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Alteraciones físicas, psicológicas durante la hospitalización infantil

Anteriormente se consideraba el tratamiento médico como el tratamiento


farmacológico y/o quirúrgico que llegara a requerir el paciente sin embargo no se
consideraba el aspecto psicosomático del paciente.

La enfermedad es una situación común que se presentara el paciente pediátrico o


adulto o incluso antes del nacimiento de una persona. Por lo tanto en el paciente
pediátrico se presentara sensación inusual o incluso pérdida del control de órganos o
partes del cuerpo. Por lo que el paciente pediátrico debe explorar, conocer, y percibir
estas situaciones nuevas de curiosidad e incertidumbre para levar a cabo la adaptación
a estas situaciones.

Algunas reacciones o repercusiones psicológicas de la enfermedad en el paciente


pediátrico son (Rodríguez-Sacristán, 1994):

De adaptación: Colaboración o inhibición, sumisión, rebeldía, ira, oposición.

Defensivas: Regresión a etapas anteriores del desarrollo, negación o identificación.

Construidas por experiencias mixtas emotivo-cognitivas:, sentimiento de culpa, temor


a la muerte, sentimiento de impotencia, vivencias de abandono, descenso de la
autoestima, vivencias de fragmentación, mutilación y aniquilación.

De inadaptación y desajuste: reacciones neurológicas (fobias, histeria, conversión,


obsesiones), reacciones depresivas, angustia patológica, reacciones anormales
(Pilowski).

Algunas otras reacciones o repercusiones del paciente pediátrico a la hospitalización


son (Zetterström, 1949):

 Problemas de alimentación: hiperfagia, rechazo.


 Alteraciones del sueño: insomnio, fobia a la oscuridad, pesadillas.
 Enuresis o encopresis diurna o nocturna.
 Regresión a niveles de comportamiento anteriores y pérdida de los niveles
adquiridos previamente del aprendizaje.
 Movimientos espasmódicos involuntarios de los párpados o cara, tics.
 Depresión, inquietud y ansiedad. Miedo a los hospitales, agujas, personal
médico, procedimientos diagnósticos (p ej. rayos X), consumo de fármacos,
miedo a la muerte.
 Mutismo, regresión autista a grados de incomunicación
 Alucinaciones sobre funciones corporales, obsesión hipocondríaca
 Síntomas histéricos (p ej. Perdida de voz posterior a amigdalectomía).

La intervención del personal de enfermería para los pacientes y familiares previa a la


hospitalización debe ir enfocada:

 Reducir la vulnerabilidad al estrés


 Ayudar a afrontar la ansiedad.
 Promover la participación de los padres como apoyo del paciente pediátrico
 Considerar la individualidad del paciente pediátrico en relación al nivel de
funcionamiento cognitivo.

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