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ESCUELA MILITAR DE INGENIERÍA

“MCAL. ANTONIO JOSÉ DE SUCRE”

La ofensiva en la guerra de Irak

______________________CHUQUIMIA JIMENEZ JHONN FABIAN

______________________OLMOS LAURA ALAN FREDDY

______________________LOPEZ REBOZO CRISTHIAN ALVARO

______________________ IRRAZABAL ZAMBRANA AMIR A.

Firma

El Trabajo esta evaluada con la nota _____________

Docente

______________________ CNL. GUY OBANDO ANTESANA

Firma

La Paz

2022
Una ofensiva es una operación militar que busca, a través de una proyección

agresiva de las fuerzas armadas, ocupar territorio, lograr un objetivo o lograr

alguna meta estratégica, operativa o táctica mayor. Otro término para una

ofensiva usado a menudo por los medios de comunicación es "invasión", o el

más general "ataque".

La ofensiva se consideraba un medio preeminente para producir la victoria,

aunque con el reconocimiento de una fase defensiva en alguna etapa de la

ejecución.

Una guía rápida para el tamaño o alcance de la ofensiva es considerar el

número de tropas involucradas en el bando que inicia la ofensiva.

Las ofensivas se llevan a cabo en gran medida como un medio para asegurar

la iniciativa en una confrontación entre oponentes. Se pueden librar en tierra,

en el mar o en el aire.

Ofensiva

Generalmente, la mejor política en la guerra es tomar un estado intacto;

arruinarlo es inferior. Capturar el ejército enemigo entero es mejor que

destruirlo.Tomar intacto un regimiento, una compañía o un escuadrón, es mejor

que destruirlo. Conseguir cien victorias en cien batallas no es la medida de la

habilidad: someter al enemigo sin luchar es la suprema excelencia.


De este modo, lo que es de máxima importancia en la guerra es atacar la

estrategia del enemigo. Lo segundo mejor es romper sus alianzas mediante la

diplomacia. En tercer lugar viene atacar a su ejército. Y la peor de todas las

estrategias es atacar ciudades.

Atacar ciudades es algo que solo ha de hacerse cuando no hay ninguna otra

alternativa, ya que la preparación de escudos y su transporte, y tener

preparadas las armas y el equipo necesario, requiere al menos tres meses, y

montar las máquinas de asedio y las escalas para asaltar las murallas, requiere

otros tres meses adicionales. El general, incapaz de controlar su impaciencia,

ordenará a las tropas cargar contra las murallas, con el resultado de que un

tercio de ellas perecerá sin haber tomado la ciudad. Así de calamitoso es

atacar ciudades.

Así pues, los verdaderamente hábiles en la guerra someten al ejército enemigo

sin batallar. Capturan las ciudades enemigas sin asaltarlas, y se apoderan del

estado enemigo sin campañas prolongadas. Su meta es tomar intacto todo

cuanto hay bajo el cielo, mediante consideraciones estratégicas. Como

resultado, sus tropas no se desgastarán, y las ganancias serán completas. Este

es el arte de la estrategia ofensiva.

En consecuencia, el arte de usar tropas es éste: Si se es diez veces superior al

enemigo, rodeadle. Si se es cinco veces más fuerte, atacadle. Si se tiene el


doble de fuerzas, divididle. Si se está a la par, superadle mediante un buen

plan. Si se está en inferioridad numérica, sedes capaces de mantener abierta

una vía de retirada. Y si se está en desventaja en todos los aspectos, sed

capaces de eludirle, pues una fuerza pequeña no es nada excepto botín para

una más poderosa, si se enfrenta a ella temerariamente.

El general es el asistente del soberano del estado. Si esta asistencia es

estrecha, el estado será fuerte sin duda; si es débil, el estado será ciertamente

débil.

Hay tres formas en que un soberano puede llevar a la derrota a su

ejército:

 Si, ignorante de que el ejército no debería avanzar, ordena un avance; o

si, ignorante de que no debería retirarse, ordena una retirada. Esto se

conoce como desequilibrar al ejército.

 Si, ignorante de los asuntos militares, interfiere en su administración.

Esto causa perplejidad entre los oficiales.

 Si, ignorante de los problemas del mando, interfiere en la dirección de la

lucha. Esto engendra dudas en la mente de los oficiales.


Si el ejército está confuso y suspicaz, los gobernantes vecinos tomarán ventaja

de ello, y causarán problemas. Esto es lo que significa la frase: Un ejército

confuso lleva a la victoria del contrario.

Por otra parte, hay cinco casos en los que puede predecirse la victoria:

 El que sabe cuando puede luchar y cuando no, saldrá victorioso.

 El que comprende cómo luchar, de acuerdo con las fuerzas del

adversario, saldrá victorioso.

 Aquél cuyas filas estén unidas en un propósito, saldrá victorioso.

 El que está bien preparado y descansa a la espera de un enemigo que

no esté bien preparado, saldrá victorioso.

 Aquel cuyos generales son capaces y no sufren interferencias por parte

de su soberano, saldrá victorioso.

EE.UU. lanzó en Irak su mayor ofensiva militar desde 2003

Las fuerzas estadounidenses e iraquíes lanzaron ayer lo que calificaron la

mayor ofensiva aerotransportada desde la invasión del 2003, contra las

guaridas de la insurgencia en Samarra (norte de Bagdad), donde el ataque

contra una mezquita desató en febrero una feroz violencia sectaria entre shiítas
y sunnitas, las ramas mayoritaria y minoritaria respectivamente, del islam en

Irak.

El mando estadounidense informó que la llamada "Operación Enjambre" o

Swarmer tiene como objetivo desmantelar los escondites de los hombres del

jefe de Al Qaeda en Irak, Abu Musab Al-Zarqaui al noreste de Samarra (120

km. al norte de Bagdad).

Según el Ejército estadounidense, 50 aeronaves, unos 1.500 efectivos —800

iraquíes y 650 es tadounidenses—, unos 200 vehículos tácticos y medio

centenar de helicópteros participan en una acción que, según las previsiones,

durará varios días y en la que se intentará "barrer" una zona de fuerte actividad

rebelde y desmantelar sus escondites de armas y explosivos.

De hecho, hacia el final del primer día de operaciones, el mando militar informó

que "se han capturado depósitos de armas del enemigo que contienen

proyectiles de artillería, explosivos, materiales para fabricación de artefactos

explosivos y uniformes militares".

El ataque, según informó el comando, comenzó con soldados de la 1ª Brigada

del Ejército iraquí junto con tropas aerotransportados estadounidenses en un

asalto combinado por tierra y por aire para aislar el objetivo. Los militares se
adentraron desde primeras horas de la mañana en una zona al noreste de

Samarra en la que se cree que se han atrincherado efectivos de la resistencia.

La aviación transportó a soldados de unidades iraquíes y les dio apoyo desde

el aire. El cuadro de un verdadero enjambre de helicópteros acercándose al

lugar de las operaciones, como mostró la televisión, resultaba una fuerza

intimidante desde tierra.

Fuerzas de una brigada de comandos completaron la operación al asegurar

diversos edificios en la zona.

Fuentes de seguridad de la capital provincial, Tikrit, señalaron que las tropas

atacaron desde varios frentes la región, cuyos límites están marcados al oeste

por el Tigris y al norte por las montañas de Harmein.

A principios de este mes se había realizado otra operación militar al oeste de

Samarra en la que se desmantelaron numerosos escondrijos de armas.

Según un oficial del Ejército iraquí, la operación se puso en marcha tras haber

recibido información sobre la presencia de elementos de Al Qaeda en el

noreste de Samarra. Sin embargo el principal tronco de la resistencia proviene

de milicias populares.

La provincia de Saladin, escenario del ataque, forma parte del llamado triángulo

sunnita, un reducto de la insurgencia desde poco después de la invasión hace


tres años. Saddam Hussein fue capturado en esa provincia. El canciller interino

Hoshyar Zebari dijo que el ataque era necesario para impedir que los

insurgentes formen un nuevo reducto como en Fallujah, al oeste de Bagdad.

La Operación Swarmer coincidió con la celebración, en Bagdad, de la sesión

inaugural protocolaria del nuevo Parlamento, más de tres meses después de

las legislativas de diciembre de 2005 y en medio de un tenso clima de crisis

política y de temores de guerra civil.

En los 40 minutos que duró la sesión, los 275 diputados reunidos en el sector

fortificado de la Zona Verde (en el centro de la capital iraquí) prestaron

juramento pero no eligieron a su presidente.

"Según la Constitución, la sesión debe designar al presidente y a los dos

vicepresidentes, pero tras unas consultas con los bloques políticos, se decidió

dejarla abierta en espera de un acuerdo" sobre un gobierno de unidad nacional,

declaró el diputado sunnita

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