el tiempo
-- Conclusiones poco robustas
inmuebles
en relación a las consecuencias
de las fusiones.
X1=n° de empleados
X2=acreedores
X3=recursos propios
-- Bancos (0.972) más
Análisis comparativo de X4=Coste. Fin. ≠ de
Y1=productos financieros eficientes que cajas (0.961).
la eficiencia de 54 acreedores
de inversiones crediticias -- Cajas más eficientes a
Doménech bancos y 65 cajas de W1=gastos
Y2=resto productos DEA escala.
(1992) ahorro españolas en personal/X1
financieros -- Ineficiencia asignativas
1989. Descomposición W2=costes financieros
Y3=comisiones principal origen de la
de la eficiencia. acreedores/X2
ineficiencia en costes.
W3=tipo de interés
Deuda (14%)
W4=1 (supuesto)
X1=n° de empleados
Análisis de la eficiencia Y1=n° de préstamos -- Descenso de la eficiencia en
X2=gastos generales
de las cajas de ahorro Y2=n° de cuentas 1990 de 0.814 a 0.730.
Grifell, Prior X3=gastos explícitos
españolas en 1989-90. corrientes DEA -- Tamaño de los saldos y de
y Salas (1992) (inmuebles)
Descomposición de la Y3=n° cuentas ahorro y las oficinas son las fuentes de
X4=dotación
eficiencia. plazo. la ineficiencia.
amortización.
Análisis de la eficiencia
-- Cajas más eficientes que113
Pastor y Pére z y productividad de los X1=n° de empleados Productividad
y1=Valor añadido bancos en todo el período.
(1994) bancos y cajas de ahorro X2=recursos propios revelada
-- Punto de inflexión en 1988.
españolas (1986-92)
Función de costes anual.
Maudos economías de escala de -- W1=Gastos de Y2=Depósitos
media -- Economías de escala a nivel
(1994) una muestra de 52 cajas personal/n° empleados Y3=n° operaciones de
translogarítmica. de empresa para las cajas más
de ahorro españolas entre -- W2=Gastos de cajero.
pequeñas.
1988-91 inmuebles/Capital
físico.
-- W3= Costos
Una revisi ón teórica/referencial de las aproximaciones DEA
financieros de
depósitos/Depósitos.
Análisis de la eficiencia
-- Cajas más eficientes que
Pastor y Pére z y productividad de los X1=n° de empleados Productividad
y1=Valor añadido bancos en todo el período.
(1994) bancos y cajas de ahorro X2=recursos propios revelada
-- Punto de inflexión en 1988.
españolas (1986-92)
Fuente: Pastor, José Manuel (1995) “Eficiencia, Cambio Productivo y Cambio Técnico en los Bancos y
Cajas de Ahorro Españolas: Un Análisis Frontera no Paramétrico”, WP-EC 95-09, Editor: Instituto Valen-
ciano de Investigaciones Económicas S.A. Primera edición, Junio 1995.
Pires Goncalves, Ricardo (2006) busca evaluar la aplicación del sistema llamado
CAMEL (Adecuación del capital, calidad de activos, calidad de gestión, capacidad
de ingresos y posición de liquidez), a partir de la aplicación de la metodología DEA.
La metodología es una poderosa herramienta, complementaria a la estadística des-
criptiva, para estudiar los niveles de eficiencia en los sistemas bancarios.
Ruiz Soria, Héctor, (2003) realiza un análisis mediante DEA de un sistema
de producción integrado verticalmente hacia adelante. Aplicando al caso bancario,
menciona: “Las grandes entidades bancarias tienen ubicadas a lo largo de una re-
gión sus sucursales, que por su propia ubicación pueden tener exceso o carencia de
pasivos, por lo que es factible que exista un flujo de pasivos entre las sucursales, así
a través del modelo se trataría de optimizar los precios de transferencia de los flujos
de pasivos entre las sucursales”.
También menciona que “la mayoría de los estudios que emplean el DEA la uni-
dad de valoración son normalmente las sucursales bancarias, y los estudios se cen-
tran en derivar un resumen de medidas eficiencia de cada DMU e identificar el papel
de las unidades eficientes. Entre los principales trabajos revisados tenemos Soteriou
y Zenios (1999a), Cook y Kress (1999) y Thanassoulis (1999), quienes analizan los
costes de los productos bancarios a nivel de sucursales, Soteriou y Zenios (1999b)
analizan modelos de eficiencia operacional, eficiencia de la calidad del servicio y
eficiencia de los beneficios. Cook et al. (2000) analizan la distribución de los re-
cursos para optimizar el índice agregado de la eficiencia, estudiando el área de las
ventas y servicios”. Finalmente precisa que “en actividades bancarias los usos adi-
cionales del DEA incluyen la medición de eficiencia en función de los recursos y
precios de los outputs, la estimación del presupuesto de operación que suelen con-
ducir a la eficiencia, valoración del riesgo financiero a nivel de sucursal bancaria
y la medición del impacto por cambios en la iniciativa de productividad, Avkiran
(1999), Cook and Hababou (2001), Donatos et al. (2002), entre otros”.
Sturm y Williams (2002) analizan el efecto de la desregulación del sistema ban-
cario australiano, definiendo que una barrera a la entrada fortísima es el tamaño de
los bancos creados. Se incorpora el efecto de los cuatro bancos australianos, así
como la participación de los bancos extranjeros en el sistema financiero.
Webb, Robert M.; (2003) En este estudio analiza la eficiencia del sistema ban-
cario de Reino Unido encontrando lo siguiente: las ineficiencias de escala dominan
a las ineficiencias puras, los grandes bancos presentan menos ineficiencias y duran-
te la década de los 90´s, los bancos grandes presentaron una disminución en sus re-
tornos a escala.
Por último, Xue y Harker (2007) propone una modificación al modelo DEA,
114
Rodrigo Gómez Monge manuel ricardo romo de vivar mercadillo
-- Gastos no financieros.
Reino -- DEA con retornos constantes a
Webb, Robert M.; (2003) -- Sin definir. -- Sin definir. 1982-1995
Unido escala.
-- DEA con retornos constantes a
-- Especialistas financieros.
Estados escala.
Xue y Harker (2007) -- Ingresos financieros. 1997
Unidos -- DEA con retornos variables a
-- Consumidores.
escala.
IV. Conclusiones
En primer lugar, la deducción teórica del modelo DEA, así como los supuestos ma-
temáticos y las bondades y desventajas que tiene con respecto a otros métodos son
estudiados al inicio de este capítulo. Es de destacar las bondades que presenta este
método, entre las que podemos resaltar.
116
Rodrigo Gómez Monge manuel ricardo romo de vivar mercadillo
V. Bibliografía
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Korean Banks Efficiency: A DEA Approach”, Global Economic Review. No. 4, Vol. 38, pp:
117
Una revisi ón teórica/referencial de las aproximaciones DEA
118
Rodrigo Gómez Monge manuel ricardo romo de vivar mercadillo
119
Una revisi ón teórica/referencial de las aproximaciones DEA
120
capítulo 6
Introducción
121
Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
car qué hace pobre a un individuo, hay un consenso cada vez más amplio sobre la
naturaleza multidimensional de este concepto, el cual reconoce que los elementos
que toda persona necesita para decidir de manera libre, informada y con igualdad
de oportunidades sobre sus opciones vitales, no pueden ser reducidos a una sola de
las características o dimensiones de su existencia (Alkire y Foster, 2007; CDESC,
2001; Kakwani y Silber, 2008).
Desde una perspectiva multidimensional, puede entenderse la pobreza como
una serie de carencias definidas en múltiples dominios, como las oportunidades de
participación en las decisiones colectivas, los mecanismos de apropiación de recur-
sos o las titularidades de derechos que permiten el acceso al capital físico, humano
o social, entre otros (CONEVAL, 2009)
El fenómeno de la pobreza no es, por desgracia, novedoso, y mucho menos para
México, que tiene una larga tradición de pobreza, desigualdad y marginalidad. Lo
preocupante es que después de más de 25 años de reformas económicas en las que
el discurso central ha sido que “los sacrificios” sufridos por gran parte de la socie-
dad mexicana servirán para erradicar la pobreza y mejorar las condiciones de vida
de todos los mexicanos, México no ha mejorado sustantivamente su situación. In-
cluso, ha mejorado menos que otros países de Latinoamérica a pesar de las grandes
inversiones millonarias recibidas en este periodo, en forma de Inversión Extranje-
ra Directa, y los recursos naturales y humanos, muy superiores al resto de naciones
latinoamericanas. Así, uno de los graves problemas a los México se enfrenta es la
enorme desigualdad en el reparto de su enorme riqueza, que se manifiesta en las es-
candalosas cifras de pobreza de más del 40% de la población.
El principal objetivo de este trabajo está orientado a presentar una breve revi-
sión conceptual de la pobreza, la marginación y el desarrollo humano a partir de los
diferentes enfoques que intentan explicar, desde distintas perspectivas, dichos fenó-
menos sociales, con la finalidad de abonar elementos que posibiliten el análisis crí-
tico de las políticas públicas orientadas al desarrollo social.
Para ello, en un primer apartado abordamos las distintas concepciones de la po-
breza, al menos las más importantes, a fin de puntualizar sus enfoques y rescatar sus
aspectos distintivos y característicos, así como señalar sus limitaciones e insuficien-
cias. En un segundo apartado se hará referencia a la marginación, entendida como
un fenómeno estructural que se expresa, por un lado, en la dificultad para propagar
el progreso técnico en el conjunto de la estructura productiva y en las regiones del
país, y por el otro, en la exclusión de grupos sociales del proceso de desarrollo y del
disfrute de sus beneficios.
Por último, en el apartado denominado concepciones y medición del desarrollo
humano, consideramos la utilización del índice de desarrollo humano como indica-
dor del nivel de desarrollo de una población, el cual se basa en la idea, generalmen-
te aceptada hoy en los medios políticos y académicos, de que si bien el crecimiento
económico es una condición necesaria para explicar el grado de avance de un país,
no constituye una condición suficiente.
122
erika piña romero israel hernández torres
blema económico y social más importante del mundo por su magnitud, pero sobre-
todo por las consecuencias que trae consigo. Latinoamérica no ha sido ajena al fe-
nómeno de la pobreza, después del fracaso de las políticas de ajuste estructural en
el nivel de vida de la población, se ha ido creando numerosa literatura en la cual ex-
plican y dan alternativas de solución para este fenómeno, situándolo ante todo como
un problema social. En los siguientes apartados se presentan algunos de los concep-
tos y enfoques más difundidos sobre la pobreza.
El término pobreza va instituyendo su significado paralelamente a la conforma-
ción de la noción de derecho ciudadano. En este contexto la pobreza va a significar
carencia, es decir, deviene de la confrontación del binomio necesidad/ausencia de
“algo” que se requiere para conformar un “todo”; en este caso este todo está repre-
sentado por la descripción de aquello que circunscribe la identidad del ser humano
sujeto de ciertos derechos (Caputo, 2001). Es en el marco de este ideal igualitario
de la sociedad democrática y en la interpretación de cuáles son los bienes básicos
necesarios para alcanzar la dignidad humana, que se va definiendo la carencia y se
establece una delimitación entre la persona que es pobre, porque no puede acceder
a determinados bienes, y la que no lo es.
Las carencias que determinan quién es pobre se refieren principalmente a los
bienes materiales, lo cual denota rasgos de un paradigma positivista. Con el desa-
rrollo de mayor literatura en torno a lo social, el interés y estudio han crecido en tor-
no a este fenómeno. La ciencia económica no ha sido ajena esta preocupación de lo
social. Numerosos pensadores atribuían la condición de pobreza a la mala distribu-
ción de los ingresos generados por el crecimiento; otros, ya ponían en duda la auto-
maticidad del equilibrio económico y las leyes del mercado. La nueva literatura in-
corporaría al concepto de pobreza elementos relacionados con el desarrollo humano
con el fin de hacer la economía más humana y real.
Los intentos por comprender carencias y necesidades han planteado cuestiona-
mientos y debates interesantes en torno a una definición más amplia de la pobreza
para después poder diseñar políticas sociales para el combate de ésta. Los estudios
son vastos pero en la práctica las experiencias no han tenido del todo los resulta-
dos esperados. La articulación entre pobreza y política social es importante desde
las concepciones, pues la mayoría de las políticas sociales en América Latina y es-
pecíficamente en México, han ido encaminadas a la erradicación de la misma. In-
dudablemente es un binomio en donde la política económica y la social tendrán
que buscar los mecanismos para su articulación. La articulación de éstas debería
ser una obviedad, pero los modelos económicos han marcado elementos estructura-
les en donde la pobreza sería una condición casi necesaria, y la política social, por
otra parte, se vale de mecanismos coyunturales para hacer contrapeso y compensar
al modelo neoliberal1.
En términos generales, la pobreza se refiere a una situación de incapacidad de
las personas de satisfacer sus necesidades. Esta definición compuesta por los tér-
minos capacidad, satisfacción y necesidades, tiene múltiples vertientes, como enfo-
ques en cada uno de sus elementos. La pobreza tiene distintos significados y se aso-
1
Se entenderá como modelo o paradigma neoliberal a aquél que deja que la economía se regule por me-
dio de las fuerzas del mercado y donde éste mismo es el que pone las condiciones de política econó-
mica y social.
123
Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
Enfoques de pobreza
124
erika piña romero israel hernández torres
125
Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
social en el que se desenvuelva la persona, por lo tanto, la pobreza y riqueza son re-
lativos, de acuerdo con este enfoque. La pobreza de una familia dependería de cuán-
to tenga su grupo social de referencia, el no tener tanto como ese grupo social im-
plicaría una condición de “privación relativa” o “pobreza relativa”. El tener tanto o
más que su grupo de referencia hablaría de una condición de “riqueza relativa”.
No obstante el estudio de la pobreza no es tan relativo, pues para vivir, al ser hu-
mano le es imposible sustraerse de actividades como comer, dormir, protegerse del
frío, pensar, etcétera. Ello permite determinar una serie de necesidades humanas bá-
sicas universales, pero el desarrollo de las sociedades influye sobre la identificación
de estas necesidades y sobre la forma de cómo satisfacerlas, es decir, las necesida-
des humanas tienen una determinación cultural.
Las necesidades de sobrevivencia como la alimentación, el vestido y la vivien-
da, corresponderían a lo que Amartya Sen a finales de los setenta llamaría “núcleo
irreductible de privación absoluta en nuestra idea de la pobreza”. La pobreza abso-
luta se refiere a la situación en que se sufren carencias, y por lo tanto, necesidades
que son independientes de la situación de pobreza o riqueza de los demás, esto es,
en cualquier contexto, la pobreza sigue siendo pobreza. En este mismo sentido, ar-
gumenta que la sociedad determina ciertas necesidades respecto a algún grupo de
referencia y otras en las que no se pueden negar su existencia. El mismo autor afir-
ma que la pobreza es absoluta en el espacio de las capacidades, pero relativa en el
espacio de los bienes. Las capacidades son absolutas porque éstas no dependen de
un grupo social de referencia, solo dependen de cada familia o individuo. Los bie-
nes son relativos porque dependen de un grupo social de referencia y de las necesi-
dades que este grupo determine serán pobres o ricos.
Por su parte, Max Neef, et. al. (1986) enfatizan las diferencias entre “necesida-
des” y “satisfactores” y llegan a la conclusión de que, las “necesidades” son absolu-
tas porque suponen que siempre han sido las mismas históricamente. Por ejemplo,
comer siempre ha sido una necesidad y no ha dependido de ningún grupo social, ni
ha sido determinado social ni culturalmente, simplemente es una necesidad bioló-
gica. Los “satisfactores” de las necesidades son los que sí están determinados cul-
turalmente y han sido transformados por la sociedad. Cabe señalar que, el comer no
ha sido determinado socialmente, como ya se mencionó, pero el qué comer sí lo ha
determinado a través de los años la cultura de las sociedades.2
Por otra parte y en consonancia con la discusión académica y el debate inter-
nacional, la Ley General de Desarrollo Social (LGDS), en su artículo 36, estable-
ce que para la medición de la pobreza en México deben considerarse los derechos
sociales y el bienestar económico. De esta forma, derechos y bienestar social, aso-
ciados al principio universal e inalienable de libertad individual, reflejan el espíritu
de una ley que considera un vínculo social contractual (que no es sólo político, sino
normativo a partir de los criterios establecidos en la propia LGDS) entre el Estado,
la comunidad y los individuos, con el propósito fundamental de garantizar el acceso
de toda la población al desarrollo social y humano que la sociedad es capaz de ge-
nerar. El camino hacia una sociedad más incluyente e igualitaria depende, en gran
medida, del cumplimiento de este pacto social entre actores del Estado y de la so-
2
Hoy en día, la mercadotecnia es un poderoso elemento cuyo objetivo es crear necesidades y marcan la
pauta de lo que se debe o no consumir. Por ejemplo, determina qué es lo saludable.
126
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127
Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
128
erika piña romero israel hernández torres
129
Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
Medidas de Intensidad:
1. Intensidad de la pobreza multidimensional.- Se
define como el producto de la medida de incidencia
de la pobreza multidimensional y la proporción
promedio de carencias sociales de la población pobre
multidimensional.
Limitaciones:
1. La falta de un enfoque sistémico para los indicadores de la metodo-
logía.
2. La complejidad en la integración de los enfoques de medición en el
aspecto teórico.
130
erika piña romero israel hernández torres
Alcances:
1. La intención de alcanzar un enfoque integral a través de la multidi-
mensionalidad.
2. La utilización de las líneas de pobreza en cuanto a incidencia e inten-
sidad y, el categorizar en extrema.
3. La posibilidad de llegar al planteamiento territorial de la pobreza.
4. El tener un marco general teórico y en cuanto a cifras de pobreza para
su utilización en las tomas de decisiones en cuanto a la política social
nacional, estatal y municipal.
Tanto la metodología como las cifras de medición de la pobreza son las determinan-
tes de la toma de decisiones de políticas sociales a nivel nacional. Lo anterior se tra-
duce en políticas sociales generalmente focalizadas desde el gobierno federal. Los
municipios en cuanto no tengan la autonomía financiera, será difícil decidir sobre
sus políticas públicas y en el mejor de los casos se convierten en operadores de los
programas. En este sentido, se necesita ver hacia una reforma del Estado en donde
estos planteamientos de federalismo fiscal, por ejemplo, se materialicen en las po-
líticas públicas a nivel local.
Nos parece que no debemos de perdernos en el juego de los organismos finan-
cieros que, a partir de los ochenta, nos metieron en la dinámica de medición, en la
cuantificación del fenómeno, pero no en el estudio de las causas estructurales y co-
yunturales de la misma.
En el Cuadro 2 se muestra el número y porcentaje de la pobreza en México de
acuerdo a la metodología de medición de la pobreza multidimensional que realiza
el CONEVAL.
NACIONAL 10.5 11.20 33.7 35.99 44.2 47.19 33.0 35.18 4.5 4.78
Fuente: Elaboración propia con estimaciones del CONEVAL con base en el MCS-ENIGH 2008.
131
Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
132
erika piña romero israel hernández torres
133
Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
Primeramente habrá que definir qué es la marginación para así poder analizar su
congruencia con los indicadores que componen el índice y finalmente valorar si éste
índice responde al concepto de marginación y a su traducción en políticas sociales.
Las diferencias entre el índice 2000 y 2005 sólo radican en los cambios porcen-
tuales que en todos los nueve indicadores socioeconómicos los resultados son fa-
vorables a nivel nacional y oscilan entre el 1 y 4%. Cabe mencionar que la mayoría
de los indicadores refieren a servicios, que en el caso del agua entubada y drenaje
son servicios que proveen los municipios. Respecto al analfabetismo y población
sin primaria completa, este indicador es ahora un servicio descentralizado y pasado
a responsabilidad del gobierno de los estados4. Respecto al avance a nivel nacional
pasó de 386 municipios con muy alto nivel de marginación a 365 y de marginación
muy baja de 247 a 276 municipios de un total de 2454 municipios5.
Lo interesante es agregar que no se consideran todos estos indicadores cualita-
tivamente, lo cual nos daría más elementos para hacer una aproximación más ob-
jetiva y sobretodo real de los procesos de 2000 a la fecha. Otra cuestión es el men-
cionar que CONAPO, tomó estimaciones de la misma institución, entonces, la base
de información en parte, son ellos mismos y por otro lado, el INEGI con censos y
conteos.
Los resultados, bajo los criterios que presenta la CONAPO, no se puede estar o
no de acuerdo. Los resultados del índice para 2000 y 2005 no corresponden a la con-
ceptualización que hacen de la marginación, creo que haría bien trabajar un mejor
marco teórico para el concepto y sea más congruente con lo que se pretende medir.
De acuerdo a la definición, la marginación se origina en la modalidad o pa-
trón de desarrollo y éste patrón, en parte implica, viviendas con drenaje, con ener-
gía eléctrica y con piso firme; en este aspecto los indicadores pueden ser correctos.
Cuantitativamente los cambios en términos relativos son muy favorecedores, es de-
cir, se legitima la política de combate a la marginación del gobierno federal, no la
del combate a la pobreza. Sería interesante poder acceder a los valores absolutos del
índice, pues de esta manera se podría abordar en perspectiva.
Por otro lado, el concepto hace mención de la exclusión de grupos sociales del
proceso de desarrollo, el único indicador que puede medir, parcialmente, es el de
educación. Aquí harían falta indicadores como culturales, ambientales, político- de-
mocráticos, etc; es decir, indicadores que nos muestren realmente lo que significa la
inclusión en los diferentes ámbitos y lo que ellos denominan un fenómeno estructu-
ral. Lo estructural pasa por muchas más dimensiones. Por lo tanto, en nuestra con-
sideración no es la mejor forma de medir la marginación.
Es de resaltar que desde 1990 el índice como tal sigue considerando los mis-
mos indicadores y la misma métrica, por ejemplo, en cuanto a la población en loca-
lidades con menos de 5000 habitantes, el criterio de población con más de 15 años
3 Para conocer o profundizar sobre las estadísticas de los índices de marginación de 2000 y 2005 remi-
tirse a la página de la CONAPO
4 En este mismo indicador, vale la pena resaltar que se refiere a la población de 15 años o más.
5 Cabe señalar que en índice de marginación 2000 se contemplaban 2443 municipios y para 2005, 2454
municipios a nivel nacional.
134
erika piña romero israel hernández torres
analfabeta y sin primaria completa, población ocupada con hasta 2 salarios míni-
mos. Esto nos habla de una falta de actualización o de valoración de los criterios,
pues ya tienen más de 15 años.
Por otra parte, para 1990 sí se tenía otro tipo de marco conceptual en donde in-
cluían aspectos como desigualdad (regional-municipal), participación, democracia,
libertades e igualdad. Conceptos que en los índices de 2000 y 2005 no aparecen y
que consideramos deberán retomarse pues redondearía el indicador.
De los indicadores al resultado del índice, simplemente estadísticamente está
bien elaborado pero no nos muestra mucho. Para los actuales gobiernos, éste índice
es un insumo de diagnóstico para la elaboración de política social en México, y si el
diagnóstico está incompleto, se explica el por qué de los resultados de la política so-
cial. En el Mapa 1 el índice de marginación en México por entidad federativa.
Fuente: Estimaciones del CONAPO con base en el II Conteo de Población y Vivienda 2005, y Encuesta
Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) 2005, IV Trimestre.
La utilización del índice de desarrollo humano como indicador del nivel de desarro-
llo de una población se basa en la idea, generalmente aceptada hoy en los medios
políticos y académicos, de que si bien el crecimiento económico es una condición
necesaria para explicar el grado de avance de un país, no constituye una condición
suficiente. Sin embargo, el índice de desarrollo humano tiene críticas conceptua-
les y de implementación. Desde la perspectiva conceptual, el índice presenta una
sustitución perfecta entre las dimensiones utilizadas para su medición, es decir, no
castiga por la existencia de un desarrollo desbalanceado. Por el lado de su imple-
mentación y cálculo, se deben considerar la disponibilidad de datos adecuados y la
aplicación de una metodología homogénea.
135
Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
Después de diez años de publicación, puede decirse que el principal aporte del In-
forme de Desarrollo Humano ha sido enfatizar la idea de que el crecimiento econó-
mico es un medio para servir a fines humanos y no un fin en sí mismo. El fin último
es incrementar las posibilidades de elección de las personas, no sólo a través de un
crecimiento de su poder adquisitivo, sino fomentando el desarrollo y práctica de sus
capacidades. En este sentido, el informe constituye una fuente importante de apoyo
a la consolidación de una visión más humana del desarrollo.
El informe ha elaborado periódicamente recomendaciones de política, tanto de
ámbito nacional como global, con el objetivo de impulsar distintos aspectos del de-
sarrollo humano. Las primeras se han centrado generalmente en cuestiones como
la importancia de la participación comunitaria, la redefinición de la relación entre
Estado y mercado, y la eliminación de las disparidades entre géneros. Las segun-
das han apuntado generalmente a la consolidación del desarrollo humano sustenta-
ble –concepto basado en una nueva visión de la seguridad humana–, una interrela-
ción más estrecha y cooperativa entre países ricos y pobres, y un nuevo sistema de
instituciones internacionales. No obstante, si bien la intención de estas recomenda-
ciones es difícilmente cuestionable, su excesiva generalidad limita notablemente su
utilidad como guía de acción para la elaboración de políticas.
136
erika piña romero israel hernández torres
En el IDH 2000 se reconoce que el IDH no permite recoger el impacto de corto pla-
zo de las políticas económicas y sociales.
• Dos indicadores en particular cambian con mucha lentitud: alfabetismo de
adultos y esperanza de vida.
• Se reconoce la necesidad de capturar indicadores de respuesta más rápi-
da, y que además:
- Evidencien a los más postergados;
- Muestren la disparidad entre grupos;
- Respondan a las políticas.
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Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
Conclusiones
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erika piña romero israel hernández torres
MARGINACIÓN
POBREZA (CONEVAL) IDH (PNUD)
(CONAPO)
Concepto
Trata de medir la Trata de medir la pobreza a Trata de medir las oportunidades de
marginación a partir de la partir del ingreso, de vivir una larga vida, adquirir
satisfacción o no de una acuerdo con la capacidad o conocimientos y allegarse medios
lista de indicadores por un no de adquirir una canasta para una vida digna, de acuerdo con
grupo de ciudadanos básica alimentaria la esperanza de vida, tasa de
alfabetización, de matriculación
escolar y el PIB por habitante.
• Iniciativa ciudadana
3x1
Fuente: Elaboración propia con información del Subcomité de Desarrollo Social, COPLADEM (2004) e
Informe sobre Desarrollo Humano Michoacán, PNUD (2007).
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Pobreza, marginación y desarrollo humano. Conceptos, enfoques y medición
tas mediciones como punto de partida de políticas y programas sociales, y más aún
como instrumentos de seguimiento, control e incluso evaluación.
El gobierno federal ha impulsado programas sociales teniendo como base, en lo
general, el índice de marginación. En función de éste índice se asigna presupuesto a
municipios y localidades en condiciones de marginación. Recordando que la medi-
ción de éste considera aspectos de infraestructura y de centros de población.
Por otro lado, desde el CONEVAL se han trabajado metodologías que preten-
den ser más integrales, pero lo cierto es que para la toma de decisiones en materia
de programación y presupuestación poco ha influido. Sus aportes se reflejan en el
seguimiento y evaluación de los aspectos relacionados desarrollo social.
Es importante mencionar que ha habido importantes aportes tanto conceptua-
les como metodológicos a nivel internacional y nacional, nosotros recuperamos los
que consideramos influyen de manera especial en la política social actual en Méxi-
co, aunque no por eso asumimos que sean los únicos ni los idóneos, pero sí un pun-
to de partida para la revisión y análisis de las políticas públicas.
Respecto al concepto y medición de la marginación, se considera parcialmente
adecuada puesto que quedan muy cortas las categorías de “dimensiones socioeco-
nómicas” y faltarían un sin fin de variables. Por otra parte, éstas dimensiones vin-
culadas con la exclusión, es una visión muy reducida de lo que significa el concepto
de exclusión; en éste sentido sólo se conceptualiza con variables de infraestructura,
para el caso de la vivienda y como marginadas, las poblaciones pequeñas (de menos
de 5,000 habitantes) que comúnmente son rurales. Parecería que éste último crite-
rio corresponde a un concepto de pobreza que se asocia íntimamente con poblacio-
nes rurales y que por lo tanto la pobreza existía solamente en el campo y por ende,
bajo éste criterio de CONAPO, diríamos que en los centros urbanos o metropolita-
nos, incluso, no existiría algún grado de marginación.
Respecto de la pobreza, y en consonancia a la visión del CONEVAL, conside-
ramos que está asociada a condiciones de vida que vulneran la dignidad de las per-
sonas, limitan sus derechos y libertades fundamentales, impiden la satisfacción de
sus necesidades básicas e imposibilitan su plena integración social. Así, pasar de
una medición unidimensional de la pobreza a una medición multidimensional es al-
tamente complejo ya que ello debe considerar y tener en cuenta criterios que permi-
tan, de una manera sistemática, transparente, imparcial y con rigor técnico, solucio-
nar los desafíos conceptuales y empíricos que la misma presenta.
En este sentido, su medición bajo la perspectiva multidimensional debe im-
pulsar la generación de más y mejor información sobre los distintos elementos que
permitan evaluar la política social, no sólo a nivel estatal y municipal, sino inclu-
so a nivel local, a fin de proveer a los tomadores de decisiones de instrumentos para
el diseño de políticas públicas basadas en resultados. La principal fortaleza de esta
perspectiva constituye también el desafío central de las futuras políticas de desarro-
llo social, en la medida en que cada vez se genera más información, de distintos ór-
denes y temáticas, que exponen con mayor precisión los resultados obtenidos, y fa-
cilitan el acceso a la información para los distintos actores sociales y la rendición de
cuentas por parte de los distintos órdenes de gobierno
Finalmente, el Informe sobre Desarrollo Humano, a pesar de grandes logros,
no es difícil notar que éste no ha influido mayormente en la asignación de recursos
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erika piña romero israel hernández torres
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Sitios de internet
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Avances recientes en teoría y práctica económica Volumen II
se terminó de imprimir en octubre de 2011,
con un tiraje de 500 ejemplares.